Las chicas estaban en shock, aun no se podían creer que el hijo de la peor enemiga de su padre, la enemiga del mar entero, que resultó ser hermana de su padre, o sea su tía, era su primo… no entendían el porqué, era imposible que entre sirenas saliera un pulpo… ¿entonces? ¿Eso quería decir que…? Sus pensamientos fueron interrumpidos por las palabras de su padre.
—Antes de que yo fuera el rey, su abuela desterró a mi hermana por ser un pulpo y no una sirena…
— ¿Nuestro abuelo tuvo una amante? —pregunto Yumiko escandalizada siguiendo la teoría que sus pensamientos le terminaron indicando.
— ¡No! No, claro que no…
—La reina en ese entonces—empezó uno de los consejeros—enfermo de gravedad cuando estaba embarazada de su padre el rey, así que se le pidió a una bruja que la curara para que no muriera y por lo tanto el futuro bebé… Fue curada después de que la bruja hiciera su trabajo, pero no solo la curo, implanto una vida más en la reina mezclando a su cría con la sangre real, volviéndola sangre de su sangre para continuar su legado ya que esa mujer era...
— ¿Era?
—La bruja era una Cecaelia… —continuo el rey bajo la atenta mirada de sus hijas—una mujer mitad pulpo que practicaba la brujería curo a mi madre e implanto a una cría hecha por la magia, dado a que una Cecaelia es estéril. De ahí nació mi hermana, la cual fue desterrada cuando cumplió la edad suficiente, no eran tan crueles como para dejar a un bebé a la deriva, ella lo acepto, pero cuando yo tome el poder la regrese a mi lado, era mi hermana después de todo—suspiro y se sentó.
—Cuando el rey la trajo todo mejoro, pasaron muchos años llenos de paz y prosperidad, la magia era de ayuda para el reino, pero…ella nació primero, por lo tanto, ella según la ley, tenía que tomar el trono... —siguió el concejero—el rey y los guardias se lo negaron y la desterraron sin saber que esa mujer había hecho exactamente lo mismo que su madre años atrás…
—Fecundo a una mujer del pueblo cuando estaba embarazada, la mayoría de parejas iban con ella, era también como la curandera del pueblo iban para saber si su bebé estaba bien y que seria. Y de ahí, aprovecho y fecundo a una, manipulo con magia al padre por mucho tiempo para que no dijera nada, hasta que la criatura nació y…nació varón.
—Algo extremadamente raro entre la raza de Cecaelia… y eso solo significa que ese niño es sumamente poderoso ya que al ser varón, él no es estéril—dijo el rey levantándose de su asiento—Podría embarazar a cualquier sirena y podría tener un hijo o hija…—suspiro—yo conserve al niño después de desterrarla, había hecho algo atroz pero el pequeño no tenía la culpa, así que cree el jardín de coral con la magia heredada por el tridente de mi padre y lo mantuve encerrado ahí para mayor seguridad… no podía desterrarlo, matarlo tampoco, solo era un bebé.
—Entonces el que vive en el jardín…el hijo de la bruja del mar… ¿es familia? ¿Familia de sangre?
—Si…—suspiro.
—Si es nuestro primo…entonces a él también le preocuparía Kouyou ¿no? podría ayudar sin pedir algo a cambio ¿no?
—El chico no lo sabe…Nunca se lo dije yo me encargue de su crianza, cuando tuvo suficiente edad fue cuando le dije que él no era de nosotros, que su madre era la gran bruja del mar, le conté todo… le explique todo y le di las cosas que su madre tenía, las cosas que dejo aquí en el castillo, era lo único que tenia de su madre así que se lo di como un acto de bondad para que tuviera un acercamiento con su madre y una oportunidad de tener ese tipo de magia de nuevo en el pueblo pero… aun sabiendo esto el acepto las condiciones que le impuse—cubrió su rostro ya cansado de la situación, era algo pesado para el estar desvelándoles tantas cosas a sus hijas, algo de lo que nunca debieron de enterarse ya que así su vida sería complicada, el peso de la verdad les complicaría todo.
La sala quedo en completo silencio, al final la reunión solo sirvió para desvelar el pasado a las princesas, un pasado del que no debieron enterarse jamás…
Mientras que eso pasaba en el castillo, los guardias seguían buscando y Yuu en esos momentos se encontrada terminando de revisar la herida de Kouyou.
—Parece estar mejor—dijo mientras volvía a poner una capa de ungüento—un par de días más y sanara, podrás nadar libremente—sonrió y acaricio el cabello del castaño.
