"Tú"
Pov Ji Ho
Una…horrible…pesadilla.
¿Acaso este día podía arruinarse aún más?
Se suponía que esto sería algo inolvidable. Toda la semana Joon Hyun y yo estuvimos haciendo cosas juntos, teniendo citas, llenándonos de besos y caricias, tonteando como los enamorados que somos, y realmente disfrutaba de todo esto, de estar tranquilo, relajado, solos él y yo, disfrutando el uno del otro como debería ser siempre.
Realmente había sido una semana magnifica.
Paseamos prácticamente por todo Seúl, y había guardado mi lugar favorito de todos para mostrárselo hasta el final. Realmente quería llevarlo, porque no era cualquier sitio, ese era mi lugar feliz desde siempre, uno al que escapaba cada vez que las cosas no iban bien, cada vez que estaba triste o tenía algún problema, y sinceramente para mí era especial, tanto como lo es él ahora en mi vida. Es por eso que quería que supiera de su existencia, y esperaba con ansias que le gustara tanto como a mí. Algo me decía que le encantaría, no podía esperar para que lo viera.
¿Cómo fue que todo pasó de eso…a ambos sentados en una sala de hospital esperando por buenas noticias?
*Flash Back*
-Ay cielo, me duele – me quejo – Ay…ay…ay…
-Ji deja de hacer eso, me pones nervioso – Dice él – Además…deja de moverte tanto, así no puedo hacerlo.
-Pero es que…me duele mucho - me quejo casi como un niño pequeño.
-Lo sé, pero si no te relajas, esto no funcionará – Me reprende – Relájate y déjame hacer mi trabajo ¿quieres?
-Es…agh…más fácil decirlo…que hacerlo amor.
-Confía en mi – Pide - Soy…todo…un…experto.
-¡Ver un tutorial de YouTube…no te hace un experto! – Le recalco y empuja mucho más fuerte que antes – Ahh…retiro lo dicho…retiro lo dicho.
-Eso creí – Dice y comienza a hacerlo lentamente
Después de un buen rato de arduo trabajo, no estoy tenso como al principio y sorpresivamente ya no duele, de hecho se siente bien, se siente muy bien. Jamás pensé que Joon Hyun pudiese ser verdaderamente bueno con esto, quizás le pida que lo haga por mí de vez en cuando.
-Eres un llorón, ¿no se siente mejor ahora? – comenta sin dejar de moverse, ahora con mucha más armonía que antes.
-Umm – respondo con los ojos cerrados totalmente a gusto – Si – admito - Súper Duper.
-¡Ja! Siempre supe que sería un excelente masajista – Vocifera – YouTube nunca me falla – comenta.
-Yo te nombro…mi masajista personal – anunció – “Tun-turu-rummmmm” – imito el sonido de una trompeta.
-¡Ohh por dios, es lo que siempre he querido! – Finge emoción - ¡Seré la envidia de todos!
Yo aprovecho para girar sobre la cama tumbándolo de mi espalda para luego sujetarlo rápidamente entre mis brazos y repartir una lluvia de besos por todo su rostro.
-¡Ji….jajaja…no empieces! – se queja.
-Sabes que te gusta – digo una vez que le hago caso y me detengo dejando un sonoro beso en sus labios para luego acurrucarme contra él como ya es costumbre – Gracias…ya me siento mejor.
-Me alegro de haberte ayudado – dice él – Te voy a golpear si sigues sobre exigiéndote tanto.
-No lo hago, es solo que estuve mucho tiempo de reposo así que es normal que mi cuerpo tenga este tipo de reacción al volver a su rutina de siempre – explico - ¿Para qué crees que salgo a correr a menudo, ah?
-¿Para…lucirme tu ropa deportiva? – dice y yo rio - ¡¿Qué?! Eres la única persona que conozco que se ve absurdamente bien en ropa de ejercicio. Yo parezco un saco de papas.
-No es cierto amor, podrías ponerte un saco de papas encima y seguirías siendo hermoso – digo y beso de nuevo su mejilla.
-Eso es porque tú estás enamorado de mí y me vez con el corazón – comenta – Otras personas definitivamente no piensan igual.
-Bueno, ¿y a quien te interesa lucirle entonces si no es a mí? – pregunto con una divertida mirada acusadora, aunque luego ambos comenzamos a reír.
Rodamos por toda la cama, entre besos y caricias hasta que por fin quedamos en una pose cómoda para ambos con la cual comenzamos a hablar de cualquier tipo de trivialidades.
Me gustaba eso de Joon Hyun, que su sola compañía fuese agradable, poder quedarme charlando con el de cualquier tema por horas y que siempre tenga algo interesante que decir al respecto. Podría pasarme una eternidad solo hablando con él sin nada más y estoy seguro que cada segundo sería invaluable.
-Así que…estaré aburriéndome en casa hasta la graduación – dijo mientras acariciaba el aro metálico que colgaba del lóbulo de mi oreja con sus dedos mientras yo permanecía hundido respirando el suave aroma de su cuello – Creo que aprovechare estás dos semanas para leer algunas novelas, quizás salir por allí con Yu Seok, no lo sé…quisiera cambiar un poco de ambiente antes de graduarme y comenzar a trabajar.
-Oh ¿quieres que hagamos un viaje corto? – Pregunto – Porque…tú solo tienes que decir a qué lugar del mapa quieres ir y te llevaré ahí en menos de lo que pueda pedir una avioneta privada.
-¡¿Qué?! No señor – se niega de inmediato y no me sorprende para nada – Nada de avionetas privadas, para empezar eso no sería nada corto, y…solo era un comentario, estaba pensando en voz alta, nada más.
-¿Seguro? – Pregunto - Porque…sonabas muy sincero al respecto.
-Pues si porque…me siento así, pero no te lo digo para que corras a cumplir mis deseos como el genio de la lámpara – Dice y yo sonrió porque me ha dado una idea que no había pensado antes – Y no – niega de inmediato – Se lo que estás pensando y no, no eres un genio, eres mi novio y te amo así.
-Aishhh ¿vamos a tener esta discusión siempre que quiera darte algo? – me quejo.
-Solo si vale lo que costarían mis riñones en el mercado negro – dice él – Además, ya me diste un súper auto que no pasa desapercibido ni para los ciegos. Es más que suficiente por ahora ¿no crees?
-Por ahora – aclaro y el hace ademán de rechistar al respecto pero lo beso profundamente y no lo dejo hacerlo – Y no está en discusión…pero espera…tengo una idea – digo de pronto cuando la luz de la sabiduría llega a mi cabeza – Aun podemos hacer un cambio de ambiente…sin avioneta.
-¿Ahh si? – Dice curioso - ¿A qué te…refieres?
-¿Te gustaría ir a pasar unos días en casa de la abuela conmigo? – Pregunto y de inmediato sé que la idea le gusta porque sus ojos brillan y una sonrisa se plasma sobre su rostro – Ella siempre pregunta por ti y dice que te invite, y…bueno, no necesitamos avioneta para eso, además…así te muestro lo que más me gusta de Seúl, ¿qué te parece?
-¡Si! – Acepta sin dejar de sonreír – ¡Me encanta!
-No se diga más – comienzo a decir incorporándome en el colchón – Pon en un bolso lo que necesitas, porque nos vamos…pero ya.
-¡¿Qué?! ¡¿Ahora?! – Dice incrédulo - ¿Podemos…hacer eso?
-Claro que podemos cielo, tengo unos días libres y mi nuevo auto ya llego así que podemos ir a donde quieras, también podemos usar el tuyo – respondo – En tanto…tu madre nos dé permiso y no me asesine, recuerda que aún estoy en “periodo de prueba” – corrijo haciéndolo reír.
-Ahhh, te amo – dice y me roba un beso – Pero igual le voy a decir a la abuela Yo que nunca mencionaste sus invitaciones hasta ahora – amenazo – Vas a estar en problemas~.
-¡¿Qué?! – Digo alarmado – P-Pero…acabas de decir que me amas, ¿acaso quieres verme muerto?
Fue así como nos embarcamos en un repentino y para nada planeado viaje a Seúl.
Personalmente soy impulsivo y no soy tanto de planear meticulosamente. Cuando quiero ir a un sitio, solo…tomo mis cosas y voy allí apenas tengo tiempo, por eso, esto no es para nada nuevo para mí, aunque si lo es un poco para Joon Hyun, que parece inmensamente feliz como un niño en navidad. Ser yo quien causa esa felicidad me hace sentir demasiado bien.
