The Time.
Capítulo 3. Un largo día.
Lunes 11:30 am
Había escuchado hablar a alguien dentro de los vestidores, Cavendish estaba seguro de ello. La voz se había escuchado chillona, pero masculina. En los vestidores no había muchos lugares donde esconderse y los que había eran pequeños. Un chico que conocía al cara de mono, era pequeño y con la voz algo chillona. ¿Por qué alguien así lo espiaría? Era imposible que entrara después de él, así que el acosador ya estaba ahí desde antes.
“Tal vez estaba robando algo” –pensó el rubio- “o tal vez… estaba haciendo algo peor. ¡Eso es! Si consigo atrapar al acosador/ladrón/pervertido y lo entrego a algún prefecto me llenaré de fama. ¡Así recuperare mi popularidad!”
Mientras pensaba esto, Cavendish recorría un largo pasillo, escuchando fragmentos de conversación sin enterarse de mucho, pero una en especial cautivo su atención:
:-¡¿Es gay?! ¡No puede ser!
:-Si. Su novio va en secundaría.
:-Awww eso es lindo.
“¿Gay? ¿Por qué alguien gay debería de ser el centro de atención?”-pensó con celos el joven. Entonces la brillante idea nació en su mente.
~~~*~~~
Nami y Sanji lograron atravesar la bola de gente, en el centro, encontraron a Luffy avorazándose de comida en compañía de una peli-rosa, quien también comía; sin elegancia ni vergüenza de ningún tipo.
:-¡Qu buno qu lo pogostu! Molduto Kodd, comu lu uduo –decía con la boca llena de sándwich la pelirrosa- ¿U qu posu dospuos?
:-Unu tul Modu uporosu –contesto Luffy, quien también hablaba con la boca llena.
:-¿Unu tul Modu? ¿Comu oru?
:-Mmm, pulo vordu, oltu, ojus fuos.
La peli-rosa escupió toda la comida.
:-¡¿QUÉ HARPY MONET QUÉ?! –Todo el tumulto de gente que había se escabulló como cucarachas. Tenían que extender la noticia: Harpy Monet había estado en la escena.
:-Ooh♥ Bonney-chan –dijo Sanji quien junto a Nami seguían de pie al lado de la mesa- déjame limpiarte la boca♥
:-¡Cállate bastardo! –Exclamó Bonney mientras aventaba una botella vacía a Sanji- ¿Y por qué mierdas alguien como Monet se metería en una pelea?
:-Sé que Monet es alguien popular, pero, ¿qué tiene de especial que Monet se halla metido? –preguntó Nami.
:-Tsk, ustedes los de primero todavía no entienden. Verán; Monet es sobrina de Doflamingo.
:-¡¿Qué?! –Preguntó Nami sorprendida- ¿entonces por qué diablos está en New World?
:-Nadie sabe. Hay rumores de que odia a Doflamingo, hay otros que dicen que quiere adueñarse de New World y fusionarlo con Paradise.
:-Tsk, todos los bastardos de New World se pueden quedar ahí, pero las señoritas son bienvenidas ♥♥
:-¡Te dije que te callaras! ¡Rabo verde! –Gritó de nuevo Bonney, ahora lanzándole un plato a Sanji- Como sea. Monet es una persona muy misteriosa –Bonney calló para poder seguir con su banquete, sin embargo Luffy ya se había comido todo- En una ocasión normal te golpearía hasta que vomitaras todo, pero no lo hare porque golpeaste a Kidd. Como sea voy a comprar más comida
:-Te acompaño, Bonney-chan♥♥
:-¡Aléjate de mí! ¡Parasito!
:-Aah♥ Bonney-chan♥♥
:-¡Luffy! –Un narizón irrumpió en la escena seguido de un mastodonte de pelo azul y una alta morena.
:-Usopp, Franky –dijo Nami mientras veía a los recién llegados
:-Robin-chawn♥♥
:-Hola –saludó cortésmente la morena- Luffy, ¿te encuentras bien?
:-Ah, sí, estoy cansado.
:-Ufff, menos mal. Cuando escuché lo de Kidd pensé que habías muerto –dijo Usopp con alivio
:-Sí, el rumor se corrió ¡SUPER! Rápido
:-Tiene razón, en menos de 10 minutos ya habían llegado hasta el área de tercer año –mencionó Robin sorprendida- escuche que Monet apareció, ¿es verdad?
