Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Enmendar Errores por RozenDark

[Reviews - 20]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Después de jugar Naruto Storm 4 y la pequeña ruta de Boruto, además de verme capítulos que en más o menos valían la pena en la serie de Boruto, por fin pude volver a escribir sobre Naruto, y para terminar, un NaruSasu :D

 

En fin, los personajes de Naruto y Boruto son propiedad de Masashi Kishimoto y los demás de mi propia autoría. La historia contará con una que otra cosa de la película/anime/manga de Boruto, pero serán mínimos.

 

Y una aclaración sumamente importante y para evitarme malos ratos aun si es Spoiler, Boruto no es hijo de Hinata. Sarada no es hija de Sasuke. Y Himawari aun si es hija de Hinata y Naruto, falleció junto con Hinata durante el parto. De allí en más, los demás secretos se irán revelando durante los siguientes capítulos ;)

 

Y una advertencia de gran importancia: Si eres fan de Sakura y Hinata, abstente a leer, porque habrá odio hacia ambos personajes, así que evitemos los malos ratos y palabras ofensivas ;)

 

Y sin más que decir, les invito a leer (^3-)/

Naruto veía con preocupación y demasiado reproche, a su viejo amigo, rival y por supuesto, su ahora ex amante, marchar. Sabía que Sasuke huía como siempre de los errores cometidos, a su vez que huía por causa suya y el error que había cometido al embarazar a Hinata -estando de pareja con el Uchiha-, pero Sasuke también había cometido errores, es decir, hacía dos meses Sakura había dado a luz a una bebé, que no solo poseía rasgos idénticos al único Uchiha vivo, sino que además era su hija. Así que Naruto no creía ser el único que cometió errores. Al menos el Uzumaki era lo suficientemente hombre como para responderle a Hinata y casarse con ella, con el fin de hacerse cargo de su hijo en común, Boruto.

Negó decepcionado de ver cuán cobarde podía llegar a ser Sasuke y miro con cierto desdén y preocupación a la que alguna vez, fue su mejor amiga llegar con la bebé en brazos, ¿cómo si eso fuera a convencer a Sasuke de quedarse?, sí ni con sus palabras había logrado doblegar la voluntad del Uchiha, ¿que lograría la patética Haruno?

 

— ¿A dónde se fue Sasuke-kun? —, exigió saber con molestia, no importando en lo absoluto si despertaba a su hija.

— ¿Acaso Kakashi-sensei no te lo dijo? —, preguntó seriamente —. Sasuke mismo le pidió que le diera una misión de búsqueda y reconocimiento con tiempo indefinido —, respondió con sequedad —. Aun cuando lograste tu enfermo y absurdo objetivo de darle descendencia, Sasuke simplemente se fue, pero siéntete orgullosa de haber logrado darle el Uchiha que Sasuke tanto deseaba, Haruno —, añadió rencoroso.

 

Naruto sabía a la perfección que Sakura había tenido algo que ver con el encuentro carnal que había tenido con Hinata, al igual que sabía que la Haruno había hecho de las suyas para lograr tener a Sasuke en su cama y así engendrar a la pequeña Sarada, pero aun cuando deseaba regresar el tiempo atrás, Naruto sabía que aquello era imposible, y que ahora, debía ser un buen padre para su hijo Boruto, aun cuando tenía que pasar el resto de sus días con Hinata.

Al menos sabía que él sí estaría para Boruto, pero Sakura, ella tendría que aprender a vivir con sus errores y Sarada a crecer con un padre que no la quería.

 

— ¡¿Y no piensas ir tras él?! —, preguntó ansiosa, justo cuando por fin había logrado darle a su amado la descendencia que tanto deseaba, Sasuke se alejaba —. Por favor Naruto, al menos ve tras él por el bien de Sarada.

—Naruto la miró con rencor, ya tenía en claro cuan maldita podía llegar a ser Sakura, pero llegar a ese punto, llegar a utilizar a Sarada, eso ya era bajo, pero ya no más, ahora tenía a Boruto, así que no podía darse ese lujo —. Búscalo tú si tanto lo deseas Sakura —, le respondió tajante —. Yo por mi parte, tengo a un hijo al que debo responderle, así que no tengo tiempo, ni razón alguna para ir en busca de Sasuke Uchiha —, añadió secamente.

 

Ni siquiera miró hacia atrás, simplemente siguió caminando con dirección al que ahora sería su hogar junto con Hinata y su hijo Boruto.

