Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Rehabilitación/Creek por javithabadeer

[Reviews - 1]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Venía bajando la escalera hacia el primer piso, la puerta daba con el lugar donde Tweek elaboraba los distintos pasteles y otros para la cafetería. Eran quizá las diez de la noche, ya había terminado con su reporte así que podía descansar un poco. Apoyó la mano en el pomo de la puerta, pero no la abrió, podía escuchar la voz de su novio del otro lado. Puso su oreja contra la madera para escuchar mejor.

—...... estoy bien. Aunque no sé por cuanto tiempo pueda soportarlo. Sólo pensar en aquel momento me hace estremecer. Como quisiera poder decirle a Craig sobre esto.

¿Decirle sobre qué? ¿Acaso lo estaba engañando? Frunció levemente el ceño, terminó la llamada poco después. Volvió a subir al segundo piso, no quería verlo por ahora. ¿Y si de verdad lo estaba engañando? ¿Qué haría? ¿Era por que trabajaba mucho? Caminó por la casa buscando respuestas, hace días que estaba hablando con alguien, ¿Quién era? Decidió hablarle a Token, necesitaba hablar con alguien sobre el tema. Agarró su chaqueta y así bajó esta vez decidido a salir. Tweek lo miró al pasar, le sonrió de manera dulce, ¿Cómo podía fingir de aquella manera? Se acercó a este, besó su frente, no quería creer que de verdad le era infiel.

—Saldré un rato. Llegare para cenar.

—Ve con cuidado.

—Te amo, —Dijo mirando sus ojos. —de verdad te amo mucho.

—Y yo a ti Craig.

Lo miró a los ojos, no parecía mentir en eso. Besó sus labios y así se marchó. Se sentía tan frustrado, se suponía que debía confiar en él, pero si había estado actuando extraño desde hace unos días. Si le molestaba algo, ¿Por qué no se lo decía? Su celular vibró, Token confirmaba que iría a verlo al bar. No pasó mucho para que ambos estuvieran sentado en una mesa apartados de todos los demás. Pidió una cerveza al igual que Token. 

—¿Y bien? ¿Qué sucede? 

—Pues siento que Tweek ha estado actuando un tanto raro. —Comento mientras jugaba con la cerveza. 

—¿Por qué piensas eso? —Preguntó Token. 

Suspiró de manera suave, tenía un pésimo presentimiento de todo aquello. Alzó la vista mirando a su amigo, este tenía un anillo en su dedo anular, se casaría pronto con Nichole. Tweek estaba aún buscando un traje para ir a la boda, aunque no era por él, Tricia había insistido en querer ayudarlo con eso y si ella no se decidía, Tweek tampoco lo haría. 

—Pues no sé, no me deja tocarlo mucho y habla más de lo normal con su celular. Hasta le puso clave para que no pudiera revisarlo. 

—¿Le revisas el celular? 

—Claro que no, pero si lo necesitaba y estaba el suyo lo usaba, no había problema hasta hace unos días. 

—¿Crees que te engaña? 

—Puede ser... pero es Tweek, no creo que lo haga, pero tengo miedo. ¿Habré hecho algo? Quizá hice algo y no me acuerdo. 

—No lo creo, sabes como es él, si fuera así te lo diría. De seguro hay otra razón. 

—Quiero pensar eso también... ¿Cómo  van tus preparativos para la boda? 

—Pues Nichole escoge todo, pero bueno, mientras a ella le guste, todo está bien. ¿Por qué no le pides matrimonio a Tweek? De seguro le gustaría. 

—La verdad es que ya tengo el anillo. Se lo quería pedir hace dos días, pero fue cuando comencé a sentir que estaba extraño. ¿Y si se lo propongo y luego me dice que no quiere? Siento que si no es con él, no podré ser feliz. Ya lo intenté y no funcionó. 

—Entonces demuestrale eso. Hazle ver que lo amas. 

