Madara leyó cada anotación del forense, del hijo mayor de Orochimaru, leer cada una de ella, costó una barbaridad, era terrible ver lo que había pasado con su sobrino.
- Según tu hijo, que cree que pasó –
- Kabuto cree que tu sobrino, si se suicidó – Contestó serio – Pero también creé que alguien, o más de uno, lo orilló a ese momento, además como bien dicen las anotaciones tiene golpes de antes, y heridas en el conducto rectal cicatrizadas, no fue la primera vez que fue violado –
Apretó tanto los nudillos que Madara los tenía blanco, si sus uñas fueran largas como las de un mujer seguramente su palmas sangrarían. Cómo se supone que le dé una noticia así a su hermano, a Mikoto, a Itachi y Sasuke.
- Supongo qué debates qué hacer – Orochimaru lo miró con cierta pena al moreno, estaría en la misma condición si tocaran alguna de sus pequeñas serpientes, como llamaba a sus hijos – Espero, en serio espero que mis hijos no estén en medio de esto, pero si es así y como te dije lo pondré frente a ustedes, siempre y cuando no lo maten –
- Hablas del qué fue novio, tu hijo –
- Mitsuki está en primaria, imposible, Kabuto estaría más interesado en Itachi o en Sasuke que en Charasuke, así que sí, hablo de Kimimaru –
- ¿Podrías hablar con él? –
- Qué joven le dice la verdad a un padre – Dijo con ironía – Pero quizás algún joven puede sacarle la verdad – Insinuó.
- ¿Sasuke? –
- Claro, mi hijo realmente parecía enamorado de tu sobrino –
- Dile que se olvide, le ladra al árbol equivocado – Advirtió – Sasuke entregó su corazón a sus tiernos seis años –
- Es el problema de los Uchiha, su locura por las y los rubios –
- Sí, viene en el ADN –
- Dile a tu familia la verdad, Kabuto no estaba muy feliz por la copia de estos documentos, obviamente no son los originales, pero quizás podrías encontrar a alguien que los robe para no sé, la prensa –
- Eres maquiavélico – Su voz sonaba casi maravillado de respeto.
- Solo soy una pequeña brisa que hace comenzar a girar los molinos, ya es cosa de los molinos si quieren o no seguir haciéndolo –
- Espero nunca ser enemigos –
- Lo mismo digo, solos ayudo, porque me caen bien y porque esa ratita gritona es el nieto de mi más preciado amigo, Jiraiya es a veces un poco idiota, pero jamás quiero verlo sufrir, así que si me prometes que mis hijos estarán fuera de peligro al igual que Naruto, nunca seremos enemigos –
- Jamás dejaría que dañaran a Naruto, ni siquiera Sasuke – Le dio la mano a su nuevo aliado.
- Bien, entonces te daré el contacto de algunas personas que trabajan haciendo aquellos trabajos que nadie quiere hacer –
- Esperaré entonces –
Bajaron ambos del automóvil, limosina, Minato había llegado recién porque también estaba bajando de su auto, junto con Mikoto.
- ¿También te llamaron? – Mikoto parecía un poco mejor que la última vez que la vio.
- Al parecer los críos están fuera de sí en el primer día de clases –
- Sasuke lo está desde hace años – La madre del menor dijo casi como si fuese una anécdota.
- Naruto desde que nació – Dijo cansando Minato – Aunque nunca le había gritado al director Hiruzen – Comentó - ¿Kimimaru también hizo algo? –
- No querido Minato, mi hijo no ha hecho nada aún y espero que sigua así –
Mikoto saludó a Orochimaru lo conocía un poco, muchos negocios con Madara más que con Fugaku pero no pasaba de más allá. Su presencia la incomodaba demasiado.
- Vaya creo que estamos todos –Fugaku llegó junto a Itachi.
