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Pelea por gxt

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- Potter, Potter.
El joven azabache, giró hacia la voz, una preciosa chica le estaba dirigiendo la palabra.
- ¿Qué quieres Imelda?
- ¿tienes acompañante para la fiesta?
- Emmmmm, no.
El muchacho al escuchar esa pregunta se sonrojó.
- Entonces, ¿quisieras ir al baile conmigo?
La muchacha irradiaba felicidad, esperando la respuesta de unos de los chicos mas pretendidos de la escuela; esperaba una
respuesta afirmativa, pero al escuchar la respuesta del adolescente, la desilusión se hizo presente en el rostro del la chica.
- Lo siento Imelda, pero no asistiré al baile.
- Pero todos decían que tu me ibas a invitar escucharon que tu le decías a tu amigo, por eso he rechazado a un montón de personas, por ti Potter.
- Aaaa suspiró, mira Imelda no debes guiarte por lo que otros creyeron, yo nunca mencione que te invitaría.
- esta bien Potter, descuida, buscare a otro chico.
- Suerte Imelda.
La mujer se marchó dejando al chico solo.
En otro lado del castillo, otro muchacho estaba en la misma situación.
- Vamos Malfoy, ven al baile conmigo, por favor.
- Ya te he dicho que no Masie, no insistas.
- ¿Por qué no quieres?
- No iré a ese baile, ese tipo de cosas no me gustan.
- Eres un aburrido Malfoy.
- Lo que tu digas, sigue tu camino niña.
Masie se fue indignada del lugar, a su vez el rubio se quedó mirando por la ventana que daban al lago negro, el ruido del agua lo tranquilizaba, ya estaba harto de escuchar esa pregunta, desde que la profesora Macgonagall anunció esa fiesta, las cartas de las chicas tímidas, que no se animaban a preguntarle personalmente al rubio, no paraban de llegar, por eso decidió no ir al gran comedor esa noche, preferiría mirar por la ventana, cuando se aburrió, entró a su habitación, se tiró en su cama, cerró las cortinas, saco la varita de su túnica.
- Lumos
Luego de hacer el conjuro, saco de debajo de la almohada, un libro y se dispuso a leer.



- Oye hermano, hermano, no me ignores.
- Se lo que me vas a preguntar James, y la respuesta es no, no iré al baile.
- Pero será súper divertido Albus.
- A ver si entra en tu cabeza, NO VOY A IR.
Tras el grito de Albus, todos los que estaban en el gran comedor observaron al par de hermanos.
- MUY BIEN, YA QUE CAPTÉ SU ATENCI“N, LES INFORMARÉ QUE NO TRATEN DE INVITARME MÁS A LA FIESTA, YA QUE NO ASISTIRÉ, muchas gracias.
- Jaja (risa nerviosa)
- ¿Qué hay de ti? ¿tienes pareja?
- O si, claro que tengo, es bellísima, es de tu año.
- Hay no, ¿quién es? Dijo asustado.
- Es Imelda Perry.
- Perry, solo te pido una cosa James, no te acuestes con ella.
- ¿qué? ¿por qué?
- Un chico de ravenclaw, se acostó con ella el otro día, y le dio sarpullido allí abajo, el pobre no paraba de rascarse, y lo tuvieron que llevar a la enfermería, y como ahí no pudieron encontrar una solución, se lo llevaron a san mungo.
- ¿Qué?, ¿no estarás exagerando?
- Bueno lo de san mungo, si lo exageré, pero lo otro, si es verdad, así que ten cuidado hermano.
- Bueno gracias por la información hermanito, y también gracias por sacarme el hambre con tu asqueroso relato.
- Jaja de nada James, para eso estamos los hermanos.
El joven Potter salió del gran comedor, pero fue interceptado por otro estudiante.
- Hola Albus.
- ¿Hola?
- He visto, que has rechazado muchas invitaciones de chicas.
- Si ¿y?
- Bueno, también note otra cosa, solo te interesó una carta, y esa carta era de un chico.
- ¿y tu qué sabes? Esa carta era de una chica, la única que consideré llevar al baile. Mintió el pelinegro.
- Eso es mentira Potter, porqué esa carta la escribí yo.
- ¿cómo?
- Si fui yo.
- Pero tu eres de primero.
- Te equivocas, soy de segundo.
- ¿tu eres compañero de mi hermana?
- Si.
- Ok.
- Albus.
- ¿qué?
- Sígueme, por favor.
- Está bien, te sigo.
El chico comenzó a caminar, Albus lo seguía, el menor dobló por un pasillo oscuro, tomó de la mano a su mayor con fuerza, acto seguido acorraló a Albus contra la pared, comenzó a besar al muchacho, que quedó sorprendido por el acto del menor, al rato correspondió al beso, el menor comenzó a desabrochar el pantalón del mayor, una vez que lo logró, manoseo el pene de Albus, que aún no se paraba. El mayor se separó, del beso.
- No, para.
El chico estaba en un transe, embelesado por la belleza del otro, pero al escuchar lo que Albus dijo se tranquilizo.
- Hay perdón, Potter, no quise hacerlo, no se lo que me pasó, lo siento.
- No paso nada, está todo bien.
- Entonces Albus, ¿quieres ir al baile conmigo?