:-Si, la pelos verdes nos salvó. Les voy a contar todo –Y así, Luffy comenzó a describir su aventura; la narrativa del joven y sus dramáticos gestos provocaron las mofas y risas de sus oyentes, haciendo que todo pareciese un simple receso más. La historia de cómo los seis se habían conocido remontaba a 10 años atrás: Cuando Luffy recién llegó a la ciudad y conoció a Franky, quien era su vecino. Posteriormente descubrieron que iban en la misma primaria aunque con 2 años de diferencia. Luffy fue conociendo a los demás, Franky presentó a Robin y así se formó el grupo de amigos. Para Luffy ellos y sus hermanos eran lo que más le importaban.
:-Me voy adelantando –dijo Robin mientras tomaba sus cosas.
:-Yo también, el entrenador nos quería temprano hoy –recordó Franky.
:-Yo voy a cambiarme de ropa –dijo Luffy mientras se alejaban- ¡Apesto!
:-Oe, Usopp, ¿Dónde está tu cosa esa? –preguntó Sanji
:-¿Mi cosa esa? Sanji, eso no se pregunta en público♥
:-¡Idiota! Me refiero a la cosa esa, la que ocupabas para artes.
Usopp se puso azul al recordar su olvidado bastidor.
:-¡Maldición! Mi bastidor, tengo que encontrarlo o la profesora me matará –Gritó Usopp mientras se marchaba.
Así quedaron solos Nami y Sanji.
:-Aah ♥♥ al fin solo con mi Nami-swan♥♥
:-Ajá, ajá, mejor dime ¿por qué estabas viendo la cara del chico nuevo?
“Mierda” -pensó Sanji- “Tengo que encontrar algo que decirle”
:-Y ni siquiera pienses en mentirme.
:-Ah, no puedo decirle palabras falsas a tan bella dama♥ Pues no hay una razón, Nami-san. Sólo pensé en darle las gracias por cubrirme pero estaba dormido, y como tú, mi hermosa rosa, estabas ocupada yo no tenía nada que hacer. Ni siquiera me di cuenta de que llevaba viéndolo tanto rato.
:-Mmm valee, gracias Sanji-kun. Tengo que irme, nos vemos después de taller.
:-¿No gustas que te acompañe?
:-No gracias^^ -contestó Nami mientras se alejaba con su mochila al hombro y con muchos pensamientos en su mente.
~~~*~~~
Lunes 11:30 am
:-Tienes el tabique algo desviado, Kidd-ya.
:-¡Cállate Law! Es imposible que ese debilucho me haya desviado el tabique.
:-Pues no era tan debilucho, después de todo te desvió el tabique.
:-¡Maldición! ¡Te dije que te callaras Law!
:-Tú eres el que debe de callarse e ir a la enfermería.
:-¿No puedes repáralo tú?
:-Puedo tratar. Pero vas a tener que ir al doctor después.
:-¡Sólo hazlo de una maldita vez!
Law tomo la nariz del pelirrojo y prácticamente la colocó en su lugar, se escuchó un fuerte crujido.
:-Oye Kidd, ¿estás llorando? –preguntó un rubio con un casco muy raro en la cabeza.
:-Jajaja Kidd, eres una nena –declaró un chico con frenillos en los dientes.
:-¡Killer! ¡Apoo! Cabrones ya me las pagarán. Y no estoy llorando.
:-Eso te pasa por pelearte con todo el mundo, Kidd-ya.
:-Él fue quien comenzó. El enano se llama Luffy. Va en primero.
:-¿Luffy-ya? Lo recordaré.
:-¿Para qué diablos querrías recordarlo?
:-Para evitar que me desvíe el tabique si me lo encuentro.
~~~*~~~
Eran las 11:50 a.m.
“Mierda, definitivamente los edificios comenzaron a moverse más rápido”
Hacía ya 10 minutos que la campana había sonado y Zoro seguía sin encontrar su salón. Lo peor de todo es que ya era la quinta vez que pasaba delante de ese tipo. Era un señor muuy alto, de tez morena y negro cabello, además de tener un antifaz de dormir en su frente.
:-Te lo voy a preguntar de nuevo joven. ¿Necesitas ayuda? –preguntó el alto señor
:-No… no encuentro mi clase. –Dijo entre dientes el orgulloso peliverde
:-¿Qué?
:-¡Qué no encuentro mi salón! –Exclamó Zoro, enseguida agregó más tranquilo:- Soy nuevo, se supone que debería ir allí para encontrarme con Akainu.
