Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

“Nuevo invierno de acero” por KarinUchiha1

[Reviews - 96]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

¡He regresado! Luego de dos intensos meses estudiando finalmente regrese (Solo hasta que me entregen caliificaciones que esperemos sean buenas) en fin regrese con este fic con bastante zukelencia y con una propuesta importante.

Recomendacion musical Love Me Harder-Ariana Grande feat the Weeknd (version Yaoi furry) oigan mas la cancion que las imagenes 😅

https://www.youtube.com/watch?v=jjCwVwyNmH0

Por ahora, disfruten el capitulo.

Perdidos en nuestros besos, el aire nos asfixiaba, entre más cerca estábamos uno del otro, la demanda para ambos era mayor. Siguiendo todo derecho el pasillo terminamos en una de la habitaciones, no tenía idea si era la de Tony, pero a ninguno de los dos nos importó; cerramos la puerta de la habitación, entrando estaba oscuro y la hambrienta éxtasis de ambos hacia que nuestra lujuria aumentara.

Llegamos a la cama, senté a Tony en la cama sin dejarlo de besar empezándolo a acostar sobre la misma, la fricción de nuestros cuerpos era voraz. Empecé a bajar los besos desde su mejilla hasta su cuello empezándolo a lamer y morder un poco, podía escuchar su respiración agitada cerca de mi oído.

-James…-

Como un rayo directo al suelo, quede en shock al recordad que hace ya varios días yo, había abusado de Tony estando dormido y en toda su conmoción el menciono mi nombre. Me detuve, separándome un poco de él mirándolo frente a frente.

-No puedo hacerlo-dije serio sorprendiendo a Tony.

-¿Es enserio? Te me acabas de confesar y ahora me estás diciendo que no puedes hacer esto-contesto Tony algo molesto.

-No se trata de esto-me quite de él y me senté a la orilla de la cama.

-No me digas que…-Tony se levantó un poco-. ¿Los años ya te desanimaron un poco? Wow y yo que creí que eras más joven.

-¡Quiero hacerlo!-dije serio mirando a Tony-. En verdad quiero hacerlo, pero…-mi mente no dejaba de repetir esa escena-. Yo, hace varias noches…

Aquella noche es algo que de cierta forma no me arrepiento, pero que yo no debí hacer. Y si quiero empezar desde cero con él, debo de ser sincero.

-Cuando regrese de Ucrania, la noche que te obligue a dormir luego de varios días sin dormir yo… –di un gran suspiro, abriendo y cerrando mis ojos- abuse de ti.

Él quedo un poco sorprendido, desvió la mirada y se sobo la nuca.

-Así que realmente fuiste tú-su respuesta me sorprendió- y yo que creía que era un sueño.

-¿Acaso tú recuerdas lo que pasó aquella noche?-

-Vagamente-puso la mano derecha con la punta de sus dedos en su frente- Yo creí que era un sueño, pero yo… -desvió la mirada avergonzado- estaba en una habitación completamente en blanco, vi a Steve y ni siquiera me dio tiempo para decir su nombre cuando el empezó a besarme, me deje llevar porque pensé que era un sueño pero de alguna forma se sintió distinto, no era el Steve que yo recordaba. Había sentimientos distintos en su cuerpo, temblaba y a la vez me deseaba; cuando me vine, parpadee varias veces, creo que fue ahí donde me desperté y vi tu rostro todo exhausto. Aunque estaba entre despierto y dormido, yo quería tocarte porque no sabía quién fue la persona que sentí me quería con culpa. Fue en ese instante cuando empecé a confundirme, porque aunque yo en el fondo ame a Steve, pero ahora sentía algo distinto, no era como si sintiera que engañara a Steve porque al final de cuentas él está muerto; si no el hecho de que, yo…

Lo tome de las mejillas con ambas manos dándole un beso en los labios, que si bien solo fue un contacto, quería que Tony no…

-Tienes miedo-recargue mi frente con la de él-. Yo también lo tengo, llegue a pensar que si te enterabas de esto, no querrías volver a verme.

