Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

What no one tells you about love por Elisse

[Reviews - 11]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Hola chicos, otra vez yo jaja...espero que todos se encuentren bien.

Creo que volvio a pasar un poco mas de tiempo del que habia planeado, todo esto del trabajo y la escuela...consumen mas tiempo del que yo quisiera, pero en compensacion les traigo un nuevo capitulo, creo que este y el anterior son mas largos de lo normal, pero espero que lo disfruten.

Me gustaria saber que les ha parecido hasta ahora, ya tienen un personaje favorito? se identifican con alguno? les gustaria saber mas acerca de un personaje en especial? haganmelo saber en los comentarios, me encantaria leerlos ^^ 

Bueno sin mas, espero que sea de su agrado y de antemano muchas gracias por leerlo. 

nos leemos en el proximo capitulo! ^^

 CAPÍTULO 12

 

POV ALISSON~

Había sido un día bastante agotador, apenas había tenido tiempo de hablar con Alex durante mi vuelo, al parecer ella se dirigía a casa de sus padres. Sentía que todo se me vendría encima en cualquier momento…la noche de la cena, yo le había confesado mis sentimientos a sabiendas que ella me rechazaría…sabía que ella no sentía lo mismo que yo, eso de verdad me hirió…me dolió más de lo que pensé…pero ya no podía dar vuelta atrás. Después de confesarle eso…ya no podía mirarla a los ojos, me encerré en mi habitación mientras que ella durmió en el sofá.

Sin mentir, me sorprendió el hecho de que me llevara al aeropuerto a la mañana siguiente. Incluso me había preparado el desayuno. Intente actuar como si nada, no quería molestarla más…pero ella seguía siendo tan atenta conmigo. Eso me hizo sentir una punzada en el pecho.

Antes de separarnos en el aeropuerto, me dijo que usaría estos días para darme una respuesta adecuada. Eso me hizo sentir bastante feliz…y a la vez asustada…antes de bajar del auto la besé…fue un beso muy corto, pero sin duda…lo que sentí esta vez no era lujuria…era temor por parte de las dos.

Apenas llegué a Londres, todos se encargaron de mantenerme ocupada, supervisando al set, dirigiendo a las modelos…era algo que acostumbraba a hacer, pero de alguna manera…algo se sentía diferente…como si anhelara estar en otro sitio.

Al final de mi día, me dirigí al Hotel en el que me hospedaría. Pasé totalmente de las invitaciones que me hicieron para cenar, sólo quería encerrarme en mi habitación. Ya un poco más tranquila, llame a Alex…sonaba ocupada, había bastante ruido, la gente gritando, el sonido envolvente del rugir de los motores. Sonreí levemente cuando se disculpó por usar mi auto en una carrera, incluso me plantee el hecho de darle un auto, aunque no sabría con certeza si ella iba a aceptarlo.

No quise molestarla más, asiqué después de que me colgara, me dirigí hacia el baño.

Era extraño, a pesar de que habíamos pasado juntas solo un par de días, esta sensación de soledad que me inundaba comenzaba a agobiarme.

Estaba acostumbrándome a su compañía demasiado rápido. Eso de por sí ya era malo…si al reunirnos nuevamente ella me daba una respuesta…y decidía que lo mejor era alejarnos y vernos solo lo necesario para aparentar…eso sin duda me mataría.

—ay, Alex… ¿Qué diablos me estás haciendo? -sonreí de lado mientras dejaba caer mi ropa al suelo para entrar en la tina.

Mi cuerpo quedo sumergido casi en su totalidad por el agua caliente. Solté un suspiro de satisfacción. Mi cuerpo se relajó poco a poco, me deslice un poco más dentro de la tina hasta que mi cabeza se acomodó sobre el borde de la tina.

Alcé ligeramente mis brazos, mis ojos enfocaron unos cuantos rasguños sobre mi piel, o más bien las pequeñas cicatrices que estos habían dejado. Los recuerdos de aquella noche saltaron a mi mente. Haciéndome recordar a una Alex presa del pánico…vulnerable…desesperada. Aquella noche no pude hacer mucho. Solo la abracé tan fuerte como pude. El cansancio la vencía por ratos haciéndola dormir. Ella despertaba asustada y yo la abrazaba más fuerte para calmarla.

No me atrevería a decir que éramos iguales…pero si sabía que habíamos pasado por algo similar, y aunque yo de alguna manera había logrado dejar de llorar durante noches enteras mientras me culpaba por no haber podido hacer nada por mi madre, sabía que la perdida de Alex era algo que aun la perseguía. Eso solo me hacía sentir como una idiota…la estaba presionando demasiado.

