Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

25:64 PM por 5kn_akatsuki

[Reviews - 1]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Sé que dije que sería oscuro pero no me sale xd perdón por eso pero hey, es bueno, creo, así no tendremos violencia innecesaria:)? 

 

Autocontrol

El siguiente lunes el Alfa no estaba de buen humor; yacía sentado en su pupitre mirando por la ventana ignorando olímpicamente a cada uno de los profesores que habían dado clases pues el evento que pasó el viernes seguía dándole vueltas en la cabeza.

La hora del receso llegó pero esta vez no salió, se quedó en el fondo del salón para ver como el omega lo buscaba por encima de su hombro, estaba esperándolo, sin embargo la única respuesta que recibió fue una advertencia mostrándole uno de sus colmillos con una expresión feroz.

El omega se asustó tanto que tomó sus cosas saliendo a toda prisa.

Nilo, uno de los betas se le acercó.

-Oye -tomó asiento en el pupitre frente a él-, vamos a ir a comprar pizza y luego al partido, ¿vas?

-No tengo hambre.

-Bueno… -susurró incómodo- podemos traerte algo para que comas si no quieres salir.

-No tengo hambre -repitió levantándose la silla- y vete antes de que te muerda.

El beta se reincorporó rápidamente, abandonando el aula justo cuando el Alfa se sentó en el suelo con las rodillas alzadas en donde posaba sus brazos.

La campana sonó haciendo que todos volvieran a sus respectivos lugares y el siguiente profesor entró.

Pero Axel no pensaba tomar la clase, así que caminó hacia el escritorio para susurrarle algo al docente y luego seguir su paso, no sin antes detenerse por un segundo frente al omega y desprender un poco de su aroma sólo para comunicarle que él no había hecho nada malo.

El martes fue igual de estresante.

No tenía ganas de estar en la escuela pero su mamá no permitiría que faltara a clases sin importar qué clase de excusa le diera porque se negaba a contarle que la razón por la se quería mantener alejado era un omega receptivo.

Todavía era bastante joven, tenía casi trece y no debería estar preocupado por su futuro de esa manera. Él sólo quería seguir entrenando en el gym y  sacar buenas notas; nada de preocupaciones sobre apareamiento, rutina, ofrendas o mordeduras. Ni siquiera había pensando bien en nada de eso.

Desde pequeño sabía que era un pura sangre pero nunca lo sintió, nunca hubo alguna manifestación de eso hasta que ese aroma a pan dulce llegó a su nariz porque ahí comenzó el giro de 180°.

Tan ensimismado estaba en sus pensamiento que no anticipó al profesor llamándole por su nombre y menos cuando caminó hacia él. El reglazo en su mesa le hizo despertar para mirarlo.

-¿Lo interrumpí?

Alfa percibió al docente como un beta.

-¿Por qué golpeas mi mesa? -preguntó con voz grave, alertando no sólo al profesor sino a betas y omegas de segunda generación. Oh, y al otro pura sangre.

-N-no, no -titubeó nervioso.

-Tengo una idea, ¿por qué no vas al frente y haces tu trabajo sin molestarme?

Su beta interno bajó la cabeza pero el profesor luchaba por mantener su postura.

-Largo -ordenó; los zapatos del profesor se giraron hasta regresar al frente con una marcha demasiado notaria, donde reanudó el tema que minutos antes explicaba.

Ese mismo evento lo llevó a la oficina de Prefectura, recibía un regaño tedioso sobre lo imprudente (y astuto) que había sido, pero se mantenía ausente pensado en el omega y sus capacidades ocultas.

Pero su osadía tuvo un costo: dos días de suspensión sin derecho a presentar trabajos y un documento que debía llevar firmado por sus padres.

Pese a eso, terminó por asentir feliz: tendría un descanso del omega y con un poco de suerte el viernes se fugaría para que en lugar de ser dos días se conviertan a cinco.

Le emocionó tanto la idea que sonrió satisfecho, arrugó el documento antes de meterlo a algún sitio de la mochila dispuesto a marcharse pero la maldita risa del omega llegó a sus oídos, viéndolo pasar por el frente suyo acompañado de una chica. Esa ni siquiera pertenecía a alguna casta.

Al segundo siguiente lo tenía suspendido del cuello de la camisa y contra la pared. Al parecer no se dio cuenta de cuándo lo había golpeado pues su pómulo estaba hinchándose.

-¡¿Por qué estás con ella?! -lo azotándolo con el muro.

-Estábamos yendo a la parada del autobús -contestó poniendo su mano sobre las más grandes-. Le dije que la acompañaría.

-¡Pues no! -gritó- No puedes ir con ella ni con nadie más -le soltó provocando que cayera de lleno al suelo, tomó su cabello con la intención de que lo mirara-, no quiero verte con nadie ¿entiendes?

-S-sí -musitó presionando sus ojos debido al dolor del cuero cabelludo.

-No puedes tener amigos ni amigas que yo no apruebe ¿y qué crees? Decidí que todos aquí son unos idiotas, por eso no tendrás amigos. Tú sólo me tienes a mí, ¿correcto?

Lo levantó del cuello de la camisa arrastrándolo por la pared, agarró un puñado de cabello ladeando su cabeza, sirviéndose de la sumisión de ese omega para acercar sus, ahora, afiliados y largos caninos que acortaban el espacio contra esa piel tersa que olía a pan dulce.

-Sí -aceptó. Provocando que dicha afirmación le sacara del trance.

Vio esas mejillas rojas, vahoo saliendo de su boca y un tímido ronroneo apenas audible llegó a sus oídos, asqueándolo.

-¡HEEY! -les gritó el prefecto -¡Cómo toques a ese muchacho te ampliare la suspensión!

Entonces lo pateó.

Notas finales:

Sigue un cap de relleno que espero tener mañana junto con el respecto día, así que nos leemos~ 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).