-Muy bien, ya llegamos – anuncio una vez que me estaciono frente a la casa de la abuela Yoo, que apenas me ve aparcando, sale de la casa y detrás de ella mis tres perros aparecen dando vueltas alrededor del auto ladrando y moviendo a cola - ¡Mis bestias, las extrañe! – digo y apenas tengo tiempo de cerrar la puerta antes de tenerlos a los tres encima lamiéndome y babeando por todos lados. Es su manera de demostrar que me quieren – ¡Ahhhh!, ¡noo me babeeen! – Me quejo - ¡Zeus, como siempre tú, ¿qué es lo que hablamos siempre sobre babear a las personas?!
-¡Ahí están! – Grita Joon Hyun y de inmediato los tres van hacia él a repetir el proceso tirando a mi chico en el suelo - ¡Awwww, son tan lindos, jajajaja! – Él no parece para nada preocupado por la manera en que lo babean demostrando cariño, por el contrario luce sumamente feliz por eso.
-Y para la abuela, ni un “hola como estás” – se queja mi abuela haciendo que vaya corriendo hacia ella a darle un fuerte abrazo hasta levantarla en el aire como sé que odia que haga – Ahhh, gran torpe, te he dicho que no hagas eso – Se queja golpeando la parte posterior de mi cabeza una vez que está en el suelo - Además hueles a perro.
-También te extrañe abuela – respondo divertido ganándome un pellizco cariñoso en la mejilla.
-¡Joon Hyun querido! – dice ella acercándose mientras el mencionado sigue jugueteando con mis tres perros en el piso – Hasta que por fin vienes a visitarme.
-Ohh abuela Yoyo, siento no haber venido antes, si supiera – comienza a decir y mis ojos se abren como platos así que comienzo a hacerle señas para que no diga nada, haciendo que el esboce una sonrisa de maldad hacia mí.
-Me imagino. Has de estar muy ocupado, según sé, tú graduación es muy pronto, felicitaciones por tu tesis – Dice mi abuela.
-Muchas gracias, y si fue agotador todo eso, además… - comienza a decir y yo me arrodillo dramáticamente y niego con cabeza mientras junto mis manos a modo de plegaria, él muerde su labio para reprimir la risa y sé que está disfrutando mi sufrimiento – También estuve viendo un par de trabajos, para después de la graduación.
-¿Qué? ¿enserio? ¿tan pronto? – Dice mi abuela – Vaya, eso es bueno hijo, te felicito.
-Si, tuve un par de ofertas que estuve revisando haber cual se me adapta mejor – dice Joon Hyun – Escuche de Ji Ho que siempre me invita a visitarla, sobre eso…– Menciona y yo me dejo caer al piso de manera doblemente dramática, tomando incluso una flor de una planta cercana para ponerla sobre mi pecho. Soy tan buen actor que mis perros se acercan a olfatearme para saber si sigo vivo – En verdad siento no haber venido antes, pero me asegurare de hacerlo más a menudo, no sé si sabe pero…ya tengo auto – presume haciéndome sonreír. ¿No era él quien que no quería aceptarlo en primer lugar? – Y varias de las ofertas de trabajo que tengo quedan muy cerca sobre 4 ruedas, podríamos tomar el té – propone.
-Ohh, por mi encantada cariño, eres bienvenido cuando quieras – dice mi abuela – Vayamos adentro, te preparare un poco de… ¡Ji Ho!, ¿qué se supone que haces ahí tirado? – me regaña mi abuela y yo me levanto rápidamente sacudiendo mi ropa.
-¿Yo? N-Nada – respondo automáticamente – Jugando…con los chicos – digo refiriéndome a los perros.
-Aishh, ya deja de rodar por el suelo como un niño, y…no toques mis plantas – Me reclama refiriéndose a la flor que se ha quedado trabada en mi camisa – Aishh… ¿qué voy a hacer con este muchacho?
-No se preocupe, yo se lo arreglo abuela Yo – dice Joon Hyun divertido quitando la flor de mi camisa para ponerla en su cabello detrás de su oreja – Me debes una mi amor.
-¿Si cielo? Porque me parece que con lo mucho que te divertiste con mi sufrimiento es más que suficiente.
-Nahhh, no lo fue – niega – Igual me debes una.
-¿Y…te la puedo pagar con besos? – Pregunto sujetando su cintura y acercando mi boca a la suya con la intención de probar sus suaves y deliciosos labios. Pero justo cuando estamos por besarnos, escuchamos un sonoro gruñido que hace que nos separemos. Parece que a alguien le cae demasiado bien Joon Hyun y es incluso hasta celoso – Oye Zeus…yo lo vi primero amigo, así que búscate el tuyo campeón – le reclamo y Joon Hyun solo ríe.
-Uhh…tienes competencia – dice Joon Hyun – ¿Quién es un buen chico? – Pregunta y mi perro parece sumamente feliz con esa atención – Aww, es un ternurita.
-¡Yo soy una ternurita! – gruño y Joon Hyun comienza a reír.
-No he dicho lo contrario ¿o sí? – Dice y me da un pequeño pico en los labios antes de adentrarse en la casa.
-Zeus, perro malo – Digo y obtengo un ladrido y también un montón de baba de su parte - ¡Ahhh, ya deja de babearme!
A partir de ahí, cada día hicimos algo nuevo completamente diferente, comenzando desde cosas simples como tomar el té con la abuela y hacer pan y galletas, hasta visitar el restaurante más grande de todo Seúl.
Ya que mi chico es tan considerado, prefirió hacer cosas que evitaran mi exposición al público por obvias razones, pero aun así quedaba mucho por hacer, había tantas opciones que nos costaba decidir qué cosa hacer primero.
Comimos mucha comida deliciosa, nos llenamos de dulces, le compre todos los libros que…me dejo comprarle sin quejarse, aprovechando también para obtener algunos, e incluso fuimos por ropa. ¿Quién diría que disfrutaría tanto de algo tan común como eso? Es un excelente modelo debo decir.
Por las noches, nos dedicamos a ver las estrellas, y debo decir que me dio una paliza porque yo me limitaba solamente a lo básico como la osa mayor, la osa menor, orión, pegaso, pero no sabía de otras tan extrañas como ara, lyra, ofiuco, ni nada de eso. Tampoco sabía que varían con la cultura, pero mi chico sí porque es muy inteligente, cosa que me encanta. Realmente lo disfrute.
Mi momento favorito de todos era dormir con él al calor de la chimenea, como amaba esa cosa. En la casa de la abuela suele hacer bastante frío por las noches debido a que está rodeada de muchos árboles y montañas, es un ambiente muy natural debo decir, por lo que todas las casas vinieron equipadas con una chimenea pequeña, que con un poco de leña y un par de cerillos, lograba hacer mucho más calor que una calefacción artificial. Eso, más una buena taza de té, ahí sobre la mullida alfombra, hace un ambiente tan perfecto como su mente les deje imaginar. No podía desaprovechar la oportunidad de estar ahí con él así que nos acurrucamos en cada oportunidad que tuvimos.
-¿A dónde vamos hoy? – Pregunta Joon Hyun mientras me veía meter comida en una canasta - Es como…ahhhh… ¿un día de campo?
-Algo así – respondo con una sonrisa – Iremos a un lugar especial.
-¿Y porque no me despertaste? – Pregunta bostezando – Te habría ayudado con eso amor – dice abrazándome por la espalda.
-Es que estabas durmiendo muy cómodo y roncabas – digo divertido – Así que no quise despertarte.
-¡Yo no ronco! – Se queja dándome un golpecito en la espalda.
Yo me giro para quedar de frente y luego lo levanto para sentarlo sobre el mesón de la cocina mientras poso mi boca sobre la suya en un suave y dulce beso.
-Si lo haces – insisto una vez que nos separamos.
–Que no – repite - Además… ¿quién no iba a despertarse con…semejante aroma? – dice con una mueca de satisfacción.
-¿Cuál de todos? – pregunto ofreciéndole una taza humeante de café.
-En realidad no lo sé, pero todo huele muy bien, especialmente el café – dice él tomando un sorbo – Ahh ¿está mal no querer irme jamás para que sigas cocinándome todos los días comida deliciosa? – comenta y yo río.
-Bueno…no pero…de vez en cuando me gustaría comer de tu comida también – digo acariciando su cabello.
-No quiero presumir pero…en un par de días con tu abuela, he aprendido más a cocinar que en mis 22 años de vida – dice y yo río – Así que…tengo muchas expectativas y mucha práctica que hacer. Apenas regresemos te cocinare algo delicioso, lo prometo.
-Esperare eso con ansias – Comento y vuelvo a besar sus labios, ahora con sabor a latte vainilla.
Luego de tener la comida lista, le pedí a Joon Hyun que se colocara ropa cómoda y yo hice lo mismo, bastaba con unos jeans simples y una camiseta cualquiera. La parte que más le sorprendió fue nuestro medio de transporte, no podíamos llegar en auto, y no tenía mi motocicleta, así que íbamos a tener que usar a la vieja piper, que es algo así como el ancestro de phebe.
