Heechul estaba bastante seguro de que nunca se había sonrojado tanto en su vida hasta que conoció a Seung di'Lehr.
- Estoy de acuerdo en que este problema es altamente inconveniente - dijo Heechul, con toda la dignidad que pudo reunir. - Pero lo que estás sugiriendo es... impensable. Tal vez sea diferente en Tai'Lehr, pero aquí en Calluvia, las fusiones telepáticas se consideran más íntimas que... Las relaciones sexuales.
La boca de Seung se contrajo.
- Creo que es la primera vez que escucho a alguien decir "relaciones sexuales."
Cuando Heechul lo miró, dejó caer su sonrisa, la diversión se desvaneció de sus ojos.
- La opinión sobre las fusiones telepáticas no es tan diferente en Tai'Lehr. Las personas generalmente lo hacen solo con personas en las que confían, el riesgo de dañar a su pareja es realmente mayor, porque somos telépatas más capaces que ustedes los calluvianos.
- Entonces, ¿Por qué sugieres esto?
- ¿Sabes por qué?
Dijo Seung en voz baja, encontrando la mirada de Heechul y sosteniéndola, el aire entre ellos se espesaba con el anhelo ya familiar de la cercanía.
El estómago de Heechul se apretó.
- Esto es demasiado fuerte para que lo ignoremos - dijo Seung, dando un paso más cerca. - No sé sobre ti, pero realmente no estoy bien con darte chupetones, Alteza.
- Ciertamente tampoco estoy bien con eso - dijo Heechul, con la cara cálida. - Pero yo amaba mucho a mi marido y la idea de ese tipo de intimidad con otro hombre me repugna.
- Tu marido está muerto - dijo Seung rotundamente. - A él no le importa.
Heechul lo fulminó con la mirada. Seung parecía impasible.
- Solo va a empeorar, Su Alteza - Sus labios se torcieron mientras bajaba su mirada al cuello de Heechul. - Ya es bastante malo si te estoy haciendo chupetones. No me atraen los hombres. Esto está jugando con nuestras cabezas.
Heechul se humedeció los labios con la lengua.
- ¿Y realmente crees que una fusión ayudaría?
Seung asintió.
- Debería. En el pasado, cuando tenía un buen Fit con alguien, el tirón se hacía más fácil de ignorar después de una fusión -algo parpadeaba en sus ojos oscuros. Él hizo una mueca. - Por supuesto, nunca ha sido tan malo, pero aún debería funcionar.
Heechul vaciló. No podía negar que era tentador finalmente deshacerse de este anhelo terrible e inapropiado bajo su piel. Pero...
Como si sintiera sus dudas, Seung habló de nuevo.
- Sé que una fusión es muy íntima, pero no tiene que significar nada. Intentaré hacerlo lo más rápido e impersonal que pueda.
Una risa estrangulada dejó la garganta de Heechul.
-¿Puede una fusión telepática ser impersonal?
-Tendremos que intentarlo y averiguarlo - dijo Seung, encogiéndose de hombros un poco. Su voz se convirtió en un ronco murmullo. - ¿Me lo permites? ¿Me dejas dentro de ti? Sólo una vez.
El calor tiró en la boca del estómago de Heechul. Ignorando la voz en el fondo de su mente gritando que estaba cometiendo un error, Heechul asintió aturdido.
Las fosas nasales de Seung se ensancharon.
Por un momento, solo se miraron el uno al otro. Entonces la gran mano de Seung acunó la cabeza de Heechul, su pulgar presionando contra su punto telepático.
Un sonido sin aliento salió de los labios de Heechul, su mundo entero se estrechó hacia esa mano y esos ojos negros. El calor se filtraba en sus sentidos, lentamente, muy lentamente, una sensación como ninguna otra que se extendía por su cuerpo.
Podía sentir otra presencia entrando en él, y todo en él se extendía con avidez, tratando de profundizarlo, tragarlo.
Alguien dejó escapar un gemido sin aliento, pero Heechul no estaba seguro de cuál de ellos era. Sentía... se sentía terrible y terriblemente bien, la intensidad de la conexión, tanto aterradora como perfecta a la vez. Todavía no era suficiente. Quería más.
- “Más profundo.”
- “Eso sería... imprudente, Su Alteza.”
La voz mental de Seung era baja y suave, mucho más cálida que la real.
- “Más adentro.”
