La habían pasado bien todo ese día y que bueno que era así, porque los exámenes de Ryou venían pronto y para disgusto de Bakura, Ryou dejaba de ponerle atención e incluso parecía que se olvidaba de él, pero cuando Ryou terminaba con los exámenes siempre le preparaba a Bakura una gran cena con todos los tipos de carne que su yami pudiera comer, con el pasar del tiempo se habían hecho muy amigos, aunque en secreto no solo querían ser amigo del otro.
FIN.
N/A: Por hoy, el lunes continuara xD. Y ya volvimos prros xD.
“¡Nhg! B-Bakuraaa” Suspiro y gimió una voz conocida “Más por fa Ha-Ha vooor, ¡más duro, más rápido Kura!” La voz gemía más fuerte y pedía por más.
“Ha-Ha tus deseos ¡Ha-aah! Son… ¡ordenes! ¡Oh, siii Ra!” Los gemidos y jadeos de una voz más profunda aparecieron.
Dos cuerpos se movían entre las sombras de una habitación, lo único que sobresalía eran las blancas pieles de los dos cuerpos juntó a sus alborotadas melenas también del color de la nieve, ojos esmeraldas y carmesí se veían el uno al otro sin que nada lo impidiera, ni siquiera los movimientos salvajes de los dos cuerpos.
El más grande estaba sobre el más pequeño y era quien dirigía los embistes con gran fuerza y velocidad, tenía sus manos apoyadas a los costados del otro, tenía los pies estirados y se apoyaba los pies para darle más fuerza a sus movimientos de cadera. https://1.bp.blogspot.com/-lDPkpnGI9Qg/VCCtJs3f4II/AAAAAAAADRg/T6N2474t2gc/s1600/missionario.jpg Mientras el más pequeño se aferraba al cuello y caderas con manos y pies, siguiendo el compás del otro y gimiendo a todo pulmón, pero jamás sin apartar la vista del otro, lo que lo hacía aún más erótico.
“¡Ryouuu por RA! Estas tan apretado ¡aaaaah!” Siguió con los movimientos de cadera hasta que toco un punto dulce del niño que estaba bajo de él.
“¡AAAAAH! SI KURA MÁS AAAAH AAAH HAZLO DE NUEVO AAAH SIII” Por fin dejó los ojos carmesí para cerrar los suyos y echar la cabeza hacia atrás por el placer que le daba el otro al seguir golpeando su punto dulce de manera muy salvaje.
Bakura bajó la cabeza para besar con ferocidad y pasión a Ryou “Ha-Ha-Ha Tócate y mírame ¡aaah! No podré aguantar más hazlo ¡Ha-aaaah!” exigió el oscuro al sentir llegarse al clímax.
El menor lo hizo, bombeaba su erección al ritmo de los poderosos embistes con una mano mientras mantenía la otro en el cuello de Bakura, también sentía el clímax llegar pronto y levantó la mirada a quien se estaba entregando, sus gemidos aumentaban de volumen según su clímax también aumentaba.
“¡Kuuuuuraaaaa!” Su mano, junto a al pecho y abdomen de ambos se llenaron de ese espeso liquido blanquecino.
Bakura sintió al otro apretarse más y no lo soportó “¡Aaaaaaaaah Ryouuuu!” dando unos últimos empujes llenó el interior del niño con su semilla, que se terminó escurriendo entre las piernas de este, manchando las sabanas.
Salió de Ryou para acostarse a su lado tratando de regular su respiración cerrando los ojos y Ryou se volvió para poner una mano sobre el pecho del oscuro y se acercó a su oído y diciendo en voz baja: Esto aún no ha terminado. Otra mano se posó sobre el otro lado de su pecho y escuchó la misma voz del lado contrario al anterior y dijo “Esto apenas comienza, Kura” ¡¿que rayos?! ¡había dos personas en su cama!, pero al intentar abrir los ojos todo desapareció.
