Había pasado la mayor parte del día en cama rodeado por la ropa de Haru, pese a todas las muestras de afecto que le dio antes de partir y haber dormido abrazados toda la noche seguía haciéndole falta y la mejor forma de sentirlo cerca fue refugiarse entre su ropa.
Terminó por quedarse dormido luego de preparar algo para la comida, cada vez necesitaba más el tacto de Haru para sentirse tranquilo y no era lo mismo hacerlo solo. Ni siquiera intentó tomar los supresores pues sabía que no era solo por su celo que lo deseaba tanto.
Ni siquiera hubiera notado el momento en que Haru llegó de no ser por lo alterado que estaba su aroma y el gruñido con el que entró a casa. No había manera de ocultar aquello y Rin salió rápidamente de la habitación para verlo.
—¿Qué pasa? —era evidente la preocupación en su rostro y la confusión por el estado de Haru.
—Estoy bien, solo dame un momento —ni siquiera había considerado que llamaría la atención de Rin tan pronto llegara, estaba frustrado y no podía contenerse.
—No estás bien, no intentes engañarme —se acercó a él para poder verlo, era evidente que algo malo había pasado—. Haru, por favor, dime qué pasa.
—Estoy harto de que todos empujen sus expectativas contra mí ¿Por qué tendría que ser lo que quieren? No me interesa lo que se supone que deba hacer un alfa ¿Tengo que hacerlo solo porque así lo decidieron? —ni siquiera pudo mantener baja su voz, se sentía demasiado presionado por todos a su alrededor y no podía resistirlo más.
Rin intentó decir algo para tranquilizarlo, pero era evidente que ninguna de sus palabras bastaría para lograrlo. Sus manos formaban un puño y sus nudillos estaban blancos a causa de la fuerza que imprimía.
Por más que ignorara los murmullos de otros alfas y la forma en que lo miraban cuando estaba con Rin era molesto que todo el tiempo juzgaran sus decisiones. No le interesaba lo que pensaran de ellos o su relación, pero su lado irracional lo sentía como una agresión y no responder ante ella era casi imposible.
Había llegado a su límite y terminó por discutir con uno de sus compañeros debido a un comentario que hizo con toda la intención de provocarlo. No llegó a nada grave pues supo contenerse, pero la molestia seguía presente en su cuerpo y no podía evitarlo.
No creía necesario cambiar solo porque algunas personas a su alrededor juzgan su forma de ser y su relación con Rin, pero a veces mantener la calma al escuchar a los demás opinando sobre cosas que no les incumben es casi imposible.
El enojo seguía grabado en su expresión y su cuerpo, no podía contenerlo por más que intentara tranquilizarse. No quería que Rin se sintiera responsable de su situación porque en cada una de las decisiones que tomaba era consciente de las consecuencias que tendría y lo hacia de manera libre.
Pero Rin lo que menos quería era verlo sufrir y tan pronto Haru se relajó se acercó hasta él y lo abrazó con fuerza intentando protegerlo de todas las presiones con las que cargaba.
—Eres Haru, no un alfa como todos ¿Por qué alguien querría un alfa común y corriente cuando puede tener un Haru? —se separó apenas lo suficiente para verlo y era evidente que él no entendía a lo que se refería.
Sonrió ampliamente antes de besar sus labios en apenas un roce mientras acariciaba sus mejillas, desde su perspectiva no podía existir alguien más maravilloso que él y haría lo que fuera por hacérselo entender.
—Justo así eres maravilloso, no importa lo que otros esperen de ti, ni siquiera lo que diga yo —Haru estaba a punto de protestar, pero puso un dedo sobre sus labios para que lo escuchara antes de decir cualquier cosa—. Da igual lo que el mundo espere de ti mientras las cosas funcionen para ti, y voy a amarte de cualquier manera, siendo tal cual eres... Incluso si eso significa que en alguna ocasión tendré que pelear para defenderte.
Sus miradas se unieron antes de sonreír mientras apoyaban su frente en la contraria, en verdad habían tenido que pasar por muchas más cosas de las que hubieran imaginado cuando comenzaron a salir, y en realidad, no importaba lo difícil que fuera porque habían logrado solucionarlo juntos.