Recuerdo
Domingo
Alexandra.
Me despido de mis compañeros, salgo por el callejón. El sábado pedí permiso para ir a ciudad aventura así que hoy tuve que ayudar en la bodega para compensar horas.
Hola – le digo subiendo al auto.
Hola novia - sonrió ante el comentario de Bárbara, acaricio su mejilla y me acerco lentamente, al sentir su respiración termino con la distancia, el beso es lento y tranquilo, sin poder evitarlo una sonrisa aparece en mi rostro, Bar se separa por unos segundos y volvemos a besarnos, su aroma, su sabor llena mi alma por completo.
Compramos unas bebidas y decidimos ir a un parque para poder hablar.
Recuerdas que antes de ir a ciudad aventura tenía dos cosas que decirte. –
Si, novia – inclina su asiento hasta quedar recostada, se acomoda de lado y decido hacer lo mismo.
Si – no puedo evitar sonreír cada que me dice novia – pues la primera y más importante era pedirte que fueras mi novia – tomo su mano y comienzo a jugar con sus dedos.
Pues lo hiciste muy bien – me guiña el ojo.
Bueno – el calor sube por mis mejillas – estaba tan feliz que olvide decirte lo demás por eso te pedí que nos viéramos hoy – le acomodo un mechón de cabello - voy a jugar tenis – saco el folleto de mi pantalón y se lo entrego.
No sabía que jugabas – comienza a revisar el folleto
Ya no lo hacía, pero una de mis amigas pidió un intercambio, necesita el dinero del premio, la escuela solo cubre algunos gastos, pero ella necesita más dinero para trámites, pasajes y creo que para el pasaporte - intento recordar para que era todo el dinero, Ojos de gatito asiente – Me pidió ayuda, quiere que entrenemos entre semana y los fines de semana yo trabajo
Ya sé que es lo que me querías decir – asiento
Pero nos podríamos ver los domingos, entre semana también pero… - ella me calla con un beso
Es lindo que quieras ayudar a tu amiga y descuida no estoy enojada - sonrió ante su comentario y tomo su mano. Estoy segura de que Bárbara merece toda la verdad.
Hay algo más – ella levanta su ceja, creo que debí iniciar con esa parte – recuerdas a Yuli la de la fiesta – ella asiente – bueno ella es la que necesita mi ayuda, pero… Ella es mi ex novia – paso saliva
¡¿Qué?! – Me mira entrecerrando sus ojos.
No, nada que ver, no habíamos hablado hasta que ella fue a mi casa y entro porque mamá le dijo que pasara –
¡Wow! – ella suelta mi mano y se levanta de su asiento –
¿Qué? –
Creí que nunca habías llevado a nadie a tu casa - un recuerdo llega a mi cabeza y sé a qué se refiere.
No, no mal intérpretes – me levanto del asiento, intento acercarme a ella aunque en el proceso se vuelve incomodo por la palanca. Intento darle un beso pero ella desvía la cara – ok besitos no – hago un puchero provocando que capte su atención de nuevo.
No hagas eso. – recibo sus labios pero esta vez Bar controla el beso, es más rápido, más intenso, su perfume invade mis pensamientos, muerde mi labio inferior e instintivamente abro un poco mi boca pero Bárbara se quita. – No, esos besitos no, primero explica.
Bueno – regreso a mi lugar y me recuesto de lado – fuimos amigas primero, así que ella iba a mi casa, mamá le conoció y agrado, nunca la presente como mi novia, cuando nos hicimos novias dejo de ir. – Bar se recuesta en el sillón y toma mi mano – así que nunca le he presentado a nadie a mamá
Tu mamá lo sabía – mi vista pasa de nuestras manos entrelazadas a sus ojos - no me veas así, las mamás tienen ese instinto, no la presentante pero sabía, si eres como eres conmigo no hay forma que no se diera cuenta.