El deseo de tenerla cerca de mí no se apaciguaba. La manera en la que me hacía suya…sus caricias…nuestros cuerpos sincronizándose…

Mis ojos se mantuvieron cerrados por un momento mientras mi mano bajaba para encontrarse con mi piel. Una de mis manos se posiciono sobre mi pecho, estrujándolo suavemente y pellizcando mi pezón. La imagen en mi cabeza no era nadie más y nadie menos que Alex, mi mente jugaba conmigo. Mi mano libre viajo hasta mi entrepierna, acaricio mi centro ligeramente para después sentir como dos de mis dedos se iban introduciéndo en mi interior provocando que un par de gemidos escaparan de mi boca. Mantuve un ritmo suave durante unos minutos, pero mi cuerpo estaba ya demasiado excitado y pidiendo más. Pellizque con más fuerza mi pezón, jalándolo un poco, provocando que se endureciera más, mientras mis dedos entraban y salían de mi con más afán, mi pulgar le brindaba atención a mi clítoris, haciendo movimientos circulares.

—      Alex…- se me escapo su nombre. Pero solo hizo que mi cuerpo se estremeciera más. —ngh…-me mordí el labio.

Pequeñas gotas de sudor invadían mi rostro jadeante. Mi pecho subía y bajaba a causa de mi respiración agitada. Mi voz se quebraba un poco mientras mi garganta dejaba escapar mis gemidos. Las contracciones en mi interior hacían cada vez más presión envolviendo mis dedos. Estos últimos entraban y salían cada vez más rápido. Entraban más profundo…estaba cerca…. Mi mente me torturo un poco más poniendo ante mí una imagen más clara de Alex, sus curvas…su delgado cuerpo…sus pechos firmes…

—      ¡Ah….! …-fue lo único que atine a decir mientras la sensación electrizante de mi orgasmo recorrió mi cuerpo. Pareciera que el tiempo se había detenido. Mi mente se había quedo en blanco. Mis dedos salieron lentamente de mi interior mientras intentaba regular mi respiración. Me mantuve así unos minutos más. Cubrí mi rostro con mi antebrazo y tensé un poco mi mandíbula.

Mis pensamientos fueron interrumpidos por el timbre de mi celular, el cual había botado al suelo también junto con mi ropa. Con un poco de esfuerzo me estire para alcanzarlo sin tener que salir de la tina.

Una vez con el aparato entre mis manos. Deslice mi pulgar sobre la pantalla táctil para encontrarme con un mensaje. Era de Alex, eso me hizo sonreír como una tonta. Abrí la aplicación de mensajería, ella aún estaba en línea.

<< lamento haberte colgado…>>

<< sonabas muy cansada…y…tal vez deberia dejarte dormir>>

Ese último mensaje me hizo mirar la hora, 12:45 am. Antes de que pudiera enviarle una respuesta, ella envió una foto. Estaba sobre el capó de mi coche con una sonrisa en su rostro. La luna brillante de fondo solo la hacía lucir más linda. Me quede embelesada por unos minutos más, podría pasar horas viendo esta foto. Mi celular volvió a sonar, esta vez me había mandado un audio.

<que descanses Ali>

—      ¡¡Dios…!! ¡Pero que linda! Joder…-mi corazón dio un brinco de alegría.

Con una sonrisa pícara abrí la cámara de mi celular, tomé una foto mía aun estando en la bañera y se la envié con un pequeño mensaje.

<dulces sueños cariño <3>

Mis mejillas se ruborizaron en cuanto se la envié. No esperé a que respondiera. Cerré la aplicación y después de enjuagar mi rostro salí finalmente de la bañera. Sequé mi cuerpo y lo envolví en una toalla.

Una vez en mi habitación me puse una camiseta holgada para dormir y me fui directa a la cama.

 

POV ALEX~

Después de aquel encuentro con Lucas, Mad y yo regresamos a casa, los invitados de mi padre se habían ido. Ayudamos a limpiar el jardín, cenamos los famosos pastelillos de mamá y unas horas después Mad se marchó a casa con su madre. Seguro querrían ponerse al día. Mis padres se fueron a dormir después de darme un gran abrazo.

Sabía que era algo tarde, y no quería molestar a Allison, pero quería disculparme. Después de enviarle un par de mensajes y una foto, me respondió. Mis ojos se abrieron de par en par al ver la foto que me había enviado, mis mejillas ardían.

