Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Amor de cristal por RLangdon

[Reviews - 4]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

N/A: este no es el final definitivo, solo es el final alternativo que escribí para la historia porque terminó gustandome el SasoNaru y quería escribir dos versiones del final. 
 
Gracias por leer!
***
 
Estaba nervioso, muy nervioso, excesivamente nervioso, ¿y cómo no estarlo?
 
Ingresar al colegio de artes plásticas implicaba un nuevo reto. Fue entonces cuando el nerviosismo se convirtió en emoción. Y es que, por más que tratara de negarlo, amaba el arte, quizás no era muy bueno en la materia pero se esforzaba, era la única clase que realmente le entusiasmaba, de ahí que se hubieran vuelto tan amigos él y Deidara. A ambos les apasionaba la misma materia, aunque como era de esperarse, Deidara siempre lo superaba
 
Pero ese había sido su sueño después de todo, solo tenía que enfocarse en ello, lo demás perdía importancia
 
Naruto sonrió al ser abrazado con firmeza por la espalda, la silla se meció ligeramente a ambos lados. Un fuerte y sonoro beso en la mejilla lo hizo ruborizarse
 
-Sasori- pronunció despacio, permitiendo que la sonrisa se ensanchara aun más. El aludido se encogió de hombros ante el llamado. La cafetería estaba vacía y como siempre, Naruto era el único en permanecer ahí, tras la ultima hora de clases, permanecía en el mismo sitio, pensativo. Y pese a que compartían el almuerzo juntos, no bastaba, el tiempo era totalmente efímero e insignificante cuando se trataba de Naruto, del bello muchacho que lo había cautivado y actualmente la estupefacción inicial que tuvo al verlo, no había disminuido ni un poco
 
Contrario a eso, estaba más interesado en él. Quería encargarse de sanar las heridas internas de Naruto, así como deseaba ganarse su corazón
 
-Cada vez que te vea distraído te besaré- informó, tomando asiento frente al sonriente rubio que se había sonrojado visiblemente por el comentario, aunque no se trataba de una broma, era un simple y mundano aviso de lo que haría
 
Los ojos de Naruto se desviaron al ser tomado de las manos por el pelirrojo. No que le incomodara pero seguía sintiendo ese cosquilleo, y después de eso, su rostro entero se encendía. Demasiado desinhibido. Sasori no perdía la oportunidad para abrazarlo o besarlo en la mejilla por sorpresa cuando se encontraba solo en la cafetería, analizando, meditando una vez más la razón que lo llevo a dejar a Itachi
 
La boda había sido el detonante de todo, después de haber visto aquella chispa de duda en los ojos de Itachi supo que era lo mejor. Ambos sufrían al lado del otro, sobretodo él
 
Probablemente Itachi solo quería protegerlo pero para Naruto ese tipo de soluciones eran mucho peores que el problema en sí. Habría preferido, de tener la oportunidad, permanecer en el escondite de Orochimaru que presenciar a Itachi vestido de traje y listo para dar el si
 
Y a pesar de que la boda no se llevo a cabo, prefirió ceder, dejar de lastimarse, porque si Itachi volvía a hacer una cosa así solo para protegerlo, terminaría por herirlo aun más
 
Ni los constantes ruegos y disculpas de Itachi habían servido. Su decisión estaba tomada, cada quien iría por su lado, además, no quería ser una carga para Itachi, por mas tristeza que le provocara el hecho de dejarlo, de pensar que tal vez volvería en un futuro con Konan
 
La idea de ingresar a un instituto de renombre tampoco lo motivaba mucho. Él no era como esas personas superficiales y con metas banales como ser empresarios, él solo deseaba disfrutar de lo que hacía, moldear, dibujar, esculpir. Cosas sencillas pero que lo dejaban con una sensación de regocijo al ver concluido su esfuerzo, tal como sucedía antes
 
Afortunadamente Sasori le ofreció esa oportunidad, ni siquiera estaba enterado de que Itachi y él habían terminado, simplemente le había comentado sobre el colegio en el que se inscribiría, una de las tantas tardes en el restaurante. Porque Naruto no había renunciado tras la fallida boda. Más que nunca necesitaba el empleo, se valdría por sí mismo, ya no sería dependiente de nadie más
 
Y ahora, después de meses de arduo esfuerzo allí estaba, en el lugar indicado, uno donde no lo juzgarían por su vestimenta o su manía de comer dulces en exceso. Simplemente era él, un chico nuevo en un colegio como cualquier otro. Además, le quedaba bastante cerca de su departamento, uno pequeño que había logrado costearse gracias a un buen adelanto de su sueldo
 
