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El omega del emperador por minima

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Notas del capitulo: Para quienes no conoscan estos son personajes de Voltron, la version que esta haciendo Netflix, es solo una caricatura de mechas en el espacio en forma de leones que luchan contra un imperio malvado si quieren saber la trama.
Tambien los invito a mi canal de Youtube Iranea Barrera a ver fanarts entre otras cosas
2.- No todo siempre sale de acuerdo al plan

Muchas veces la gente planea cosas, planes a corto plazo como por ejemplo ir a comprar la leche antes de regresar a casa, o planes a mediano o largo plazo que implican más tiempo, como por ejemplo ir al gym durante meses para tener un cuerpo de ensueño. Y también hay veces que estos planes no se cumplen por varios factores, porque se nos olvida hacer las cosas, porque perdemos motivación de continuar, o por diversos factores externos que nos impiden lograr nuestras metas.

Digamos que ese día para muchos se les arruino sus planes.

Lance ya le había contado sobre su pequeño predicamento a su mejor amigo sobre sus pastillas y discutieron que si aún existía la dinámica de alfa/beta/omega en los demás planetas en el universo y vida inteligente por lógica algunos también habían inventado supresores, después de todo la Tierra estaba a cientos de años de distancia en tecnología de vario de esos planetas y tal vez incluso encontrarían supresores más efectivos que unas simples pastillas, quizás parches o algo por el estilo, lo cual le encantaría a Lance, ya que a pesar que ya se había acostumbrado a tomar sus pastillas era irritante tener que recordar beberlas a las horas y algunas eran muy grandes que molestaban pasarlas por la garganta.

Tal vez Koran supiera de un lugar donde vendieran supresores, el hombre parecía una enciclopedia ambulante de conocimiento intergaláctico algunas veces por lo que siempre podían acudir a él con dudas o información de todas las cosas nuevas que encontraban en su viaje.

Se los diría hoy cuando todos estuvieran reunidos, entre más pronto consiguiera más supresores estaría más tranquilo, es lo que pensaba el castaño.

Pero este jamás logro decírselos en persona.

Algunas de las misiones que hacían surgían de improvisto, esta fue una de ellas donde captaron una señal de socorro, a pesar de que ya habían derrotado al rey Zarkon aún no habían desmantelado tan rápido como quisieran al imperio galra, Allura había explicado que sería aún un trabajo en progreso pero ya eliminando a su líder del camino los galras al final serian derrotados.

Mientras eso ocurría Voltron debía seguir existiendo dejando atrás de nuevo la idea de regresar a su planeta natal por el momento, aunque ahora eran más optimistas con respecto a derrotar al imperio galra, especialmente Allura.

Quizás esa confianza fue que los hiso bajar la guardia, quizás pensaron demasiado que las cosas mejorarían una vez derrotaran a Zarkon, pero derrocar un imperio no es tan sencillo, ciertamente Voltron dio buenos aciertos, buenos golpes, pero se enfrentaban a una organización que se mantuvo existiendo por 10, 000 años.

Fueron a la llamada de socorro, era una trampa.

No había señales a primera vista que otras naves estuvieran en ese sector, pero también existían cerca de una docena de asteroides flotando cerca de la localización de la señal de socorro, de la cual provenía de una nave comercial en una de las lunas de ese sistema desolado. El alienígena que estaba fuera de la nave era un solo hombre, de piel verde y ojos grandes, les dijo que el motor ya estaba viejo y dejo de funcionar, todas mentiras.

Antes de que se dieran cuenta ya estaban rodeados de docenas de naves galra, y de acuerdo a Koran un par de buques galra se acercaban a gran velocidad.

Todo fue tan rápido, un momento están ayudando al supuesto comerciante y al siguiente tratan de realizar una estrategia para enfrentarse a todos los enemigos que los estaban rodeando y rescatar a dicho alienígena que había mandado la señal de auxilio en un principio para descubrir que en realidad él fue quien dio la señal a las naves de que los paladines de voltron habían respondido a su llamado.

Lograron subir a la nave castillo, tripular los leones pero el enemigo supo alejarlos unos de otros y mantenerlos separados hasta que los buques llegaron. Cada león por separado era poderoso, y juntos creando a voltron eran prácticamente imparables, pero no los dejaban unirse y cada vez se les hacía más difícil atacar y defenderse independientemente, si Lance tenía que compararlo era como ser atacado por una colmena de abejas, ya que en la confusión de los ataques no estabas 100% al tanto de tu alrededor.

