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Touya & Yuki por AlexBane

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Notas del capitulo:

Perdóooon por tardar. Aquí estoy de nuevo, gracias de ante mano por leer. 

Capítulo 8

 

-te quiero.- me susurró al oído, mientras pasaba la lengua descaradamente por mi lóbulo.  Estaba acostado en su cómoda cama apoyado en sus codos mirándome, sobre él, con una pierna a cada lado de su cuerpo,  mis manos en su abdomen acariciando, y delineándolo, a placer mientras me revolvía por la oleada de sensaciones que me producía su aliento sobre mí. Intentábamos no hacer mucho ruido ya que eran una hora no apropiada y aparte, se supone los estudiantes, deberían estar dormidos.

-Lo sé. Yo más.- contesté y lo besé. Intente moverme de encima buscando mi ropa interior sentándome en el filo de la cama. Últimamente las cosas habían cambiado muchísimo, me había enterado que era una “criatura mágica”, y pertenecía a un mundo secreto, pero, no me molestaba, de hecho, lo tomé bastante bien ya que Touya me daba fuerzas, mi actitud había cambiado, mi forma de ser paso de ser cohibida y lenta a ser rápida, decidida, casi temperamental, la prueba más clara era el hecho de que escapaba todas las noches, de mi casa, para entrar en la de Touya furtivamente, por su ventana, y…. estar con él.  Me encantaban mis habilidades nuevas.

-¿por qué no te quedas un poco más mi ángel?- me dijo al oído, mientras me abrazaba por la espalda, mi ropa interior apenas había llegado a mis rodillas, cuando volteé mi cabeza hacia él, con su barbilla en mi hombro.

-No sé si sea buena idea…- dije con un tono seductor, mi visión había cambiado ya para este entonces, mis ojos captaban cada respiración, cada movimiento, cada magnifica acción de mi novio, cada fibra de su esencia. Sonreí.

Volteó mi cara hacia su boca con una mano y me beso lentamente mientras giraba mi cuerpo para quedar de frente a él, subí los pies a la cama de nuevo y lo atraje más a mí, enredando mis manos en su cabello, manteniéndolo cerca, sin moverse, mío.- oh Touya…-dije entre gemidos, mientras se posicionaba sobre mí, mordiendo lentamente mis labios, se separó un poco, y me dio un beso suave.- parece que ya no los necesitaras ¿verdad?- dijo tirando de mi bóxer hacia abajo, sonreí divertido y lo atraje de nuevo hacia mí, el ritmo cambio y ahora me besaba ávido, activo, impaciente, empecé a incorporarme sobre mis codos y choqué contra la cabecera. 