La sonrisa que ahora adornaba sus labios no podía ser más sincera. Solo un matiz de melancolía se apreciaba en sus bellos ojos azules, se repondría de aquel noviazgo, claro que lo haría, solo era una grieta entre tantas que le habían provocado la vida…
 
-Fallo- Naruto cerró fuertemente los ojos al recibir otro beso, más cerca de sus labios esta vez. –El próximo será aquí- sonrió Sasori, posando su dedo índice en los suaves labios que tanto ansiaba probar. Sabía que era muy pronto pero quería ser él quien lograra devolverle la felicidad a Naruto, no esa mascara de sonrisas falsas, no, él más que nadie anhelaba ver la sonrisa genuina que lo había enamorado
 
Sufriría por él, lloraría por él, dejaría que Naruto lo usara a su antojo si con eso podía recuperar al hermoso y alegre muchacho que ahora se veía tan ausente en los recesos. Por más conversaciones escuetas que tuvieran sobre las clases, la barrera que había forjado Naruto estaba indemne, y no era para menos. Su primer enamoramiento había sido un rotundo fracaso, herida tras herida, miedo sobre inseguridad. Toda una vorágine de sensaciones negativas la relación que Naruto e Itachi habían formado
 
-¿Crees que te voy a dejar?- lo retó Naruto, levantándose con tanta rapidez de la silla que Sasori cayó irremediablemente en el borde de la mesa
 
-¿Crees que te pediré permiso?- bromeó a su vez. Complacido al ver la expresión divertida que esbozaba Naruto. Con solo verlo sonreír sentía que podía morir ahí mismo de la alegría que embargaba su corazón. Ojala Naruto lo supiera, ojala algún día se diera cuenta de que aquellas bromas cuya finalidad eran hacerlo sonreír, no eran más que simples reflejos del amor que aun sentía por él y que, rápidamente se intensificaba
 
Sasori aun conservaba la esperanza de que Naruto confiara en él, que se percatara de sus verdaderas intenciones, sin embargo no forzaría las cosas, él sería feliz aun si ambos permanecían como amigos
 
-¡Me gustaría que lo hicieras!- gritó Naruto a la distancia, sacando a Sasori de sus cavilaciones. El asombro ante tales palabras sacudió su cuerpo entero, una grata sensación lo invadió, aun si Naruto bromeaba, adoraba que le siguiera sus bobos juegos, bromas de una "no" pareja
 
Cuando por fin le dio alcance a Naruto, tuvo que sujetarse las rodillas de lo cansado que se sentía. Naruto tenía tanta energía que resultaba humillante tratar de compararse con él
 
Una vez que recobró el aliento, se incorporó despacio y buscó con la mirada al rubio
 
Miró tanto a su izquierda como a su derecha, frente a él…nada
 
Para cuando quiso darse cuenta, el sonido de un prolongado beso rompió el breve silencio que acompañaba sus pasos. Naruto lo había abrazado de improviso por la espalda para darle un beso tan pronunciado que Sasori creyó estar soñando
 
Por lo general, Naruto nunca correspondía ninguno de sus gestos y esta vez había sido Naruto quien le devolvía aquel suave contacto, tan adorable…mas no negaba que habría disfrutado aun mas uno en los labios
 
-¿A qué se debe eso?- inquirió cuando Naruto se apartó de él
 
-Fue por distraerte- respondió el rubio, mas agitado que antes. Le gustaba mucho estar con Sasori, gastándose bromas mutuas y compartiendo algo más que solo el tiempo y los almuerzos, ambos tenían un lazo que, a esas alturas ninguno sabia adjudicar ya, podía ser de amistad pero si se debiera a un simple compañerismo, Naruto no estaría experimentando esa dicha al ser abrazado, besado, la mas mínima muestra de afecto le devolvía la efusividad, y Sasori lo sabía, de ahí que no dejara de repetir sus afectuosas acciones
 
Una suave y efímera risa abandonó los labios de Naruto al observar los boletos que el pelirrojo sostenía entre sus dedos
 
-Nunca terminamos de ver la función- espetó, tomando a Naruto del brazo para acercarlo más hacia él. Naruto asintió al recordar el divertido espectáculo de magia al que lo había llevado Sasori meses atrás
 
Ooo
 
Al caer la noche, Naruto se dispuso a ducharse. Se perfumó y arregló lo mejor que le fue posible, a pesar de que solo se trataba de una salida, aun así quería verse bien, de algún modo quería que Sasori se fijara en él, que no lo viera como un inmaduro, aunque ambos lo eran, de eso no había duda
 
Dos firmes golpes contra la puerta, Naruto acudió a abrir y cuando lo hizo, un bello ramillete le bloqueó la vista
 