—Gracias Yuu…—suspiro y se abrazó a uno de los tentáculos del mayor, porque si, Yuu era mayor por bastantes cifras que Kouyou solo que no lo aparentaba, la magia en él lo mantenía mucho más joven de lo que era, su apariencia era como la de un chico de 23 pero Yuu ya tenía 44 años.
Yuu preparo algo de comer, por lo general comía algas, como todo un vegetariano, aunque también de vez en cuando peces se acercaban a su ecosistema y el los casaba y preparaba comida con ellos. Eso estaba haciendo justo ahora, aun con uno de sus tentáculos cerca de la cama debido a que Kouyou lo abrazaba, se dispuso a cocinar para ambos.
Cuando estuvo listo lo sirvió en dos platos y se acercó de regreso a la cama, se sentó a su lado y le acerco el plato al menor.
—Aquí tienes.
—Gracias…—Yuu dejo el plato a su lado, sin dejar de abrazar el tentáculo comenzó a comer estando a un recostado, no podía sentarse, estando acostado tendría una mejor recuperación o eso le había dicho Yuu.
—Ya le tomaste cariño a ese tentáculo ¿no crees? —rio un poco.
—Es suavecito y abrazarle—sonrió abrazándolo más—me ayuda a no pesar mucho en el dolor…
—El ungüento quita el dolor Shima…—acaricio su rostro.
—No me refería a ese…—suspiro.
Yuu se giró y se acercó de nuevo a él.
— ¿Te duele otra cosa, pequeño? —Kouyou solo asintió. — ¿Qué cosa?
—El corazón…—suspiro— Mi padre…me dejo ir al mundo humano una semana al mes durante un año…
—Eso es genial Shima, pero ¿Qué tiene que ver?
—Él quería que me casara con una joven que no conozco y…cuando me casara tendría que irme de aquí, el trato se rompería y yo ya no podría volver a salir, hay muchas cosas allá que no he visto, hay muchas cosas que aun quiero experimentar y…
— ¿Y?
—Alguien allá arriba está esperándome…—sonrió levemente al recordar a Akira.
— ¿Esperándote? —lo miro sin entender.
—Una persona que conocí, le prometí que volvería a verlo, el me ayudó mucho a poder conocer más sobre los humanos, es un humano interesante, es diferente a los demás.
—Eso te da mucha curiosidad supongo. —sonrió, ese chico nunca cambiaría.
—Sí, y ahora no podré seguir investigando, no podré seguir siendo libre…por culpa de mi padre, no quiero irme de aquí, si regreso se acabó todo.
—Por mucho que quiera que te quedes aquí pequeño no puedo ocultarte por siempre, los guardias llevan buscándote desde que desapareciste…—se acercó al caldero y activo el reflejo, podía ver en varios puntos del mar a guardias buscándolo. —Además…
— ¿Además?
—… ¿Cuánto tiempo llevas aquí dentro en el mar?
—Contando hoy, 2 semanas con 2 días…
—Ósea que en 5 días tu… ¿vas a tener piernas no?
Kouyou se quedó quieto, el proceso de transformación pasaba en el momento en que salía del agua, o al menos eso fue lo que paso en la primera ocasión ¿y si no estaba afuera del agua cuando el proceso empezara? Su cuerpo perdía las branquias y las membranas en sus manos, su cola se secaba y cambiaba a dos piernas, sus pulmones comenzaban a funcionar con el oxígeno del aire…pero todo eso pasaba estando ya afuera ¿pasaría de todos modos si estaba dentro del agua?
—Si…—se abrazó más al tentáculo—me convertiré en un humano en 5 días.
— ¿Y eso puede pasar dentro del agua?
—No lo sé… pero no estoy dispuesto a quedarme aquí y averiguarlo…
— ¿Tienes algún plan?
—Algo así… ¿Cuánto tiempo me falta para que termine de curarse esto?
—Tal vez unos dos días más…
—El contrato que firme está en la oficina de mi padre.
—Aja…—lo miro sin entender.
— ¿Crees que podrías traerlo para analizar su magia y… cambiar los términos?
Por un momento ninguno dijo nada. Kouyou le estaba entregando en bandeja de plata la oportunidad de analizar la magia del tridente, algo que según lo que los guardias le contaban, su madre nunca pudo.
—N-No estoy seguro, pero…creo que podría hacer algo… no te prometo nada Shima.
—Pero podrías intentarlo ¿no?
—Si—sonrió—espera aquí.
Yuu se levantó de la cama y fue al caldero, quito el reflejo y tomo otro libro, dijo algo en una lengua extraña y tomo un chuchillo que estaba cerca, pincho su dedo y lo hundió rápido en el líquido de mayor densidad que había en el caldero, comenzó a brillar al recibir la sangre mágica heredada de la madre, con eso, todos los sirvientes de la bruja del mar le obedecían.
