Región de Yunmeng. Muelle de Loto.
Las garras del sueño parecían finalmente estar soltándole, ya no escuchaba esa voz llamarle constantemente desde las sombras. Otras voces en la habitación comenzaron a llenar sus oídos pero al principio no entendía lo que estaban diciendo, hasta que escuchó a su Shushu Ning.
Wen Ning: La voz que escuché… fue la de Wei Gongxi…
¿Había escuchado bien? ¿Esa era la voz de su Muqin?
Era muy pequeño cuando lo había perdido y no recordaba con claridad su voz, sólo la dulce melodía que tocaba con su Dizi y su sonrisa, las tenía grabadas en la memoria. Sólo desearía estar seguro de que era él, porque de ser así estaba tratando de comunicarse con él.
Wen Qing: Eso no es posible… debes haberte confundido.
Wen Ning: No… estoy seguro.
Abrió los ojos y pudo ver a todos en la habitación mirarle, había alivio en sus rostros, en especialmente su padre que le tomó de la mano y le regaló una de sus leves e infrecuentes sonrisas.
Xie Yun: Die…
Wen Qing: Al fin despiertas niño - Se acerca del otro lado de la cama y comienza a examinarle, después de terminar le mira con semblante serio - Dormiste por dos días… estás débil por dormir tanto así que no trates de levantarte por ahora.
Wen Ning: Iré a prepararle algo de comer - Salió de la habitación sin recibir respuesta.
Xie Yun: Die… - Su padre guardó silencio, esperando a que terminara lo que tenía que decir - ¿Crees lo que dijo Shushu Ning?
Lan Zhan no responde, su silencio le muestra que tiene sus dudas sobre lo sucedido. Pero cuanto más pensaba en el sueño más se convencía que de alguna manera su Muqin había intentado contactar con él. Todo inició al recibir a Suibian, así que podría haber alguna relación.
Xie Yun: Mientras dormía una voz me llamaba constantemente… era tan familiar.
Wen Qing: No hables más… comerás lo que mi hermano te traiga y descansarás.
Xie Yun: No quiero seguir durmiendo…
Jiang Qing: ¿Quejándote ya? - Entra llevando una bandeja con comida - Eso significa que ya estás bien…
Le ayudan a sentarse en la cama y la joven le pone la bandeja con comida en el regazo para luego darle un golpe en el brazo.
Xie Yun: ¡Auch!… ¿Qué rayos te pasa? - Se soba el brazo para disipar el dolor del golpe, para ser una mujer menuda tenía mucha fuerza.
Jiang Qing: ¡No vuelvas a asustarnos así!
Wen Qing: A-Qing… no seas ruda.
Jiang Qing se limitó ha hacer un puchero y girándose se marcha molesta lo que le hace reír levemente.
Wen Qing: Perdónala… es demasiado parecida a su padre y no sabe cómo expresar sus emociones… pero estaba preocupada por ti.
Xie Yun: Conozco su carácter… Gracias Shimu Qing.
Wen Qing: Come - Pone unas pastillas blancas en la bandeja - Tómalas después.
La sanadora sale dejando a padre e hijo a solas, Lan Zhan toma a Suibian y la coloca en la mesa mientras Xie Yun come para luego tomarse los medicamentos. Al terminar su padre le retira la bandeja y le ayuda a recostarse nuevamente.
Xie Yun: No quiero dormir más…
Su padre se sienta en una mesa baja y saca su Guqin, las suaves tonadas comienzan a salir del instrumento entonando la melodía que conocía desde que tenía memoria, la misma que su abuela le tocaba a su Muqin y que él les tocaba cuando eran niños para ayudarlos a dormir.
Lan Zhan: No voy a ninguna parte… descansa.
Se sintió más tranquilo con esas palabras y se dejó llevar por la suave melodía, sintiendo que el medicamento hacía efecto se queda dormido. A pesar de haber caído en ese extraño sueño se sentía agotado, así que esperaba que este sueño fuera reparador.
& & &
Al terminar la melodía su hijo se había dormido, se puso de pie y se acercó a la mesa donde había dejado a Suibian. Tomándola en sus manos se puso a mirarla y como tantas otras veces intentó desenvainarla sin éxito, seguía sellada para todos menos para Xie Yun.
Lan Zhan: “Wei Ying… ¿Realmente eres tú?” - Dejó la espada en la mesa y se sentó en la cama para mirar a su hijo dormir - “¿Por qué no intentaste contactar conmigo?”
No sabía cómo poner en orden sus pensamientos, en parte le parecía lógico que Wei Ying e intentara comunicarse con su hijo. Pero por otro lado él estuvo buscándolo incansablemente por dieciséis años y no había tenido señal alguna.
Lan Zhan: Wei Ying… ¿Dónde estás? - Susurró mientras se quedaba con su hijo para vigilar su sueño.
& & &
Salió de la habitación cuando ya era muy tarde, después que su hermano se desmayara en el pueblo se había angustiado mucho y durante dos días no pudo dormir, esa mañana finalmente había despertado y al saber que estaba recuperado el sueño le llegó durmiendo todo el resto del día, ahora estaba muy despierto así que decidió dar un paseo nocturno.
Tenía mucho qué pensar, los últimos días habían sido bastante extraños y se preguntaba si se avecinaban sucesos importantes para sus vidas después de tanto tiempo de tener una vida tranquila y hasta aburrida.
¿Xie Yun había tenido alguna especie de contacto con Muqin? ¿Estaba tratando al fin de contactar con ellos después de dieciséis años de rotundo silencio?
