En una isla oculta cerca de lo que podría ser Hawai, Roy Harper hablaba con su compañera forajida, ella mantenía las piernas cruzadas, imponente y bella como de costumbre, ambos estaban dentro de la primera base que se habían creado al estar juntos. Una acogedora casa de playa apartada del ruido pero aún así, a tan solo veinte minutos del centro de la ciudad.
—Lleva días así…—Explicó Harper ante el comportamiento apático de su compañero.
—Si él tiene algo que decir, lo dirá en su momento…—Star-Fire se enfoco un momento en la puerta que daba a la habitación de Jason, lo conocía, incluso podría decir que bien, pero de las pocas veces que se había entrometido en los pensamientos de su compañero muy pocas logró algo importante en su comportamiento.
—Tiene muchos problemas con Dick—Roy habló y como si hubiera dicho algo indebido miró rápidamente a la mujer. Star solo levanto una ceja.
—Siempre lo mencionas mucho y se ve que es un buen hombre, pero yo ahora no tengo una relación especifica con él—Agregó y se levanto. Roy, en sus primeros encuentros solía insistir en su relación pasada con Richard Grayson, pero ella no lo recordaba, tuvo un presentimiento cuando lo vio en una de sus tantas misiones, pero ella se fue y el no la siguió, lo que sea que tuvieron debía estar ya en un pasado lejano.
—Bueno…si es así…y si no te molesta …—Roy la siguió, algo dubitativo por la petición, pero ya se estaba cansando de la actitud pesimista de Jason, incluso se estaba poniendo más agresivo de lo habitual—…¿te importaría que trajera a Dick para acá?—Preguntó indagando en la actitud de la tamaraniana.
—¿Eso no molestaría más a Jason?—Preguntó ella con una duda real.
—No para nada, al contrario, creo que lo mejor sería que lo viera de frente—Insistió él.
—¿Por qué seria lo mejor que viera a alguien que lo esta evitando y que le causa tanto malestar?—Kory regreso— ¿No sería mejor no interferir?—
—¿No interferir en qué?—Jason salía de su habitación con casco bajo el brazo, con el uniforme de Red Hood ya listo.
—¡En nada!—Roy se apresuró a hablar antes de que Kory contestara—…nada importante quiero decir…—aclaró ante la mirada acusadora de Jason—…vas a salir?—Preguntó desviando el tema, Jason asintió sin agregar detalles.
—¿Deseas ayuda?—Preguntó Star tomando su bebida matutina.
—No, puedo solo, no es nada grave—Harper sonrió, ahora tenía la oportunidad perfecta para ejecutar su plan.
—¿Y llegaras pronto? ¿Antes de pasado mañana en la noche tal vez?—Jason frunció el seño. Se notaba que algo se traía entre manos el arquero.
—¿Por qué?—Trato de indagar en su insistencia.
—Oh…vamos viejo, en serio necesito decírtelo todo, yo también tengo secretos—Todd suspiro y apunto unas notas en su teléfono, seguramente el GPS o algo similar.
—Sí, es probable que este aquí para pasado mañana, aunque no se la hora…—Contestó resignándose, realmente no le importaba mucho lo que fueran a hacer en su ausencia, si planeaban tener otra sesión intima en su cuarto o salir a una misión por su cuenta no era su asunto y si necesitaban ayuda ya se la hubieran pedido—Kory…Roy…—se despidió Jason saliendo sin agregar nada más.
—¡Esta bien! Suerte en tu misión—Se despidió Roy, apresurándose a su computadora tan rápido como pudo, no sin antes lanzarle una mirada y unos gestos con la mano a Star, un clásico “no digas nada, te estoy observando”. La mujer giro los ojos y siguió con su mañana habitual. No se entrometería en lo que sea que estuviera planeando.
En BlüdHaven, Dick se veía indeciso, estaba en la estación de policía revisando sus pendientes de trabajo, cuando Roy había entablado una video-llamada. Su antiguo compañero le estaba pidiendo ayuda para una misión de un par de días.
—¿Seguro que no hay nadie más que te acompañe?—Dick levantaba una ceja y saludaba atento a sus compañeros de trabajo, vigilando que nadie se interesara lo suficiente en su charla—Es muy repentino Roy…—Se excuso Grayson, sea lo que fuese que Roy necesitara, no debía ser tan importante, pues no se veía especialmente preocupado.