-tienes algo contra esa cabecera, Yuki.- me miro con un semblante confundido, sonreí. Me incorporé hasta llegar a quedar a su altura, de rodillas los dos sobre la cama, besándonos despacio y con las manos de Touya sobre mi cintura mientras le rodeaba el cuello, cada día que pasaba me convencía más de que, mi Touya y yo encajábamos, éramos como dos piezas gemelas, destinadas.  Baje instintivamente mi mano hacia su miembro al sentirlo erecto, lo toque, y empujé a Touya, lo tumbe mientras me posicionaba sobre él, de nuevo arriba, con un gran detalle rozando mi entrepierna, con ligeras palpitaciones a cada segundo. Lo miré a los ojos, sonriendo, era de verdad hermoso, su tez más morena que la mía, más aceitunada, subí mi mano desde su miembro por su abdomen, y pecho, toque uno de sus pezones y llegue a su barbilla, le sonreí. Entonces sentí el golpe ligero y posesivo en mi glúteo, me había dado una…- Ahaa…- gemí, Touya nunca había  hecho eso, me lanzó una mirada de puro deseo, lo mire sorprendido y realmente acalorado, lo jale de la barbilla, y lo besé, con toda la desesperación que me podía permitir, lo besé queriendo más, queriéndolo conmigo, siendo solo uno, a cada movimiento su miembro se tensaba más, se habría camino aplicando presión a mi entre pierna, la sensación me hacía querer más Touya, su lengua penetraba en mi boca recorriéndola. Se separó de mí y lamio mi mejilla lentamente.-Yuki, eres perfecto para mí.- dijo y lo abracé empecé a restregarme contra él, contra su pelvis, cada que lo hacíamos Touya me alentaba a seguir con esas palabras únicas, esa sensación de bienestar que solo él me podía brindar, sonoros gemidos comenzó a lanzar mientras mis glúteos se paseaban estratégicamente por su pene erecto, mientras el manteniéndolo agazapado, manteniéndolo prisionero, mire instintivamente la puerta, su padre y hermana estaban a unas puertas de distancia, le mordí el labio y luego lo besé, para intentar callarlo, no podía creerlo, tenía un muñeco solo para mí, y lo podía volver loco de un momento a otro, - ya no aguanto, Yuki.-me susurró, me tomo de las caderas y me posiciono sobre su pene, sentí la punta contra mi entrada palpitando, me estremecí un poco ante el contacto, y la sensación de ese algo obstruyendo y abriéndose paso en mi interior, aun así baje lo más rápido que pude de rodillas otra vez, con su miembro en mi interior, sentado sobre él, mientras me movía de arriba abajo, auto penetrándome, lento, muy lento.-Yuki…. Ahaa...  tu rostro, me excita, todavía más…- me decía entre gemidos ahogados. Me sonrojé. No podía evitarlo, sentí mi rostro arder contra la situación, no me importo, seguí moviéndome intentando ahondar el contacto, puse mis manos sobre su pecho y dance al ritmo de sus gemidos, Touya cerró los ojos dejándose llevar por mis movimientos, aferrándose a mis puños, su rostro crispado y sonrojado por el placer, sentía un calor infernal, estaba sobre mi amado, con su… hombría cada vez más satisfecha, más despierta.- Touya, ahaa, ahaa…!ahaaa!- intentaba reprimirme, era imposible, era inigualable.-  Yuki, me corro.- dicho esto tomo mis caderas y me detuvo, empezó a chocar su pelvis contra mis glúteos, levantándome un poco cada vez que me propinaba una estocada, cada que me envestía, su penetración cada vez más profunda, sentía sus testículos chocar contra mí, y no aguante más, mi interior se contrajo en un suspiro, comencé a sentir la corriente eléctrica desde mi espalda hasta mi entrada, profanada por Touya, llevo su mano hasta mi pene y lo masturbo cuando en un último movimiento llegó al clímax arrastrándome con él, el orgasmo, tan esperado y especial, me quedé tumbado sobre él, mientras nos recuperábamos, oía su corazón ir rápido, alterado, sobre su pecho, no necesitaba mi nuevo súper oído, era.. Notorio. Me incorporé y lo miré con superioridad desde arriba, le sonreí.

-Te amo.

 

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 El despertador nos trajo de nuevo a la realidad, Touya me abrazaba, estaba de espaldas a él, abrí los ojos y miré a todos lados, reí bajito al ver el desastre de su cuarto, la claridad entraba por su ventana, ropa tirada por todas partes, mis zapatos en la puerta y un calcetín en su mesita de noche. Voltee y lo encontré con esa expresión tan pacifica que portaba el dormir, me levante y vestí lo más rápido que pude, iba a salir por la ventana sin despertarlo y lo volví a sentir, un ligero golpe en mi glúteo-de nuevo-  ya no me sorprendió mucho, voltee y estaba desnudo  frente a mí.

-Buenos días señorito.- dije y me empotró contra la pared de la ventana, encerrando mis manos en un agarre perfecto tras mi espalda.- “buenos días mi amor, ¿Cómo amaneciste…?” balbucee en respuesta  con tono meloso y de reproche. Me besó.

-te ibas, y ¿sin despedirte?-

-Nos veremos en dos horas Touya.- le dije, me solté y le abrace. Le guiñe el ojo y gire sobre mis talones hacia la ventana, sabía que si no actuaba no me iría jamás. Abrí el seguro y las pequeñas puertas dobles, volteé y le mande un beso.- te quiero.- susurré lo suficientemente alto, y miré mi pista de aterrizaje, el césped, mis ojos se ajustaron al terreno, al perímetro, cada detalle, no me lo pensé, y subí el pie al alfeizar. Salté. Me encantaba la sensación de caída, eran dos pisos de distancia hacia el patio de Touya, suficiente para que un humano se lastimara. Aterrice con más gracia de la que me creí era capaz de poseer y caminé, me detuve solo un momento para escuchar el susurro de Touya, tan nítido como si me lo dijera al oído:- Adiós mi ángel.-

 

Tome mucho aire antes de abrir la puerta que daba al laboratorio, estaba llegado un poco tarde, no me justifico, pero tenía que alimentarme,  gire el picaporte, y asome la cabeza por la pequeña abertura de la puerta, sonreí amablemente al profesor, Henry era su nombre, impartía Química.

-Hola profesor, buenos días, ¿me da permiso de entrar?- dije con el tono más amable y respetuoso del que fui capaz.

