Entrada la noche, Tony caminaba hacia la habitación de Steve, ya que como le había prometido a su amigo, hablaría con él. Además, le pareció extraño que no estuviera con Peter y Lila mirando Harry Potter. Sabía que su omega estaba emocionada viendo todas las sagas y también que le encantaba estar con los cachorros.
El alfa llegó hasta la puerta del rubio y tocó, sin recibir respuesta alguna. Volvió a tocar, pero nada, cosa que hizo que se preocupara;
-JARVIS- dijo al aire - ¿Steve está dentro de su habitación?
-sí, señor. Pero parece que no se ha sentido bien- contestó la I.A
-déjame pasar, lo llevare al doctor, aunque sea a rastras. – soltó con molestia cuando escuchó el pestillo de la puerta. El alfa entró y buscó al rubio con la mirada - ¿Steve? – preguntó. La habitación estaba completamente a oscuras, así que el alfa comenzó a caminar con cuidado hasta que olió la tristeza en el aire y siguiendo el olor, encontró a Steve, en vuelto en una manta en su nido, ese que había hecho en su celo.
El moreno suspiró y con el ceño fruncido vio al otro;
-Rogers, - dijo en voz alta sin inmutar al otro -sé que no quieres ir al médico, pero esto se acaba ahora. Levántate porque iremos al médico ya, aunque sean las diez de la noche
-déjame en paz por favor. - dijo el rubio con voz ronca -Solo vete o ¿es que necesitas desahogar toda tu frustración en tu juguete favorito?
- ¿disculpa? - el omega se volteó a mirar al alfa, sus hermosos ojos azules que se reflejaban con la poca luz que entraba en el lugar estaban opacos y sin vida. También se veían hinchados y muy rojos, señas de que había estado llorando - ¿Por qué dices eso?
-porque eso es lo que soy para ti ¿no?
-claro que no… ¿de dónde sacaste eso?
-no te acerques ni toques mi nido- soltó un poco alto el menor cuando el alfa estaba demasiado cerca. Tony suspiró con dolor y dio un paso atrás
-mira, si fue por lo que te dije el otro día, yo estaba frustrado y enojado. Además, te recuerdo que esta mañana te dije que hoy íbamos a hablar sobre el tema después de mi reunión con Pym y Janeth
-no sigas. - lo interrumpió de nuevo -No quiero escuchar nada de lo que esa mujer te dijo o de lo que cualquier otra persona que se haya metido en tu cabeza dijo… ya no… - el moreno bajó la mirada arrepentido -Ahora... Si vienes a jugar, quiero que sepas que estoy sucio. Aunque, qué más da, solo soy un hueco donde puedas meterla ¿no? No es como que vayas a besarme o tocarme...
- ¿Qué? Ahora sí que me estas perdiendo ¿Por qué te estas comportando de esta forma? Eres mi esposo, no mi juguete...
- ¿dónde me quieres? - Steve se había sentado haciendo caso omiso a lo que el otro dijo y fue cuando Tony reparó en varios arañazos que tenía el omega en el cuello, asustándolo
-Steve, te hiciste daño… ¿Por qué?
- ¿quieres que me recueste en el escritorio? ¿O que me abra de piernas para ti aquí en mi nido?... si quieres puedo pasarme a la cama… está limpia y tú eres muy delicado en eso
-no... Steve, basta
-entonces vete. - volvió a soltar el menor volviendo a recostarse y tapándose con su manta -Si no vienes a usarme, puedes marcharte. No quiero tu lastima... Dijiste lo suficiente
- ¿dije? ¿Cuándo lo dije? Hoy apenas si cruce palabra contigo
-no me lo dijiste a mi…
- ¿Qué? - el alfa se acercó un poco más y se arrodilló junto al nido sin tocarlo - ¿Puedes explicarme que está pasando? De verdad no entiendo- exclamó Tony con tristeza. Le dolía lo que estaba diciendo el rubio y más aún al recordar lo que el omega le había dicho sobre su autoestima. Verlo como se trataba así mismo, le hacía un hueco en el pecho y más aún al oírlo decir cosas que él mismo no había dicho, al menos no frente suyo.
Cuando Tony estaba por alejarse, escuchó al otro toser con fuerza, así que corrió hacia él acercando un inhalador que sacó de su saco;
-siéntate, déjame ayudarte
-déjame solo. - soltó con molestia el menor viendo con asombro lo que el alfa había hecho -Tú… ¿de dónde lo sacaste?