No son iguales y yo no soy igual, antes era más una cretina – sonrió – no estoy diciendo que Yuli sea una cretina, pero yo sí lo era, supongo que madure. Como sea no tengo un rollo mental con mi ex, eso ya es pasado. – Ojos de gatito desvía la mirada por unos segundos – ¿estamos bien?
Sí, me alegra saber que eres muy madura a tu edad es necesario – sonrió ante su comentario –
Eres una celosa – ella sonríe – pero nosotras no terminamos bien, fue mi culpa. El intercambio es uno de sus sueños y ahora que tiene la oportunidad de hacer dos algo dentro de mí me dice que es correcto ayudarle – me recuesto en el sillón mirando al techo – es algo raro de explicar.
No pasa nada – me da un beso en mi mejilla – pero ¿puedo irte a ver practicar?
Si, por supuesto que sí, en mi escuela la seguridad no es la mejor así que dejan entrar a todos – sonrió – si llevas el auto me avisas para lo del estacionamiento podemos ir a comer después, yo también puedo salir más temprano y vernos – ella sonríe – los domingos son tuyos ojos de gatito.
Los domingos son míos – ella se pone encima de mí y se inclina para besarme.
Todos tuyos –
Fin del recuerdo.
Un domingo después.
Alexandra.
Sonrió ante el recuerdo del domingo pasado. Me inclino y huelo su cabello, escucho su risita, me acomodo en el árbol recargando mi espalda y la atraigo del estómago abriendo mis pies.
Me gusta la vista de este lugar – presto atención y miro el lugar, mi abue tenía razón al construir su casa aquí– me gusta estar así, sentadas, abrazadas – se recarga en mi pecho y se gira a verme – entre tus pies – deja un beso en mi cuello.
Eres mi pequeña pervertida – nos damos un beso lento, coloca su mano en mi mejilla, el rose de sus labios me provoca una descarga que intento calmar al poner mi mano en su cintura, su mano baja a mi cuello y me inclino un poco más, su rodilla choca con la mía haciéndome consiente de mi respiración. Inhalo en su cuello llenándome de su perfume dulce.
Te quiero – mi corazón se agita ate su comentario
Yo te quiero más, disfruto tanto tenerte así, nunca pensé que llegaría a mi vida alguien como tú – me sonríe – me das todo en un momento, causas en mí una gran paz, me haces sentir segura y feliz.
Como se supone que supere cada una de tus palabras – me da un beso rápido – eres una cursi.
No puedes, todo sale de aquí - coloco su mano pecho del lado de mi corazón – a mí me provocas paz y a él lo alteras con tu presencia, tu calor, tu olor, incluso creo que tu recuerdo hace que se vuelva loco.
No, no puedo – esconde su rostro en mi cuello – te quiero mucho, mucho, mucho.
Debí márcate en cuanto me diste tu número, ahora ya tuviéramos uno o dos meses de ser novias, pero me gusta como se dieron las cosas, te quiero aún más de lo que te puedo decir – la toma por la mejilla, dándole un beso en los labios, saco mi pie derecho y la recuesto en la mata que pusimos encima del pasto.
Me encanta que huelas a fresas – sonrió y volvemos a besarnos, giramos en la manta.
Bárbara.
Termino de enviar el mensaje a mi hermana y vuelvo abrazar a Alex que está encima de mí, acaricio su cabello.
No te duermas, la comida no tarda en llegar – ella solo asiente débilmente con su cabeza – Alex el 1 de agosto es mi cumpleaños – ella se incorpora, recargando su peso en su brazos
Lo sé, ¿ya tienes un regalo en mente? –
Mis papás quiere hacer una fiesta, quiero que tu vayas como mi novia – ella asiente – no tienes idea como disfruto estar contigo, ir a tu escuela y convivir con tus amigas, me gustaría que tú también conocieras a los míos y fueras por mí.
Lo haré – deja un beso en mi mejilla, en la otra, mi frente, barbilla y termina en mis labios – quiero que las dos estemos felices y conozcamos nuestros mundos.
