CAPITULO 6
Nación de Kirigakure
Pain con algo de brusquedad arrojo al doncel inconciente al piso, dejándole en los aposentos del príncipe Itachi, estaba enojado miro sus brazos y tenía muchas heridas en ellas y recordó cómo se las izo.
********** Flash back **********
Pain – escuche que me llamo Marada sama – llévate al doncel de cabello largo, que lo bañen y lo cambien de ropa – me ordeno y vi que ambos donceles le miraron con horror – y luego llévalo con mi hijo mayor, dile que es un regalo de mi parte – me ordeno y no me quedo de otra que obedecer, pero cuando llegue donde estaban los donceles, jale de uno de los brazos al rubio mayor pero este me mordió, por dios ¿quien en su sano juicio puede morderte?
¡No… no suéltame desgraciado! – me grito el rubio mordiéndome más fuerte, eso me dolió mucho y me queje por el dolor, así mismo lo saque del salón, lo lleve hasta el otro lado de los salones principales y lo lleve hasta las aguas termales donde se bañaría pero.
Desgracia pervertido – y me dio una patada en mis partes nobles, el dolor me obligo soltarlo y el maldito rubio aprovecho eso para correr como loco en todo el palacio, gracias a dios era enorme y mande a mis compañeros para que lo atrapen, estos obedecieron enseguida pero pude ver que se morían por reírse al verme en el estado en el que me encontraba.
Pasaron unos minutos y escuche nuevamente su maldita voz, ya me estaba colmando tenía poca paciencia, agarre uno de sus brazos y quise llevarlo otra vez, pero este no sé cómo pero se soltó del agarre de mis compañeros y me salto como un animal salvaje y me empezó a arañar y morder.
Desgraciados donde esta mi hermanito, contesta o te juro que seguiré mordiéndote – se atrevió a amenazarme, con eso mi paciencia se fue al demonio y ese doncel lo iba a pagar todo, en un rápido movimiento estaba de pie y con el doncel inconsciente, pero la que había golpeado al rubio fue mi única compañera mujer Konan, ya harta de todo lo que presencio.
********** Fin Flash back **********
No quiero ni imaginarme como el príncipe Itachi tratara con esta vestía – murmuro Pain mirando al doncel inconsciente, lo levanto y lo deposito en la cama de su príncipe – eres lindo, pero no me gustan las fieras – soltó con una sonrisa, se puso de pie y salió de la alcoba de su príncipe, ordeno a los guardias cerrar bien y que nadie debía salir ni entrar por ordenes del rey, solo debían abrirlo cuando el príncipe Itachi llegara. Los dos guardias obedecieron y Pain se fue, debía darse un relajante baño y descansar.
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Itachi se encontraba mirando el hermoso atardecer, cuando le informaron que su padre había vuelto, había decido salir a dar una vuelta por los alrededores, miro como su hermoso Sharingan bebía agua de un riachuelo, elevo su vista al cielo y vio a varios cuervos volando en el cielo “como me gustaría ser uno de ustedes y así poder volar libremente donde yo quiera” se dijo internamente.
Vaya ¿no que ibas a estar entrenando aniiki? – interrogo el azabache con una sonrisa de lado, bajando de su Chidori – yo pensé que este sitio estaría solitario – comento colocándose al lado de su hermano mayor.
¿Qué sucede Sasuke? – hablo el pelinegro cerrando sus ojos y sintiendo la brisa fresca del atardecer en su rostro – pensé que estarías con tu principito – exclamo divertido.
Itachi no digas tonterías, sabes muy bien que con ese principito mimado solo fue un beso… solo eso y no volverá a suceder – menciono muy serio, tenía una mirada serena, nada de prepotencia y esto no paso desapercibido para Itachi.
Lo sé… lo siento – menciono de la nada el pelinegro mayor con una mirada igual de serena que Sasuke, el azabache solo le miro de reojo – no era mi intención que lo recuerdes…. y sé cómo eres tonto hermano menor, por más fama de semental de todos las naciones que te ganaste – comento con burla esta vez – sé muy bien que nunca has estado con una mujer o doncel – menciono y se echo a reír al ver la cara de sorpresa y enojo de su hermano.
