Capítulo 4
El viaje, la misión
_ Hay que apresurarnos y salir de aquí._ Ambos jóvenes caminaban agarrados de la mano para deleite del muchacho doncel, sus mejillas se colorearon ligeramente y entrecerró sus ojitos por la sonrisa bobita que formaron sus labios. El varón azabache no hacía caso de la reacción de su compañero, la notó, pero no le tomó importancia. Le urgía mucho salir de inmediato del lugar._ Pasa tú primero esta vez, ya conoces el camino. _ Retó y Naruto se fue arrastrando por el agujero que los llevó al mundo Feérico, seguido del chico de orejitas puntiagudas.
Una vez afuera. Cada uno sacudió el polvo de sus ropajes y el de ojos negros retomo el recorrido para ir a casa._ Me hubiera gustado quedarme un poco mas, las haditas son las criaturas más hermosas que he visto.” No, más bien, son lo segundo más bonito que me ha pasado en la vida”._ Pensó para si mismo viendo la espalda del azabache, su cabello y parte de sus curiosas orejas.
_ Es increíble que intentaran hacerlo, nunca las creí capaz, estoy tan molesto._ Susurraba el elfo ofendido.
_ ¿Sasuke?, ¿Sucede algo?_ Preguntó preocupado por el azabache, el teme le escuchó y lo miró por el rabillo del ojo y a Naruto le encanto su mirada dirigida a él.
_ No es nada, Naruto, no deberías preocuparte de alguien como yo._ Respondió con su típica seriedad.
_ ¿y eso por qué?_ Que no se preocupara, claro como no.
_ Porque tú eres un Humano y yo un Elfo, somos diferentes._ Agregó como si fuera lo más obvio.
_ Pues, tú me agradas, por eso tengo pesadumbre cuando te veo inquieto o enojado, no creo que sea importante nuestra diferencia de raza si tengo estos sentimientos hacia ti._ Su dialogo sincero pudo parecer una confesión amorosa pero ambos sabían que no era así, Sasuke no se inmuto, reconocía la preocupación del rubio humano para con él porque se sentía agradecido de salvarle de los espectros y por prometerle que no lo enviaría de vuelta al pueblo que le hizo daño.
_ De acuerdo te lo contaré, estoy decepcionado de las hadas.
_ A mí me parecieron agradables, me invitaron a jugar.
_ Ese es el problema, no estaban jugando, su intención era deshacerse de ti, querían ahogarte en el lago._ Explicó.
_ ¿¡qué!? ¿Por qué harían eso?_ Estaba un poco sorprendido.
_ Porque estaban celosas. Las hadas son buenas, hacen buenas acciones y ayudan a los inocentes como vírgenes bellos y niños pero también son muy vanidosas y soberbias, no toleran que otros superen su belleza porque les da envidia y tratan de exterminar lo que las opaca, era lo que intentaban hacer contigo._ Confesó.
_ Ouh
_ Sí, ouh, jamás las vi actuar así hasta hoy que te vieron, pero ya no importa, estas a salvo y logré conseguir la información que necesitaba._ Alegaba. _ Esperó que aprendas a no confiar en todo ni todos._ Reprendió puesto que el doncel tampoco puso de su parte para protegerse, era muy distraído y crédulo.
_ En ti si puedo confiar._ Le respondió con una sonrisa traviesilla y el otro suspiro.
_ Claro, claro, ahora vamos, debo prevenir mis cosas.
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Después de lo acontecido regresaron a la cabaña y descansaron por una noche, el teme le cedió de nueva cuenta su cama y en vez de dormir redactó un escrito con tinta negra en una hoja marchita. A la mañana siguiente Naruto preguntó cual sería el siguiente paso.
_ Esperaremos._
_ ¿Esperar?, a que?_ estaba sentadito en las escaleras de madera mientras veía al azabache meterse dos dedos a la boca para después soplar fuertemente y producir un silbido de lo más armonioso.
El doncel rubio notó que el elfo tenía una hoja enroscada en su otra mano, era probablemente la carta que le vio escribir con mucho afán en la noche, mientras él lo admiraba desde la cama simulando estar dormido. El ver como su cara sería y hasta cierto punto, amargada se descomponía en diferentes muecas en lo que la luz de las velas bailaban acompasadas favoreciendo su perfil le fueron suficiente para arrullarle y cerrar los ojos para no abrirlos hasta el día siguiente.