Le tengo que contar a Fabián de lo nuestro – su sonrisa desaparece – Él es uno de mis mejores amigos. Sofía ya lo sabe y no quiero que él se entere como lo hizo ella.
No creo que nosotros comamos pay de limón mientras platicamos – sonrió al recordar a María Fernanda – No creo que ni me dejen hablar.
¿Y tú sí? ¿Lo vas a dejar hablar o solo te va a dar igual? – se levanta quedado hincada – apenas te menciono a Sofía y evades cualquier tema que tenga que ver con ella.
¿Te diste cuenta? –
Bobita no sabes ser discreta – pongo mis manos sobre las suyas – no son malas personas.
Habla por ti – quita sus manos y se sienta abrazando sus pies – No olvides que ellos son los que van a mi trabajo a molestarme.
Bebé, pero Sofía acepto que estoy contigo y prometió que no te va a hacer nada – me pongo de rodillas enfrente de Alex.
Si pero lo hace por ti, no por mí – dejo un beso en su mejilla y tomo sus manos – Fabián no va a ser mejor.
¿Tienes miedo? – Alex niega - ¿entonces?
Es feo que a diferencia de ti no te puedo dar la paz que tú me trasmites – desvía la mirada – los odio, desde que se enteraron que compartíamos el mismo padre me han hecho ver mi suerte y no entiendo porque. Me da tristeza saber que terminaste en medio de todo esto.
Me hago espacio entre sus pies, tomo sus labios con posesión, intento trasmitir mi seguridad pero la verdad es que yo si tengo miedo, cada día que pasa intento contener mis ganas de gritarle a esta mujer que la amo, no quiero ser la intensa que al mes dice te amo. Pero tampoco quiero perder a mis amigos, nos conocemos desde niños, son parte de mi familia y también los amo.
Algún día los tres se van a tener que ver a la cara y se van a dar cuenta que los tres son increíbles personas. Fabián es presumido y en ocasiones déspota, pero siempre hace hasta lo imposible por cuidar a las personas que ama. Sofía es una loca que no sabe lo que quiere pero es la más noble de los tres y tú, finges que nada pasa aquí adentro – señalo su corazón – solo para que los demás no nos preocupemos por ti
Alex desvía la mirada y sé que ha dado en el clavo.
Te preocupas por todo y por todos. Conmigo no tienes que fingir nada, conmigo puedes ser vulnerable, no te voy a lastimar – ella me abraza, por unos minutos solo escuchamos nuestra respiración.
Entiendo – deshace el abrazo – sé que algún día nos veremos, supongo que yo conozco su peor versión y ellos la mía, pero prometo que en tu cumpleaños solo vas a obtener lo mejor. ¿Cuándo le piensas decir?
Vamos a comer juntos el viernes –
Y ¿vas a estar bien? ¿Quieres que vaya? –
No, es un día en donde estamos los cuatro así que no tienes de que preocuparte – sonrió – si todo sale bien en un futuro podríamos ser los cinco.
Eso es muy optimista de tu parte – me desilusiona su respuesta – pero nada es imposible, igual no es en la próxima pero esperemos que sea antes de tu cumpleaños – suena el timbre y nos levantamos, saco mi cartera de mi bolsa esta vez soy yo la que invito la comida – mientras sea antes de la boda
Me giro sobre mis talones, corro hacia Alex, ella me sostiene de mi cadera y enredo mis pies en su cadera, la beso en la frente, mejillas, barbilla y termino en sus labios mientras el timbre de la puerta se escucha de nuevo.
Viernes
Bárbara.
Estás loco, pide un taxi o vete como los pobres – Fabián golpea a su amigo y este se va – hoy es día de chicas - nos saluda a todas con un beso en la mejilla - ¿Por qué trajiste tu auto?