Juntos caminaron hacia la dirección muchos de los alumnos miraban a la familia de Charasuke, varios bastante incómodos, más de uno recordaba las risas y burlas hacia Charasuke en ese mismo pasillo.
Sasuke, Naruto y Sai estaban sentados en las escaleras, deberían estar en la rectoría, pero ellos en rebeldía prefirieron esperar en las escaleras, sus amigos de siempre estaban con ellos, tratando de calmarlos.
Mikoto y Fugaku se detuvieron al ver el memorial de su hijo, junto con flores, la mujer apuró el paso, vio las muestras de cariños, veía los ositos de peluches y las notas. Fugaku tomó el ramo de tulipanes junto a una hoja de cedro, lo hizo porque reconoció a quien pertenecía, solo Naruto conocía los gustos más íntimos de su hijo.
La madre de los Uchiha en un arrebato comenzó a botar las cosas del memorial, gritando histérica. Todos miraban a la mujer verla destruyendo ese memorial. Itachi solo quitó la fotografía de su hermano para que su madre botara las cosas.
Sasuke fue hacia su mamá para detenerla, pero Itachi lo detuvo, le hizo una mueca como diciendo déjala ser.
- Hacen un maldito memorial para mi hijo, ahora que está muerto – Gritó – Nadie hizo nada antes por detener ese maldito bullying y ahora colocan su foto, para que los mismos mocosos desgraciados que se rieron de él le coloquen cartitas, esto es una broma cruel –
Naruto caminó hacia Mikoto quien seguía gritando y llorando. Minato observó a Hiruzen mirar desde una distancia prudente con Kurenai. También observó algunos profesores, varios angustiados, otros parecían disfrutar de la situación, su mano golpeó la de Madara, éste le miró, Minato le hizo un gesto para que siguiera su mirada, llegando hacia Danzo Shimura, el entrenador de Beisbol, que parecía casi disfrutar de aquello.
- Tranquila – Naruto abrazó a la mujer con fuerza.
- Mi hijo – Gritó abrazándolo – Se supone que ellos se van después de uno –
- No funciona así – Musitó Naruto – Nadie sabe su hora en este mundo –
Hiruzen interrumpió, pidiendo a los profesores llevarse a los chicos a sus clases, y a alguien de mantenimiento para limpiara el desastre del memorial.
Sasuke y los demás amigos se quedaron en el pasillo, sin ánimos de ir otra clase y el director lo dejó pasar pero dejando en claro que era la primera y última vez que lo permitiría.
Orochimaru fue hablar con Danzo Shimura mientras que los demás padres estaban con el director.
- Pensé que no vendrías a verme – Danzo un hombre de unos cincuenta años de cabellos negros, con algunas cicatrices en el rostro.
- Me llamaste – Orochimaru se sentó frente al entrenador – Sé la razón – Cortó al hombre que iba a hablar – La respuesta es No –
- Deberíamos preguntarle a Kimimaru –
- Dije No –
- Otro padre que no acepta la opinión de su hijo –
- Kabuto es médico, desde que era un pequeño lo supe, Mitsuki es un niño aún, Kimimaru es el único que puede sucederme en la compañía, no me importa su opinión, es lo que yo quiero –
- Lastima, extrañare a tu hijo –
- Busca a otro pitcher –
- Tengo uno en la mira –
Orochimaru enarcó una ceja - ¿Quién? –
- Sasuke Uchiha – Respondió divertido ante la incredulidad de la serpiente – Busqué información de él, es uno muy bueno en Estados Unidos, ya muchas universidades se estaban peleando por él – Le dijo – Al parecer es bastante diferente al bueno para nada del hermano –
- Que no te escuche, puede matarte – Advirtió Orochimaru.
- Por favor es un crío, no le tengo miedo – Se rió sardónico, casi sin dar crédito a las reticencias de Orochimaru.
- Realmente lo investigaste bien – El Hebi lo miró serio y al mismo tiempo divertido.