Sakura por su parte, comenzó a llorar desesperada, pues todo le había salido mal y ahora solamente tendría que cargar con una hija a la que no quería, pero sin llegar a tener a su amada obsesión.

 

— ¡SASUKE-KUN! —

 

 

 “Primer, Segundo Y Tercer Error”

 

Naruto se encontraba sumamente atareado con el excesivo papeleo. Frustrado, sucio y más que hastiado de ver tantas hojas para leer y firmar -en caso de autorizar-, pero prefería mil veces eso a tener que lidiar con sus problemas en casa.

Pero claro, los problemas de su casa siempre tenían que seguirlo hasta su trabajo, y de eso se dio cuenta, cuando por la puerta entró Shikamaru con Konohamaru a su lado, y a juzgar por el recio y serio rostro que su ex pupilo traía, supo bien de qué se trataba.

 

— ¿Qué hizo ahora? —, cuestionó en un suspiro, mientras dejaba de lado los papeles que anteriormente firmaba.

—Lo de siempre. Pintó varios insultos en las cabezas de los Hokages, ¡y vaya sorpresa! se ensaño con la suya, Séptimo —, soltó lo último con cierto sarcasmo.

 

Naruto sabía a la perfección la razón de la molestia de Konohamaru, no por nada ejerció su poder como Hokage y asignó al joven Sarutobi como el Jounin a cargo del equipo de su hijo. Y claro, Konohamaru no solo trataba a Boruto de manera más que correcta por ser su hijo, el Jounin en verdad tenía aprecio por el Uzumaki menor, tanto, que cada que Boruto hacia algo o se metía en problemas, iba directamente a ponerlo en su lugar.

 

—Konohamaru, te puse a cargo del equipo siete, precisamente para que llevarás por el buen camino a cada uno de sus miembros, así que Boruto es tu responsabilidad durante los días de misiones, y por esta hoja que tengo en mi mano, sé que el equipo siete tenía una misión de guardaespaldas fuera de la aldea —, obviamente Naruto no iba a dejarse ganar, aun si sabía que Konohamaru había hecho bien al ir con él, el Uzumaki no estaba dispuesto a dejarse ganar, por el simple hecho de que no deseaba estar cerca de su propio hijo.

—Siento lo que diré, y aun si desea imponer un castigo después, lo haré Séptimo —

— ¡Konohamaru! —, Shikamaru se dio cuenta del enojo demasiado justificado del joven Sarutobi.

—Lo siento mucho Shikamaru-san, pero es hora de que alguien se lo diga —, respondió seriamente ante la advertencia del Nara —. Boruto es su hijo Séptimo. Y aunque usted no se dé cuenta, le echa la culpa a él de haberse separado de Sasuke Uchiha —, dijo severo —. Boruto no pidió nacer, es más, no fue Boruto el que cometió el error de acostarse con Hinata Hyuga, fue usted, Hokage-sama —, añadió con ponzoña.

 

El Uzumaki se quedó estático ante esas -más que merecidas-, pero inesperadas palabras. Frunció el ceño y apretó sus puños con fuerza. Claro que sabía que Boruto no tenía culpa alguna, pero simplemente no podía evitar comportarse de esa manera. Además, siendo el Hokage, no podía permitirse ser benevolente con su hijo, por el contrario, era demasiado estricto con él.

 

—Konohamaru, será mejor que no vuelvas a mencionar a Uchiha, que él no tiene nada que ver en todo esto, y mucho menos lo tiene Hinata —, le respondió de manera rencorosa —. Y una cosa más, no se habla de los muertos, así que abstente a no mencionar a Hinata en todo esto, porque ella ya no está para defenderse.

 

Konohamaru no pudo evitar morder su lengua con esa patética excusa, y claro, porque de cierta manera, se sintió culpable por haber mencionado a la difunta Hyuga. Y no es que Hinata Hyuga hubiera sido de su entero agrado, porque para él, fue -de cierta forma- un alivio para el pobre de Boruto que su madre falleciera.

Y es que jamás lo entendió, pero Hinata trataba a Boruto como si no fuera su hijo, y eso le sorprendía demasiado, puesto que Hinata Hyuga se había salido con la suya y se había casado con su rubia obsesión, además, Boruto, si bien no había heredado absolutamente nada de la Hyuga, se parecía demasiado a Naruto, así que no entendía las razones de la Hyuga, para tratar a su hijo como un perfecto extraño.

