Primera vida
Entre a la pequeña cafetería que a pesar de los años no había cambiado en nada su aspecto
Seguía igual de pequeño y gozaba de la misma clientela
Gire un poco mi cabeza y, disimulando una sonrisa, me dirigí a la mesa donde me esperaba un rubio que no dejaba de temblar
-Hola Tweek- el rubio se sobresalto y me miro muerto de nervios
-C-craig viniste- me reí de su rostro escéptico, de seguro dudaba que aparecería
-¿Por qué no vendría?- mi burla en vez de molestarlo lo hicieron sonrojarse -fuiste tu quien me pidió que viniera-
Tuve que contener una mueca ante lo feliz que se veía
No es como si no quisiera que fuera feliz, lo que me molestaba era la razón que escondía detrás de esa sonrisa
Respire profundo, si quería que todo saliera bien tenía que hacerle creer que no tenía idea de lo que estaba tramando
-Precisamente- coloco sus manos sobre la mesa y empezó a jugar con sus dedos en un gesto que intento hacer pasar como nervioso -la ultima vez que nos vimos no fue muy agradable-
-Me molestaron tus palabras, es cierto- acepte con desinterés, esperando que no se diera cuenta del enojo que me provocaba recordar tal suceso -pero he pensado en lo que me dijiste ese día- espere alguna reacción, como me lo esperaba, seguía con su actuación -y llegue a la conclusión de que- deje que sufriera un poco, me tome el tiempo para verlo tener un pequeño ataque de ansiedad -puede que tengas razón-
Ante eso, él levanto la cabeza sorprendido, sine embargo, en sus ojos logre ver algo de alivio
Era justo las palabras que él estaba esperando
-¿E-enserio?- luego bajo su cabeza, aparentando preocupación -¿y Stan?-
-¿Qué hay con él?- respondí de inmediato
Él me miro con duda e incluso confundido, no parecía entender mi desinterés repentino
-D-dijiste q-que eran p-pareja-
-¿Y?-
Me miro con sorpresa para después negar mirándome desconfiado
-¿Le dijiste que venias aquí?-
-Me preguntaba hasta cuando seguirías con tu actuación-
-Contesta por favor-
-Él no lo sabe- respondí como si no me importara -tampoco le dije que me llamaste-
-Oh ¿te estas revelando?- pregunto burlón
-¿Tienes algún problema con eso?-
-Por el contrario- sonrió -me alegra que hayas entrado en razón-
Lo vi por fin dejar de hacer ese estúpido juego con sus dedos
Estiro su mano para alcanzar la mía, que también, estaba sobre la mesa y coloco la suya sobre la mía
-¿Y según tú- mire nuestras manos -que es que haya entrado en razón?-
-¿No es eso obvio?- ahora unió su otra mano -¡por fin vas a dejar a Stan!- me dijo muy contento
El agarre que sus dos manos ejercían aumento sobre la mía
-Aún no lo he decidido-
Su sonrisa cayo y su agarre también se debilito
-¿Entonces no lo harás?-
-He dicho aún- erguí mi espalda. Esta vez fui yo el que tomo sus manos entre las mías -¿Por qué no me convences?-
Su sonrisa volvió tan rápido como un rayo
-¡Sí eso haré!- volvió a tomar control del agarre
Casi estaba sobre la mesa, poco más y también estaría sobre mí
Gire mi cabeza llamando a la mesera
También hice un esfuerzo sobrehumano por no voltear la mesa y hacer un escandalo
Eso es lo que haría Stan
Pensar en él me ayudo a calmarme para poder disimular el creciente enojo en mi interior
Con una sonrisa más falsa que la virginidad de Wendy, retire mis manos del agarre de las suyas
Fue una batalla silenciosa, estaban tan aferradas que creí que primero perdería la mano antes de que me soltara
Mph, ahora estaba exagerando como Stan
Después de hacer el pedido, volví a centrar mi atención en el rubio frente a mí
