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Hijos de los Dioses por Whitekaat

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ORIGEN

#7

 

— Creemos que la reaparición de su genética ancestral aparece mediante la conexión y el cambio de material genético — El doctor se dirigía a aquellos sujetos en las pantallas que lo observaban con detenimiento y atención — Sabemos que los originales poseían una extraña carga genética que preservaba la mantención de su especie produciendo cambios a nivel físicos y fisiológicos, por lo que el cambio de material genético que en este caso sería la saliva de un espécimen diferente a su especie desencadenaría los cambios del espécimen 001 — el hombre de cabellos canoso y barba abundante había dejado de hablar esperando los comentarios que tuviesen que hacer aquellas personas.

— Doctor, estoy intrigado… ¿Está seguro de que aquel chico es el espécimen 001 el que desapareció hace 15 años del área C-13? — una de las voces habían terminado con el silencio trayendo una pregunta que muchos se habían planteado.

— No hay duda de aquello, señor, el ADN es el mismo, sus descripciones físicas concuerdan al bebé que fue hurtado por la encargada del proyecto “Gea”, el único bebé clonado con éxito desde los restos de la titanide del mismo nombre— Respondió el doctor trayendo una sonidos de asombro por parte de las personas tras las pantallas.

— El alcance de los poderes que posee no están del todo claros, su sangre al no encontrarse durante del momento de apareamiento se vuelve roja, como la sangre común, y todo rasgo de original se pierde. —Concluyó el doctor, para después aclarar un par de preguntas más y dar por finalizada la reunión.

— Saori, te llevaste al chico de mi lado, pero su destino sigue su curso como siempre estuvo escrito. — Kido miraba la fotografía de una chica de cabellos lila y mirada bondadosa posando junto a las ruinas de un templo de características similares a las griegas.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

SUCIO

#8

 

Si, sucio era la palabra correcta, así es como se sentía, sucio, utilizado e incluso violentado, no se negaba a hacerlo, no porque estuviese de acuerdo sinó que debido a que desde hace varios meses que su voz no tenía relevancia, él no quería ese beso, no quería esa lengua adentrarse en su boca ni las manos de esos caballeros tocarlo por alguna parte de su piel, Seiya quien piloteaba al santo de Sagitario era el tercero en hacer el intento cuando los otros habían fallado, sus labios se topaban, sus lenguas se encontraban y la mente del hombre de cabellos marrones buscaba desesperadamente unirse a la suya sólo logrando un nulo resultado.

La brusquedad de su beso no se asemejaba al de Aioria, sus manos apretando sus muñecas con fuerza frente a la frustración, tampoco era lo mismo, Saga en su interior sentía cada célula de su ser asqueada por aquel contacto, al igual como lo había sentido con los caballeros de nombre Shaka y Dhoko.

— Seiya suficiente, no lo lograste, es el turno de Afrodita — ordenó el doctor cortando rápidamente el beso entre ambos.

Saga al igual que con los otros limpió su boca con su antebrazo, buscando quitar cualquier residuo que quedara en su boca del otro hombre, obteniendo una mirada molesta por parte del caballero cuando lo observó, sólo logró escuchar un chasquido de lengua al terminar y ver como el sujeto alto, de cabellera larga de color celeste y ojos color ámbar comenzaba a conectar los aparatos al igual que todos.

— Estoy igual de ansioso de hacer esto como tú, sólo hagámoslo rápido y terminemos con tu tortura— La voz del chico le pareció amigable, más que cualquiera de los caballeros anteriores y aceptando la pequeña tregua se acercó al caballero de piscis y se dejó ser besado al momento del sonido de inicio.

Tanto Saga como Afrodita sabían el resultado antes de que ocurriera, nada, absolutamente nada.

— Las pruebas concluyen hasta que el capitán Archigós regrese de su misión, eso es todo — el azul del agua comenzaba a bajar, las ordenes fueron dadas con molestia, mientras él se regocijaba que aquella horrible experiencia se daba por terminada al menos hasta que el castaño volviera una vez más.

No entendía la diferencia que tenía el caballero de Leo con los demás caballeros, pero saber que no podría ser utilizado como se le diera la gana a la corporación Olympus lo hacía algo feliz.

 

 

 


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