-Hace años…años que no me subía a una de estas – comenta una vez que nos ponemos en marcha.
-Sabes, este fue mi primer medio de transporte cuando no existían ni phebe ni el deportivo. Hacía doble trabajo, me llevaba a todas partes y además me ayudaba a hacer ejercicio – digo sin dejar de pedalear - ¿Todo bien allí atrás?
-Súper duper acá.
El camino era tal y como lo recordaba, la lluvia lo mantenía frondoso y lleno de flores. Los arboles de los alrededores son realmente altos y es impresionante como pasas de un campo abierto, lleno de casas, a estar rodeado por la naturaleza y los sonidos del bosque. EL paisaje es sin duda hermoso, sobre todo en esta época del año.
-Por dios… ¿en dónde estamos Ji? – pregunta Joon Hyun admirando todo una vez que me detengo.
-Aún no hemos llegado al lugar exacto, pero…ya falta poco – explico – Esta es una parte muy recóndita de lo que es el parque nacional. Prácticamente nadie conoce esta entrada porque muy pocos se aventuran dentro del bosque por miedo a perderse.
-¿Y…puedo preguntar porque tú sí lo hiciste?
-Pues porque yo me perdí la primera vez que vine, así que fue como lo descubrí – respondo divertido recordando con nostalgia ese momento – Ven, el camino es muy irregular así que sigamos a pie.
-¿Qué? ¿A pie? Pero… ¿vas a dejar la bicicleta ahí?
-A menos que los arboles tengan pies y puedan manejarla, se quedara justo donde esta hasta que volvamos – aseguro.
-Bueno…si tú lo dices – dice tomando mi mano para comenzar a seguirme – Ahora…explícame cómo está eso de que te perdiste aquí la primera vez.
-Ohh bueno, fue un día que estaba muy molesto por algo – comencé a decir - No recuerdo exactamente porque, pero sé que estaba sumamente furioso y quería estar solo, así que comencé a caminar sin rumbo, hasta que de pronto… ¡bam!, me vi rodeado de árboles por todos lados. De más está decir que entre en pánico, ni siquiera traía el móvil.
-¿De verdad mi amor? ¿y qué hiciste?
-Pues…ya que no sabía distinguir por donde había llegado para devolverme, decidí seguir caminando hacia el frente…o hacia lo que yo creía que era el frente – respondo con gracia – No fue muy inteligente de mi parte pero no me culpes, creo que para ese entonces aun no cumplía ni los 15 años, no pensaba como ahora.
-¿Y qué paso después? – pregunta.
-Comenzó a anochecer, así que decidí buscar un lugar en donde refugiarme del frío. Entonces…encontré esa cueva – digo señalando hacia el frente.
-¿Te refieres a esa que tiene un cartel de…“peligro”? – dice y yo río.
-Bueno…en ese momento no lo tenía y…parecía mejor opción que quedarse afuera, además de la temperatura baja no sabía si habían animales salvajes y esas cosas de película.
-¿Entonces…vamos a esa cueva? Nunca estuve en ninguna – comenta - Con tal no haya cucarachas incluidas, por mi perfecto.
-No – Niego – Lo que está al final de ella es lo que quiero que veas, porque no es solo una cueva…es más bien…un túnel.
-¿Un túnel? – repite confundido.
-Ya verás cielo, ya verás.
Después de traspasar el cartel, nos adentramos en la “cueva” y nuestros pasos hacían eco por todo el lugar. Recordaba todo como si hubiese venido apenas ayer por última vez. Por un momento la luz comenzó a escasearse casi hasta quedar completamente a oscuras, pero de un momento a otro volvió progresivamente, como si hubiese un foco sobre nuestras cabezas, hasta que al final, se concentraba la fuente de toda esa luz resplandeciendo, y además el sonido de la cascada inundaba nuestros oídos con fuerza. Allí, era a dónde íbamos.
-Esto es…hermoso – Dijo Joon Hyun mirando en todas las direcciones una vez que por fin estuvimos al aire libre nuevamente – En serio Ji.
-Lo sé – comento dándole toda la razón – Te presento…mi lugar feliz.
-Por dios, parece sacado de algún libro de fantasía – dice mientras comienza a adentrarse en el lugar – Jamás había visto nada…parecido siquiera.
-Esa misma fue mi reacción, sabía que te gustaría – digo dejando la canasta en el piso y tomando su mano – Ven, vamos a ver la mejor parte.
-¿Hay algo mejor que esto?
-De hecho si – digo llevándolo hasta la parte en donde hace ya varios años, traje algo como una especie de…ofrenda para el lugar, porque se convirtió en mi favorito y creí que…tenía que hacer algo por él – ¡Ta-Da!
-¡Ahhh…son rosales blancos! – dice con emoción – Pero… ¿cómo es que crecieron aquí?
-Yo los traje – explico – No creí que tendría suerte, pero…al parecer la jardinería se me da bien porque se multiplicaron y ahora hay de estos por todos lados – Digo tomando una de las tantas rosas y cortándola con la mano para dársela – Cuidado con las espinas – le advierto.
-Que coincidencia que hayas traído justo la flor que me gusta aquí – comenta.
-No me parece una coincidencia – digo yo – Creo que fue más bien…el destino anticipándome a lo que venía, ya sabes lo que dicen por ahí, “no existen las coincidencias, cada día caminamos hacia los lugares y personas que nos han esperado desde siempre”
-Ohh…“nada de esto es coincidencia…” – Comienza a cantar y yo sonrió al escucharlo – “Solo-solo…puedo sentir que, el mundo ahora es diferente, solo-solo…por ti, porque…Cuando me llamaste tú, yo me convertí en tu flor” – continua – Si, esa definitivamente es nuestra canción, lo tiene todo.
-Veo que te gusta, recuerdas la letra perfectamente.
-Obvio, la compusiste para mí y es importante, además es hermosa y me encanta, a veces me descubro a mí mismo…tarareándola inconscientemente.
-Awww, ¿acaso podrías ser más lindo Joon Hyun? – digo dando besitos en su mejilla – Creo que es momento de confesarte que…no es la única canción que te he escrito.
-¿Ahh no?
-Nop – niego.
-¿Y porque…yo no lo sabía? – se queja.
-Pues…porque no te lo había dicho, aunque es algo obvio ¿no?
-No me parece, ¿cómo iba yo a saber que me has compuesto más canciones si no me lo dices?
-Porque te amo, y…las canciones no solo se escriben con la mano, se escriben con el corazón también, evidentemente si tú estás ahí, todo lo que escriba en parte es para ti, como la mayoría de lo que siento – explico – Ohh…eso te convierte como en mi…musa personal.
-Awww, ¿acaso…podrías ser más lindo Ji Ho? – me devuelve la jugada.
-Deja de usar mis palabras en mi contra – digo alborotando su cabello.
-Tú empezaste – se queja – Deja de…ponerte cursi.
-Pero si tú amas que me ponga cursi - vocifero con seguridad – Es como cuando te doy cumplidos que hacen que te sonrojes, dices que no te gusta pero la verdad te encanta.
-¡Ya no me…sonrojo tanto! – dice pero contradictoriamente sus mejillas se tiñen de un hermoso tono carmesí – Además…tu cursi y yo cursi…demasiada cursilería junta.
-Pues seremos un par de cursis, siendo cursis…c-cursieando…cursimente – digo y lo hago reír con ganas.
-¿Cursieando? – Repite divertido – Eso…ni siquiera existe Ji.
-¿Ah no? – finjo sorpresa - Pues acabo de inventarlo para el team cursi.
-Ahh…ahora somos el team cursi – dice intentando no reír más.
-Si, lo somos – aseguro con las manos en las caderas – Acabo de inaugurarlo y tú estás dentro, así que considérate a partir de ahora un miembro exclusivo y fiel seguidor de Coelho.
-Eso me encanta – comenta – Yo amo a Coelho.
-Puedes amarlo pero no más que a mí – especifico y las risas se hacen presentes de nuevo – Enserio, mira que sus frases son muy buenas.
-Lo sé, tiene muchas que me gustan, por ejemplo “amor es solo una palabra hasta que alguien llega para darle sentido” – enuncia y luego acaricia mi mejilla – Ahí es donde entras tú – dice y yo sonrío.
-¿De verdad? Pues gracias, porque no me la pusiste nada fácil – Digo dramáticamente – “Lo difícil atrae, lo imposible seduce, lo complicado asusta, lo extremadamente complicado enamora”
-Pues de nada – dice divertido – De no haber sido extremadamente complicado nada de esto habría sido posible.
-“Amar a alguien…es una cosa…” – comienzo a decir.
-“Que alguien te amé es otra” –continua él.
-“Pero que te amé la misma persona que amas lo es todo” – decimos al unísono.
