Narra Blaine.
--¿Qué tienes?-me preguntó Kurt, mientras caminábamos por la arena de la playa.
Habíamos llegado a la playa hace más de una hora, son alrededor de las 5 de la tarde. Los dos nos encontrábamos caminando por la orilla de la playa tomado de las manos, mientras los últimos rayos de sol nos pegaban en el cuerpo. Realmente me siento mal, algo dentro de mí se siente mal, no lo voy a negar, ya que es muy difícil ver lo que yo vi, sin entender muy bien que son estos sentimientos que están aflorando de lo más profundo de mi ser (Y no quiero que lo malinterpreten) pero fue muy desagradable ver eso y no me gusto.
--No tengo nada-le respondí.
Los dos nos sentamos en la orilla de la playa, las olas estaban algo revueltas y eso provoco que nuestros shorts se mojaran un poco, los dos estiramos nuestras piernas, mientras el agua subía y bajaba, provocando que nuestras piernas se mojaran completamente.
--¿Seguro? Desde que llegamos de almorzar te siento distraído. Además estás haciendo mucho puchero-yo sonreí, me despegue de su hombro y lo mire al rostro.
-¿Cómo? ¿Así?-puse un pequeño puchero y el rápidamente pego sus labios con los míos, dejándome completamente sorprendido.- ¡Eso es trampa!-él se echó a reír.
--¡Claro que no! A demás, no es mi culpa que pongas esa linda cara-colocó su mano en mi muslo y miro un poco mis piernas.- ¿Te he dicho que me gustan tus piernas?-yo le sonreí.
--Trescientas veces, para ser exacto-él sonrió.
--¿Me puedes mostrar un tropo? Ya sabes, algo de esas cosas que haces-yo asentí y me levanté de la arena.
--Voy a hacer 5 mortales. Esperó que te guste-me coloqué en posición y di cinco mortales hacia atrás consecutivamente. Termine con un esplín. Al estar con las piernas abiertas, doble mi cuerpo hacia atrás, apoyando las manos en la arena, impulse un poco mis piernas, hasta estar parado de cabeza con estas extendidas. Con cuidado y lentamente, subí mis piernas hasta juntarlas para después pararme de pie.
Él comenzó a aplaudir como un loco y las personas que me vieron hacer el truco, lo había grabado, provocando que me pusiera muy rojo y me sintiera algo avergonzado.
--Estas súper rojo, jajaja-comenzó a reírse, me acerque a él y le di un golpe en el brazo.
--Eres muy odioso-me senté a su lado y me volví a colocar los lentes.
--Y tú una diva. Pero así me gusta-me envolvió entre sus brazos y yo suspire agotado.
--Por esta vez, te permitiré abrazarme así-me acurruque en su cuerpo, sintiendo el calor que este emanaba y la tranquilidad que proporciona en mí.
--Te quiero… Tal no podamos llegar a un te amo o tal vez sí, pero quiero que sepas lo mucho que te quiero. Y lo importante que eres para mí, y lo mucho que haces que mi corazón lata al verte-yo me levanté y él me muro, le hice una seña para que abriera sus piernas, para sentarme, al frente de él.
Me acurruqué en su pecho, él me envolvió entré sus brazos y apoyo su cabeza en mi hombro, juntamos nuestras cabeza y cerré los ojos, para ya no tener que pensar más en “eso” y no amargarme tanto, con esa sensación en el cuerpo.
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La hora paso espeluznantemente rápido, Kurt me llevo a el apartamento, los dos estuvimos escuchando música ruidosamente, él las suyas y yo las mías, hasta que la hora se nos hizo algo tarde y llegamos rápido. Se hizo un silencio cuando el carro se detuvo en frente de la residencia.
--Nos vemos-le dije, me coloqué mi bolso.
--¡Espera!-aparté la mano de manilla y me gire para verlo.- ¿Te vas a ir así solamente?-me preguntó, sin entender bien a lo que él dice.- No pongas esa cara de inocente. Sólo dame un beso-yo sonreí algo apene y me incline para besarle en los labios.
Me sentí más tranquilo al separarme de él y sentir todas esas mariposas revolotear en mi estómago, mi corazón acelerarse y mis mejillas enrojecerse, esa es una sensación agradable que él solo provoca en mí.
--Nos vemos- el arranco el carro y se fue.
Entre a el edificio, hasta llegar al ascensor, el cual se abrió de inmediato y entré. Al subir esas mariposas todavía la sentían, incluso más intensa que antes, esa sensación agradable de estar enamorado, me gusta, mucho, es una muy grata experiencia. Subí al apartamento y al entrar, todas las luces de la casa estaban completamente apagadas y eso me dio un gran alivio, ya que si él no está aquí esa sensación no se va a ir, esa sensación tan agradable, que tengo en mi estómago, no se va a ir, hasta que lo vea. Deje mi bolso encima de la mesa y me dirigí a la cocina cuando la puerta de la casa se abrió, mi pulso se incrementó por alguna extraña razón que no entiendo.