:-Vas en primer año, supongo.
:-Si, en la clase B.
:-Ararara, ahora mismo todos los alumnos están en talleres/clubs. ¿Todavía no estás en uno?
:-Se supone que para eso voy a ver a Akainu.
:-Ven, te voy a mostrar los clubs y talleres. Soy Aokiji por cierto, otro de los prefectos –El mayor sacó su teléfono y marcó un número.
:-Sí… sí, está conmigo… yo le muestro los talleres. –Después de colgar el teléfono se dirigió a Zoro:- Menos mal que te topaste conmigo, Akainu se escuchaba bastante molesto. Eres Zoro, ¿verdad?
:-Si, lo soy
:-Bien, Zoro en esta escuela tenemos cuatro talleres y cuatro clubs. Los talleres son de ámbito recreativo y los clubs de ámbito deportivo. ¿Te interesan los deportes?
:-Claro, ¿hay alguno de kendo?
:-Por desgracia, no. El club de kendo cerró hace unos diez años.
:-Eso pondrá triste a mi padre.
:-Si, decepcionó a muchas personas, pero tenemos que innovar y muy pocos alumnos estaban interesados. Por ahora, en cuanto a clubs deportivos refiere, quedan Fútbol Americano, Básquetbol, Baseball y Fútbol. Todos los alumnos del quipo se mezclan, es decir en un mismo equipo puede haber chicos de los 3 años. Tanto fútbol como básquetbol tienen equipo femenino y además hay un equipo de porristas, los hombres pueden entrar ahí también.
:-Interesante, pero no me interesa ser porrista.
:-Si bueno. Los talleres son Cocina, Pintura, Literatura y Diseño. Todos son talleres mixtos y a diferencia de los club estos si están separados por años. Ahora mismo vamos al taller de cocina.
Atravesaron un largo pasillo, giraron a la derecha y subieron unas escaleras en corma de caracol.
Una vez en la segunda planta pasaron dos salones y llegaron al salón de 1ero de Cocina. Aokiji tocó la puerta. Una maestra alta y de cabello corto abrió la puerta.
:-Hola Shakky. Vengo a que el nuevo muchacho vea el taller.
:-Claro, claro. Pasen y no toquen nada, algunas cosas están calientes.
Zoro pudo observar que el 90% del salón estaba conformado por chicas. Sólo había 5 chicos y de esos 5 uno resaltaba por su rubia cabellera atada en una pequeña cola de caballo. Era el mismo chico rubio de su clase: estaba al lado de una estufilla, muy concentrado batiendo algo dentro de un tazón. Su cabello sujetado permitía que sus dos ojos azules, seguidos de unas extrañas cejas quedaran al descubierto. El mismo iris azul que hacía un par de horas atrás lo estaba observando, ahora estaba concentrado en el contenido del tazón.
De todos los manjares que había en ese salón Zoro sólo quería comer lo que estaba haciendo ese rubio. Y no sabía por qué.
~~~*~~~
11:45 a.m.
Después de cambiarse (con la ropa especial para el club) Luffy se dirigió al club de baloncesto. Le encantaba ese deporte porque cuando saltaba para encestar sentía como si todo su cuerpo fuera de goma y él se pudiera estirar a voluntad.
A mitad de la práctica apareció Aokiji con el chico de cabellos verdes: Luffy se acercó en cuanto los vio, el nuevo parecía alguien amigable.
:-Hola Aokiji, hola verde.
:-Hola Luffy, ¿qué tal la práctica? –preguntó Aokiji
:-Bien, ahora estamos probando estrategias. Oe verde, ¿te vas a meter a este club?
:-¡No me llames así! ¡Soy Zoro! Y no lo sé, el de baseball me convenció bastante.
:-Metete aquí, nos hace falta gente, será divertido.
:-Si yo fuera tú, le haría caso, El campo de baseball es demasiado grande, te podrías perder.
:-¡Oiga!
:-Shishishishi
:-¡Oe Luffy! ¡No vienes aquí a platicar! ¡Mueve tu trasero aquí ahora! –se escuchó reclamar al entrenador molesto.
:-Shishishi, ya me voy, ¡nos vemos luego Zoro!
:-Sí, nos vemos.
Sin embargo Zoro no llegó a la última clase. Eran las 2:40 p.m. y ni rastro del peli-verde.