—Necesito que un pulpo vaya a la oficina del rey y saque de sus cajones un contrato, debe de ser una especie de papiro o pergamino mágico, dorado y con tinta especial… búsquenlo y tráiganmelo sin ser vistos.
Poco después el brillo se fue y el regreso a sentarse en la cama.
—Pues ya está…solo queda esperar y ver qué pasa…
—Te agradezco que estés haciendo todo esto por mi Yuu…—sonrió y tomo su mano. Yuu correspondió el agarre y debo un besito en su mano.
—Anda, termina de comer, el pulpo entrara por algún agujero que deje entre el coral y las algas.
—Si—sonrió y continúo comiendo. —No sé cómo voy a pagarte todo lo que haces por mí…
—No es necesario que me pagues nada, no puedo salir de aquí de todas formas—rio un poco.
—Tú no eres como tu madre… ¿Por qué no te dejan salir?
—Tienen miedo que en algún momento enloquezca como ella y trate de gobernar el mar—suspiro—según por lo que se gracias a los libros y lo que los guardias me dicen…mi raza se llama Cecaelia… personas mitad pulpo, todas mujeres con el don de la magia…pero estériles, utilizan a sirenas para implantar a sus embriones creados con sangre y magia y así tener más herederos…la mayoría de esas mujeres son malvadas, lo llevan en la sangre…
—Pero tú eres hombre…y no eres malvado.
—Lo sé, pero ellos temen que me vuelva como ella, al parecer mi madre fue la peor de todas y a la vez la mejor ya que me engendro a mí. Que nazca un Cecaelia hombre es algo muy raro, la magia en ellos se supone que es más poderosa y…no son estériles, por eso es muy importante para mí raza que nazcan varones.
—Tú podrías volver a poblar a tu raza.
—Exacto—sonrió—por eso me tienen encerrado aquí, soy una amenaza—rio un poco.
—No lo eres.
—Para ti no ya que eres un chico—acaricio su rostro—pero para tus hermanas y cualquier chica cerca lo soy, creen que es como un instinto para el macho fecundar y procrear por necesidad de evitar la extinción.
—Como cualquier especie.
—Sí, solo que cualquier especie no es una amenaza potencial.
Se quedaron en silencio un rato, terminaron de comer, Yuu dejo los platos en uno de los estantes que tenía y regreso a acostarse con él.
— ¿Qué haces aquí todo el tiempo Yuu? ¿Con que te entretienes?
—Practicando, leyendo los libros que mi madre dejo aquí, capturando especias con los sirvientes para los hechizos…mejorando mi capacidad mágica más que nada.
—Ya veo…—suspiro soltando el tentáculo, Yuu lo miro sin entender — ¿podrías abrazarme?...
Yuu sonrió, no se iba a negar a eso, se acercó lo suficiente y lo abrazo, Kouyou se escondió en su pecho y trato de mantenerse tranquilo.
— ¿Ellos no vendrán aquí verdad?
—Yo supongo que no… pero ahora que lo pienso, es raro que no vengan a mi como una opción…
— ¿A qué te refieres?
—Tengo el reflejo… con él sería más rápido buscarte que mandar a un montón de guardias a buscarte por todo el mar.
—Es verdad…supongo que tengan sus razones para no recurrir a ti…
—Sería una deuda que tendrían que pagarme, supongo que creen que la cobraría con mi libertad.
— ¿Lo harías?
—Por supuesto, me encantaría salir de esta prisión…ver el mar con mis ojos y no con los de los animales…acompañarte al abismo… cosas así.
—Seria lindo que vinieras conmigo al abismo…
—Sí, seria lindo—dejo un beso en su cabeza.
—Yuu… ¿tú crees que puedas hacer algo en el contrato?
—Mi madre tiene algunas cosas relacionadas con la magia del tridente, no es mucho, pero supongo que podría intentar averiguar cómo manipularla para cambiarla…
— ¿Me lo prometes?
—Te prometo hacer lo mejor que pueda ¿bien?
—Con eso basta—sonrió y se volvió a acurrucar. —descansa…
—Tú descansa, yo tengo que estar al pendiente de los pulpos que mande a robarle a tu padre.
—Cierto—rio un poco y trato de dormir.
Yuu sonrió y se quedó ahí, mirándolo, suspiro y miro el caldero, podía ver a través de los ojos de los pulpos la oficina del rey, estaban ocultos ya que él estaba ahí. Conseguir el pergamino sería difícil ya que el rey por lo general siempre estaba en su oficina, pero si lo conseguía, no solo podría ayudar a Shima, sino que, además, un mundo de posibilidades para su propia magia y fines se abriría…
Fin del capítulo 8.