—      ¿pero qué diablos…? -intente ocultar mi nerviosismo. Aunque de alguna manera me había hecho sonreír.

No quise molestarla más, después de meter su coche en el garaje subí a mi habitación. Todo estaba exactamente igual a cuando me fui.

Los cuadros colgados en las paredes. Mis libros apilados en el estante. Viejos muñecos de peluche.

Sonreí para mí misma ante aquel sentimiento de nostalgia.

Me acomode sobre el viejo sofá que se encontraba pegado a mi ventana. Levante el marco para dejar que la brisa entrara y me quede en silencio mirando la luna mientras abrazaba mis piernas.

—      ¿Cariño? -la voz de mi madre me hizo salir de mi pequeño trance, ni siquiera había escuchado cuando la puerta se abrió. — ¿estás bien? -dio un par de pasos adelante.

 

—      ¿mamá? Creí que dormías…es tarde.

 

—      Bueno…lo estaría, de no ser porque mi pequeña tiene una expresión triste. -caminó hasta acercarse a donde yo estaba, tomó uno de los cojines y se sentó a mi lado. — ¿Qué ocurre?

 

—      …supongo que a ti no se te escapa nada -bromee.

 

—       Y menos si se trata de ti. -me dedicó una cálida sonrisa.

 

—      Mamá… ¿alguna vez has sentido que perdiste tu propósito en la vida? -dije en un tono un poco más bajo.

—      ¿qué pasa cariño? ¿tienes problemas para escribir tu libro? sabes, es normal tener bloqueos, y no servirá que te agobies más con eso, lo que necesitas es relajarte un poco.

 

Guardé silencio, su suposición no era errónea del todo, pero...había algo más, algo más en el fondo. Algo que me estrujaba el pecho...que me dejaba sin aliento.

 

—       Cariño esto es…por lo que paso con… -guardó silencio antes de terminar la oración.

 

—      Te mentiría si te dijera no…Mamá... No puedo dejarla ir…tengo miedo…no quiero que ella quede en el olvido…

 

—      Cariño…sé lo difícil que debe ser esto para ti. Y te juro que me parte el alma verte de esta manera…pero estoy segura de que ella se pondría triste si te viera de esta manera. -acarició mi cabello. — ¿sabes? Puede haber recuerdos maravillosos…pero tenerlos por obsesión…no es sano cariño. No estoy diciendo que la olvides…incluso si lo haces tu corazón no sanará. Debes poner los pies firmemente en el suelo y confrontar la realidad. Debes seguir adelante…hay tantas cosas que debes vivir aún. No puedes vivir en el pasado por siempre. Debes mirar hacia el frente…

 

—      Mamá …yo…

 

—      Se que…lo harás cuando estés lista. -me atrajo hacia ella y me abrazó. No podría explicar la calma que me hizo sentir. Me aferré a ella tanto como pude mientras mis lágrimas comenzaron a brotar.

 

—      Calma cariño…sé que sabrás hacer lo correcto. -siguió acariciando mi cabello hasta que me calme un poco.

 

—      ¿mamá?

 

—      ¿si cariño?

—      Tú…tú crees que yo sea capaz de…¿volverme a enamorar?

 

—      Cariño…no tengo duda alguna de que será así. Se que hay alguien allá afuera esperando por ti. Alguien que te hará querer vivir nuevamente. Alguien que te complemente. -besó mi mejilla y se apartó lentamente de mí.

 

—      y si… ¿le hago daño? -me mordí el labio con culpabilidad.

 

—      puede que las cosas no sean sencillas, pero...si ambas sienten lo mismo, estoy segura de que sabrán enfrentarse a las adversidades.

 

—      ...gracias, mamá -sonreí ligeramente. Mis párpados comenzaban a pesar. Había sido un día cansado también para mí.

 

—      bueno, deberías ir a la cama ahora. -se levantó y caminó hacia la puerta. -también espero que la próxima vez que nos visites sea en compañía de la bella jovencita por la que te estas preocupando ahora mismo -me guiño un ojo y salió de mi habitación cerrando la puerta detrás de ella.

 

Apenas me tumbé en la cama mis ojos se cerraron, caí en un sueño profundo y un poco confuso, a decir verdad, los recuerdos que vinieron a mi estaban mezclados, no tenían mucho sentido, Rouxi estaba allí...Mad, mis padres...y Ali también.

De un instante a otro pasaba de estar en casa con Rouxi a estar paseando por la playa con Ali.