- Sabes algo –
- Sasuke Uchiha es un joven de diecisiete que ha vivido muchas cosas, entre ellas, casi matar a golpes a dos bully que trataron de aprovecharse de él – Informó – Sasuke no es ajeno al acoso. Este chico es muy inteligente, muy superior por sobre la media, es un chico que creció en un país extranjero, sabe pelear, es un deportista de alto rendimiento, y no teme a ensuciarse las manos, lo que es peor tiene una moral cuestionable y poco ortodoxa – Se levantó arreglando su saco – Si lo vas a reclutar, que no sea de manera poco ortodoxo, si lo haces, lo lamentaras –
- Piensas que fui muy duro con tu hijo – Pregunto un tanto sagaz – Kimimaru ¿se quejó?
- No, por qué Kimi tendría que quejarse, siempre dice lo bueno que eres con él, un excelente entrenador y también está enojado conmigo por sacarlo del equipo –
- Piénsalo, deja ser feliz a tu hijo – Danzo no quería perder a Kimimaru.
- Ya lo dijo, es un No rotundo, sin manera de que vuelva atrás en mi decisión – Sin despedirse salió de ahí.
Danzo Shimura, borró de inmediato la sonrisa de su rostro, molesto hasta no más decir, más que nunca necesitaba que Kimimaru estuviese a su lado.
Orochimaru vio a su hijo sentado solo, a unos metros de la pandilla del finado Charasuke. Kimimaru al verlo se levantó de inmediato y caminó hacia a él.
- Crees que te creyó – Dijo casi asustado.
- Sí – Le sonrió tranquilo – Trata de ser amigo de ellos – Apunto con su cabeza hacia la pandilla.
- No es tan fácil, pertenecía a los “Bully” el año pasado – Dijo con angustia.
- No, tú no lo eras, fuiste arrastrado – Le puso la mano en el hombro con cariño – Busca la manera de hablar con Sasuke o en su defecto con Naruto –
- Namikaze me odia –
- Hijo – Lo llamó – Hazlo –
- Trataré – Acepto al final.
- Iré a hablar con Hiruzen y luego iremos a por tu hermano –
- Te veo más tarde – Se giró para ir a las escaleras.
Orochimaru lo miró unos segundos antes de ir hacia la rectoría, si los Uchiha pensaban que eran los únicos furiosos en ese maldito instituto, estaban muy equivocados.
Naruto miró como el mejor amigo de su abuelo hablaba con su hijo, pensó en él, quizás Kimimaru tampoco la estaba pasando bien, a pesar de todas sus peleas en el pasado. Conocía el amor que le profesó a Charasuke.
Siguiendo su impulso fue a hablarle al chico – Hola –
- Hola – Kimimaru miró a Naruto incomodo de su presencia, lo odió en el pasado, mal que mal él poseía lo que él, Kimimaru, deseaba el amor de Charasuke – Cómo estás – No habían hablando así, sin llegar a las manos en años.
- No muy bien, tú tampoco pareces que lo estés –
- También lo vi – Reveló de pronto - Solo que estaba en la sala a diferencia de ustedes, lo vi, mientras caía –
- Que hacías ahí – Naruto arrugó el ceño, cosa que no pasó desapercibida por Kimimaru.
- Hable con Charasuke esa noche –Volvió a revelar algo más – De hecho tuvimos una pelea – Miró a Naruto quien lo miró inmediatamente con sospecha – Sí, también he pensando si la razón de su muerte seré yo, pero siempre llego a la misma conclusión, sé que no fui yo la razón –
- Cómo puedes estar seguro – Naruto se sentó a su lado, porque se dio cuenta que la conversación sería larga.
- Chara me estimaba, quizás hasta me quería solo un poco, pero seamos honesto, solo era un sustituto, a quien amaba a era a ti, la única persona por la que Chara se mataría si pelearan sería por ti, y obviamente no fue contigo con quien estaba en malos términos – Señaló – Honestamente Namikaze creo que Chara no se mató –
-… – Miró al chico albino, sin emitir palabra, no había mucho qué decir, porque él tampoco creía que Charasuke se matase, era casi imposible que lo hiciera, no había una razón de peso.