Cállate idiota ¿tú que sabes? – contesto frunciendo su ceño – ¿cómo sabes que no me acosté con nadie?, puede ser que te lleves una gran sorpresa aniiki – contesto con arrogancia el azabache.
Te conozco muy bien otouto B-A-K-A… más de lo que tú piensas – dijo Itachi mirando como el sol se ocultaba dando paso a la noche – sé muy bien que de besos nunca pasaste a mas… la médico de Sunagakure me conto… ¿cómo se llamaba?, ha… Kurura, Rakura – empezó a nombrar divertido al ver el rostro completamente desencajado de su tonto hermano.
¡SAKURA! – grito enojado por la situación – ¿porque siempre te entrometes en mi vida privada?, no tienes ningún derecho – reclamo el menor mirando desafiante a su aniiki al ser descubierto, esa tonta de Sakura le había vendido muy barato a su hermano mayor, Itachi solo reía por lo divertido que era molestarlo.
Tranquilo Sasuke… tu secretito estará bien guardado – informo, empezó a caminar donde su Sharingan – volvamos al palacio – pronuncio subiéndose a su corcel.
Sasuke en silencio monto a su corcel y ambos galopearon rumbo al castillo, no estaban lejos, como siempre apostaron quien llegaría primero, empezando a darse miradas retadoras y sonrisas de complicidad al recordar viejos tiempos, cuando eran niños, las travesuras que cometían, más bien las que cometía Sasuke donde Itachi salía involucrado siempre.
Nación de Iwagakure
¡Majestad! – ingreso un alarmado mensajero inclinándose ante su rey, quien solo estaba sentado en su trono mirando al recién llegado.
Shino ¿qué pasa? – pegunto desconcertado el rey, Nagato Uzumaki hermano menor de la reina difunta Kushina.
Tienen a Minato san, majestad – hablo el pelinegro levantando la mirada al ver a su rey tan cerca – el rey A logro dar con la verdadera monarca de la nación de Kumogakure y ahora los tiene a los dos – explico rápido.
Debo hacer algo… ¿pero qué? – empezó a caminar el rey – Shino quiero una audiencia con Konohagakure manda un mensaje de inmediato – ordeno el pelinegro solo realizo una reverencia y fue a cumplir la orden de su rey.
Nagato fue a su enorme trono y se sentó sus consejeros reales lo miraban con interrogación, Kurenai tenía la cabeza baja al saber que habían atrapado al esposo de su Lady, abrió sus ojos grandes al darse cuenta de un detalle que nadie sabía.
Su majestad pido audiencia – hablo la pelinegra inclinándose, sorprendiendo a todos los presentes por la repentina interrupción – es de suma importación majestad – suplico a su nuevo rey.
Kurenai habla sabes que no tienes que pedir permiso – contesto amable el rey y al ver que la escolta personal de su difunta hermana no hablaba decidió preguntar – ¿qué pasa? – insistió el pelirrojo.
Majestad le rogaría que fuera en privado – contesto apenada al tener la mirada de los consejeros sobre ella – por favor – pidió nuevamente.
Retírense todos ¡ahora! – demando el rey, quería saber que pasaba con la pelinegra, todos se retiraron y una vez nadie se encontraba en el salón, decidió interrogar – ¿qué pasa Kurenai?, explícate – demando el rey.
Majestad, Lady Kushina cuando se fue del reino se encontraba en cinta – informo de golpe la pelinegra agachando su cabeza, no quería mentirle a su rey pero su señora le izo prometer jamás decir nada de nada.
¡Rayos!, maldición Kurenai… ¿por qué no me dijiste nada?, es mi sobrino y ahora el desgraciado de A los debe tener – se paró de golpe y salió del salón dejando sola a la pelinegra – quiero que alisten mi carruaje de inmediato – se escucho el grito de Nagato, estaba desesperado tenía un sobrino y no sabía nada de este “maldito A, si les haces algo esta vez lo pagaras muy caro” pensó el pelirrojo.
Volvió al salón y encontró a la pelinegra de rodillas en el piso, parecía que estaba llorando, por ahora estaba muy molesto con ella por no haberle dicho que tenía un sobrino o sobrina.
Majestad… el… el mensajero snif… de Minato san me… me informo que snif… mi Lady tuvo dos hijos – informo entre sollozos la pelinegra, no se dio cuenta en qué momento su rey estaba parado frente a ella y la levantaba con fuerza y luego sintió un ardor en su mejilla.
