Un par de días después, entrada la madrugada, Tony se encontraba durmiendo tranquilamente cuando un olor a inquietud y excitación lo despertó, volteándose hacia la fuente de aquel olor a vainilla y miel con menta,
- ¿qué pasa Steve? ¿porque estás inquieto? - preguntó soñoliento mientras se frotaba un poco los ojos viendo al otro que estaba sentado junto a él
-yo... Tengo muchas ganas de hacerlo contigo Tony, - respondió el otro jugando con sus manos nerviosamente -pero no quería despertarte
- ¿ganas de hacerlo? - preguntó el otro aún dormido - ¿Es necesario? Estoy cansado Steve, sabes que estos días he estado trabajando demasiado en la empresa
-lo sé... Por eso no te desperté, sé que estas muy cansado y no quería molestarte
-mejor... - bostezó -toma uno de los juguetes de la caja que tienes ahí y ve al baño o hazlo aquí, no me molesta. Puedes tocarte donde quieras- el moreno se acomodó de nuevo sintiendo un leve picor en su nariz. Mientras que Steve, indignado, se puso de pie y le dio un golpe con una almohada
- ¡no soy una de tus perras, Anthony! - soltó enojado, para meterse en el closet y cerrar la puerta con llave. Inmediatamente, Tony se incorporó al saber lo que había hecho y al oír lo que el otro había dicho
- ¿perras? demonios- soltó en voz baja y se levantó comenzando a tocar la puerta - ¡hey! ¡No digas esas cosas tan feas, cariño! Además... ¡Debes una moneda al frasco de groserías por lo que dijiste!
- ¡tú llenaste ese puto frasco hace semanas con todas tus groserías! - gritó el otro desde dentro haciendo reír al castaño
- ¿entonces donde las ponemos ahora? Porque ya debes dos monedas
- ¡hace días que Peter puso un puerquito gigante sobre la nevera! - gritó de nuevo y abrió la puerta dejando mostrar su rostro bañado en algunas lágrimas -Y no voy a poner nada en ese cerdo, esto está culpa- Tony se acercó y lo abrazó con fuerza
-lo siento cariño, estaba muy cansado y me quede dormido. Fui grosero, debí mimarte y ayudarte con lo que necesites por nuestro cachorro
-pensé que ya se te había ido ese mal hábito tuyo
- ¿mal habito? Tu fuiste quien dijo groserías y te llamaste perra
- ¡déjame en paz!
- ¿enserio quieres que te deje en paz? – preguntó el alfa apretando y amasando las enormes nalgas del menor, quien gimió ante el toque
-no… Tony… yo… ¡estoy molesto!
-volvamos a la cama y… te ayudo con tu problema- susurró seductoramente el moreno guiando al rubio hacia la cama dejándole un profundo beso.
. . .
Tony despertó al sentir algo removerse junto a él. El castaño sonrió al ver al rubio que abrazaba acomodarse lentamente mientras jalaba su mano para que le abrazara más;
"se ve tan lindo" pensó, abrazando con más fuerza al otro y acariciando la enorme curvita de casi seis meses que ya se estaba formando.
El alfa se encontraba dando pequeños circulitos cuando Steve despertó y sonrió viendo las acciones del otro;
-buenos días- dijo bajito volteándose un poco para recibir la vista de esos enormes ojos avellana
-buenos días, cariño. - contestó el alfa, dejándole un beso en la mejilla - ¿Quieres ir a la tina un rato? ¿O quieres dormir más?
-el baño suena bien
-perfecto. Iré a alistar todo- contestó el castaño poniéndose de pie, no sin antes dejarle un beso en la frente al otro y otro en el abdomen.
Tony entró en el baño y comenzó a alistar todo, cuando la voz de su I.A. resonó en el lugar;
-señor, tiene una llamada de la señorita Janeth- se escuchó decir a la voz cuando el otro se detuvo y bufó con algo de molestia
-pásamela, Jar y gracias- contestó
-buenos días, Anthony- escuchó de inmediato la voz de la mujer
-buenos días, Janeth ¿cómo estás hoy?