-No es la primera vez que me haces cosas horribles, pero ahora entiendo que ambos somos unos verdaderos desgraciados -suspiro un poco agobiado- Tú por aprovecharte de un idiota dormido y yo por confundirte con Steve.

-¿Por qué eso te hace un desgraciado?-pregunte confundido

-Porque tú no eres Steve-me sorprendí al ver la seriedad que tenía Tony en el rostro-. Yo ame a Steve como nunca había amado a alguien antes, pero Steve murió y eso nada lo va cambiar. Y ahora estas tú, que se enamoró de mi aun con todos los defectos que tengo, por un instante creí que solo querías enmendar la culpa que tenías por mí pero ahora creo que no es así, solo necesito saber una cosa ahora. ¿Tú me amas para reemplazar a Steve?

Tome el de nuevo el rostro de Tony volviéndolo a besar y recargue mi frente con la suyo mirándolo a los ojos.

-Yo quiero amarte, porque quiero hacerlo. No por Steve, no por ser el Capitán América. Solo quiero hacerlo, como el hombre que soy.

-Con eso me basta- tomo mis mejillas profundizando más nuestro beso.

Ese beso entre más profundo era, más deseosos nos ponía. Tony baja sus manos de mis mejillas hasta pasar a mi cuello queriéndome acercar más a él. La desesperación me estaba carcomiendo, empuje poco a poco a Tony volviéndolo a recostar en la cama sin dejarlo de besar; ya sobre de él, desabroche su camisa por completo dejando al descubierto su pecho, sin más, me baje a su vientre empezando a lamerlo pasando por una de sus tetillas llegando hasta su cuello dándole besos, pude sentir la mano de Tony sobre mi cabello apretándome más hacia su cuello pudiendo oír su respiración; deteniéndome un poco, volví a lamerle el cuello bajando nuevamente hacia sus pezones lamiéndolos uno a la vez, el enlazaba sus dedos en mi cabello abrazando mi cabeza y jadeando como si no pudiera respirar.

-Ahh…James…-

Oírlo decir mi nombre de esa forma era excitante, no sentía aquella culpa de hacerlo como la primera vez, me siento amado por él. Entre besos y lamidas de su pecho hasta su cuello; con su mano derecha, me acercaba mas a su cuello perdiéndose en esa sensación excitante que solo yo le estaba provocando.

-James…James…-

Conforme decía mi nombre, podía sentir como su cadera se alzaba hacia mí, rozándome con ese bulto que tenía en sus pantalones.

-Veo que este ansioso- dije sonriendo.

-Es tu culpa-respondió sonriendo-. La última vez te confundí con Steve, esta vez quiero que tú lo hagas como tú solo sabes hacerlo.

-Ja entonces no vas a poder caminar-

-Porque no lo demuestras-

Me encantaba esa forma de retarme de Tony, me hace querer hacer más cosas malas con él. Con mi mano de vibranium tome ese bulto que palpitaba hacia mi empezándolo a acariciar provocando que Tony diera un pequeño quejido que conforme movía aquel quejido se volvían más deliciosos esos gemidos, me acerque de nuevo a su cuello para escuchar mejor sus gemidos y de igual manera para poder saborearlo un poco más con mi lengua.

Deje de masturbarlo sobre la ropa, metiendo mi mano bajo su pantalón volviéndolo a masturbar de forma directa haciéndolo gemir de una forma un poco más grotesca, puso su mano sobre mi muñeca tratando de detenerme pero parece que no tenía la fuerza para hacerlo.

-¡Carajo! ¡Quieres ya quitarme los pantalones de una maldita vez!-dijo molesto tratando de no gemir por mis movimientos.

-Que vocabulario tan vulgar-

-Ja, ¿te has escuchado hablar?-sonreía tratando de no gemir-. He oído como hablas con Viernes y tú no eres el más indicado para hablarme de vocabulario, tienes la boca muy sucia.

-¿Así?- detuve mi mano y volviéndolo a besar sosteniéndolo de ambas mejillas sonreí-. En eso si tienes razón.

