18
El mundo conocía a Donghae, como a un hombre simpático, de trato fácil, pero Jong Hoon se había dado cuenta de cuan errónea era esa imagen.
Aun así, no creía que Donghae fuera un engendro del diablo como Kibum lo pintaba.
Las cosas raramente eran blancas, negras, malas y buenas.
- Pensé que podrías manejarlo.
Comentó, observando con curiosidad a su amigo.
La última vez que había visto a él y a Donghae en la misma habitación, Donghae era el que estaba exigiendo que Zhou Mi fuera despedido, mientras que este actuaba frío y tranquilo, incluso divertido.
¿Qué había cambiado?
- Yo pensaba lo mismo. - dijo Zhou Mi, una esquina de su boca encrespándose en una sonrisa sin humor. - Estoy acostumbrado a los pacientes difíciles, ya lo sabes.
- ¿Pero?
- Está intentando seducirme.
Al principio pensó que había escuchado mal. Pero por supuesto que no.
- Ah. - Y rió entre dientes. - ¿Eso es todo? Es sólo la forma en que él es. Donghae siempre ha sido un coqueto.
La expresión en el rostro de Zhou Mi era difícil de leer.
- ¿Se te insinuó?
Su voz sonaba un poco extraña.
Jong Hoon frunció el ceño, mirando a su amigo evaluadoramente.
Zhou Mi nunca había sido homofóbico. El hermano su menor era gay, y cuando salió del armario, había sido más que un apoyo.
Pero definitivamente había algo fuera de lugar en su reacción.
- Solía coquetear mucho conmigo, pero no era nada grave. - explicó lentamente. - Creo que lo hacía sólo por el gusto de hacerlo, y para molestar a Kibum.
- ¿Y nunca te sentiste tentado?
- No soy un monje. Fácilmente es el tipo más hermoso que he conocido.
Jong Hoon dijo riendo.
Los ojos de Zhou Mi perforándolo como dagas gemelas.
Jong Hoon negó con la cabeza.
- No pasó nada. Él es mi paciente, Zhou Mi.
"Algo" asomó en el rostro de Zhou Mi.
- Kibum también es tu paciente.
Jong Hoon se congeló, preguntándose cómo Zhou Mi sabía sobre él y Bum.
- Es diferente. Sabes lo especial que él es para mí. Donghae es...sí, es ridículamente hermoso. Soy un saludable hombre gay y tengo ojos, pero nunca me sentí atraído por él. No puedo verlo como a algo más que al hermano de Kibum. Cuando amas a alguien, es fácil controlar los deseos superfluos.
Zhou Mi titubeó.
El pelinegro estudiaba la repentina tensión en los hombros de su amigo y la forma en que su mano estaba cerrándose en un puño.
Era desconcertante.
Nunca había visto a su amigo tan nervioso. No era habitual en él.
Siendo el mayor en su familia y acostumbrado a lidiar con sus hermanos menores, Zhou Mi no era alguien fácilmente alterable. Algunas personas lo consideraban como a alguien dominante, incluso arrogante, pero Jong Hoon sabía que sólo era consecuencia de que Zhou Mi fuera responsable de tanta gente, desde que fuese un adolescente.
Si alguien le hubiera pedido a Jong Hoon que describiera a Zhou Mi con una sola palabra, sin dudarlo escogería la palabra "responsable".
Ese era el por qué la repentina decisión de renunciar le había sorprendido tanto: estaba muy fuera de lo normal para él.
- ¿El coqueteo de Donghae te molesta tanto? -preguntó Jong Hoon, manteniendo su voz neutra. Hablar estas cosas, con sus amigos heterosexuales, siempre era algo incómodo. - Si ese es el problema, le pediré que lo deje.
Zhou Mi se mantuvo callado.
- ¿Zhou Mi?
- Quiero follarlo.
Cuando Jong Hoon no dijo nada, los labios de su amigo se torcieron.
- Deja de mirarme como si me hubiera crecido una segunda cabeza.
Jong Hoon se aclaró la garganta.
- Pensé que eras hétero.
- Lo soy. - dijo con la mirada turbada. - Solo que realmente quiero follarme a esa pequeña mierda.
Jong Hoon se aclaró la garganta otra vez.
Esta no era una conversación que había esperado tener nunca con Zhou Mi, acerca del hermano de Bum.
- ¿No están Da Hae y tú en una relación abierta?
Asintió brevemente.
- Entonces, ¿Cuál es el problema?
- ¿Cuál es el problema? - rió con dureza. - ¿En serio?
- ¿Estás enloqueciendo porque te atrae un tipo?
- No. - se pasó una mano por la cara. - Tal vez un poco. Ni siquiera me gusta el mocoso. Me vuelve loco. La mitad del tiempo, quiero tirarlo encima de mi rodilla y... - Cerró la boca y le dió una sonrisa triste a Jong Hoon - ...no tiene sentido. He visto y tocado a cientos de hombres desnudos, y bueno, tal vez ninguno de ellos tuviera una boca tan linda... - se interrumpió de nuevo con una mueca. - ... no tiene ningún jodido sentido.
Jong Hoon no podía decir que él pudiera identificarse.
Las mujeres no significaban nada para él, sin importar lo bonitas que fueran.
- Hablar con Kibum sería probablemente más útil para ti que charlar conmigo, aunque quizás no.
- ¿Por qué no? Siempre pensé que Kibum también era heterosexual.
Jong Hoon miró la foto de su escritorio.
Era una foto del equipo, tomada hacía dos años después de ganar el trofeo. Kibum estaba apoyado en él, con su mejilla presionada contra la suya, como un gatito hambriento de afecto.