- También crees que es imposible que lo hiciera – Kimimaru miró a Naruto un minuto – Puede que haya otra razón, pero no estoy seguro y si es así, decírtelo resultaría peligroso y se te meto en problemas mi padre me mata. Eres el nieto de su mejor amigo –
- Tu padre da miedo – Aceptó con una sonrisita nerviosa de recordar a Orochimaru – Es verdad que dejaras de ser el pitcher – Vio como asentía – Pensé que amabas serlo –
- No más – Jugó con sus manos – Lo que pasó el año pasado, todo es bullying a Chara, ese maldito vídeo, todo eso fue demasiado, además esto tiene que ver más con mi padre, él desea que este con él, en la oficina en mis tiempos libres –
- Sí, es algo obvio, Kabuto médico y Mitsuki es un niño aún, te tocó lo difícil –
- Así es, pero en todo caso, quiero ser el sucesor de mi padre, para Mitsu-chan, pueda hacer lo que deseé –
- Solo tiene cuatro años –
- Mi padre si quisiera lo estaría formando para ser parte de la empresa en el futuro –
- Es solo un bebé aún –
- Sí, lo es, es tan mono en estos momentos, pero seguro tendremos momentos difíciles a causa de él, es el que más se parece a papá –
- Kimimaru, no tienes que estar solo, puedes venir con nosotros –
- Pensé que no te caía bien –
- No es eso – Naruto calló un momento de volver a hablar, para ordenar sus ideas – Realmente nunca me has caído mal, pero Charasuke cuando comenzó a salir contigo me aterré, no por ti, por tus amigos y el equipo de Beisbol, y las cosas no salieron bien, ¿verdad? –
- No, supongo que ahora que soy nada estaré en su línea de fuego –
- Eso es porque Danzo los enviará hacia ti, debe estar furioso por tu padre –
- Lo debe estar – Murmuró – Aún trata de reclutarte –
- Sí, pero prefiero el club de futbol – Sonrió – Además este año, quiero enfocarme en mis estudios – Vio la mirada de Kimimaru de escepticismo – Oye no pongas esa cara, sí, es verdad soy un desastre, pero quiero entrar a una buena universidad –
- Suerte con aquello – Lo dijo muy en serio, porque Naruto era un fiasco en los estudios, siempre llegaba, de los últimos, pero llegaba.
- Mejor deséame éxito – Sonrió al chico.
- Naruto, sé que no es de mi incumbencia, pero sé perfectamente que Sasuke es pitcher, seguramente tratará el viejo de reclutarlo –
- Sí, lo hará –
- Dile que no ingrese al equipo –
- No te preocupes Kimimaru, Sasuke no es Charasuke –
- Lo sé perfectamente – Dijo con dolor – Aún así, el club de beisbol es peligro –
- Hablaré con él – Aceptó al final.
- Hola – Sasuke llegó junto a ellos – Eres Kimimaru, ¿cierto? Charasuke me dijo que fueron novios –
- Sí –
- Lo siento, no tenía tu número, y en verdad no sabía si quería estar en el funeral de Charasuke – Se disculpó por no pensar en él.
- Gracias – Miró a Sasuke, le costaba verlo, era como ver a Charasuke, pero con levemente más alto y el cuerpo más marcado – Pero prefiero recordarlo en vida, no creo que haya podido soportar el funeral –
Todos se quedaron en silencio incómodos todos por distintas razones, Kimimaru porque le perturbaba ver a Sasuke, Naruto porque sentía que el sufrimiento de Kimimaru era su culpa y Sasuke porque no sabía qué decirle al chico que amó a su hermano.
