Todavía estoy completamente sorprendido por lo que mis ojos vieron. Aquel muchacho que se fue con nada más ni nada menos que mi hermano, puede verme, ¿Será alguna especie de karma? No lo sé, hasta detesto la idea que alguien cercano a él pueda saber que estoy ahí.
En cuanto se marcharon, me dispuse a dirigirme a la casa de... ah... ni siquiera sabía a la casa de cual debía ir primero... el camino que debía seguir era el mismo hasta cierto punto.
Mientras caminaba, iba pensando a cual debería ir a ver primero, pero se me hacía difícil pensar en ello, imaginarme frente a esos chicos una vez más. Cuando llegué al punto donde debería decidir, me quedé viendo hacia ambos lados, por un lado recordaba lo que JHope me había hecho y pensaba que ver a Suga sería lo mejor, luego recordaba todo el desprecio que me mostró Suga durante mis últimos días y... No sé, no sé que debía pensar en ese momento.
Las dos únicas personas que realmente había deseado ver, me había hecho sufrir más o igual a todos aquellos que despreciaba. Al final me rendí, no podía con todo ello y volví por el mismo camino que había llegado hasta ahí. Caminaba sin rumbo, cada uno de los recuerdos que tenía con ellos se me venía a la mente, unos eran felices mientras los otros eran demasiado difíciles de procesar.
Me detuve cuando me encontré en medio del puente, aquel del que me había caído cuando intentaba tirar el diario. Que penosa forma de morir, ¿Verdad? Tratando de proteger a quienes me hicieron daño, tratando de esconder toda la verdad. Y ahí es cuando me pregunté, si realmente mi muerte valió la pena, si estoy bien con ello. Porque al final, ellos están vivos y, seguro, felices... en cambio yo estoy aquí lamentando todo lo que pasó y que hice por cada uno de ellos.
Estuve ahí, mirando el río un largo rato, hasta que decidí bajar y seguir la corriente, quería caminar hasta donde mi vida se había escapado. Supongo que con tal golpe que me había dado, no existían demasiadas posibilidades como para que me salvaran. ¿Qué más podía esperar? Durante tanto tiempo había deseado morir, incluso hice incontables cosas para lograr mi cometido, pero jamás hubiera imaginado que lo que me hacía falta, era eso. Tener la "suerte", supongo, de caer aún contra mi... ¿Voluntad? Creo que así debería decirlo, ya que no fue exactamente un intento de suicidio que salió bien.
Me senté a la orilla del río, observando la corriente, sin ningún pensamiento fijo. En un momento que mi vista empezó a viajar por todo el río, incluso la misma orilla en la que me encontraba, logré ver unas botellas, tenían ¿Hojas? Si, tenían hojas dentro... Era muy raro que en esta época la gente hiciera esa clase de cosas. Así que mi curiosidad me ganó y me levanté para ir hasta donde se encontraban.
Me quedé mirándolas un rato, sin saber si era correcto el leerlas, pero recordé que era un fantasma, a nadie le importaría si yo las leyera. Así que levanté las botellas, las abrí y saqué ambas notas. Nunca podría haberme imaginado lo que era... eran cartas, pero no de cualquier persona, cartas de Suga y JHope para... mi...