Pasaron los días, las semanas y unos tres meses desde esa noche... Ambos no dejaban de pensar en el otro pero Taemin entristeció al no ver al mayor ir a su casa, por lo que un día le envió un mensaje para saber cómo estaba pero éste no le contestó haciéndolo sentir mal. Habló con el psicólogo por todo lo que pasó y también por sus sentimientos hacia Jonghyun; le pidió que no se lo contara, aunque no le dijo que estaba enamorado de su amigo sino que era de alguien mayor por unos cinco años, por lo que el profesional le dijo que no tema ya que él no solía contar los problemas de sus pacientes con lo cual el menor se sintió aliviado.
Un día recibió la llamada de Jonghyun por lo que contestó un tanto fastidiado, pero al escuchar que el otro se disculpaba por no responderle los mensajes, ya que había estado de viaje por negocios, el enojo se le pasó y le dijo que lo había extrañado pero quedó sorprendido cuando el mayor le dijo que él también lo extrañó mucho haciendo que se sonrojara. A los pocos días Taemin fue a una cafetería cerca a su casa pero quedó estático al ver al hombre que lo violó, dado que con el tiempo recordó su rostro, así que tomó su celular cuando el tipo tomó asiento en una mesa un poco alejada a la suya, tratando que el otro no lo vea.
Jonghyun estaba en el departamento que compartía con Kibum a punto de tener sexo, pero en eso sonó su celular por lo que su novio le dijo que no contestara aunque al escuchar que seguían insistiendo se alejó para ver quién era. Cuando leyó el nombre de Taemin en la pantalla, salió de la habitación y se preocupó cuando lo escuchó decir en voz baja “Él está aquí, por favor ven”, con lo cual se dio cuenta de quién se trataba por lo que se acomodó las prendas lo más rápido que pudo para salir corriendo de la casa enviándole un mensaje al pelirrojo, preguntándole dónde estaba sin importarle que su novio se quedara gritando en el departamento.
Al llegar a la cafetería buscó al menor y se acercó cuando lo vio; le pidió que saliera con él, por lo cual Taemin no entendía que pensaba hacer el mayor.
- ¿Cuál era de los que estaban ahí? - dijo al terminar de cruzar la calle.
- Es uno con cabello negro, tiene una camiseta azul, jeans rasgados y es alto. Hyung, tengo mucho miedo - los ojos se le llenaron de lágrimas.
- Shhh tranquilo - susurró tomando su rostro entre sus manos - Al parecer no te ha visto, eso es bueno... vamos a esperarlo aquí. Solo sígueme la corriente - el menor asintió - Creo que alguien sale, no te muevas.
Taemin estaba dando la espalda a la cafetería por lo que si era su agresor el que estaba saliendo no lo reconocería, pero no esperó que Jonghyun lo tomara de la cintura acercándolo un poco haciéndolo sonrojar, además de esconder su rostro en su cuello para mirar al frente y por último le pidió que posara las manos en sus hombros. Le gustó estar así con él, tan cerca y aunque sea tocar un poco de su cuerpo pero lo que jamás olvidaría era su aroma.
- Es él - susurró sobre su cuello - el tipo que me describiste está saliendo de la cafetería.
- ¿Seguro? Voy a ver - trató de separarse pero el mayor no lo dejó.
- No es necesario que lo veas, quedémonos así mientras grabo su rostro.
Jonghyun se sorprendió al ver bien la cara de ese hombre ya que lo conocía, así que le mostraría una foto para estar cien por ciento seguro, pero después de que ese tipo se fuera no lo soltó dado que se sintió muy cómodo teniéndolo entre sus brazos y respirando su dulce aroma, el cuál le recordó al de un bebé, por lo que quedaron abrazados por unos minutos sin importarles que alguien conocido los vea. Al separarse se miraron los ojos y comenzaron acercarse poco a poco hasta el sentir la respiración del otro chocar en sus rostros, pero ese momento se rompió cuando sonó el celular del mayor por lo que Taemin retrocedió mirando hacia otro lado; cuando colgó lo llevó a su departamento para conversar sobre lo que pasó, aunque en su cabeza maldijo a quien cortó ese momento especial para ambos.
- Taemin, ¿este es el hombre de la cafetería? - le mostró la foto en su celular.
- Si... él es - dijo sorprendido - ¿Lo conoces hyung?
- Sé quién es... ese maldito me las va a pagar y muy caro. Lo voy a refundir en la cárcel para que no salga nunca - dijo apretando los dientes - Taemin, ese imbécil tiene que pagar con creces lo que te hizo, debí llevarte a la comisaría para dar su nombre pero quería estar seguro al mostrarte la foto.
- Antes de ir, primero dime ¿por qué lo odias tanto? - el mayor desvió la mirada - Si no me quieres contar lo entiendo... son cosas tuyas, no me voy a meter.
Taemin se levantó pidiéndole que lo lleve a la policía para dar el nombre de esa persona que le hizo mucho daño aunque quería saber por qué el mayor lo odiaba tanto; al llegar a la comisaría le preguntaron por el nombre del sujeto, por lo que Jonghyun les dijo que se llamaba Choi Minho, de unos 29 años, y que estaba metido en cosas ilegales, así que le pidieron más información, que les diga todo lo que sabía, pero el mayor dijo que no podía porque no tenía pruebas aunque trataría de conseguirlas.
Regresaron al departamento por lo cual al menor se le hizo extraño dado que pensó lo llevaría a su casa o a la cafetería; al entrar Taemin estuvo a punto de preguntarle qué rayos hacía ahí, pero el moreno se metió al baño para luego de unos minutos salir con solo una toalla amarrada a la cintura dejando a un pelirrojo con la boca abierta y colorado como un tomate. Jonghyun levantó la mirada y al ver la expresión del menor se golpeó mentalmente ya que olvidó que no estaba solo, así que le pidió disculpas metiéndose a su habitación aunque no le disgustó que lo vea de esa manera, nada de ese niño le disgustaba más bien todo lo contrario. Después de ponerse algo más cómodo, salió para conversar un poco con el menor sobre todo por lo que vendría de ahora en adelante para luego llevarlo a casa y decirle que siguiera llamándolo por si ve algo sospechoso o si vuelve a ver a su agresor.