La última vez me abandonaste en un bar – le contesto
Claro que no, tú te pusiste a defender al pueblo – pongo mi cara de fastidio – bueno ya, no debí dejarte ahí, pero no lo iba a hacer hoy
Si no debiste dejarla ahí – Sofía me mira con reproche – hay perdón lo dije en voz alta – toma de la mano a Anahí
¡Wey!, ¡déjala no se va a perder! – Fabián jala a Anahí – que va a ser hoy: cerveza, tequila, vodka. ¡¿Qué?! – Todas lo miramos serias – bueno comida y alcohol
Sonreímos y Fabián manda a Sofía a mi auto para que deje respirar a Anahí
Es un estúpido – sonrió ante el comentario de Sofía – también tú lo eres, no debiste traer el auto sabes que es nuestro día.
Le voy a decir a Fabián que estoy saliendo con Alex –
¡¿Qué?! – Sofía golpea mi mano - ¡estás loca!
¿Por? –
Claro le vas a decir justo hoy que sales con la bastarda de papá – la miro enojada – mira la carretera, a ver centrémonos ¿para qué le quieres decir?
Es mi amigo y quiero que Alex vaya a mi cumpleaños –
Faltan como cuatro meses ¿van a durar tanto? – Aprieto su pierna - ¡auch! Es la verdad creí que solo iban a tener sexo.
No soy tu – ella sonríe - no es un cumplido.
Cariño porque no tienen sexo y después la dejas – la miro con reproche – está en rojo
Freno el auto, nos emparejamos al auto de Fabián, Bajan los cristales y mueven su cabeza al ritmo de la música. Sofía les lanza un beso, Fabián hace cara de asco y cierra la ventana, comienzo a reír.
Es por eso que no le puedes decir, está de buen humor, es nuestro jodido día del mes y lo más importante no están solos ¿quieres joder nuestro día? –
¿Cuándo se lo debería decir? – le pregunto meditando la situación
Nunca –
Hablo enserio con lo de mi cumpleaños –
A ver, no llevas ni un mes con esa…- antes de que diga algo la miro – como sea, no llevas ni un mes y quieres decirle ¿para? ¿Qué tal si terminan?
El hecho de que le diga hoy, mañana o en un mes no cambia nada –
Entonces ¿Por qué se lo quieres decir hoy? –
No es justo que él sea el único que no sepa, somos amigos y siempre me ha cuidado, incluso dejo de lado a Eduardo cuando se enteró lo que paso, no quiero que sienta que lo traiciono – encamino mi auto al estacionamiento y saco el boleto
Rente una habitación para esta noche – la miro raro y hago las maniobras para estacionar el auto – es para Anahí y para mí, puedes creer que no me ha perdonado y ¡también es tu culpa!
¡Aja! Y luego – tomo mi bolsa.
Préstame tu auto y dile a Fabián que te lleve a tu casa, cuando estén solos dile lo que quieras – es una buena idea – cariño cuando tú le digas lo que está pasando él va a sentir la traición. Lo siento pero es la verdad. Lo bueno tú vas a estar en tu casa y Anahí y yo no vamos a llegar a la nuestra – me guiña el ojo
No tengan sexo en mi auto por favor – decido salir, perdóname acaricio la puerta y cierro – gracias - le digo cuando avanzamos
Eres mi amiga y no es como te vas a casar con ella, insisto en que deberías esperar si duran un mes, pero es tu decisión y te apoyo - me abraza por la cintura y yo me recargo en su brazo
Te quito a una y volteas a la otra – Fabián me toma de la mano y entramos al restaurante – reserve una súper mesa para que no digan ¡ay el aire me despeina!
Sonrió al recordar ese día, la terraza era increíble pero por la tarde el aire estuvo horrible, claro él no se dio cuenta porque estaba ligando con unas niñas adentro. Nos entregan la carta y ordenamos, Fabián es el encargado de seleccionar el vino.