Ni siquiera Hanguang Jun había podido contactar con su alma en todo este tiempo, él mismo había aprendido todo lo que había podido sobre las melodías de Guqin para intentar también llamarle. Se sentía en deuda con aquellos quienes le recibieron en su familia y le dieron todo su amor, en especial el Clan Lang.
Llegó hasta el mirador del muelle privado de la residencia, mirando hacia el gran cuerpo de agua lleno de plantas de Loto, las flores estaban comenzando a aparecer pero todavía no se habían abierto del todo.
Xie Yun: Deberías estar durmiendo…
Retrocedió sorprendido por la repentina voz, su hermano se asomó desde el techo del mirador del muelle con una sonrisa, como si nada hubiera pasado. De un hábil movimiento se bajó y se paró a su lado para contemplar el agua también.
Lan Sizhui: Creo que eso debería decirlo yo… tú eras el que estaba convaleciente.
Xie Yun: No tú también… dormí por dos días… estoy arto de estar en cama.
Bajando la mirada colocó las manos en el barandal, realmente se había asustado al ver a su siempre alegre y saludable hermano caer tan fácilmente, mientras crecían era él el que usualmente se enfermaba y Xie Yun se sentaba a su lado a cuidarlo cuando eran niños. Sin poder evitarlo unas cuantas lágrimas escaparon de sus ojos.
Xie Yun: Hey… No llores - Lo gira para estar frente a él y le seca las lágrimas con su pulgar - Estoy bien…
Lan Sizhui: Tenía mucho miedo… nadie sabía lo que estaba pasando y pensé que no despertarías.
Ya sin poder aguantar más comenzó a llorar libremente, desde pequeños habían sido inseparables y cuando su Muqin falleció fueron aún más unidos, así que la sola idea de perder a su hermano le aterraba. Pero su llanto se detuvo de pronto cuando sintió un cálido abrazo y un beso en su cabeza.
Xie Yun: No llores A-Yuan…
Apoyó la cabeza en el pecho de su Xie Yun, a pesar de ser el mayor era bastante más bajo. Su hermano era más fuerte y más hábil con el cultivo, pero nunca lo trató como algo menor lo que le hizo esforzarse el triple en sus estudios para estar aunque fuera cerca a su nivel, siempre se había sentido muy querido tanto por Hanguang Jun como por su hermano.
Pero su llanto aumentó, se sentía finalmente tranquilo y tenía que dejar salir todas sus emociones. Sintió un suave masaje en la espalda y su hermano siguió hablando, consolándolo.
& & &
Mientras caminaba por los corredores con una pequeña charola en la mano, en ella llevaba unas medicinas que tenía que dejar en la habitación de Xie Yun para que tomara a primera hora de la mañana, había olvidado dejarlas en la tarde cuando su madre se lo pidió porque se había quedado dormido.
Si ella se enteraba seguramente lo regañaría por una semana, así que aprovechando que todos estaban durmiendo se escabulló para cumplir con la orden dada por su madre.
Al llegar a la habitación abrió la puerta sin hacer ruido, sólo entraría y dejaría la medicina en la mesa, no era necesario despertar a Xie Yun para eso. Pero al entrar vio la habitación vacía así que dejando la bandeja en la mesa junto a la cama salió para buscar a su escurridizo invitado.
Mientras buscaba recordó lo sucedido en la tarde, cuando estaba en la cocina tratando de ocupar su preocupada mente haciendo la comida para todos. Siempre le daba por cocinar cuando estaba preocupado o estresado, le ayudaba a concentrarse en otra cosa.
& FLASH BACK &
Estaba en la cocina terminando de preparar la comida cuando su hermana entró, con sólo mirarla supo que no había dormido bien y que estaba de mal humor por causa de la preocupación. Jiang Qing se acercó a la mesa donde preparaba los ingredientes para la ensalada y sentándose tomó una manzana del frutero.
Jiang Chanseng: Vas a arruinar tu apetito… la comida ya casi está lista Mei.
Jiang Qing: Apetito no es algo que tengamos últimamente Dage - Le señala con el dedo mientras muerde su manzana - No te he visto comer casi nada y te la pasas aquí cocinando o en la enfermería estudiando… si sigues así te vas a enfermar.
Trató de ignorarla pero era verdad, desde que su Shushu Wen Ning llegó con Xie Yun inconsciente tanto él como su madre no habían descansado buscando el motivo de la repentina enfermedad. Que alguien tan sano enfermara así de pronto era la peor pesadilla de un sanador, más cuando no encontraban la causa o una solución. Eso le quitaba el sueño, en especial tratándose del hijo de Hanguang Jun que era alguien muy querido para el Clan Jiang.
Jiang Qing: Dage… te vas a cortar - Se pone de pie y le quita el cuchillo - ¿Qué clase de sanador vas a ser si te pierdes en tus pensamientos y te lastimas así?
Jiang Chanseng: Lo siento…
Jiang Qing: No te disculpes… todos estamos afectados por lo que le pasa a Xie Yun y queremos que se recupere.
Eso era verdad, apenas habían pasado dos días pero el verlo ahí acostado sin reaccionar no le dejaba dormir por las noches y tenía que obligarse a comer, se sentía impotente al no encontrar una solución. Aunque también había otro motivo por el que estaba tan angustiado, pero no estaba dispuesto a compartirlo de momento. Se giró para revisar la olla con la sopa cuando vieron entrar a su tío Wen Ning.
Wen Ning: Sirve algo ligero… Xie Yun acaba de despertar.
Jiang Qing: ¡Finalmente! - Dijo actuando como una reina del drama.
Él sólo esbozó una leve sonrisa y sirvió un poco de caldo de ave, acompañándolo con algo de pan recién horneado. Luego se lo dio a su hermana la cual sólo se le quedó mirando embobada.