Baje hasta sus pantalones empezándoselos a quitar, dejándolo solo con sus boxers, que no era la ropa más sexy pero que me provocaba los peores instintos, sobre los boxers empecé a lamer ese pequeño bulto erecto que provocaba los gemidos más deliciosos de la boca de Tony.

-Sabes…- dijo entre gemidos-. Para ser un tipo que queria hacer esto desde hace tiempo, te estas tomando demasiado… ¡Ahh!-provocando un pequeño grito a Tony por la pequeña mordida que le di.

-Créeme, que quisiera envestirte con todas mis putas fuerzas pero quiero deleitarme con esto- seguí lamiendo y esta vez metiendo mi lengua en la pequeña entrada de sus bóxer.

-Jodida lengua la tuya-seguía resistiendo a gemir más fuerte.

Me detuve un poco con sus boxers volviendo a lamer sus pezones llegando nuevamente hasta sus labios volviéndolos a devorar con fervor. Tony me devolvió los besos tomándome de las mejillas cercándome más a él.

-Mas, mas, mas… James…- seguía diciendo mi nombre mientras más me besaba; carajo, sus besos son tan adictivos.

Los besos no se detenían, mi lujuria estaba a su máximo esplendor, yo también quería más. Acerque más mis caderas a Tony pudiendo sentir más su erección sobre sus boxers, haciendo que tanto su pene como el mío se frotaran sobre nuestra ropa interior, seguía besando a Tony pero él ya estaba mucho más deseoso que yo por esto, metiendo su mano bajo mis bóxer empezándome a masturbar de arriba abajo provocando que la respiración casi se me cortara.

-Oye…-susurro Tony cerca de mi oído con una voz bastante juguetona-. ¿Hace cuánto que no te lamen ahí?

-No te voy a contestar eso- seguía intentando no gemir.

-Así que ni Romanoff te hizo una de estas-seguía apretando con un poco más de fuerza.

-¡Quieres no pensar en ella ahora por favor!-

-Tienes razón-

No sé qué clase de fuerza saco, que logro cambiarme de posición poniéndome abajo y teniendo a Tony con una sonrisa bastante atrevida.

-No pienses ahora en otra cosa, solo mantén tus ojos en mi-

Después de terminar de hablar me mordió el cuello haciendo que diera un gran gemido que creí que me ahogaría, luego de eso me lamio empezando a bajar hasta mis pantalones y esta vez me los quito con todo y bóxer tirándolos al otro lado de la cama. Tomo mi pene con su mano levantándolo un poco y de igual manera empezó a besarlo, a lamerlo desde mis testículos hasta la punta de mi pene, quería mirarlo todo el tiempo pero esa oleada de sensaciones solo hacía que levantara las caderas, luego de lamerlo y besarlo por algunos segundos, empezó a masturbarlo un poco para luego meter la punta en su boca, así de la misma manera que me masturbaba con su mano me lamia, sencillamente me estaba torturando con esa lengua metiéndola sobre la piel de la punta de mi pene. ¡Carajo! ¡Me voy a venir en cualquier momento! Se detuvo un momento dejándome respirar un momento.

-Veo que te estas animando muy rápido-dijo con una sonrisa bastante sínica en el rostro.

-¡Ya cállate y continua!-lo tome de la cabeza con la mano acercándolo a mi pene obligándolo a poner la punta nuevamente en su boca.

Seguía moviéndose de una forma tan exquisita que una parte quería que continuara pero la otra, no quería que lo hiciera, así que con ambas manos lo detuvo.

-¿Quieres que me detenga?-

-Lo que no quiero es terminar en tu boca-

Obligándolo a regresar a mi rostro lo volví a comer a besos, bajando mis manos lentamente sobre su espalda llegando a sus nalgas empezando a masajearlas.

-Ese bóxer se está volviendo estorboso-dije mientras metía mis manos en los boxers masajeándolo mas al contacto.

-Pues te estas tardando mucho en desvestirme, te estas tomando demasiado tiempo- siguió besándome y yo seguía bajándole los boxers.

-Levántate un poco-ordene.

