Tío Victor 3
Lo primero que nota al abrir los ojos es un techo blanco, lo segundo que nota es un pitido constante y levemente irritante, lo tercero es la cálida mano que rodea la suya y por último el murmullo de la voz de su padre llamándole.
-Sti… Stiles… hijo… Stiles hijo ¿me escuchas?-
Tarda unos segundos pero llega a la conclusión acertada del lugar en donde se encuentra en esos momentos, la cama de un hospital, ¡Oh rayos! ¿Qué había pasado? ¿Hace cuánto que está ahí?
Su papá debió estar muy preocupado, ¿se abra alimentado bien? ¿habrá dormido?
-Tranquilo, tranquilo hijo, estas en el hospital ahora. Sufriste una hemorragia interna y perdiste mucha sangre, los doctores dicen que la cirugía fue un éxito pero debes guardar reposo-
¿Hemorragia? ¿Cirugía? Sabía que le dolía todo después de la paliza de Gerard y atravesar la pared de un almacén con su jeep, pero nunca creyó que fuera tan grave, tal vez se había acostumbrado demasiado rápido al dolor en esos últimos meses.
Sentía la garganta muy seca y le dificultaba decir las palabras por el sedante y morfina que corría en su sistema en esos momentos pero quería decirle a su padre tanto.
-Papá, yo… perdón, yo…-
-Sch sch no, no tienes nada de que pedir perdón hijo. Esto no fue tu culpa, sé que no me has dicho muchas cosas en los últimos meses pero yo también debí estar más atento, hacer las preguntas correctas, pero ya lo sé. Sé todo hijo-
-¿Papá?-
-¿Ya despertó?- una nueva voz se hiso presente en la habitación y aunque tardo un poco en identificarla era demasiado familiar para olvidarla.
-Tt… tío Victor-
-Hola mi muchacho, es un alivio que recuperes el conocimiento- acercándose a la cama vio a su tío en un traje elegante de un verde oscuro, poniéndose al otro lado de la cama tomo su otra mano la envolvió entre las suyas. A pesar de los años sus manos seguían siendo más grande que las suyas y conservaban esa calidez familiar de cuando era más joven.
¿Pero que hacia su tío aquí?
-Stiles, tú tío y yo hemos estado hablando, de mucho en realidad. Hijo, la ciudad se ha vuelto peligrosa, y me esforzare para que eso cambie, y tu tío…-
-¿Qué te parecería ir a Latveria por un tiempo conmigo?-
*+*+*
¿Han escuchado el dicho “pueblo chico infierno grande”? Te sorprendería lo acertado que puede llegar a ser, las noticias de que los Argent fueron arrestados corrieron por el pueblo como el viento, por lo que más temprano que tarde la noticia llego a todos los adolescentes de la preparatoria de Beacon Hills siendo el tema de conversación más jugoso, incluso los profesores comentaban sobre este hecho.
-¿Allison? Pero ella parecía tan buena-
-Dicen que su familia era traficante o algo así-
-Yo escuche que su padre y ella se volvieron locos después de la muerte de su madre, algo hicieron y la policía los descubrió-
-Yo sabía que Matt estaba obsesionado con ella-
-¿El del tiroteo?-
-Tenía cientos de fotos de ella, ya saben, Dios los hace y ellos se juntan, debió saber que algo estaba mal en la cabeza de esa chica y por eso se sintió tan atraído a ella-
-¡Cállense!- el grito de Scott resonó en los pasillos cuando por fin se hartó de escuchar la infinidad de murmullos de los adolescentes hablando de Allison como si fuera un criminal que merecía estar en la cárcel, y no era así.
Ahora las miradas de sus compañeros de escuela estaban fijas en él, pero más que pena o sentirse cohibido el enojo y la rabia de toda la situación lo dominaba, así que decidió caminar lo más rápido posible al baño más cercano, sino se controlaba perdería el control en medio de todos.
