Luego de algunos minutos, Tony llevo a Bucky a uno de los laboratorios de física de la facultad que estaba desocupados, cerro la puerta y recargo su frente contra la misma dando un gran suspiro.
-No puedo creer todo el espectáculo que hiciste haya fuera-
-Oye, no habría echo nada de eso, si te hubieras quedado hablar conmigo en primer lugar-
-Quien viene sin avisar en primer lugar hasta acá-
-Quería darte una sorpresa-
-Pues vaya que si me la diste-se separa de la puerta quedando frente a él- jamás pensé que volvería a verte y menos porque…
-Nos volvimos compañeros predestinados-
-No lo digas así por favor-puso su mano en la frente un poco acongojado.
-Eso es lo que somos-
-Oye para ti parece normal, pero si un adulto ve que tengo a un alfa de 12 años como compañero predestinado me llevarían a la cárcel-dio un gran suspiro- realmente creí que no volvería a verte, luego de ese incidente preferí tomar distancia y…
-Se lo que intentabas hacer-dijo un poco serio- no soy idiota y en algún momento también pensé lo mismo-baja un poco la mirada- es decir, tenemos un diferencia de 10 años tu y yo, eres uno de los profesores de física mas importantes del MIT mientras que yo, apenas estoy cursando la secundaria -suspira un poco frustrado- comparado contigo yo no soy nadie, por eso quise irme a estudiar con Nat a California, pensé que si conocía a otras omegas y que luego sentaría cabeza con los años, pero no pude, todas las omegas que se me acercaban me daban asco, no pude ni siquiera mantener una relación por una semana, porque siempre pensaba en ti cada vez que estaba con ellas. No pude dejarte irte.
Oírlo hablar de esta forma y solo pensar que yo también trate de superar a Bucky sin ningún éxito, solo tapábamos el sol con un dedo.
-Hace un año caí en depresión, porque las intensas ganas de verte me estaban matando y cuando Nat me vio en ese estado, ella misma me convenció que tenía que venir a verte, me dijo “Tienes que verlo al menos una vez más, si luego de verlo ya no sientes nada, podrás continuar con tu vida y si realmente hay una conexión entre ambos ¿Por qué luchar contra ella?”
-Tu hermana esta muy loca, ambos somos de mundos muy distintos, yo soy un adulto y tu apenas entras a la pubertad-
-Eso mismo le dije yo, sin embargo, ella contesto “¿Eso tiene de importancia para ser feliz? Si ambos se complementan y ambos se sienten felices estando cerca uno del otro ¿Por qué luchar contra eso? No siempre uno, ¿busca la felicidad?”-dio un gran suspiro- y por eso vine hasta acá, necesito verificar estos sentimientos que tengo hacia ti, si solo son la calentura de un alfa en desarrollo -desvía un poco la mirada- o en verdad hay un sentimiento más profundo que eso.
-Tienes muchos dilemas para alguien de tu edad-
-De todas maneras, por eso vine aquí-
- ¿Y bien? ¿Qué sientes ahora? –
-Cuando volví a verte luego de tantos años, sentí…-se jalaba la ropa de pecho- que el corazón se me salía del cuerpo, quería correr directo a ti y volver a sentirme querido por ti, sentí aquel calor, que no había sentido en mucho tiempo. Realmente estaba muy feliz de verte, no quise hacer nada de eso, porque seria algo muy vergonzoso para alguien de mi edad-
- Por eso entraste de esa forma a la cafetería y me dijiste “finalmente te encontré” con tu cara de pocos amigos-
-Estaba nervioso-
-Eres todo un caso niño, primero volver de California de esa forma y pegarle a Steve con una patada voladora-
-Eso fue porque te toco de esa forma tan morbosa-dijo molesto.