-joven Yukito, es para usted, según veo, una costumbre llegar tarde…- me dijo con un tono de reproche y mal genio, gire la cabeza al oír ese pulso acelerado tan conocido, busque con la cabeza en alto la mata de cabello marrón chocolate que tanto quería ver,  el corazón de mi Touya latía desenfrenadamente, le sonreí.- ¿le parece si hablamos luego de esto?, nos vemos la siguiente clase.

Asentí. No acostumbraba llegar tarde a clases, y menos ser expulsado, todo empezó desde que iba a casa de Touya por las noches y volvía a la mía por las mañanas, en fin… una clase no dañaría mi vida. Tome nota mental y busque una excusa que darle a Touya cuando me preguntara, caminé a la cafetería, tenía un hambre desgarradora, -aunque ya había desayunado- saque mis últimos apuntes de ecología, era la siguiente clase, estaba dispuesto a ordenarlos en esa hora libre, di la vuelta a la derecha. Giré y lo sentí, de lleno, de golpe, me dio en la cabeza, e hizo tambalearme, haciéndome caer hacia atrás.

-perdóname.-  musité mientras enfocaba y pasaba lentamente mi mano por la frente.- ¿Shaoran?

-Hola bonito.- me dijo con una media sonrisa, y sentado en el pasillo, justamente donde lo había mandado mi cuerpo.- es mi imaginación, o ¿nos está gustando encontrarnos así?

-¿Bonito?-repetí con una cara que rallaba la incredulidad, no era una chica.- No sé si…

-Okey, no diré nada, ya.- me miro y me lanzó una sonrisa, empezó a incorporarse y lo ayude a reordenar sus cosas.- ¿Cómo estas Yuki?

-Muy bien, gracias.- dije con toda sinceridad, la verdad es que si este chico no me… “acosara” y no estuviera dispuesto desaparecer al amor de mi vida, me caería  muy bien.

-Me alegro mucho.- dijo y se movió abriéndome paso.- ¿ibas a la cafetería?

-Si…

-¿me permites acompañarte?

-okey.- asentí y caminamos, no teníamos una charla particular mente fluida, en realidad, era… absurda, hablábamos de cosas sin sentido y sin importancia en realidad, nos formamos en la fila y me tapicé de comida, tomamos una mesa al azar, y me instale, creo que diría adiós a los apuntes de ecología. Comencé a comer sin limitaciones y prestándole a Shaoran toda la atención que me permití, asentí cuando era debido y hable cuando me tocaba, la mayor parte en monosílabos. No es que estuviéramos haciendo algo malo, pero Touya…. Se podría molestar si nos veía juntos, en realidad, estaba nervioso.

-¡Hola!- su voz retumbo en cada recoveco de mi sensible oído, abrí los ojos como plato, y miré atrás, estaba ahí, Nakuru, con su voz extremadamente aguda y su cabello ondeando cada vez más rápido al momento de acercarse a nosotros.

-¡Hola!- respondió al instante Shaoran con una sonrisa genuina, me pregunte porque siempre tenía que toparme con ella, maldije internamente e intente ofrecer una sonrisa convincente.

-¿puedo sentarme?- asentí y mire a Shaoran mas que se veía muy complacido, sonreí un tanto irritado.

-Shaoran, necesito tu ayuda, ¿crees que podrías préstame tus apuntes de Física?- preguntó la castaña, y mire de reojo, tenía habilidad, lo convenció con una gran sonrisa, obviamente más que fingida, y un movimiento casi imperceptible en el cabello, que lo hizo ondear al momento de poner una cara de pena, un beso en la mejilla cuando por fin la obtuvo, no me sorprendía. Lástima que sus “trucos” no funcionaran en mi Touya. Terminé mi más que exagerada porción de comida, y comencé esta vez con los apuntes, agradecí el hecho de que llegara esta chica, ya que sumió a Shaoran en un silencio y concentración explicándole algunos ejercicios, mientras yo releía y acomodaba. Pasamos así varios minutos, en silencio, trabajando.

-¡Oh! ¡Maravilloso!, ¡eres todo un genio!- chilaba ella, no era posible, armaba todo un escándalo… aparté la mirada y note la hora en el reloj de la pared de la cafetería,  bastante temprano, ya estaba instalado, no quería salir corriendo, puse toda mi determinación en ignorarla e intente leer de nuevo.- oh eres muy buen tutor.-dijo acariciando su mejilla, su sonrisa realmente convincente.- tengo sed….- hizo ademan de levantarse.