En esos momentos se arrepentía de haber asistido a clases, pero quedarse en casa pensando en lo posiblemente preocupada y asustada que estaría Allison mientras él se revolcaba de preocupación seria como una tortura, ya había perdido el control un par de veces y su cama, algunas almohadas y su escritorio habían pagado el precio, suponía que yendo a la escuela le ayudaría en pensar otra cosa, pero se equivocó, todos hablaban sobre ella esparciendo rumores a diestra y siniestra.
Una vez en el baño abrió el grifo y se mojó la cara con agua, la segunda razón por la que venía a la escuela era saber qué es lo que había dicho Stiles a su padre, porque la única razón que hallaba para que el sheriff no se hubiera asustado ayer viéndolo cambiar es que le hubiera contado sobre los hombres lobo, y dios no lo quiera, de alguna forma ser el responsable de que Allison este en prisión en esos momentos.
Había tratado de llamar pero no contesto su celular, por lo que esperaba verlo en clases pero no tuvo tanta suerte en interceptarlo, distraído por lo que la gente decía y su propia preocupación.
-Te vez fatal- la voz de Isacc lo saco de sus pensamientos, en algún momento este había entrado a los baños detrás de él. El rubio se estaba volviendo bueno en el arte del sigilo.
-Me siento fatal- dijo con sinceridad el moreno.
-Entonces… ¿es verdad lo que paso con Allison? ¿Fue arrestada?-
-Desgraciadamente si-
-Oh-
Ambos jóvenes guardaron silencio después del intercambio de palabras, Scott había sido bueno con Isacc y se habían acercado un poco cuando este le enseño más cosas de ser un hombre lobo aparte de aprender a pelear como Derek, se sentía mal por el moreno por pasar este rato amargo por su novia, pero no sabía que decir o sentir sobre la chica, ella prácticamente le había disparado una flecha sin dudar, y aunque no sabía toda la historia sabía que los Argents habían causado mucho daño y se habían escapado del castigo por mucho tiempo.
Tal vez esto era karma, pero no se lo diría a Scott en la cara, eso solo echaría sal a la herida y enfurecería al ya desestabilizado lobo.
-¿Has visto a Stiles?-
-¿He?-
-Si has visto a Stiles, no he logrado encontrarme con el hoy. Necesito hablar con él-
-Scott, Stiles no ha venido a la escuela en los últimos días. ¿No te habías dado cuenta?-
-¿Qué?-
*+*+*
La patrulla de policía se detuvo frente a los restos de la casa Hale, solo un hombre bajo y espero a que Derek Hale saliera de los restos que alguna vez fue el hogar de su familia.
-Eres un hombre difícil de encontrar Derek Hale- John miro al hombre más joven con seriedad, los teléfonos que dejo como referencia para contactarlo cuando estuvo arrestado y la dirección del motel en el que supuestamente se quedaba no ayudaron a encontrarle, por lo que tuvo que recurrir a su cuñado para saber el paradero del ultimo Hale con vida en la ciudad.
-Sheriff, ¿a qué debo su visita?- Derek devolvía la mirada al hombre sin titubear, otras personas estarían algo nerviosas que un policía los estuviera buscando, pero Derek se mostraba demasiado tranquilo.
Eso cambiaria con las siguientes palabras que diría John Stilinski.
-Vine a hablar contigo, el departamento de policías decidió abrir de nuevo el caso del incendio de tu hogar y el asesinato de tu familia, esto con el fin de declarar a Kate Argent culpable de asesinato, intento de homicidio, piromanía, y… pedofilia entre otros cargos-
Los ojos se Derek se abrieron de sorpresa y por un momento breve parecía que había perdido el equilibrio al parecer inclinarse un poco, John sabía que era mucho por procesar y no había que nadie más le diera la noticia, no solo como sheriff sino porque sabía que a pesar de que por fin se estaba haciendo justicia a la familia Hale y a Derek, esto solo era parte del plan de Victor.
-¿Por qué ahora?- fue lo que logro articular Derek sonando incrédulo, quería preguntar mucho más, ¿Cómo es que habrían el caso ahora? ¿Quién les dio toda esa información?
