Unos cuantos días después de la visita de los hermanos Nox y luego de que el escudo informara sobre todo lo que se habló, se levantó una orden de vigilancia por todo el recinto de Crown City y también sus inmediaciones, indicando en este que Ignis tenía completamente prohibido dejar Crown City, lo cual, obviamente no hacía feliz al chico.
Ese día por la mañana, Ignis se encontraba en el jardín mirando a Pryma jugar con unas hojas de un árbol cercano mientras que Noctis se encontraba escondido tras unos arbustos junto a Prompto;
-Noctis Lucis Caelum, se hombre y habla con él de una maldita vez, lo has estado evadiendo- exclamo el rubio con irritación mientras el otro lo miraba con un puchero
-no lo he estado evitando, es solo… - comenzó a decir el príncipe
-Noct, si no hablas con Ignis en este instante no volveré a hablarte nunca mas
- ¿me estas amenazando Prompto?
-si y voy enserio- exclamo el rubio cruzándose de brazos. El peligris suspiro con pesadez y saliendo de los arbustos, se encamino hacia el castaño quien ahora acariciaba la cabeza de la perrita, la cual estaba apoyada sobre su rodilla.
Noctis llego hasta Ignis y carraspeo su garganta para llamar la atención del otro;
- ¿puedo sentarme? - pregunto cuando Ignis volteo a verle
-claro su Alteza- respondió Ignis haciendo un gesto con su cabeza. El príncipe se sentó y suspiro de nuevo,
-Ignis, con respecto a lo que sucedió en Niflheim, yo…
-no tiene nada de que disculparse su Alteza, entiendo completamente
- ¿entiendes lo que dije?
-así es. Entiendo que para usted lo mas importante es su familia y también entiendo que si le molesta el hecho de que prácticamente me tengan en cautiverio aquí, puedo pedir me dejen ir a mi apartamento o una vez más, a la casa Amicitia
- ¿Qué estás diciendo? - pregunto el más joven volteando hacia el otro con enfado
-que usted dejo bastante claro que yo… no soy de su familia
- ¡¿Qué?!
En ese momento, Gladio iba pasando con un ramo de flores cuando vio al rubio escondido tras los arbustos;
- ¿Prompto? - pregunto cuando el otro volteo a mirarlo y le hizo señas para que se acercara
-me alegro verte, esto se esta poniendo feo- dijo y jalo al mayor entre los arbustos para que viera a los otros.
Mientras tanto, Noctis se había puesto de pie y miraba incrédulo al que aún seguía sentado;
- ¿Qué has dicho? - pregunto anonadado - ¿Por qué demonios dices eso?
-eso fue lo que usted mismo dijo en aquel momento, ¿o me equivoco?... solo soy un consejero que no vale lo suficiente para un intercambio ni tampoco para ser salvado
- ¡lo que me pedía era un cambio injusto! ¡no entendiste la difícil decisión en la que me encontraba!
- ¡¿no lo entiendo?! ¡tú no sabes lo que yo sufrí a causa del miedo que tenia por las amenazas constantes de dañarlos!
- ¡¿sufriste?! ¡¿dices que aguantaste todo eso por nosotros?! ¡vamos Ignis! ¡eres lo suficientemente listo como para saber que no podía lastimarnos y también para mantenerte a salvo! ¡pero por cobardía decidiste morir! ¡por tu falta de creer en nosotros decidiste cortar tus venas! ¡¿no?!
- ¿cobardía? - repitió el otro en voz baja y sin pensarlo, se lanzó sobre el peligris y lo tomo del cuello de la chaqueta con fuerza - ¡¿crees que quise morir por cobardía?! – termino gritando cuando los otros dos salieron de los arbustos en carrera.
Gladio inmediatamente intervino y tomando a Ignis por detrás, lo levanto y lo separo del otro mientras que el otro alcanzaba al príncipe;
- ¡Ignis! ¡¿Qué demonios te pasa?!- grito el escudo sosteniendo al menor con fuerza
- ¡suéltame Gladiolus! - grito el consejero furioso
- ¡NO! - exclamo de nuevo el ojiambar - ¡mi deber es proteger a esa patata que es el príncipe de Lucis!
- ¡suéltalo! - grito Noctis dirigiéndole una dura mirada al escudo. Gladio obedeció y de inmediato soltó al otro -Ahora… te ordeno como mi consejero, que me digas que tan terrible fue lo que viviste ahí- termino con algo de sarcasmo en su voz. Ignis lo miro con una mezcla de tristeza y enojo;
-yo ya no le debo fidelidad a usted, príncipe Noctis- dijo con seriedad
- ¿de qué hablas? - pregunto el rubio mirándolo preocupado
- ¿acaso no les dijiste? - hablo de nuevo el consejero mirando al príncipe, quien le quito la mirada
- ¿decir qué? -, Ignis miro a sus otros dos amigos y levantando su cabello, dejo ver una marca de mordida que se estaba borrando de su cuello, pero que estaba muy roja
-que yo ya no pertenezco a Lucis…
- ¡NO! - soltó Gladio y tomo al príncipe por los hombros con furia -¡¿Como permitiste que esto pasara?!