Jiang Chanseng: No he terminado con la comida… por favor llévaselo.
Encogiéndose de hombros su hermana salió y Wen Ning se quedó para ayudarle, ahora que Xie Yun se había recuperado seguramente todos estarían más tranquilos y el apetito volvería a todos en la casa.
& FIN DEL FLASH BACK &
Sus pensamientos fueron interrumpidos por voces en la lejanía, caminando por los corredores se acercó al que llevaba al mirador del muelle. Seguramente Xie Yun estaría ahí pero se preguntaba con quién estaría hablado tan tarde.
Al acercarse lo vio junto a Lan Sizhui, no notaron su presencia porque estaban centrados en su conversación y era vidente que él estaba siendo testigo de un momento que no debería estar viendo. No quería, pero sus piernas le hicieron acercarse para poder escuchar bien sus palabras.
Xie Yun: Hey… No llores - Lo gira y le seca las lágrimas - Estoy bien…
Lan Sizhui: Tenía mucho miedo… nadie sabía lo que estaba pasando y pensé que no despertarías.
El joven Lan comenzó a llorar pero su llanto se detuvo cuando Xie Yun lo abrazó y besó su cabeza en un gesto cariñoso.
Xie Yun: No llores A-Yuan…
Lan Sizhui comenzó a llorar más fuerte por lo que Xie Yun lo abrazó más fuerte, sonriendo y cerrando los ojos le acarició la espalda, consolándolo con ese dulce gesto y con palabras para que se calmara.
Comenzó a retroceder, quería marcharse antes de que se dieran cuenta de que estaba ahí. Regresó sobre sus pasos y se fue directamente a su habitación, entró y cerró la puerta llevándose una mano al pecho y la otra a su boca para ahogar el llanto que había comenzado a empapar sus mejillas.
No podía sacar de su mente la imagen de los dos abrazados, a pesar de no compartir lazos de sangre nunca se imaginó que entre los dos pudiera haber algo más que cariño de hermanos. Pero al parecer se había equivocado.
Wen Yuan, ahora llamado Lan Sizhui era un chico dulce y aplicado, conforme crecían entablaron una buena amistad y a pesar de no verse mucho lo consideraba un buen amigo.
Cruzó la habitación y se dejó caer en la cama, ahogando sus lágrimas en la almohada. La verdad es que se veían bien juntos y seguramente serían apoyados por todos si anunciaran tener una relación, en especial por su madre que le tenía gran cariño a los dos.
Xie Yun había comenzado a gustarle desde que eran niños, el chico siempre alegre, seguro de si mismo, hábil en el cultivo y en las Seis Artes. No fue complicado que alguien así de impresionante se abriera paso en su corazón, pero nunca se atrevió a confesarle sus sentimientos y no ser correspondido.
Ahora sabía que ese sueño nunca se haría realidad y con cada lágrima que mojaba su almohada se prometió jamás revelar lo que su corazón sentía por Xie Yun, porque el joven del que se había enamorado parecía ya tener a alguien más en su corazón.
& & &
Al llegar la mañana Xie Yun le despertó cuando intentaba no hacer ruido, ya estaba vestido y listo para el día, la cama donde durmió su padre estaba hecha y no se encontraba en la habitación, Hanguang Jun solía levantarse al amanecer.
Lan Sizhui: ¿A dónde vas?
Xie Yun: A la cocina… el desayuno debe estar listo y pensaba traerte algo.
Lan Sizhui: Estoy bien - Se levantó de la cama y comenzó a arreglar la ropa. Ahora que estaba tranquilo estaba avergonzado de cómo había actuado la noche anterior, esos miedos estaría bien para un niño pero no para un adulto.
Xie Yun: No te apenes - Lo gira y le pone una mano en el hombro - Hubiera reaccionado igual de ser tú el que enfermara.
Lan Sizhui: Gracias… pero sabemos los dos que eso no es verdad - Toma sus ropas para dirigirse al baño - Sé que estarías preocupado y que me quieres… pero no te pondrías a llorar como un bebé.
Xie Yun: Cada persona reacciona distinto a una situación grave - Se acerca y le aprieta una mejilla.
Lan Sizhui: ¡Ya deja eso! - Aparta la mano pero sonríe - Me iré a preparar… te veré en el salón comedor.
Xie Yun: Está bien - Toma a Suibian y sale de la habitación.
Negando con la cabeza entró al cuarto de baño para prepararse, su hermano ya parecía totalmente recuperado así que seguramente partirían de regreso a Gusu ese mismo día por lo que debería preparar todo para viajar.
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Jiang Cheng y Lan Wanji estaban reunidos en su oficina, Wen Ning les sirvió el té y se marchó para reunirse con el resto de la familia que estaba en el salón comedor. Bueno casi todos. Sus sobrinos aún no se habían levantado y su madre ya no se encontraba viviendo en Muelle de Loto.
Se había mudado hacía un año a Lanling, durante mucho tiempo su esposa y su madre habían tenido muchos roces, varias veces tuvo que intervenir así que al final tuvo que decirle a su madre que o respetaba a su esposa o tendría que irse. La gota que derramó el vaso fue cuando su hijo mayor anunció que quería ser Sanador y no el futuro líder del Clan, a lo que Wen Qing le apoyó.
Su hija menor quería ser la futura líder y aunque al principio le tomó por sorpresa, su esposa le recordó que las enseñanzas del clan fomentaban la libertad de elección y que la pequeña Qing sería una gran líder. Su madre por otro lado estuvo insistiendo, tratando de convencer a Chanseng que como hijo varón y el mayor era su deber ser el futuro líder.