- ¿esto? – preguntó, mostrándole el pequeño aparato -Desde que supe que estabas enfermo, siempre lo ando en mi saco por alguna emergencia. – respondió ante el asombro del omega rubio -De hecho, también hay uno en cada auto, en tu motocicleta, en varios puntos de la casa y en mi oficina. – el hombre se sonrojo -Yo… no sabía qué hacer si te volvía a dar un ataque como el de hace tiempo, así que llame a tu hermano y le pregunte.
>> James me dijo que debía hacer y cómo administrarte el inhalador. También… tuve que hablar con el pesado de Strange para saber cuál era tu dosis y JARVIS me hizo el favor de hacer el pedido al hospital de “le temo a mi omega embarazado” Strange- se burló el otro cuando el rubio sintió como tenía los ojos llorosos
-hiciste todo eso… ¿por mí?
-eres mi esposo, mi omega y a pesar de que soy un idiota, sabes que te amo y estaba muy preocupado
-entonces ¿Por qué le dijiste todas esas cosas feas a Sharon sobre mí?
-tu… ¿Cómo sabes que Carter estaba hablando conmigo?
-yo… - el rubio iba a decir algo, cuando un fuerte mareo llegó a su cuerpo haciendo que vomitara a un lado de su nido y cayera en brazos de su alfa.
Tony lo sostuvo cuando lo vio vomitar y le tocó la frente, se encontraba sudando frio y se veía descompuesto. El castaño se asustó y lo levantó con dificultad, sacándolo del nido mientras hablaba con JARVIS;
- ¡JARVIS! ¡LLAMA A BRUCE!
-enseguida señor- contestó la I.A.
Bruce llegó rápidamente al cuarto del rubio junto con Clint unos minutos después. El llamado del alfa lo había asustado, así que sin pensarlo corrio hacia la habitación de su amigo.
Al entrar, se acercaron rápidamente y Bruce hizo a un lado a su amigo para chequear al rubio, recibiendo un gruñido de su parte;
-no me gruñas, Tony y llama a una ambulancia. - dijo con autoridad cuando el otro obedecido -Clint, quédate con los niños por favor, Peter va a alterarse cuando vea a los paramédicos
-si- soltó el omega corriendo enseguida hacia donde estaban los otros mirando una película.
Unos minutos después, el rubio era traslado en ambulancia hacia el hospital más cercano acompañado por los dos castaños y aún en estado de inconsciencia.
. . .
Tony caminaba por la sala de emergencias como león enjaulado.
Apenas llegaron, se habían llevado al rubio y no le habían permitido pasar a pesar de decir que lo necesitaba y que él podría comprar el hospital si quería si no le permitían pasar con su esposo.
El castaño estaba dando un paseo en círculos cuando vio como un castaño de pelo largo y una pelirroja se acercaban a ellos;
- ¡mapache! ¡Arañita! ¿Qué rayos están haciendo aquí? - preguntó recibiendo una mirada de los otros
-cuando llamé a Steve, Clint contestó su teléfono y me dijo que lo habían traído al hospital. - contestó el alfa de pelo largo con el ceño fruncido - ¿Qué fue lo que pasó?
-ha estado enfermo, pero no ha querido ver a un doctor... ¡Incluso llame a Strange! Y hoy cuando fui a verlo me dijo... Cosas muy raras y luego comenzó a toser. - respondió el otro -Le di su inhalador y comenzó a vomitar hasta que se desmayó
- ¿qué cosas fue las que dijo? - preguntó Bruce interesado en la conversación y acercándose a los otros
-dijo que... Era solo un trofeo y un juguete... Que debía usarlo y...
- ¡te dije que hablaras con él!
- ¡¿porque me gritas?!
-Janeth le estaba diciendo esas cosas cuando llegue por la tarde. Al parecer escuchó algo de lo que hablaste con Carter
- ¡¿Carter estuvo en la Torre?!- soltó la alfa molesta y haciendo que los otros tres dieran un paso hacia atrás
-llegó con Howard para acusar a Steve de infiel
-por esa razón el señor Stark me llamó y tenía mensajes tuyos. Arreglaré cuentas con ellos después
-yo regresará a la torre para tranquilizar a todos y también a Pepper que acaba de llegar y está alterada- exclamó Bruce poniéndose en pie y acercándose a la salida.
Los otros tres se quedaron solos en la sala y tomaron asiento, aún sin tener noticias del otro.