Salí de la cocina, con suma tranquilidad, olvidando el hecho de que por alguna extraña razón, hay un ambiente pesando entre Duncan y yo, que está a punto de hacer una enorme explosión y acabar con todo a su paso. Pero, eso es lo que pasa y no voy a tapar el sol con un dedo, no lo haré. Fui a la sala y me lo encontré con Olivia, los dos al verme, el ambiente se puso aún peor. Pero lo que no creí que pasara, paso…
--“¿Todavía están ahí?-mi cabeza le pregunto a mi estómago.
--“No. Ya se fueron”.
--“¡Qué!... Noooo”-mi cordura en ese momento exploto y mí interior se puso en modo alerta.
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Narra Bruno.
2 Horas antes.
Las piernas me temblaban completamente, mis nervios se hacían más grandes y tener a Paúl, sosteniéndome con fuerza en realidad no me ayudaba mucho. Y lo peor, es que en realidad, no sé por qué está pasando esto, pero si el destino quiere jugar conmigo de esa manera tan cruel, ¿No lo podía hacer de otra forma?... Pero esa no es la pregunta importante, en realidad, la verdadera pregunta es: “¿Realmente estoy listo para esto?” El doctor término de examinarme completamente, Brooks, me agarro una de mis manos y Paúl, para no atosigarme tanto agarro la otra.
--Felicidades señor Bruno. A pesar de su edad, usted está embarazado- mi corazón se reventó y el pánico se apodero completamente de mí.
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Hace más de una semana, comencé a tener dolores intenso, por mi parte abdominal, al principio no le di demasiada importancia. Me pareció algo completamente insignificante y como Paúl y yo nos estamos cuidando, ya que mi familia es de personas muy fértiles y de verdad no lo digo en broma. El papá De Brooks, mi tío, que en paz descanse, mi abuela, lo tuvo casi a los cuarenta. Pero yo no pensé que eso me fuera a pasar a mí.
--Wow… No puedo creer que estés embarazado por tercera vez. Bruno, eres un masoquista-me dijo Brooks, completamente emocionada.
--Realmente lo lamento-escuche las disculpa de Paúl.- Nos cuidamos. Pero esto… nunca pensé que algo así pasaría, realmente lo siento-escuche como Brooks, refunfuño.
--No sé por qué te tienes que disculpar. Si el de arriba les mando otro hijo, es hora de hacerlo bien Bruno. Te están mandando señales, así que tómalas, claramente-tapé mi cara con ambas manos, mientras mi pierna izquierda comenzaba a templar y golpear el piso muy rápido. La ansiedad se me subió a la cabeza y se esparció en todo mi cuerpo, las ganas de comer pizza se intensificaron.
--No quiero estar embarazado de nuevo-me levanté del mueble.- Necesito estar solo por un momento.
--Bruno…-Paúl y Brooks, me miraron preocupados.
--Lo siento.
Me dirigí al ascensor privado para poder salir de ahí, mi casa me estaba sofocando. Mientras baja, los ojos se me cristalizaron, por primera vez en mucho tiempo, sentí demasiada desesperación y angustia por alguien que se encuentra dentro de mí. El embarazo con Blaine me hizo sentir demasiado mal al perderlo, con Elliot fue diferente, ya que lo protegí muy bien y Melani, había desaparecido. Pero ahora ella me está rondando, de un modo u otro lo hace, pero yo no pienso, permitirle que se lo lleve, que haga lo mismo con esté nuevo bebe, como lo hizo con mi hijo.
Al llegar abajo, la gente pasaba y entraba por el hotel, ya que a Paúl, en vez de comprar una casa para tener mejor privacidad, decidió seguir viviendo en su hotel, me gusta la idea… Pues no, no me queda de otra… Pues sí. Salí del hotel con un gran dolor de cabeza y un hambre atroz. Camine, literalmente me fui caminando hasta un parque muy cercano al hotel, donde me senté en una banca a mirar las estrellas, para ver si me pueden dar una respuesta a todo esto que estoy sintiendo.
No pude aguantarlo más y rompí en llanto, llore lo más fuerte que pude, la gente que pasaba, sentía sus miradas puestas en mí y eso me dio algo de rabia, pero no me parece extraño, ya que lo estoy haciendo en un parque. No sé cuándo tiempo estuve ahí, pero mis ojos, se encuentran rojos y pesados y no puede dejar de hipear, aparte de que tengo mucha hambre.
--¿Se encuentra bien?-me preguntó alguien, me limpie las lágrimas de mi mejilla, y observe a esa persona.
--¿Luzco bien?-le pregunté sarcásticamente, observe y noté que es un chico alfa, por lo menos a simple vista, le calculo entre 19 a 20 años.
--En realidad no. Siento si soy entrometido-me entrego un pequeño pechuelo.
--Límpiese-observe al pechuelo y después la cara serie de ese chico y lo agarre.
--Gracias-sé sentó al lado mío.