Pero sabía que su hijo no tenía las aptitudes para el liderazgo, su carácter era muy tranquilo y dulce, tenía una gran habilidad para sanar a las personas y era muy inteligente, era evidente cuál era su vocación. Jiang Qing tenía una gran habilidad y carácter fuerte, recordándole a él cuando tenía su edad.
Así que ante la insistencia de su madre tuvo que ponerle una advertencia, a lo que decidió marcharse del Clan para irse a vivir con Yanli. Desde entonces eran contadas las veces que la veía, pero ahora tenía que priorizar la felicidad de su esposa e hijos.
Jiang Cheng: Entonces… ¿Se marcharán hoy?
Lan Zhan: Si Wen Qing está de acuerdo.
Jiang Cheng: Xie Yun es un joven fuerte… seguramente estará recuperado del todo - Bebe de su té y sonríe - Se parece mucho a Wuxian en eso.
El pesar en su hermano le hizo sentir apretada la garganta, a pesar de los años seguía esperando verlo cruzar la entrada principal de Muelle del Loto, para sacarlo de sus cabales con sus comentarios y escuchar su risa. Su ausencia se sentía mucho en la familia.
Jiang Cheng: Definitivamente algo extraño pasó en cuanto le entregaste a Suibian… eso y lo que dijo Wen Ning… ¿Su alma intenta comunicarse?
Lan Zhan: Es posible…
Jiang Cheng: ¿Por qué hasta ahora? ¿Qué lo mantuvo en silencio tantos años?
Lan Zhan: Eso tendremos que investigarlo.
Jiang Cheng: Wei Wuxian… ¿Qué pasará contigo?
Esa era una buena pregunta, ninguno de los dos tenía una respuesta por ahora y lo que acababa de suceder era un misterio. Desde ese fatídico día no sabían nada de él, pero al parecer eso estaba a punto de cambiar.
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Lo vio entrar al salón comedor con una gran sonrisa y saludando alegremente a todos, era como si nada le hubiera sucedido, le sorprendía su rápida recuperación y le alegró el corazón verlo tan bien.
Jiang Qing: Quita esa cara - Le susurró al oído - Un poco más y vas a comenzar a babear.
Miró a su hermana sorprendido y disimuladamente observó alrededor pero al parecer nadie más que ella se había percatado de su mirada.
Jiang Chanseng: No sé de qué hablas.
Jiang Qing: No te hagas el tonto… eres como un libro abierto para mí.
Paran de hablar cuando Xie Yun se acerca a saludarles, en ese momento entra Sizhui y también se aproxima para saludar. Todos se sientan y comienzan a desayunar así que la conversación con su hermana quedaría para otro momento, sólo esperaba que no se fuera de la lengua y le hiciera pasar un momento vergonzoso.
Afortunadamente no pasó y poco después sus padres llegaron anunciando que los Lan se marcharían esa tarde. Eso le pareció repentino pero Xie Yun se venía bien así que su madre no se opuso.
Al llegar el momento la familia Jiang entera fue a despedir a la familia Lan, Jiang Qing les dio un abrazo a los chicos, mientras que él sólo se acercó haciendo una reverencia y despidiéndolos con una sonrisa. Pero su hermana tenía otros planes y lo empujó contra Xie Yun que le tomó por los hombros para que no cayera contra él.
Jiang Qing: ¿Qué? - Preguntó cuando la miraron - Ya deja de ser tan huraño y despídete con un abrazo… nos conocemos desde niños.
Se giró a mirar al dueño de su corazón y este sonriendo le dio un abrazo, sintió que el corazón se le salía del pecho y tardó unos segundos en responder el gesto. Luego se separó y le dio otro a Sizhui.
Lan Sizhu: Nos vemos en un mes cuando inicien las clases.
Xie Yun: Pueden llegar antes… cuando inicie el curso tendremos poco tiempo como para divertirnos en algo.
Los demás se rieron por su expresión, realmente odiaba las clases pero igualmente las tomaba porque su padre se lo pedía de lo contrario se escaparía de todas, en especial las de su Shushu Lan Qiren.
Lan Zhan: Es hora…
Hanguang Jun ya estaba en la embarcación, así que se despidieron nuevamente y subieron, alejándose minutos después. En menos de un mes viajarían a Gusu para comenzar sus lecciones, sólo esperaba poder cumplir con la promesa que se había hecho a sí mismo.
Jiang Chanseng: “Sólo quiero que seas feliz junto a la persona que viva en tu corazón… mi amado Xie Yun.”
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Región de Lanling. Torre de la Carpa Dorada.
Jing Ling estaba entrenando tiro con arco en los jardines internos de la residencia principal donde habían dispuesto varios blancos, había logrado dominar el lanzar hasta tres flechas acertándolas en el blanco. Con el arco tenso y la mirada concentrada nada lo distrajo, ni siquiera su perro espiritual Fairy que comenzó a ladrar alegremente y se alejó de su lado, no fue hasta que lanzó las flechas y estas acertaron a tres blancos distintos que bajó el arco y se giró para ver a sus padres aproximarse.
Su madre se inclinó para acariciar al perro mientras que su padre siguió avanzando, su brazo sujeto contra su pecho, seguramente ese día había amanecido adolorido. Desde que tuvo recuerdos su padre no había podido cargarlo o llevarlo sobre sus hombros como otros padres, pero siempre le demostró su amor de distintas maneras por lo que a pesar de que algunos se burlaban de él por tener un padre lisiado, los callaba con sus puños.