:-Lo más probable es que lo hayan llevado a habar con el director –dijo Nami mientras recogía sus cosas- Saben que a Doflamingo le gusta conocer aún más a los que entran a mitad de año.
:-Si, es lo más probable –afirmó Sanji.
:-Que lástima. Y yo que quería invitarlo a...
:-¿Invitarlo a dónde? ¿Se te olvido que todavía tenemos que quedarnos a sacar la basura de las áreas verdes?
:-¡Ah! ¡Lo había olvidado!
:-Y también tienen que hacer el aseo del salón –agregó Nami burlona.
:-¡Cállate! No le recuerdes su desgracia al gran Usopp-sama –dijo Usopp con una mueca melodramática.
2:45 p.m. Sonó la campana anunciando el fin de la jornada estudiantil.
:-¡Ah, libres! Nos vemos luego chicos –dijo Nami despidiéndose
:- Luffy, Usopp, Robin-chan dijo que fuéramos a Cocoyashi a comer. Si se apuran tal vez nos alcancen. –Mencionó Sanji a los 2 castigados
:-Yo paso. Apenas podré caminar después de esto. :-dijo Usopp deprimido
:-Yo también, hoy Ace va a pedir pizza, tengo que llegar antes de que se la acaben.
:-Vale, entonces nos vemos mañana.
:-Adiós
:-¡Hasta luego!
Usopp y Luffy decidieron limpiar el salón primero. Una vez terminado el salón se dividieron las áreas verdes para acabar más rápido. Como Usopp no se distraía hablando con las personas acabó al cabo de una hora y se marchó.
Sin embargo Luffy era un caso diferente. En los primeros 5 botes de basura se topó con alguien y comenzó a hablar. Cuando Usopp ya había terminado, Luffy no llevaba ni la mitad de las áreas verdes que le correspondían. Sin embargo para las 4:10 de la tarde su estómago comenzó a rugir, provocando que Luffy se apurara. A las 4.30 p.m. finalmente había acabado y se dirigía a la puerta trasera para tirar la última bolsa, entonces, escucho una conversación de alguien que pasaba:
:-Tsk, maldición, Monet-ya, no puedo creer que Crocodile-ya te haya entretenido tanto.
:-Y yo no puedo creer que tú me hayas esperado. Como sea, no entiendo porque tanto alboroto sólo por ayudar a alguien de Paradise.
Luffy salió por la puerta trasera y se encontró a la chica de cabello verde acompañada de un joven alto, moreno, con cabello negro y unas ojeras más grandes que sus propios ojos.
:-¡Hola Moda!
:-Es Monet. Hola Luffy, ¿qué haces por aquí a estas horas?
:-Estaba cumpliendo mi castigo. ¿Quién es él? –preguntó el monito refiriéndose al acompañante de la chica.
:-Es mi primo, Trafalgar Law. Law –dijo ahora refiriéndose al susodicho- este es el chico por el que Crocodile me hecho la bronca.
Law miró al chiquillo delante de él. Era pequeño, también tenía el pelo negro y poseía unos ojos muy grandes, pero con un iris-café muy pequeño, dándole así un aspecto cómico. Tenía una cicatriz debajo del ojo izquierdo.
“Y se supone que esta cosa le desvió el tabique a Kidd-ya” –pensó Trafalgar.
:-Hola, Luffy-ya
:-¿Luffy-ya?
:-Es su forma de llamar a las personas. Mejor dime, ¿a ti también te castigaron por la pelea?
:-No, que va. Me castigaron por reírme del chico nuevo cuando lo llamaron cara de chulo Shishishi, y después descubrieron que me salté la valla Shishishi
:-Fufufufu –río Monet- tú sí que eres una cajita de sorpresas. ¿Quieres ir a cenar con nosotros?
Luffy pensó en la pizza que Ace iba a pedir, pero cuando vio al ojeroso y a la peli-verde, aceptó sin dudarlo. Después de todo Bonney le había invitado el almuerzo, así que todavía le quedaba algo de dinero.
Las horas pasaban y pasaban. Luffy contaba anécdotas graciosas y Monet se reía. Trafalgar se limitaba a escuchar.
Eran las 8:30 p.m. cuando el teléfono de la peli-verde sonó.
:-Chicos- dijo una vez terminada la llamada- Yo los dejo. Mi padre quiere que lo vea en media hora. Law, te veo en casa. Luffy, hay que reunirnos mañana también, te enviaré un mensaje por Facebook.