-Me toco la frente, ¿qué morbo hay en eso? -
-Para tu edad, no te das cuenta de las intenciones de otros alfas-
-Los alfas cuando son territoriales despiden hormonas, Steve no estaba liberando nada-
-Eso es porque lo hizo de manera desapercibida, lo sé porque he él me lo enseño-
- ¿Qué Steve te enseño qué? –
-Steve siempre pone los sentimientos de todos antes que los suyos, por eso aprendió a desprender feromonas cuando quiere proteger a su pareja y cuando te toco-se avergüenza desviando la mirada- el despidió ese aroma.
-Vaya que es sutil, no pude percibir nada-
-Por eso lo golpee, aprecio mucho a Steve porque es como mi hermano mayor, pero-regresa la mirada a Tony- no soporto la idea, que Steve te tenga a ti.
-Él no me tiene a mi-desvía un poco la mirada- ni siquiera me ha marcado, es más ni siquiera tenemos una relación seria.
-Pero Steve quiere tenerla contigo, eso también fue un factor de porque me fui de su casa, siempre me fastidiaba de como hablaba de ti, nunca me a gustado que lo hiciera-
Tony regresa la mirada a Bucky por la sorpresa de escucharlo, dio un gran suspiro y rascándose la cabeza un tanto avergonzado.
-Yo, en algún momento quería ser el compañero de Steve-hace molestar un poco a Bucky- era el alfa que siempre quise tener a mi lado, uno que… -desvía un poco la mirada- me hiciera sentir amado, sin embargo…-sorprende a Bucky- no pude hacerlo mi alfa, porque a pesar de que mis sentimientos si eran correspondidos, yo ya tenia un compañero destinado para mi -regresa la mirada a Bucky- y eras tú, todo el tiempo fuiste tú.
Ver la cara de sorpresa y de emoción de Bucky, hace latir a mi corazón muy rápido, es extraño, yo quería alejarme de él porque sabía muy adentro de mi ser; que esto estaba mal, aunque luego que lo decidí, viví los últimos años acongojado por no saber nada de él, buscando por todos lados, ese sentimiento de amor, que solo Bucky podía hacerme sentir. Es increíble que en solo unos instantes, mi sentimiento de agobio desaparezca, solo con ver tu rostro, ese rostro del cual, por error me enamore.
-¿Tú también te sentiste igual? -pregunto nervioso Bucky.
-Si y por mucho tiempo-
- Entonces ¿Puedo ser tu compañero? –
Desde el momento que conocí a Bucky, he esperado que él me diga estas palabras, es lo que mas deseo en la vida, pero…
-No…-conteste serio.
- ¿Ehh? –
Por mas que quiera pasar el resto de mi vida con este lobo alfa, no deja de ser un niño 10 años menor que yo y que legalmente no puedo hacer pareja.
-Ya me oíste-dije un poco molesto.
-Pe..pe… tu-empezó a balcear- acabas de decir que…
-Por mucho que te extrañara, no significa que haya olvidado que eres un niño de 12 años y yo soy un adulto de 22 años, eso créeme que son 20 años en la cárcel si alguien se entera-
-Entonces ¿Qué se supone que haga? –
-Buscar a alguien de tu edad-
- ¡Estoy hablando enserio! -grito perdiendo los estribos.
-Yo también niño-
- ¡Deja de decirme ni…
-Eso es lo que eres-dijo serio callando a Bucky- un niño enamorado de un imposible. Seamos compañeros predestinados o no, tenemos una distancia demasiado grande tu y yo, por más enamorado que estés tú de mí y yo de ti, de eso no se puede vivir, tu apenas estas en desarrollo y yo ya tengo una historia larga. Créeme, la edad, las experiencias, el genero o incluso la especie, todo podría ir en nuestra contra; por eso, lo mejor es que, no sigamos al destino.
Honestamente, yo esperaba que me hiciera un berrinche y dijera que no es cierto, que podíamos seguir nuestro destino; sin embargo, no lo hizo. Se quedo pasmado frente a mí, con un rostro bastante atónito, podía ver sus ojos temblar y que pareciera que lloraría en cualquier momento.