A la mesa se sentó de la nada Kenny, iba con el cabello revuelto y un golpe en la mejilla. Tomó la cerveza de Craig y la bebió de una sola vez, eructó de forma estrepitosa y luego suspiró apoyando su cabeza en el respaldo del sillón contra la pared.

—¿Y a ti qué te pasa?  —Preguntó Token mirándolo.

—Butters se enteró que me metí con Red y me golpeó. —Comentó este. Abrió la boca sintiendo el dolor de la mandíbula. —Golpea fuerte, lo subestimo por su bonito rostro. 

—¿Por qué sigues buscando mujeres si sales con Leo? —Quiso saber Craig. 

—Me gustan las tetas. —Respondió con sinceridad. —pero amo a Leo. No hay nadie mejor en la cama que él y cocina delicioso. 

Craig se quedó en silencio, ¿Podría ser algo similar con Tweek? Que salga con alguien más por sexo o que tiene algo que él no. Wendy... ella había estado hablando mucho con él por celular y visitándolo, ¿Podrían ellos...?  No... No. Se levantó de la mesa, dejó algo de dinero y así corrió de vuelta a la casa. Quizá podría encontrarlos en el acto. Atravesó la ciudad, ingresó en el café que ya se estaba cerrando por el horario. Pasó al lugar donde Tweek trabajaba por él no estaba ahí, subió por la escalera con rapidez, del otro lado escuchó que algo caía al suelo y se rompía. ¿Podían estar teniendo sexo en la cocina? Entró a la casa y corrió a la cocina, se quedó mirando entre jadeos y lo que encontró fue algo peor. Tweek estaba arrodillado en el suelo apoyado contra el mueble, un plato delante de él hecho trisas. Se rodeaba con un brazo el abdomen. 

—¿Tweek? —Llamó este. Preocupado bajó para estar a su altura.—Cariño, ¿Qué pasa? ¿No te sientes bien? 

—No, no pasa nada.—Respondió este.

Lo rodeó con sus brazos, besó su frente acariciando su espalda. Le ayudó a ponerse de pie y lo llevó hasta la habitación, le quitó la ropa dejándolo dormir. Sabía lo mucho que trabajaba en la cafetería, así que debía estar fatigado. Volvió a la cocina, limpió los restos del plato y la comida tirada, el celular de Tweek sonó sobre la mesa. Lo tomó encontrando el nombre de Francis.  Colgó la llamada y apagó el celular, definitivamente algo pasaba.

Al día siguiente no dudo en seguirlo, debía averiguar a donde iba, si iba a ver al maldito de Francis. Luego de que este saliera de casa lo siguió en el tesla, por lo general iba una cuadra más atrás para evitar que este lo viera. Tweek caminaba de manera lenta mirando vitrinas y cruzaba calles. Hasta ahora no parecía nada extraño. Se subió a un autobús, ¿A dónde iba? Se mantuvo cerca del autobús para no perderlo de vista.  Este llevó a las partes más retiradas de la ciudad y se bajó en la clínica.  ¿Tweek estaba entrando en una clínica? OK, eso si pasaba muchos límites. Lo observó entrar en el lugar, estacionó el auto y corrió adentro para no perderlo de vista. Lo encontró tomando el ascensor, esperó a ver en que piso se detenía. Subió en el ascensor de al lado, usaba ropa negra y gafas, quizá era muy obvio, esperaba que no. El ascensor se abrió en el quinto piso, miró afuera encontrando al rubio yendo por un pasillo hacia el final. Habían más personas en el lugar que esperaban su atención, ¿Se verían durante el trabajo? Eso si que rompía límites... su aventura de amantes parecía de telenovelas. Molesto siguió adelante, no podía creer que realmente su novio, su amado Tweek estaba metido en una clínica viendo a un doctor ¡Su amante! ¡Su amante era un doctor, por el amor a Dios! 

