Algunos días pasaron, Kakashi caminaba de forma tranquila después de haber guiado ya un par de almas. Estaba ya algo cansado así que se metió a una cafetería cercana, tomo asiento en una mesa vacía y espero a que le tomaran su orden, al ver a su alrededor se dio cuenta que era el lugar de aquella vez por lo que pronto se levantó para salir de ahí cuando el castaño choco de nuevo con él.
—Lo lamento señor —se disculpó rápido para verlo fijamente —. Oh, es usted de nuevo, tome asiento, le traeré su pastel enseguida
—En realidad yo tengo que-
—No, no, será rápido esta vez, por favor siéntese —interrumpió Yamato tomándolo del brazo para llevarlo de regreso
Kakashi soltó un suspiro y se sentó resignado —Solo date prisa por favor
—Si, si, no tardare nada, espere un poco —Yamato fue casi corriendo hacia la cocina para regresar solo un par de minutos después —. Aquí tiene, la casa invita este, pero si quiere café ese si lo debe pagar —dijo sonriendo para poner la rebanada frente a Kakashi
—Así está bien, gracias —dijo dedicándole una sonrisa
— ¿Seguro que lo comerá sin bebida? No necesariamente debe ser un café, también le puedo traer un té o un jugo
—Así está bien, gracias
—Aunque el café es muy bueno, puede pedir un americano, capuchino, expresso, si quiere una sugerencia él Mokaccino es mi preferido —insistió Yamato mientras abrazaba la bandeja donde llevaba la comida
—Un Latte estaría bien —dijo finalmente ante tanta insistencia
—Enseguida lo traigo, espere un poco —Yamato se fue sonriendo de nuevo
Kakashi vio a su alrededor mientras esperaba, había un par de meseros más en el lugar, pero de nuevo se había topado con aquel chico de ojos enormes, ¿era acaso alguna broma del destino? Negó con la cabeza ante aquel pensamiento, el leer algunos relatos de romance le estaba afectando
Yamato regreso con la bebida para ponerla frente a él —Bien, aquí tiene, que lo disfrute, si necesita algo más no dude en llamarme —dijo sin quitar su sonrisa
—Está bien, gracias eh…—Kakashi leyó la tarjeta que portaba el chico con su nombre —Yamato
El shinigami disfrutaba su postre mientras veía a su alrededor, de entre los meseros en el lugar Yamato parecía sobresalir, atendía a todos de forma amable, claro que le pagaban para eso, pero algo en él era distinto al resto.
—Kakashi, Kakashi —Una voz familiar lo llamo sacándolo de sus pensamientos, era Obito que se sentó frente a él —Que suerte que te encuentro, me acaba de pasar algo extraño
— ¿Cómo sabias que estaba aquí? —preguntó Kakashi extrañado
—Iba pasando y te vi, pero calla y escucha, me llego esta tarjeta —Obito le mostro el papel con los datos de la alma que debía guiar
—“Rin Nohara, edad 24 años. Causa de la muerte, atropellada” —leyó Kakashi para luego ver a su compañero — ¿Y luego?
—Fui al lugar donde se supone seria y cuando iba a empujar a la chica para que ocurriera no pude hacerlo
— ¿Por qué no? Es tu trabajo
—Yo, solo, no pude hacerlo, cuando me acerque a ella y la empuje hacia el tráfico algo hizo que siguiera empujando para salvarla, fue muy extraño
—Tú de por si eres extraño, pero aun así debes hacerlo cuando la fecha nueva llegue
Obito vio la tarjeta cuya inscripción comenzaba a desaparecer— ¿Y si esa chica tiene algo que ver con mi vida pasada?
—Deja de pensar en estupideces Obito, incluso si es así ni tú ni ella lo recordaran
— ¿Entonces por qué no pude hacerlo?
—No lo sé, pero será mejor que te prepares para hacerlo después
—Bienvenido señor, ¿puedo ofrecerle algo? —preguntó Yamato acercándose al notar a Obito
—Así estoy bien, gracias —contestó Obito guardando la tarjeta
—Puedo ofrecerle algo de beber o comer, quizá un café para que acompañe a su amigo —sugirió el chico
—Pide algo o no se ira —murmuró Kakashi
—Un americano está bien
—Enseguida lo traigo —dijo Yamato para irse
—Al menos esa chica no te vio, ¿verdad? —preguntó Kakashi para beber de su café
—Bueno…digamos que cuando seguí empujando para salvarla mi sombrero voló y fui visible para ella —decía mientras recordaba lo ocurrido
—Pero borraste su memoria, ¿no?