Y para buena o mala suerte, Hinata había fallecido cuando Boruto tenía solamente dos años, desgraciadamente, no se había ido sola y la bebé que solamente pudo estar en el mundo por breves horas también se había ido. El mismo sabía que aquello había deprimido a Boruto, puesto que cada que se veían, el pequeño Uzumaki hacía mención de lo grandioso que sería como el hermano mayor de la pequeña Himawari -al menos cuando su madre seguía viva y embarazada-.

Es por eso, que a Konohamaru le molestaba el comportamiento de Naruto hacia su hijo. Sarutobi sabía que Boruto ya sufría demasiado, desde tan corta edad, claro, no tanto como el mismo Naruto, pero sufría por la falta de ambos padres, aun si uno de ellos seguía con vida y lo evitaba –y es que Naruto podría hacer la diferencia-.

 

— ¿Sabes siquiera que se celebró ayer? —, le pregunto con enojo, lanzando así, su última carta.

 

Naruto se extrañó con aquella pregunta, ¿que si sabía que se celebró el día anterior?, obviamente nada en especial, puesto que no hubo alguna hoja informativa, o algún recordatorio por parte de Shikamaru.

 

— ¡Eres imposible Naruto! —, Konohamaru rió sin sentir gracia alguna —. No puedo creer que yo tenga que venir a decirle al Hokage que su hijo cumplió ya catorce años el día de ayer. ¿Siquiera sabe que casta es Boruto? —

 

El Uzumaki abrió sus ojos con una acongojada y sorpresiva expresión. Así que aquella era la razón por la que Konohamaru se mostraba así de furioso, también esa era la razón por el raro comportamiento que Boruto había tenido al aceptar la misión el día anterior.

Quería mostrar lo frustrado y avergonzado que se encontraba, pero en todos esos años de rencor hacia lo ocurrido con Sasuke y Hinata, había aprendido a ser orgulloso.

 

—Entonces solo debo felicitarlo como se debe, pero eso no es excusa para el comportamiento de Boruto, y lo sabes Konohamaru —, respondió severo.

—Bien por eso Hokage —, mencionó sarcástico —. Ahora, ¿podría responder a mi última pregunta? —

 

El Hokage comenzó a golpear la mesa con la punta de sus dedos, al mismo tiempo que comenzaba a sudar de los nervios.

 

— ¿Un Alfa?, ¿quizás? —

 

Konohamaru negó resignado, para después salir sin siquiera mediar alguna palabra. Y a juzgar por la mirada que Shikamaru le dirigía, supo que una vez más, había fallado.

 

—Temo decirte esto Naruto, pero el año pasado se les hizo la prueba de las castas a los Genin y tu hijo salió Omega —, mencionó Nara de manera severa.

 

Naruto solamente golpeó su cabeza contra el escritorio, mientras se jalaba sus cabellos en son de frustración.

Estaba seguro que muy posiblemente, -en otro universo quizás-, él ya tendría un serio problema con la alopecia, y que si las cosas seguían de esa manera, él ya estaría igual en ese universo suyo.

Sabía que lo había arruinado, especialmente con el tema de las castas, ¡dios!, si Shikamaru no le hubiera dicho aquello, muy seguramente lo hubiera descubierto en alguna misión fallida por mandar a su hijo en épocas de celo, y aquel pensamiento le hacía odiarse.

Un año era mucho tiempo y en todo ese tiempo había arriesgado a su hijo de manera imprudente.

 

—Que problemático eres —, mencionó Nara con fastidio —. Para que te lo sepas, Temari anda muy al pendiente del asunto del celo de Boruto, y hasta ahora no ha entrado en calor, así que de ahora en más, asegúrate de tenerlo en cuenta y al pendiente, para evitar accidentes o misiones fallidas y con consecuencias indeseadas.

 

Naruto asintió ya más calmado de oír aquello. Era bueno saber que la familia de los Nara, estaban al pendiente de su hijo, porque de no ser así, estaba seguro que Boruto se hubiera visto involucrado en terribles problemas por su imprudencia.

 

~.o0o.~

 

— ¿Y cómo te fue con tu castigo? —

 

El único niño rubio -y de gran parecido con el Hokage- en la aldea, miro rencoroso a aquella chica de lentes.