- Fue diferente para Bum. - dijo Jong Hoon, arrancando los ojos de la sonrisa en los labios de Kibum. - Él siempre me amó y me necesitó, así que cuando en realidad llegamos a estar juntos, el sexo sólo era el paso siguiente. Otros hombres no hacen nada en él. Me desea porque me quiere, en lugar de al revés. No sabe lo que es desear a un hombre que le desagrade. - le echó una mirada a su amigo tanteándolo. - ¿Estás seguro de que no puedes controlarlo? ¿Realmente tienes que renunciar?
Una sonrisa de desaprobación apareció en los labios de Zhou Mi.
- Hace unas semanas, lo nalgueé sólo porque fue a buscar sexo después de que yo se lo hubiera prohibido, así que creo que es bastante seguro decir que mi juicio profesional se ve comprometido. Deja de mirarme de esa forma. Sé que no debería haberlo hecho. Ya sé eso. No puedo pensar con claridad en torno a la pequeña mierda. - se pasó la mano por el pelo, la frustración palpable en su rostro. - Cuando está cerca, es como si mi cerebro estuviera en mi polla. Tengo que renunciar.
Jong Hoon lo estudió por un momento.
- El matrimonio es un compromiso muy serio. Debes estar completamente comprometido con tu relación. ¿No sería mejor conseguir sacarte esto fuera de tu sistema antes de la boda y seguir adelante con tu vida?
Recibió una mirada fulminante de Zhou Mi.
- Realmente no necesito este consejo, Jong Hoon.
- No le dispares al mensajero. Sabes que tengo razón. Todavía estás en una relación abierta. Sácalo de tu sistema antes de casarte con Da Hae. Eso sería lo mejor para todos los involucrados.
Zhou Mi miró por la ventana.
- Eres terrible dando consejos. Deberías haberme dicho que mantuviera mis manos lejos de él. Ahora tengo una razón perfectamente legítima para hacer lo que quiero.
- ¿Es eso tan malo?
Una risa áspera dejó la garganta de Zhou Mi. Se puso de pie y cogió su chaqueta.
- Te lo haré saber pronto.
Jong Hoon profundizó el ceño fruncido. A pesar de los consejos que le había dado a Zhou Mi, la situación se le hizo algo incómoda.
Donghae era mayor de edad y más que capaz de dar su consentimiento, pero... la situación era un desastre.
El hecho de que el chico fuera paciente de Zhou Mi no habría sido un gran problema, sería hipócrita pensar eso, solo que la naturaleza del interés de Zhou Mi por él era diferente a la relación de Jong Hoon con Bum.
Zhou Mi no lo quería, ni siquiera parecía agradarle. Sólo lo deseaba y parecía resentirse mucho con él por ello.
- Sé que su ingle está mucho mejor ahora, pero ten en cuenta que aún está herido .- dijo Jong Hoon. Traducción: nada de sexo duro y enojado, con uno de mis jugadores lesionados. - Si lo hacen, se cuidadoso.
Una parte de él no podía creer que estuviera realmente teniendo esta conversación con uno de sus fisioterapeutas, pero tenía que ser dicho.
La salud de Donghae estaba primero.
Zhou Mi sonrió, como si Jong Hoon hubiera dicho algo muy divertido, y se fue.
Jong Hoon se quedó mirando a la puerta algo perplejo cuando la cerró tras Zhou Mi.
Seguía mirando a la puerta cuando ésta se abrió de nuevo y Kibum caminó dentro de la habitación.
- Cierra la puerta.
Le dijo inmediatamente.
Sonriendo y poniendo los ojos, Kibum hizo lo que se le dijo.
- No es como si alguna vez hayamos tenido sexo aquí.
- Eso no te detiene de venir a molestarme aquí.
Dijo Jong Hoon con una mirada curiosa.
- Cállate, te encanta. - Bum trepó a horcajadas en el regazo del pelinegro y acarició su boca contra la mejilla. - Mmm, ¿Por qué siempre hueles tan bien?
- Tú hueles mejor.
Alagó presionando su nariz en la mejilla del chico y respirando.
Cristo.
A veces pensaba que no era posible ser tan feliz y estar tan enamorado.
Amaba a este muchacho. Lo amaba más que a nada en el mundo.
Sus pensamientos volvieron a Zhou Mi.
No podía imaginarse estar en la posición de su amigo.
Antes de que él y Kibum se hubieran convertido en amantes, Jong Hoon se había acostado con otros hombres, por supuesto, pero su atracción por ellos no era ni siquiera un ápice de lo que sentía por Bum, no importaba lo guapo que fueran esos hombres.
Se preguntó sobre la fuerza de los sentimientos de Zhou Mi por Da Hae.
¿Realmente era amor si uno fuera capaz de desear tanto a alguien más?
Pero de nuevo, no era su lugar para juzgar.
Él y Kibum no eran exactamente la pareja más normal del mundo.
Bum pasó sus dedos por el cabello de Jong Hoon.
- Vi a Zhou Mi. ¿Finalmente se hartó de Donghae y quiere renunciar?
Jong Hoon se preguntó cómo se suponía que debería responder a eso.
- Algo así.
- ¿Algo así?
Kibum se alejó y lo estudió con curiosidad.
- No me mires así. No es mi secreto para contarlo.
- Jong.
- No.
- Jong.
Riendo, Jong Hoon lo besó una y otra vez, hasta que Bum se fundió en él, olvidándose de Zhou Mi y de su hermano.