I don't want to miss one smile
And I don't want to miss one kiss
And I just want to be with you
Right here with you, just like this
And I just want to hold you close
I feel your heart so close to mine
And just stay here in this moment
For all the rest of time
Yeah, yeah, yeah, yeah, yeah
-¿Está listo lo que solicité?- cuestionó el rubio a su mejor amigo
-Por supuesto Abbadon, tenemos una habitación lista para ti y para Morgan, Virginia y Harold estarán aquí para cuidar de Tony- contestó Helmut
-Excelente, quiero que se aseguren de tener la cocina surtida, va a necesitar multivitamínicos y electrolitos, muchas frutas y verduras frescas…
-Abbadon- le interrumpió- todo estará bien, te lo prometo
-Yo… lo siento, sólo quiero que esté cómodo- confesó el rubio con un suspiro pesaroso
-O bien podrías hacerte cargo de su celo y cuidarlo- dijo el castaño mirando a su amigo
-No, no creo que sea buena idea. Quiero darle su espacio
-Amigo…- le interrumpió- Tu querido omega ya tiene dos años viviendo aquí, Morgan ya cumplió un año y tienes casi diez meses que iniciaron con el cortejo. Me parece que tiempo y espacio lo han tenido de sobra…
-Esperaré a que min valpen* tenga diez años de ser necesario. Después de lo que Rogers les hizo pasar, no voy a obligarlo ni presionarle de ninguna manera- declaró el de ojos rojizos con decisión.
*********
Tony se levantó con cuidado y admiró su obra, en el centro de la gran cama se encontraban numerosas prendas de Abbadon, todas perfectamente dobladas y acomodadas por el castaño quien aspiro el fuerte aroma de su pareja y asintió satisfecho.
-¿Anthony?- la voz del menor se escuchó desde la sala por lo que se dirigió a él, encontrándose al inicio del pasillo
-Hola guapo- saludó acercándose al alfa
-¿Dónde está Morgan?- cuestionó el rubio tomando las manos del mayor
-Con sus padrinos- contestó soltándose y pasando sus manos por el amplio pecho del más alto para abrazarlo por el cuello
-¿Y dónde están ellos? Quería hablar con Pepper…
-Tendrá que ser después, están preparándose para partir
-¿Disculpa?- le interrumpió sorprendido
-Sí, quieren llevar a Magoona unos días a Malibú. No te preocupes, les dije que buscaran a Helmut para que les asigne algún agente que les acompañe, así estarás más tranquilo ¿no?- dijo Tony con una sonrisita coqueta
-…
-Déjame adivinar. Te diste cuenta que tu destinado estaba cerca de tener su celo y decidiste que lo mejor era traer a mi mejor amiga para que me cuidara mientras tú te hacías cargo de cuidar a nuestra cachorra ¿correcto?
-Sí, quería que estuvieras cómodo- murmuró el de ojos escarlata- y sabes bien lo que pienso del destino…
-Si no eres mi destinado entonces ¿cómo es que estamos aquí?- le interrumpió pegándose más a su cuerpo
-… no lo sé- confesó el otro
-Tengo cuarenta y tres años, mi destinado nunca apareció. Y entonces llegas tú y estamos aquí, actuando de manera que se supone que no es posible, no puedes negar lo obvio Ab.
-Tony…
-Te amo- confesó el castaño por primera vez después de diez meses de cortejo- y amo que en lo primero que pensaste no fue en follarme en cada rincón de nuestro hogar, sino en mi comodidad y la seguridad de Morgan
¿Me amas?- cuestionó tomándole de las caderas y pegando sus frentes mientras sus feromonas revoloteaban alrededor
-Como no tienes idea, beloved- susurró contra los labios del alfa
Abbadon contestó el beso con necesidad, sus manos se aferraron a la espalda baja del castaño y sus feromonas se dispararon inundando por completo el pasillo mientras sus lenguas luchaban oír el dominio de aquel beso, si Tony aun no entraba en celo, pronto lo haría.
-La habitación- susurró el castaño entre besos y el rubio le cargó haciendo que se abrazara a su cintura con las piernas
-¿Estás seguro de esto?- cuestiona Abbadon besando la piel de su cuello y clavículas mientras entran en el cuarto donde sus aromas son aún más intensos y saturan del ambiente hasta el límite de la asfixia
-Completamente, pero tengo una condición- murmuró mientras era depositado con suavidad en su nido
-¿Cuál?- cuestionó mirándole con curiosidad
-Morgan necesita su espacio, así que le donarás tu habitación y dormirás aquí conmigo como debe ser- ordenó el omega mirándole a los ojos
-Me parece justo- contestó el rubio con una amplia sonrisa
Se volvieron a besar con ansias mientras el rubio se dedicaba a desnudar a su pareja, sus manos recorrieron cada milímetro de piel, maravillándose con su suavidad y tomándose el tiempo para adorar cada marca y cicatriz, sobre todo aquellas situadas en su pecho. Su lengua y dientes se encargaron de adorar al castaño haciéndole estremecer por completo, haciéndole susurrar pidiendo por más entre jadeos y gemidos contenidos cuando el alfa comenzó a prepararle a consciencia con suma calma a pesar de lo mojado y dilatado que se encontraba, moviendo sus dedos suavemente, acariciando y estirando sus paredes internas mientras admira el hermoso desastre que es su Anthony con el pecho enrojecido y la piel perlada en sudor.