-Lo siento…-
Fue lo ultimo que dije, antes de pasar de largo a Bucky y salir del laboratorio dejándolo solo, me alejé lo suficiente para entrar a otro salón del lugar, puse mi espalda contra la puerta empezando a respirar de forma un poco agitada, la temperatura de mi cuerpo empezó a elevarse hasta notarse en mis mejillas y puse mi mano en el rostro intentando controlarme.
- ¿Por qué le dije eso? –
Mi cuerpo empezó a pesarme, empezando a deslizar mi espalda por la puerta quedando sentado en el piso contra la pared, baje mi mano de la cara y las lagrimas empezaron a salirme sin control.
-Era lo mejor-hablaba sollozando- el merece algo mejor, que estar aferrado a un omega viejo como yo.
De nuevo en el laboratorio, Bucky aun seguía mirando a la nada tratando de digerir todo lo que Tony le dijo, el ruido de la puerta abrirse lo hace reaccionar.
- ¿Bucky? –
Bucky volteo a la puerta encontrándose con Nat, que parecía muy preocupada al verlo, se le acerco de inmediato tomando sus manos.
- ¿Qué paso? –pregunto acongojada.
- ¿Por qué Nat? -pregunto Bucky con la voz un poco agitada- ¿Por qué me miente?
- ¿Qué te dijo? -tomo con mas firmezas las manos de Bucky.
-Dijo que no quería seguir el destino, que no podía funcionar, que todo impediría que pudiéramos estar juntos-
-Hermano…-
-Me lo dijo tan seguro, pero su olor lo delataba, estaba triste-
-Entonces en verdad mintió Bucky-
- ¡¿Por qué Nat?! ¡¿Por qué miente?! -alzo la voz casi llorando.
-Quizás está asustado-
- ¡¿De qué?! -
-De ti- sorprende a Bucky- tal vez, está asustado del futuro.
-Nat sabes que yo puedo proteger…-
-Eso a veces no basta Bucky-un poco frustrada- es lo malo de ser a veces unos niños.
- ¡Tú sabes que no soy como los otros niños! ¡Lo sabes! ¡Yo si quisiera protegerlo hasta de Steve! –
-Yo lo sé, pero a los ojos de la sociedad y a los de Tony, tu no dejas de ser un niño, ponte a pensar, que, si tu empezaras a salir con Tony, no dejaran de acusarlo de pedrastra y más por ser omega, sabes que la reputación de algunos omegas es pésima en el mundo, a pesar de los cambios que se a echo al respecto-
-Eso me importa un carajo-dijo molesto desviando la mirada.
-Bucky, lenguaje-hace que le regrese la mirada- aun así, su relación podría incluso poner el riesgo el trabajo de Tony ¿en verdad tu quieres que pierda eso?
Sorprendido, suelta las manos de Nat bajando la mirada y mirando por todas direcciones.
-No quiero que pierda nada, yo quiero que sea feliz-
-Si quieres que eso pase, tienes que hacerlo de la manera correcta-
- ¿Cómo haría eso? –
-Eso tienes que averiguarlo tu-
Bucky miro al techo y luego dio un gran suspiro, pasando de largo a Nat dirigiéndose a la puerta, ella solo mira su espalda.
- ¿A dónde vas? -pregunto Nat.
-Tengo que pensar algunas cosas-
- ¿Iras a ese lugar? -
-Tal vez…-abre la puerta- solo quiero despejar mi mente…-sale del laboratorio, Nat se queda sola dando un gran suspiro.
-Tengo que ayudar a mi hermano de algún modo-
Mirando a su alrededor, en encuentra con una foto generacional donde se encontraba Tony y Bruce con los demás estudiantes de su generación.