:-¡Hasta luego! ¡Gracias de nuevo!^^ -gritó contento el monito.
:-Oye, ¡Monet-ya! ¡Espera! –gritó Law sin ocasionar cambio alguno en la alta muchacha, quien rápidamente se perdió entre la gente- “Maldita Monet” –pensó el ojeroso- Bueno, ya es tarde, yo también me retiro.
:-Hasta luego^^
Law comenzó a caminar hacia la parada del bus, sin embargo notó que el pequeño monito seguía atrás de él.
:-¿Se te ofrece algo? –preguntó
:-En lo absoluto –contestó Luffy sonriendo
Siguió caminando. Luffy seguía atrás de él. Ya habían pasado 10 minutos, Law estaba empezando a perder la paciencia, cuando Luffy rompió el silencio:
:-Torao, ¿Dónde vives?
:-¿Torao?
:-Tú me dices Luffy-ya, así que yo te voy a decir Torao. ¿En dónde vives?
:-¿Para qué quieres saber eso?
:-¿Vives por la avenida Dolphin?
“Cómo sabe eso” –pensó el ojeroso- ¿Y qué si lo hago? –dijo cortante
:-¡Yo también vivo por ahí! ¡Hay que irnos juntos!
“Maldita Monet” –pensó nuevamente el ojeroso, antes de ser arrastrado por el pequeño peli-negro.
~~~*~~~
Lunas 6:30 pm
Crocodile aún no terminaba de firmar papeles y arreglar asuntos. Tomar 3 horas de su tiempo para hablar con Monet no fue precisamente la mejor idea, pero, había tan pocas cosas que le molestaran tanto como que un alumno del prestigioso instituto New Wolrd ayudara a alguien de la basura de Paradise, y la peli-verde precisamente había hecho eso.
:-Es mocosa, sabía que no se podía confiar en ella, después de todo tiene la sangre de la estúpida ave corriendo por sus venas. –Dijo mientras se servía un trago- Y todavía tengo demasiadas cosas por hacer.
:-¿Y por qué no las dejas para después? –preguntó un peli-negro que había irrumpido en la oficina con una taza en las manos.
:-¿Cuantas veces tengo que decirte que toques antes de entrar? Bentham
:-Perdón, Croco-chan. Te traje una taza de café, pero tal parece que no la vas a necesitar –dijo mientras observaba el vaso con coñac.
:-Llévate eso de aquí. ¿Tienes los informes que te pedí?
:-Sí, los tengo en mi escritorio.
:-¿Y?, ¿por qué no los traes?
:-¿No crees que te estás sobre-esforzando?
:-No, y si así lo fuera no sería de tu incumbencia.
:-Vamos Croco-chan no seas así. ¿Por qué no vamos por un trago? Tomar coñac siempre es mejor si estás acompañado.
:-Pues si la compañía es como tú, prefiero estar sólo. Trae los informes y retírate.
:-Tsk, siempre tan seco –dijo Bentham mientras se marchaba, para luego reaparecer con un fajo de papeles. Así pasaron 2 horas.
Lunes 8:00 p.m.
:-Finalmente, dijo Crocodile bostezando. Dejó los papeles acomodados en su escritorio, junto al vaso del coñac vacío. Se dirigió al estacionamiento, se despidió del velador y se fue directo a su casa; necesitaba dormir.
Llevaba 3 horas de reparador sueño cuando su teléfono comenzó a vibrar como loco.
“Apagar el teléfono antes de dormir para la próxima” –Pensó Crocodile mientras se levantaba molesto. Al revisar el teléfono encontró 25 mensajes de Bentham y seguían llegando. Algunos tenían fotos del susodicho en una fiesta, donde además se encontraban otras personas que trabajaban en New World.
-¡Ven, la fiesta está que revienta!
-¡Mira, Miss Monday trajo Mezcal! (Foto)
-Jajajaja Daz Bones acaba de vomitar (Video)
“Hasta Daz Bones está ahí, esa fiesta debe de ser un caos. Tengo que reconsiderar despedir a todo el mundo” –Pensó seriamente Crocodile. Luego, consideró ir a la fiesta y ser parte de la locura también. Descartó la idea casi de inmediato. Sin embargo al cocodrilo le apetecía salir de casa: tomar unas copas, tal vez algo de sexo. Decidido, se arregló y salió de su departamento. La noche aún era joven.