-Ohh dios, definitivamente somos team cursi – comenta y esta vez el que comienzo a reír soy yo.
-Vamos a brindar por el team cursi – Digo rebuscando el jugo que traje en la canasta – Traje…piña colada.
-¿Sin…alcohol y sin sombrillita arriba? – pregunta divertido.
-Tal cual, justo como te gusta el jugo de piña – digo mientras le ofrezco uno de los frascos ya abiertos - ¡Salud!
-¡Por el team cursi!
-¡Team cursi!
Le enseñe todo el lugar y cada pequeña parte parecía gustarle un poco más que la anterior, luego comimos los bocadillos y claro que jugueteamos en el río salpicándonos agua. Después simplemente nos dejamos caer en el césped para disfrutar del clima entre besos y caricias mientras hablábamos.
Todo era perfecto.
-Cielo, no terminaste de decirme que sucedió cuando te perdiste – pregunta de pronto.
-Ahh bueno, pues…por alguna razón que solo mi yo de 15 años sabe, comencé a recorrer la cueva hasta que encontré este…hermoso sitio – explico – Creí que tendría que quedarme toda la noche y usar una piedra como almohada, pero de pronto escuche unos ladridos muy familiares, y era Nero. Antes cuando era más pequeño solía seguirme a todas partes, fue bueno porque gracias a él pude volver. Unos días después decidí aventurarme de nuevo aquí, pero esta vez sí tenía mi móvil y no me perdí, de hecho, encontrar todo de nuevo fue mucho más fácil de lo que pensé, ahí me di cuenta de que nunca estuve demasiado lejos de casa de la abuela en realidad, desde entonces se ha vuelto mi lugar especial, nadie ha venido aquí además de ti y de mí.
-¿Enserio? ¿Ni siquiera los chicos? – pregunta refiriéndose a Min y a Yu.
-No, ni siquiera los chicos – confirmo – Era mi lugar…mío y de nadie más. La abuela sabe que existe pero no ha venido nunca.
-¿Y…puedo preguntar porque…decidiste compartir tu lugar…tuyo y de nadie más…conmigo?
-Pues…no lo sé – respondo con sinceridad – Supongo que…después de conocerte, las cosas dejaron de ser tan importantes si no estás tú en ellas.
-Aww…te quiero – dice robándome un beso – Mucho – Y otro – Muchísimo – otro más – Ti amo (Te amo)
-Ahh ¿hasta en italiano? – pregunto divertido.
-En todos los idiomas que existan – responde haciéndonos rodar por todo el césped.
Realmente estábamos pasándonosla bien, y el plan era quedarnos ahí hasta que el cielo comenzara a oscurecerse indicándonos que debíamos volver. Después cocinaríamos algo rico para la cena junto a la abuela y para finalizar tal vez acurrucarnos a ver alguna película, o hacer alguna otra cosa que él quisiera.
Fue el sonido de mi móvil el que se encargó de traernos de golpe a la realidad y arruinar nuestros planes…por completo.
-¿Quién es? – pregunta Joon Hyun.
-Es mi abuela – digo incorporándome de inmediato colocándome en alerta. Ella jamás...JAMAS…me llama por teléfono a menos que sea de vida o muerte - ¿Abuela? – Atiendo esperando que no sea nada malo - ¿Sucedió algo? – pregunto de inmediato.
-Si, disculpa que los interrumpa querido, pero hay…alguien aquí buscándote que quiere hablar contigo – explica y yo sinceramente me extraño.
-¿Alguien buscándome? – Repito - ¿Ahí? ¿Pero quién?
-Será mejor que vengas a verlo por ti mismo – Es la respuesta que me da y esto cada vez me gusta menos.
-De acuerdo, ya vamos para allá – digo antes de colgar pensando en quien rayos está buscándome que hizo que la abuela me llamara.
-¿Está todo bien? –pregunta Ji Ho.
-La verdad no lo sé – digo con sinceridad – Me dijo que alguien me buscaba, pero nadie me busca ahí jamás, y de hecho, mi circulo de personas que conocen la dirección de la abuela es muy reducido, así que no tengo ni idea de quien es o que quiere.
-Pues entonces…démonos prisa – propone ayudándome a comenzar a recoger todo.
-Si, tienes razón.
Enserio esperaba a cualquier persona del planeta…cualquiera, pensé incluso en algún periodista curioso que pudiese haber llegado a descubrir mi relación familiar con la abuela, pero jamás…jamás me paso por la cabeza, el nombre de quien encontré sentado en la sala con un aspecto que gritaba a los cuatro vientos angustia.
-¿Jae Bum? – lo nombro una vez que me adentro por fin en la sala.
Si, era nada menos que Jae Bum…Im Jae Bum, mi supuesto mejor amigo de hace muchos años atrás, que termino siendo un completo traidor que me apuñalo no una sino dos veces por la espalda. ¿Qué se suponía que hacía buscándome después de tanto tiempo?
-Ahh…hola Ji Ho – dice levantándose del sillón con la mirada baja y jugueteando con sus dedos – Perdona por…venir sin avisar.
-Si hola, estoy bien, gracias por preguntarme, tu siempre tan cortes. – Respondo y me gano un golpecito en la parte trasera de la cabeza de parte de mi abuela - ¡Auch! – me quejo.
-Tu tampoco estás siendo nada cortes jovencito – me reclama – Ahora, haz el favor de escuchar lo que el muchacho quiere decir mientras Joon Hyun y yo preparamos el té ¿si?
-Si…me lo pides de tan buena manera, como decir que no – ironizo sentándome en uno de los sillones individuales.
-Estaré con tu abuela en la cocina amor – dice Joon Hyun besando mi mejilla antes de alejarse y dejarnos solos a Jae Bum y a mí en la sala.
La abuela sabe perfectamente todo lo que paso entre Jae Bum y yo, y sabe que no es precisamente mi persona favorita del mundo. Imagino que ya le explico a ella sus motivos para haber venido y debe ser algo muy serio si es que decidió darle un voto de confianza, así que realmente me intriga saber qué es lo que sucede, así que le daré el beneficio de la duda.
-Y bien – comienzo a hablar en vista de que él no lo hace – ¿Puedo saber…porque y para que me buscas? Imagino que debe ser algo muy importante ¿no?
-Si – afirma y luego se queda en silencio como si estuviese buscando las palabras correctas con las cuales explicarse – N-Nece-necesito…tú ayuda – Dice al final y yo sinceramente no estoy sorprendido, me imaginaba que era algo como eso.
-Mi ayuda – repito – Bueno, era imposible que hubieses venido por otra razón.
-No, Ji Ho…enserio…esta vez enserio…necesito tu ayuda, y ni siquiera es por mí – se apresura a decir.
-¿A qué…te refieres? – Pregunto - ¿Cómo que no es por ti?
-Es…es Jun Dae – Dice y yo frunzo el ceño completamente confundido.
-¿Jun Dae? ¿Estás aquí…pidiendo mi ayuda…para Jun Dae? – Digo intentando unir las piezas con lo poco que me ha dicho - ¿Y por qué no ha venido él en persona?
-Porque…ambos lo conocemos, sabes que preferiría arrancarse las pestañas que pedirte ayuda después de lo que paso – dice y ríe pero de manera muy corta – Además…no puede.
-¿No puede? ¿Cómo que no…puede? – Pregunto y la expresión de Jae Bum se pone más sombría - ¿Le pasó…algo?
-Yo…yo espero que no – Es lo que responde ¿Pero de qué rayos estaba hablando?
-¿Que se supone que significa eso Jae Bum? – Pregunto esperando una respuesta coherente y no lamentos de su parte - Termina de hablar de una buena vez y déjate de rodeos, ¿sí?
Después de haberle dicho aquello por fin comienza a hablar y a decir todo, y la explicación que recibo me deja con la boca abierta. No puedo creer todo lo que me ha dicho, no puedo creer que Jun Dae haya sido tan estúpido, y él mismo ni se diga ¿Cómo pudieron involucrarse en algo como eso? ¿en que estaban pensando?
-Tiene…que ser…una broma – Digo y él niega con la cabeza
-¿Te parece que bromeo? – Dice él - ¿Cómo podría bromear con algo tan delicado como eso?
-¡¿Cómo…como pudieron hacer algo como eso?! – Le reclamo - ¡¿Están locos o qué?!
-¡No a todos nos llueve el dinero como a ti ¿sabes?! – comenta y yo enfurezco todavía más.
-¡Pues todo el dinero que me llueve, me lo he ganado con trabajo duro, no viene de ninguna trampa y mucho menos de ningún mafioso! – exploto.
-¡Lo sé joder, lo sé, no tienes que restregármelo en la cara! – gruñe.