-Ya era hora, mapache idiota-

Ya quitándole los bóxer y tirándolo baje a su pene metiéndolo completo en mi boca lamiéndolo lo más profundo que podía, de arriba abajo y al mismo tiempo acariciando sus testículos.

-James…- no podía cansarme de esa voz diciendo mi nombre una y otra vez.

Ahora masturbando su pene con mi mano, empecé a lamer y dar pequeños besos en sus testículos bajando lentamente hasta lamer el periné.

-Voltéate…-volví ordenar.

-No, espera…-replico pero dado mi nivel de impaciencia en el que ya estaba no lo escuche volteándolo de todos modos, dejando sus nalgas y su espalda desnuda frente a mí.

-James, espera por favor yo…-calle sus reclamos cuando empecé a besar sus nalgas solo provocando que hundiera la cara en las sabanas tratando de no gemir. Tenía unas ganas de probar esas nalgas desde hace meses, incluso cuando paso el incidente no pude disfrutar este delicioso trasero.

-James, por favor, en verdad no quiero esta posición-seguía replicando, pero aunque el dijera que no su cuerpo siempre lo delataba, cuando note que su erección ya estaba sacando liquido pre-seminal.

-¿Seguro que no quieres esta posición?-pregunte al igual que separe un poco sus nalgas para ver su pequeña entrada-. Porque pareces estar mintiendo.

Metiendo mi lengua completa en su entrada provocando que arqueara su espalda hacia atrás dando un gran gemido que se escuchó en toda la habitación. Mi lengua entraba y salía de su pequeña entrada, seguía lamiendo hasta yo saber que estaba listo para que entrara. Él seguía evitando a toda costa no gemir como loco mordiendo las sabanas y apretándolas con ambas manos; lo lamia, lo besaba y de igual manera metía dos de mis dedos para que no le doliera.

Todo estaba listo y yo también, dejando ya su entrada me puse sobre él besando atrás de su cuello y el con su mano estaba tratando de detenerme.

-James, por favor…-seguía replicando y esta vez su voz parecía más seria preocupándome un poco.

-¿Por qué no quieres esta posición?-

-Es que…-apretó un poco más las sabanas- no quiero que veas…

Ahí fue cuando realmente entendí porque tanto su insistencia, baje un poco la mirada observando su espalda con la gran cicatriz que tenía, creo que no le di el significado que merecía, a Tony realmente le importa esa cicatriz y dejar que alguien más la vea es algo que aún le duele.

-Tranquilo…-bese su cicatriz haciendo que le diera un ligero espasmo-. Te lo dije, esta cicatriz es hermosa y es lo que tú eres. Y es lo que más amo de ti. –bese de nuevo su cicatriz y esta vez estaba más relajado.

-Eres demasiado cursi-replico sin mucha energía.

-Pero parece que te gusta-puse la punta en su entrada- Voy a entrar.

-Solo hazlo de una vez-

Bese su cuello por detrás haciendo que el pusiera su mano en mi nuca acercando más mis labios a su cuello, sus gemidos se volvieron más lujuriosos.

-Hazlo… hazlo… Quiero que lo hagas…-

Con esas ultimas suplicas entre casi de golpe haciendo que Tony arqueara la espalda y con la respiración cortada volteo un poco para besarme con todo el fervor que tenía. Empecé a moverme lentamente en su cuerpo pero cuando note que Tony puso sus manos atrás de mis nalgas, entendí que el ya no quería ir lento.

-¡Mas! Más rápido… ¡James!-

Mi autocontrol finalmente se fue al carajo penetrándolo con todas mis putas fuerzas, rindiéndose ante sus propios instintos el empezó a gemir como no lo hizo en el incidente y como no lo hizo hace unos segundos.

Extasiados en nuestro propio placer, no podíamos parar, así como yo lo hacía con todas mis fuerzas, él seguía pidiendo aún más, aunque lo estuviera penetrando una y otra vez. Parecía no tener fin, quería que no terminara pero ya estaba a nada de venirme y Tony también…

-Ahh… Tony… ya…-

-Espera… quiero que lleguemos los dos-

-Lo se…-

Volví a voltearlo dejándolo ahora frente a mí, ambos nos miramos en una gran éxtasis que en cualquier momento acabaría, cuando alguno de nosotros terminara. Volví a besarlo y el volviéndome a recibir con ambas manos en el rostro, separándonos por falta de aire nos miramos jadeando uno sobre el otro.