Hiruzen observó a los padres que estaban frente a él, Minato Namikaze, Madara Uchiha, Fugaku y Mikoto Uchiha, ninguno tenía una pizca de simpatía a por él, o Kurenai sentada a un lado de él.
- Qué hizo Naruto – Comenzó Minato de mal talante.
- Levantó la voz, dijo groserías y nos faltó el respeto – Informó.
- En qué contexto sucedió – Madara fue quien hizo la pregunta – Qué dijo Sai –
Hiruzen y Kurenai se miraron incómodos.
- Sé que tuvieron una fuerte pelea, porque usted tuvo la osadía de llevar a esta señorita frente a la clase que le hizo bullying a mi hijo. Sé que Sai solo le estaba haciendo una pregunta que yo también me hago, cómo van a remediar la muerte de mi hijo – Fugaku se levantó.
- Señor Uchiha –
-Mi hijo fue una víctima, nadie en el mundo, menos una persona de su talla dejaría pasar – Intervino Mikoto – Pero lo hizo, no puedo comprender, y me gustaría que me explicara en que mente pasa la idea de no llamar a los padres de un menor de edad que fue obligado a tener sexo oral, fue denostado, grabado sin su consentimiento, y ese vídeo fue distribuido en toda su preparatoria. Comenzó una ola de bullying en cadena –
- Sabemos que los chicos hablaron con su profesor encargado, con esta señora y con Usted – Agregó Minato – Puedo concebir la idea de que los chicos se queden callado y no digan nada porque Charasuke no quisiera que sus padres se preocuparan o que sé yo, pero que usted Hiruzen no hiciera nada es preocupante –
- Más que preocupante – Tomó la palabra Madara – Lo primero que debió hacer fue llamar a algún familiar de Charasuke, o por último no sé, al padre de Naruto si no sabía cómo abordar a la familia. ¡¡Maldita sea!! Un chico está muerto, más allá que haya sido mi sobrino, uno de sus estudiantes está muerto, y ahora quiere hacer algo por la conmoción que provocó esa muerte a sus preciosos estudiantes, que muchos de ellos son una banda de bully –
- Estamos aquí para hablar de la conducta de los chicos, no de Charasuke – Dijo el director, provocando un jadeo de impresión de Mikoto.
- Por supuesto, para su bienestar, hay que dejar de lado que mi hijo se lanzó o lo lanzaron aún no sabemos a un lado, porque lo importante es que tres chicos le levantaron la voz, y eso es inconcebible – El tono de Mikoto era de sarcasmo.
Hiruzen se aclaró la garganta, entendía la furia de la mujer, había perdido su vida.
- Mikoto no digas más, escuchemos lo que tiene que decir – Fugaku tomó delicadamente su mano, dándole una significativa mirada para luego girarse y mirar al director – Qué necesita de nosotros –
- Controlen a sus hijos – Contestó agradecido que el Uchiha lo dejase hablar – Sé que están furiosos, pero temo que los chicos perturben el ambiente estudiantil. No quiero que el alumnado se sienta incomodo, sobre todo con Sasuke y Sai – Agregó – Naruto es cosa aparte todos lo conocen y saben cómo es, pero nadie conoce a vuestros hijos, y yo tampoco lo sé, llamé al rector de la preparatoria de Sasuke, pero me dijo que no tenía nada que decir, que todo estaba en los papeles, eso me consternó, señores qué debo esperar de Sasuke y Sai –
Madara y los padres de Sasuke se miraron entre ellos. Minato podía palpar la furia de su pareja y la pareja divorciada, levantó una ceja, sin poder creer lo que el director, un hombre que él, Minato, había respetado y querido mucho tiempo.