-¡Entonces no hagas acotaciones tontas que no vienen al caso! – Replico - ¡Jun Dae es un…grandísimo estúpido, y tú lo eres aún más por sugerirle tal cosa!
-¡¿Y que querías que hiciera, eh, oh señor todopoderoso y perfecto que todo lo sabe?! – Pregunta y yo me froto el rostro con frustración - ¡¿Dime qué harías si no tuvieras más opción y fuese tu chico el que estuviese en peligro muy lejos de ti donde no puedes hacer prácticamente casi nada?!
Cuando dice eso, tengo que respirar profundo para no lanzarle un puñetazo en la cara y dejarlo tirado en el piso y quejándose. Enserio soy una persona pacifica, muy pacifica, pero él siempre ha sabido sacarme de mis casillas de manera extraordinaria. Fuera de eso, tiene un muy buen punto y no puedo negarlo, yo haría lo que fuera por Joon Hyun, lo que fuera, así que me dejo caer nuevamente en el sillón de donde me he levantado quien sabe cuándo, y hago sonar mi cuello intentando recuperar la calma.
-Vale – Digo respirando muy profundo - Supongamos que no había otra opción y que por eso…hicieron tal cosa – digo más calmado - ¿Por qué demonios esperaron tanto para venir por ayuda? ¿por qué esperar a que las cosas empeoraran tanto?
-¡Ya te lo dije! – dice él – Después de lo que paso, no es como si fuésemos los mejores amigos del mundo y que pudiésemos venir a visitarte y pedirte favores en cualquier momento Ji Ho.
-Cualquier cosa me parece mejor que llegar a estos extremos – digo con obviedad – No hablamos de cualquier cosa, es su vida la que está en riesgo. Mientras estamos aquí hablando, él podría estarlo pasando realmente mal donde quiera que esté ¿entiendes eso?
-¡Lo sé! Créeme que lo sé, y se lo dije, pero…no quiso escucharme. De hecho, por eso precisamente peleamos y se fue. No lo he visto desde entonces – comenta – Nada de esto habría sucedido si Jun Dae se hubiese preocupado más por pagar y menos por meterse de nuevo en tus pantalones.
-¿Qué? ¿de qué hablas? – digo confundido y el rueda los ojos.
-Ahh, que ingenuo, es obvio que aun…le…gustas – dice y por su tono de voz sé que no está feliz con eso - Ha estado intentando volver contigo desde que volvió de Japón, ¿o es que acaso creíste que esa vez que casi lo “atropellaste” fue por casualidad? – Menciona y yo me doy una bofetada mental por haber sido tan estúpido. Joon Hyun tenía toda la razón – Incluso quería hablar con la prensa para sacar su relación a la luz, suerte que no llego a concretar eso.
-¡¿Qué?! – Exclamo y estoy verdaderamente sorprendido - ¡Pero que…que…!
-No te sorprendas, ya sabes cómo es él.
-¡Sí, claro que sé cómo es! – Afirmo de mala gana – ¡Es de lo peor y debería no ayudarlo porque no se lo merece…y tú tampoco! – digo con sinceridad – Llamaré a la policía.
-¡NOOOO! – Me detiene de inmediato quitando incluso el móvil de mi mano - ¡¿Te volviste loco acaso?! ¡¿crees que no pensé en eso primero antes de venir hasta acá?!
-Umm, no lo sé, quien sabe, tu nunca dejas de sorprenderme – digo y le arrebato mi móvil.
-Mira, el tipo no es un asesino, es un prestamista ¿ok?
-¿Si? ¿y esos recordatorios de los que hablaste y el hecho de que lo secuestraran para cobrar la deuda con sangre si es necesario en que lo convierte, eh? ¿en plomero?
-Involucrar a la policia en esto solo nos traería más problemas Ji Ho – Asegura – Él solo quiere su dinero de vuelta, cuando lo tenga, las cosas volverán a estar bien, deuda pagada, y se acabó, no tienen por qué retener más a Jun Dae después – Dice y yo me quedo callado mientras analizo mis posibles opciones, no es cualquier cosa, de la que hablamos, alguien podría morir si no hago lo correcto, la pregunta es, ¿qué es exactamente lo correcto?
-Creo que Jae Bum tiene razón – dice de pronto Joon Hyun desde la cocina sorprendiéndome por completo – Involucrar a la policía en esto con la vida de Jun Dae en juego no es una buena idea. Tal vez si deberíamos…pagar la deuda y esperar a que él este bien, después podemos ir con la policia cuando ya no…haya nadie en peligro ¿no? – comenta y de pronto todo parece tener sentido. Estuvo escuchando todo este tiempo junto a la abuela pero…solamente él podría haber hecho encajar todo tan bien en tan poco tiempo. Ese es mi chico.
-Ahhh – suspiro largamente - ¿Cuánto dinero hace falta? – pregunto y Joon Hyun sonríe, sabía desde un principio que decisión tomaría, sin embargo Jae Bum parece más que sorprendido.
-Yo… ¿enserio? Yo…esto…
-Mira…mejor no digas nada si no es la cantidad ¿si?, además…desde ya te digo que no hago esto por ustedes – aclaro - Lo hago porque es lo correcto y porque Joon Hyun me ha dado otra opción que involucra a la policía, créeme que voy a llamarla para reportar esto.
-Eso…me parece…bien – comenta – Y gracias.
-No me agradezcas ahora, mejor hazlo cuando encontremos a Jun Dae y todo esto….termine por fin. Ahora vamos al banco por el dinero, mientras más pronto paguemos, más pronto terminará todo.
No podía creer que me estuviese involucrado en algo como esto, sinceramente esperaba que Jae Bum tuviese razón y que el tipo solo quisiera su dinero y nada más, sin embargo, también esperaba que Jun Dae estuviera bien y que todo esto quedara como un mal recuerdo y nada más, especialmente después de que Jae Bum nos llevara en su camioneta al supuesto sitio en donde lo encontraríamos, una especie de bodega, ubicada en una de las partes más solitarias que se puedan imaginar, rodeada por una reja metálica oxidada y con alambre de púas enrollado en la parte superior y montones de carteles de “prohibido el paso” y “peligro” como la de las películas de terror. El sol ya se estaba ocultando y sinceramente parecía que en cualquier momento saldría un tipo con una hoz gigante de alguna parte.
-¿Estás seguro de que…es aquí? – pregunto mientras observo el horrible lugar por todos lados.
-Por supuesto, vine con mis padres cuando ellos pidieron dinero – explico – He oído que el tipo tiene sitios de reunión por todos lados, pero este es el único que yo conozco claro está.
-Bien, ya estamos aquí ¿ahora qué hacemos? Porque no parece que haya un timbre ahí ni nada por el estilo y no hay nadie – bromeo aunque no me causo nada de risa - ¿Cómo haremos para…entregarles el dinero?
-Yo digo que hay que acercarnos un poco más – comenta Joon Hyun que se mantiene mirándolo todo desde la parte trasera del auto de Jae Bum – Acércate a la reja, debe haber alguien ahí vigilando, aunque algo me dice que ya estamos rodeados por todos lados.
-Cielo, no es por nada pero…esa no suena como una buena idea, estos tipos son mafiosos, y si se acerca un auto desconocido a su territorio sin invitación, probablemente será…ya sabes…atacado.
-¿Tienes otra mejor cielo? Porque también podríamos ir a pie, y deduzco que eso te gusta mucho menos.
-Deduces muy bien, es más aún me pregunto cómo fue que me convenciste de traerte con nosotros, es sumamente peligroso, debiste quedarte en casa – Le recuerdo.
-Ahh, ¿yo no puedo hacer nada peligroso pero tu si puedes hacerlo? Eso no me parece nada justo – se queja – De ninguna manera iba a dejar que vinieras aquí tu solo.
-Te recuerdo que no estoy aquí precisamente por gusto.
-Pues tampoco yo pero ya vez, aquí estamos, y estamos juntos en esto así que nada de quejas.
-Ahh…no quiero interrumpir su pelea marital pero…el hombre de la Ak47 de allá, parece interesado en nosotros – comenta Jae Bum haciendo que ambos miremos al frente donde efectivamente hay un tipo alto y fornido, vestido todo de negro, con un arma en la mano que podría ser casi de su tamaño sin problemas. ¿Pero de donde había salido? No es fácil ocultarse con ese tamaño. De pronto y después de que el tipo hiciera una señal con la mano, un montón de luces rojas aparecen por todos lados traspasando los vidrios hasta posarse sobre nuestras ropas y demás.
Como dije…una horrible pesadilla.
-Ok, alguien haga el favor de bajarse antes de que nos den una para nada cálida bienvenida – Comenta Jae Bum.
-¡¿Qué?! ¡Tú deberías ser quien lo haga, por ti estamos aquí y ya has tratado con ellos antes, así que bájate ahora y llévales el dinero! – digo lanzándole el bolso con el dinero prácticamente encima.