Agradece que no te mando a la orca Kurenai… esto se llama traición – grito exaltado el rey – ¿sabes de lo que ese degenerado de A es capaz de hacer con mis sobrinos? – interrogo con una mirada de odio – yo confié en ti… pero eso no volverá a pasar – con esas últimas palabras se fue, dejando a una llorosa y dolida Kurenai.
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Majestad no es recomendable salir en estas circunstancias, debería esperar al alba por su propio bien – hablo su comandante de su ejército.
Ibiki alista todo y vámonos – ordeno el rey sin escuchar a su súbdito, el varón respiro resignado y fue acatar con las órdenes de su rey.
Nagato subió a su carruaje y toda una tropa completa acompañaba a su rey cuidando el bien estar de su monarca, Nagato estaba desesperado debía pedir ayuda al Lord Fugaku si quería con vida a sus sobrinos “aguanten por favor mis sobrinos” dijo internamente el pelirrojo.
Mientras tanto en una de las colinas más altas un jinete se encontraba observando a la tropa de Iwagakure – que interesante… jajajaja esto le interesara saber a mi señor – murmuro el sujeto, jalo de las riendas de su caballo y galopo perdiéndose en el espeso bosque rumbo a las afueras de Iwagakure.
Nación de Kirigakure
Itachi y Sasuke llegaron al castillo y dejaron que uno de sus súbditos se llevara a Sharingan y Chidori, mientras ambos hermanos entraron a palacio los consejeros reales al verlos se inclinaron y retiraron para no molestar a sus príncipes, ambos estaban por ir cada uno a sus alcobas hasta que fueron interrumpidos por el escolta personal de su padre.
Príncipe Itachi, príncipe Sasuke – realizo una reverencia, ambos hermanos miraron a Pain desconcertados al ver su estado, tenía la cara llena de arañazos y en sus manos heridas de mordidas.
¿Qué te paso Pain? – pregunto un curioso Sasuke y sin poder evitarlo se echo a reír seguido de su hermano – parece como si te hubiera atacado un gato salvaje y eso que no tenemos ninguno en palacio – comento divertido, el peli naranja apretó los puños fuerte al ser el centro de diversión de esos principitos.
Así fue príncipe, me ataco un salvaje gato – contesto con los dientes apretados al estúpido príncipe, Pain siempre había odiado mucho a ese par, pero más al Uchiha menor “tranquilo Pain responde porque ese estúpido de Sasuke puede quejarse con Madara sama” se dijo internamente – príncipe Itachi su padre le preparo un obsequio y en estos momentos se encuentra en sus aposentos – comunico al Uchiha mayor, se quedo inclinado esperando las ordenes de sus príncipes.
Puedes retirarte Pain – dijo Itachi, vio como el escolta personal de su padre se fue y miro a su hermano menor – no pensé que padre me diera un obsequio – conto con una sonrisa de medio lado – que lastima otouto baka que para ti no dejara ninguno – se burlo del azabache, quien solo miro enfadado a su hermano mayor.
Cállate idiota, para padre siempre fuiste su favorito – confeso serio el azabache, sabía que su padre jamás lo trataría como a su hermano y que parecía como si su padre lo odiara “eso antes me dolía pero ahora no, muy pronto cuando tenga lo suficiente me marchare para siempre de este maldito reino” pensó Sasuke, Itachi al ver el rostro de su otouto decidió cambiar el ambiente.
Sasuke… ¿por qué no vamos a ver mi regalo? – propuso divertido el mayor, no quería ver a su hermano así “¿me pregunto porque padre siempre trato de manera fría a Sasuke?, si ambos somos sus hijos, tal vez sea por las travesuras que cometía de pequeño” pensaba el mayor.
Hmp… bien andando – contesto el azabache, ambos salieron del salón principal y recorrieron el enorme pasillo que estaba alumbrado con varios candelabros, llegaron a la planta de arriba y empezaron a subir escalón por escalón hasta llegar a sus alcobas principales, pasaron por la alcoba principal de su padre, no querían molestarlo.