Sus ojos brillantes me miraban esperanzados
Lo mire un momento y me puse a pensar
Tweek es lindo, no lo niego, sería el Omega perfecto de no ser por sus tics. Más allá de eso es en extremo sumiso, alguien que acata ordenes a la primera
Pero la sumisión tiene un límite y en mi opinión Tweek la había sobrepasado hace mucho tiempo
-¿Sucede algo?-
Me di cuenta que él no había dejado de mirarme por un buen rato, al principio fue beneficioso pues me permitió pensar pero ahora me incomodaba su mirada
Los ojos de Tweek a mi parecer siempre fueron tildados de locos, pero siempre había creído que fue porque eran algo saltones
-Sólo veía lo guapo que eres- el rubor cubrió sus mejillas -los años te han sentado bien, estas aún mas atractivo que en la secundaria-
-Lo mismo podría decir de ti-
Devolví el cumplido, sólo por hacerlo
Tweek no había cambiado nada, seguía igual a como lo recordaba
Eso no quiere decir que en su momento no lo creyera bonito, por el contrario, en ese tiempo siempre creí que él era el ser más hermoso que alguna vez pude haber conocido
Ahora pienso de forma diferente
A mis ojos el sigue siendo hermoso, pero es una belleza que podrías decir de actrices y modelos. También dejo de ser lo único en el mundo para mí, esta vez podía ver más allá de su persona y encontrarme con algo que realmente me importaba
Repentinamente se llego la hora de irnos
-¿Por qué no nos volvemos a ver mañana?- sus ojos expresivos me miraron asombrados -siento que hoy fue muy poco el tiempo que hemos hablado-
-¡Por supuesto!-
Nuevamente, cayo en la trampa
…
Segunda vida
-Perdona pero…¿Qué hacemos aquí?- me pregunto el rubio muy confundido
Me perdí un momento viendo el Wall-mart frente a mí
-¿M-me trajiste de co-compras?- a pesar de que era una pregunta que pudo haber sonado emocionada, su tono extrañado era palpable
-Me sorprende que no lo recuerdes Tweek- él solo me miro más confundido si era posible -aquí antes era la Charca de Stark-
Ante eso él abrió mucho sus ojos y su boca formo una perfecta “o” del asombro que le provoco mi revelación
-E-es verdad- parecía que apenas y podía salir del asombro -hace tie-tiemp-po que no venia a este lug-gar-
-Bueno, después de su llegada- señale la tienda azul -todos parecieron olvidarse de su existencia-
No es como si la Charca hubiese desaparecido, más bien estaba destruido y por eso nadie había vuelto a pisar este lugar en años
-Craig ¿P-por qué me traj-jiste aquí? ¡ngh!-
-Tuvimos muy buenos recuerdos en este lugar ¿recuerdas?-
-N-no estoy muy seguro d-de a cual de t-t-todos te r-refieres- me contesto alegre -p-para mí, todos fu-fueron b-buenos-
-¿También esa vez que casi te caíste del bote porque creías que nos perseguía un tiburón?-
-¡E-esa vez f-fue po-por-que…- me contesto exaltado -¡n-nos hi-cie-cieron una br-broma!-
-Me pregunto porque quisieron arruinar nuestra cita-
-C-cartman estaba a fa-fa-vo-vor de nuestra rel-la-lación así q-que no p-pu-d-do ser él-
La Charca de Stark era nuestro lugar favorito de pareja
Después de la llegada del Wal-Mart todos se olvidaron de él y nosotros, cansados de ser el espectáculo del pueblo entero y aceptar nuestra homosexualidad sin la presión social, decidimos reclamarlo como nuestro
Ese día era especial ya que sería nuestra primera cita como pareja de Alfa y Omega
Era un tipo de celebración por descubrir nuestras castas y que estas no se convirtieran en un impedimento para nuestra relación
