Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Un Papá Para Kiki por AMMU TEIKOKU YUDAINA

[Reviews - 26]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Hola mis terrones de azucar, aqui les atrigo un nuevo capitulo, disfrutenlo mucho. 

-Mi maestro no sale con nadie de forma romántica, pero…- Mira de reojo al rubio que se sentía algo intimidado –El…- Dudaba en responder esa última pregunta -Está enamorado de alguien-. 

Shaka, se sorprendió por escucha aquellas palabras, entonces su querido Lemuriano, la persona de la que estaba enamorado desde niño, el también quería a alguien y en todo su sentido y juicio, negaba por completo que él lo fuera, no se lo había merecido por sus actitudes desde que el había vuelto de Jamir hace tanto.

Solo se había dedicado a alejarlo de su lado y tratarlo mal, cuando el mismo le decía que quería pasar tiempo con él, que salieran como los amigos que eran.

Esa era la palabra que más le molestara que Mu usara cuando estaba juntos. Amigos, ya no eran amigos desde hace mucho tiempo y Shaka no quería ese tipo de relación.

Más sin embargo cargado ese deseo y amor que sentía, con sus prejuicioso y pensamientos que él no tenía ese derecho por su condición de caballero, se lo relegaba cada vez más.

Ahora lo notaba que todo lo que hizo dio frutos, ahora Aries estaba más lejos de él, que solo la distancia de casas, pues su corazón le pertenecía a otra persona y estaba seguro que no era para él.

-Ya veo- Su mirada triste se hizo presente.

Kiki, estaba realmente asombrado, los estados de ánimo de ese sujeto eran tan cambiantes casi como los de Saga, primero estar todo grosero, luego enojado y ahora triste. Negó con su cabeza sus pensamientos, debía estar seguro y preguntar de nuevo, aunque se ganara un regaño después por quien fuera por seguir molestando.

Alzo su voz, estaba ya desespero por conseguir la respuesta por la que fue en primer lugar, si todo marchaba bien, él tendría que hacerse a la idea de tantas cosas.

-¿Usted está enamorado de mi maestro?- Encarándolo, directo ahora si a su mirada, tenía un poco de miedo, sabía lo que significaba que él tuviera abiertos los ojos –Por favor dígame la verdad-.

El rubio suspiro, estaba algo abatido emocionalmente hablando, y cansado mentalmente por estar pensando una y otra vez que perdió la oportunidad y sintiéndose culpable por todo, ¿Qué más daba decir lo que realmente sentía a ese niño? Ya no le da más importancia a nada.

-Sí, estoy completamente enamorado de Mu- Su voz cargada de sentimiento, su semblante serio, pero su mirada triste sin ilusión alguna.

El pelirrojo, se quedó algo sorprendido, por la reacción del rubio, abrió los ojos de gran medida y su boca igual, los bracitos por ambos laterales del cuerpo.

Un silencio incomodo reino por el templo, el pequeño había logrado su cometido, pero ahora ya no sabía que más decir, ahora tenía que hacer algo que realmente esperaba no fuera necesario, pero lo que sea por Mu, pero antes tendría que hablar con Shaka.

De igual forma el guardián estaba cruzado de brazos, pensativo, algo molesto, pero en su mente estaba un caos que no quería acomodar en ese momento.

-¿Desde cuándo?- El pequeño pregunto dudoso y molesto.

-¿Para qué quieres saber eso ahora?- Su tono estaba realmente de fastidio.

-Solo quiero saber eso- La respuesta fue muy autónoma.

Suspira molesto, caminando ignorando al niño –Sera mejor que te vayas aprendiz de Aries-

-Quisiera irme, pero vine por algo importante- Frunció su ceño.

-¿Por qué cosa has venido?- Su voz estaba ya algo cansada de tratar con el niño.

-Ahora quiero preguntar algo más…- Miro al hombre estando de espaldas.

-¿Qué quieres?- Se giró hacia él.

-Quiero saber ¿Si está dispuesto hacer feliz a mi maestro?- Dijo esto serio, mirándolo a los ojos, con enfado, apretando sus pequeños puños.

Sus ojos ya anteriormente abiertos, se contrajeron mas, observando al niño, confundido -¿Qué estás diciendo? ¿Por qué preguntas eso?-

Suspira, mirando hacia el suelo –¡¡¡POR QUE LA ÚNICA PERSONA QUE PUEDE A COMPLETAR LA FELICIDAD DE MI MAESTRO!!! Es… Usted- Su voz se estaba apagando un poco.

Aunque entendía los sentimientos de ambos caballeros, no estaba seguro si fuera sincero del todo Shaka, y sobre todo no lo perdonaba por como había tratado a Mu en varias ocasiones atrás. Pero si era la persona que este amaba, lo ayudaría, aunque eso le molestaba.

Confundido, frunciendo el ceño -¿Qué dices?-

Molesto, haciendo pucheros -¿Acaso hablo en otro idioma?-

Se había cansado de tratar con ese hombre, que no comprendía lo que trataba de decirle, pero a la vez debía mantener ese secreto.

Baja la mirada, tratando de componer su calma, de alguna forma posible –Lo siento… Es solo que usted no me agrada mucho-

-Es por cómo me he comportado con Mu- Acepto sin más.

-Si- Sonrió algo forzadamente –Pero… Le quiero decir que aun fuera de ese hecho…- Cruzo sus brazos por detrás de su nuca –Le puedo ayudar para ser el novio de mi maestro- Le sonríe de forma triunfante -¿Qué me dice?-.