-Tony…-

-No…-

-¿Ehh?-

-Quiero oírte como me llamaste la última vez-con esa mirada de súplica, simplemente yo no podía decirle que no-. Dilo.

- Antoshka-susurre cerca de su oído.

-Otra vez…-susurro cerca de mi oído y esta vez empezó a rodear sus manos sobre mi cuello.

-Antoshka…-volví a susurrarle pero esta vez sentía que la respiración se me cortaba cuando lo volvió a pedir.

-James… otra vez…de nuevo y de nuevo- volvió a pedirlo aferrándose ahora más a mis cabellos.

Lo tome de cuello volviéndolo a devorar a besos y él ahora abrazándome. Volví a envestirlo, una y otra vez sin dejar de besarlo ni abrazarlo sintiendo como el aliento se nos escapaba del cuerpo. Las embestidas se volvían más intensas, el cuerpo me estaba temblando ya no podía aguantar ni un segundo más.

- Antoshka, ya no puedo… en verdad…-

-Termina. Termina, termina pero terminemos ambos-

Con el ultimo gruñido que tenía lo abrase con fuerza a mi Antoshka y con las ultimas estocadas mi vine en él, de igual manera luego de venirme el dio sus últimos gemidos y se vino sobre mi abdomen.

Ambos estábamos exhaustos, nuestras respiración se estaban regularizando con el pasar de los segundos, finalmente lo habíamos hecho, lo que ambos queríamos desde hace ya bastante tiempo, paso.

-Oye…-susurro Tony-. ¿Aun esto es un sueño?

Me sorprendí un poco por el comentario que hizo, me alce un poco para mirarlo nuevamente a la cara, tomándolo del rostro con ambos manos volviéndolo a besar de una forma suave pero hambrienta.

-No…-volví a besarlo-. Esta vez no es un sueño, mírame… -lo mire directamente a los ojos- Todo esto es verdad, todo en verdad paso y ahora no me iré como la última vez.

-Es curioso-dijo Tony-. Por un momento creí que si lo harías.

-No volvería a dejarte, ni ahora ni nunca- volví a abrazarlo y esta vez acomodándome bien para rodearlo, el sobre mi pecho y mi boca cerca de su cabeza para poder oler mejor su aroma-. YA lyublyu tebya.

-Lo había olvidado-

-¿Qué cosa?-hubo un poco de silencio por algunos segundos, luego Tony se me tomo el rostro con su mano izquierda dándome un pequeño beso.

-Que dijeras eso, quería escucharlo una vez más de ti-

-Te lo diré las veces que quieras-lo bese en la frente, mirándolo de nuevo a los ojos- ¿Quieres que lo volvamos a hacer? –dije sonriendo.

-Olvídalo no, ya tuvimos bastante y estoy seguro que toda la mansión escucho lo que hicimos-desvió la mirada con ironía.

-Por eso está bien, al fin ese alienígena del espacio sabrá de quien es ese traserito-

-¿Por qué todo mundo está obsesionado con mi trasero?-

-¿Dime quién?-un poco molesto.

-Olvídalo, solo bromeo; además, no quiero que andes matando a medio mundo solo por eso-

-No a medio mundo, solo al que mire tu trasero-

-Maldito mapache loco-

No pude evitar reírme por ese comentario y Tony tampoco pudo hacerlo, paramos de reírnos para volvernos a mirar en silencio por algunos segundos.

-Dime la verdad, ¿En verdad no lo hiciste con Quill?-dije un poco serio.

-No crees que sería algo bizarro ver un trio con un mapache, un alienígena y un hombre-él rio un poco pero yo me quede serio, él noto eso y suspiro-. No, no pasó nada. Solo estábamos tomando unos tragos y luego llegaste tú armar un alboroto. Créeme, no pensé llegar a nada esta noche.