Sabía que a pesar de la burla detectada en aquella pregunta, Sarada Uchiha se preocupaba por él, más cuando hacía ese tipo de bromas en contra de valores sumamente históricos como lo eran las cabezas de los Hokages. Y si, puede que para su edad, aquella había sido una forma infantil de llamar la atención de su padre, pero le era tan complicado perdonarle el terrible olvido de su cumpleaños. Si con mucho trabajo había dado por sentado que el Hokage había olvidado las pruebas de las castas que se había hecho el año anterior, y le salía con eso.

Y ahora, por su absurdo comportamiento, tuvo que limpiar las cabezas, además de limpiar la academia, aun si ya no estudiaba allí.

 

—Sabes perfectamente cómo me fue Sarada —, respondió con fastidio.

—Que niño —, respondió con una pequeña sonrisa —. Sabes que existen otras formas de llamar la atención de tu padre, ¿no?

— ¿Quién dijo que lo hice por ese viejo? —, preguntó con fastidio, mientras se cruzaba de brazos.

—Por lo pronto, será mejor que te abstengas a meterte en más problemas Boruto, porque la misión sin ti fue demasiado aburrida —, mencionó Mitsuki con su usual sonrisa dirigida a su sol.

 

Sarada le dio un codazo a Mitsuki, quien miró a su compañera con intriga, claro, ella solamente le sonrió de una rara manera cómplice, como si supiera algo que ni él mismo entendía.

 

—Por lo pronto, ¿qué te parece si Mitsuki y yo te invitamos a comer? —, sugirió sonriente, dándole a su compañero otro codazo, mientras turnaba su mirada de Mitsuki al Uzumaki.

 

Mitsuki no había captado del todo a lo que Sarada quería llegar, pero al ver la resplandeciente e inesperada sonrisa que Boruto había puesto, recordó la celebración del día anterior.

Mentalmente se reprendió por haber olvidado el cumpleaños de su amado sol, y aunque fuera justificable -por el exceso de misiones que habían tenido-, no se lo perdonaría con facilidad.

 

—Y de paso podríamos ir a esa nueva repostería que abrieron la semana pasada —

— ¡Bien pensado Mitsuki! —, elogió Sarada, mientras aplaudía —. Es una buena ocasión para ir, porque en serio, desde que anunciaron su apertura, he querido ir, pero como no habíamos tenido tiempo, no había podido ir.

 

Boruto por su parte, asintió más que ansioso. Es decir, prefería mil veces pasar el día con sus amigos y compañeros de equipo, que solo en su gran casa. Así que los tres comenzaron a caminar con dirección a un lugar donde vendían deliciosas hamburguesas. El Uzumaki no estaba para esperar, pues se había adelantado completamente emocionado. Y más atrás del Uzumaki, Sarada y Mitsuki caminaban a la par y hablaban en voz baja para evitar que su otro compañero escuchara su charla.

 

—Mitsuki, te aconsejaría que si no vas a declararte a Boruto, dejes de ser tan obvio —, mencionó aquello con cierta burla.

— ¿Perdón? —, Mitsuki  se mostró completamente confundido —. No entiendo a lo que te refieres, Sarada.

—La Uchiha suspiro sin creer lo despistado que su compañero era —. Que eres demasiado obvio con lo que sientes hacia Boruto, pero mi sugerencia va más allá de eso. Boruto es un Omega, y aunque ninguno de ustedes dos se ha dado cuenta, muchos Alfas andan observando de más, además, si en verdad planeas seguir así de obvio, es mejor ir directo al grano y declararle tus sentimientos, porque en serio Mitsuki, si yo me di cuenta, es obvio que las demás chicas también lo harán y comenzaran los rumores, y de los rumores se hacen chismes y cuando menos lo esperes, tus sentimientos podrían llegar de una manera para nada amistosa. Lo que quiero decir, es que hables con la verdad o te lo van a quitar.

 

Mitsuki analizó cada una de las palabras de su compañera. Y claro, tenía muy en cuenta lo que sentía por Boruto –aunque no lo entendía del todo-, incluso había tenido una breve charla con su padre y los dos integrantes del antiguo equipo Taka acerca de sus nuevos y extraños sentimientos, pero aun no encontraba el valor suficiente o la situación necesaria para hacerlo, pero al oír sobre los demás Alfas que se interesaban en su sol, supo que debía declararse sí o sí.

