Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Parte de él... por Shima_Suzuki

[Reviews - 10]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Cuando llegaron al castillo este estaba vacío, tanto Tanaka como las sirvientas estaban en el festival, solo los guardias se habían quedado para evitar que desconocidos entraran al castillo, pero al ver que era el príncipe y el joven Kouyou los dejaron pasar de inmediato, más aún porque venían mojados y el aire se sentía frio.

Todo estaba obscuro, pero gracias a la luz de la luna que atravesaba las ventanas se podía ver más o menos bien. Pasaron por el salón principal hasta llegar a las escaleras para ir a las habitaciones, más específico a la habitación del príncipe.

—Primero tomaremos un baño ¿bien?

Kouyou solo asintió con la cabeza, entraron al cuarto, Akira se aseguró de cerrar con seguro la puerta, luego camino al baño y abrió las llaves para que saliera el agua.

—La caldera está apagada así que tendrá que ser con agua fría…

— ¿Y porque no le pides a uno de los guardias que prenda la caldera?

—Ah…—sonrió, no se le había ocurrido—Ya vuelvo, deja que se llene a la mitad y después abres la otra llave ¿bien?

—Si—sonrió y se apoyó en la puerta, Akira se acercó, dejo un corto beso y después de quitar el seguro salió de la habitación.

Kouyou suspiro y se sentó en el borde de la tina comenzando a jugar con el agua que iba un poco más debajo de la mitad, no sabía cómo actuar ahora, que decirle…el aun sabía que no tenía permitido enamorarse… Yuu solo dijo que había quitado “las partes feas” del contrato, supuso que se refería a el hecho de que si llegaba a desobedecer se convertiría en espuma de mar, pero… ¿desobedecer qué? Si ya no tenía restricción alguna, al menos con el tiempo, él dijo que era libre de hacer lo que quisiera en ese mundo… pero aún no sabía si había quitado o dejado la parte donde se le prohibía enamorarse de un humano, no podía irse ahora y preguntar, menos ahora que Akira se le veía bastante “emocionado” por conocer más de él…

Suspiro con frustración, no sabía que hacer ahora, estaba dudoso en si hacerle caso a su razonamiento o a sus sentimientos. Tampoco sabía cómo actuar en ese momento, se notaba, él podía sentirlo, el deseo sexual que Akira sentía por el…

El apareamiento entre sirenas y tritones no era el mismo que entre humanos, peor aún, entre dos hombres ¿Cómo se hacía eso? Dudas y más dudas se instalaban en su cabeza con cada segundo que pasaba, el agua sobrepaso sus manos y supo que tenía que cerrar la llave.

Cerro la llave cuando llego a la altura indicada y siguió esperando, pronto escucho pasos, la puerta cerrarse y más pasos.

—Ya está, solo hay que esperar un momento a que el agua se caliente. —sonrió.

— ¿Por qué te vez tan agitado?

—Las calderas y los tanques, de donde viene el agua, están arriba, así que tuve que acompañar a un par de guardias para que me ayudaran—se acercó y abrió la otra llave, primero salió fría y después comenzó a entibiarse. Dejo que se llenara y comenzó a desnudarse, Kouyou se sonrojo de nuevo, Akira no solo era guapo, también tenía un muy buen cuerpo…

— ¿Qué esperas? —dijo el príncipe cuando termino de quitarse la camisa.

— ¿Para qué? —pregunto sin entender.

—Para desnudarte—dijo con obviedad.

— ¡¿N-Nos bañaremos juntos?! —dijo escandalizado y ahora con más pena que antes, lo cual solo hizo que el príncipe se riera, le daba ternura y más porque se estaba cubriendo la cara.

—Obviamente, te dije que tomaríamos un baño Shima.

—Ay…—se cubrió el rostro.

—Tu sí que eres tímido para algunas cosas—rio un poco y se quitó los pantalones.

—C-Cállate…—se escuchó amortiguado pues aún tenía la cara cubierta.

El pelinegro se terminó de desnudar y entro a la tina, ya estaba a la temperatura adecuada así que cerró la llave.

—Bueno, ya estoy dentro, solo faltas tú…

Kouyou abrió un poco sus dedos para ver y en efecto, Akira ya estaba sumergido en el agua, tomando una barra de jabón para poder lavarse adecuadamente.

— ¿Qué esperas? —sonrió.

Kouyou se levantó del borde de la tina y comenzó a quitarse la ropa, todo bajo la atenta mirada de Akira, el cual se veía ansioso por ver más piel ajena, el castaño estaba avergonzado, de verdad estaba muy apenado de estarse desnudando frente al príncipe.