-Te creo-dije un poco serio.

-Oye ¿ya podrías dejarme dormir? Me dejaste exhausto desgraciado-

-Entonces no hay que salir de aquí, solo quedarnos abrazados, hasta que puedas ponerte de pie-dije con una sonrisa burlona en el rostro

-Desgraciado-

-Duerme-lo abrace-. Mi querido Kotenok –volví a darle un beso en la cabeza-. YA lyublyu tebya.

-¿Seguro que estas bien asi?-dijo Tony algo soñoliento-. Siendo tu, el único que ama…

-Si…-abrace un poco mas fuerte-. Porque así, podre darte todo el amor que te hizo falta por tanto tiempo, spokoynoy nochi…

-Ya cállate y deja de hablar en ruso, dilo en mi idioma-

-Te amo…-

-Mejor solo cállate-

Luego de algunos minutos Tony quedo dormido, volví a besarlo en su frente para luego recostarme ya en la almohada.

-Descansa, mi Antoshka-susurre mis últimas palabras de la noche y me dispuse a dormir.

La paz al dormir parecía algo tan inalcanzable en el pasado y ahora es la cosa más normal que he hecho en estos días. Volví a despertar en el prado de mis sueños, esta vez estaba más alto, estaba recostado en la parte más alta de un árbol y mirando el prado.

-¡Mapache!-una pequeña voz me grito haciendo que bajara un poco la mirada a la parte baja del árbol, volviéndome a encontrar con el mismo niño de siempre. No pude evitar sonreír al verlo y el correspondió la sonrisa-. ¿Qué haces en el árbol?

-¿Yo? Bueno…-volví a mirar el prado-. Creo que yo tampoco sé porque estoy aquí –volví a mirarlo sorprendiéndome que el estaba intentando subir-. ¿Qué haces?

-Quiero subir contigo-ponía sus manos en el árbol intentado subir.

-Espera, no es necesario que subas conmigo-

-Pero yo quiero estar contigo- me sorprendí un poco al oírlo.

-Aguarda-el niño se detuvo-. Mejor bajo yo-di un salto y quedando frente al niño, me sorprendí un poco al ver un cuaderno en su brazo derecho-. ¿Qué es eso?

-¡Ahh!-miro el cuaderno y lo puso frente a mí para que lo viera- Eran unas cosas que quería mostrarte. –se sentó en el árbol emocionado- Bien. –me invito con su mano a sentarme.

Me senté a lado suyo y el me empezó abrir su cuaderno mostrando unos dibujos bastante extraños, eran robots y una que otra cosa que se inventaba.

-¿Crees que este se ve genial?-me mostro el dibujo de algo parecido a una armadura.

-Se ve increíble-respondí sonriendo-. ¿Tú hiciste todo eso?

-Si-contesto orgulloso-. Aunque solo soy un niño realmente soy un genio.

-Eso puedo verlo-

Era tierno verlo tan entusiasta a cuando lo vi por primera vez, con esa expresión tan fría y ahora parece un cachorro juguetón, mientras me explicaba su armadura miro un poco mi brazo de vibranium.

-¿Quién te hizo este brazo?-me pregunto sorprendiéndome un poco no pudiendo evitar mirarme el brazo.

-Bueno...-no podía dejar de pensar en Tony en ese momento-. Me lo hizo alguien muy especial para mí.

-Wow, se ve genial- mirándolo de arriba abajo ve la estrella roja del brazo-. ¿Y esa estrella?

-Es…-luego de pensar en Tony, mi mente volvió a Hydra recordando cuando odie tener el brazo de Hydra en mi cuerpo. Debí haberle dicho a Tony que quitara la estrella.

-Me gusta-me sorprendí al oírlo y más verlo sonreír al ver mi estrella-. Es genial, se ve igual al del Capitán América.

-¿Conoces al Capitán América?-

-Todo el mundo lo conoce, es el más grande héroe más grande del mundo, él era increíble- su entusiasmo empezó a disminuir hasta bajar la mirada-. O eso dice mi papa –miro su dibujo pero esta vez más triste preocupándome-. ¿Crees que si me parezco mas al Capitán América, mi papá pueda quererme?