 

~.o0o.~

 

Naruto llevaba horas en su papeleo, y claro, había utilizado un camino fácil para terminar como sea antes de que todas las tiendas cerraran. Soltó un suspiro lleno de cansancio, mientras hacía desaparecer a sus tres clones.

 

— ¡Vaya! —, Shikamaru había salido para tomar  su almuerzo con su familia y ahora que regresaba, se encontraba con la oficina completamente limpia y con los papeles ordenados —. Jamás pensé ver tan limpio este lugar —, mencionó con cierta burla.

—Muy gracioso Shikamaru —, respondió Naruto con sarcasmo —. Es obvio que hasta yo sé cuándo me equivoco, así que me tomaré el resto de la tarde para pasarlo con mi hijo.

 

Shikamaru solamente asintió más que satisfecho. Era obvio que Naruto quería a su hijo, pero tenía una pésima forma de demostrar ese afecto, pues precisamente tenía que llegar Konohamaru a ponerle un alto a su absurdo comportamiento. Así que por esa ocasión, el Nara se aseguraría de mantener el orden en la oficina, para que Naruto pudiera ocuparse de sus asuntos como padre, o al menos ese era el plan, hasta que por la puerta entró alguien que no había puesto un solo pie en la aldea, desde hacía ya catorce largos años.

 

— ¿Sasuke?—

— ¿Podemos hablar Hokage-sama? —

 

Naruto no podía creer que Sasuke tuviera el cinismo de dirigirle la palabra de aquella manera, y menos que ni siquiera hubiera tenido la decencia de ir a visitar a su hija y pareja antes.

 

—Uchiha, le doy el permiso para que vaya a ver antes a su familia, puesto que antes de que llegara, yo estaba por salir —

 

Sasuke por su parte, no pudo evitar sentir enojo hacia aquella actitud hacia su persona. Después de todo, en esos catorce años, había descubierto ciertas cosas, y claro, no estaba dispuesto a dejar que Naruto lo mangoneara para que vaya a ver a esa maldita arpía que tanto daño le había hecho.

 

—Precisamente, es por mi familia que he decidido venir aquí primer lugar, claro, aparte de dar mi reporte —, dijo seriamente, mientras le tiraba una carpeta al rubio —. Para empezar Séptimo, Sakura Haruno no es nada para mí, y tampoco lo es para mi sobrina Sarada —

—Naruto enarcó una ceja de manera dudosa —. Sarada es tu hija, ¿o es que acaso estos catorce años sirvieron para olvidar tu acostón? —

—Con todo respeto Hokage-sama, pero en mi misión, descubrí ciertas cosas, así como me encontré con ciertas personas. Para empezar, soy un Omega, y sabe lo que implica eso. Un Omega no puede embarazar a otro Omega y menos a una Beta como Haruno. Además de que hace poco fui a entablar una “amable” conversación con Orochimaru, y ¿qué cree?, esa serpiente tenía suficiente ADN de Itachi como para hacer una inseminación. ¿Adivina quién se llevó el ADN de mi hermano?, y por si a Haruno no le bastó, utilizó a Karin  para cumplir su maldito capricho, así que sí, he vuelto precisamente para sacar a esa loca del barrio Uchiha y quedarme con la entera custodia de Sarada —

 

Naruto no podía creer aquello, pero al ver la carpeta llena de documentos que hacían de pruebas, supo que todo ese tiempo, el que había cometido un terrible error, había sido nada más él.

Sintió furia hacia el mismo, y furia hacia su difunta esposa, pero tenía unas inmensas ganas de matar a Sakura por haber confabulado aquel maldito y enfermizo plan.

Con todo eso, había olvidado que sus intenciones hasta hacían unos minutos, era ir con su hijo y festejarle como se debe su cumpleaños, pero con todo lo recién descubierto, lo que menos quería, era ver a su hijo.

 

 —Esto se volvió problemático  —, Shikamaru supo que Naruto ya no iría a ver a su hijo, especialmente con todo lo revelado por el recién llegado.

 

Naruto por su parte cambiaba su mirada de los papeles a Sasuke y de Sasuke a los papeles.

En aquella carpeta habían todo tipo de documentos, donde demostraba que efectivamente, Sarada Uchiha era hija de Itachi Uchiha y Karin. También tenía un certificado de defunción con el nombre de Karin.

Incluso tenía una hoja entera con información del ninja médico que había ayudado en el parto de la pelirroja. Sin duda alguna, Sakura había ido demasiado lejos, al punto de ver la locura en ella.