-ya estaba así cuando fuimos por él…
- ¡¿y porque no nos dijiste nada?!
-porque le avergüenzo- contesto el consejero tapando su cuello de nuevo - ¿no es así?
- ¡no es así! - grito el príncipe exasperado -Solo… solo no sé qué hacer
- ¿así como cuando me dejaste en Niflheim las últimas veces?
- ¿Qué?
- ¿de qué habla? - pregunto Prompto mirando con dureza al príncipe
-tampoco les has dicho. Ya veo, de verdad que tengo muy poco valor para ser “tu consejero”- exclamo Ignis haciendo unas comillas en el aire
- ¡no es eso! - grito Noctis de nuevo -Yo… no he encontrado el momento y… - el chico fue interrumpido por las fuertes carcajadas del castaño
-de verdad que aun eres un crio- soltó Ignis con burla - ¿No le dijiste a Prompto que obligaste a Gladio a dejarme? O ¿Qué no aceptaste el intercambio que Ardyn te ofreció porque solo soy un consejero?
- ¿Qué tu hiciste qué? - pregunto Prompto con enojo contenido
- ¡no! ¡yo!...
- ¡dile! - grito Ignis con los ojos nublados en lágrimas - ¡dile a Prompto que cuando cayo inconsciente por tu irresponsabilidad al invocar el Arminger, obligaste a Gladio a llevarlo dejándome atrás sabiendo que yo les iba protegiendo la espalda! ¡diles que cuando me hirieron por protegerlo y esa máquina cayó sobre mí, obligaste a Gladio a cargarlo hasta el auto mientras que yo me encontraba atrapado bajo tu desastre y cuando te pedí ayuda, tu solo dijiste “lo siento”! ¡y cuando él volvía por mi… le diste la orden de dejarme con la falsa promesa de “volveremos por él luego”! Mientras… mientras que yo lloraba llamando a Gladio y tomando su mano cuando el intentaba abrir el portón, porque no me podía mover y lo único que hacia era rogar desde el suelo cuando los soldados me apresaron… incluso… incluso fui atado como un animal durante un tiempo… yo solo era un trofeo, sin vida ni esperanza y mi único… mi único deseo era morir. - Ignis rompió en un llanto silencioso al igual que el rubio mientras que Noctis miraba al suelo y Gladio al castaño -Hace un tiempo, le pedí al médico que por favor me ayudara a quitar esta marca de mi cuello y con duros tratamientos me ha ido ayudando, ninguno de ustedes se dio cuenta de ello, hasta ahora… yo… yo quise morir… porque ya no podía más con esto…
- ¡basta! - dijo el príncipe, pero el otro continuo
-di-dile… dile que Ardyn lo quería a él a cambio de mí, pero… pero tu dijiste que no cambiarias a tu familia por un consejero
- ¡¿dijiste eso?!- grito Gladio con furia
-yo… sí. - contesto por fin el otro -Yo lo dije… ¡pero no era justo el cambio!
- ¡yo lo hubiera hecho con gusto! - exclamo el rubio colocándose junto a Ignis - ¡tú no tienes idea de lo horrible que fue y de lo que Ignis tuvo que hacer para que yo pudiera estar bien y huir!
- ¿Qué?
-Ignis… él dio su cuerpo a Ardyn y dejo que… dejo que… - Prompto miro al consejero que aun lloraba en silencio -Él dio su cuerpo a Ardyn y dejo que le hiciera muchas cosas para mantenerme a salvo, incluso peleo contra un chico omega y recibió un duro castigo por eso… ¿viste sus marcas? ¡fue lastimado por mi culpa! ¡por mantenerme a salvo recibió incontables cosas sabiendo que soy importante para ti!... Ignis… permitió que le hicieran muchas cosas, incluso se quedo en ese horrible lugar sin comer ni beber nada por dármelo a mí, quien no sabía que mi apetito voraz era por mi embarazo
-yo… - volvió a hablar el consejero -Decidí terminar con mi vida porque ya había perdido la esperanza con las palabras que dijiste ante Ardyn… aproveché que este se había marchado ha Altissia sin contar que ustedes llegarían, ya no contaba con nada en realidad.
Los cuatro chicos guardaron silencio por un largo tiempo, hasta que Ignis se aclaró la garganta y levanto la cabeza dirigiéndole una mirada a Noctis, quien volteo a ver hacia otro lado;
-yo… si tanto te molesta mi presencia aquí, me iré a mi apartamento de inmediato
- ¡eso no! - grito Prompto sujetándolo - ¡no permitiré eso!
-puedes venir conmigo si quieres Iggy- interrumpió Gladio dando un paso hacia el otro
-ya no quiero ser una molestia para nadie
-tu no puedes abandonar el Palacio y fue una orden directa- dijo Noctis en voz baja
-yo ya no quiero estar aquí siendo un estorbo, pero gracias- concluyo el castaño y comenzó a alejarse por el jardín seguido por Pryma mientras que Noctis solo chasqueo la lengua y dándose la vuelta muy molesto, se adentró de Palacio.
Los otros dos se miraron por un momento, hasta que Gladio suspiro;
-iré por Iggy- dijo
-y yo tras Noct- exclamo el rubio y se dirigieron hacia los contrarios.