Al cabo de un rato, un hombre con bata blanca se acercó y miró a los que estaban ahí;
-acompañante del señor Rogers- dijo con calma
- ¡aquí! - soltaron los tres acercándose al doctor
- ¿cómo está? - preguntaron ambos castaños al mismo tiempo, sacando una sonrisa del doctor
-el joven ya se encuentra despierto. - comenzó a decir -Se encuentra un poco deshidratado y anímico, parece que no ha estado comiendo bien y dado su estado, eso está bastante mal
- ¿estado? - volvieron a preguntarle al unísono viendo como la pelirroja sonreía de oreja a oreja
- ¿quién es el señor Stark? - preguntó cuando Bucky señaló al mencionado y este se señaló así mismo -Felicidades señor Stark, está esperando un cachorro
- ¡¿QUE?! - gritaron ambos castaños de nuevo cuando el soldado tomó al otro del cuello de la camisa y lo jaló hacia sí con enfado
- ¡¿embarazaste a mí hermanito?! - gritó zarandeándolo, viendo como el otro se mantenía sorprendido
- ¿voy a ser papá otra vez? – preguntó al aire algo desconcertado el menor
- ¡te voy a castrar Stark!
-ya es algo tarde para eso. - sonrió la alfa y se dirigió hacia el doctor viendo como Tony se soltaba del agarre del otro y se abrazaba a este gritando que sería padre - ¿Cuánto tiene?
-casi dos meses. - rio el otro viendo como el alfa menor tomaba su teléfono y gritaba por el que sería padre -Y por lo que veo el padre no sabía, eso explicaría mucho
- ¿de qué habla?
-normalmente cuando un omega se encuentra gestante debe permanecer con su alfa mucho tiempo cerca, pero este por su estado no lo ha estado y esto ha debilitado de sobremanera el cuerpo de la madre y le ha dado con mayor fuerza varios síntomas. Además de su mala alimentación y también de la deshidratación que parece estar teniendo. Lo tenemos con suero y ya le estamos realizando una dieta que debe seguir. – el doctor suspiró -Señor Stark, - dijo dirigiéndose hacia el castaño que le decía al otro que sería tío -debe entender que, dado el estado de su omega, debe permanecer mucho tiempo con él, ya que la criatura lo necesita y su esposo se encuentra muy débil
-yo no sabía de esto, - respondió el otro sintiéndose regañado de pronto por el médico -de verdad que no
-debe ir a hablar con su esposo, porque parece que él tampoco. A lo que me mencionó, solo pensó estar enfermo. - el hombre le miró por un miembro - ¿Usted no sintió algún aroma diferente o más dulce en su esposo? - el otro negó
-yo salí de viaje y han pasado muchas cosas
-su aroma era muy muy leve, doctor- interrumpió la alfa viendo como Tony le dirigía una mirada incrédula
- ¡¿tú lo sabías?! - soltó con molestia
-cuando pasó lo de Carter, lo sentí por un momento en el auto y luego dijo que quería hamburguesas, algo que el casi no come. - respondió con una sonrisa -Pero su aroma si era muy tenue
-debo ser por lo débil de su cuerpo, - contestó el doctor -Ahora por favor, sígame, señor Stark. Debo llevarlo con su esposo
-yo también quiero ver a mi hermano- exclamó James acercándose
-déjalos primero hablar a ellos- agregó Natasha cuando el otro asintió y se sentó junto a ella en la sala de espera.
El moreno siguió al doctor hasta que entraron en una habitación, donde divisó al rubio recostado en una camilla con la mirada en el techo. Tenía puesta una intravenosa con suero y una máquina que marcaba sus signos vitales ;
-señor Rogers, - llamó el doctor cuando el rubio le dirigió una mirada, poniéndose inmediatamente más pálido al ver a Tony tras él -aquí está su esposo. Los dejaré solos- el doctor asintió y le sonrió al alfa quien se dirigió nervioso hacia el rubio;
- ¿cómo te sientes cariño? - preguntó al estar cerca de Steve, quien no le miraba y quién había comenzado a soltar enormes lágrimas. Tony se asustó y agachándose junto a él le tomó de las manos - ¿Steve que sucede? ¿Porque lloras? ¿Me estás asustando? - preguntó soltando feromonas para calmar al omega, fallando miserablemente ya que él estaba asustado
-lo siento... Lo siento… - balbuceaba aún sin mirarlo el rubio -yo... No sabía... Sé que dijiste... Que nunca tendría ca-cachorros, pero... Lo siento- soltó rompiendo en llanto haciendo que el alfa se sintiera culpable. Al instante se levantó y abrazó al otro con fuerza, viendo como hacia vagos intentos por alejarlo, pero sin lograrlo
-sshhh… - comenzó el alfa repartiendo caricias por su espalda y cabeza -Sé lo que dije y me arrepiento por eso, era parte de lo que aún debemos hablar. Pero, Steve... ¡No sabes cuan feliz estoy en este momento por esta noticia, no tienes una idea de e lo emocionado que estoy!... ¡Incluso ya llamé a Pepper y le pedí les contara a todos!