 

A la mañana siguiente desperté temprano, tenía un mensaje de Ali en el cual me daba los buenos días y me deseaba un lindo día. Me mandó una foto también, la abrí con algo de precaución después de recordar la foto de anoche, esta vez estaba bebiendo su café y a punto de desayunar. Yo en cambio le envié una donde seguía acostada. Después de intercambiar algunos mensajes la deje para que se concentrara en el trabajo.

 

Me di una ducha rápida y bajé para desayunar con mis padres. Después del desayuno ayude a papa un rato en su taller. Después salí para dar una vuelta por los alrededores. Me tope con Val y me invito a tomar un café. Acepte cortes mente, aunque yo ya tenía planeado pagar la cuenta. Me llevo a una pequeña cafetería, era bastante acogedora y tranquila. Elegimos una de las mesas del fondo.

 

—y … ¿Cómo es vivir en Nueva York? -preguntó mientras probaba su bebida.

 

—mm bueno…a decir verdad es un lugar de locos jaja, la gente siempre va de un lado a otro como locos. Los metros siempre están llenos, las calles…edificios enormes…literalmente, una ciudad que nunca duerme jaja. Comparado a eso, estando aquí me siento en la gloria.

 

—ohh…me gustaría ir allí alguna vez -dijo emocionada.

 

—bueno, estoy segura de que, si se lo pides, Mad estaría encantado de llevarte allí.

 

—tu… ¿tú no vives allí? -pregunto levemente sonrojada para evadir el tema de Mad.

 

—mmm…bueno es algo complicado…-medite un momento. -cuando me fui de aquí, me mude a Nueva York debido al trabajo, después pasaron algunas cosas y me mude a Boston -le di un sorbo a mi café. -después pasaron un par de cosas más…y creo que volveré a Nueva York en unos días.

 

—vaya…me encantaría una vida así…pero, me temo que eso deberá quedarse solo en un sueño -suspiró.

 

—¿Por qué? ¿Por qué no lo intentas?

 

—¿el que…? -me miró confundida.

 

—¡salir de aquí! ¡Aventurarte! ¡Hacer cosas nuevas! -le dije emocionada.

 

—jaja gracias, Alex -sonrió. -pero aún hay algunas cosas que debo hacer aquí.

 

—oh bueno…en ese caso, asegúrate de visitarme cuando vayas allá.

 

—seguro -me sonrió de manera dulce. -por cierto, he visto algunas cosas sobre ti en las noticias y me dio curiosidad.

 

—a-ah… ¿sí? ¿Cómo que cosas? Jaja -reí algo avergonzada.

 

—ah…bueno, han estado anunciando su matrimonio con una chica bastante importante en la empresa de la moda.

 

—a-ah…jaja…si, sobre eso -rasque mi mejilla.

 

—debe ser fantástico, tener tanto dinero y lujos…casarte con alguien a quien amas, y eso sin mencionar que hacen una pareja muy linda

 

—¿ah? ¿Cómo sabes eso?

 

—bueno, hay algunas fotos de ustedes dos juntas -sonrió emocionada mientras buscaba en su celular.

Puso la pantalla frente a mí y me mostro unas fotos donde efectivamente estaba con Ali.

—¿pero ¿qué? ¿en qué momento? -me sorprendí al ver una que capturaba el momento en el que la dejé en el aeropuerto. Incluso había una del momento justo en el que Ali me había besado dentro del auto. Mi sangre ardió.

 

—si me permites decírtelo, hacen una maravillosa pareja, ella es tan hermosa y deslumbrante. Estoy segura de que tienen una increíble historia juntas.

 

—si si…no te imaginas cuanto -rasque mi mejilla.

 

—jaja es increíble que ella te haya hecho cambiar tanto.

 

—¿a qué te refieres?

 

—bueno…quiero decir, antes te la pasabas de fiesta en fiesta y eras muy popular con las chicas. Admito que alguna vez me hiciste dudar sobre mi sexualidad jajaja -rio animada.

 

—¡hey! ¿Qué se supone que significa eso? -fingí molestia.

 

 

Después de aquella agradable charla Val volvió a sus actividades. Yo volví a casa para pasar un poco más de tiempo con mis padres.

 

Los dos siguientes días pasaron en un abrir y cerrar de ojos. Ayudaba a papá en el taller, e incluso le di una vuelta en el BMW de Ali. Me presumía con sus amigos cada que tenía la oportunidad. Mamá y sus amigas no paraban de hacerme cumplidos al igual que todos los que me conocían por aquí.

Me tope con Lucas un par de veces más, pero él ni siquiera se atrevió a acercarse. Incluso Mad organizo una cita super romántica con Val. Él me dijo que no estaban saliendo, pero yo no me creí eso. No me sorprendería si me dijera que se mudaría aquí. Estaba feliz por él.