-¡Chicos! ¡Los escudos del castillo han perdido potencia! ¡Se han infiltrado! ¡Alguien entro a la nave! Necesitamos que alguien venga a darnos refuerzos- la voz de Koran llena de pánico llego a sus oídos.

-Estoy cerca, voy en camino chicos- dijo Lance congelando un par de naves que no le daban tregua y dirigiéndose al castillo de Altea.

-Yo también voy, solo me deshago de estos tipos- dijo Pidge logrando esquivar los ataques de las naves al último segundo.

Si perdían el castillo estarían en grandes problemas, aun así podría ser reparado si sufría daños, pero si perdían a la princesa alteana y a su ayudante estarían completamente perdidos, no más información sobre el espacio y todas sus rarezas desconocidas, ya no tendrían una base donde sentirse seguros mientras viajaban, no existirían más viajes por túneles de gusano llevándolos en segundos a grandes distancias, y ya no tendrían a dos de sus amigos.

Nadie quería que ocurriera eso.

Lance fue el primero en regresar al castillo, había un hoyo grande en el casco de este por donde seguramente algunos galras se habrían metido, por lo que dejo a su león y se metió inmediatamente dentro del castillo.

-¡Allura! ¡Koran! ¿Están bien?- pregunto a través del comunicador de su casco esperando no haber llegado demasiado tarde.

-Sí, nos encerramos en el puente de mando ¡apresúrense! Quien sabe que harán esos malvados galra a la nave- la voz llena de pánico de Koran no se hiso esperar.

La última vez que habían perdido al castillo contra algún galra enfrentaron muchos problemas para repararlo, al menos esperaba que esta vez él no terminara tan mal herido por fuego enemigo literalmente.

-Ya estoy aquí-

-Lance, busca a los polizontes y trata de desacerté de ellos. No podemos permitir que le hagan daño al castillo-

-Lo sé. ¿Tienen alguna idea de donde están?- sabía que el tiempo era crucial en estos casos, debía encontrar al enemigo dentro de la nave para evitar que causaran daño al castillo o a la princesa y Koran.

No era necesario que Allura o Koran le contestaran esta vez, un par de disparos laser pasando muy cerca de su rostro le dijo que los galra no estaban tan lejos, de hecho justo estaban al otro lado del pasillo en el que se encontraba.

Busco un lugar donde cubrirse de los ataques del enemigo y lo único que pudo conseguir fue acomodarse tras un pilar en los pasillos. Por lo que había visto era un par solamente, en ataques cuerpo a cuerpo no era el mejor, ni era tan listo como Pidge o Hunk, pero si era un enfrentamiento a larga distancia su puntería era la mejor, solo debía tener cuidado que ninguno de los disparos le diera a él.

-¡¿Qué está pasando Lance?! ¿Sigues ahí?- Allura se preocupó al no seguir escuchando la voz del paladín azul, si pudiera saldría del puente a socorrer a su amigo pero su deber era quedarse manejando la nave para servir de apoyo a los demás paladines que seguían afuera de la nave y crear los portales si era necesario.

-Ya no tendrán que responder mi última pregunta, ya encontré a los galra-

-¿Cuánto crees poder aguantar estando solo?-

-Mientras mantenga la distancia entre ellos y yo creo que estaré bien. No estoy en la mejor posición para disparar pero tal vez pueda darle a alguno de ellos-

-¿Cuántos hay?-

-Hasta el momento solo he visto a dos-

-Resiste Lance, Pidge y Keith ya están en camino. Trata de mantenerlos en el mismo lugar-

-De acuerdo. Aquí los espero-

Sonaba fácil decirlo pero hacerlo era otra cosa, no debía entrar en pánico. Asomo un poco la cabeza de su escondite y cuando los galra lo tuvieron a la vista dispararon nuevamente, fue lo suficiente rápido como para apartar su cabeza antes de que uno de esos disparos le diera. Al menos sabía que tenía la suficiente atención de sus enemigos para querer eliminarlo como para mantenerlos distraídos con él.

En su breve vistazo vio que estaban más expuestos que el pasillo sin tomarse la molestia de esconderse, seguramente pensando que superándolo en número ya tenían la ventaja suficiente para tenerlo acorralado y eliminarlo, y ese fue su error, porque se enfrentaban al francotirador del equipo.

Se concentró y volvió a salir de nuevo esta vez de rodillas y exponiéndose más, pero no para servir de blanco de los lasers de los galra si no para disparar esta vez él a sus oponentes, su disparo fue certero dándole en el pecho a uno de ellos y aturdiéndolo hasta arrojarlo al suelo.