La abrace con mi mano normal acercándolo a mí y el me correspondió el abrazo acercándose más.

-Tu no necesitas ser nadie más para que te quieran, con ser tú es más que suficientes y si tu padre no te quiere tal y como eres, yo lo hare-

-Gracias…-sonríes- James…

James, él sabe quién soy y como desearía saber quién eres tú.

Me quede recostado en el árbol abrazando al niño y cerrando los ojos me quede escuchando el silencio de la paz de la pradera, quede dormido en el vacío de mi sueño. Finalmente desperté, conforme movía el cuerpo para levantarme me percate que Tony no estaba en cama levantándome de golpe. Mire por toda la habitación; no había nadie, aún estaba oscuro y vi el reloj digital del tocador de alado percatándome que aún eran las 6:30 am ¿A dónde se fue? Volví a mirar la habitación y su ropa ya no estaba, por un instante creí que me había dejado pero vi una nota en el mismo tocador del reloj decía “No salgas de la habitación, en un momento regreso contigo” ¿Qué? ¿A dónde demonios se fue? No será que… ¡Maldito!

Salí de la habitación solo con unos pantalones encima, buscando a Tony en toda la maldita mansión, como si en verdad yo hiciera caso a su estúpida nota. La maldita mansión estaba tan tranquilla que era como estar en un maldito laberinto sin fin, luego de algunos minutos vi el jardín con dos sillas de playa larga ¡Ahí estaban ambos! Tony y el imbécil de Quill estaban acostados en la sillas en el jardín, a nada de ir a golpear a Quill y de pedirle una explicación, hasta que los oí hablar, me puse cerca de una de las ventanas que daba al jardín que estaba semi abierta para escuchar que decían.

-Así que así se ve el cielo de la Tierra-dijo Quill riendo-. Vaya no lo recordaba tan nublado

-La contaminación ha hecho su trabajo-respondió Tony.

-Sería bueno que tuvieras una máquina que moviera nubes, seria genial-

-Si todavía no tengo de esas, pero lo que verdaderamente vale la pena ver es el amanecer, es de las pocas cosas buenas que hay aquí en la Tierra-

-Sí creo que tienes razón, creo que es de las pocas cosas que extraño de aquí-

Hubo algunos segundos de silencio que me molestaron un poco haciendo que me diera más curiosidad verlos.

-¿Cómo esta Rocket?-pregunto Tony.

-Está bien, solo está dormido- Quill sonrió riendo-. Siempre se le da por emborracharse primero en estas cosas, una vez fuimos a Contraxia y fue el primero en perderse luego creo que fui yo porque lo único que recuerdo es que termine en la misma cama con Rocket con los pantalones abajo- empezó a reír y Tony le siguió hasta calmarse.

-Eso suena tan extraño, me hubiera gustado verlo-Tony miro el horizonte.

-Aun puedes hacerlo-esta vez Quill lo dijo de forma más seria-. Si te vuelves uno de nosotros.

-Te refieres…-Tony volteo a Quill-. Aun guardián ¿Un guardián de la galaxia?

¿Qué? ¿Un guardián de la galaxia? ¿Tony quiere dejar a los Vengadores?

-Si ¿Por qué no? Además sería perfecto en nuestro equipo, un par de ingenieros dementes no suena mal. “Rocket y Stark” los Frankenstein de la galaxia.

-Que horrible referencia-

-Pero no suena mal ¿no? Todos quisiéramos que vinieras con nosotros y también…-escuche que la voz de Quill se estaba quebrando-. A Drax le hubiera gustado que te quedaras con nosotros.

-Me hubiera gustado despedirme de él-respondió Tony con algo de seriedad.