Su madre le había dicho que su padre estuvo a punto de morir en la batalla en donde su tío Wei Wuxian había perdido la vida. Había sobrevivido pero su brazo nunca se recuperó del todo y había días en que lo llevaba así porque le dolía.
Seguía siendo el líder del Clan Jin, pero no podía asistir a las cacerías nocturnas, era ahí cuando su tío Jin Guangyao tomaba su lugar. Desde que podía recordar se había convertido en la mano derecha de su padre y ayudado a liderar el Clan. Tenía una relación cercana con su Shushu y hasta fue él quien le regaló a su amada mascota Fairy.
Jin Zixuan: Muy buen tiro Ling…
Jin Ling: Gracias Die… ya quiero mostrarle a Xie Yun cuando vaya a Gusu… dudo que pueda superarme esta vez.
Su madre se acercó y le acarició la mejilla, tenía una sonrisa que le hizo preguntarse en qué estaba pensado, miraba el arco en sus manos con algo de nostalgia.
Jin Ling: ¿Muqin? - Su madre le miró sonriente y le acarició la mejilla.
Jiang Yanli: No es nada… me recordaste a tu Shushu A-Xian - Baja el brazo y mira los blancos a la distancia - Era muy bueno con el arco… el mejor de nuestra generación.
Jin Ling: ¿Tan bueno?
Jiang Yanli: Podía acercar a cinco blancos utilizando cinco flechas al mismo tiempo… también a blancos a gran distancia.
Abrió los ojos sorprendido y miró a su padre que sonrió asintiendo.
Jin Zixuan: Estoy seguro de que lograrás hacerlo… pero no vinimos por eso.
Su padre hizo aparecer a su espada y la sostuvo frente a los ojos de su hijo. Jin Ling colocó el arco en el soporte cercano y la tomó con cuidado, admirando el intrincado diseño de la funda. La desenvainó levemente y luego volvió a guardar el arma dentro, la sostuvo en su mano derecha mientras miraba a su padre.
Jin Zixuan: Shuihua te pertenece… quiero que la lleves contigo a Gusu.
Jin Ling: ¿Estás seguro Die?
Jin Zixuan: Desde que perdí mi capacidad de utilizarla ha sido tuya… te ha visto mejorar y ya tienes edad para empuñarla… haznos sentir orgullosos.
Sus ojos se llenaron de lágrimas, odiaba comportarse de forma sentimental, pero esta era una ocasión especial así que las dejó caer por esta vez y se abrazó a sus padres agradeciendo esa muestra de confianza en sus capacidades.
Jian Yanli: Dentro de poco partirás a Gusu… espero que te comportes a la altura del Clan Jin y el Clan Jiang… recuerda que los representas a ellos también.
Jin Ling: Lo prometo… aunque no prometo no pelearme con A-Qing…
Jiang Yanli: Ella se parece demasiado a mi hermano… será una gran líder algún día.
Jin Ling: ¿Y Chanseng?
Antes de que alguno de sus padres pudiera responder escucharon a alguien acercarse, al mirar se dio cuenta de que su abuela se acercaba. Su semblante serio como siempre, sólo sus ojos se suavizaban cuando lo miraban a él. Como de costumbre la saludó con una reverencia.
Jiang Yanli: Buenas tardes madre.
Yu Ziyuan: Veo que ya le dieron al pequeño A-Ling su espada… me alegra que al fin puedas llevarla contigo.
Jin Ling: Gracias A-Yu - La abrazó alegre, normalmente su abuela no era muy cariñosa pero siempre había tenido paciencia para él, incluso la llamaba por su nombre porque no le gustaba que le llamara abuela.
Yu Ziyuan: Estira tu brazo…
Separándose le miró sin entender pero igual obedeció, entonces ella acercó el suyo y Zidian pasó de la mano de su abuela a la suya y volvió a su forma de joya.
Yu Ziyuan: Cuando estés en Gusu muéstrale el arma a tus primos… que sea ella la que decida con quién se quedará.
Jiang Yanli: Madre…
Yu Ziyuan: A-Ling ha heredado la espada de tu esposo hija… Zidian elegirá al que será su heredero… es un arma caprichosa y ella me eligió a mí sobre el resto de mi familia… ahora es mi turno de pasarla a la siguiente generación.
Jin Ling: Haré lo que me pides A-Yu…
Sonríe levemente y después de hacer una leve reverencia a su padre se marcha sin decir nada más.
Jin Zixuan: Eso fue extraño.
Jiang Yanli: Desde que murió mi padre no ha sido la misma… ya no me rompo la cabeza tratando de saber qué está pensando - Sonríe y mira el arma en la muñeca de su hijo - Cuando llegues a Gusu dale Zidian a tu prima Qing… estoy seguro de que será la elegida.
Jin Ling: ¿Estás tan segura Muqin?
Jiang Yanli: Mi hermano ha decidido que ella sea la heredera… Chanseng no quiere serlo y Zidian debe estar en manos de el futuro líder o su esposa si la tiene.
Jin Zixuan: Como Suihua ahora le dirá a todos que serás el futuro líder del Clan en cuanto estés preparado para asumir el cargo - Mira los ojos de su hijo y sonríe - No te preocupes que aún falta mucho para eso… no pienso retirarme hasta que estés preparado.
Eso calmó sus nervios, la verdad era que no se sentía listo y no lo estaría en varios años. Pero tener a sus padres apoyándole le daba confianza, muchos lo llamaban niño mimado por ser hijo único, pero les demostraría que era más que apto para ser el futuro líder y haría sentir a su padres orgullosos.
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Un mes más tarde.
Región de Gusu Lan. Receso de las Nubes. Entrada del arco de piedra.