En cuanto llegue el la comida le toman sus mil fotos y después los celulares aquí – señala la canasta en el centro, es una tradición que adoptamos después de que nos dimos cuenta que pasábamos mucho tiempo en el celular. Tomamos fotos a la comida, de nosotros y ponemos nuestros celulares.
¿Quién inicia?- pregunta Anahí – Bárbara ya tiene novia oficial - Sofía y yo la volteamos
Pensé que desde el día de piscina ya tenías novia – sonrió - ¿está buena?
Yo diría que ordinaria – Sofía contesta
No todas pueden ser tus novias amargada – Fabián bebe de su copa – pues me alegro de que al fin alguien te ponga – todas comienzan a reír
Te odio ¿Qué hay de ti? – decido cambiar el tema
No, ¡asco! Ninguna es digna de estar conmigo más de un mes – sonrió porque es un creído, pero cuando le llego el amor hasta lloro.
Fabián, ¿tú nos presentarías a tu novia aunque no lleven más de un mes? – Sofía le pregunta y no entiendo porque dice no le digas y ella saca el tema a cada rato
¿Quiénes son? Mi madre –
Si sales con una chica la tienes que presentar ante tus amigos, es lo correcto – le contesta Anahí
Son tan complicadas, si tengo novia la llevo a la próxima fiesta y les digo es mi novia – me empiezo a ahogar con la comida, Anahí me da la copa de vino - ¿Qué? Así te presento a sus amigos
Ordinaria – Sofía dice mirando a su plato
No es ordinario solo común, no voy a hacer una cena solo para presentarles a mi novia, ya con los papás es un poco diferente. No te sientas mal –
Le pidió que fuera su novia en un baño público – Fabián se empieza a reír ante el comentario de Sofía.
¡Le dijiste! – Acuso a Anahí y ella solo levanta sus hombros.
Pasaste de una cena en la playa a un baño público – se ríe más fuerte – no sé qué decir, pero si al coger no quiere pagar un hotel, déjala, solo está jugando contigo.
¡Déjala ya! – Sofía se toma de un solo trago el resto de su vino todos la miramos sorprendidos – bueno, coito y la dejas – Fabián asiente y sigue comiendo.
Ya te dije que no puedes decidir – sonrió sacando la lengua
¿No te gusta la novia que eligió? - Sofía niega – Ya la conoces ¿salieron? O ¿qué hizo mal?
Nacer – Fabián se ríe y recibo un golpe de Anahí bajo la mesa, ella se disculpa con la mirada y me indica que era para ella así que saco mis pies y veo que recibió el golpe por su cara
Entonces debe ser buena – Sofía le mira enojada – la última vez dijiste que Eduardo era un partidazo, guapísimo y no sé qué tanto, tal vez ella si sea digna de comer con nosotros.
En cuanto la conozcas no te van a quedar ganas de invitarla – Sofía se sirve más vino.
Yo creo que al contrario en cuanto la conozcas te vas a dar cuenta que es una increíble persona – Anahí asiente
También la conoces – Anahí confirma - ¿es buena?
Si, ella se ha portado muy bien conmigo y lo más importantes es que quiere a Barbie, así que yo creo a diferencia de Sofía que si es una buena persona – le da una mirada molesta a Sofía
¿Ella o su amiga? – Sofía mira enojada a Anahí
Creo que ya entiendo porque no te cae bien – se ríe – entonces yo creo que me va a caer bien – todas nos sorprendemos – todas las personas que te caen mal siempre es porque te quieren quitar tu hueso – Anahí golpea su brazo – no dije nombre
Reímos mientras el mesero alivia el ambiente al traer los demás platillos hasta que llegamos al postre.