En seguida apareció a lo lejos un hermoso Halcón que se posó en el antebrazo izquierdo que el elfo le ofrecía, le dio el papelito que tomó con una de sus garritas y el dueño ordenó._ entrega este mensaje al líder del sector Este._ El ave salió al vuelo y se perdió a lo lejos.
_ Pasa algo grave?
_ Más de lo que puedas imaginar, pero eso no te incumbe._ El otro hizo pucherito._ No haremos nada hasta que el ave vuelva, ¿de acuerdo?
_ Sí, de acuerdo._ El azabache, conforme con la respuesta se metió a la cabaña y el rubito se quedó en el mismo lugar, sentado en las escaleras, contento de que el Sasuke no lo corriera o intentara deshacerse de él.
Esperaron por tres días en la choza y Naruto no podía estar más feliz de su estadía con Sasuke, era serio es cierto pero era hasta cierto punto atento, comían tres veces al día, el joven rubito se daba cuenta que el mancebo de ojos negros no había preparado una comida con carne de ningún tipo, no se iba a poner de caprichoso, estaba contento con tener un amigo como él, además no se quejaba de la comida, degustaba fascinado de lo que su anfitrión le ofrecía. Hasta un día que el elfo preparo un de sus tantas ensaladas y agregó trozos de manzana que el pequeño doncel de inmediato le repulo ganándose un reclamó del azabache diciéndole que no era fonda, que como era posible que un humano desnutrido se pusiera a refunfuñar sobre la comida y quien sabe que otras cosas más, hasta llego hacerle burla para haber si así lograba que tomara bocado pero por más que lo intento el humano no las probó por nada del mundo, el Varón pelinegro percibió una actitud poco común en Naruto además no iba a estar rogándole como si fuera su madre y lo dejo por la paz.
El doncel intentaba retribuirle su gratitud de alguna manera, porque le daba de comer lo que jamás pudo disfrutar, le dejaba su cómoda cama que le resguardaba del frio y no le pedía nada a cambio, pero algunas ocasiones, sus intentos terminaba siendo desastres y el azabache por más que deseaba retorcerle el pescuezo al humano se aguantaba. Así que lo dejaba haciendo tareas fáciles, la mayoría de las veces con tareas que no le eran de utilidad pero con tal de alejarlo de problemas estaba mejor.
Una tierna mañana, la tercera después de enviar su carta, era ahora el elfo el que estaba sentado en las escaleras leyendo el quinto libro que sacó de su estantería mientras fingía no hacer caso al Doncel que por todos los dioses intentaba una y otra vez subirse al lomo del venado que por décima vez consecutiva lo tiraba al pasto. Al principio el ciervo se mostraba hostil, muy ofendido de que alguien más que su jinete Sasuke quisiera montarlo, pero al ver la terquedad del muchachito humano dejo de ser tan osco y comenzó a tirarlo con menos brusquedad que en un principio, incluso engañaba al joven rubito haciéndole creer que por fin se dejaría montar hasta que lo tiraba de nuevo sólo por diversión.
Sasuke no sabía si intervenir y decirle a cualquiera de los dos que ambos eran igual de tercos; Que el ciervo no se dejaría montar nunca y que Naruto no dejaría de intentarlo hasta que cediera.
¿Con cuál de los dos podía razonar? Se preguntó, como lo considero algo difícil y una pérdida de tiempo prosiguió con su lectura.
Escuchó a lo lejos a su halcón que ya venía de su entrega, de inmediato, ignoró todo lo demás; Tiró los libros, se levantó de las escaleras y fue al encuentro de su avecilla que inmediatamente se posó en su antebrazo, tenía un pergamino metido en un estuche que cargaba en la espalda, al ver un sello dorado Sasuke dedujo que su carta había tomado interés y certificación como caso importante. Se alojó dentro de la cabaña ante la mirada expectante del rubito que había dejado de jugar y yacía en el suelo sentado viendo hacía donde estaba anteriormente el pelinegro.
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Ahora el ave picoteaba unas semillas que le fueron dadas por su amo, el cual tenía justo al lado leyendo el pergamino que le otorgaron.
Para el Elfo de hielo.
Tu carta a llegado con bien y tu incertidumbre se justifica con creces, las palabras dichas por la princesa Hada son intangibles, debó comentarte que han llegado cartas con información parecida a la tuya, con pequeñas disyuntivas pero el objetivo, lamentablemente, es el mismo.
Misión.