Las expresiones de todos ese día fueron caoticas y hasta cierto punto interesantes
La de Tweek, bueno, fue la de siempre, un manojo de nervios
Para tranquilizarlo decidí celebrar en el único lugar donde nos sentíamos a gusto el uno con el otro
Traje algo así como un picnic, aunque solo se tratara de un refresco y sándwiches, rente un bote y nos estuvimos en silencio durante un rato
O al menos eso intentamos, los constantes tics de Tweek quedaron en segundo plano en cuanto nos concentramos en relajarnos y disfrutar de una cita agradable
Hasta que claro, en un intento por verme, Tweek abrió tímidamente uno de sus ojos y capto algo que científicamente jamás se encontraría en el lago pero la paranoia del rubio no lo ayudo mucho en ese momento
-¡¡Un tiburón!!-
-¿Qué?-
-¡Auxilio! ¡es un tiburón!-
Él intento saltar del bote pero por suerte logre detenerlo a tiempo
Después de que le preguntara y me señalara la ubicación del tiburón me acerque, muy a pesar de las suplicas de Tweek, sólo para sacar lo que parecía un cojín en forma de aleta
En ese entonces, Tweek se sintió avergonzado y yo molesto por lo que sabía había sido una broma de algún imbécil queriendo molestarnos
Ahora, cada vez que recordaba la cara asustada del rubio no podía evitar burlarme de él
En verdad había sido sólo un poco divertido
-Tengamos una cita-
-¿Q-que?-
-Esta vez sin interrupciones- me regrese al auto y abrí la cajuela -y sin tiburones- de ella baje una canasta y un refresco
Lo tomé de la mano y lo lleve a la orilla de la Charca donde había un bote que me ocupe de rentar en el camino hacia aquí
Fue algo difícil ya que pensé que la persona que me rento el bote aquella vez ya no existía
Para mi sorpresa no sólo seguía vivo, sino que parecía muy feliz y relajado con su vida a pesar de ser un Beta viejo y con arrugas
Subí yo primero para después ayudarlo a subir a él. Deje la canasta y el refresco en medio del bote mientras ambos nos sentamos en un solo extremo
-Sería muy malo que se volteara- comente esperando asustar al rubio y hacerlo sentarse en el lado contrario al mío
-N-no im-impo-porta- dijo controlando forzadamente su paranoia -m-mien-tras es-este c-con-ti-tigo, n-no m-me su-suce-dera na-nada-
-¿Cómo puedes estar tan seguro?-
-N-no es-estoy se-seguro, s-sólo c-confío e-en ti- se abrazo a mi brazo -s-se que m-me pro-t-te-ge-r-ras-
Decidí no contestarle. Ambos nos quedamos en silencio un rato hasta que él volvió a hablar
-L-la Charca s-sigue sien-siendo de i-igual ta-tamaño-
-Sí, supongo que sigue igual-
-Si-sigue i-igual- sentí su agarre aflojarse -p-pero n-nos-otros n-no-
Eso sí me llamo la atención, pero preferí hacerme el tonto
-Es-este lu-lugar es p-per-fec-to- continúo -m-me ale-alegra q-que lo ha-hayas es-esco-gid-do p-para n-nues-estra p-primera ci-cita-
-¿Primera cita?-
-¡Claro!- salto alegre -e-es la p-pri-mera q-que t-ten-nemos d-desp-pués que t-ter-min-nar-ram-mos y v-vol-vie-ra-mos-
-Ah, eso-
Miré una vez más la Charca. Era la primera vez que la visitaba desde que regrese y no porque me trajera malos recuerdos, lo contrario
Miré el rubio a mi lado, se veía feliz y relajado, estaba disfrutando del momento que estábamos compartiendo
-E-es a-agra-dab-ble ¿n-no?-
-¿Qué cosa?-
-E-el es-estar a-así- se apego más a mí -j-juntos, l-los d-dos, s-solos-
-…-
Lo miré una vez más
Su mirada ilusionada, su sonrisa, sus ojos esperanzados. Nada comparado con el Tweek que vi la noche de la fiesta, temeroso, triste y con dolor
¿Era correcto lo que estaba por hacer?
