Camine durante un rato hasta que llegue a mi destino, pero antes de que llamara mi celular vibro con un mensaje revise y ponía algo bastante simple “Encuéntrame en el parque de ayer, Angie” sonreí inconscientemente y cambie mi rumbo ahora hacia el parque.
Apenas llegue vi a Angie sentada en la banca en la que yo estuve ayer.
- ¡Angie! – Angie me miro y se levanto para venir en mi dirección.
Trote un poco para llegar frente a ella.
-Gracias por la nota, aunque no hacia falta que se lo dijeras a mi mamá- no veo por qué.
-bueno ella estaba un poco preocupada por mi- vi la seriedad de Angie.
-Entonces, ¿qué paso al final? – mire a Angie.
-Resulta que tendrás que seguir soportándome en clases por un tiempo más- le sonreí de manera deslumbrante.
-Tonta…- vi la cara de Angie, pero no espere ver lagrimas en su rostro y eso me espanto.
-Aah perdón era una broma, no pensé que te molestaría tanto- trate de disculparme, pero en eso sentí un golpe en mi brazo.
-Idiota… no lloro por eso- Angie trataba de secarse las lágrimas sin resultado.
-Entonces… ¿por qué? - Angie trataba de componerse.
-Pensé que no volvería a verte- ¿porque pensaría?… ya veo
Angie… ahora que lo pienso no me di cuenta Angie ha estado soportando mucho estrés, primero con el hecho de mi caída, luego con la posible conmoción, con los asaltantes que escaparon y ahora ultimo con el hecho de que pudieron haber sido nuestros últimos momentos juntas… si lo pienso con calma no me extraña que se ponga así…
Espere unos momentos a que se calmara.
-Angie… puede que… la mayor parte del tiempo ignore muchas cosas que ocurren y que probablemente no sea la persona más emocional o sensible que conozcas pero quiero que entiendas algo y es que… no dejare que me separen tan fácil de ti- Angie me miraba entre asombrada e incrédula y yo solo mire en otra dirección para no sentirme avergonzada- ya sabes eres importante para mí, eres mi primera amiga real, la única persona que de verdad me conoce y yo… bueno te tengo mucho aprecio… no podía simplemente dejar que mis padres destruyeran el lazo que tengo contigo- que difícil es esto de decir lo que sientes, con el psicólogo fue menos vergonzoso.
- ¿De verdad soy tan importante para ti? – Amm pensé que eso era lógico.
- ¿Tengo que volver a salvar tu vida para dejarlo más claro? – Angie puso una mirada sombría por un momento, pero luego me dio una sonrisa que me daba escalofríos.
-Procura no poner tu propia vida en peligro para no tener que ir a un hospital ¿entendido? - quise reírme, pero la sonrisa que me daba Angie me aterraba.
-Bueno en parte por eso mi abuelo quiere entrenarme- Aunque yo también quiero poder proteger a Angie de la presidenta.
-Lo haremos juntas, sabes que no dejare que lleves tu todo el peso… en fin debes decirme como fue la reunión con tus padres y abuelos-
Suspire nos sentamos a la sombra de un árbol en el césped y comencé a contarle como había sido todo Angie me escuchaba atentamente hasta que acabe mi relato.
-Tu y tu familia no son nada demostrativos, aunque me alegra que tu padre haya entendido que tu hogar es aquí- sonreí.
-Tenías razón después de todo- sonreí.
- ¿Con respecto a qué? –
-Con respecto a mis padres… me dijiste que ellos me querían, a su manera, pero que me querían- Angie se acomodó a mi lado.
-Tenia esa corazonada-
-Sabes me siento mas tranquila ahora, aunque probablemente el doctor quiera que vaya con el psicólogo por un tiempo- mire hacia el cielo.
-No te preocupes- Angie puso su mano sobre la mía- Estaré apoyándote y cuando me necesites estaré contigo- le sonreí a Angie.
-Aaaah me alegra que al menos volveremos a nuestra rutina normal dentro de poco- sentí a Angie reír.
-A mi me alegra que ya seas tu misma- sentí como se acurrucaba en mi hombro.
¿Tanto se preocupó?, bueno eso ya es cosa del pasado… dentro de poco volveremos a nuestras rutinas, ella volverá a su casa yo estaré en la mía, iremos a clases, volveré a ver a la profe de mate, extraño sus enseñanzas, los demás profes seguro se enojan de tener que tenerme en la sala y que en las tareas siempre responda bien… espera… ¿tareas?... ¡¡¡AAAAAAAAAAH!!!
Me levante abruptamente y mire a Angie.
- ¡ANGIE! -
- ¡¿Amber que ocurre?!- me miraba sorprendida y asustada de mi arrebato.
- ¿Cuantos días de licencia me quedan? -
- ¿Eh? ¿A qué viene eso? - me arrodille frente a ella.
-Solo dime mujer ¿cuántos días me quedan de licencia? - empecé a sacudirla de los hombros.
- ¡SUELTAME IDIOTA! - La solté ya que no quería ser golpeada- no se por que te pones así, pero si quieres saber…-Esperé nerviosa- Nos quedan cuatro días mi madre ya envió la información a la directora, así que en cuatro días volveremos a clases ¿por qué preguntas?
-No he estudiado nada, debemos un examen y un trabajo, sin mencionar que no se que han pasado en clases y… ¡MI MOTO SIGUE EN EL COLEGIO! - mi moto…
Mientras divagaba sentí como Angie se reía voltee a verla y aunque no entiendo porque me alegra poder oír su risa.
-Sabes… verte ahora alterada por tu moto y por nuestros estudios me hace darme cuenta que sigues siendo la misma de siempre- su sonrisa era calida.
-No veo por qué eso te haría reír, ya te dije que no cambiare- le extendí mi mano a Angie para que se levantara.
Angie tomo mi mano y mientras se levantaba salto a abrazarme.
-Me alegra saber que seguirás siendo tu- honestamente no puedo entender a esta chica.
-Si bueno a mi me alegra que sigas sonriendo… espera no me cambies de tema debemos irnos a trabajar dejemos de perder el tiempo- me solté de su abrazo la tome de la mano y me la lleve corriendo en dirección a su casa mientras lo hacíamos podía escuchar a Angie riéndose y reclamarme por ser tan infantil, no me importo en lo más mínimo sus reclamos pero trajeron a mi cara una sonrisa ya que sentía que poco a poco las cosas se estaban calmando para nosotras.