Es mi deber informar que presentamos una crisis como la de hace 12 años y que si no apoyamos la causa y defendemos a los inocentes, a los nuestros, tendremos un resultado catastrófico como en el pasado y para el futuro.
Para impedir esto se les encomienda la siguiente misión
Su deber es el siguiente, debéis…
_ Ey, Sasuke, el venado hace cosas raras._ escuchó de pronto la vocecita gentil del doncel.
_ Naruto, estoy ocupado._ Agregó, lo que leía era muy importante, más que consentir al rubiales que se hospedaba por tiempo temporal en su casa del bosque.
_ Pero es que…_ Articuló resentido al verse ignorado.
_ Cuando termine iré, ahora si me permites._ Regreso su atención a la lectura y.
El chico de ojitos azules volvió afuera y miraba como el ciervo se arrastraba en el suelo, sentado y se impulsaba con las patas delanteras
_ ¿Por qué hará eso?, ¿tendrá comezón?_ Se sonrojó y decidió mejor no mencionárselo al azabache que probablemente se enojaría por hacerle perder el tiempo con algo tan simple y también porque estaría invadiendo la privacidad del pobre venado con aparentes lombrices.
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Cuando regresó de nuevo a la cabaña luego de un rato observó a un Azabache un poco apresurado que acomodaba unas petacas ligeras de viaje; se colocó esa fascinante capa verde con gorro que usaba la primera vez que se conocieron. De un estante cogió un arco y flechas.
_ Bien, Naruto, nos iremos desde este momento. Agarra tus cosas… quiero decir, vámonos._ Salió así de repente por un lado del doncel que permanecía en el marco de la puerta, empujándolo levemente.
_ ¿Por qué? ¿Adónde vamos?_ Le copió los pasos al Elfo hasta afuera de la choza, para ver como colocaba las maletas como equipaje para su animal que al parecer dejo de rascarse el culo.
_ Tengo una misión importante, iremos al siguiente pueblo a informarnos.
Cabalgaron por el bosque durante todo el día hasta llegar el ocaso, sólo se detuvieron un par de veces para comer y para que descansara el animal y beber algo. Cuando llegaron a un pueblo cerca de unas montañas y rodeado de robles se encontraron con una sorpresa.
_ No hay nadie._ Mencionó Sasuke ante la cara no sorprendida de Naruto._ Parece que se los hubiera tragado la tierra.
_ ¿Qué crees que pudo ser?
_No estoy seguro, no pudo ser una epidemia, no hay cuerpos, tal vez, caza fortunas que se los llevaron para venderlos como esclavos, que se yo.
_ Quizas fue alguna especie desconocida._ Aportó el rubito.
_ otra especie? Fueron de los tuyos, Dobe, Humanos que pelean y venden a otros humanos, es todo._ Confirmó el pelinegro con su teoría.
_ A lo mejor una cosa los asusto y por eso huyeron._ Refutó un poco enojado por la suposición del Elfo y por el insulto que reconoció bien, no por nada vivió en la calle y escuchaba a los borrachos de las fondas con un lenguaje de lo más vulgar.
_ Es una hipótesis aceptable, comienzan a pensar, eh?._ Continuó la calzada sin darse cuenta de la carita de disgusto del doncelito.
Conforme pasaban, eran testigos de las casitas vacías, revisaron algunas, cada quien por su lado, excepto el venado que seguía la espalda del teme como patito a su mamá.
_ No hay nada en las residencias, se lo llevaron todo._ concluyeron. Pero siguieron su camino hasta finalizar en la librería del pueblo, muy pequeña y humilde._ Esto estaba buscando, vamos._ Se colaron sin nada de dificultad al establecimiento con nada de mueble ario más que los libros._ Hmp, no me sorprende que se hayan llevado todo menos lo que los ayudaría a salvarse del infierno._ Comenzó a revisar entre los libros._ Naruto, ayuda y busca por el montón que esta allá._ Señalando una esquina._ cuando encuentres un libro con la palabra de unicornios o especies míticas me avisas._ Dándole la espalda y revisando los libros.
El joven de ojos azules se tensó, ¡cómo diablos dijo!, sin mucho entusiasmo revisaba cada libro sin estar seguro, para él todos eran idénticos, exceptuando el color._ Encontraste algo?_ Preguntó el ojinegro a lo lejos.