Fueron unos días estupendos, pero era tiempo de volver.

 

—¿de verdad tienen que irse? -pregunto papá mientras me abrazaba.

 

—me temo que si papá, pero vendré en cuanto tenga oportunidad, incluso me plantee la idea de hacer una pequeña pista de carreras aquí. Creo que muchos compartimos ese gusto por la adrenalina y la velocidad.

 

—mm…vale, pero no tardes, la próxima vez que vengas te aplastare en una carrera -dijo emocionado.

 

—jaja, estoy ansiosa. -esta vez mi mamá se acercó para abrazarme.

 

—cuídate mucho cariño…y piensa en lo que te dije ¿de acuerdo?

 

—claro mamá, ustedes también cuídense. Voy a extrañarlos -sonreí.

 

—ah, casi lo olvido -entró a casa y salió con una caja. —llévate esto, son algunos pastelillos que hornee en la mañana. Ya estás muy delgada.

—¡jaja, mamá! -tome los pastelillos.

 

Después de un abrazo subí al coche para esperar a Mad quien aún se encontraba despidiéndose de su madre y de Val.

 

—¿listo? -le pregunte mientras abrochaba mi cinturón.

 

—sip, estoy listo -dijo con una sonrisa en su rostro.

 

—bien, en marcha. -mire una última vez hacia mis padres, respire hondo y encendí el auto.

 

El camino de regreso a casa fue tranquilo, Mad me conto sobre su cita con Val, habían intercambiado números y él se veía emocionado. Estaba feliz por él. Hablamos también de otras cosas al azar, cantamos y reímos como de costumbre. Conduje por un par de horas. Apenas pasaban de las 3 pm cuando llegamos a Boston. Dejé a Mad en su casa y después de ayudarlo a bajar su equipaje me despedí de el con un fuerte abrazo.

 

—¿volverás a Nueva York? -me preguntó con un tono un poco triste.

 

—bueno…ese es el plan -dije mientras me abrazaba a mí misma.

 

—¿estás segura?

 

—…bueno, te mentiría si te dijera que no tengo miedo…pero…creo que es el momento.

 

—estoy muy feliz por ti Alex -volvió a abrazarme. —sabes que estaré aquí para lo que necesites… ¿verdad?

 

—gracias Mad…-me aferre a su cuerpo por un par de segundos más. —debo irme, aún hay algo que debo hacer…-me aparté de él y subí al auto. —te llamare

 

—vale, estaré esperando -me despidió con una sonrisa en su rostro.

 

Unas cuadras más y por fin estaba en casa. El jardín lucía un poco descuidado, había hierbas por todos lados y las plantas lucían marchitas. Deje el auto en mi cochera y baje mi equipaje.

 

—estoy de vuelta…-respire hondo antes de introducir mis llaves en el picaporte. Gire la perilla lentamente y entre despacio. Deje mis maletas en la entrada y camine dentro. Había estado afuera algunos días, pero había polvo por todos lados.

 

—bueno Rouxi…estoy segura de que odiarías que me fuera dejando este desastre -sonreí para mí misma. —bueno…manos a la obra.

 

Busque en el armario de limpieza mi aspiradora, una cubeta y un par de escobas. Encendí el reproductor de música y lo puse en aleatorio. Como una loca por la limpieza comencé a limpiar la parte de debajo de mi casa, sacudí los cuadros de la sala. Ordene los sillones, aspire la alfombra, limpie los floreros, lave los platos sucios de mi cocina, saque la basura, incluso limpie el refrigerador. No tenía caso dejar comida en él. También arregle el jardín, regué las floreas, corte el césped y arranque la hierba.

Limpie mi estudio, el cual se había quedado hecho un desastre. Sacudí los estantes, ordené mi escritorio y cerré con llave la vitrina donde guardaba mi licor.

Una vez limpio subí al segundo piso y repetí mis acciones con la habitación de invitados hasta dejar todo ordenado.

 

—hagamos esto Rouxi…-mi mano temblaba, introduje la llave en el picaporte de la habitación que compartía con Rouxi. Gire lentamente…y entre.

Había algunas cajas regadas por el piso, las cortinas cerradas mantenían el cuarto a oscuras.

 

—ha pasado un tiempo eh…-entré y abrí las cortinas al igual que la ventana para que entrara aire fresco. El sol estaba ocultándose poco a poco. Me senté sobre la cama, mi mano se deslizo sobre el lado en el que ella siempre dormía.

