Capítulo 04: Y si hacemos un resumen?
Narra Akihito.
No puedo creer que haya conocido a un familiar de Asami. Es simplemente fantástico!!
He logrado conocer a la bella y hermosa Asami Sakura, la prima menor de Ryuichi. Una hermosa joven de 25 años quien ahora es considerada la emperatriz de la mafia de América Central y el caribe, un conjunto de islas y países hermosos, llenos de riquezas en cuanto a cultura, mercancía y Dios!! Sabrá que más habrá.
Para ser sincero, yo la veía aún más joven que yo; sin embargo al notar que Asami era un traga años (Ya que nunca ha cambiado físicamente), imaginé que ella también lo es. Su bella y delicada figura bien cuidada; los hermosos ojos y el cabello bien cuidado la hacían verse alguien bastantemente delicada y débil. Y estaba bastantemente equivocado cuando escuché todo sobre ella de la boca de mi propio esposo. Ella es espectacular.
Pero al verla cerca de Ryuichi, me hace ver lo tan lindos que se ven juntos, y los comparo en todo lo que puedo verles. Siendo sincero, esta chica era la misma versión de Ryuichi en una mujer; su carácter serio, frío y aterrador la hacía verse como Asami. Pero, su verdadera personalidad no era como la de Asami. Ella era más dulce y sonriente, bromista y positiva. Todo lo hacía verlo a su favor como mi propio esposo. No dejaba escapar detalles y era bastante observadora.
También pude ver sus habitudes y comportamiento. Como por ejemplo ella no fuma en lo absoluto, y ni bebe como Asami (Ya que jamás la he visto tomar alcohol); en cambio, la veía siempre tomar jugos naturales y tés; tomaba café una vez por día. En un principio se la pasaba trabajando en su laptop y pegada al celular ya que no podía regresar a sus propias oficinas para arreglar sus asuntos, ya que siempre estaba tan ocupada como Asami, pero luego, vi que eso se fue yendo hasta que un día no la vi con ningún aparato electrónico en manos (imaginé que sucedió un imprevisto con sus negocios y debió resolverlos). Se la pasa leyendo libros y entrenando en el GYM o en un espacio solitario para utilizar sus armas sin ser molestada.
Pero bueno… Desde el día que vino, esta se mudó en un segundo pent-house que Asami le preparó exclusivamente para su estadía en Japón; aunque se la pasa en nuestra casa para conocerme y socializar conmigo. Nos llevamos bastante bien y la pasamos casi todos los días juntos, hasta que el mismo Asami llega y esta se despide con un: “Mañana seguimos hablando Akihito-san”.
Pero lo que me incomoda es que cuando hablamos, ella menciona de superficie sin detalles el primer día, en el cual nos encontró a dos pasos de vernos haciendo el amor en la oficina de Asami. ¡Dios qué vergüenza! Ella hizo un escándalo y se la pasó discutiendo con Asami hasta que yo mismo los separé, parecían gatos callejeros a punto de sacar las garras para matarse mutuamente. Y aún sigo viviendo eso, los dos discuten a veces de cosas que hasta yo mismo desconozco que de seguro son de su pasado.
En cuanto a los asuntos de investigaciones sobre el Canadiense que quiere acabar con Asami, estos se la pasaban 3 días a la semana investigando, yo apenas los ayudaba con algunas ideas o algo para calmar el ambiente. Sakura llamó a todos y cada uno de sus contactos para saber del canadiense, obteniendo bastante poca información, lo que nos decepcionó de sobre manera, pero eso no los hacía darse por vencidos, y seguían investigando hasta altas horas de la noche, en las cuales Sakura se iba casi dormida a su casa, lo cual me daba algo de pena al ver ese bello rostro cansado. En verdad lo daba todo para poder terminar con eso y tranquilizarme a mí y a Asami, pero por el momento no teníamos ni una sola pista sobre ese hombre y sus intenciones. Era simplemente frustrante.
Sin embargo, dejando ese tema de lado, agradecía eternamente que Sakura estuviera con nosotros, ya que entre los tres parecíamos una familia unida y feliz, a pesar de la situación. He estado bastante calmado ya que hasta el momento no ha ocurrido ningún nuevo ataque por parte de ellos. Durante mi trabajo Sakura más 2 hombres de Asami eran los únicos que me acompañaban discretamente, y casi no los veía, ya que estaban escondidos en puntos ciegos para vigilar que todo a mi alrededor estuviese bien y en calma. Mientras que Asami trabajaba a veces casi todo el día en su oficina y llegaba a altas horas de la noche, encontrándome dormido a mí en mi cuarto y a Sakura dormida en el sofá.
Y así todo eso se volvió costumbre por 3 meses…
Meses en los que se volvieron raros para mí y eso Sakura era la única quien lo notaba. Ya que últimamente andaba bastantemente bipolar y esos cambios de humor parecían poner a Sakura de mal humor. A veces estaba con bastante energía y otras veces muy cansado. También me antojaba de cosas bastante raras, y hasta a altas horas de la noche, en lo cual mandaba a uno de los hombres de Asami a cumplir con esos “Raros deseos” que ansiaba comer. También me levantaba horrible; los mareos eran como golpizas en la cabeza y el estómago, también vomitaba todo lo que comía y hasta lo que no. Lo bueno era que Asami nunca estaba cuando eso, y cuando estaba solo me encontraba comiendo. Sakura solo me dice que tengo que ir a ver a un médico porque parezco estar bastante enfermo.
Y yo me quedo como…. ¿Y de qué carajos lo estaría si estoy perfecto?
Y no importa cuántas veces Sakura me ordenara que fuera a ver un médico la respuesta era simplemente NO. Ni loco iría a un maldito hospital y no permitiría que me llevasen a uno hasta que no fuera estrictamente necesario.
Pero dejando todo eso de lado… Todo va bien… Todo va bien…. Hasta que el verdadero infierno que destruya mi vida entera comience… Ahora…
fin de la narración de Akihito.