-¡No puedo aunque quisiera, la primera cosa que te dicen es “esto jamás paso” “olviden esta dirección” “no regresen jamás” y cosas así, si voy ahí me meteré en serios problemas, ¿o quieres ver mis entrañas esparcidas por el piso?! – Dice él devolviéndome el bolso.
-¡¿Y entonces cual se supone que era tu plan una vez que estuviésemos aquí siendo apuntados por esos tipos?! – Pregunto y una vez más acerco el bolso hacia él.
-¡No se supone que nos apuntarían en primer lugar, y no…no había pensado en esto, sinceramente no creí que aceptarías ayudarme para empezar! – Dice y el bolso vuelve a mí una vez más.
-¡Ohh, creo que voy a matarte! – gruño furioso.
-¡¿Si? Pues si vas a hacerlo, hazlo ahora o ellos se te van a adelantar!
-Yo lo haré – dice de pronto Joon Hyun tomando el bolso con el dinero y quitando el seguro de la puerta para bajarse.
-¡¿Qué?! Ohh no, claro que no lo harás – niego de inmediato volviendo a cerrar la puerta por donde pretendía salir – Dame eso, lo haré yo.
-No Ji, no puedes ir tú, te reconocerían de inmediato y entonces no podremos llamar a la policía o te meterías en problemas con la mafia – dice Joon Hyun y…rayos, tiene razón, ni siquiera había pensado en eso – Deja que yo lo haga.
-No – niego de nuevo - Es muy peligroso Joon Hyun, definitivamente no te dejare.
-Estaré bien cielo, es solo ir, dar el dinero y preguntar por Jun Dae ¿no? – Comenta – Es simple, nada malo va a pasarme.
-No me parece para nada simple, además están armados – digo porque es lo que más me preocupa, no conozco a estos tipos pero sé que son mafiosos y que estamos en peligro tan solo por habernos acercado, no quiero exponer a Joon Hyun de esa manera – Nos…nos están apuntando, podrían disparar en cualquier momento si quisieran aun sin razón.
-Y nos van a disparar de cualquier forma si no vamos ahora y decimos que es lo que estamos haciendo aquí – dice él decidido y yo lanzo miles de groserías internamente ¿En que estaba pensando cuando deje que viniera con nosotros a algo tan peligroso? – Todo estará bien – asegura.
Dios… ¿cuándo va a terminar esta pesadilla?
-Bien – accedo de muy mala gana luego de pensarlo unos minutos que me parecieron eternos – Ten mucho cuidado y…no tardes ¿si?
-No lo haré – asegura y luego me da un beso del cual me cuesta separarme – Te amo.
-Yo más – respondo y entonces lo dejo bajarse lentamente del auto.
Una vez que baja, mi calvario comienza. Él se acerca al tipo armado lentamente con el bolso colgando del hombro y las manos levantadas en todo momento. Cuando está más o menos cerca, el tipo le ordena que se detenga, luego le dice que deje el bolso en el suelo y abra el cierre lentamente. Joon Hyun obedece y cuando se nota claramente que su contenido es dinero, hace una seña con su mano en el aire y entonces todas las luces rojas que antes nos apuntaban desaparecen, aunque no me confío, se perfectamente que siguen ahí.
Entonces, fue momento de las preguntas.
-Es para pagar la deuda de un…amigo – explica claramente Joon Hyun con tanta seguridad en la voz que incluso me sorprende, yo que sigo en el auto estoy muerto del miedo, incluso mis manos están temblando – Su nombre es Kim Jun Dae, y su plazo vence mañana.
El hombre se queda en silencio unos minutos y luego dice algo sujetando su oído como si tuviese allí una bocina. Después de eso, abre por fin la reja metálica y le indica a Joon Hyun que vuelva tomar el bolso y que comience a caminar hacia la bodega.
-No, no, ¿a dónde lo llevan? – digo con la intención de salir del auto.
-Espera, no hagas una tontería – Me detiene Jae Bum – Si sales solo perjudicaras a Joon Hyun, hasta ahora todo va bien.
-¿Y cómo demonios esperes que me quede tranquilo mientras esta ahí adentro y yo no puedo ver qué sucede? – gruño.
-Estará bien – dice él – Él no debe nada y más bien está pagando una deuda, no hay razón para hacerle daño, además…no pensaste que el gran señor iba a venir hasta acá por el dinero ¿o sí? Es evidente que lo llevaran hasta su pequeña oficina.
-Más vale que tengas razón…porque si algo le pasa a mi chico, te juro que te vas a arrepentir – digo y vuelvo a fijar mi mirada hacia el frente mientras sujeto con fuerza el collar de infinito que cuelga siempre sobre mi cuello pidiendo a Dios que lo proteja y que nada le pase.
No sé a ciencia cierta cuanto tiempo paso, lo único que sé es que para mí fue como una eternidad. Esta definitivamente pasará a ser la cosa más estúpida que he hecho en toda mi vida. No podía soportar ni un segundo más sin saber que mi chico estaba bien, así que iba a mandar todo al mismísimo infierno, iba a ir por él y llamaría a la policía si no lo veía salir de ese horrible lugar en los próximos 5 minutos, aun si eso significaba tener unos cuantos mafiosos como enemigos.
Sin embargo, antes de que pudiese siquiera moverme, las puertas de la bodega se abrieron y de ella salió Joon Hyun de nuevo junto al mismo tipo armado de antes, sin el bolso con dinero claro está.
El camino que recorrió se me hizo infinito, pero una vez que estuvo fuera de la reja metálica, y que caminó por fin de nuevo hacia el auto, sentí que mis pulmones pudieron respirar nuevamente porque él está bien. Jamás volvería a dejar que hiciera algo como esto, jamás.
-Cielo – lo abracé con fuerza una vez que estuvo completamente en el auto - ¿Estás bien? – indago separándolo de golpe de mi cuerpo - Dime que estás bien ¿no te hicieron nada, verdad? puedes decirme si te hicieron algo, no te tocaron en ninguna parte ¿no? ¿te duele algo? ¿te hicieron algo? – pregunto con tanta rapidez revisándolo de pies a cabeza que apenas y yo me entiendo.
-¿Dónde está Jun Dae? – Es lo que pregunta Jae Bum.
-Estoy bien y Jun Dae también, pero tenemos que ir rápido a un restaurante – Dice de pronto y yo quedo confundido.
-¿Qué? – digo sin entender nada - ¿Por qué?
-¿No puedes comer en otro momento? – dice Jae Bum.
-No es para comer torpe – Aclara - No pude ver al gran jefe porque no necesitaba ningún préstamo de su parte, así que el hombre de la puerta me dejo esperando en una especie de sala, se llevó el bolso con el dinero y luego cuando regreso me dio un papel con una dirección y me dijo que la deuda estaba pagada y que ahí estaría Jun Dae – Explica y antes de que siquiera pueda leer la dirección Jae Bum enciende el auto y comienza a conducir como si estuviésemos en rápidos y furiosos.
Al principio no entendí nada de lo que acababa de suceder, la parte en la que aceptaban el dinero de la deuda era lógica pero lo del restaurante no tanto, claro que luego de que Jae Bum explicará que la última vez que vieron a Jun Dae fue precisamente en ese restaurante, y que la camarera dijo que se reunió con alguien ahí, desayuno y luego unos tipos lo obligaron a meterse en un auto negro, de pronto todas las piezas encajaban en su lugar como si fuera un gran rompecabezas.
Iban a dejarlo justo donde se lo llevaron. Muy considerados de su parte.
Llegamos en muy poco tiempo, había poco tráfico pues ya se había hecho de noche y el lugar no quedaba tan lejos, aunque si estaba en una parte más o menos solitaria casi en las afueras de la ciudad. Justo cuando lo hicimos un auto completamente negro, sin placa y de vidrios polarizados se estaba yendo del lugar a toda velocidad, nos pasaron por el lado en un parpadeo. Cuando miramos hacia la entrada del restaurante, el cual yacía evidentemente cerrado ya que es un café solo para desayunar, vimos que había alguien tirado en el piso de la entrada.
Era Jun Dae.
Estaba vestido con una ropa que lucía muy sucia, parecía que tenía varios días con ella, su cabello estaba revuelto, pero afortunadamente no está muy herido, tan solo tenía el labio roto y un moretón gigante en el ojo, nada demasiado grave para lo que todos nos estábamos imaginando.
-¡Jun! – Grito Jae Bum saliendo disparado del auto hacia él - ¡¿Estás bien?! ¡Jun, reacciona!
-No reaccionará, esta inconsciente – comenta Joon Hyun.
-Hay que llevarlo al hospital, rápido.