—lamento haber tardado tanto cariño…-una pequeña lagrima se deslizo sobre mi mejilla.

Guarde silencio por un par de minutos más. Decidida me levanté de la cama y comencé a limpiar.

Sacudí los marcos con nuestras fotos y las acomodé sobre el tocador. Abrí las cajas y saqué sus cosas, algo de ropa, pertenencias personales…cosas que le gustaba coleccionar…no lo había pensado hasta ahora, pero…quizá su familia merecía tener estas cosas. Un nudo en mi pecho comenzó a formarse. Sacudí las cosas y las metí nuevamente en las cajas. Abrí el closet para acomodar su ropa y sacar la mía.

 

—¿Rouxi? ¿de verdad estoy haciendo lo correcto? Se que…me pediste que siguiera adelante…y quizá actúe de manera egoísta cuando me lo pediste con tu último aliento…-cerré mis puños y los aprete con fuerza. —pero… ¿de verdad esto es lo correcto? …Ali y yo…siento que tenemos una conexión muy distinta…ni siquiera sé si es amor lo que estamos sintiendo justo ahora… ¿es eso tonto? Lo único que tengo claro…es que no quiero dejarla sola…algo dentro de mi siente que quiere protegerla a toda costa…-termine de guardar su ropa dentro del closet y lo cerré no sin antes tomar entre mis manos su chaqueta favorita. —no tengo ni idea de a donde vamos a terminar…

 

Habían pasado ya un par de horas, el cielo estaba oscuro, mire a mi alrededor para admirar la habitación, al fin estaba ordenada, a excepción claro de mi ropa que había dejado en el suelo y algunas cosas que había decidido llevar de vuelta a Nueva York.

 

—si te soy sincera…si llegué a plantearme el hecho de regresar a Nueva York…pero no pensé que lo haría sola. -con su chaqueta favorita entre mis manos caminé hacia la cama y me senté sobre el lado que ella usaba al dormir. Mi mano se deslizo con gentileza sobre la almohada. Medite en silencio unos minutos, baje a mi estudio rápidamente y tome mi vieja guitarra, intente afinarla en el camino y volví a la habitación, tome asiento sobre la cama nuevamente, respire hondo y comencé a rasguear sobre las cuerdas de manera suave…el sonido envolvió la habitación, poco después los acordes fueron acompañados por mi voz.

 

“desde que tú te has ido las horas no transcurren igual…

El ruido de la ciudad parece molestar demás…

Tu nombre escrito en mi piel…tus besos sobre mi piel

Las tardes que pasamos juntas no se quieren marchar

Y yo no las puedo soltar…

Alucino que a lo lejos yo te veo llegar

…..

Desde que te fuiste las horas no transcurren igual…

Me duele tanto…

Teníamos tanto por hacer…

Si entendieras que te llevaste una gran parte de mi…

Me haces falta…

….”

 

Intente continuar, pero mi voz comenzó a quebrarse.

—…está bien si…lloro una última vez ¿verdad? …-intente mantener una sonrisa en mi rostro, pero esta poco a poco se fue ahogando con mi llanto.

 

—estoy asustada Rouxi…tengo tanto miedo de volver a pasar por lo mismo…no podría soportarlo…-deje la guitarra sobre el suelo y me aferre a su prenda, me recosté sobre la cama. Cientos de recuerdos saltaron frente a mi uno tras otro.

 

No sé en qué momento me quede dormida pero los recuerdos continuaron en forma de un sueño, a la mañana siguiente no podía recordar mucho…solo la linda sonrisa que Rouxi me dedico en ese sueño. Tan cálida como siempre…el nudo en mi estomago había desaparecido casi por completo.

La luz apenas comenzaba a filtrarse por la ventana. Me estire un poco y ordene la cama después de levantarme. Me dirigí al baño para tomar una ducha. Al salir me cambie y guarde el resto de mis cosas en un par de maletas más. Decidí que llevaría la guitarra también, la guarde en el estuche lista para cuando debiera irme.

Coloque la última foto que me tome con ella sobre el tocador. Y frente al marco la copia de la llave del departamento que compartíamos en Nueva York.

Cerré la ventana de la habitación y di un último vistazo antes de salir y cerrar la puerta.

Baje las escaleras con el resto de mis maletas.

Apenas pasaban de las 7, con la casa limpia y ordenada subí las maletas al auto. Entre a casa una última vez, respiré hondo y cerré la puerta detrás de mí.