Ambos hermanos Uchihas se miraron entre sí al estar en la puerta de la alcoba de Itachi y vieron que dos guardias custodiaban la puerta, quienes al ver a sus príncipes se inclinaron y dieron paso para que ingresaran, Itachi les ordeno retirarse y al estar solos nuevamente.
Meda mucha curiosidad – confeso con una sonrisa tonta el mayor, Sasuke miro de mala manera a su hermano mayor por hacerlo esperar tanto, el azabache tenia curiosidad de ver que era “maldita curiosidad” se reprocho internamente Sasuke.
Quieres dejar de actuar como un idiota y abrir de una vez… no tengo toda la maldita noche – dijo enojado Sasuke.
Tranquilo tonto hermano menor solo quería darle suspenso a mi regalo – conto acercándose hasta estar frente a su hermano y susurrarle a su oído – y desesperar tu curiosidad – confeso divertido al ver como su hermanito le dio un fuerte golpe.
Itachi se quejo por el dolor y era mejor entrar antes de que a su otouto baka se le acabara la poca paciencia que tenia y lo golpeara de nuevo “si que sus golpes duelen mucho” se quejo internamente el pelinegro, ambos ingresaron, claro Itachi fue el primero en ingresar y lo único que sintió fue un fuerte dolor y el piso de su alcoba “¿por qué a mí?” se lamento el mayor al sentir un fuerte golpe y un peso en su encima.
Hmp – fue lo único que salió del azabache al ver como su hermano era golpeado por un rubio de cabello largo que estaba en su encima golpeándole, mejor dicho mordiéndole, pero algo llamo la atención del azabache al recordar ese cabello rubio “no puede ser” pensaba Sasuke y salió de sus pensamientos al escuchar la voz de su idiota hermano.
¿Sasuke quieres ayudarme?, no se qué le pasa, pero… ¡quieres dejar de morderme! – interrogo Itachi al sentir una fuerte mordida en su antebrazo y miro a su atacante quedando maravillado al verlo “pero que hermoso” pensó el mayor, todo hubiera estado mágico, si no fuera porque su extraño atacante lo volvió a morder – ¡SASUKE! – esta vez grito al tonto de su hermano, que solo parecía estar metido en sus propios pensamientos, mientras el sufría por un ángel que no paraba de morderlo “ángel no, mejor dicho un salvaje” se corrigió el pelinegro.
¡MALDITO DESGRACIADO DONDE TIENEN A MI HERMANO! – gritaba Deidara a cada mordida que daba al pobre de Itachi que no hacía nada para defenderse – contesta ¡donde esta mi hermano! – interrogo furioso el doncel empezando a querer ahorcar al pelinegro.
Sasuke salió de sus pensamientos al escuchar esas palabras y fue rápido a la ayuda de su hermano, sujeto al doncel y lo aparto de su hermano como si el rubio no pesara nada, dejando a un sorprendido Deidara “malditos” pensó el rubio al no poderse mover estaba de espaldas con las manos sujetas por su captor, Sasuke lo tenía bien sujeto al rubio.
Eres lento aniiki – comento con una sonrisa burlona Sasuke, mientras veía como su hermano se ponía de pie y arreglaba su ropa – ¡no me darás las gracias! – siguió burlándose, quería molestarlo ahora que era su oportunidad.
SUÉLTAME MAL NACIDO – grito Deidara empezando a removerse y así tratar de soltarse del agarre – ¡idiotas, malditos, salvajes, barbaros! – empezó a soltar insultos a diestra y siniestra causando un tic de enojo en el Uchiha menor.
Mira quien lo dice – respondió ya irritado Sasuke, tenía poca paciencia y ese rubio se lo había echo terminar en tan poco tiempo – quién es él ¿Itachi?, y ¡qué le has hecho para que este enojado contigo! – interrogo el azabache, llamando la atención de su estúpido hermano que estaba como tarado mirando al rubio.
Nada tonto hermano menor – exclamo el mayor mirando al doncel rubio, ese cabello largo, esos ojos azules y ese carácter le recordaron a – tú eres el niño que estaba en el bosque aquella vez ¿verdad? – pregunto Itachi si no le fallaba la memoria era el mismo niño que vio en aquel bosque, sorprendiendo tanto a Sasuke como a Deidara que dejo de removerse y mirar bien al varón de enfrente.