Quiso preguntar pero al apartar el ramo para ver a Sasori, se quedo momentáneamente sin habla
 
El rebelde cabello rojizo brillaba con la luminosidad del foco, cual insurgentes llamaradas. Las bellas orbes castañas lo miraron fijamente, Naruto solo atinó a cerrar la puerta, temía decir lo que estaba pensando en ese momento, le avergonzaba expresar tan de la nada lo bien que se veía Sasori, y lo confundían sus propios pensamientos
 
-Te ves arrebatador- profirió Sasori, colocando ambas manos a los costados de la cabeza de Naruto, acorralándolo contra la puerta
 
El rostro de Naruto ardió en demasía, evidenciando el prominente sonrojo del que era preso
 
-Esto es por la demora- los labios del pelirrojo acariciaron la comisura de sus labios, apenas lo suficiente para hacerle sentir un fuerte escalofrío. Naruto meditó entonces que el siguiente fallo que cometiera daría inicio a los besos labiales
 
-Solo tarde cinco minutos- murmuró al ser liberado. Con sutileza, Sasori sonrió
 
-No me gusta que me hagan esperar- admitió, cruzando los brazos tras de su nuca. Naruto lo siguió cabizbajo, recordando los desplantes pasados, en su anterior colegio lo había dejado plantado casi siempre y las escasas ocasiones en que no lo hizo, sucedía algún inconveniente que lo forzaba a retirarse
 
-Lo sien…- dos dedos le impidieron terminar con la disculpa. Sasori retomó la caminata de nuevo
 
-Solo tú puedes hacerme esperar- y aunque la frase tenia doble significado, Sasori sabía de antemano que Naruto no se percataría de ello. Él lo esperaría años de ser necesario con tal de que Naruto le diera una oportunidad
 
Al llegar al edificio, Sasori compró varias golosinas para ambos, las gaseosas y los chocolates no faltaron, así como tampoco faltaron los juegos infantiles que lograron captar más de una mirada en ellos
 
La sala estaba casi a oscuras, exceptuando las tenues luces laterales que se extendían por la alfombra de caucho
 
Dos asientos libres, la mejor vista del lugar y ambos intercambiaron miradas al estar sentados
 
-Los castigos no cuentan aquí, ¿verdad?- preguntó Naruto con cierta timidez, jugando con las mangas de su chamarra. Sasori permaneció dubitativo, el rubio se refería a los besos que le daba cuando se distraía o terminaba sumido en algún pensamiento, seguramente doloroso
 
-No- acomodó las golosinas en medio de los asientos. Por más que le encantara la idea de poder besarlo finalmente en los labios… no lo haría, no se aprovecharía de la situación y tampoco incomodaría a Naruto de esa manera
 
-¿No?- pero el gesto zorruno del rubio lo desconcertó momentáneamente. Una chispa de decepción brilló en los ojos azules, tan solo unos instantes. O quizás fue su imaginación…
 
-El juego no tiene que continuar si tú no quieres- aclaró, tratando de no delatar la ansiedad interna que le había provocado aquel gesto inocente de Naruto
 
-¿Y si el juego deja de serlo?- la pregunta fue formulada en un tono tan bajo que Sasori apenas logró escucharlo
 
Lentamente sus manos viajaron por el contorno del asiento hasta posarse sobre las de Naruto. Suaves, cálidas
 
-Podemos…intentarlo- gesticuló en el mismo tono para que solo Naruto lo oyera
 
-Eso me gustaría- confesó Naruto, cerrando los ojos al divisar el rostro de Sasori acercándose
 
Temió que Naruto se apartara, lo alteró el hecho de pensar que lo hiciera. Por esa razón, Sasori sujetó firmemente las mejillas del rubio, deleitándose con los labios del mismo. Apenas un suave contacto y cuando quiso darse cuenta, su lengua ya se movía ansiosa entre los labios de Naruto, pidiendo acceso, un acceso que le fue concedido casi de inmediato
 
Sus lenguas se unieron, sus labios se movían ansiosos, y esta vez fue Naruto quien pasó ambos brazos alrededor del cuello de Sasori para profundizar el contacto
 
Se expondría otra vez, abriría de nuevo su corazón si con ello lograba sentir esas sensaciones tan placenteras que le hacía experimentar Sasori con cada muestra de afecto
 
El telón se elevó, las luces alumbraron por completo el recinto, dando comienzo al espectáculo
 
Y solo cuando las voces vitorearon al mago, el intenso beso se rompió
 
Naruto volvió su atención al frente. Sabia interiormente que, tanto el beso como la cita se repetirían, y él estaba dispuesto a enamorarse de nuevo, eso si no es que lo estaba ya...
 

Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).