Su segundo disparo dio en el hombro del otro galra, hubiera acertado en el pecho como en el primero pero el galra logro darle a él en el costado de su estómago, eso había dolido como el infierno y se ocultó de nuevo atrás de su columna.

Había tenido tan mala suerte como para que el disparo acertara en una de las partes más vulnerables de su armadura. Mientras que sabía que su arma disparaba lasers también estos no eran mortales a menos que diera en un punto vital y vulnerable, pero ahora comprobaba que las armas de los galra eran diferente y mucho más mortales en carne propia.

-Oh quiznak- tomo su lado herido y noto que algo húmedo se estaba fugando en la herida, era sangre.

Miro su mano, a pesar de que sus guantes eran negros pudo distinguir la mancha que había dejado la sangre, solo esperaba que la herida no fuera tan grave y que sus amigos llegaran pronto.

-Lance ¿No dijiste que solo había dos de ellos?- la voz de Pidge llego a través de su comunicador, por lo que podía oír de fondo alguien estaba luchando.

-Yo no dije que hubiera solo dos, dije que solo veía a dos. Uno de ellos creo que ya lo noquee con un disparo-

-Pues nosotros encontramos a uno más y es muy fuerte, no creemos llegar contigo pronto-

Sabía que enfrentarse a un galra cuerpo a cuerpo era difícil para un humano, físicamente eran más fuertes y agiles, cuando se enfrentaron al miembro de la espada de Marmora que se metió a su nave entre todos no lo pudieron detener. Pero Keith había entrenado mucho desde entonces, y Pidge era lo suficientemente inteligente para aprender de sus errores y crear una estrategia para enfrentarlo.

-De acuerdo, suerte muchachos-

No les dijo que estaba herido, ellos tenían igualmente suficientes problemas por preocuparse por uno más como este y desconcentrarlos en su pelea.

Escucho pasos acercarse, seguramente el galra había notado que había acertado en el blanco y estaba listo para acabar con él, pero esto no acababa tan fácilmente, Lance no lo dejaría. Espero hasta escuchar los pasos cada vez más cerca y se arrojó al suelo para disparar al soldado enemigo, tomo tan de sorpresa al otro sujeto que funciono.

Contra todo pronóstico había derribado a dos galra él solo, estaba orgulloso y muy cansado, lo único que quería era entrar en una de las capsulas medicas tenía la nave y descansar.

-¡Ahh! ¡Alguien! ¡Lance! Necesitamos ayuda, este tipo es demasiado fuerte- la voz de Pidge le dijo que no descansaría en un futuro próximo.

-¡Pidge! ¡Allura ¿Dónde están ellos?!-

-A un par de pasillos del tuyo, Shiro y Hunk han mantenido bajo control las naves enemigas pero no sé por cuanto más tiempo puedan resistir, voy a abrir un portal pronto-

-De acuerdo, iré a ayudarlos-

Como pudo se paró y fue al encuentro de sus amigos, lo que se encontró fue a un galra con una armadura negra muy diferente a la de los soldados que habían enfrentado antes, o habían cambiado de diseño de las armaduras o este sujeto tenía un rango diferente al de un soldado común.

Pero dejemos de lado la moda militar de los galra en estos momentos, lo más importante es que debe preocuparse ya que Keith está luchando con este galra con todo lo que tiene y está perdiendo, tomo su arma y apunto pero el sujeto parecio ya haberse dado cuenta de su presencia por lo que en un rápido movimiento desarmo al paladin rojo y con un fuerte golpe lo mando volando contra él.

-¡Ugh!-

Definitivamente eso no era bueno para su herida.

Miro a Keith y este estaba inconsciente, no sabía si era por chocar contra él o porque ya lo habían golpeado mucho antes de llegar aquí.

Lo dejo en el suelo y se incorporó, tenían que alejarse de ese tipo, debía sacar a Keith y Pidge de ahí, debía…

-¡LANCE CUIDADO!-

No hubo tiempo para planes ni estrategias o atacar, el tipo de armadura negra fue al ataque contra él, si Keith no había logrado vencerle él tenía muchas menos posibilidades. Coloco su pistola delante de él y logro detener el golpe de la espada por pura suerte, pero si había logrado evitar que le cortaran en dos no así la patada que le dio a continuación arrojándolo contra una pared y por el impacto y dolor había soltado su arma.