Saque el auto del garaje y lo estacione sobre la calle. Cerré el portón de mi casa y subí al auto. Di un vistazo rápido hacia la casa. Aprete con algo de fuerza el volante, pero sonreí, mama tenía razón…no podía aferrarme a las cosas hasta que me hicieran daño…recordaría los buenos momentos y los guardaría.

Encendí el auto y comencé a conducir, iba directamente hacia el cementerio. Compré el ramo de rosas más grande que pude encontrar en el camino. Conduje por unos 15 minutos y me estacioné frente a un portón enorme.

Baje del auto con el ramo entre mis manos. Acomodé el cuello de mi camisa y di pasos firmes hacia adentro.

Me sabia el camino de memoria, camine en silencio hasta una lápida de mármol. Con el nombre de mi amada. Me incline despacio. Mi rodilla izquierda se clavó sobre el suelo. Los rayos del sol alumbraban cálidamente el lugar.

—hola, cariño…pase por la casa y…hice algunos arreglos, espero que sean de tu agrado, la verdad es que me canse bastante -sonreí de lado. —Limpie la habitación también…y…ah, mira, te traje esto, sé que son tus favoritas -acomode las rosas dentro de los floreros que adornaban la tumba. —pensé que…tal vez debería llamar a tu madre para que…recoja algunas de tus cosas, creo que…fui demasiado egoísta al quedarme con todo…aunque creo que aún no estoy lista para verla a la cara…quisa Mad deba encargarse de eso después -rasque mi mejilla. —¿sabes? Conocí a alguien…-me acomodé mejor sobre mi lugar sentándome sobre el suelo y cruzando mis piernas. —lo cierto es…que la conocí de una manera bastante extraña…ella en si es alguien extraña jaja -bromeé. —nunca se lo que pasa por su cabeza. Pero…aun así es una chica bastante dulce…loca sin dudas, pero dulce…me saca de quicio también, pero al mismo tiempo…me hace querer protegerla de todos los idiotas que la rodean -reí por lo bajo. —creo que…debo descubrir que es todo esto que me hace sentir…creo que…es momento de seguir adelante…-sonreí con un poco de dolor. —tu siempre serás mi más grande amor Rouxi…de eso no hay duda…y no sé qué pasara conmigo mañana…o la semana que viene… o en un par de años. Pero…esto no es un adiós…sino un hasta luego -acaricie la placa con su nombre. —muchas gracias por…todos esos momentos que compartimos…por las risas…las caricias…las lágrimas…simplemente gracias por…haber permanecido a mi lado…te amo Rouxi…-me levante del suelo. —debo irme ahora ¿de acuerdo? -guarde silencio un momento y camine fuera del cementerio. Subí al auto y revisé mi celular. Eran las 9, mi estomago rugió haciéndome recordar que aún no había desayunado.

Conduje inconscientemente hasta llegar a la cafetería en la que trabajaba Nicole.

 

—¿hola? -tome asiento en una de las mesas de adentro. —¿hay alguien aquí? -mire a mi alrededor, pero el lugar estaba vacío.

—¡ah…! ¡Un momento por favor…! -escuche una voz proveniente de la cocina. Me levante un poco alarmada de mi asiento al escuchar un fuerte golpe.

—… ¡hey! ¿estás bien? -rodee la barra donde preparaban el café y gire la perilla de la puerta de la habitación en la que había escuchado el golpe. —¿Qué fue eso…? Ah… -me acerque apresurada a la joven que se encontraba en el suelo cubierta de harina y sobando su cabeza. —¿estás bien? -la ayude a levantarse.

—ouch…ah…si esto no es nada… ¡ah…! -se apartó de mi algo sorprendida. —¿alex? ¿eres tú? ¿o me golpee muy fuerte la cabeza?

—jaja… ¿de qué hablas? Claro que soy yo…aunque no se si tú eres Nicole o un fantasma jaja -reí al verla toda cubierta de harina.

—ah…oye, que cruel eres -busco un paño para limpiarse la cara.

—¿estás bien? fue un gran golpe…

—ah sí…solo intente alcanzar una de las cacerolas de allí -señalo una de las repisas. —le he dicho a mi hermana millones de veces que no las coloque ahí -suspiró. —pero… ¿Qué te trae por aquí? Creí que aun estabas en Nueva York.

—mm…bueno visité a mis padres y vine a Boston ya que me quedaba de paso…además aún no he desayunado y pensé que un trazo de pastel y un buen café serian perfectos. -sonreí.

—ah, por su puesto mm…porque no vas y te sientas y en un momento estaré allí -me empujo fuera de la habitación algo emocionada.