-Ese gatito, tiene que conocer la otra faceta de Bucky, no solo la del cachorro-
Pasado algunos minutos, Tony aun seguía en otro salón controlando un poco el celo que ligeramente le libero Bucky al encontrárselo.
-Ya casi…-dice un poco aliviado.
Aunque tome un supresor, estar cerca de Bucky realmente me descontrolo un poco, en verdad no me sentía así en mucho tiempo, solo esperare unos minutos mas y me podre ir.
- ¿Estas bien Tony? –
Escuché la voz de Bruce, al alzar un poco la mirada vi que él estaba al otro lado de la ventana del salón recargado.
-Solo…-respondí un poco mareado- necesito algunos segundos más.
-Realmente me sorprende el autocontrol que tienes, usualmente con o sin anti supresores, cualquier omega se hubiera vuelto loco por su alfa predestinado.
-Si tal vez-se levanta- pero debo recordar que aquí el adulto soy yo y que Bucky es el niño -un poco serio- nunca me perdonaría si fuera yo el que le saltara encima.
-Usualmente son los alfas los que dicen eso-
-Si, solo cuando hablamos de alfas mayores-
-Vaya fastidio que es la edad-
-No tienes idea-
-Veo que ya te encuentras mejor-
Tanto Bruce como yo, nos sorprendidos al escuchar la voz de la hermanita de Bucky, mas fue nuestra sorpresa al verla acercarse a nosotros.
-Nat-dije confundido.
-Amm-dijo nervioso Bruce- tu amm ¿Qué…
-Ten…-Nat le da unos supresores a Bruce- los vas a necesitar ahora, créeme.
-Ehh-toma los supresores nervioso- gracias
-Aunque realmente me gustaría hablar contigo-dijo avergonzada- no es ti a quien estoy buscando ahora -mira a Tony- sino a ti.
-No puede ser…-dijo Tony un poco molesto- me vengas ahora con que tú también tienes algún interés conmigo.
-No, no se trata de mí, se trata de mi hermano-
-Ya le dejé muy en claro a Bucky que esta relación no va a funcionar, él es…-
-Ya me sé el cuento-dijo molesta- no me lo tienes que decir tú también pulgoso.
- ¿Acaba de llamarme pulgoso esta niña? -
-El punto es, que lastimaste a mi hermano y las cosas no pueden quedar así-
- ¿Y que pretendes hacer? –
-Si fuera por mí, te golpearía hasta dejarte noqueado y te llevaría arrastrándote hacia mi hermano pidiéndole perdón-
Una niña de 12 años me está prácticamente amenazando, en verdad no puedo creer que sea el alfa predestino de Bruce, son tan incompatibles.
-Aunque realmente no puedo hacer eso, porque Bucky se enojaría conmigo, así que optare por una opción más factible y pacífica-extiende su mano- quiero que me acompañes a un lugar
- ¿Un lugar? –
-Es un lugar que siempre frecuenta Bucky y quiero que lo veas-
-Oye niña…-
-Escucha-interrumpe a Tony- se que crees que la edad es un gran impedimento para ustedes para estar juntos -mira a Bruce sonrojándolo y regresando la mirada a Tony- ahora lo llego a entender un poco, pero quiero enseñarte que Bucky, no es la clase de alfa en crecimiento torpe que se ve, es mucho más que eso. Solo quiero que me acompañes y si luego de ver a Bucky, consideras que aun es un alfa inmaduro, te prometo que nos iremos a California en el primer vuelo de mañana ¿Qué te parece?
Para ser una niña de 12 años, me habla con una madurez increíble, sé que no debería aceptar esto -le da la mano a Nat- quizá esto termine definitivamente con todo, hasta con nuestro destino.
-Bien, lo hare-dije serio- en verdad espero que cumplas tu promesa si fallas.
-Nunca falto a lo que digo-sonrió y miro a Bruce- oye, podemos ir a comer shawarma después de que termine con este gato.
-Claro, tenias que ser su hermana ¿no? -dije molesto.