-A nadie nos dio tiempo de despedirnos, ni a Drax, ni a Nebula-hizo una breve pausa-. Ni a Steve…

¿Por qué demonios tuvo que mencionar a Steve? Maldito Quill; no, no vas a llevarte a Tony ¡No! Tony por favor no…

-Él ya no está aquí, ya no hay razón por la cual quedarse, si vienes conmigo…-Quill tomo la mano de Tony que casi hace que saltara por la ventana para romperle esa mano-. Te prometo que ya no tendrás que sufrir nada de esto.

Tony se quedó serio mirando a Quill para mirar su mano tomada por la mano de Quill y luego regreso la mirada al horizonte.

-Eso suena genial-me sorprendí al escucharlo feliz que hizo quebrarme el alma-. Vivir en el espacio, vivir miles de aventuras en diferentes galaxias y ver más allá de las estrellas de la Tierra, suena una vida fantástica.

No, no puede hacer eso, él…

-Pero no puedo…-

Mayor fue mi sorpresa al oírlo rechazar la oferta de Quill y soltarse de la mano de Quill, de igual manera Quill se sorprendió al escucharlo.

-No puedo irme-

-Pero ¿Por qué? Ya nada te ata a la Tierra-

-No solo se trata de Steve, aquí no solo vivió Steve. Si no toda la gente que me importa y que ahora debo proteger-

-Pero, la Tierra tiene a los Vengadores para protegerlos-

-Y los Vengadores, tienen a Ironman para protegerlos-dio un gran suspiro ahora mirando al cielo-. Ya sea que quieran o no, o incluso que ellos no necesiten de mi protección, debo de protegerlos a ellos. Tal vez siempre peleamos y en ocasiones tal vez no estemos de acuerdo pero ellos son las personas que han sido lo más cercano a una familia.

-Los guardianes también podríamos ser una familia para ti…-

-Dime una cosa ¿Te quedarías en la Tierra solo porque yo te lo pido?-

Quill no contesto haciendo un gesto un tanto de desagrado y hasta algo frustrado mirando al cielo, Tony solo dio una pequeña risa.

-Eso creí. Aprecio la oferta Peter, pero la Tierra me necesita aquí y la galaxia te necesita allá-dijo Tony mientras se sentía el viento soplar despejando el cielo mostrando las miles de estrellas.

-Pero yo también te necesito-

-Hay alguien que me necesita más que tu-

-Te refieres a él-dijo Quill un tanto molesto

-Si…-

-Sabes lo que te hizo ¿no?-

-Si, al parecer ahora todo mundo lo sabe-

-Y si lo sabes ¿Por qué quieres estar con él?-

-Es algo difícil de explicar ahora, solo sé que ahora él no tiene nada. Mientras que yo tenía unos cuantos amigos que se preocupaban por mí, el único amigo que la tenia, dio su vida para salvar a la Tierra. No tiene nada, ni pasado ni futuro, soy el único que puede ayudarlo. El único que puede salvarlo-

-¿Lo amas?-

-Aún es muy confuso, tengo que arreglar muchas cosas con él ahora-bajo la mirada al horizonte.

-Entonces todavía tengo una oportunidad-de igual manera bajo la mirada al horizonte.

-No te vas a rendir ¿verdad?-

-No…-

-A él no le va a gustar eso-

-A mí tampoco la idea de que ese mapache metálico tenga toda la atención de my Sweetness, pero respetare tu decisión que tienes ahora-

-¿Me harás cambiar de opinión?-

-Por supuesto, hare todo para enamorarte locamente de mi y cuando eso pase, vendré por ti. Yéndonos al espacio para no volver nunca más-

-¿De qué canción sacaste eso?-

-Salió de mi corazón-se dio un pequeño golpe en el pecho estirando la mano-. De mi corazón, my Sweetness.

-Tengo que buscar esa canción-

Pasaron algunos minutos y los primeros rayos del sol tocaron a la mansión dejando a Tony y Quill con un silencio de pocos segundos.

-Tenías razón-contesto Quill-. Este amanecer es el mejor.

-Te lo dije…-

CONTINUARA...

Notas finales:

Con este capitulo retomamos esta fic, me encanta el fic y no lo dejaria asta terminarlo.

Por ahora seria todo, nos vemos en el siguiente capitulo


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).