- ¿en-enserio? - preguntó el rubio alejándose cuando Tony le limpió la cara con un pañuelo que sacó de su bolsillo - ¿no estás molesto? ¿No me odias?
-cariño, - dijo tomando su rostro con una sonrisa y unas cuantas lagrimas -me has hecho el alfa más feliz del mundo. Además, que, sacando cuentas, esto pasó en mi celo y fue cuando te marque para siempre. - bajó la mirada un momento -Independientemente de lo que sucedió, yo estaba consciente a la hora de marcarte y sabía lo que hacía.
>> Sé que soy un completo asco, pero... ¿Me dejarías estar junto a ti y este bebé? Y... ¿Ser una familia junto con Peter y nuestra extraña manada? - el rubio lo miró por un momento con asombro tras las palabras del otro.
Luego quito la mirada y pensó por un momento;
-yo... - comenzó a decir ante la mirada del otro -Fuiste muy malo conmigo, me maltrataste, agrediste, ignoraste... Me lastimaste mucho, Anthony... Yo... Tengo miedo de lo que pueda pasar de ahora en adelante... - el alfa bajó la cabeza con tristeza entendiendo muy bien la postura del omega rubio
-lo sé, no merezco una oportunidad cómo está. - tomó aire y se levantó -Yo... Les daré todo lo que necesiten y...
-déjame acabar. - le regaño el otro haciendo que el moreno se callara -Yo te amo Tony, a pesar de todo... Y sé que has hecho mucho esfuerzo por arreglarte, por sanar y también por mostrarme lo que sientes por mí
- ¿entonces?
-debemos criar a este bebé juntos
- ¡siiiii! - soltó emocionado y abrazó al otro con fuerza
-pero si algo se ve mal de nuevo y no lo hablamos como se debe, me iré, Anthony y no me volverás a ver nunca
-si cariño, como tú digas
-aléjate de mi hermano, animal hormonal- escucharon una voz y ambos voltearon viendo a Bucky entrar junto con la pelirroja
- ¡Buck! ¿Qué estás? - comenzó el rubio, siendo abrazado por su hermano ante el gruñido de Tony quien recibió un golpe en la cabeza cortesía de Natasha - ¿qué estás haciendo aquí? Deberías estar en Siberia
-terminé antes y vine a verte- contestó el castaño
-vamos, - dijo Nath jalando al otro -tu y yo debemos hablar
-regreso en un momento amor. - dijo Tony cuando el rubio sonrió -No me obligues a golpearte mapache
-te castrare Stark- soltó el otro con molestia cuando salieron.
Al ver cerrar la puerta, el alfa se quedó viendo al rubio quien sonreía;
-cuando te llamé Clint me dijo que estabas en el hospital. Llamé a Natalia y ella me trajo desde el aeropuerto
- ¿Natalia? - preguntó el otro con duda viendo a su hermano sonrojarse
-Na-Natasha- Steve abrió mucho los ojos y sonrió de oreja a oreja
- ¡¿estas saliendo con Nath?! – soltó, para luego cambiar su expresión y golpear el hombro de su hermano - ¡¿Porque no me dijiste?! ¡Yo te cuento todo!
-yo... No lo sé ¿ok? Me daba vergüenza que te molestaras
- ¿porque lo haría?
-ambos somos alfas...
- ¿y eso que tiene que ver? ¿Se gustan cierto? - el alfa asintió - ¿entonces? ¿Porque debería molestarme? Además, aún debemos hablar con Thor
- ¿que?
-tienes novio
- ¡¿que?! ¿Quien?
-no lo sé, Lila me lo comentó
-solo me falta que me digas que Clint está saliendo con aquel alfa tan callado y tranquilo que vive contigo.... ¡Hey! ¡¿Porque me quitas la mirada?!
-yo...
- ¡no puede ser! - soltó asombrado y poniéndose de pie - ¡me siento traicionado! ¡ya no hay respeto por el alfa de la manada!... me duelen- fingió dolor
-hey, al menos aún Sam te respeta- el otro quito la mirada - ¿Buck?
-Samestasaliendoconunalfaqueesmilitar- dijo rápidamente, siendo completamente entendido por el rubio quien lo miró atónito -Y-yo lo conozco... Está en la base conmigo… tú también lo conoces… fue a una cena en tu casa y… - soltó en un susurró sin ser escuchado por el rubio
-nombre...
-James... Rhodes
- ¡es el mejor amigo de Tony! - gritó exasperado
- ¡Dios! - soltó el otro alarmado - ¡esto es el colmo! Mi propia manada me lastima... tendremos todos una muy larga charla
-estoy de acuerdo y comenzaremos contigo y Natalia- terminó con burla cuando el otro le dio un empujoncito comenzando a reír junto a su hermano.