Seung obedeció, deslizándose más profundo dentro de él, pasando las capas superiores de su mente, hacia su núcleo telepático. Parecía distraído ahora, molesto por algo. Gracias a su profunda conexión, a Heechul solo le llevó un momento darse cuenta de lo que le estaba molestando: su vínculo con Eddie, o más bien, los restos aún retorcían el núcleo telepático de Heechul.
- “Esa cosa es vil.”
Seung se acercó a ella.
- “No lo hagas.”
- “Te das cuenta de que está limitando tu telepatía, ¿Verdad?”
- “Ambos sabemos que no es la razón por la que quieres eliminarla.”
Una llamarada de irritación vino del otro hombre, pero Seung apenas podía negarlo, no cuando Heechul podía sentir sus pensamientos casi tan claramente como los suyos.
La presencia de Seung se envolvió más fuerte alrededor de él, algo cruel y posesivo al respecto. Heechul probablemente debería haber estado molesto por eso, incluso enfadado, pero era difícil sentirse molesto por esta exhibición inapropiada de posesividad cuando se sentía tan bien, sus nervios cantaban con placer.
Solo podía arrastrar a Seung más profundo dentro de él, sintiendo su placer de respuesta mientras se envolvían más y más fuerte el uno alrededor del otro.
Cielos... Si Heechul pensó que se estaba ahogando antes, no conocía una palabra para este sentimiento.
La felicidad pura llenó su mente hasta el borde, cada sensación compartida entre ellos en todos los niveles posibles, una conexión tan absoluta que tuvo problemas para decir dónde terminó él y comenzó Seung.
Nunca se había sentido más cerca de otra persona. Podía sentir el corazón de Seung latiendo, podía sentir el placer recorriendo el cuerpo de Seung casi tan vívidamente como él sentía el suyo.
Se sentía tan bien como el sexo.
Ese pensamiento hizo que Heechul se imaginara hacer esto durante el sexo, y él se estremeció, imaginando que sus cuerpos estaban conectados tan íntimamente como sus mentes estaban ahora.
- “Deja de pensar en el sexo, cariño. Es raro.”
En cualquier otra circunstancia, Heechul habría sido humillado.
Pero con sus mentes tan profundamente entrelazadas, era imposible que existiera alguna incomodidad entre ellos. Se sentían casi como una sola persona.
- “No es que te culpe - le dijo Seung, sus pensamientos mezclados con una suave diversión. - Sé que no puedes evitarlo. Siempre tuve sexo con mujeres con las que me fusioné. Es natural mezclar el placer mental con el físico - se sentía como si estuviera sonriendo. - Dicho esto, te agradecería si pudieras dejar de pensar en mi polla. Es un poco raro. No tengo relaciones sexuales con hombres.”
- “Todavía está acariciando tu ego.”
Si hubieran tenido esta conversación fuera de la fusión, Heechul se habría sentido mortificado. Pero tales preocupaciones parecían tan distantes e irrelevantes en este momento.
- “Por supuesto que sí. Te lo dije: eres muy bonito, para ser un hombre. Es muy halagador.”
- “Deja de llamarme bonito. No me gusta.”
Una risa.
- “Cariño, estoy tan dentro de ti que puedo sentir lo que realmente sientes y no es una ofensa.”
- “Cállate.”
- No quieres que me calle.
- “Sal de mi cabeza.”
- “Tampoco quieres eso.”
Heechul se centró en lo que Seung estaba sintiendo y dijo secamente:
- “Y crees que tengo la mente más hermosa en la que hayas estado.”
Pero si pensaba que eso avergonzaría a Seung, parecía que estaba muy equivocado.
- “Lo haces, pero sería más hermoso sin esta cosa fea.”
Dijo Seung, empujando los restos de su vínculo con Eddie.
- “Tu posesividad es tan desconcertante como inapropiada.”
- “Es la fusión. No soy responsable de sentirme de esta manera.”
- “Conveniente.”
Dijo Heechul.
- “Es la verdad. Una fusión exitosa hace que las personas se sientan mucho más cercanas de lo que están fuera de ella. Así como no querrías tener sexo conmigo en la vida real, una vez que terminemos la fusión, dejaré de querer de quitar el vínculo de otro hombre de tu mente. Es la fusión, no nosotros.”
Heechul tuvo que admitir que tenía razón. Todo era demasiado intenso dentro de la fusión, cada sentimiento amplificado hasta un extremo.