Tenía el pelo largo y negro, piel tan blanca y sus ojos eran negros con reflejos rojos, alto y muy guapo, además tenía un cuerpo “para de una vez Deidara y concéntrate” se regaño internamente, recordó las palabras de ese pelinegro y recordó su niñez.
********** Flash back **********
Buscaba a mi hermanito porque debíamos comer y papá me mando a buscarlo, lo vi correr por los arbustos unos minutos antes– ¡DEI NII… AYÚDAME! – escuche el grito de mi pequeño hermanito y cuando llegue observe como Naru era arrastrado por un niño pelinegro, que parecía tener mi edad, me asuste mucho y corrí hasta bloquear el paso al niño azabache en su fuga.
¡Oye tú... maldito!, ¿donde crees que llevas a mi pequeño y lindo hermanito menor?, ¿he?, contesta – dije muy enojado quería saber porque ese niño lo tenía agarrado, tal vez Naruto le izo una de sus bromas.
Hmp... ¿eh?, bueno yo... solo quiero presentar a mi padre, a mi futuro esposo – me contesto cómo si nada el niño azabache, jalando a mi hermanito, que estaba como tomate maduro por como ese niño pelinegro declaro de querer ser su esposo eso me dejo en shock.
Mira... como te explico... – “atrevido” pensé, busque la mejor forma de cómo explicarle que ellos eran muy pequeños y que faltaba mucho para que ambos se puedan casar a tan corta edad, debía buscar la manera de que soltara a Naru – todavía son muy pequeños para que se casen... además, mi hermanito está muy pequeño para que sea tu esposo – explique, tratando de hacerle recapacitar al pequeño azabache que no quería soltar a Naruto.
¿Y?, eso no me importa, el será mi esposo y listo – me contesto muy serio y me puse nervioso al ver cómo me miraba de pies a cabeza – tu igual eres un doncel – me dijo acto que me causo un tic en la frente "se paciente y no asesines al pequeño atrevido" me dije – ya lo decidí... serás para mi aniiki, eres de mi tamaño y a mí me gustan más pequeños – me confesó y eso causo mas mi enojo "mata al atrevido y luego huye con tu lindo hermanito" eso era mataría al niño y así libraría al mundo de un futuro pervertido sin causa.
Dei nii – escuche las voz preocupada de mi hermanito y sabia porque era, tenía un aura maligno que rodeaba todo mi cuerpo y una sonrisa espeluznante, cuando estaba listo para atacar al niño azabache, pero todos mis instintos homicidas terminaron al ver como un niño mayor que yo corrió como un ninja y golpe al otro niño dejándole casi inconsciente y con eso libero a Naru quien corrió junto a mi buscando refugio que le brinde de inmediato, pero no podía dejar de mirarlo, era el niño más guapo que había conocido en mi vida, tenía el cabello largo y negro sujeto en un cola baja, su piel era blanca y esos ojos negros con reflejos rojos.
Me disculpo por el mal momento que mi otouto baka les causo – hablo el pelinegro mayor, realizando una reverencia, su voz era muy linda, además era muy educado y cortez – nos vemos... lo siento – se disculpo y sin que le pueda responder sujeto a su hermano y se fue corriendo dejándome con la curiosidad de saber su nombre y quien era o de donde venían.
Dei nii… ellos son muy extraños ¿verdad? – escuche que me pregunto Naruto, yo solo tenía la vista fija donde ese niño pelinegro se había perdido – ¿crees que los volveremos a ver? – me volvió a preguntar Naru y al verlo vi que tenía la cara de preocupación.
Tal vez… de todos modos él quería ser tu esposo – le conteste divertido para que dejara de preocuparse y vi que tenia un sonrojo y pánico – tranquilo Naru chan, que yo te cuidaré de ese atrevido – propuse y soltó un suspiro de alivio por mis palabras – vamos, que papá debe estar preocupa por nosotros – le ordene y me di vuelta para regresar pero antes di un vistazo más hacia atrás antes y volver con mi padre.
********** Fin Flash back **********
Deidara al darse cuenta de quién era abrió sus ojos grandes y volvió a mirar al pelinegro que solo le miraba en espera de una respuesta.
Y ¡me recuerdas! – interrogo Itachi al ver como ese rubio lo miraba una y otra vez – yo te recuerdo perfectamente – confeso el mayor regalándole una sonrisa sincera.