- Naruto se quiso quedar aquí porque es un tozudo – El rubio se levantó – Pero yo no quería que viniera hoy a este lugar, lo iba a cambiar – Vio como el viejo lo miraba asombrado – Naru no quiso, dijo que no podía dejar solos a sus amigos y a Sasuke – Explicó – Seré franco con usted Hiruzen-San sé que mis padres lo estiman, y yo confiaba en usted, por eso a ojos cerrados envié a mi hijo aquí, ha estado toda su vida en este lugar, pero ya no confió en usted, en sus profesores o en su orientadora, no confió en nadie de este lugar – Afirmó muy resuelto – Hablaré con Naruto sobre sus palabrotas, pero es lo minimo que alguien cuerdo haría un par de ineptos como usted y sus trabajadores, si no hay más que hablar, me retiro y por hoy me llevaré a mi hijo de aquí – Salió de ahí sin siquiera despedirse.
- Lo mismo digo, Sai solo está aquí para evitar que Sasuke mate a alguien – Madara sintió que su hermano y su ex cuñada lo mataban con la mirada – Ni por un segundo piense que Sasuke es Charasuke, mi consejo gratuito para usted. Sobre mi hijo hablaré con él, pero es de aquello que abre la boca y dice siempre la verdad, desde que era un pequeño, suerte con aquello – Sonrió socarronamente y salió de ahí.
- Hablaremos con Sasuke – Fue todo lo que dijo Mikoto y se fue de ahí.
- Nos estaremos viendo – Fugaku dijo en forma de despido.
Hiruzen suspiró, solo era el primer maldito día y ya estaban cuatro padres de los más influyentes contra él. Sin contar que cuatro alumnos con padres iguales o más molestos que los Uchiha y el Namikaze, estaban igual de molestos que Naruto.
- Cagaste viejo – Arrugó la frente molesto al escuchar la voz de Orochimaru frente a él.
- Qué haces aquí – Inquirió cansado.
- Vine hablar con Danzo, que no quería aceptar que Kimimaru saliera del equipo de Beisbol –
- Entonces es verdad –
- Sí, no quiero a mi hijo más involucrado con ese equipo y en nada que tenga que ver con problemas –
- ¿También tú? – Preguntó incrédulo de escuchar a su antiguo pupilo decir aquello.
- Crees que no lo estaría – Orochimaru lo miró casi incrédulo – Viejo solo un idiota no avisa a unos padres que anda un vídeo pornográfico rayando en una violación de su hijo. Ni siquiera sé por qué diantres no lo hiciste –
Hiruzen dejó de mirar a los ojos a Orochimaru, su ex pupilo siempre había sido lo bastante astuto para ver detrás de él, y esta vez no quería que sucediese.
- Veo que estás protegiendo a alguien – La serpiente no era una persona tonta ni por si acaso, veía cosas en donde los demás no – Te advierto que lo mejor es que dejes de protegerlo, Tajima Uchiha no es un contendor fácil, y te hará pedacitos, su hermoso nieto está muerto y te culpa, como también los Senju – Hiruzen levantó la vista de inmediato – ¿Impresionado?, realmente creíste que siendo familia de Minato no iban a saber lo que está sucediendo, se te vienen todos los desastres naturales encima –
- Te ves muy feliz – El mal humor detonaba en su voz.
- Ni te imaginas, ya compré mis gafas Tres D, para ver tu caída – Orochimaru le sonrió tétricamente – He estado esperando por esto años, aunque lamento que sea gracias a la muerte de un joven – Se levantó – Si necesitas datos de excelentes abogados no cuentes conmigo para encontrarlos –
- No dejas de ser un crío desagradable –
- Mejor te compras pastillas antiácidas – Aconsejó – La tormenta se acerca y ese malestar gástrico que tienes podría empeorar –
- Odio que hagas tanto misterios, qué sabes que los demás desconocemos – Miró a Orochimaru con expectativas.
- Demasiado, tú lo sabes, trabajo con los secretos de los demás – Se fue sin decir más.
Sakura, Ino y Karin fumaban a escondidas detrás de los vestidores del club de deporte de futbol.
- Qué se supone que vamos hacer – Sakura estaba más nerviosa de lo normal.