-No mereciste lo que te paso a ti ni a tu familia, sé que Kate Argent muerta esto no traerá total alivio, pero al menos el mundo sabrá lo que hiso. Lo que su familia hiso también-
-¿Qué?-
-Una vez abierto este caso también se hallaran conexiones con su familia ayudando a financiar este crimen y muchos otros llevados por Kate Argent, una larga lista que llevara a conexiones con otros de sus parientes y posibles socios de sus fechorías, dentro de la familia Argent y fuera de ella. En estos momentos se encuentran en custodia Christ Argent y su hija Allison Argent por sospecha de cooperación en los actos delictivos de Kate, así como portar armas sin licencia, tráfico de armas, cooperar en el secuestro de un menor, tortura e intento de asesinato, entre otros cargos-
-¿Por qué me dice todo esto?-
Estaba seguro que esa información iba más allá del deber policiaco del sheriff.
-Como ya dije, no merecías lo que te paso. Esto no te devolverá a tu familia, pero espero que te ayude a cerrar este capítulo de tu vida, pero también… no trates de meterte cuando vayamos a buscar a Gerard Argent. No solo te lo estoy diciendo como policía, ni porque ese hombre aun esta fuera de custodia policiaca y es muy peligroso, sino porque ese hombre dejo de ser tu presa, ahora hay alguien mucho más peligroso que está detrás de él y si intervienes no puedo prometer que saldrás ileso-
-Eso no sonó como parte de su charla como sheriff-
-Y no lo fue, Hale, solo puedo imaginar que tanto daño te hiso esa familia, pero ellos también se metieron con algo que jamás debió ser tocado-
-¿Sheriff?-
-No te estoy hablando ahora como sheriff, sino como padre. Sé que es egoísta de mi parte pedirte que te apartes, pero se metieron con mi hijo, si yo no atrapo a Gerard como sheriff, al menos ayudare como padre a que ese bastardo pague lo que hiso a mi hijo, y si en el proceso a tu familia se hace justicia junto a otras cientos de víctimas, sería capaz de entregar la ciudad en bandeja de plata-
Stiles… ¿Qué le había pasado a Stiles?
Hiso memoria rápidamente desde la última vez que lo vio, cuando Scott y él le traicionaron, cuando atravesó con el Jeep una de las paredes del hangar, tenía moretones si recordaba bien. ¿Fue del choque? En ese momento y hasta ahora no se había preocupado en pensar que tan graves eran sus heridas, segado más por la ira y la rabia que había dejado la traición, aun con el desagradable aroma de Gerard en su boca, desde esa noche no lo había visto ni a él ni a Scott.
¿Secuestro? ¿Tortura? Sabía perfectamente cómo eran el método de las torturas de un Argent, ¿habrían hecho lo mismo con un humano?
¿Por qué? ¿Y cuándo ocurrió todo eso?
Todo había sido muy confuso con la muerte de Jackson, el regreso de este, la desaparición de Erika y Boyd dejando su manada, el regreso de Peter…
Y Stiles…
-¿Qué le paso a Stiles señor?- no pudo evitar preguntar. Ni sabia porque lo hacía, se supone que ya no quería saber nada más de Scott y compañía.
-Él… ahora está en un lugar mejor. ¡No pongas esa cara!, no me refiero a “ese” lugar mejor, pero ahora está seguro. Recuerda no meterte en más problemas muchacho, ni tampoco en la búsqueda de Gerard Argent. Hasta luego- con una inclinación de cabeza el sheriff termino de despedirse y se subió a su patrulla, dejando a un hombre lobo más que confundido.
¿Cuánto tiempo soñó Derek para que a su familia se le hiciera justicia? La muerte de Kate había aliviado solo un poco su dolor, este siempre estaría ahí por la pérdida de su familia y manada, pero también anhelaba que se hiciera justicia legal. Todo el mundo jamás sabría que la muerte de su familia no había sido un accidente, todo el mundo seguiría mirando a los Argent como gente normal, unos vecinos más en Beacon Hills o a la ciudad a donde fueran sin sospechar lo peligrosos que realmente podían ser.
Pero ahora, ahora en un par de segundos las cosas cambiaron y los Argent serian expuestos como los criminales que realmente eran, y…
No podía evitar que sobre todos esos pensamientos reinara la pregunta ¿Qué había pasado con Stiles?
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