Yo… yo si te recuerdo – contesto al fin Deidara con un leve sonrojo en sus mejillas al saber que ese varón tan guapo era el mismo niño que llamo su atención hace años atrás.
Qué bien… Sasuke puedes soltarlo – ordeno el pelinegro, Sasuke algo indeciso libero al doncel, quien al estar libre se acaricio las muñecas al sentir dolor, se dio la vuelta y miro con enojo al causante de su dolor.
Idiota me lastimaste ¿que no te enseñaron tus padres a ser delicado con los donceles y mujeres? – dijo el rubio y miro bien al varón que tenia al frente, cabello negro con reflejos azules, ojos negros y rasgados, piel blanca y alto, era muy guapo debía reconocerlo y se acordó de quien era – tu… eres el niño atrevido que se quería robar a mi hermanito – acuso con su dedo el doncel, causando una carcajada a Itachi y en Sasuke confusión.
Sasuke ¡no me digas que no te acuerdas de él! – interrogo divertido Itachi al ver a su hermano con cara de interrogación – si que eres lento, tu escapada al bosque, tu esposo Sasuke… eres muy lento – se burlo de su otouto baka al verlo que estaba vez si recordó al doncel rubio.
E-Eso… quiere decir que – Sasuke se sorprendió mucho y miro bien al doncel y era el mismo niño de años atrás tenia las mismas fracciones físicas “eso quiere decir que mi doncelito dorado no murió” se dijo y agarro al doncel de ambos hombros asustando al rubio – ¿dónde está él?, ¿dónde está tu hermano?, ¡habla! – exigió el azabache, Deidara al recordar donde y porque estaba en ese lugar su mirada cambio.
Naru – murmuro y se soltó del agarre y avanzo donde Itachi quien dejo de sonreír al ver la cara de preocupación que tenía el rubio – el rey nos trajo a este lugar y tiene a mi hermano… – empezó a contar Deidara todo lo sucedido, ante la atenta mirada de ambos Uchiha que estaban sorprendidos por como su padre actuó – por favor deben ayudar a mi hermano… Naru no sabe defenderse – suplico el rubio mirando a los ojos negros de Itachi.
Itachi y Sasuke se miraron entre si y ahora entendían el regalo, ese rubio era el obsequio de su padre y para el colmo tenia al otro rubio menor en su poder y se preguntaron “¿Qué tratas de hacer esta vez padre?” pensaron al mismo tiempo.
¿Dónde está tu hermano ahora? – pregunto Itachi, Sasuke estaba impaciente de saber dónde estaba el menor, su corazón latía muy fuerte al saber que ese doncelito no había muerto y que estaba vivo y justo en su castillo muy cerca.
No sé, cuando desperté me encontraba aquí – hablo Deidara mirando como ambos varones tenían las caras serias – debemos buscarlo, se que son hijos del rey y que tal vez no quieran ayudarme pero… eso no me detendrá para ir en su búsqueda – comunico exaltado esta vez el rubio.
Tranquilo… mira primero soy Itachi Uchiha y el Sasuke Uchiha, mi hermano menor – se presento y presento a su hermano – ahora me gustaría saber tu nombre y luego iremos en busca de tu hermano – propuso el mayor, causando que Sasuke frunza su ceño.
Deidara… ahora quiero buscar a mi hermanito – contesto alterado al no saber donde estaba o como se encontraba su hermano menor.
Bien Deidara, primero iremos a preguntar al escolta personal de mi padre o a sus consejeros – hablo el pelinegro – quiero que delante de ellos no hables es para no levantar sospechas – explico, el doncel solo asistió en forma afirmativa.
Los tres salieron y fueron en busca de alguno de los subordinados al servicio de su padre, Deidara miraba maravillado las reliquias que tenía el castillo, pero estaba preocupado al no saber donde podría estar su hermano menor, mientras Sasuke estaba pensando como seria el momento de su reencuentro con su doncelito dorado.
Llegaron al salón principal y ahí encontraron a Pain que hablaba con los demás consejeros, estos al ver a sus príncipes se inclinaron y esperaron la orden de los hermanos Uchiha.
Pain necesito saber algo… los demás pueden retirarse – ordeno Itachi muy serio, todos sin levantar la vista se fueron, Deidara miraba callado todo esto.