 

—Ahora que he dado mi informe, es tiempo de que vaya y saque a esa loca de mi barrio —, mencionó seriamente, mientras se disponía a salir de aquel lugar.

— ¡Sasuke espera! —, aquello fue un impulso, ahora que sabía la verdad, sentía demasiada culpa por lo ocurrido con Hinata, especialmente porque Sasuke se había ido, precisamente porque quería limpiar su nombre y tener a su lado a Sarada.

—Sasuke solamente suspiro abatido. Sabía que eso ocurriría, y claro que una parte de él deseaba perdonarle a ese rubio tonto, pero la otra, odiaba a Naruto Uzumaki —. Nosotros no tenemos nada más de que hablar, al menos si no se tratan de misiones —, respondió con rencor —. Como le dije, quiero que Sakura Haruno este fuera de mi vida y la de Sarada, así como espero que tome medidas disciplinarias en su contra, puesto que Karin falleció por su causa, al igual que yo perdí a alguien muy importante… —, lo último lo silencio, Sasuke no deseaba contar cosas de más y que no venían al caso —. Además, usted tiene a su esposa, y no creo que a Hinata Hyuga le guste que hablemos.

—Hinata falleció hace años —, dijo de manera rápida, como si deseara que Sasuke lo perdonara solamente por saber aquello, cosa poco probable, puesto que le ponía nervioso saber que el Uchiha había perdido a alguien, esperaba que no se refiriera del todo a Karin.

—Sasuke sonrió sin sentir alegría —. Eso no cambia nada Naruto. Tú tienes un hijo de ella, no me creíste cuando te dije que era imposible que hubiera embarazado a Haruno y yo perdí a alguien muy importante, así que lo mejor será tratarnos de manera profesional.

 

Sasuke no medio ninguna palabra después de aquello, simplemente salió de aquel lugar, decidido a ir al barrio Uchiha y sacar a aquella maldita que tanto daño le había hecho a su familia.

Naruto por su parte, había quedado ido. Había cometido tantos errores y ahora no tenía idea de cómo enmendarlos, sin embargo, tomo una firme decisión y miro con total seriedad a Shikamaru.

 

—Manda a dos Ambus a buscar a Sakura Haruno y luego contacta al consejo y Tsunade. Sakura Haruno debe pagar por todo lo que ha hecho —

—Shikamaru asintió nervioso, sin embargo, antes de salir, miro una vez más al Hokage —. Naruto, espero que no te dejes llevar por todo lo que descubriste, porque Boruto es el que menos culpa tiene en todo eso. Recuera que fuiste tú el que cometió el error de meterte con Hinata.

 

Pero Naruto ni siquiera escucho lo que Shikamaru le había dicho, el Uzumaki estaba más concentrado en pensar en cómo le haría para recuperar a Sasuke, olvidando de nueva cuenta a su hijo.

 

 

Continuará

Notas finales:

¿Qué cosas no?, tengo las malas mañas de dejar en lo mejor la historia xD

 

Odien todo lo que quieran a Sakura y a Hinata, porque tienen las razones para hacerlo...

 

Y bueno, he de admitir que no me hace muy feliz hacer a Sarada hija de Itachi, y menos después de ver el capítulo 95 de Boruto, pero como ya lo tenía escrito, y no quiero a Sakura cercana a los Uchihas, pues me parece lo mejor.

 

Tampoco pregunten como es que Orochimaru tenía ADN de Itachi, saben bien que de esa serpiente todo se espera xD

 

En cuanto a Boruto, imagino que ya habrán notado para dónde va la cosa, ¿no?

 

En cuanto a Naruto, él la tiene difícil para enmendar el terrible error que cometió con Sasuke y Boruto, porque en serio, Naruto se confío demasiado en las palabras de Sakura y Hinata :/

 

Y bueno, aquí les dejo unos spoilers....   

 

.- Sakura recibe su merecido castigo

 

.- El examen Chunin va a dar inicio

 

.- Sakura engaña a Boruto

 

.- Algo malo se avecina en torno a los Uzumakis y a los Uchihas

 

Próximo capítulo… “El Error Más Grande”

 

En fin, espero que les haya gustado y si es así y me lo hacen saber con sus hermosos comentarios, se los voy a agradecer muchísimo ;)

 

Nos leemos pronto

 

Chau chau (^3-)/


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).