--Se me es conocido- me dijo ese chico.
--A mí también me es conocido-le dije, lo mire detenidamente y algo en él se me hizo realmente familia.- Por casualidad no trabajaras en el hotel Central internacional. PB-el me devolvió la mirada.
--Sí. Trabajo hay como uno de los tantos botones-me sonrió, y eso aparentemente, me tranquilizo un poco.- ¿Por qué preguntas esto? ¿Acaso trabajas hay y no me di cuenta?-se echó a reír, saque mi celular para ver la hora.
--Mi esposo es el dueño de todo eso-le contenté mientras guardaba el celular en el bolsillo.
--¿¡Qué!? ¿U-usted es el señor Bruno?-asentí.- Wow… nunca pensé conocer a la pareja de mi jefe-me extendió la mano.
--Me llamo Duncan Freeman. Es un pacer conocerlo-estrelle su mano y él sonrió, sentí una rara sensación en mi cuerpo, como si esa cara la había visto antes, esa sonrisa. Y aunque su apellido me recuerda mucho al de Will, en mi trabajo e incluso aquí, hay mucha gente con ese apellido.
--Como, pareja de tú jefe. Te ordeno que me lleves a comer, tengo mucha hambre-él se levantó de inmediato e hizo una reverencia.
--¡Por supuesto! ¡Lo llevare al mejor lugar del mundo!-realmente, tengo que admitir que eso me y más el hecho de que gritara, en medio de un parque con mucha gente atrayendo la atención de todos.
--No tienes que ser tan bullero-le calme un poco.
--Lo siento-me agarro de la mano.- Le llevare al mejor lugar para comer.
+*************+
Después de una gran caminata, me llevo a una pequeña cafetería que nunca había visto, el lugar es completamente callado y la comida está completamente deliciosa.
--Tenga un poco de cuidado, se puede atragantar-me metí media hamburguesa en la boca y la comencé a masticar.
--¿Por qué lo dices?-agarre mí medio litro de coca y lo vertí en un vaso y aunque esta clase de bebida no es recomendada para los embarazos, un poquito no le hace daño a nadie.
--Pues… No, nada, tome una servilleta-la agarré y me limpie la boca.
--Ahora sí, ¿Ya me puede decir lo que le pasa?-me preguntó completamente serio.- ¿Acaso se peleó con el señor Paúl?-ahora me estaba comenzando a sentir realmente incómodo.
--No sé si debería hablar esto con alguien que apena conoces-él bajo la cabeza y después la subió esbozando una sonrisa.
--Ya nos presentamos, así que no somos desconocido-suspire y sonreí al ver que los chicos de ahora, se están desarrollando mentalmente, mucho mejor que los de antes.
--Pues, te contare todo desde el principio.
Le conté, todo, claramente evitando mencionar los nombres de algunas, personas, incluyendo los de los idiotas de, al contarle todo, incluso que ahora estoy embarazado, me libere de una gran carga emocional muy fuerte, mi cuerpo se sintió realmente bien y esa angustia, se fue completamente al igual que las ganas de llorar.
--Eso, fue muy fuerte-aquel chico tiene una expresión realmente alarmante, sus ojos se cristalizaron completamente, y eso me sorprendió, ya que él tiene un olor de alfa realmente fuerte.
--Eres un alfa como mi esposo, bien llorón y sentimental-bufe un poco al verlo en ese estado, tan lamentable.
--Lo siento. Es que fue una historia realmente fuerte… pero felicidades al mismo tiempo por estar embarazado y no se preocupe. Su bebe va a estar muy bien, eso se lo aseguro-bebí un sorbo de mi refresco, me cruce de brazos y lo mire.
--Ahora te toca a ti-puso una cara de confusión.- ¿Creías que era el único que iba a contar algo? Es mejor que sueltes, por qué tienes esa carga muy fuerte alrededor tuyo-él agalló la mirada y suspiro.
--Estoy enamorado-eso me basto para saber cómo iba a ir esto.-Esa persona es realmente hermosa-me miro y sus ojos se iluminaron, y en sus iris aprecio un pequeño destello. – Esa persona es inteligente, amable, fuerte e increíble, solo verlo me hace querer besarlo-de repente su mirada perdió ese brillo.- Pero no podemos estar juntos. Él ya encontró a su alguien, él será feliz con esa persona. Nuestro amor es sucio, no es lo correcto, no es…-se limpió las lágrimas que empezaron a resbalar por su rostro.
--¿Por qué dices que tu amor es sucio?-le pregunté más que curioso.
--No sé si decirle-me dijo con una boba sonrisa, cargada de muchas cosas.
--Te he contado muchas, cosas. ¿Tú no me puedes contar esta?-él suspiro.
--Sé que esto le sonara raro y le parecerá aberrante y muy feo. Pero la persona a la cual amo, a la cual deseo tener con todas mis fuerzas… Es mi primo.
Continuara….
Aquí les dejo unos link de mi novela en wattpad, esperó su apoyo.
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