Los estudiantes de los demás clanes esperaban en la entrada mientras que él junto a su hermano Lan Xichen pasaban lista con unos libros de registro. Desde el momento en que llegaron al pie de la montaña se convirtieron en alumnos y discípulos temporales, serían tratados de manera igualitaria fueran de un clan pequeño o del más grande y rico de todos ellos.
Habían quitado la obligatoriedad de usar túnicas blancas, cada quien podía llevar las ropas de sus clanes. Lan Qiren no había estado nada de acuerdo, pero terminó cediendo porque su sobrino nieto nunca lo había usado como tampoco usaba la cinta del clan Lan.
Cuando regresaron todo había vuelto a la normalidad, no habían tenido otro incidente con su hijo, nada de fiebre o pesadillas. Parecía que toda actividad relacionada con Wei Ying se había desvanecido tan rápido como había aparecido.
Lan Xichen: Bien creo que todos están aquí… sígannos por favor.
Comenzaron a subir y al llegar a la entrada de las residencias comenzaron a ser llevados a distintas casas por otros discípulos del Clan. Cuando llegaron a la casa que en un momento fue la que antiguamente ocupara Wei Ying una sensación de tristeza llenó su mente. Ya sólo faltaba por ubicar a Jing Ling y a los hermanos Jiang, que les tocara la misma casa parecía ser algo destinado a pasar.
Esta casa no había vuelto a ser habitada en un buen tiempo, pero este año habían más estudiantes que en otros años así que fue reparada y una nueva generación del Clan Jiang volvía a ella.
Jiang Qing: ¿Una casa sólo para nosotros?
Lan Xichen: La compartirás con tu hermano… está un poco más alejada del pabellón de clases y la biblioteca… espero que no les moleste.
Jiang Chanseng: Para nada… mi hermana y yo cuidaremos bien del lugar - Hace una reverencia - Gracias…
Lan Xichen: Originalmente planeaba convertirla en una casa para un Sanador Residente… pero ninguno ha querido quedarse de manera permanente así que decidimos convertirla en dormitorio de estudiantes nuevamente.
Lan Zhan sabía porqué hacía ese comentario, días antes le había dicho que hablaría con el joven Jiang Chanseng para proponerle quedarse como sanador principal del Clan Lan, Muelle de Loto ya tenía a los hermanos Wen que eran los sanadores más capacitados entre las regiones. Además de que el joven Chanseng poseía una gran habilidad y muchos clanes comenzarían a ofrecerle un puesto de trabajo.
Vio el interés en los ojos del chico así que al parecer su hermano tenía algo de razón en que el joven podría querer quedarse. Pero también notó algo de inseguridad y hasta podría decir que tristeza, pero no podía estar seguro, el joven era bueno ocultando sus emociones y rápidamente las ocultó bajo una sonrisa amable.
Eso le recordó mucho a él mismo, ocultando sus verdaderas emociones para que los demás no se preocuparan por verle triste o desesperado al no obtener respuestas a su más grande dolor.
Lan Xichen: Las clases comenzarán mañana a las 7am… coman y descansen bien hoy… en la casa hay todo dispuesto en la cocina.
Los hermanos le hicieron una reverencia a los Lan y se disponían a entrar pero el joven Jin Ling se acercó a ellos, mejor dicho a la joven Jiang Qing.
Jin Ling: A-Qing…
Jiang Qing: ¿Si?
Jin Ling: Mi madre dijo que te la diera a ti - Estiró el brazo en el cual estaba Zidian.
Jiang Chanseng: ¿Zidian?
Jin Ling: A-Yu quiere que ella elija a su heredero… me dijo que esta arma elige y que debe estar en las manos del futuro líder - Mira a su prima - Muqin me dijo que estaba segura que eras tú.
La joven miró el arma y después de dudar un poco estiró el brazo, miró a su hermano y este hizo lo mismo para darle seguridad. Como era esperado el arma cobró vida y sin dudarlo dejó el brazo de Jin Ling para enrollarse en el de Jian Qing quien sonrió al ver que Zidian le había elegido por sobre su hermano.
Jiang Chanseng: Sabía que te elegiría a ti Mei…
Jin Ling: Serás una buena líder… igual que yo lo seré en el futuro.
Unas cuantas lágrimas escaparon de la chica y se lanzó a abrazar a su primo que terminó por corresponder sonriendo. Esos dos niños eran los más jóvenes de la generación y faltaba mucho para que tomaran el lugar de sus padres, pero una sensación de paz le llenó al ver que al menos el futuro de dos de los más grandes clanes se venía prometedor.
Lan Zhan: “Seguramente llorarías si los vieras Wei Ying” - Pensó - “Y luego lo negarías burlándote del sentimental momento.”
& & &
Las clases iniciaron con el gran maestro Lan Qiren, comenzarían fuerte con mucha historia y siendo tan temprano tuvo que poner todo de su parte para no quedarse dormido sobre su mesa. Tuvo que agradecer a su hermano y a Chanseng que estaba a su lado que le despertaban cuando lo veían comenzar a cabecear.
Ese día fue largo pero después de una hora para comer y refrescarse un poco volvieron con algo más de energía para soportar la siguiente hora, luego serían libres o al menos eso pensaban.
Lan Qiren: Para finalizar por hoy se llevarán el libro que había al inicio de las lecciones en su escritorio… en ellas se encuentran las leyes del Clan - Se levanta de su escritorio sosteniendo una copia para que todos la vieran - Mañana tendrán una prueba así que memorícenlas - Dejó el libro en su lugar - La clase de hoy ha terminado.
Salió dejando a los estudiantes sorprendidos, tenían sólo una tarde para aprender todas las reglas del Clan Lan. Eso sonaba casi imposible.