-Ab, por favor- murmuró el castaño
-Eres perfecto min kjaerlighet*- susurró contra sus labios mientras retiraba sus dígitos y comenzaba a desnudarse
-Beloved…- Tony suspiró necesitado con la mirada fija en el cráneo y tentáculos rojos bellamente plasmados en el amplio pecho del rubio
-Shhh, te tengo cariño- el rubio se colocó entre las piernas de su omega acariciándolas en el proceso, con sus dedos surcando la piel con la fuerza exacta para provocarle escalofríos, antes de guiar su erección a la entrada del mayor y presionar
-¡Ah! Sí…- gimió arqueando la espalda al sentir aquel pedazo de carne abriéndose paso en su interior y llenándole por completo
-¡Oh, sí! Anthony… tan estrecho- gruñó quedándose tan quieto como le era posible mientras se dedica a besar su pecho y tentar sus pezones causándole cosquillas con la rasposa barba
-Ab… alfa, muévete por favor…
El rubio gruñe tenuemente y obedece saliendo casi por completo antes de volver a enterrarse en aquel delicioso agujero, ambos gimen a la par mientras el menor paulatinamente comienza a aumentar el ritmo de sus embestidas y el más bajo se abraza a sus caderas con las piernas.
-¡Mierda! Sí así…- Tony sintió la marca arder pero poco le importó pues la carga hormonal en el ambiente por fin desató su celo, lo único en que podía pensar era en el calor abrazador que sólo las estocadas de su alfa pueden contener
-Jeg esker deg*- Abbadon gruñó de nuevo, esta vez desde lo hondo de su pecho sintiendo su lado más primitivo surgir, sus manos se cuelan bajo la espalda de su omega para enderezarse y cargarle con suma facilidad
-¡Ab!- Tony grita con fuerza y se aferra a la espalda del alfa arañándole al sentirle tan profundo
-Hermoso- susurra el aludido comenzando a moverle a su voluntad como si no pesara nada, lamiendo y besando la glándula omega donde ahora se encuentra una marca punzante y enrojecida
-Por favor…- Tony llora de placer y todo su cuerpo se estremece por el inminente orgasmo- Abbadon, alfa… por favor
-Córrete para mí- pide con voz ronca mordiendo para dejar su propia marca
-¡Alfa!- el moreno grita haciendo sangre de la espalda del menor mientras se viene contra el pecho pálido del noruego, su interior se estrecha haciendo que Abbadon termine por anudarle y llenar su interior con chorros de su caliente semen
-Aghh, mierda. ¿Estás bien amor?- susurra con la respiración agitada contra la marca sangrante, lamiéndola con cariño y acunando al mayor contra su pecho
-… Lo estoy- contesta Tony con el rostro escondido contra su cuello, la marca arde y el pecho le duele como si le hubiesen arrancado algo, sin poderse contener solloza quedamente al sentir sus latidos sincronizados con los de Abbadon además de la ternura que le dedica
-Shhh mi amor ¿te lastimé?- cuestiona el alfa preocupado
-No- contesta enderezándose para verle antes de que el rubio le acomode con cuidado contra el colchón y acaricie su rostro
-¿Entonces qué sucede?
-Te siento- contestó con voz llorosa- Sólo te siento a ti… Eres mi alfa, tú y sólo tú.
-Hasta el fin de mis días min kjaerlighet*- juró besando sus parpados y limpiando sus lágrimas
Abbadon se gira despacio para acomodar a su omega sobre su pecho aun unidos por el nudo, besa sus cabellos y acaricia su espalda mientras sus feromonas los rodean, haciéndole saber cuánto lo ama y que siempre estará para él.
*********
Siete días pasaron en los cuales Abbadon y Anthony se dedicaron a amarse libremente dejando ir sus miedos, confiando en el otro, permitiendo que cada beso y caricia hablen más que cualquier palabra.
-¿Estás bien kanelgifler*?- cuestionó el rubio abrazando a su omega por la espalda mientras se miraba en el espejo
-Mejor que nunca mio sole*- contestó girando en sus brazos- Tengo un alfa maravilloso que no sólo me dio la mejor follada de mi vida, sino también me cuidó y alimentó adecuadamente…
-¿La mejor de tu vida?- cuestionó con una sonrisa sucia antes de besarle lentamente
-La mejor- contestó aun contra sus labios- Te amo alfa…
-Dilo de nuevo- pidió delineando su mandíbula con la nariz y aspirando lento
-Alfa, mi alfa- dijo con una sonrisa y su aroma dulce mostrando su felicidad
-Te amo tanto Anthony- susurró besando la marca que estaba terminando de cicatrizar
-¿Mucho?- cuestionó juguetón
-Demasiado, no sé qué he hecho en esta vida para merecerte- declaró estrechándole con fuerza
-Existir- dijo Tony haciendo que le mirara- Ser un gran hombre, un maravilloso alfa y un increíble padre…
-Señor, el Barón Zemo informa que su pedido está listo- informó F.R.I.D.A.Y., Tony había dejado todo listo para su instalación mientras disfrutaba del celo con Abbadon y ahora toda la base incrementaría su efectividad gracias a su I.A.
-Gracias querida- murmuró alejándose un poco de su pareja
-Ese traidor, no me contó tus planes- se quejó Abbadon con falsa molestia
-Te conoce bien asi que me ayudó- murmuró el mayor divertido
-¿Puedo saber cuál fue tu pedido?
-Bueno, hoy le daremos una habitación decente a nuestra nena- contestó con una amplia sonrisa
-¿Y que esperamos?- dijo el rubio emocionado, soltó a su pareja y le dio un casto beso antes de salir en dirección a la sala
Tony sólo pudo sonreír ante el entusiasmo de su alfa, no había día en que no agradeciera la presencia de Abbadon en su vida.