En el corredor final habían seis puertas. Caminó escuchando para encontrar la voz su pareja, la encontró en la última puerta del lado izquierdo. Apoyó el oído en la madera, ¿Tendrían sexo? Pensar eso lo ponía más molesto.

—Tu piel está más *hermosa. ¿No lo ha notado Craig? 

—No he dejado que me vea o toque... me hace sentir mal por no decirle...  

—Abre tu camiseta y recuestate.  

No necesitaba más pruebas, ¿Acaso no era obvio lo que hacía ya? Abrió la puerta encontrando a Tweek terminando de abrir su camiseta y a Francis llevando una máquina. El rostro de su novio palideció como si hubiera visto un fantasma, claro, si los había encontrando en su acto, ¿Como no iba a tener esa cara? Con ira avanzó hacia él y con un puñetazo lo derribó al suelo. Estaba tan enojado, su novio, su amado Tweek lo engañaba con aquel sujeto.

—¡¿Cómo te atreves?! Soltó molesto. 

¡Craig! —Chilló el rubio. 

Este se arrodilló para poder ayudar al doctor que estaba tirado en el suelo, la sangre emanaba de su nariz por el golpe que había recibido. Más enojado estaba, lo estaba ayudando en vez de dar excusas o hacer algo para impedirlo. Pues al parecer, lo prefería a él.  

—¡Claro! ¡Ayuda a tu amante! No puedo creer que me engañaras. Dijo mirando su rostro.  

 Craig, no es eso. Protestó este.  

¿No? Entonces qué significa esto ¿Ah? Te estabas desnudando, Tweek. ¿Por qué otra razón tu vendrías a una clínica? ¡Las odias! Pero si con eso puedes ver a tu amante a salvo, como no...   

—Tweek espera un bebé tuyo. Soltó Francis. Es por eso que vino, ya está en su semana doce y debía hacerse un examen para que pueda revisar el pliegue nucal del feto. Felicidades, Tucker, eres padre.  

El rubio se quedó mirándolo desde donde estaba, tenía una mirada de decepción enorme. Sus palabras lo dejaron helado, ¿Cómo que era padre? ¿Era si quiera posible? Jadeo y sus piernas casi fallaron, logró aferrarse a la puerta para evitar caer. Su cuerpo comenzó a sudar frío. Era padre... tendría un hijo... con Tweek. 

—¿Y por qué no me lo dijiste? Quiso saber con una voz baja. 

—Porque... puede que no quieras... puede que nazca con algún problema por ni cuidarme... tenía miedo de que me dejarás por esto. 

Se sentía bastante mal por aquello, él había puesto a Tweek inseguro y por ello no se lo había dicho. Decepcionado de si mismo se acercó  a este, se arrodilló frente a él tomando sus manos besando sus nudillos. 

—Oh cariño... —Murmuró con suavidad.— jamás sucedería eso, te amo. —Lo rodeó con sus brazos con fuerza. —Perdóname... lo siento mucho, no quería... de verdad que no... es que tenía miedo. Paso tanto tiempo trabajando y yo... lo siento. 

Francis se levantó del suelo sin decir nada. Se separó de su novio, se puso de pie y lo ayudó a él a levantarse también. Se acercó al doctor sintiéndose muy avergonzado. 

—Francis yo...

—No digas nada. 

Asintió a su petición, Tweek se acercó a él apoyando su frente en su hombro. Lo rodeó con sus brazos besando su cabeza, su mano izquierda bajó y la posicionó en su abdomen que aún no crecía. Ahí crecía un bebé de los dos, estaba emocionado por la noticia. Bajó besando sus labios con dulzura. 

—Te amo, realmente te amo... Los amo. 

—Te amo, Craig. —Respondió este con una leve sonrisa. —Pero te castigaré por golpear a mi médico.  

______________________________________  

* La piel se vuelve más suave y brillante debido al aumento de sangre y a las hormonas por el embarazo. 

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).