A sus ordenes príncipe – contesto Pain mirando de reojo con odio al doncel que estaba observándole de la misma forma, Itachi se dio cuenta de esto y decidió terminar con el asusto lo más rápido posible.
¿Dónde está mi padre? – demando saber Itachi, debía ser muy cuidadoso con sus preguntas y sus actos para que este no levante sospechas.
Su majestad se encuentra en el ala sur del castillo, ordeno no ser molestado mi príncipe – conto Pain, mientras era observado por un Sasuke muy enojado al no saber nada del doncelito dorado y pensar que podía estar haciendo su padre con Naruto lo tenía más enojado y a la vez preocupado.
¿Cuál es la razón de no ser molestado? – hablo muy serio esta vez Sasuke, no quería perder más tiempo.
Su majestad ordeno no ser molestado por que pasara la noche con su consorte real – contesto el peli naranja desconcertado a la insistencia de saber donde estaba Madara sama, Itachi se dio cuenta de eso y decido terminar, no deberían levantar sospechas.
Puedes retirarte Pain – demando el pelinegro, Sasuke iba a protestar pero su hermano le detuvo con la mirada, una vez los tres solos decidió contar – debemos hablar con un sirviente eso será mejor – propuso, nadie le dio la contra, al llegar donde la servidumbre preparaban los aperitivos, encontraron al cocinero real – ¿Chouji, el banquete a que se debe? – interrogo Itachi a un varón de pelo castaño y regordete quien al escuchar la voz de su príncipe se asusto.
¡Oh!... mis príncipes – hablo realizando una reverencia – el rey mando a prepararlo para su consorte – conto el cocinero, Itachi no era ningún tonto y rápido se imagino quien podría ser el consorte de su padre.
¿Y lo viste?, ¿sabes cómo es el consorte de mi padre? – exclamó el pelinegro ante la atenta mirado de Sasuke y Deidara que al igual que Itachi ya estaban imaginando quien era el consorte.
Si mi príncipe – contesto algo confuso pero al levantar un poco la vista miro al acompañante y se sorprendió, el parecido que tenía ese rubio al otro – se parece mucho a su acompañante príncipe – contesto el cocinero, Sasuke al confirmar sus sospechas salió rápido de la cocina real, Itachi al ver esto sujeto la mano de Deidara y fue por su hermano – ¡Sasuke espera! – lo detuvo al saber lo impulsivo que era.
¡No!, padre se volvió loco, debo salvar a mi doncel dorado – comento desesperado Sasuke, al saber que su padre quería como pareja a su doncel.
Estoy de acuerdo con salvarlo Sasuke, pero la pregunta es ¿de qué manera? – opino el mayor – padre lo eligió como su consorte y si ahora está con él no podemos hacer nada – informo Itachi, todos estaban al mando de su padre y si ellos interrumpían el ala sur serian ejecutados por muy hijos que sean del rey, pues Madara Uchiha había prohibido que al ala sur absolutamente nadie ingresara si no era con su autorización.
Itachi por favor… deben ayudar a mi hermano – hablo el doncel esta vez desesperado al saber que ese viejo rey quería como pareja a su hermanito – mi hermano aun es menor y… y – no pudo terminar al ser interrumpido por el mayor.
Lo sé y eso aremos – conto el pelinegro, por alguna razón no quería ver triste al doncel que tenía en frente – Sasuke debemos hablar con tus amigos – comento, el azabache asistió y nuevamente salieron rumbo al salón principal, al llegar Itachi explico el plan y se llevo a Deidara, mientras Sasuke salió a toda prisa del palacio, tomo a su caballo y cabalgo a todo galope a las afueras de la nación.
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En el castillo del ala sur el rey Madara miraba por el balcón, como el cielo estaba todo oscuro y las estrellas brillaban en todo su esplendor, había mandado a que prepare un banquete de bien venida para su consorte, se dio la vuelta al escuchar la puerta ser tocada y escuchar que lo llamaban.
Majestad su consorte ya está listo – comunicaron del otro lado, el rey Madara rápido avanzo a la puerta y el mismo abrió las enormes puertas, quedando maravillado con lo que sus ojos miraban, el rubito había sido bañado y cambiado de ropa, por uno más ligero que dejaba poco a la imaginación.