Era su fin, podía ver en ese casco negro su reflejo cada vez acercándose más en fracciones de segundo y la espada de su contrincante alzándose de nuevo contra él.

Pero antes de que la espada le golpeara esta se detuvo, en realidad todo el cuerpo del galra se detuvo como si de repente alguien hubiera presionado un botón de pausa ¿Qué le paso?

-Tú eres… omega- la voz del galra salió a través del casco como un susurro que le helo la sangre.

Imposible, aun con casco y él con supresores este galra lo sabía, ¿Cómo? Ya se había encontrado con otros galra antes y ninguno lo había notado.

El castillo empezó a sacudirse un poco sacándolo de su asombro y confusión, la distracción fue aprovechada por Pidge quien disparo su gancho al brazo que cargaba la espada esperando desarmarlo, pero no funciono, el galra tomo el cable con la otra mano y galo con suficiente fuerza como para levantar y arrastrar a la chica hasta sus pies.

-¡PIDGE!-

El galra la tomo por el cuello y la alzo tan fácilmente como si fuera una muñeca.

-Omega ¿Cuál es tu nombre?- pregunto el galra en voz alta.

-¿Qué rayos dices? ¿Yo no soy un maldito omega?- fue Pidge la que respondio mientras se etorcia y trataba de librarse de su agarre.

-Calla paladín verde, no te estaba preguntando a ti. Responde o tu compañera sufrirá de un cuello roto-

-Lance-

El castillo se sacudió de nuevo, si las cosas se estaban poniendo cada vez más difíciles ahí afuera seguro Allura crearía ya el portal para huir, al parecer el galra también sospechaba eso porque empezó a presionar más fuerte su agarre contra la paladín verde.

-¡No! ¡Dijiste que la dejarías si te respondía!-

-Dije que no le rompería el cuello, ahora la estoy dejando inconsciente- la chica trato de patearlo o golpearlo pero no pudo, el oxígeno era cada vez menos y todo se estaba oscureciendo.

La espada del galra estaba apoyada muy cerca de su cuello, aun así trato de avanzar y ayudar a su amiga, el filo del arma corto un poco su piel mientras trato de avanzar y el galra lo noto. Arrojo a Pidge contra la pared contraria y volvió toda su atención a Lance.

-No me esperaba encontrar tal sorpresa en esta misión, un omega de todas las cosas, y uno que huele tan bien-

-¿Cómo es posible?-

-Tengo excelentes sentidos-

El castillo se sacudió una vez más e incluso las luces parpadearon esta vez.

-Parece que la alteana planea abrir un portal en estos momentos, lo mejor será terminar con tus compañeros de una vez-

-¡No te atrevas!-

-¿Acaso te atreves a darme órdenes?-

-No dejare que le hagas daños-

-Tal cosa llena de coraje… ¿Qué me darías a cambio por dejarlos vivir un poco más omega?-

-¿Qué… quieres decir?-

-Sería tan fácil romper sus cuellos o atravesarlos con mi espada, son los enemigos del imperio después de todo, sus patéticas vidas son un estorbo…-

-Déjalos a ellos, yo… tómame a mí, mi vida por la de ellos- Tenia tanto miedo y rabia, se sentía tan indefenso pero tenía una cosa en claro, debía proteger a sus amigos costara lo que le costara.

Además en su mente Keith y Pidge, o cualquier otro miembro del equipo era mucho más valioso que él. Encontrarían a alguien más para pilotar a azul, su querido león azul, esperaba que cuidaran bien de este.

-Muy tentadora propuesta, ¿Cómo podría rechazarla?-

El galra extendió su mano libre hacia su rostro, Lance cerro los ojos pensando lo peor pero en lugar de eso sintió como le quitaban el casco.

-Dime tu nombre- exigió su futuro asesino.

¿Para qué? Esto le confundía, de los galra que había conocido estos seguramente ya hubieran acabado con él al estar en tales circunstancias desventajosas en lugar de hacerle esa pregunta.

-Dímelo- exigió con una voz mucho más autoritaria.

-Lance-

-Lance, paladín azul de Voltron, acepto tu oferta- y con estas palabras dichas recibió un golpe al lado de su cuello y cayo inconsciente.
Notas finales: Y ya secuestraron al lindo omega, Lotor ¿Qué harás con él? ¿Cómo reaccionaran sus amigos al saber que Lance fue secuestrado? ¿Cómo reaccionaran al saber que era un omega? ¿Por qué las palomas se comen las croquetas de mis perros? Esas preguntas se responderán más adelante.

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