Pov Bakura
Abrí los ojos de golpe y me apoyé en mis brazos para alejarme de la cama N/A: Recordemos que Bakura duerme boca abajo, estaba respirando muy rápido y también estaba sudando. No puedo creerlo, tuve un sueño húmedo con mi hikari, ¡UN SUEÑO HUMEDO CON UN RYOU! Y no solo lo sabía porque aún lo recordaba por haberlo soñado hace unos momentos, sino porque también sentía algo pegajoso en mi ropa interior y porque aún tenía una erección, mi cara se estaba calentando, nunca me había pasado eso en toda mi vida, ni siquiera cuando fui adolescente por primera vez en mi vida pasada, sí, había tenido sueños húmedos, ¡pero eran distintos! En aquellos veía a otros hacerlo, nunca verme a mí con alguien más ¡y menos con Ryou! Pero… se había sentido tan real, como si en realidad estuviera allí y esa mirada que me dedicaba, no era del inocente niño que conocía, pero me había gustado verla y que se la dirigiera solo a mí, me sumergí tanto en ese pensamiento, sobre esa erótica y seductora mirada que había fantaseado que se me olvidó que mi ropa interior estaba mojada y me fui acostando lentamente inmerso en mis pensamientos, crucé sus manos bajo la almohada mirando hacia la pared para después cerrar los ojos, aún hipnotizado por mi imaginación, sin saber que esto me jugaría una mala pasada.
Pues volví a soñar con Ryou, pero esta vez no era yo quien estaba con él, era otro, ¡NO! ¡NO SOLO ERA UNO, ERAN 4 Y LO ESTABAN MANOSEANDO POR TODOS LADOS Y ÉL GEMIA POR ELLOS! ¡LO PEOR ERA QUE TENÍA ESA MIRADA CON ELLOS TAMBIÉN! ¡ESA MIRADA ERA MÍA! ¡SOLO MÍA, INLCUSO ÉL ME PERTENECÍA A MÍ!
Tenía dos arrodillados a sus costados y los masturbaba con cada mano, tenía a otro idiota entre sus piernas penetrándolo constantemente y el otro maldito imbécil estaba arrodillado en la cara de MÍ hikari con las manos apoyadas en la pared, mientras movía sus caderas contra la cara de mí luz https://s-media-cache-ak0.pinimg.com/736x/7d/1b/f4/7d1bf41db03be783e57a6c9ce4ec07a9.jpg
Yo estaba a un lado de la cama, pero estaba algo lejos y podía ver la cara de Ryou perfectamente desde donde estaba, miraba a ese bastardo como me miraba a mí, se dio cuenta de mi presencia, volteo su mirada a mí sin dejar de trabajar en el otro hombre, su mirada cambió, ahora era de desprecio, como si me aborreciera, se volteó de nuevo para seguir viendo al otro y su mirada volvió a ser pervertida y seductora ¡se estaba burlando de mí! Y esto no me excitaba, me hacía enojar y mucho ¿pero porqué? A caso eran… ¿celos? No, no podían ser celos, yo no siento nada por Ryou… ¿verdad?
Vuelvo a centrarme en Ryou y la ira me vuelve a dominar, está bien creo que sí son celos, tal vez me estoy enamorando, pero eso no es posible, porque yo no conozco el amor, yo dejé de saber que era eso hace milenios cuando mataron a toda mi familia y cuando Zork me arrebató todas las emociones humanas que fueran a estorbar con “nuestro plan” él no quería que yo me distrajera con emociones o sentimientos como eran el amor y la necesidad de la reproducción por decirlo de alguna manera, nunca encontré el amor de nadie, nunca tuve la oportunidad siquiera de buscarlo, no tengo experiencia con esto ni nada de paciones carnales, por lo que en mi corazón se terminó de forma la barrera que impediría recibir daño de otros ¿Cómo era posible que este niño estuviera atravesando las barreras de mi corazón tan fácilmente? Creo que desde que volví a la vida nuevamente y lo volví a ver de nuevo por primera vez en mucho tiempo fue cuando empecé a tener sentimientos por él.
Pero… no creo que el sienta lo mismo, es decir, después de todo lo que le hice ¿Por qué habría de tener algún sentimiento de cariño hacia mí? Lo que necesito es salir de aquí ya no soporto que esos malditos lo estén tocando así ¡solo yo puedo! ¡nadie más que YO ¡
Trato de dirigirme a todos esos hombres para quitárselos de encima a Ryou “¡SUELTENLÓ” y antes de llegar, de nuevo me levanto de repente respirando con rapidez y sudando otra vez, fijé mi mirada en la almohada bajo de mí pensando en lo que había pasado, seguía molesto por lo que vi, mi ceño estaba fruncido y mi mandíbula apretada con fuerza, después de unos momentos mi respiración se iba regulando y mi enojo también iba pasando, pero mi ceño seguía fruncido, voltee la mirada para encontrarme con un par de ojos esmeralda de expresión preocupada viéndome, Oh no.