En las habitaciones de la casa de Slytherin, el rubio seguía leyendo su libro, un golpe a la puerta lo distrajo de su lectura, sin ganas se levantó de la cama, abrió la puerta eran Zabini y higgs que se venían riendo a carcajadas.
- ¿de que se ríen ustedes dos?
- Jaja no vas a creer lo que hizo Potter. Mencionó Zabini.
- ¿cuál de los tres?
- Pues Albus.
- Pf ¿Qué ha hecho ahora? Dijo asustado.
- Le grito a todo el mundo que no lo invitaran al baile, porque no irá.
- Fue alucinante, todos se quedaron callados.
- ¿Eso hizo?
- Si.
- Hablando de Albus ¿no vino con ustedes?
- No, el se fue mucho antes, ya debería estar aquí.
- Que raro, Albus siempre viene directo hacia aquí.
En ese momento la puerta fue abierta de golpe, los tres se quedaron observando al chico que entró al cuarto, al ver como estaba su compañero de cuarto, le pidió muy amablemente a sus amigos que se retiren de la habitación.
- Chicos se pueden ir en un rato los veo, en la sala común.
Los chicos acotaron la orden del rubio, cuando pasaron por alado del azabache, lo miraron muy serios, habían notado la mirada de enojo que el chico le había dado a Albus.
- Albus, tienes los labios hinchados, ¿Qué paso?
- Es que.
- ¿Qué? No intentes meterme escusas Potter.
- Un chico me beso Scorpius.
- Aja y tu te dejaste ¿verdad?
- Tu no eres nadie para cuestionarme Malfoy.
- Claro que si, soy tu novio mierda.
- Si un novio que estuvo con otra persona.
- Y tu que, ¿no acabas de venir de besuquearte con otro?
- Solo fue un simple beso, no como tu, que cuando te besabas con Elizabeth Moore, metiste mano debajo de su falda.
- ¿Qué?
- No te hagas el tonto, Malfoy los vi el otro día, después de la cena, tu te fuiste corriendo cuando viste que se retiraba, y yo como un idiota te seguí, y los vi, no me mientas Malfoy, yo me sentí un estúpido, me siento un estúpido, dime que no tuviste sexo con ella, Scorpius, me destrozarías.
Scorpius se quedó callado, mirando a Albus, sus lágrimas comenzaron a salir de sus ojos.
- El que calla otorga, eres una mierda Scorpius.
Albus salió corriendo con las lagrimas que caían por su rostro, los dos jóvenes que habían estado con el rubio anteriormente, vieron pasar al chico Potter corriendo por su costado, Zabini hizo el amago de seguirlo, pero higgs lo detuvo.
- Vamos con Scorpius.
Caminaron hasta la habitación del rubio, lo vieron acostado en su cama, con la mirada perdida.
- La cague.
- ¿Qué cagaste?
- La relación de novios con Albus.
- O amigo lo siento.
- Nos vio, vio como me besaba con Moore, el otro día.
- Tu y Potter ¿eran?.....
- Novios, si.
- ¿por qué nunca nos dijiste?
- Albus y yo acordamos dejarlo en secreto.
- Tu no le habrás dicho que tuviste sexo con la chica ¿verdad?
- No, pero se dio cuenta solo.
- Por Merlín, Malfoy, si que la cagaste.
- Ya se.
El rubio se veía deprimido con la situación.
- ¿lo vieron? ¿cómo estaba?
Los dos muchachos suspiraron.
- Claro que lo vimos.
- Estaba llorando, nunca lo vimos así.
El primero en hablar fue higgs, seguido por Zabini.
- ¿podré recuperarlo?
- No se. dijo Zabini.
- Si fuera una mujer, te podría dar algún consejo, pero como se trata de un chico, no se que decir.
- Lo arruiné.

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