Jiang Qing: ¿Realmente quiere que aprendamos todo esto en una tarde? - Dijo mirando el libro incrédula - ¿Cuántas son?
Lan Sizhui: 3900…
Lan Jingyi: Eso es imposible… llevo dos años desde que me uní al clan y no he logrado memorizar ni la mitad.
Xie Yun: Creo que es la edad… se está poniendo senil…
Lan Sizhui: Que no te escuche… ya sabes como son sus castigos.
Xie Yun guardó silencio dejando a los demás con la pregunta en la mirada, pero nadie se atrevió a preguntar al ver el semblante serio que puso de pronto, eso no era normal ya que el hijo del mejor de los Jade siempre tenía una sonrisa en el rostro.
Los demás estudiantes comenzaron a salir, algunos agrupándose para estudiar juntos, quedando en el salón apenas unos cuantos de ellos.
Jiang Qing: Bueno no le demos más largas a la tortura - Se pone de pie y toma su libro - Nos reunimos en una casa para estudiar y no pararemos hasta aprender al menos las más importantes.
Lan Sizhui: Tienes razón… vamos a nuestra casa.
Poniéndose de pie salieron finalmente del salón, les esperaba una larga y pesada tarde de estudio.
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Comenzaba a atardecer y todos seguían en la mesa estudiando, habían preparado todo por si alguno quería dormir un poco cuando fuera muy tarde en la noche. Pero por el momento no se habían detenido ni para ir a salón comedor a cenar algo, se habían instalado en la mesa nada más llegar y no se habían detenido en un par de horas.
Jin Ling: ¡Son demasiadas reglas! - Dejó caer el libro y cruzando los brazos los apoyó en la mesa - No hay manera de memorizarlas para mañana.
Lan Sizhui: Podrán hacerlo - Se puso de pie - Iré a preparar el té… será una noche larga.
Xie Yun: Espera - Se levantó también - Ahora que recuerdo… de niños Shushu Xichen nos hizo una lista simplificada con las reglas escritas de manera más sencilla…
Lan Sizhui: Lo recuerdo… tengo el mío en mi habitación - Iba a subir las escaleras a la segunda planta pero su hermano lo detuvo.
Xie Yun: Yo voy… prepara algo de comer para todos - Mira a sus compañeros en la mesa - Aún con ese libro estaremos toda la noche sin dormir.
Lan Sizhui: Está en mi escritorio… junto a la lámpara de aceite.
Asintiendo comenzó a subir los escalones mientras que su hermano se fue a preparar algo de comer, cuando iba llegando a la puerta que conducía a la cocina Jiang Chanseng se levantó y ofreció a ayudarle.
Siguió subiendo y caminó por el pasillo hasta la puerta de la habitación de su hermano que era la que estaba al final junto al baño. Al entrar la luz de la luna entraba por la ventana abierta permitiéndole ver lo suficiente, Sizhui era tan ordenado como su padre, él por el contrario era un desastre desordenado en comparación. No le tomó mucho tiempo encontrar el libro, estaba justo donde dijo que estaría así que tomándolo salió al pasillo, justo cuando pasaba por la puerta de la habitación de su padre escuchó un ruido.
Eso era extraño, su padre había salido esa mañana por una asignación dada por su Shushu Xichen y no regresaría en un par de días. Había salido al amanecer y desde su ventana lo había visto partir lo que significaba que no debería escucharse ruido alguno en esa habitación.
Hizo aparecer a Suibian y preparándose se movió sigilosamente para correr la puerta, mentalizándose para encontrarse a un posible intruso. De un ágil movimiento la abrió y entró, pero dentro no había nadie.
Xie Yun: ¿Qué?
No parecía haber nada fuera de lugar, la ventana estaba cerrada y la oscuridad reinaba, así que buscando la mesa encendió la lámpara de aceite para iluminar la habitación, todo se veía exactamente igual que siempre. Estaba por pensando que lo había imaginado hasta que su mirada se dirigió al soporte de pared donde se suponía que descansaba Chenqing, pero esta no estaba.
Rodeó la cama para acercarse y en ese momento sintió la energía, bajó la mirada y vio la Dizi de jade negro en el suelo. Chenqing comenzó a emitir energía oscura y a moverse levemente como si algo quisiera salir de ella. Lentamente se acercó y arrodilló para observarla de cerca.
Su padre les había prohibido a ambos tocar la Dizi ya que era un arma de energía resentida y sólo su Muqin podía manipularla. A pesar de que nunca mientras crecía vio que emitiera ningún tipo de energía.
Recordó ver a su padre con ella entre sus manos, sentado en la cama y con esa mirada triste y llena de nostalgia, Chenqing y Suibian eran los únicos recuerdos que habían quedado de su presencia. Nunca había expulsado energía antes y ahora de pronto había comenzado a resonar y a despedir energía.
¿Era esto obra de su Muqin? ¿Estaba tratando de decirle algo?
Acercando la mano lentamente terminó rompiendo la principal regla de su padre y tomó a Chenqing con su mano derecha.
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Todos estaba comiendo algunos bocadillos y bebiendo té mientras esperaban a que Xie Yun regresara con el libro, pero se estaba tardando demasiado.
Jin Ling: ¿Estás seguro de que estaba donde dijiste?
Lan Sizhui: Si… lo vi esta mañana cuando me preparaba para las clases… siempre lo tengo en el mismo lugar.
Jiang Qing: Entonces algo más lo entretuvo - Se puso de pie y miró a su hermano - Vamos a buscarlo.
Sin esperar a que le respondiera tomó el brazo de Chanseng y lo obligó a seguirla, los demás se miraron y decidieron subir también para ver qué tanto le estaba entreteniendo tanto tiempo.