El hombre de mis húmedas fantasías estaba allí, a un lado de mi cama arrodillado. Me asuste y no sé porque, así que rápidamente me arrastré hasta topar con pared y tape rápidamente mí cuerpo hasta las caderas, la expresión de Ryou ahora estaba más confundida.
“Cálmate Kura, soy yo” Dijo sentándose en mi cama apoyando una mano en ella y acercando la otra a mi cara, yo la voltee para evitar el contacto y apreté las sabanas en mis manos, aún sin saber porque, pero cuando su mano hizo contacto con mi mejilla, inhale sonoramente por mi boca mientras cerraba los ojos al contacto dejando mi boca entre abierta para seguir respirando por ahí.
Su mano era increíblemente suave y tibia, me destensé y me apoyé un poco en su mano, era tranquilizador, su luz me tranquilizaba y eso era extraño.
“Eso es cálmate, dime lo que paso ¿tuviste una pesadilla?” Su calmada voz retumbó en mis oídos, pero respondí, no podía decirle lo que paso, así que le mentí.
“Sí, fue una pesadilla” Bueno realmente no era una mentira, el segundo sueño fue una total pesadilla para mí.
“¿Quieres decirme lo que soñaste?” Si lo hiciera me odiarías seguramente.
“Prefiero no hacerlo, no quiero recordar” Tampoco era mentira, no quería volver a recordar el verlo siendo tocado por esos malditos, aunque sé que no existen, me enoja que sí pueda pasar.
“Está bien, entiendo ¿Quieres seguir durmiendo? Aún es algo temprano, son las 7 apenas” Aún no soltaba mi mejilla, abrí los ojos para verlo y responderle.
“No, la verdad quiero ir a bañarme, estoy muy sudado” Era por eso, pero también es porque siento como si me hubiese orinado encima, pero sé que no es eso.
“Está bien, entonces preparare el desayuno” Me sonrió y arrastro su mano por el resto de mi mejilla hasta que desapareció de ella, se levantó de la cama y salió de la habitación.
Había un problema, mi ropa interior estaba sucia y no podía dejar que Ryou la viera cuando fuera lavarla, por lo tanto, me toca a mí lavarla ¿y cuál es el problema? Bueno el problema es que no sé cómo usar esa maldita máquina, nunca eh visto a Ryou usarla y tampoco tengo recuerdos suyos de cómo usarla. Supongo que tendré que ingeniármelas, me fui a bañar y cuando salí y me puse la ropa, agarré la que estaba sucia y bajé rápido para que Ryou no me viera y fui al sótano donde estaba la lavadora N/A: Como en los Simpson xD vi una perilla que decía lavado rápido, supuse que era esa y que debía girarla, levanté la tapa y metí la ropa, la volví a cerrar y giré la perilla.
Esperé hasta que terminó, no era posible, no se había limpiado por completo, entonces ¿cómo y para que servía esta cosa? Noté una pequeña bolsa a mi derecha, la agarre y leí la etiqueta.
Claro, con razón no se había limpiado, tenía que haber echado un poco de esta cosa antes, así que lo eché y la encendí de nuevo el aparato. Nuevamente cuando se detuvo, saqué la ropa para ver que esta vez sí se había limpiado ¡GRACIAS A RA! No sé que haría si no hubiera funcionado.
Salí del sótano y fui a la cocina, Ryou estaba terminando de preparar el desayuno, me senté y lo vi moverse de un lugar a otro en la cocina, hasta que fue a sacar los platos y se estiró para alcanzarlos poniéndose de puntillas, su trasero resaltaba y no podía evitar mirarlo, me quedé embelesado, hasta que los alcanzó y se dio la vuelta, por lo que aparté la mirada para que no sé diera cuenta, estuve pensando sobre la aceptación de mis sentimientos, soy un idiota por no haberlo hecho antes, es decir todos los pensamientos que salían de repente sobre él y lo observador que me había vuelto con él eran indicadores de la existencia de estos sentimientos, había comenzado a notar que sus ojos brillaban más cuando reía y si sus ojos ya eran hermosos por si solos, cuando ocurría esto era algo digno de ver, también notó que el cabello de Ryou era más suaves y sedoso que el suyo, así como que era más blanco y lo hermoso contraste que hacían sus sonrojos con su piel, cuando era un espíritu nunca había notado esto.