Bueno aprovechando el momento – nos entrega a Anahí y a mí unas entradas – en una semana es mi competencia de equitación, así que espero verlas –
Gracias – tomamos el boleto y Fabián piensa por unos segundos – ten una más, si quieres la puedes traer – me entrega otra entrada
¿No la vas a ocupar? – lo miro esperando su respuesta
No, papá se va de viaje y le dio su segundo aire del tenis ahora ese es su deporte favorito – nos cuenta con cara de fastidio, de inmediato aparece Alex en mi mente y creo que no soy la única ya que Anahí agacha la vista – prefiero que tú la aproveches a que se desperdicie. Son los palcos podrían tener una cita
Gracias – tomo la entrada.
Permanecemos un rato más en el restaurante, decidimos movernos a la terraza platicamos, bebemos, reímos y para sorpresa de algunos termino bailando, es de noche y decidimos que es hora de partir, le entro mis llaves a Sofía pero le pido en un mensaje a Anahí para que maneje ella.
¿Estás bien? – Fabián me mira extrañado y asiente – somos unos irresponsables
Tu les diste las llaves de tu auto, tu eres más irresponsable – pone el auto en marcha y vamos a mi casa
¿Te incomoda que ellas estén saliendo? – le pregunto mientras paso las canciones
No están saliendo – piensa un momento – creo que cuando se estresa Anahí es su puente de salida.
No has considerado que a ella le guste más que solo físico –
Si, le gusta mucho, pero no tanto como el dinero – Fabián me sonríe – sabes lo que dijo papá
Sí, pero que tal si un día ella se decide y lucha por su amor – Él comienza a reír - ¡¿Qué?!
Nada, eres tan cursi, pero no creo que eso pase – nos detenemos ante un semáforo – ellas se gustan, se quieren y todo la onda esa, pero eso no es suficiente, papá prefiere que ella este muerta antes que tener una hija bisexual – pienso en Alex y el auto se pone en marcha – en un mundo fantástico e ideal puede que Sofía se revele, pero eso sería hasta después de la universidad.
¿Por?- ¿Cómo le hizo Alex para que la aceptara?
La matrícula de la universidad es muy cara - pone su cara de niño listo
El dinero y la felicidad no se llevan bien –
Yo soy feliz, Sofía, Anahí y tu son felices, nunca las he visto tristes cuando van de compras, pasean en auto o se van de vacaciones – sonríe – no es el fin del mundo no estar con la persona que te gusta, todos tenemos que dejar algo a cambio de esta vida y nosotros no somos la excepción. Tú callaste lo que pasaba con Eduardo para no arruinar el negocio de tu padre.
No me recuerdes eso –
Bueno, pero sabes a lo que me refiero. Sofía es bisexual malo fuera que solo le gustaran las niñas, tomo esa decisión y prefirió ir a Europa por un mes que seguir con su noviazgo con esa chica. El tener dinero te otorga poder, prestigio y todas las familias que lo tienen hacen hasta lo imposible por cuidar de él, no importa que sea mi familia o la tuya es igual para todos y lo sabes –
Entramos a la calle, decido ya no tocar el tema, acciono la puerta y Fabián mete el auto. Lo invito a pasar, en la sala nos reciben mis papás que al ver la hora y nuestras caras le piden que se quede a dormir, Fabián acepta y le preparan el cuarto de invitados.
Si necesitas algo me hablas –
Barbie, no te saque de onda, tus papás son buenos al apoyarte en todo lo que quieres, mis padres de igual manera nos apoyan en todo pero son padres, hay reglas y cosas que debes respetar. – sonríe – no creo en el amor eterno, así que no te claves tanto con mi hermana y Anahí. Piensa un segundo, ellas están teniendo coito y tú aquí con tu cara de preocupada
Buenas noches, tonto – él sonríe y cierra la puerta de la habitación.
Entro a mi recamara reviso mi celular y me percato de los mensajes de Alex hasta que uno llama mi atención.
Si necesitas algo llámame a la hora que sea. Te quiero ojos de gatito –
Le contesto que todo está bien y le explico que aún no le he dicho. Decido que fue mucho estrés por un día y dejo mi celular. No entiendo como Fabián es tan desapegado a todo y Alex se preocupa por todo.