 

Volví a mi asiento para esperarla y tal como dijo, unos minutos más tarde volvió sosteniendo una charola.

—disculpa el desorden, mi hermana salió temprano y me dejo aquí sola -coloco una taza de café humeante frente a mí y un par de platos con pastel sobre la mesa.

—¿vine en mal momento…? -pregunté mientras la miraba sentarse frente a mí.

—no no, claro que no -sonrió animada. —puedes venir en cualquier momento jaja, anda anda, si no lo bebes se va a enfriar -señalo el café y después comenzó a comer su trazo de pastel.

—es delicioso…-suspire después de saborear mi café.

—me alegra saber que estas mejor -me miró fijamente por unos segundos.

—¿Qué? ¿Cómo…?

—te vez diferente…

—¿y eso es bueno?

—claro que lo es -me apunto con su cuchara. —a propósito…pudiste enviarme un mensaje, habría preparado más pastel…

—ah…sobre eso…-rasque mi mejilla.

—¿bromeas? Dame tu teléfono jajaja -extendió su mano frente a mí y le entregue el aparato.

—¿Qué haces?

—shh...-tecleo un par de cosas sobre la pantalla. —toma -me regreso el aparato. —si sabes usarlo ¿verdad? Seleccionas mi nombre y escribes un mensaje jaja -bromeo.

—hey…lo siento…pasaron algunas cosas y…

—tranquila, entiendo, solo asegúrate de enviarme algún mensaje después -siguió comiendo su pastel de manera tranquila.

 

Charlamos tranquilas, bromeamos y me conto más sobre ella. Sobre las cosas que le gustaban…sobre las cosas que le gustarían hacer. Ella sin duda era muy distinta a mí, la energía que emanaba de ella…era otra cosa totalmente diferente comparada con la mía.

 

—Y entonces mi hermana de repente….

 

—ah…disculpa -mi celular estaba sonando. —debo atender esta llamada -le explique a Nicole al ver el nombre de Alisson en la pantalla de mi celular.

—ah…claro adelante -sonrió animadamente.

 

—¿hola? -me aleje un poco de donde estaba Nicole.

<<vaya, creí que jamás contestarias jaja>>

—¿Qué dices? Ni siquiera tarde tanto, exageras jaja

<<¿interrumpí algo?>>

—no, tranquila, solo desayunaba algo

<<oh, vale, me alegra escuchar eso. Me pediste que te llamara cuando terminara mi trabajo aquí y bueno…>>

—claro claro, no sé nada de ti en un par de días y ahora me llamas -fingí estar molesta.

<<¡ah…! Bueno sobre eso…estaba un poco ocupada y creí que lo mejor sería no molestarte…y>>

—Ali, solo bromeo. ¿volverás ya a Nueva York?

<a veces eres muy mala ¿sabias? -guardó silencio un momento. -tomé mi vuelo esta mañana>

—Ali…te pedí que me llamaras antes de tomar tu avión de regreso…

<<tranquila, aun me quedan unas 4 hrs de viaje, tienes tiempo perfecto para despedirte de tu amante y llegar al aeropuerto para recogerme -bromeó->>

—¿sí? Bueno, no es como si me tuviera muy preocupada ese asunto jaja

<<¿de verdad estas con tu amante? Debí decirle a James que…>>

—¿Qué me siguiera? Tranquila…eso no será necesario. Saldré ahora mismo, te veré en el aeropuerto ¿vale?

<estare esperando...conduce con cuidado.>

 

Después de colgar regrese a donde estaba Nicole, le explique qué debía irme.

—oh, seguro…no te preocupes por la cuenta, yo invito.

—no no, claro que no, dime cuanto te debo -busque mi cartera.

—en serio, yo invito, en serio me alegra ver que estas mejor -dijo mientras recogía las cosas de la mesa.

—gracias, Nicole…espero verte pronto.

—tranquila, estoy segura de que será así -colocó las cosas sobre una charola. —espero que tengas un buen viaje de regreso.

—gracias…-sonreí algo tímida y Sali del lugar.

 

Una vez mas dentro del auto le envié un mensaje rápido a Mad para avisarle que regresaría a Nueva York. Encendí el auto y me puse en marcha, tenia 4 horas de viaje por delante y no lo lograría sin música. Pulse aleatorio en el reproductor y ahora si estaba lista.

 

Continuara….

Notas finales:

¿un giro interesante verdad? :o ¿que les parecio? no sean timidos, haganmelo saber en los comentarios...los leo con mucho gusto 7w7


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).