-Amm -balbuceaba Bruce- claro, no tengo nada pendiente después.
-Genial, te espero a las 9 en local cerca de aquí-
-Ahí estaré-sonríe nervioso.
-Acabas de aceptar una cita con una niña de 12 años-dije con ironía.
-Y tú también amigo mío-dijo sonriendo y despidiéndose con la mano- nos vemos luego Tony.
-Maldito perro chihuahua-
-Vámonos-dijo Nat jalándome.
La chica me jalo hasta mi auto y me dijo que condujera, que maldita niña tan mas descarada, primero me dice que debo seguirla y ahora yo tengo que llevarla. En fin, arranque mi auto y la niña me empezó a guiar por toda la ciudad ya estaba anocheciendo, llevándome a un barrio bastante peligroso, todos se me quedaron viendo en cuanto me estacione.
-Si alguien daña a mi bebe-dije molesto mirando a Nat- yo a ti te mato.
-Tranquilízate gato-dijo mirando a su alrededor- aquí nadie va hacerte daño, a menos que no estés en celo.
- ¿Qué? –
-Bájate-se bajó del auto dejándome solo.
-Estoy recibiendo de ordenes de una mocosa de 12 años-suspire- me caía mejor cuando estaba enferma.
Baje del auto y la chica ya me estaba esperando afuera de mi entrada, todos los tipos alrededor se nos quedaron viendo, era tipos bastante intimidantes y todos eran alfas. Gracias al cielo que me tome mis supresores.
- ¡Oigan! -grito Nat- ¡El que le haga algo al auto o a mi gato! ¡Le parto el asico!
¿Qué demonios fue eso? Acaba de amenazar a varios alfas una mocosa de 12 años, lo que mas me sorprende es que los demás tipos se voltearon empezándonos a ignorar.
- ¿Qué fue eso niña? -pregunte confundido.
-Un seguro-dijo sin mucho entusiasmo- no quiero que alfas repugnantes miren de ese modo a mi cuñado.
- ¿Tu qué? –
-Olvidalo-movio la mano con desdén- vamos a dentro
Nat se empezó adelantar, la empecé a seguir y vi a mi alrededor dándome cuenta que esto era un barrio de peleas clandestinas.
- Oye… -susurre a Nat- ¿Por qué estamos en este barrio?
-Ya lo veras-dijo
Nat sonrió ambos llegamos a la entrada de un edificio y un guardia alfa de raza toro no nos dejó pasar.
- ¿Qué se les ofrece? -pregunto el guardia.
-Queremos ver al lobo blanco-dijo Nat con cinismo.
- ¿Quién lo busca?
-La viuda negra-
El guardia se sorprendí y de inmediato nos dio el paso abriéndonos la puerta, haciendo una pequeña reverencia a Nat.
-Lamento la insolencia señorita-dijo el guardia.
-De acuerdo, pero que no se vuelva a repetir-Nat paso y yo todavía no entendió bien eso.
- Si te das cuenta que una niña de 12 años acaba de entrar aun club de peleas clandestinas ¿no? –dije con ironía.
-Aquí no se discrimina a nadie-dijo serio el tipo.
-Okey-respondí muy confundido y entro atrás de Nat.
Solo me limite a entrar con Nat, bajando las escaleras del lugar estaba realmente oscuro el lugar y al llegar al suelo había un poco de iluminación, varias luces se empezaron a prender a golpe, empezamos acercarnos a un lugar con mucha multitud, en cuanto vieron a Nat se hicieron a un lado dejándonos pasar hasta al frente del lugar.
-Oye niña pareces mas una abeja reina que un lobo-dije observando como todos los alfas se hacían aun lado- ¿Qué pretendes con…
No pude terminar de hablar al ver el lugar donde me había traído esta lobo, era un estadio de peleas clandestinas, estábamos hasta arriba del lugar, mirando el hexágono de lucha enjaulada, había una pelea entre dos alfas de diferentes raza, una felina de tigre y la otro de osezno gris, peleando de una forma bastante salvaje, podía ver la sangre salpicar a los espectadores abajo del hexágono, gritando de emoción.
