— ¿Y cuántos años tienes, Haruka?—pregunto animado, caminando despacio junto al pequeño, tomándole de su mano—.
—Cinco
— ¡Eres tan adorable y pequeño! No entiendo como tus padres te dejaron aquí solo
—Bueno… en realidad yo estaba con mi papá, pero mamá suele decirle siempre que es muy torpe, así que quizá por eso me olvido aquí
—Espera, Haruka, ¿Dices que estabas aquí con tu papá y él… te olvido aquí?—pregunto curioso el chico serpiente, acercándose al pequeño, tomándole de la otra mano, caminando así los tres juntos—.
— ¡Es lo que les digo! Papá es muy torpe. El siempre olvida las cosas, se pierde y hace enfadar mucho a mamá
— ¿Entonces tus padres no se llevan bien…?—pregunto con algo de tristeza, no le gustaba la idea de que en un futuro tendría una hermana que se casaría con un inútil. Ya hasta se imaginaba él mismo como todo un anciano, ni cómo defender a su pobre hermanita—.
— ¡Claro que sí!—interrumpió con entusiasmo el alegre chiquillo, sacando una sonrisa por parte de los mayores— Papá ama mucho a mamá, y mamá ama mucho a papá ¡Y yo los amo a ambos!
— ¡Haruka eres tan adorable! Me encanta saber que tendré un sobrino tan adorable
— ¿Sobrino?—repitió con interés Colt, alzando una ceja ante lo dicho por el castaño— ¿Entonces Haruka es…?
— ¡Haru!
— ¿Mamá?
Los tres prestaron atención alrededor. Colt y Liam se miraban extrañados, notando más cerca los gritos que llamaban al pequeño, quien tan solo saltaba entusiasmado. De entre los arbustos se escuchaban dos voces discutir, acercándose cada vez más.
— ¡Haru! No lo puedo creer, aquí está mi bebé… ¡Eres un torpe, no puedo creer que olvidaras a tu propio hijo!
— ¡L-lo siento tanto, de pronto se perdió de mi vista!
De entre la verdosa vegetación, apareció corriendo un apuesto jovencito de cabellera castaña, llegando hasta el pequeño, abrazándolo con fuerza, besando su cabeza y mejillas. Momentos después apareció otro hombre más, con un rostro algo avergonzado.
— ¡Me preocupaste mucho, Haru!
—Lo siento, mamá
—No te preocupes cariño, todo fue culpa de tu padre
— ¡Lo siento tanto Haru, Liam, prometo no perder a nuestro hijo de nuevo!
— ¡Eso dijiste la ultima vez, Colt!
La boca de ambos protagonistas no podía estar más que abierta, incluso si se pudiera, seguro que su mandíbula llegaría hasta el suelo. Se miraron entre sí, completamente sorprendidos, después dirigieron su vista hasta tan tierno cuadro familiar, ¡Donde estaban ellos juntos y con un hijo!
— ¡Mamá, papá, mis hermanos mayores me ayudaron a buscarlos!—dijo con su tierna vocecilla el pequeño azabache, señalando a los dos chicos que seguían con la boca abierta—.
— ¿Enserio? Vaya—El castaño mayor suspiro aliviado, cargando a su hijo entre brazos, dirigiendo entonces su vista a los jóvenes contrarios— No saben cuánto les…
Sin embargo callo enseguida, sonrojándose a más no poder. ¡Frente a él estaba él mismo! Y eso no era todo, su Colt también estaba ahí, tan joven y torpe como le conoció hace tiempo.
—E-esto…
— ¡Mamá, papá, los hermanos mayores se parecen a ustedes!
—Eh… s-sí Haru, se parecen un poco—respondió sonriente, dirigiendo después la mirada seria a su esposo, quien continuaba igual o más sorprendido que el— Colt, esto…
—Está no es su línea de tiempo—Lo dijo con una seriedad que sorprendió a la pareja de jóvenes, más no a su esposo, sabía cómo podía ser maduro en algunas ocasiones— ¿Cómo llegaron aquí?
—V-verá…—Ni siquiera sabía cómo referirse a su versión adulta, estaba completamente sorprendido de saber que formaría una familia con el príncipe— N-nosotros estamos en una misión que…
—Deben marcharse pronto…—Interrumpió el Liam un par de años mayor, siendo abrazado por su esposo, quien continuaba con esa mirada seria— Lo peor no ha sucedido, deben prepararse para…
De pronto todo a su alrededor comenzó a temblar, asustando un poco al pequeño niño que se abrazo con fuerza de sus padres. Liam y Colt se sorprendieron al ver aparecer dos libros frente sí, sintiendo un extraño palpitar en su pecho y de nueva cuenta una luz grisácea y blanquecina.
— ¿¡Q-que es esto!?—gritó asustado, sintiendo como empezaba a levitar su cuerpo, además de ponerse traslucido y de tonalidad verdosa— ¡Colt!
— ¡N-no estoy muy seguro, príncipe!—Dijo en las mismas condiciones, los libros estaban unidos, no sabía la consecuencia de aquello, o lo que el rey fuese a hacer…—.
Sin más ambos jóvenes desaparecieron del lugar, dejando las cosas en calma. El pequeño Haru se aparto un poco del abrazo hacia sus padres, mirando alrededor.
— ¿Y los hermanos mayores?
—Bueno ellos… tenían cosas que hacer y se marcharon—le respondió de manera tranquila a su hijo— Ahora nuestro tema es, ¿¡Porque tu padre te olvido de nuevo!?
— ¡L-lo lamento Liam!
La pelea que enfrentarían sus versiones pasadas estaba a punto de comenzar, solo rogaban porque supieran que hacer, sino toda la línea de tiempo se vería fragmentada.