— ¿P-Podrías dejar de mirarme así? —dijo cuándo la camisa ya estaba fuera de su cuerpo.

— ¿Eh?

—Date vuelta por favor…

—Bien, bien—rio un poco y se giró.

Kouyou termino de desnudarse rápido y entro al agua.

— ¿Ya puedo ver?

—Si… ya.

El príncipe se volteó y sonrió al verlo abrazándose a sí mismo para evitar que lo viera.

—Bueno, pero empieza a bañarte hombre que si no se enfría el agua.

—Sigue tú, yo esperare.

—Hay una barra de jabón atrás de ti, puedes empezar y si te preocupa que vea entonces me volteo.

—Bueno entonces voltéate por favor…

Akira solo se rio, pero hizo lo pedido, así, ambos pudieron lavarse el agua salada del cuerpo, aunque Kouyou también le estuviera dando la espalda, estaba más que seguro que el príncipe volteaba de vez en cuando para mirarlo.

El pelinegro salió primero, tomo una toalla se la amarro en la cadera, tomo otra y se giró hacia Kouyou.

— ¿Ya terminaste?

—Si… cierra los ojos.

—Bien—sonrió y cerró los ojos, Kouyou salió del agua y tomo la toalla que el príncipe le ofrecía. Se cubrió con ella y salió de la tina.

— ¿Ya puedo abrir los ojos?

—Si…—bajo el rostro, presentía lo que venía, no estaba seguro si ocurriría ahora, pero sentía tensión en el ambiente. El pelinegro dejo que el agua se fuera de la tina, se enderezo y miro el nerviosismo del castaño, supo que ya sabía que venía.

—Vamos…

Akira tomo su mano y lo llevo fuera del cuarto de baño, lo sentó en la cama y acaricio su rostro.

— ¿Estas nervioso?

— ¿Tanto se nota?

—Solo un poco—sonrió y fue a su armario, saco un par de pijamas, le extendió una al menor.

— ¿Un pijama?

—No te voy a obligar a nada que no quieras, pero me gustaría que durmieras conmigo si no te molesta—sonrió.

—Yo…no es que no quiera—se sonrojo—Es solo que no sé cómo…

—No es tan difícil…

— ¿Tu ya…? —lo miro sorprendido.

—Por supuesto—sonrió y comenzó a vestirse—claro que fueron cosa de solo una noche, soy hombre, tengo necesidades.

Kouyou lo miro vestirse, no dijo nada y también se vistió, claro que la curiosidad sobre “ese tema” le pico más.

—Y tu… ¿siempre supiste que te gustaban los…hombres?

—Bueno—se sentó a su lado—Al principio si salí con chicas, pero…nunca sentía nada en realidad, me la pasé solo por mucho tiempo, entonces dije ¿si con chicas no funciona con chicos sí? Busque algunas citas de una noche por el pueblo, chicos que recibieron buena paga por ello ya que no se podía decir que el príncipe tenía “esos gustos”, después de un tiempo deje de hacerlo y bueno, después llegaste tú y me dejaste como un idiota enamorado—sonrió.

—Entonces… ¿me amas?

—Mucho.

— ¿Incluso si apenas nos conocemos hace unos meses?

—Creo que eso ayudo a enamorarme—rio un poco—Vienes de una tierra que no conozco, probablemente nunca la conoceré, eres precioso, tu carácter es muy amable y sereno, creo que eres igual de curioso que yo, me gustas, me gustas mucho y creo que con cada día que pasee contigo el gusto se volvió a amor, me entiendes bien…

—Pero no nos conocemos.

—Ahí está el secreto—tomo la mano del castaño y dejo un beso en esta—Déjame conocerte, déjame seguir conociéndote todos los días hasta que nuestras vidas terminen…

Para Kouyou como tritón, la duración de su vida era algo…diferente a los humanos, ya que, al ser una criatura marina y mitológica, magia en cierto punto, su vida se podía prolongar incluso hasta los 300 años.

Y dudaba mucho que Akira pudiera vivir 300 años.

Los humanos envejecían con el tiempo y sabía que, si él se quedaba con Akira en la tierra, muy a pesar de todo el seguía siendo un tritón, el no envejecería al mismo ritmo que el…

—Ya veo…

— ¿Y tú Shima? ¿Sientes algo por mí?

—Siento muchas cosas por ti Akira—acaricio la mano que aun sostenía la suya. —siento tanto, incluso lo que no debería de sentir.

—Entonces… ¿también me amas?

—Lo hago, incluso cuando no debería de hacerlo—sonrió avergonzado.

El príncipe sonrió y se acercó para besarlo, Kouyou no se movió, recibió el beso con gusto llevando una de sus manos al rostro del pelinegro para acariciarlo con cariño.