_ A-aun no._ Contestó sin estar seguro. Luego un librito le llamó la atención, era pequeño y curioso, con un extraño hombrecillo de gorro chistoso y con orejas como las de Sasuke, claro que eran relativamente cortas y nada bonitas comparadas a las del azabache._ Ey, Sasuke, encontré uno que tiene un elfo como tú, mira._ El otro se acercó al terminar de revisar su montón quedando con la portada en las narices leyendo un enorme título con letras rojas duendes, admirando también la figura de un hombre bajito y feo , no pudo sentirse más ofendido por tal comparación.
_ No es gracioso, Naruto._ Miró al doncel con el ceño fruncido y la cara de alegría del rostro dulce del humano se esfumó al notar que su compañero no disfrutó de su hallazgo.
_ No entiendo por qué te ofendes, es un Elfo como tú._ La furiosa cara del pelinegro._ ¿No es así?_ Bajo la voz y se encogió en su lugar por su error.
_ ¡Ahí dice duendes! ¿¡No sabes leer acaso!?._ ex pecto enojado. Naruto bajo la mirada avergonzado y hasta cierto punto triste de saberse descubierto de su ignorancia. Nunca tuvo la oportunidad de aprender algo tan básico como leer y escribir porque la aldea donde solía vivir no se lo permitió.
El ojinegro calló por unos momentos al admirar la faz del humano, dándose cuenta que había acertado en sus palabras._ No sabes leer._ Reafirmó con voz ya más tranquila y comprensiva. Luego suspiró._ De Acuerdo, entonces busca el dibujo de un unicornio, es como un caballo pero de color blanco y tiene un cuerno en la cabeza._ Se dio la vuelta otra vez para acercarse a otro montón de libros que se hallaban cerca.
Naruto no supo cómo sentirse al respecto, por un lado le daba vergüenza el que su amigo Elfo descubriera su analfabetismo, por otro lado sorprendido de que no hiciera alguna clase de reclamo, burla o rechazo, actuó tolerante con él y ese era el tercer punto, estaba conmovido y enternecido por la seca pero amable comprensión que le ofrecía Sasuke quien en este momento se encontraba de cuclillas buscando lo que requería.
Luego de rato que ya se había hecho de noche, encendieron unas velas improvisadas y continuaban buscando en la oscuridad.
_ ¡Lo encontré!._ exclamó el de ojos negros._ Era lo que estaba buscando. Ambos dejaron de buscar y el teme comenzó a leer en voz alta para que al menos el rubio aprendiera un poco._ escucha con atención Naruto._ Carraspeo la garganta para tener una mejor voz. El lindo rubio se arrimó a él a gatas hasta quedar a su lado, hombro con hombro y aunque el elfo le dejo claro que no deseaba contacto físico no pareció molestarse el que rozara su brazo.
_Los unicornios son criaturas que pertenecen al mundo mágico y habitan en el bosque._ Había una imagen de un unicornio que parecía galopar._ Su apariencia es similar a la de un purasangre, presentan pelaje de variados y exóticos colores, en su mayoría blanco, estas criaturas son valiosas por…_ Se detuvo un instante al releer el contenido nada sano._ Por su carne, son difíciles de capturar pero la recompensa es grande cuando se tiene un cadáver de este espécimen;
La carne es utilizada por los chamanes y curanderos al usarlas para curar enfermedades infecciosas y vinerías entre otras enfermedades difíciles de sanar como la peste, la tuberculosis, gangrena,etc.
El cabello es comprado como joya por las mujeres de cualquier clase que pueda costearlo ya que su uso aumenta la belleza cada día y si se come concede la habilidad de que salga una moneda de oro por la boca con cada palabra que se diga.
Las pezuñas son algo exótico y complicadas de preparar, lo mejor es tritúralas hasta conseguir hacer un polvo que se beba en una infusión, sus propiedades son utilizadas para envenenamiento de la persona que lo consuma. Sus efectos comienzan con una fiebre ligera que va en aumento al pasar las horas, seguido de alucinaciones, adormecimiento del cuerpo para finalizar con fuertes espasmos musculares que terminan con la muerte luego de 6 horas de su ingestión. Es usado por los verdugos o detectives callejeros para torturar a las víctimas que beben el menjunje ya que este proporciona, además de una muerte dolorosa, confesiones sinceras de lo que se les pregunte.