Comimos el desayuno y al medio día el almuerzo, eran 2:03pm, Ryou estaba en el sofá o eso creo, la última vez que bajé estaba allí hablando por texto con sus amigos supongo, decidieron no salir, porque el cielo estaba muy oscuro, era obvio que llovería, así que decidieron no salir a ninguna parte.
Yo estaba en mi habitación sentado en el escritorio que había allí viendo por la ventana, estaba esperando a que lloviera, me encanta la lluvia, en Egipto no se veía con tanta facilidad y cuando era niño juagaba con mis amigos de la aldea con ella, siempre terminábamos enfermándonos todos, pero al final valía la pena.
Y hoy no iba a perder la oportunidad de sentirla de nuevo, sonaban truenos por todas partes, los pájaros cantaban para que la lluvia llegara y el olor a húmedo se hacía notar más.
Hasta que al fin llegó, pequeñas gotas cayeron en la ventana y otras sonaban en el techo de la casa y mi cuerpo picaba en ansias por tocarla y no esperé más, me levanté de la silla del escritorio y abrí la puerta de la habitación para después bajar con calma las escaleras, aunque por dentro querías correr hacia a fuera, como esperé, Ryou seguía allí en el sofá con su celular.
Fui hacia la cocina, dónde abrí las puertas de cristal que me llevarían hacia el patio trasero, para cuando llegué la lluvia ya había incrementado su cantidad y velocidad. Eso era excelente, con más rapidez me empaparía.
Salí y la sentí, fue mejor que como lo recordaba que era, de nuevo me hacía sentir libre, me hacía sentir paz, calma e incluso algo de felicidad. De nuevo me hacía olvidarlo todo, me sentía como un niño de nuevo y eso era grandioso.
Elevé mi cara al cielo, terminando de llenar mi rostro con el líquido de la vida, Caminé hacia el único árbol en el patio, no era pequeño, pero tampoco era gigante como algunos que yacían en el parque, me senté bajo el árbol, disfrutando de la lluvia aún con la cabeza algo elevada al cielo.
No sé cuánto tiempo estuve allí, pero estaba comenzando a quedar dormido hasta que escuché una suave voz que clamaba mi nombre.
“¡Bakura! ¡¿que estás haciendo ahí fuera?! ¡te vas a enfermar si te quedas ahí, ven tienes que entrar!” La preocupada voz de Ryou sonó por todo el patio y seguramente más haya.
“Me gusta la lluvia, no quiero ni voy a entrar” Tengo un plan y espero que funcione.
“¡¿Cómo que no vas a entrar?! No te puedes quedar afuera con toda esta lluvia” Espero que funcione.
“Entonces ven por mi” Le dije abriendo los ojos para mirarlo, frunció un poco el ceño y apretó el agarre que tenía en el marco de las puertas de cristal, pensé que no había funcionado, pero después vi cómo se movió hacia delante, comenzando a caminar hacia mí, comenzó a empaparse en cuestión de segundos, se veía taaaaan sexy, sabría que se vería bien, pero jamás a un nivel así.
Su cabello se había alargado y alisado más, su ropa se pegaba a él y las gotas recorrían su cuerpo, el cabello de su frente le tapó algo de visión, por lo que lo acomodó con su mano, lo que lo hizo aún más sexy y me terminó de embobar.
Se arrodilló frente a mí y jaló de mi brazo “Vamos, hay que entrar, no podemos quedarnos aquí” Pero yo no iba a dejar pasar este momento.
Me solté de su agarre para ser yo esta vez quien le agarrara los brazos y lo jalara contra mi pecho para después abrazarlo con la suficiente fuerza como para que no escapara, pero que tampoco le lastimara.
Me miró y dijo “¡¿Kura que haces?! ¡no nos podemos quedar aquí! ¡¿cuántas veces debo decírtelo!? ¡Te vas…no, nos vamos a enfermar si nos quedamos bajo la lluvia!” Lo miré a los ojos ya sin importarme si me perdía en ellos.
“¿Por qué no te relajas, dejas de preocuparte tanto y lo disfrutas?” Forcejeo un poco, pero después se detuvo para quedárseme mirando.