Obito sonrió torpemente —Quizá, olvide ese detalle
— ¿Cómo puedes olvidar algo tan importante como eso? —incrimino Kakashi frunciendo el ceño
—Es que todo fue muy rápido, y yo…me perdí en su linda sonrisa cuando me agradeció el salvarla —Obito se sonrojo al recordarlo
—Déjate de tonterías, no solo rompiste las reglas, sino que ni siquiera cumpliste el protocolo
—Eres muy duro conmigo —Obito hizo un puchero
—No entiendo como después de siglos haciendo esto no te tomas enserio el trabajo
—Solo fue un error que comete cualquiera —se excusó levantando los hombros
—No fue solo un error, lo que hiciste es inaceptable, además de que después de tanto tiempo no deberían de ocurrir estos errores
—Pues perdón, okey, no entiendo porque te escandalizas tanto, al final quien será castigado seré yo
—Espera, no hiciste esto adrede, ¿o sí?
—No, ¿por qué haría algo así? —Obito se hizo el desentendido
—Porque sabes que el castigo es que te regresen tus recuerdos
— ¿En serio? A penas me vengo enterando de eso —dijo Obito fingiendo sorpresa
—Obito, si es un castigo no creo que lo que te den y como te lo den sea precisamente bueno, así que cuando vuelvas a ver a la chica asegúrate de terminar el trabajo
—Eres tan mandón —Obito hizo un gesto de disgusto —, no quiero hacer lo que tengo que hacer
—Nadie quiere hacerlo, por algo esto también es un castigo
Obito puso su brazo en la mesa para recargar su rostro en este —Pues ojala no la vea pronto
—Aquí está su café, que lo disfrute —Yamato le puso la bebida enfrente
—Gracias —contestó Obito para tomarlo y darle un sorbo
—Si necesitan algo más estoy a sus órdenes
—Por el momento estamos bien —dijo Kakashi
— ¡Hermano! —una voz llamo haciendo que Yamato se girara a la entrada
—Rin, ¿qué haces aquí?
Obito giró la mirada de forma inconsciente para escupir el café de golpe en su compañero
— ¡Ah! ¿Le paso algo? ¿Está muy caliente? —preguntó Yamato preocupado
—Sí, yo me queme la boca, estoy bien —dijo obito tomando una servilleta para cubrir su rostro mientras fingía limpiar
—Eres tan idiota—dijo Kakashi tomando igualmente una servilleta para limpiarse
—Si todo está bien vuelvo después —dijo Yamato para acercarse a Rin
— ¿Qué te pasa ahora? —preguntó Kakashi viendo a Obito
—Es ella —contestó en un murmuro
Kakashi se giró a ver a la chica en ruedas que platicaba con Yamato —Pues creo que ya te vio porque está señalando hacia aquí
—Ay, no, que no se acerque, que no se acerque
—Ya viene —dijo Kakashi para girarse a verlo
Obito maldijo por lo bajo para quitar la servilleta y ver el rostro sonriente de la chica que empujaba su silla de ruedas hacia él.
—Parece el destino quiere que nos encontremos de nuevo —dijo Rin para ponerse a su lado
—Sí, eso creo —Obito sonreía de forma nerviosa
—Yo estaré siempre agradecida por lo que hizo, en verdad muchas gracias —decía inclinando su cabeza hacia el frente haciendo una pequeña reverencia—, solo que olvide preguntar el nombre de mi salvador
—Me llamo Obito
—Muchas gracias Obito —Rin junto sus manos mientras le sonreía provocando que las mejillas de Obito se pusieran rojas —. ¿Hay algo que pueda hacer como agradecimiento?
—No, yo, en verdad no fue nada —dijo Obito con modestia
—Debe haber algo, pide lo que quieras
—No, en serio no fue nada —insistió Obito
— ¿Qué tal si sales con él? —sugirió Kakashi
—Oh, ¿una cita? —Rin se giró a ver al peli plata para ver de nuevo a Obito quien estaba aún más rojo —. Me parece buena idea, ¿qué dices Obito?