—Sé lo que estas pensando y ya platique con un amigo tuyo, el se encargara de tu ciudad esos días, además, BlüdHaven no se caerá si te vas un par de días amigo…vamos…—Volvió a insistir, esta vez, Dick guardo un momento de silencio. Realmente no lo notaba en peligro, pero su insistencia y que se comunicara específicamente con él después de tanto tiempo debían significar algo.
—…Bien…pediré que me cubran aquí en el trabajo, mándame toda la información de la misión a mi “correo personal”—Aceptó Dick y pudo notar la victoria en el rostro tras la pantalla.
—Claro amigo, nos vemos mañana—Roy concluyó y se despidió colgando de inmediato. Dick suspiro y solo esperó que no fuera algo demasiado grave, ya que en el equipo de Arsenal también estaban Jason y Kory.
—Ojala no se hayan metido en problemas…—
—Lo que hiciste no estuvo bien—Kory paso atrás de Harper, ambos en la sala de su casa—No tenemos ninguna misión pendiente, el se molestara cuando se enteré que le mentiste—Advirtió ella, aunque también estaba curiosa por ver al muchacho, se veía sincero, amable y tenía que admitir que era muy guapo—…le dirás a Jason?—
—¿A ti te parece que eso es una buena idea?—Preguntó Roy entre burlón y sarcástico. Era obvio, al menos para él, que su cuello estaría en peligro si alguno de los dos involucrados se enteraba de sus acciones—Tu solo no diga nada y ten fe…—Pidió mientras encarga otras cosas en línea, preparando todo para la llegada de su viejo camarada.
Pronto las horas pasaron hasta convertirse en días, Jason conto el tiempo, necesitaba un poco de paz lejos de la insistencia de Roy por ayudarlo y las miradas silenciosas pero preocupadas de Star, y la vieja familia de las flores, una grupo de criminales y narcotraficantes, le ayudó a distanciarse un poco de ellos y sus problemas. Ahora, en el avión de regreso a casa, pensaba en lo mucho que preocupo a sus amigos por el rechazo que le dio Dick, no lo quiso admitir, pero Harper tenía razón, estaba obsesionado con Grayson, lo siguió por meses al punto de empezar a lucir como un acosador. Culpaba a Batman de eso, el no poder relacionarse bien con los miembros de su propia “familia”, y el tener que espiar, vigilar e intervenir para demostrar gratitud en vez de utilizar palabras como cualquiera…
Porqué, es lo único que quería, agradecerle por lo que había echo por él, no quedar en deuda por una ayuda del pasado, al menos de eso quería convencerse. Aunque algo en su último encuentro le había molestado bastante, esa sonrisa que tan fácilmente le había entregado a Damian, es decir, era un niño, su hermano pequeño y su…compañero.
—Tsk, maldito mocoso…—Se enfado consigo mismo, mirando a la ventana del avión. Sentía en sus entrañas crecer el enfado, se suponía que ya había terminado con esa etapa, esa en la que anhelaba ser el mejor robin, donde deseaba ser el compañero de alguien y sentir el orgullo de su mirada. Pero la imagen de Dick sonriéndole a ese niño le revolvía el estomago cada que la recordaba, ¿Por qué a él no lo puede tratar de esa forma?—no me importa…—Se susurro. De todos modos, pronto lo averiguaría, no le importaba si tenía que ir a buscarlo a su departamento y acampar hay hasta que se decidiera a hablarle. Necesitaba arreglar las cosas con él—Solo necesito un poco de tiempo…—Se animó antes de quedarse dormido y esperar que el vuelo llegara su destino.
En la playa, Roy estaba sorprendido por la puntualidad con la que el ex chico maravilla había llegado, pero algo no encajaba en sus planes, lo esperaba en la noche y sí, estaba allí, pero…
—¿Por qué traes el batiavión?—Nightwing bajaba de la nave luego de presionar unos comandos para que esta se camuflara y Roy se pregunto en ese momento si debió haber dicho la verdad ya que el combustible de esas cosas no era precisamente barato.
—¿Por qué no traes el uniforme?—Preguntó Dick con una voz un poco más profunda, la que usaba como Nightwing en un tono un más serio al que tenía de manera natural.
—Bueno…veras…esto va a ser un poco incomodo…—Se dijo Roy, realmente no pensó en todo como debía.
Termino explicando sus motivos, como quería que hiciera las pases con Jason y como este de verdad estaba empezando a alterar la armonía del equipo con su mal genio y sus balbuceos maldiciéndolo. Dick solo tenia una línea recta y una expresión aparentemente neutral, pero todos lo sabían, Dick no era neutral, era amigable, bromista, lo que sea que pasaba por su mente no era bueno.