Los dos estábamos allí de rodillas siendo mojados por la maravillosa lluvia, poco a poco fui aflojando el agarre, quería que estuviera ahí conmigo, pero tampoco quería obligarlo. Me sorprendió que en vez de levantarse e irse o intentara nuevamente llevarme a dentro, solo se sentó de piernas cruzadas frente a mí y levantó la cabeza con ojos curiosos al frondoso árbol encima nuestra.
Me volví a sentar, pero esta vez con las piernas abiertas para que Ryou quedara dentro de ellas, cerré los ojos disfrutando de las dos cosas que me hacían sentir paz. Todo estaba en calma, hasta que sentí un peso en mi pecho, mi corazón se aceleró como nunca, Ryou había recostado su espalda en mi pecho y acomodado su cabeza en mi hombro para poder seguir viendo hacia el cielo, no sabía que hacer, no sabía si poner mis manos en su cintura para decirle que estaba bien que estuviera así o si no moverme en lo absoluto para que no pensara mal.
Opte por la primera opción esperando no equivocarme y arruinarlo todo, para mi sorpresa era la opción indicada, pues se acomodó aún más contra mi cuerpo, sentía ms mejillas arder, por lo que estaba viendo hacia el lado contrario de Ryou. Esto me confundía mucho, pues no sabía si Ryou lo hacía por un cariño amistoso o por algo más y creo que es más por la primera opción ¿Cómo alguien como él se fijaría en un salvaje como yo? Él es educado, respetuoso, amable, sincero, puro y así podría seguir con su descripción, pero ¿yo? Yo soy un idiota, un irrespetuoso, soy el maldito que quiso matar a sus amigos y lo hirió de muchas maneras, yo soy un incivilizado animal, un salvaje imbécil que solo conoce la venganza y el dolor ¿Qué vería en mí?
Pasamos creo que como una hora bajo la lluvia hasta que Ryou me ofreció de nueva cuenta entrar a la casa porque ya se hacía tarde y se estaba comenzando a hacer frío, por lo que esta vez si acepte.
Fuimos a dentro directamente al baño a por unas toallas para secarnos un poco, Ryou me dijo que me fuera a bañar con agua tibia para que no me resfriara, mientras él hacía lo mismo en el baño que estaba en su habitación.
Más tarde cenamos, aún no paraba de llover, pero lo hizo por ahí de las 9:30 pm, hora a la que fuimos a dormir, pues estábamos algo cansados ya y Ryou tenía colegio mañana y sí, para mi desgracia, cada uno en su propia habitación.
Pov Ryou
Desperté por un ruido en la cocina creo, no sé que hora era, no abrí los ojos en ningún momento, pues si lo hacía, sabía que no podría volver a dormir tan fácil y no podía darme ese lujo, pues mañana tenía colegio, además de seguro solo era el crujir de la madera o del metal de las ventanas hacia el frío, pues sé que durante el frío de la noche algunos materiales de la casa se encoger, por lo que crujen un poco y durante la mañana se estiran y también crujen por esto.
Traté de volver a dormir, pero otro sonido algo más fuerte se escuchó de nuevo y no sonaba como el crujir de los materiales por el frío, sonaba como si fuera provocado por…una persona y no creo que sea Bakura, esto no es bueno. Cuando me disponía a abrir los ojos y tratar de llamar a Bakura, unas manos grandes taparon mi boca y apresaron mis manos.
Abrí los ojos, pero solo veía negro y las manos de mi “agresor” traté de gritar, pero lógicamente no salía nada, estaba realmente asustado ¿Qué tal si me trataban de hacer algo? Como golpearme hasta matarme o aún peor… ¿que tal si era un maniático sexual que quería con cualquier cosa que tuviera pulso? ¡NO! ¡NO LO PERMITIRÉ!
Me solté como puede de mi “agresor” y le solté un puñetazo en la cara, no sé cómo le di en toda esta oscuridad, pero no puedo dejar que me abusen sexualmente y menos en mi propia casa, ya tengo suficiente con los matones que me molestan algunas veces en el colegio.
Pero esto solo empeoro las cosas, pues debió haberse enojado, ya que ahora me tiró a la cama y me agarró las manos y las puso sobre mi cabeza y tapó mi boca de nuevo y aunque gritara, nadie me escucharía, pues la habitación de sus padres en la que dormía él ahora estaba insonorizada de manera en que solo escuche lo que ocurre afuera de la habitación y no lo de adentro, se había puesto más rojo que un tomate cuando había descubierto esto, pero ahora realmente había cometido un grave error.