Niega con la cabeza, estaba sorprendido por la propuesto de este niño -¿Con esto te referías a buscarle una pareja a Mu? ¿Por qué lo haces? ¿Qué necesidad tienes de eso?-

Gira sus ojos fastidiado -¿Quiere mi ayuda? O- Lo mira de manera arrogante -¿Prefiere ver a mi maestro con alguien más?-

Esas palabras habían provocado que Shaka, se quedara completamente pensativo.

Este niño había aparecido de repente en su templo, sin previo aviso ni invitación, cosa que le desagrado, pero trato de guardar la calma, solo por tratarse del aprendiz de Aries.

Después de interrogarlo de forma muy molesta, como era típico de los niños, seres que no eran muy afín a ellos, ni a cualquier ser humano con algunas excepciones…

Logra descifrar a quien amaba, fue acaso una manipulación o estaba cansado de callar.

Y ahora, este pequeño Lemuriano, le estaba ofreciendo su “Ayuda”, para conquistar al primer guardián.

Pero viéndolo bien, parecía más una trampa, para que hiciera el ridículo o se burlaran de él.

Sabe perfectamente que Mu, no le enseñaría tale cosas a este niño, pero no estaba seguro.

-Señor Shaka- Lo mira con una sonrisa -¿Qué me dice?- Le extiende la manita derecha -¿Tenemos un trato?-

Este joven rubio, seguía titubeando en aceptar la propuesta del niño, no creía que tuvieras buenas intenciones o que lo ayudara de verdad.

Pero había algo importante, él era la persona más cercana a Mu, que pudiera existir en este mundo, sin contar al patriarca, pero… No se imaginaba ir con Shion para este tipo pláticas.

Tenía su ventaja que este chiquillo hubiera venido hacia él, para darle su ayuda en conquistar a ese pelilila que le robaba el sueño.

Le extiende la mano, sujetando la del niño –Muy bien- Estaba con su semblante serio de siempre. –Si te desagrado tanto ¿Por qué me ayudaras?-.

Baja la mirada, moviendo uno de sus piecitos para disimular –Por qué…- Suspira decaído –Si todo sale bien, podrán ser ambos felices- Sonríe tenuemente.

Mira al niño, estaba realmente incomodó hablar sobre lo que sentía por Mu, sobre todo con él, pero ya que era el único aparte de Aioria que lo sabía, tendría que aprovechar.

-¿Cómo podría estar con Mu?- Pregunto, sonrojándose un poco y desviando la mirada.

-Eso, se lo diré mañana- Se gira y observa como el sol comienza a ocultarse –Ya es tarde y el señor Aldebarán estará muy preocupado si no vuelvo ante que el- Comienza a correr hacia la salida del templo.

Shaka, se quedó con una expresión de extrañes, ¿Qué le ocurría a este niño?, Primero viene, cuestiona, molesta, propone coas y luego se va. No es un comportamiento muy natural.

Se detiene en la entrada del templo de Virgo –Solo quiero decirle- Se da la media vuelta –Que no vuelva hacer llorar a mi maestro, porque si no… Yo… No importa como lo haga o cuando, pero lo hare sufrir mucho peor de lo que se atreva hacerle a el-.

El niño se aleja de la vista del Virgo, dejándolo ya con una amenaza plantada, tenía que admitirlo, es de las pocas personas que tenían las agallas de enfrentarlo sin importar las consecuencias.

-Veo que tienes un pequeño guardián Mu- Una leve sonrisa se le dibujo en el rostro.

Era cansado mostrarse frio y serio todo el tiempo, pero más lo era negar lo que sentía.

Se había decidido, lo que sentía por Aries no lo volvería a dejar de lado, sus sentimientos debían saberse, si el pequeño lo ayudaba sería bueno y teniendo el apoyo de un gran amigo Aioria, que le dijo que le podría servir.

Debía primero liberarse de esos estúpidos temores, que el mismo había tomado, cuando desde chico se los inculcaron antes de llegar al santuario, nada de sentimientos mundanos, nada de egoísmo, codicia, deseo.

Pero todo eso, ya lo había sentido, ¿Hubiera querido que eso jamás pasara? No, la verdad es que no. Porque el único que le provocaba eso, era aquel dulce pelilila y los recuerdos de su infancia era lo que le traía la alegría ahora en su corazón tan frio.

Haría lo que fuera para que en esta vida fuera feliz junto a Mu, aunque eso significaba pecar contra lo que él creía, le importaba poco si eso le ocasionaba alguna consecuencia, estando junto a esos ojos esmeraldas nada lo dañaría y no permitiría que algo lastimara al Lemuriano, ni siquiera él lo volvería hacer.

Notas finales:

Buenos días, tardes, noches... ¿Que hora es? ¿Quien me ha robado el reloj? De hecho hubo cambio de horario en mi país o mas bien en la zona donde vivo y estoy mas confundida que nada. En fin mucha charla... Primero que nada ¿Como están? Se que a veces es algo aburrida la situación o que de miedo, pero recuerden siempre la vida buena es, si el lado bueno tu le vez. No se angustien esto pasara, y mientras eso pasa, aquí estaré tratando de publicar lo mas seguido que pueda.

En fin, con esta me despido, mantengance a salvo y Ammu se va.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).