—Yo me voy, si Jason tiene problemas conmigo, solo están en su cabeza y sabe perfectamente donde encontrarme si tiene algo que decirme—Dijo Dick caminando en dirección a su nave.
—El te ha buscado pero siempre lo evitas—Dick se quedo mudo por un momento ante la declaración, antes de seguir caminando, una suave luz rojiza hizo sombra de sus pies, la reconocía—¿Es tan grave el problema que tienes él que no puedes ni verlo?—La voz nuevamente atacaba y Dick solo por unos instante se permitió entristecer.
—Kory…—Se dio la vuelta, justo ante el, la que en algún punto fue su prometida estaba allí, con un bañador morado y pareo a juego hablándole como si no se conocieran. No pudo evitar sonreír con nostalgia.
—¿Y bien?—Insistió ella. Lo había visto aterrizar y lo contemplo un tiempo, esperando a que Roy hiciera algo para enmendar su mentira, pero al ver su fracaso sintió que debía intervenir.
—Lo siento, pero debo irme—Contestó Dick esta vez con un tono un poco más bajo, más sumiso.
—Jason esta mal por tu causa, y Roy y yo estamos preocupados por él, por eso te ha pedido venir—Dick divago unos momentos pero finamente decidió escucharlos.
—¿Jason es importante para ti?—Dick la encaró, ignorando por completo a Harper, ella asintió sin meditarlo demasiado y él finalmente bajo sus hombros, resignado y vencido.
—De acuerdo, no quisiera haber venido en vano—Acepto con una sonrisa algo forzada mirando solamente a Star-Fire, pero Roy se acerco a él y le paso el brazo por los hombros.
—¡Muy bien! Te prestare algo de ropa, ¿Star puedes pedir algo para cenar?—Pidió más ameno, dejando que la mujer se alejara volando de ellos—Oye…—Dijo Roy más bajo—¿Si sabes que ella no te recuerda verdad?—Dick suspiro y empezó a avanzar.
—Lo sé—Concluyó—Pero yo si la recuerdo a ella…—
Jason, por su parte, tan pronto como aterrizo, tomo una vieja moto dejada en custodia y anduvo a su casa con algo de prisa. Había recibido un mensaje de Roy para que se apresurara a llegar, se notaba desde que se fue que estaba escondiendo algo y por un segundo eso le preocupo, es decir, lo peor que podría pasar si se trataba de una tonta broma es que llegara más temprano a casa.
Tan pronto como se estaciono, noto el ruido y las luces de su casa. Se acerco con velocidad, ya no llevaba el traje de Red-Hood y pensó que tal vez debió de ponérselo antes de entrar.
—¡Roy!—Gritó al entrar en su casa.
—¡Estamos aquí!—Escuchó desde la terraza, moviéndose para pasar el umbral y ver con sorpresa una fogata encendida, cervezas, botana y un invitado que ciertamente no espero ver…
—…Dick…—murmuro quietó, razonando, pero regresando su atención a Roy y lanzándole una mirada asesina.
—Jason—Dick contestó y saludo levantando su cabeza un poco.
—Espero no te moleste, traje un invitado—Su amigo le dijo dándole una cerveza. Todos estaban en ropa de playa, incluso Dick, quien llevaba unas bermudas que sintió familiares—Lo siento, le preste tu ropa, creo que le iba más que la mía—Dijo Roy a manera de disculpa y Jason guardo silencio, tragándose todo lo que tenía pensado.
—Lo siento por eso…—Esta vez Dick intervino, con una voz suave, tanteando el terreno. Jason carraspeo y se fue a sentar a un lado de Kory, luego le preguntaría a ella que demonios había pasado, pero de momento averiguaría que estaba haciendo Grayson en su casa.
—No hay problema—Contestó aceptando una cerveza que Kory le pasaba, Dick lo miró con curiosidad. Todos eran muy amigables entre sí.
—¿Cómo te fue en tu misión?—Preguntó ella.
—Bien, todo bajo control—Jason sentía la mirada de Dick sobre él, no se veía molesto pero de alguna manera lograba ponerlo nervioso y eso le molestaba.
—Le estaba contando a Dick desde cuando somos un equipo, las misiones que hacemos juntos, como somos unos patea traseros profesionales—Habló Roy y por fin Dick cambio de objetivo.
—Si…Tim me había comentado al respecto, pero no estaba enterado de muchas cosas—Nuevamente Dick sonreía y eso relajo un poco a Jason, quien bajo su cerveza y pensó en lo mejor que pudiera decir.
