Fugaku abordo la limusina y sin duda se llevó una sorpresa —Miko.
—Cariño— lo besó y se sentó sobre su regazo —Bienvenido.
—Te extrañe— le besó la mejilla —¿Por qué no saliste?
—No quería que Gaara-kun me viera.
—¿Y eso?
—Veras...
Mikoto relató todo lo que había pasado esos dos meses.
—Entonces... ¿Naruto-kun es hijo de Minato?
—Posiblemente. Le dije a Naruto que no estaba 100% segura.
—Entiendo. Te ayudaré con los preparativos.
—¿A dónde Uchiha-sama?
—Al centro comercial xxxxx— respondió Mikoto.
—Sí, Uchiha-sama.
Fugaku miró a su esposa. Sin duda estaba feliz con el noviazgo de Sasuke. Y si era verdad ¿Qué tenían sus hijos con esa familia?
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Naruto atendió al último cliente y comenzaron a cerrar. Ese día cerrarán a las 6. Y ya se imaginaba el porque. Miró a su novio.
Media hora antes había llegado Sasuke a entregarle unas bolsas, y a decir que se iba a cerrar temprano.
—Sasuke-kun. Ya está todo listo. El dinero ya fue guardado. El inventario también. Le hice una lista a Uchiha-san de lo que falta para el lunes.
—Muchas gracias Ino. Descansen. Yo cerrarse la puerta.
—Bien. Naruto fue al baño.
—Si.
—Nada de espiar.
—No lo haré— resoplo. Si lo hacia su Naruto le daría una paliza.
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Entró al baño y se ducho. La cafetería contaban con una sala de personal. La cual estaba equipada gavetas para que guardarán sus cosas. Grandes espejos y dos baño, y una ducha aparte. La cual contaba con muchos seguros por dentro, para cerrarla bien. Normalmente él se ducha a llegando a casa.
Se secó y tomó el boxer. La pelinegra le había enviado ropa para la ocasión. Lo agradecía. No hubiese sabido que usar.
Cuando Sasuke llegó y le informo que esa noche llegaron y que los verían en una hora, tembló.
¿Se mi familia?... ¿Y si no lo eran?
Naruto, cariño, sino lo son se contratará un investigador.
Solto un suspiro y salió del baño. Ya no había nadie. Se vistió lentamente y miró en el espejo... ¿Soy yo?
—Naru ¿Estas listo?
—Creo...
—¿Crees?— entro a la sala y se quedó paralizado... Sonrió satisfecho por la elección de su madre —Estas más que listo.
Se sonrojo al notar la mirada de Sasuke. Tomó sus cosas y abandonaron la sala.
Sasuke cerró el local y abordaron un taxi a casa. Naruto se mordisqueo los labios —Todo saldrá bien.
—¿Y sí no son la familia que busco?
—Ya te dijimos, te ayudaremos a encontrarlos— le sujetó la mano —Todo estará bien.
Asintió y sujetó fuertemente la mano. Tenía miedo.
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El taxi se detuvo frente a la gran mansión. Naruto miró sorprendido el lugar. No sé acostumbraba a la belleza de esa casa... Oh más bien palacio. Era demaciado grande para 6 personas.
Aún recuerda la primera vez que la visitó. Sasuke y él, tenían que hacer un trabajo juntos así que se reunieron en la casa del azabache. Casi se desmaya cuando vio la casa.
—Naru, vamos.
—¿Eh?— se dió cuenta de que Sasuke esperaba a que bajará del taxi.
Bajó del auto y se dirigeron a la entrada.
En cuanto abrieron, parecía que habían entrado a otro mundo.