Daría lo que fuera porque ellos dos se conocieran, son el equilibrio perfecto despreocupado, preocupada, él dice las cosas sin pensar y ella se contiene tanto, son mi Yin y yang, sonrió y tomo mi almohada
¿Qué? – Rox se asoma con su mascarilla puesta – traes un hombre a casa y duermes conmigo, ¿no entiendo como mamá se sorprendió cuando le dijiste que te gustaban las niñas?
Guarda silencio – entro a su habitación y me acuesto en su cama – necesito tu consejo.
Te dije que estudiaras medicina en lugar de psicología – sonríe y me entrega una mascarilla. Hablamos de que me ha pasado esta última semana, Rox está muy al tanto de Alex, Fabián y Sofía.
Sábado
El sol ilumina toda la habitación, me cubro la cara con el edredón, ¡odio su cuarto! Rox dijo que iba a salir con su novio así que desperté sola, cuando me acostumbro a la luz decido bajar el edredón. Las palabras de Rox se repiten en mi mente dándome el valor suficiente para bajar y hablar con Fabián.
Hola – nos damos un beso en la mejilla – desayunamos en el jardín - Él afirma y salimos con los platos. Desayunamos en silencio, cuando solo nos queda un poco de café Fabián decide hablar.
Ya estas menos preocupada por lo de ayer – yo niego
La verdad es que no es lo que me preocupaba, bueno si, pero hay algo que quiero decirte – bebo un poco más de mi café
Dime – se talla sus ojos y me recuerda todas las tardes que pasamos juntos, dormíamos hasta tarde jugando, él solía ser nuestro príncipe. Era el único niño y se tenía que aguantar los juegos que elegimos, fue hasta la secundaria cuando dio el estirón, ahora es más alto que todas. De ese niño pequeño y flaco solo queda el recuerdo, ahora hace ejercicio y es el príncipe de más de una. - ¿te has enamorado de mí?
Sonrió ante su presunción y niego. Pero aún conserva sus pequeños manías de niño, se talla sus ojos con ambas manos para inmediatamente meterlas en sus mangas, las jala un poco para que sus manos queden bien cubiertas. Tiene frio, siempre ha sido tan friolento, solía enfermarse tanto, sonrió ante el recuerdo.
¿Qué sucede? – Vierte más café en su taza – está todo…-
Yo estoy saliendo con Alexandra tu hermana – su mira se clava en la mía, brinco al escuchar el impacto de la cafetera en la mesa. – Yo…
Es una puta broma ¿no? Te recuerdo que yo solo tengo una hermana – saca sus manos de su suéter, sus ojos se llenan de ira, decepción y su vena en su cuello sobresale
Sé que no es así, tienes una media hermana, lo sé porque ella es mi novia - Fabián se levanta de su asiento y me sujeta de mi brazo obligándome a pararme –
Eres una mentirosa, eso no es cierto, yo no tengo más hermanas – su agarre se hace más fuerte, al intentar quitar su mano termino con mis dos manos sujetadas - ¿Qué quieres? ¿Quieres dinero? ¿Quieres algo de mi padre? – esas preguntas me hacen percatar de lo mal que lo ha pasado con este tema
Claro que no, Fabián soy tu amiga – hago una mueca de dolor
Mis amigos no me traicionan de esa manera, mis amigos no andarían con esa bastarda… –
No le digas así, Alex no tiene la culpa de nada –
¿Y yo sí? – Niego mientras acaricio mi brazo – desde que esa apareció nada volvió a ser igual, mi familia se arruino, todos hablan de nosotros a nuestras espaldas, tenemos que sobornar para que nadie sepa, mamá no sale del despacho… - se desespera y aprieta su cabeza – ella me quito todo y aún lo sigue haciendo
Ella no ha hecho nada malo –
