__Noooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooo!!!!!!!!!!!!!!!!!
Aiorios se sentó de repente a medida que el grito salia por su garganta. Saga lo miro y no dijo absolutamente nada. Seguro que había tenido un mal sueño. Aun tenida la respiración agitada y a juzgar porque miraba a todos lados mientras se frotaba los ojos y revolvía sus cabellos, también estaba un poco desorientado. Después de unos segundos decidió hablarle para apresurar su calma.
__Saga: Sin importar que haya sido, solo fue un sueño__Aiorios se dio vuelta y lo miro a los ojos apenas escucho su voz. Su mirada lo decía todo, estaba triste y un poco asustado pero siendo quien era, como siempre, esa mirada solo duro unos segundos y fue reemplazada por una media sonrisa.
__Aiorios: Si, lo se. Fue un sueño muy feo, mas bien extraño. Nunca sueño. No se porque de repente me pasan estas cosas.
__Saga: Solo un sueño de siesta. Cuando duermes a la siesta el sueño no es tan profundo y tiendes a recordar las actividades de tu cerebro. Recuerda que soñar soñamos todos y todas las noches.
__Aiorios: Si, es verdad. Eso me recuerda porque no suelo dormir siestas. Estas nunca me sientan bien.
__Saga: vamos...no pudo haber sido tan malo__Mientras hablaba cerro el libro dándolo por finalizado y se levanto a guardarlo en una de las estanterías que adornaban el lugar. Aiorios lo siguió con la vista y después de una breve pauso le respondió.
__Aiorios: soñé que me eras infiel con Shaka y que yo los sorprendía en su habitación. Me sentía tan triste e impotente que solo atine a salir del santuario lo mas pronto posible, pero cuando llegué al segundo templo, Alderaban me detuvo y se dio cuenta que algo malo me estaba pasando y me abrazo mientras me consolaba. Luego empezó a besarme y yo lo dejaba hacer sin mover sin quiera un musculo. Me levanto en sus brazos y me llevo a la cama donde empezó a desnudarme y de repente, se baja los pantalones y me voltea en la cama poniéndome en cuatro y justo cuando estaba por hacerlo...¡Zass!! Desperté...
__Saga: no es para menos...yo también hubiese despertado justo en ese momento...
Saga había vuelto a sentarse en el sillón y abrazo a su pareja, quien mientras reía por su ultimo comentario, le devolvió el abrazo apoyando la cabeza sobre su pecho. Se recostaron nuevamente y acomodándose para permanecer abrazados ambos se quedaron dormidos.
Por otra parte, en el templo de Leo, Aioria se había resignado al desorden. Mientras estuviese Kanon con él seria imposible limpiar, así que lo mejor era unirse si no podía vencerlo. Ya había pasado un buen rato desde que las peleas ficticias en el Mortal Kombat eran el único interés de la pareja.
Sin darse cuenta si quiera de la presencia del escorpión, jugaban a la medida que soltaban improperios el uno al otro. Milo se acercó a ellos y viendo lo que hacían se acomodo en el sofá y comenzó a soltar sus opiniones.
__Milo: ese golpe era muy simple de esquivar gato. Kanon se esta aprovechando bastante de tu ingenuidad por lo visto...
__Aioria: cállate Milo!!
__Kanon: a propósito bicho...no tienes nada mejor que hacer?
__Milo: nop, los días libres apestan. Camus no hace mas que leer y todos nosotros nos ocupamos de dar vueltas y mas vueltas. Agáchate Aioria!! No sabes con que botón se cubre tu personaje?
__Aioria: que te calles he dicho!! O mejor lárgate, no me interesa que opines sobre mi fantástica forma de jugar!!
__Milo: fantástica? No ves que no has podido ganar ni una sola partida desde que llegue?
__Aioria: Que no te metas!!!
__Milo: admítelo!! eres pésimo!!!
__Kanon: ya basta los dos!! O reparto boletos!!
__Milo: atrévete si puedes!!
Kanon soltó el mando y se levanto rápidamente a medida que estiraba el brazo para agarrar a Milo, quien se hecho hacia atrás de puro reflejo. Automáticamente salio corriendo del Templo del león pero ninguno de los dos que quedaron lo siguieron. Volvieron al juego con una sonrisa en sus labios, después de todo el molesto bicho ya se había ido...