-Es hora de irnos-
-¿C-como? ¡n-no!- se aferro con más fuerza a mi brazo -n-no q-quier-ro i-ir-me d-de a-aquí-
-Se que es difícil- tome sus manos -pero nuestro tiempo aquí ya termino-
-P-pod-demos r-ren-tar o-otro b-bote- negué
-No me refiero a eso- tome el remo para empezar a remar -mañana tenemos que ir a otro lugar-
-¿Q-qué o-otro lu-lugar?-
-Mañana lo sabrás-
…
Tercera y última vida
-¿E-es aq-quí?-
-Mhn-
La escuela primaria de South Park. Este fue el lugar donde comenzamos nuestra relación
-Aquí fue donde todo comenzó-
-¿Q-qué qui-quie-res d-dec-cir?-
-Primer novio, primera cita, primera pelea, primer toma de mano, primer beso, etcétera, etcétera-
-Oh, c-cie-er-t-to, t-tie-ene-es r-raz-zón-
-Contigo tuve todo lo que se puede llamar primera vez-
-Exc-cep-pto p-por e-el s-sex-xo-
-No, eso fue con alguna tipa de un bar a la que ni siquiera recuerdo-
-¿N-no f-fue c-con Stan?-
-No-
Y era verdad. Después del desastre de nuestra boda había pasado de cama en cama esperando encontrar una mínima esencia que no le provocara asco o rechazo a mi Alfa
Por desgracia, lo único que conseguí fue sexo de una noche porque al día siguiente no aguantaba las nauseas al comprobar lo que había hecho con esa persona y, sobretodo, saber que me desagrado
Fueran hombres o mujeres, ninguno era suficiente para mi Alfa y por eso decidí darme por vencido. No importa si era Omega, Beta y, no estoy muy seguro, Alfa todos fueron rechazados y en dadas ocasiones casi violentados por la furia que le provocaba a mi Alfa estar cerca de ellos
Sólo cuando al fin me di por vencido fue que pude encontrar el aroma perfecto que no sólo le agradaba a mi Alfa sino a mi también
El aroma de lavanda y limón, la esencia de Stan
-También fuiste el primer olor que capte-
-¿E-en-enserio?- miré su mirada incrédula, no lo culparía por no creerme
-No me has preguntado porque estamos aquí-
-Y-ya lo d-dij-jist-te- comenzó a estirar su camisa y jugar con sus botones tal como lo hacía de niño cuando se encontraba nervioso -es-estam-mos aq-quí p-porq-que f-fue ¡ngh! d-dond-de n-nues-estra his-ist-toria ¡gah! c-com-menzo-
-En parte es por eso-
-¿P-por q-qué m-más?-
-Demos un paseo- le ofrecí mi mano para que la tomara -te lo diré después de eso-
Él miro mi mano con un leve tono rojizo en sus mejillas. Después de un rato donde creí no la tomaría, él acerco despacio su mano, casi con timidez y paso de largo la mía para tomar con un poco de fuerza mi brazo
Le agradaba más esa extremidad que cualquier otra parte de donde se pudiera agarrar
-¿Estas listo?- con un asentimiento de su parte ambos nos adentramos a la vacía escuela por ser vacaciones
Primero nos adentramos por la entrada principal, vi la sombra de nuestros yo de 8 años saliendo sonrientes y agarrados de la mano. Miré a Tweek y al seguir su mirada supe que él también estaba teniendo el mismo recuerdo al encontrarla posada en el mismo punto fijo
Después caminamos por el pasillo, al igual que antes vi a un pequeño Craig, sin sonrisa pero con brillo en los ojos, acariciando el cabello de un Tweek tembloroso que empezaba a tranquilizarse por la caricia. Ambos pasaron caminando a nuestro lado
Llegamos a nuestro salón. Las sombras del marica de Garrison y nuestros compañeros no tardaron en aparecer. Mientras todos estaban concentrados en lo que decía el Beta un pequeño rubio sentado junto a un azabache no perdían el tiempo para secretamente tomarse de las manos debajo de la mesa
Pasamos de largo los demás salones para ir al gimnasio, este estaba vacío y oscuro por lo que tuvimos que prender la luz. Al hacerlo no tardaron en aparecer las sombras de las porristas y jugadores en la cancha, en las gradas por otro lado se hallaban los espectadores, en una de ellas, específicamente la más alta, se encontraban los mismos niños con la diferencia de que ahora el rubio estaba apoyado sobre el hombro del niño sin expresiones
Finalmente llegamos al comedor, las sombras de niños caminando con bandeja en mano, mesas repletas de comida y amigos que compartían entre ellos. En una de esas estaban el rubio y azabache sentados junto a un castaño, un moreno y un niño de descendencia asiática, todos compartían y reían e incluso hacían bromas a la pareja