- ¡¿Por qué demonios me trajiste a este lugar?! -pregunte casi alterado.
-Quería que vieras algo-respondió sin mucho interés.
- ¡¿Ver cómo un montón de alfas estúpidos se arrancan las orejas de animal!?-
-Quieres ya calmarte-dijo molesta mirándolo- ¡cielos! Para tu edad pareces una princesa ¿Y voy a tener que lidiar contigo como mi cuñado?
-No vamos hacer cuñado y quiero que me expliques ahora ¿que estamos haciendo en este lugar? –
-Vinimos a este lugar, porque quiero que veas que mi hermano no solo es un cachorro de lobo, el realmente es el alfa de la manada-cruza los brazos seria- el es el lobo blanco.
-Tienes que ser más específica con eso-
-Solo ve el espectáculo y si crees que aun Bucky es un alfa inmaduro, te prometo que te dejaremos en paz, por ahora es mejor que veas esto-mira un poco a su alrededor- no creo que sea buena idea que te vayas, cuando ya atrajiste a varios alfas por aquí.
- ¿mmm? -mire a mi alrededor y vi que varios alfas no dejan de verme, algunos con deseos bastante obvios, suspire cruzando los brazos- que vulgares son algunos
-Olvídalos, ya va empezar-
- ¡Bienvenidos damas y caballeros! -hablo el anunciador en medio del hexágono- ¡El momento que todos hemos esperado! ¡La principal atracción de la noche y la pelea mas aclamada por el público! ¡La pelea entre el lobo blanco contra calavera!
La multitud no dejaba de aplaudir, gritar y levantar las manos por las palabras del anunciador, mientras que yo quería que todo este show terminara de una vez.
- ¡En esta esquina! -extendió su mano a la derecha el anunciador- siendo de la raza canina del gran danés, con más huesos rotos en toda la historia de Nidaveller, ¡calavera!
La multitud grito con más fervor al ver llegar al sujeto calavera acercarse al hexágono, con un semblante bastante extrovertido, no dejaba de mover las manos pidiendo más ánimos.
- ¡Y en esta otra esquina! -extendió su mano ahora a la izquierda- siendo de la misma raza canina del tipo lobezno negro, el mas joven de nuestra Nidaveller y con más victorias ganadas hasta el momento en California ¡El lobo blanco!
La multitud se animo mas que con el otro sujeto, todos levantaban las manos con mucho ánimo y al mirar al otro extremo me encontré con la peor sorpresa que me pude haber topado, un mocoso de 12 años vestido con short de boxeo con unos guantes de pelea ¡Y era James! ¡Bucky estaba en un encuentro de lucha clandestina!
- ¡¿Qué mierda es esto?! –grite histérico.
- Es mi hermano tonto, ¿Qué no ves? –respondió Nat
- ¡Me refiero que hace ahí! –
-Mi hermano es el campeón de peleas clandestina de California-
- ¡¿Qué?! ¡¿Ese mocoso es el campeón de este lugar?! ¡¿Y Steve sabe esto?! –
-Por supuesto que no, lo encerraría en una jaula si se enterara-
- ¿Por qué me trajiste a ver esto? -dije agobiado poniendo mis manos en la cara.
- Porque es lo que Bucky a estado haciendo para volverse un alfa a tu altura-
- ¿Qué quieres decir? –
-Luego de que Bucky se resignara a no salir con más omegas y venir aquí para encararte, se dispuso a entrenar, dijo quería ser un alfa tan fuerte que pudiera protegerte de cualquier cosa, protegerte de cualquiera que quiera lastimarte y de esa forma poder ganarle a su diferencia de edad.
CONTINUARA...