-alguien está de muy buen humor
-pues sí. - el moreno detuvo el agua y la probó sonriendo con satisfacción -Dime ¿para qué me llamas?
-me preguntaba si quieres ir a almorzar conmigo, ya que quiero disculparme por lo que sucedió en la gala
-no es conmigo con quien debes disculparte, Jan y lo siento, hoy no puedo. - interrumpió el hombre y miró hacia la puerta - ¡Stevie! ¡Ya está listo!
- ¡en un momento! - escuchó la voz del rubio
- ¿porque no? Sé que aun sigues molesto conmigo y agradezco que me hayas recibido la llamada hoy, ya que has negado las demás, pero… ¿Por qué no puedes ir conmigo a comer hoy? Tienes libre ¿no? - dijo la voz de la mujer, Tony recordó que seguía ahí y se asustó un poco
-hoy iré con Steve, Peter y los niños al parque de diversiones. Sé lo prometí a Peter
- ¿niños? ¿los amigos de Peter?
-los sobrinos de Steve... Bueno... Ellos le llaman tío, son hijos de Clint él novio de Bruce y llegaron anoche a la ciudad
-entiendo... ¿Puedo acompañarlos? Así podríamos hablar y quizá… disculparme con tu omega
-mmm no creo que sea prudente, Jan. Quería pasar el día con mi familia
- ¿tu familia? ¡Increíble! Ese omega te lavó el cerebro y de paso, te está metiendo a su gente- la mujer comenzó a reírse
- ¡hey! - soltó el otro molesto - ¿De verdad estas llamando para disculparte? ¿o solo quieres molestarme más?
-lo siento, lo siento
-además, simplemente le prometí a Peter que iríamos y pues... Mi esposo quiere ir y Peter quiere ir con los niños para divertirse
- ¿tu esposo? Hilarante.- la mujer guardo silencio por un momento y el alfa castaño no notó, la cabellera rubia que se encontraba junto a la puerta escuchando la conversación -Ten cuidado Tony, ese omega se está metiendo en tu cabeza más de lo que crees. Tú no eres de hacer estas cosas
-ya tuvimos esta conversación, Janeth. Así que detente en este momento, solo voy a pasear con…
-su familia...
-con mi hijo y mis nuevos sobrinos
-aun así, Tony. - se escuchó un suspiro -Eres increíblemente iluso... Te está usando... Para sacarte cosas y dinero... Además de que, posiblemente mucha gente te vera con ese enorme omega rubio en el parque y con tres niños ¿Qué es lo que pensaran?
-que somos une hermosa manada y que mi omega en cinta se ve precioso con esa enorme pancita. - el hombre se detuvo al oír a Steve, quien sin querer botó unas cosas cerca de la puerta - ¿Sabes que Jan? Ya no voy a seguir con esta conversación porque no está llegando hacia ningún lado. Debo colgar y aun debes esa disculpa
-lo sé. Adiós, cariño- dijo la mujer en el momento en que el rubio entró en el lugar con media sonrisa en su rostro
-disculpa, me sentía un poco mareado- comentó el omega viendo el rostro molesto del otro - ¿estás bien Tony?
-sí, ven. Entra ya está listo- contestó el otro con el ceño fruncido y quietándose su ropa mientras se acomodaba en la bañera. Steve asintió y quitándose sus propias ropas entró junto a él, acomodándose entre las piernas de este y dejando que este jugará con su cabello.
