Un par de días después, habiendo superado esa noche Minsoo fue quién empezó a enviar mensajes. Al inicio lo hizo sin la esperanza de obtener respuesta pero éstas llegaban casi en automático, así fue como supo que Leeteuk trabajaba en una empresa automotriz y que su auditoría había salido bien.
También supo la hora en que salía y a dónde iba a comer, alguna vez intentó llegar a ese restaurante para comer juntos pero se detenía por sus propios horarios.
Pronto sería Mayo, el tiempo se le empezaba a agotar.
Ansioso mordió el borde de la uña de su pulgar. Miró el calendario con la fecha encerrada en un círculo y tras pensarlo un poco asintió, levantándose de su silla.
Tomó su teléfono marcando ese número que ya sabía de memoria.
-Hola -saludó sonriendo-, necesito que saques todas tus habilidades pasteleras y me regales un pastel.
Salió de Frosty Ice tras finalizar dicha llamada, ahora tenía que ir a conseguir todos los ingredientes y llevárselos, si su plan salía bien en la tarde obtendría el pastel para compartirlo con Leeteuk.
Dos horas antes de su salida pasó a Coffefriend con la esperanza de recogerlo.
Entró quitándose las gafas, yendo directo a la barra.
-¿Tienes el pastel? -tomó asiento en las sillas altas.
-Antes saludabas -contestó Youngmin terminando de limpiar una de las máquinas de café-. Sí, lo tengo.
-Muchas gracias -contestó tomando una galleta de muestra-. Te debo una.
-No es nada.
-No, sí es y mucho -partió la mitad para tenderle una parte-. Necesito hablar contigo.
-¿Qué ocurre? -preguntó tomándola.
-¿Qué crees que debería hacer? -sonrió antes de suspirar- Te conté que me reencontré con él y todo lo que pasó esa noche así que quiero que seas frío y directo conmigo, ¿estoy haciendo lo correcto? ¿Tú qué hubieras hecho?
-Lo mismo que tú -contestó antes de abandonar el mostrador e ir a los refrigeradores-. Egoístamente, lo mismo que tú porque para mí siempre será más importante satisfacer mis propias necesidades antes que las del otro. No habrá problema si en algún punto esas necesidades se compaginan y por lo que dejas ver, también te emociona que Leeteuk esté receptivo. Así que mi consejo de amigo es: vívelo.
-Pensé que estaba siendo egoísta, por eso quise preguntarte -sonrió orgulloso y satisfecho al ver su pastel.
-Dije “egoístamente” al inicio -Youngmin colocándolo en la barra-, pero odiaría que estuvieras en la armada pensando “debí de haberlo hecho”.
-Oye, ¿entonces en dónde está tu lealtad?
-Contigo -contestó-, por eso aun si dicha persona no es de mi agrado pienso que está bien si eso te pone feliz. Es lo que hacen los amigos.
-Sólo prométeme que estarás ahí cuando todo lo eche a perder -tomó la caja con su pastel- por favor, los chicos aún no saben que nos estamos viendo.
-¿Por qué debería de salir mal? -preguntó recargándose, tomando otra galleta- Eres divertido, inteligente, pícaro y empresario ¿quién te diría que no?
-Sólo dime que ahí estarás.
-Ahí estaré -le sonrió.
Al anochecer, Leeteuk entró acompañado de Jongsuk, la jornada laboral había terminado y ambos estaban coordinando salir a cenar, aprovechando que sus billeteras llenas.
-Voy a ducharme y te aviso cuando esté listo -dijo Leeteuk cuando el elevador se detuvo en el piso del otro-, vamos a Frunelú, dicen que es nuevo, rico y barato.
-Vamos a dónde quieras -contestó Jongsuk-, yo invito y la siguiente te toca -salió del elevador tras presionar el piso de Leeteuk -péinate bonito.
Le sonrió hasta que las puertas se cerraron, llevando sus manos hasta su cabello recordando lo que dijo Minsoo de su peinado estancado en el tiempo e inevitablemente frunció el entrecejo.
-A mí me gusta -refunfuñó.
Una vez las puertas abiertas, apretó su portafolio dispuesto a salir.
-CAP… -susurró notándolo sentado en su puerta con una caja sobre el suelo- ¿Qué haces aquí?
-Hola -le saludó viéndolo caminar hacía él-. Compré un pastel.
-Ah -susurró dándole la mano-, pero preguntaba por qué estás sentado aquí.
-Bueno -apretó fuerte para levantarse tirando de Leeteuk-, pensé en que podíamos celebrar tu cumpleaños y el mío justo ahora.
-En abril -dijo con obviedad viendo como Minsoo levantaba la caja con cuidado- el mío es en julio y tú hasta noviembre.
-Sí pero tengo el presentimiento que voy a estar ocupado así que quieres partirlo ahora?
Leeteuk dejó de girar su llave para mirar a Minsoo, que sonreía nervioso.
-Seguro -contestó abriendo- pero me estás asustando.
-Tranquilo, no es nada.
Ambos entraron, CAP caminó hasta el comedor dónde lo dejó.
-No voy a preguntar -contestó- ¿café?
-El pastel es de café así que la leche es una mejor opción.
-Es tu día de suerte porque justo compré hoy por la mañana -contestó sacando la botella del refrigerador- son lujos que uno puede darse cuando…
Recordó que había hecho una cita con Jongsuk, pero vio a Minsoo tan emocionado sacando el pastel que dudó.
-¿Qué voy a hacer contigo? -susurró rindiéndose- Algún día me arrepentiré de esto.
-Un amigo me dijo que sí tú lo deseas tanto como yo, entonces estamos haciéndolo bien.
-Dame un momento, ¿quieres? Termina de poner la mesa por favor.
Esa noche canceló la cita con Jongsuk excusándose de estar cansado y con deseos de dormir temprano sólo para celebrar sus cumpleaños en abril.