—Sí, creo que está bien —respondió con nervios
— ¿Pasa algo? ¿No te agrada la idea? —Rin bajo la cabeza desanimada
—No, no, no, me parece perfecto, es solo que…yo —Obito pensaba en una excusa, no era su intención parecer que la rechazaba
—Obito no ha tenido contacto con mujeres en años, es por eso que está muy nervioso, además de que es muy idiota —dijo Kakashi
Obito asintió rápidamente —si, si, es eso ¿eh? ¡Oye! No digas eso frente a ella —reclamó molesto
Rin cubrió su rostro con sus manos para reír por la actitud del azabache. —Entonces es una cita, queda poner hora y fecha
Mientras Obito y Rin se ponían de acuerdo Kakashi le hacía una seña a Yamato quien se acercó rápidamente.
—La cuenta por favor
—Claro señor —Yamato saco un papel para apuntar y ponerlo en la mesa
Kakashi vio el monto para sacar el dinero y ponerlo en la mesa, tras eso se levantó.
—Gracias por regresar a pesar de lo que ocurrió la vez pasada
—No es nada, solo debemos tener más cuidado para dejar de chocar
—A mí no me molesta chocar si es con usted —bromeo Yamato
Kakashi solo se limitó a sonreír por el comentario. —Yo debo retirarme, pero gracias por el pastel
—Gracias a usted por regresar, espero verlo pronto —Yamato hizo una leve reverencia
—Nos vemos —Kakashi salió del local para colocarse su sombrero y ser invisible para la gente
—Entonces nos vemos ese día, no te entretengo más ya que parece que tu amigo se fue —decía Rin
—No te preocupes, es agradable hablar contigo —contestó Obito sonriendo
—Lo mismo pienso Obito —Rin levantó la mirada, sus ojos marrones vieron fijamente a los del shinigami, fue entonces que lo sintió, un dolor punzante en su pecho como si apretaran su corazón, lagrimas comenzaron a salir por sus ojos, un sentimiento de tristeza lo invadió por completo. — ¿Estás bien? —preguntó la castaña al ver que se había quedado pasmado
—Sí, es solo que, creo que algo entro en mi ojo —Obito tallo ambos ojos con sus manos para limpiar las lágrimas —Yo, debo irme —se levantó con prisa para tomar su sombrero
—Nos vemos —dijo Rin al ver como el azabache ponía el dinero de su café en la mesa, parecía tener ahora si prisa por irse
—Nos vemos después —Obito fue hacia la salida casi corriendo, vio a su alrededor intentando localizar a su compañero quien iba una cuadra adelante, se colocó su sombrero y fue corriendo hasta alcanzarlo. — ¡Kakashi! ¡Kakashi!
—Mm —se detuvo para girarse a verlo— ¿qué pasa ahora?
—Yo, sentí algo raro, creo que lo mismo que te paso a ti con el chico —habló de forma agitada
— ¿A qué te refieres?
—Rin, ella, me vio directo a los ojos y entonces me dolió el pecho y comencé a llorar de la nada, fue muy extraño
—Así que también sentiste ese dolor —Kakashi llevo su mano a su pecho
—Sí, ahora más que nunca creo que ella tiene algo que ver con mi vida pasada
—Obito, te dije que olvidaras eso
—Yo iba a dejarlo pero después de esto quiero saber más… ¿o tú no quieres saber por qué lloraste cuando viste a ese chico?
Kakashi desvió su mirada, si quería saberlo pero se trataba de convencer que no era así.
—Hay que investigar más sobre esto
—No, no me involucres en esto —dijo Kakashi negando con la cabeza
— ¿Por qué?
—Ya te lo dije, si fuimos convertidos en shinigamis es porque cometimos un pecado imperdonable en nuestra vida pasada, y si tuvimos esa reacción con ellos significa que cualquier cosa mala que hayamos hecho los involucra
—Pues yo sí quiero saber qué fue lo que hice, de esa forma podré compensarlo en esta vida
—Haz lo que quieras pero no me involucres en esto, no pienso romper las reglas —dijo Kakashi para seguir su camino
—Ni siquiera necesito tu estúpida ayuda, yo puedo hacer esto solo —Obito fue por el lado contrario y tras dar un par de pasos ambos se detuvieron, aquello se sentía como un extraño déja vu también, Obito se giró a ver a su compañero pero Kakashi prefirió ignorar la sensación para seguir con su camino.