Akira lo fue empujando a la cama lentamente mientras le besaba con suavidad, el beso era profundo, pero delicado, estaba disfrutando de la boca ajena.

La espalada de Kouyou termino contra el colchón, Akira ya estaba encima bajando su boca por el cuello del castaño mientras iba deshaciéndose de la ropa que apenas se habían puesto. Kouyou sentía una emoción por su cuerpo y pequeñas cosquillas viajar por su espina dorsal hasta la parte baja de su vientre.

Akira termino por quitarle la camiseta del pijama que le había prestado, los besos que hace poco daban en su cuello bajaron por sus clavículas hasta detenerse en su pecho, donde se entretuvo jugando un poco con sus pezones. Inevitablemente un gemido salió de la boca del castaño, esa zona era sensible y no hace mucho el pelinegro lo había descubierto.

El príncipe se entretuvo un rato en esa zona, chupaba, mordía y lamia ese par de bolitas rosas mientras se deleitaba con los gemidos y jadeos que el castaño soltaba debido a sus acciones, Akira también bajo su mano para sentir el miembro del menor, notando la erección en él, sonrió y decidió dejar su pecho en paz, bajando hasta su estómago donde dejo un par de besos, hasta su vientre.

El pantalón de Kouyou termino en el mismo lugar que la camiseta, en el piso al lado de la cama, una de las manos de Akira fue su miembro y la otra a su boca para humedecer sus dedos, el castaño ensalivo tanto como pudo a los 3 intrusos en su boca siendo interrumpido por leves gemidos amortiguados debido a las atenciones en su miembro.

Cuando Akira los sintió lo suficientemente húmedos los sacó de su boca sin dejar de masturbarlo, llevo esa mano entre los glúteos del menor, buscando su entrada. Cuando un dedo se posiciono justo frente a esta, el cuerpo de Kouyou tembló fuerte, se tensó y la respiración le comenzó a fallar, de por sí ya la tenía mal debido a que la masturbación no paraba.

—Relájate, no te tenses o dolerá.

— ¿S-Se supone que eso debe de c-calmarme? —se mordido los labios cuando sintió la mano del pelinegro moverse más rápido.

—Lo siento—rio un poco y se inclinó para poder besarlo sin detener la mano que le masturbaba, Kouyou se abrazó a su cuello, tratando así de aliviar un poco la tensión en su cuerpo. Estar abrazado a Akira de cierta forma lo calmaba.

Y entonces lo sintió, como el primer dedo se hundía en su carne, se separó el beso para soltar un quejido de dolor ¡ardía horrible! ¡DOLÍA horrible! Incluso la erección se le bajo un poco.

—Shh… tranquilo, no lo moveré hasta que tú te sientas listo—hablo suavemente en su oreja, provocándole escalofríos. La mano que le masturbaba de nuevo volvió a hacerlo, haciendo que jadeara fuerte, el dolor y el placer combinados hacían que algo en el reaccionara.

—M-Muévelo…

— ¿Seguro?

—S-Si, lo soportare.

Akira hizo caso, comenzó a mover su dedo lo mejor posible para dilatarlo y así poder meter un segundo para prepararlo mejor, Kouyou siseo de dolor, pero cerro los ojos y aguanto, si lo comparaba con la vez que se cortó uno de los lados de du cola de manera profunda por culpa de la ventana rota, no dolía tanto.

Pronto, un movimiento del pelinegro lo hizo abrir los ojos y soltar un fuerte gemido, estaba tocando un lugar específico en su interior que estaba mandando corrientes eléctricas hacia su miembro, tanto que se corrió, su cuerpo se relajó un momento y Akira aprovecho para meter un tercero y hacer todavía más presión, y lo consiguió, Kouyou arqueo la espalda gimiendo de nuevo.

El príncipe sonrió y comenzó a mover sus dedos haciendo presión en ese lugar, Kouyou aferro una de sus manos a la cobija mientras que la otra se sostenía de Akira, el cual sintió la erección del castaño despertar de nuevo, sonrió y lo mantuvo así hasta que se acostumbrara para poder penetrarlo poco después.

— ¿Estás listo pequeño?

Kouyou apenas y podía pensar con coherencia, simplemente abrió un poco más sus piernas para que Akira se acomodara, y así lo hizo, saco sus dedos, abrió su camisa debido al calor que sentía y bajo sus pantalones para poder posicionarse y penetrarlo…

O eso iba a hacer hasta que escucho como trataban de abrir su puerta…

 

 

 

Fin del capítulo 16

Notas finales:

ya estamos un poquito mas alla de la mitad del fic, solo aviso xD


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).