Puedes retirarte y que nadie me moleste – ordeno y sin ninguna contemplación jalo del doncelito y cerró la puerta, una vez estando los dos solos el rey sin perder tiempo agarro la delicada muñeca de Naru y lo llevo hasta su enorme cama y lo recostó ahí – eres tan hermoso… tus ojos son los más bellos que he visto en toda mi vida – empezó hablar el rey, mientras lentamente desataba el amare del camisón.
Naruto al ver las intenciones del mayor, con sus manos sujeto la única prenda que llevaba puesto con todas sus fuerzas – no… por favor no – hablo con voz temblorosa al saber que trataba de hacer ese rey.
Madara al ver la resistencia que el doncelito ponía sonrió de lado, no quería causarle daño, pero si no quería complacerlo que podía hacer – ¿quieres que en este momento mande a matar a tu hermano? – amenazo el monarca y su sonrisa se amplió mas al ver como el rubito movía la cabeza en forma negativa – bien… entonces debes complacerme Naruto – informo con arrogancia y volvió a su labor pero esta vez empezó a repartir besos cortos por el cuello del menor.
Naruto al sentir esos labios en su piel se asqueo, sentía nauseas, no le gustaba para nada los toques de ese rey, cerro con fuerza sus ojos al sentir como su frágil piel era succionada “no quiero esto, por favor Dei nii ayúdame” rogaba internamente el menor, sus manos las izo en puños y apretó con fuerza hasta causarse daño.
Tu piel es adictiva – susurro el rey en el oído del menor, esa piel era exquisita no quería dejar de besarla y saborear, vio como en el cuello de Naruto había una marca roja muy notoria – muy pronto serás mío… solo mío – menciono entre besos, sus grandes manos empezaron a deslizarse por la estrecha cintura hasta llegar a las caderas y nuevamente repetir el mismo procedimiento uno y otro vez.
“No quiero esto por favor alguien que me ayude” pensaba Naru chan, dejando que por primera vez salgan lagrimas de sus hermosos ojos azules, al sentir como una de las manos del rey bajaba por su pierna y que empezaba a subir la fina tela “no quiero esto” se lamentaba Naru chan, su cuerpo se tenso al sentir esa mano fría en su cálida piel, como tocaba su pierna y empezaba a subir más arriba estaba por llegar a su muslo – no por snif… por favor – empezó a sollozar fuerte Naruto, el rey al notar como el cuerpo del menor temblaba se separo y lo miro, tenía la cara roja por el llanto, esos preciosos ojos reflejaban tristeza.
Madara no quería dañar al precioso doncelito, esta vez aria las cosas bien, no violaría a Naru chan pero solo por hoy se dijo internamente, se puso de pie y arreglo su vestimenta, estaba por hablar al doncel pero fue interrumpido por el ruido de la puerta ser tocada.
Majestad el banquete ya está listo – informaron del otro lado, el rey Madara muy molesto avanzo hasta llegar a la puerta y abrirlo con brusquedad, el pobre cocinero bajo de inmediato la vista al estar al frente de su rey y verlo tan molesto.
Retírate de inmediato antes de que pierda la paciencia y ordena que todo esté listo ¿porque si falta algo?, los mandare a que corten sus cabezas ¡ahora! – demando frunciendo su ceño, el cocinero realizo una reverencia y en esa posición se fue lo más rápido que pudo para dejar todo en orden.
Naruto al ver como el rey fue a la puerta, la abrió y amenazo al pobre cocinero se encogió como un bebe abrazando sus piernas, estaba un poco feliz al saber que ese rey no continuo con su cometido y por la interrupción, estaba agradecido por su buena suerte, al escuchar ser cerrada la enorme puerta nuevamente, su cuerpo se puso tenso.
Mandare a uno de mis sirvientes a que te cambien de ropa y luego bajaras para acompañarme en el banquete que hice preparar en tu honor – conto el rey, luego salió de la alcoba, dejando a un tranquilo Naru chan, a los pocos minutos entro una mujer mayor que le dijo que le ayudaría a cambiarle la ropa cosa que se negó, pero la mujer le comunico que si no lo hacía perdería la vida, el doncelito tuvo que aceptar para que la pobre mujer no muera.
Continuara…………………………….…….........