Ayudo a Jae Bum a cargar a Jun Dae hasta el auto, Joon Hyun hace el favor de abrir la puerta y de quedarse atrás con él verificando que continúe vivo mientras vamos camino al hospital más cercano. Una vez que estamos ahí, Jae Bum se nos adelanta y dice que es el novio de Jun Dae y que tuvieron una pelea, este se fue y que salió a buscarlo y lo encontró así, incitando a pensar que fue asaltado o que se involucró en alguna pelea en un bar mientras estaba en estado de ebriedad. En cuando a Joon Hyun y a mí, solo quedamos como un par de buenos amigos que ayudaron en el proceso, desinvolucrándonos de todo. Al menos tuvo la decencia de hacer eso.
Ahí fue cuando entramos en la sala de espera y nos dejaron ahí mientras los médicos trataban a Jun Dae. Le dije pregunté más de una vez a Joon Hyun que si estaba realmente bien y dijo que si, que solo estaba un poco asustado aun, cosa que era por demás de entendible.
Luego de un rato, un hombre de bata blanca llego para informarnos que iban a trasladar a Jun Dae a terapia intensiva, lo cual no eran para nada buenas noticias. Explico que a pesar de que externamente no parecía estar herido, tenía un par de costillas fracturadas además de un fuerte golpe en la cabeza que estaba inflamado causando mucha presión en su cerebro, lo cual era sumamente peligroso pues de esa forma además de que no despertaría, también tenía una lista de complicaciones entre las cuales estaba nada menos que el coma. Explico que no debíamos alarmarnos pues ya le estaban aplicando tratamiento para esto y parecía estar respondiendo bien, pero aun así, estaría en observación durante un buen rato hasta que esta inflamación cediera por completo, y en cuanto hubiese algún cambio nos avisarían de inmediato.
*Fin del flash Back*
Y así fue como terminamos en esta sala de espera, sentados en las incomodas sillas amarillas de plástico, aguardando a que el médico venga para decirnos buenas noticias.
Han pasado casi 12 horas desde entonces, y aun nadie viene a decirnos nada sobre Jun Dae.
Joon Hyun yace dormido casi cómodamente sobre mis piernas cobijado debajo de mi chaqueta, mientras yo mantengo mi cabeza apoyada sobre la pared rodeándolo como puedo con mis brazos. Tengo algo de sueño también, y probablemente debería estar intentando dormir justo ahora, pero no pude pegar un ojo en toda la noche, por un lado porque corro el riesgo de ser descubierto ya que mi rostro apenas y está cubierto con un tapabocas y por el otro no quería que el médico viniera con noticias y nos encontrara a todos dormidos. De más está decir que Jae Bum está no dormido sino completamente desconectado y roncando hace horas como si estuviera en su propia cama, aunque no lo culpo, cuando llego a la casa de la abuela pude notar que tenía unas pronunciadas ojeras, quien sabe desde cuando no ha podido dormir bien.
Apenas nos dijeron que debíamos esperar para saber de Jun Dae, llame a la abuela y le informe de todo para que se quedara mucho más tranquila. En un rato más volveré a llamarla y espero darle las buenas noticias que tanto hemos estado esperando.
Estoy tan sumergido en mis pensamientos que ni siquiera noto cuando el médico se acerca a nosotros por fin después de una larguísima espera.
-¿Familiares de Kim Jun Dae?
-Sí, somos nosotros – respondo ya que Jae Bum a pesar de estar ya despierto sigue adormilado. Joon Hyun también despierta al escuchar la voz del médico hablando.
-Tengo buenas noticias – dice y yo veo la luz al final del horrible túnel – La inflamación ha cedido bastante, y tal y como les dije comenzó a recuperar la conciencia hace un rato, sin embargo le colocamos algunos sedantes para que se mantenga dormido mientras desaparece por completo para que no esté adolorido, así que se podría decir que está descansando ahora – explica – Vamos a trasladarlo a una habitación, y va a tener que quedarse un par de días, pero del resto él estará bien.
Si, por fin ahí estaban las buenas noticias.
-Muchas gracias – agradezco con una reverencia y Jae Bum e incluso Joon Hyun me acompañan.
-¿Puedo…pasar a verlo? – pregunta Jae Bum.
-Por supuesto. En cuanto terminen de trasladarlo a la habitación puede quedarse alguien con él mientras despierta, pero no todos.
-Gracias, no se preocupe – Dice Jae Bum – Gracias de nuevo doc.
-No tienen nada que agradecer, con permiso.
Yo respiro profundo y me alegro de que fin todo haya terminado mejor de lo que esperaba. Jae Bum se comprometió a que luego de que Jun Dae despertara, y estuviese mejor darían parte a las autoridades, y…si no lo hace, de cualquier forma yo si lo voy a hacer.
-Bien, iré a la habitación ahora – indica Jae Bum – Gracias por todo, deberían irse a descansar ahora, ya hicieron bastante.
-Lo haremos, y no agradezcas, no tienes nada que agradecer – respondo – Si necesitas algo…solo avisa, y cuando despierte, dile a Jun Dae que…que… - intente decir pero sinceramente no sabía con exactitud qué palabras utilizar. Después de que Jae Bum dijera que efectivamente Jun Dae sigue teniendo sentimientos románticos hacia mí, no sé cómo actuar con él porque cualquier clase de interés podría malinterpretarse, y bueno…tengo un novio al cual amo y no quiero molestarlo de ninguna manera, quizás lo mejor es mantenerme lo más alejado posible que pueda de él, aun si trabajamos para la misma empresa – Que…
-Dile que estaremos al pendiente de cómo está, y que podríamos visitarlo luego si él quiere – completa la idea Joon Hyun con una sonrisa - ¿O no? – dice y mira en mi dirección esperando una confirmación.
-Ahhh sí claro – Asiento un poco sorprendido por la iniciativa de mi novio respecto a mi…ex. No es así como uno esperaría que se dieran las cosas, pero bueno…Joon Hyun es especial después de todo - Eso mismo era.
-Se lo diré – dice Jae Bum mientras se burla evidentemente de mí – Saben…sé que lo que voy a decir no viene para nada al caso, pero…creo que hacen una linda pareja – comenta y yo sonrío – Les deseo lo mejor a ambos.
-Gracias – responde Joon Hyun mientras yo me limito a asentir con la cabeza – Y sé que tampoco viene al caso pero…tan bien te deseo lo mejor…bueno te deseamos – dice incluyéndome esta vez y yo vuelvo a asentir - En lo personal espero que Jun Dae se dé cuenta de que tiene a alguien que se preocupa así por él, y que lo aproveche claro – comenta y creo que hasta el mismo Jae Bum se sorprende de verme asentir, después de todo fue el mismo quien daño mi relación con Jun Dae en ese entonces y creo que de alguna forma piensa que lo odio, cosa que no es así porque, gracias a eso, encontré a la verdadera persona con la que quiero compartir mi vida, así que…ya no tiene importancia. Es solo más agua bajo el puente.
-Esperamos lo mismo entonces – intenta bromear aunque no noto nada de gracia en su tono de voz – Ji Ho, prometo que te pagare lo antes posible, enserio.
-No tienes que pagarme nada Jae Bum y tu lo sabes, no hace falta que yo te lo diga. Solo olvídalo.
-¿Bromeas? – Dice haciéndose el ofendido - Im Jae Bum no le debe dinero a nadie – vocifera y yo pongo los ojos en blanco soltando inevitablemente una pequeña risa.
-¿De qué hablas?, tú le debes dinero a medio mundo – le recuerdo – A menos que hablemos de otro Im Jae Bum claro está.
-Pero son pequeñeces, jamás tanto, así que te pagaré quieras o no – Dice y comienza a caminar por el pasillo con una expresión muy diferente a la que tenía ayer cuando se apareció en casa de la abuela. Se le ve mucho más tranquilo, incluso feliz – Les daré un bonito y extravagante obsequio de bodas – dice una vez que está más o menos lejos.
-No estás invitado – es lo que yo digo ganándome un golpecito de parte de Joon Hyun.
-¡No te preocupes, alguien importante como yo no necesita invitación! – dice en un tono de voz tan alto que es regañado por una de las enfermeras causando que tanto Joon Hyun como yo comencemos a reír por lo bajo y a caminar en dirección contraria.
Una vez que llegamos a la entrada, el aire frío de la mañana nos golpea con fuerza, bueno…más a mí, ya que Joon Hyun se adueñó de mi chaqueta y no parece con intenciones de devolvérmela.
-¿Estás cómodo con mi chaqueta cielo? – pregunto con sarcasmo.
-Si mi amor, gracias por preguntar, tu siempre tan atento – responde igual de sarcástico.
-Ahhh – suspiro - ¿Qué tal un rico desayuno para empezar el día? – pregunto.