—Y…¿Qué te parece mi casa blue-bird?—Preguntó, regañándose a si mismo por no tener un mejor tema de conversación y haberle hablado por un apodo que posiblemente le molestara, pero para su fortuna Dick rio un poco.
—Nada mal…no tenemos cosas así en BlüdHaven—Kory sonrió al igual que Roy. Ambos aliviados, sea lo que sea que pasara entre ambos, parecía no ser lo suficientemente malo para que dejaran de hablarse.
—Ya sabes puedes relajarte un rato y venir cuando quieras—Jason se inclino hacía adelante, solo necesitaba un poco de confianza y dar el primer paso.
—¡A ninguno nos molestaría!—Roy intervino rápidamente al ver la expresión extrañada de Dick, posiblemente con la misma duda que tenía él. ¿Desde cuando Jason era tan amigable?
—Lo tomare en cuenta—contestó amable.
—Eres muy educado…“Dick”—Kory dijo y Dick rápidamente centro su atención en ella, sonriéndole coqueto, quizá ya había bebido de más.
—¿A ti no te molesta que venga a visitarlos?—Preguntó y Jason se sintió fuera de la escena, recordando como le había sonreído a Damian. La misma sensación volvía a embargarle, esa misma que le decía “tu sobras aquí” y, por primera vez, pudo reconocer lo que realmente estaba pasando, él, el forajido y rudo Red Hood, tenía envidia.
—Para nada—Ella le devolvió la sonrisa juguetona y Jason no tuvo otra opción que intervenir.
—¿Y hace cuanto que llegaste?—La pregunta fue dicha tan alto y la interrupción tan obvia que Dick pareció molestarse más no dijo nada al respecto.
—Apenas, tiene un par de horas—Contestó algo seco. Pero pensó en las palabras de Star, el estaba afligido por algo, así que dio un sorbo a su bebida tomo un poco de aire y volvió a poner un rostro amigable.
—¿No estas cansado?—Jason sintió una pequeña carga de emoción al reconocer algo de lo que no se había percatado. Era muy noche y Dick no parecía tener intención de irse pronto—¿Pasaras la noche aquí?—
—¡Si!—Muy a su pesar, fue Roy el que le contestó—¡El se quedara conmigo!—Y como un balde de agua fría sus palabras cayeron sobre su conciencia.
—¿Qué?—Contestaron Jason y Dick al mismo tiempo, al parecer el joven héroe de azul no lo sabía.
—No te preocupes, puedo dormir en el sofá—Se apresuró Dick a corregirle, no quería dormir en la cama de Harper, sabía de su reputación de galán y no le agradaba mucho la idea.
—No seas tonto, quédate conmigo—Jason ofreció, aunque más que una propuesta era una especie de demanda.
—Puedes quedarte conmigo si lo deseas—Star nuevamente ofrecía y dejaba en silencio a los otros chicos. Dick no pudo contestar, estaba demasiado distraído mirando como ella se inclinaba para tomar algo de botana de la mesa.
—Wow…nadie nunca me ofreció esa atención a mi—Se quejó Harper quebrando la suave línea de tensión formada.
—Eso es muy tentador, pero hoy me quedo en el sofá—Agradeció Dick, rechazando la oferta para sorpresa de todos, no era ningún secreto que Dick era un casanova y no era ajeno a prestarle atención a sus exnovias.
Fue un alivio para Jason, quien estaba demasiado cansado, pero que aún así, paso toda la noche con ellos, bebiendo, hablando de misiones, conquistas y uno que otro programa de televisión hasta Kory y Roy decidieron irse a dormir, dejándolos solos.
—¿Tu no te iras?—Preguntó Dick sin mirar Todd, él estaba en el sofá que ocuparía, con un par de latas de cerveza adornando su lado de la mesa.
—Te puedo dejar mi cuarto—Realmente no es lo que pensaba decir, pero fue lo mejor que pudo articular—Yo no tengo problema en quedarme aquí—Dijo tratando de justificarse, pero la verdad era que sentía algo mareado, no había comido en todo el camino y empezó a beber nada más al volver, sin contar lo pesado del viaje.
—Vamos—Jason miro al frente, Dick le ofrecía una mano para ayudar a levantarlo—Te llevare a la cama—Dick se quedo un momento pensativo y empezó a reír—Eso si que se escucho mal jajaja—Dijo sin prestarle importancia tomando su mano, pero Jason en ese momento pudo comprenderlo, la imagen de ellos durmiendo juntos, la envidia que sentía, la atención que desesperadamente buscaba, el se sentía atraído por Dick Grayson.