No entendía que significaba eso, ni por qué me pregunto algo como eso, no tenía sentido y no hallaba una respuesta pero después de unos segundos, sentí una energía muy poderosa que nunca había sentido.
Al absolverla un calor recorrió por todo mi cuerpo haciendo que mi pene de engrosara en menos de un minuto.
Había escuchado de compañeros míos que habían encontrado a sus parejas predestinadas y me habían dicho que cada uno respondía de forma diferente.
-Tú... tú eres mi pareja.-dije, con una voz llena de deseo.
-Si, al segundo que te vi supe que eras mi compañero predestinado pero como no miraba que tuvieras alguna reacción no dije nada ¡perdóname! –me dijo con el rostro rojo.
-Está bien, perdóname hacerte creer que no te quiero, ¡por dios eres la cosa más hermosa y sexi que he visto en toda mi vida! –dije, camine hasta alcanzarlo y tomarlo en mis brazos acostándonos.
-Y... yo...y – fue lo único que pudo decir.
-Está bien pequeño vamos a dormir que debes estar cansado de estar buscando leña, solo duérmete bebe que yo estaré contigo cuando despiertes.
Al día siguiente nos levantamos y juntos preparamos el desayuno hablando de cosas que nos gustaban, de las cosas que nos disgustaban y de las cosas que nos parecían divertidas. ¡No puedo creer lo afortunado que soy!
-¡Eriol! Tengo algo que decirte. – dije. No podía ocultarle nada así que le conté todo lo que había pasado estos últimos meses, cuando termine de hablar espere por alguna respuesta por parte de él.
- !shhh! – empezó a llorar y de inmediato lo traje hacia mis brazos estaba temblando – n... no puedo creer todo por lo que pasaste, ellos solo te culparon sin tener pruebas están injusto me siento desilusionado de mi propia raza y por las demás también ¡perdónalos por favor, por favor! – me dijo llorando.
-No creo que los pueda perdonar bebe ellos destrozaron a mi pueblo y no solamente con eso sino también nos culparon por la muerte del cambia formas ¡no puedo!-dije.
-Mme odias también, yo pertenezco a esas razas también – me dijo, tratando de salirse de mis brazos. Pero no lo solté.
-No te odio bebe, eres mi pareja y jamás podría odiarte a pesar de que apenas nos conoceos hace unas horas se que por ti daría mi vida e incluso olvidaría mi venganza con tan solo de quedarme con la persona que se, que algún día amare con desesperación.-dije.
-YYo no quiero que dejes todo por mí.-dijo, secándose sus hermosos ojos.
-No pienses en eso, ¡vamos a desayunar!
ERIOL:
había pasado un mes desde que encontré a mi compañero en mi casa, la primera vez que lo vi supe al instante que era el.
En estos días no he dejado de pensar ¡hasta cuando se atreverá a tocarme! A pesar del tiempo que llevamos viviendo, no me a toca solo son abrazos y besos.
-Hola bebe como estas? – dijo Sharon, que venia caminando desde la sala.
-Hola estoy bien solo Salí a tomar un poco de aire – dije, tratando de disimular mi desilusión. Hoy no me ha abrazo o me ha dado un beso.
-Que te pasa bebe y no quiero que me digas que bien por que puedo sentirlo la magia esta en poco turbulenta.-me dijo mirándome directamente a los ojos.
-Y Yo no, no es nada-insistí.
-No me digas MENTIRAS – me dijo con un tono de voz fuerte que hizo que un escalofrió pasara por mi columna.
-Y yo Hmm – no aguante ,y empecé a llore tanto que Sharon tuvo que sostenerme; me encantaban sus brazos como me gustaría que me hiciera el amor.
-Shh tranquilo bebe no me gusta verte llorar, dime que pasa sabes que puedes que decirme cualquier cosa que te moleste.
-Y.. yo es q es que me he preguntado por qué no me tocas acaso no te gusto soy desagradable para ti Ssolo d..i..me. - hablaba tan entrecortado que si el no fuera un elfo estoy seguro que no escucharía lo que dije pero como era de esperarse entendió todo.