El cuerno es posiblemente lo más valioso del animal en cuestión, ya que su consumo concede fuerza descomunal equiparada a la de 20 hombres, además de proveer resistencia inhumana de varios días y sanar heridas mortales en cuestión de segundos. Su efecto dura a lo mucho 7 días y su demanda es grande para los soldados que están en guerra,
Ya no prosiguió al ver que el resto de lectura era dedicado a cómo preparar las infusiones y demás, se le hizo realmente indignante el que un libro fuera exclusivamente para escribir como matar a un pobre animal y de su uso, en especial un pobre unicornio, tratados como los corderos que los humanos suelen matar, el unicornio era una criatura mítica y formaba parte de los cuadrúpedos del buen agüero, junto con el dragón, la tortuga y el fénix.
No era la información que buscaba, sin embargo, le fue de utilidad para saber por qué daban caza a los unicornios.
Malditos humanos infelices.
_ Oye, Sasuke,¿ por qué de pronto paraste con la lectura? Lucias entusiasta al leerme._ Escucho una dulce vocecita de un mozo, un doncel rubiecito de ojos azules que lo miraba curioso y con un toque de preocupación por su sentir. Sin importarle la cercanía del otro reflexionó sobre que rayos iba hacer con él, después de todo, también era humano y aunque era joven presentía que tarde o temprano Naruto perdería su dulzura cuando fuera más grande.
_ “No, sus ojos son demasiado tiernos, mostró simpatía con una bruja con tal de ayudarme”._ Seguía viendo al joven de ojos azules que al notar la bella mirada del azabache sobre si y al estar tan cerca podría inclinarse más para darle un beso en el cachete de precioso color porcelana que poseía el de ojos negros, ese pensamiento inocente le provocó apartar la vista con los ojos cerrados por la risita que se quería escapar de su corazón, adornando sus mofletes de un suave color cereza._ “Aunque, también lo hizo por temor a que lo corriera”. Naruto, dime una cosa, ahora que sabes que no volverás a la aldea que te trató tan mal, ¿Qué piensas de ellos?, ¿Qué deseas para ellos?
_ ¿A qué te refieres?
_Me refiero a que si deseas que les pase un mal, como que el gigante que te secuestró regrese y los extermine a todos, por ejemplo.
_ Eso sería terrible._ Contrario a lo que pensó, Naruto demostró una sana y natural compasión al respecto._ Creo que a pesar de lo que hicieron conmigo fue por una buena causa, es decir, tenían miedo de sacrificar a sus hijos, un ser que querían y que mejor que entregar al único muchacho del pueblo que nadie quería._ A Sasuke le supo amargo lo que dijo el doncelito, el cual miraba sus manos para evitar mirarlo a él ya que ambos estaban muy cerca que podrían recargar sus cabezas una contra la otra._ Es duro pero también es cierto, no quiero amargar mi vida deseándoles lo peor, ya pasó , los perdonó pero no quiero verlos de nuevo, sería como darles otro chance de hacerme daño._ Concluyó por fin.
Las crías humanas son tan débiles que no se independizan de sus padres hasta la edad adulta de 23 años, Naruto tenía entre 15 o 16 años aproximadamente, a esa edad debería vivir con un papá que fuera la protección y sustento de su familia, una mamá que estaría en casa haciendo de comer y que probablemente mandaría a Naruto a traer el agua de un pozo o un río, sin embargo, el joven no experimento el seno familiar, sin aprender las costumbres tan mezquinas que acostumbraban los humanos; como lo era la envidia, el odio, la crueldad, el amor, y demás., era un papel de marfil en blanco listo para que escribieran sobre él.
El elfo entonces entendió que aún no era demasiado tarde para el propio Naruto, que quizás podría ser la excepción de su raza, Había muy pocos humanos, de verdad muy pocos que tenían una buena voluntad para con la humanidad y el resto de especies que existían en este mundo, pero los que existieron vivieron hace ya muchos años, otros eran ya muy viejos y esperaban con paciencia la muerte tranquila y pacifica que se merecían. De esos cuantos que Vivian eran resguardados por una especie mágica en concreto que les respetaba, velaban por su ser y mantenían sus ideales vivos.
Lamentablemente, Sasuke no conoció un humano así, hasta ahora.
_ No tienes de que preocuparte, me encargare de que no te vuelvan hacer daño, lo prometo._ Esa noche, con poco tiempo de convivencia, Sasuke eligió a Naruto como su protegido, hasta que éste escogiera que hacer de su vida y cuando fuera plenamente feliz lo dejaría.
Naruto sufrió el encantador sentimiento de bonanza al saberse importante para el elfo que desde que conoció tuvo tratos tan cordiales con él.
Fin del Cuarto Capítulo.