Esa estúpida lo tiene todo, tiene a mi padre, tiene a su familia, ella ni siquiera estudio mi estúpida carrera y aun así mi padre y mi abuelo piensan que ella sería la indicada para manejar los negocios familiares, no importa lo que diga, lo que haga, nunca están satisfechos – saca su frustración - papá prefiere ir a verla en un tonto torneo de tenis a irme a ver a mí – respira profundo intentando tranquilizarse
Hace meses que mi padre solo nos ve como un estorbo en su vida, cada día que pasa siento que el abuelo piensa lo mismo, no puedo hacer o salir con quien me gusta y ella si puede. ¿Sabes que es vivir bajo su sombra? ¿Sabes que se siente que tu abuelo le diga a tu mamá que no sirve como mujer? ¿Vivir con el miedo constante si tu padre va a volver? ¿sabes que se siente ver a tu madre perdida en el alcohol? – Él me toma del brazo – contéstame
No lo sé –
Debe ser muy divertido para ti ¿no? Ayer fingías estar preocupada por Sofía pero te da igual, ¡andas con ella!, siempre te creíste mejor que nosotros ayudando a las personas, siendo la buena, la confiable, diciéndome que no le hablara mal a la mesera y era porque te la querías coger.
Sabes que no es así, ella me gusta – jalo mi brazo y el me suelta – ni siquiera sabía que ella era tu hermana.
No lo es, ¡ya te dije que no lo es! – me grita y Mia se asoma en la puerta – termina con ella, coge con ella y termina, no me importa, solo termina con esto.
No –
¿Por qué no? – le da una sonrisa a Mia y lo saluda volviendo adentro
Me gusta, nos queremos – me da una sonrisa llena de sarcasmo.
Su madre era la secretaria de mi padre, se le ofreció por menos de mil pesos, ella se embarazo pensando que mi padre nos dejaría ¿crees que ella es diferente? – Al no obtener respuesta prosigue – te pidió ser su novia en un puto baño público, sabes lo que es; una oportunista muerta de hambre igual que su madre.
Cállate, no la conoces como yo ella no es así, tú no sabes nada –
Eres una hipócrita defendiendo a esa estúpida. Termina con ella o nuestra amistad termina – me mira fijamente, su cara está roja del coraje – termina con ella o nos pierdes a nosotros. – me percato de que mis lágrimas comienzan a descender por mi mejilla.
No puedo – mi voz se quiebra – te quiero, pero a Alex la amo, no me hagas elegir porque…-
La eliges a ella – mis lágrimas salen con más facilidad – un día mi padre dijo que me alejara de ti, dijo que me ibas a traicionar, que no eras confiable, pensé que estaba mintiendo, que era un loco, pero míranos ahora. Estas saliendo con su bastarda ¿él sabe que ella no es perfecta?
No lo sé –
Yo podría ir en este momento y decirle que su bastarda es una lesbiana, podría demostrar que no es tan buena, que no es la indicada ¿Por qué te tenías que enamorarte de ella? – golpea la tasa de su café y cae al suelo.
No sé, solo paso – lo abrazo por la cintura y recargo mi cara en su pecho – solo déjame explicarte
Nunca te lo voy a perdonar – quita mis manos de la cintura – esperaba la traición de quien sea. La personas solo están conmigo por mi dinero, mi apellido, estoy tan acostumbrado que ya me da igual. Pensé que tú eras amiga.
Lo soy – lo miro a los ojos tomando sus manos
No, tú me acabas de traicionar de la peor manera, yo si deje de hablar con Eduardo por ti, yo si dejaría a cualquier estúpida por ti - me suelta - ¡Vete a la mierda Bárbara! – toma sus cosas y entra a la casa, me dejo caer en la silla. No espera que pasara otra situación, sabía que él se iba a sentir traicionado, acabo de elegir mi felicidad encima de nuestra amistad.
Calma bebé – papá me abraza terminando con mi fuerza, me hago débil ante él y mi llanto inunda el jardín.