Por último pasamos al patio, la sombra de todos los niños se hizo presente. Niños corriendo de aquí allá, los juegos siendo usados por los más pequeños e incluso la sombra de los niños góticos estaban ahí, entre todo el desorden a unos metros se hallaban dos niños de 8 años en unos columpios, uno de ellos, el de cabello rubio no paraba de temblar mientras que el otro de cabello azabache lo intentaba tranquilizar
Avanzamos un poco más hasta perder de vista las sombras de los recuerdos que atesoramos todos estos años guardados con recelo en lo más profundo de nuestras mentes
-¿Te gusto el recorrido?-
-S-sí, b-bast-tant-te- se aferro un poco más a mi brazo
-Aquí termina- me solté de él
-B-bueno- alejo sus manos y las acerco a su persona dudoso -e-eso es m-más q-que ob-bvio-
-No me estas entendiendo- le respondí frío
Estaba de espaldas a él, así que aproveche para voltearme y enfrentarlo
-Aquí termina todo- volví a decir -incluyendo lo nuestro-
Él me miro con espanto, sus temblores empeoraron y con miedo se acerco a mí a paso lento
-¿Q-q-q-u-e…?-
-¿Qué quiero decir?- complete su temblorosa frase -lo mismo que estas pensando- no me moví a pesar de que ahora lo tenía a unos cuantos centímetros de mí -estoy terminando contigo-
-¡¿P-por q-q-q-ue m-me l-lev-vas-as-t-te a t-to-tod-dos e-es-esos l-lug-ga-r-re-es e-en-en-t-ton-onc-ces?!-
-Por la misma razón por la que estoy terminando con toda esta farsa-
-¿C-cómo di-dic-ces?- se sorprendió ante lo ultimo
-Así como lo escuchas- revele con cierto pesar -todo esto fue una farsa para poder utilizarte-
-¿U-u-t-ti-li-z-zar-r-me?- su mirada soñadora se rompió y no tardo en llevarse ambas manos al pecho dolido
-Eso era lo que planeaba en un inicio- me doble de piernas para quedar a su altura -pero si lo hacía, hubiese sido injusto para ti- admití
Su rostro acongojado y dolido adopto un rostro de sorpresa notorio
-No quiero que sufras porque te quiero- continúe -pero no de la forma en la que tu quieres que lo haga-
-¿Q-q-qué h-h-hay d-de t-t-tod-das e-es-esas c-cit-t-tas q-que t-tuv-vim-mos?-
-En el café tenía planeado utilizarte- revele mirando como su mirada volvía a llenarse de dolor -en la Charca me di cuenta que no estaba bien jugar con tus sentimientos- me miro serio pero con un pequeño y tenue tono de esperanza en su mirada -por eso en vez de llevarte a donde tenía planeado decidí traerte aquí-
-¿A-a d-don-de…?-
-A mi apartamento- le respondí interrumpiéndolo abruptamente -se de tu plan con Bebe- ante eso él reacciono sumamente sorprendio y avergonzado, mucho más que antes -lo haría para que vieras como los detenía-
-¿Y-y p-por-r-q-que n-no l-lo hi-icis-ste?- me pregunto con el ceño fruncido pero con una voz temblorosa que avisaba la proximidad de un llanto
-Porque eso te lastimaría- acerqué mis manos a su rostro, limpiando las lagrimas que comenzaron a asomarse por sus orbes color aceituna -y es la razón por la que aceptaste el plan de Bebe en un principio-
-Y-yo t-te q-qui-ier-ro C-cr-craig-
-Lo sé-
-¿P-por q-qué n-no p-pod-dem-mos s-ser f-fe-fel-l-ices j-jun-un-tos?- tomó mis manos y me miró con suplica
-Mis sentimientos han cambiado- no me resistí al ver sus intenciones y lo deje tomar mis manos -y no es justo que sufras por culpa de un amor al que te sientes atado- en un movimiento logre ser yo el que tomara ahora sus manos -para eso te traje aquí-
Él me miro aún aguantando las lágrimas, con su mirada formulo la pregunta muda del por qué lo había traído a este lugar
-Porque es mejor terminar con todo en el lugar donde todo comenzó-
Después de eso, su férrea voluntad por no llorar se rompió y las lagrimas no tardaron en rodar por sus mejillas casi como una fuerte lluvia
Me separe de él y deje que llorara con fuerza, acercarme o abrazarlo sería arruinar lo que estaba haciendo. Terminar con nuestra relación
-¿Amas a Stan?- lo miré, estaba haciendo un esfuerzo por detener los hipidos
-¿Qué clase de pregunta es esa?-
-Sólo contéstame por favor-
Lo miré unos segundos para después darle la espalda
-Lo quie…-
-No digas que lo quieres porque eso es un sentimiento reservado para mí- lo miré con una ceja alzada y volví a darle la espalda
-Entonces lo que tienes pensado que diga es un sentimiento que sólo a él le debo expresar-
Silencio. Lo miré y estaba sonriendo
-Ve a decírselo entonces y mejor date prisa- su tono adquirió un tono de angustia -Bebe esta allá-
Mire la seriedad que cubrió su rostro y no dude de sus palabras. Me encamine de inmediato al auto para ir en dirección a mi departamento
No dejaría que nada malo le sucediera a Stan