- La ley de Naruto, no hasta la muerte – Karin dijo soltando el humo del cigarrillo de su interior.
- Solo sirve esa ley si es Naruto, nadie más tiene la audacia de negar algo que todo el mundo supo que hiciste – Ino refutó – Por otro lado no es lo mismo, estamos hablando de bromas, lo que paso con Charasuke es otro nivel –
- Crees que rastrearan el vídeo – Sakura se mordió los labios, estaba estresada – No quiero que sepan que fuimos nosotras que lo subimos a la web de la escuela –
- Cállate, quiere que todos lo sepan – Ino susurró – Tú sabes algo, Naruto ha dijo algo -
- No lo sé, y no me metan en el saco, no tuve nada que ver con eso, agradezcan que no he dicho nada, putas locas, cómo se les ocurre hacer esa imbecilidad – La chica miró a sus amigas - Naru es una tumba no dice nada – Karin pensó en su primo – Y apenas lo he visto desde que llegó Sasuke –
- Idiota perra loca, cómo no nos dijiste que Charasuke tenía un gemelo – Ino golpeó en el brazo a su amiga – Casi me oriné al verlo – Se estremeció de solo recordar a Sasuke.
- De lo bueno que está – Rió la Uzumaki
- Uuuhhg – Ino hizo cara de asco – Estamos hablando del gemelo del hediondo –
- Idiota tarada, no tienes ideas, espera a que veas a Sasuke sin camisa – Karin suspiró soñadora – Sasuke es diferente a Chara en todo – Golpeó a Sakura para poner énfasis en sus palabras – No digas que Chara-Chan era hediondo, está bien que le tuvieras manía porque pensabas que hacía Gay a Naruto, pero Chara-chan era un buen chico –
- Lo que sea – Sakura rodó los ojos molesta – Aún así qué diferencia puede haber entre ellos dos –
- Se nota, parece un asesino a sueldo – Opinó Ino dándole una calada a su cigarrillo mentolado.
- Según sé, Sasuke estuvo metido en problemas de agresividad en América – Cuchicheó la pelirroja, recordando las conversaciones de su padre con su tío Minato – Al parecer envió a alguien al hospital en coma, por lo que sé eran agresores y bully que se encontraron con alguien que no aguanto sus estupideces –
- Mierda, Karin – Chilló Sakura – Es peligroso, ¿crees que golpearía a una mujer? –
- No sé – Karin subió y dejó caer los hombros – Preguntaré, veré si consigo algo de información de parte de Naruto –Miró a Sakura – O quieres preguntarle tú – Soltó una carcajada picara – A todo esto dónde está la mosca muerta de Hinata –
- No sé, no la vi en todo el verano – Ino dijo pensativa – Traté de hablar con ella, pero no me contestó, Neji dijo que viajó con su familia a Europa, se supone que debería estar de vuelta –
- Mejor que esa perra no esté aquí, ahora que no hay obstáculos, espero que Naruto se fije en mí – Sakura arregló su cabello y luego sus pequeños senos, haciendo reír a sus amigas.
- Quería que Shikamaru se interesará en mí, pero es tan idiota, en todo caso vieron al primo de Charasuke, Sai, está riquísimo, querrá salir conmigo –
- Puede que sí, eres hermosa Ino cerda –
Las chicas siguieron conversando, pero todas preocupadas que supieran que una de ellas había sido la causante que el vídeo se distribuyera a todo el alumnado. Lo que ninguna sospechó es que fueron escuchadas por dos chicos que jamás debió escuchar aquello.
- Papá, tenemos que hablar, es por tu investigación sobre Charasuke – Shikamaru dijo una vez que su padre atendió su llamada, cerró los ojos cansado, tenía mucho qué decir, y sabía de forma precisa que su padre lo iba a matar. Su mejor amigo Chouji apretó su hombro, como dándole valentía – Es sobre un vídeo de índole sexual de Charasuke…