-Eso suena fantástico – dice él y luego ambos comenzamos a caminar por la calle hacia el café más cercano que encontremos – Me apetece algo americano, huevos con tocino, panqueques, y…café.
-Umm…eso suena delicioso, te apoyo – digo imaginándome con un enorme plato en frente – Aunque tal vez cambie el café por una malteada.
-No me sorprendería para nada que lo hicieras.
-Sabes… - comienzo a decir entrelazando mi mano con la suya – Quiero darte las gracias – digo de pronto y él me mira confundido.
-¿Ehh? ¿Por qué me agradeces?
-Pues…ya sabes…por…hacer lo que hiciste por Jun Dae – explico con la mirada baja – Fue muy peligroso, no tenías que hacerlo, especialmente después de confirmar que tenías razón cuando dijiste que aún le…gustaba.
-Cualquiera en mi lugar habría hecho lo mismo – dice y yo niego de inmediato.
-No me parece.
-Bueno, igual ya paso, lo que importa es que Jun Dae está bien y nosotros también – Dice y yo sonrío - Respecto a lo demás…ahhh era tan obvio Ji.
-Yo no lo veo tan…obvio, además te recuerdo que fue él quien me abandono a mí, no viceversa.
-Bueno, no lo culpo…fue una pésima decisión, si yo fuera él, aun estaría llorando y arrastrándome por el piso.
-Enserio no lo sabía, y lo siento…por no decirte lo de esa vez que…casi lo atropello – Me disculpo - No sucedió nada en particular, lo juro, solo lo se…atravesó en el camino, afortunadamente frene a tiempo, y después lo vi, vi que era él, me sentí culpable, así que le di un aventón, nada más. Lo habría hecho por cualquier persona.
-Te creo amor, no tienes que explicarme, confío en ti – Dice él - Si no lo mencionaste, fue porque no tuvo importancia.
-Si, y porque…sabía que te enojarías.
-Me habría enojado en ese entonces, pero…alguien que conozco me ha enseñado a ver las cosas desde varios ángulos y…no voy negar que no me hace gracia que haya intentado interponerse entre nosotros, pero a la vez me siento feliz de saber que lo nuestro es…tan sólido que no funcionó, ni funcionará.
-Nunca – aseguro – Solo tengo ojos para ti, así que…
-Eso pensé – Dice con seguridad haciéndome reír - Además de alguna forma siento que debería agradecerle a Jun Dae porque si no hubiese sido un idiota contigo, quizás tu y yo no estaríamos así de juntos ahora – comenta señalando nuestras manos entrelazadas.
-En eso estamos completamente de acuerdo, y sé que sonará extraño pero…jamás estuve tan feliz de que él hubiese pateado mis sentimientos en aquel entonces.
-No es para nada extraño, de hecho siento lo mismo, ahora me siento feliz de que Hyun Su me haya engañado. Valió completamente la pena porque así pude conocerte.
-Te amo – digo y me acerco para darle un pequeño beso – Te amo muchísimo…y cada día que pasa…me doy cuenta de que…definitivamente eres tú.
-¿Umm? ¿de-finitivamente soy qué?
-Eres…la persona con la que quiero compartir el resto de mi vida – explico y él sonríe ampliamente antes de acercarse para compartir otro suave y delicioso beso.
-También eres la persona con la que quiero pasar el resto de mis días – Dice y luego frota su nariz contra la mía – Así que más vale que te apresures a poner un anillo en este dedo, y…que sea antes de que consiga a alguien que lo haga primero.
-Ahhh – suspiro - Si señora Jung – bromeo haciendo referencia a su madre ya que acaba de sonar exactamente como ella – No se preocupe, lo haré pronto – Digo ganándome un golpecito en el brazo, aunque luego también recibí un beso en la mejilla.
-Ya vámonos, tonto.
A veces la vida te da golpes verdaderamente duros, la decepción por ejemplo es uno de ellos, sin embargo….todas las cosas suceden por una razón, en este caso…tuve que sufrir mucho en el pasado para poder conocer al verdadero amor de mi vida. Creo que es un sacrificio justo para tan gratificante recompensa ¿o no?
-Ohh por cierto, me debes una disculpa Joon Hyun.
-¿Qué? ¿por qué? ¿qué hice ahora? – pregunta y sé que está repasando en su mente todas las cosas de recién para saber a qué me refiero, pero la verdad es que no ha hecho nada, solo enamorarme más.
-Me hiciste esperar mucho por ti así que discúlpate – me quejo y él pone los ojos en blanco – No me mires así, es la verdad, quien sabe cuánto tiempo estuviste solo mirándome desde el balcón y jamás dijiste nada.
-Bueno, podría quejarme por lo mismo, tú también pudiste haber hecho lo que hiciste ese día en el balcón mucho antes porque sabías que yo te observaba siempre.
-Si claro, el loco que socializa desde el balcón con sus vecinos.
-¿No fue eso lo que hiciste al levantar una hoja con tu número de móvil hacia mi desde el balcón? - Touché
-Ok, ok, ya entendí…he perdido esta conversación, me rindo.
-Joon Hyun 1, Ji Ho 0 – vocifera orgulloso – ¡Winner!
-Te…dejo ganar solo para hacerte feliz, ¿vez lo que buen futuro esposo que soy?
-Claro, claro…ahora repítelo como un mantra hasta que te lo creas.
Pov Abuela Yoo
Fue agradable tener a los chicos un par de días conmigo en casa.
Creo que de vez en cuando deberían cambiar de ambiente, la ciudad es muy ruidosa y ambos están siempre muy estresados, así que deberían relajarse juntos más seguido y…visitarme más claro está.
Par de desconsiderados.
La visita de ese chico Jae Bum después de tanto tiempo, fue bastante inesperada debo decir, sobre todo cuando explico las razones por las cuales había tocado a mi puerta buscando a mi nieto. Recuerdo que antes él y Ji Ho eran muy amigos, cosa que se rompió completamente después de todo el daño que le hicieron a mi pobre niño. Aun así, sabía perfectamente que su corazón es tan bueno y noble que no se negaría a ayudarlo ni aunque fuese su peor enemigo. No me equivoque, y ahora ese chico Jun Dae se está recuperando en el hospital y la policía comenzó una silenciosa investigación en contra de ese mafioso presta dinero que causa daño aprovechándose de las necesidades económicas ajenas.
Me siento orgullosa del hombre en el que se ha convertido mi pequeño, parece que fue apenas ayer cuando me llamaron por teléfono para que tomara su custodia, ha crecido tanto desde entonces.
Lo adoro y verlo feliz me hace automáticamente feliz a mí. Creo que Joon Hyun es bueno para él y es todo lo que siempre estuvo buscando, así que me siento bien de saber que por fin ha logrado encontrar esa otra mitad que le faltaba, alguien con quien en un futuro pueda casarse y claro que formar su propia familia.
-Ahhh – suspiro mientras doy un sorbo a mi café con una suave melodía de piano de fondo – Me recuerdan a cuando estábamos juntos tú y yo Seo Yong – Pienso en voz alta mientras miro el cielo por la ventana y pienso en mi esposo. Como lo extraño.
Estoy sumergida en mis pensamientos, cuando de pronto escucho que tocan la puerta y acto seguido, a los perros comenzar a ladrar y gruñir en la entrada. Eso me parece sumamente extraño, conocen a todos los vecinos y ya se acostumbraron a los sonidos molestos que hacen, como los de sus autos y sus podadoras, por lo que esos ladridos para nada amigables me dan muy mala espina.
Me levanto de mi sitio, y de inmediato visualizo la sólida vara de metal que utilizo para mover la leña en la chimenea y también el viejo bate de béisbol de Ji Ho que permanece sobre la puerta como adorno. Ambas cosas y tres fieras furiosas para defenderme serán suficientes en caso de que se trate de un ladrón o algo por el estilo, además…basta con que grite con la fuerza suficiente para que mis vecinos me auxilien y sé que ellos disponen casi todos de escopetas, me atrevería a jurar que nadie con malas intenciones saldría vivo de esta urbanización, los campesinos tienen una excelente puntería.
-¿Qué sucede muchachos? – Pregunto acariciando la cabeza de los tres canes intentando calmarlos pero continúan ladrando y gruñendo, no parecen para nada felices - ¿No les gusta quien está afuera? – Pregunto acercándome más a la puerta decidida a abrirla lentamente – Eso quiere decir que a mí tampoco va a gustarme ¿verdad?
Esperaba cualquier cosa. En el mejor de los casos que fuese algún desconocido, alguien perdido, algún vendedor, y en el peor, aunque no podía ser pesimista, un ladrón o algo por el estilo.
Quizás eso hubiese sido menos impactante que lo que encontré detrás de aquella puerta de madera, después de casi veinte años.
-¿T-Tú?
CONTINUARA