Los minutos pasaban lentamente y Steve se sentía tan relajado que no notaba la inquietud de quien estaba atrás de él ni de la suya propia por lo escuchado;
-oye- comenzó a de ir el moreno sin dejar de jugar con el cabello del otro
- ¿mmm? - preguntó sin abrir sus ojos sintiendo como una mano del otro se deslizaba hacia su abdomen donde estaba su cachorro
- ¿ya te sientes mejor? ¿te sientes bien para ir al parque? - el rubio abrió los ojos de golpe y se acomodó un poco aún sin ver al otro
- ¿porque dices eso? Estoy bien, - se rio volteándose a ver al alfa -solo fue un poco de mareo, es normal, escuchaste a Strange. Además, me cuesta caminar, pero puedo pasarla bien
-no es por eso... Bueno en parte si, pudieras sentirte mal y todo y me preocupa que estés incómodo o te empieces a sentir mal.
>> Sé que “tonto” Strange dijo que no había problema, pero me preocupa la salud de ustedes dos, cariño. Te has estado mareando mucho y sintiéndote peor
-Tony, enserio estoy bien. - Steve tomó el rostro del otro entre sus manos y le miró con cariño recibiendo la mirada preocupada del ingeniero -Hoy nos vamos a divertir mucho, ya verás. Nunca he ido a un parque de diversiones y estoy muy emocionado, aunque no pueda subirme en casi ningún juego
-yo... En serio no creo que sea conveniente que vayas. Mejor quédate aquí con Clint o visita a Thor… ¡oh mejor aún! Quedémonos los dos aquí descansando y ya cuando nazca nuestro cachorro, podemos ir y así podrás subirte a los juegos
- ¿pasa algo? ¿Porque no quieres que vaya? ¿Fue por lo que dijo esa mujer sobre mi familia? – el otro lo miró
- ¿lo que dijo esa mujer? ¿estabas escuchando mi conversación?
-escuche cuando esa mujer llamó y también que le decías que debía disculparse conmigo. También… como se burlaba y nuevamente decía cosas espantosas de mi
-Steve, no quiero que pienses cosas equivocadas. Yo no estoy haciendo caso a nada de lo que me está diciendo. Es solo que de verdad temo mucho por su seguridad
-entonces, si le estás haciendo caso a lo que esa horrible mujer está diciendo. Parece ser que yo “me estoy metiendo” en tu cabeza
- ¿Qué? ¡yo no dije eso! ¡de verdad estoy preocupado por ustedes! – el moreno le vio sorprendido -De hecho, estaba pensando en enviar a los niños con Clint y Brucie, para que tú, yo y panquecito pasemos el día juntos
-sabía que era demasiado bueno para ser verdad. - soltó molesto el oji azul poniéndose de pie y saliendo de la tina. Se tapó con una toalla y se acercó a la puerta -Si te avergüenzas tanto de mí, sé sincero y dímelo directamente
- ¿Qué? Steve, espera... ¡yo no me avergüenzo de ti!
- ¿a no? - el rubio se pellizco el puente de la nariz y le dirigió una mirada de dolor y enojo -Estoy cansado de que siempre sea lo mismo, Anthony. Estoy cansado de que me vean como lo que no soy y de me traten mal ¿sí? Pero me acostumbré
-Steve... te estoy diciendo que no le estoy haciendo caso a Janeth, en realidad estoy muy molesto con ella
-claro… ahora resulta que a mi esposo le avergüenza que nos vean con tres niños en un parque de atracciones... ¿Que pasara entonces cuando nazca el nuestro? ¿Lo llevaras a pasear con Pepper mientras tú estúpido esposo omega se queda en casa limpiando y cocinando galletas? -
- ¡¿de qué demonios estás hablando?! - el rubio suspiró y se volteó
-gracias por recordarme que soy un fenómeno. Que se diviertan hoy...
-Steve... ¡espera! - intentó decir el otro, pero el rubio ya había salido del lugar. El moreno se quedó viendo hacia la puerta -Jar… - dijo al aire
-dígame, señor- respondió la I.A
- ¿Qué demonios acaba de pasar?
-lo atribuyo a uno de los cambios de humor por el embarazo de su esposo y también a la llamada que recibió
- ¿Qué puedo hacer?
-dele espacio y luego háblele, ya que aun esta algo molesto
-bien.