-No, no, no, yo te traigo algo, tranquila.- dijo Shaoran y se levantó al instante para internarse en la prominente fila.

Lo mire con toda la pena del mundo, pobre, se dejaba engañar tan fácil, lo creí más listo, apenas se fue Nakuru volvió la cabeza y me miró, fría, expectativa, sonrió. Un tirón de electricidad me recorrió desde la espalda hasta el pecho, me erguí alerta.

-Y dime, ¿Cómo va  todo con Touya?- soltó, la mire sonreír de nuevo y guiñarme un ojo. Palidecí, ¿Cómo lo sabía? Contuve la calma lo mejor que pude, e intente hablar sin titubear:

-¿sobre qué?- le dirigí una sonrisa ingenua.

-Sabes a lo que me refiero Yuki, no finjas, trato de ser cortes.- dijo y me miro más aguda más... atrevida, sentía como me examinaba. El impulso eléctrico volvió y esta vez acompañado de una voz, una voz que recordaba, como de un sueño, o el sueño de un sueño. *Tranquilo, no te hará nada, confía en ti, no puede contra nosotros, estoy contigo*

-Excelente.- dije con autosuficiencia, no iba a negarlo.

-Me alegro, pero aún tengo duda, estoy tan….disgustada.  Verás, no sé cómo un humano tan simpático se fijó en ti, teniéndome a mí enfrente.- dudé, había dicho humano refiriéndose a Touya, mi cara se tornó inexpresiva, un tanto… intimidada, ¿Qué estaba diciendo?

-hum…

-Me sorprende que no te hayas dado cuenta aún, eres lento Yue, ¿de verdad, no me reconoces?

Yue, Touya me lo había mencionado, mi nombre de guardián. La mire con más detenimiento, era pálida y con rostro afilado, su expresión certera y altanera, sus ojos…. Un color… rubí.

-No…- me levante instantáneamente de la silla. Sonrió.

-verdaderamente impresionante, actuó bien, ¿no es así?- dijo y cruzó las pierna. Suspiré, intente controlar mis emociones y hablé.

-¿tanto nos odia ese Eriol, como para tenerte aquí?

-¿Odiarlos?- resopló.-en absoluto, solo que, no sé, tú… unión con tu forma humana es… repugnante,  renunciar a lo que eres por un humano… es tan bajo. Debes ser… reivindicado.

Había dicho unión, ¿Qué significaba? Sopese las posibilidades de un ataque, pero no lo creí antes que nada eran muy discretos con el tema de la magia.

-Eriol dijo que no intervendría más, creo que esperara a que te destruyas a ti mismo, y luego al hermano de tu señora. Eso por consiguiente la debilitara a ella, y nosotros tendremos las cartas más antes que pronto.- me miro triunfante, algo había mencionado Touya, Sakura debía protegerme, alimentarme.  Pero ella había dicho unión, destruirme…

-no entiendo…

-la unión de un ángel a su forma humana está prohibida, nunca se ha completado, vas a morir, si tu dueña no te salva, tu no lo lograras solo, debe ser horrible renunciar a volar.- sonrió de nuevo.

Le lance una mirada de furia que terminó en el mismo instante en el que Shaoran volvió y le dio su bebida, la tomo y dio un sorbo, le agradeció y se levantó en un solo movimiento, con una gracia que habría roto el corazón de envidia a una bailarina, me dirigió una última sonrisa burlona y se fue, me dejo alterado y con más dudas, entonces todos los recuerdos que, tenía, eran… son de mí, todos mis sueños, se están, me estoy mezclando en un solo cuerpo… el solo pensarlo me dio mareos, tome mis cosas y salí de ahí, caminé lo más rápido que pude y por fin llegue al baño. Vomite. Los mareos eran incontenibles, me temblaba el cuerpo, y sentía asco, me tambalee afuera del cubículo y caminé hacia la puerta, el vibrador en mi bolsillo me enfoco en la realidad.

El mensaje era de Touya.

Mi ángel, ¿Dónde estás?

Creí que ese apodo que últimamente me decía tenía que ver directamente con…. Cerré los ojos con mucha presión y tome aire, escribí una respuesta:

Tenemos que hablar, nos vemos en el acantilado a las afueras del parque, por favor, es importante, ya.

Envié el mensaje y comencé a caminar afuera de la escuela, estaba harto de mentiras, estaba harto de todo, quería saber la verdad, quería ayudar, quería aprender, y sobre todo quería aplastarle el cráneo a Rubimoon…

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Notas finales:

Pronto actualizaré, lo prometo :3 Gracias. 


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