Llegando a la parte superior de los escalones escucharon a Chanseng gritar pidiendo ayuda así que corrieron a la habitación principal de la residencia, la de Hanguang Jun. Al entrar Xie Jun estaba de rodillas con Chenqing en la mano derecha y la otra tomando fuertemente la del joven Sanador que trataba de sacarlo de una especie de trance. Sus ojos estaba cerrados y su cara llena de sudor, también de la dizi salía una especie de energía oscura.
Lan Sizhui: ¡Didi! - Corrió y se arrodilló frente a él - ¿Qué pasó?
Jiang Qing: No tengo idea… ya estaba así cuando lo encontramos.
Lan Jingyi: Tenemos que hacer algo… es peligroso que esté en contacto con esa energía.
Jin Ling: ¿Está usando Empatía?
Jiang Chanseng: ¿Qué?
Lan Sizhui: Eso no puede ser… esa técnica es peligrosa y Die nos ha prohibido usarla.
Jin Ling tomó el Cascabel del Clan Jiang que fue de su madre, justo el día que partió se lo había dado para su protección. Dejando a Suihua en el suelo se arrodilló junto a Sizhui, acercó el cascabel al oído de Xie Yun y comenzó a agitarlo.
Lan Jingyi: ¿Qué haces?
Jiang Chanseng: El Cascabel tiene el poder de tranquilizar la mente y alejar los malos espíritus… también puede usarse para sacar a alguien atrapado en el trance de la Empatía.
Jiang Qing: No está funcionando…
Jing Ling: ¡Xie Yun!… ¡Despierta!
Xie Jun respiraba dificultosamente y estaba sudando, algo dentro del trance estaba causándole dolor por los gestos en su cara. Jiang Chanseng comenzó a utilizar su energía de sanación para ayudar al cascabel y así lograr sacarlo del trance.
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Dolor… Oscuridad…
Las cadenas que le ataban rodeaban todo su cuerpo, eran frías y lastimaban la piel expuesta. Lo mantenían de pie en la fría y oscura cueva donde se encontraba. Un viento helado recorría su cuerpo apenas cubierto por una túnica teñida de rojo por causa de la sangre, sangre que no era del todo suya.
- Ha funcionado… finalmente el ritual ha sido finalizado.
- Tomó mucho más tiempo del que pensábamos… fue realmente un dolor de cabeza.
- Esto todavía no ha terminado… tenemos que asegurarnos que nadie lo encuentre.
No podía reconocer las voces alrededor, ni siquiera era capaz de reconocer si eran voces de hombre o de mujer, nunca las había escuchado antes.
“¡Xie Yun!… ¡Despierta!”
Esa otra voz vino de su cabeza, nuevamente escuchaba rastros de voces lejanas. Algunas le llamaban, otras le maldecían. Odio y amor venían en oleadas a él todos los días, aunque en su estado no podía distinguir cuando comenzaba un día y terminaba el otro.
No podía recordar cómo había llegado a ese lugar, ni que había hecho para recibir ese castigo. Porque tanto dolor y tortura debería ser un castigo por algo realmente malo, desearía al menos poder recordarlo para saber porqué estaba siendo castigado.
- Tenemos que irnos… pasarán unos días más antes de que podamos moverlo.
Pasos se alejaron y supo que se había quedado sólo, ese momento era el que más miedo le daba, estaba en total oscuridad por culpa de sus ojos vendados. Sólo escuchaba las voces de los demonios y almas en pena venir y lastimarlo, absorber su energía para mantenerlo débil.
“¿Muqin?”
¿De quién era esa voz?
Era dulce y se escuchaba angustiada, le recordaba a otra que escuchaba constantemente, una voz suave que con tono anhelante le llamaba, alguien que lo buscaba para salvarle y llevarle a la luz.
Pero no podía escapar, no tenía la energía para ello. Podía sentirlos llegar, sentir sus alientos, sus manos frías tocarlo y así tomar su energía, su mente se llenaba de gritos de personas torturadas. No podía escapar de esa prisión oscura, sentiría dolor y debilidad hasta que perdiera la conciencia y cuando la recuperara todo volvería a comenzar.
“¡Muqin!… ¡No te rindas!… ¡Puedes liberarte!”
“¡Xie Yun!… ¡Despierta!”
“¡Te estamos esperando!… ¡No te rindas!”
Esa voz desesperada le estaba llenando de energía, algo dentro de ella le estaba llenando de algo que no podía saber bien de dónde venía, pero sentía que debía luchar, tenía que escapar y buscar al dueño de esa voz fuera como fuera.
“Gongxi… finalmente ha regresado…”
Una nueva voz se unió a las anteriores, esta era más gruesa y por el tono era de una criatura no humana, pero no sintió miedo al escucharla, le era tremendamente familiar pero no podía recordar dónde la había escuchado antes. Como todo en su mente, los recuerdos eran borrosos y estaban mezclados con visiones de cosas que no tenía idea de si eran reales o no.
“Gongxi… le pido perdón.”
De pronto la venda en sus ojos cayó y las cadenas que lo ataban estallaron en cientos de pedazos, las criaturas que lo torturaban salieron corriendo de vuelta al fondo sin fin de la cueva. Mientras que él sin fuerzas fue a dar directo al suelo de piedra húmedo y con olor a sangre fresca.
Ahora estaba libre pero sin energías para ponerse de pie, sólo esperaba recobrarse lo suficiente como para poder escapar antes de que sus captores regresaran y volvieran a encadenarlo.
Continuará……………
Notas: Gracias a los comentarios tan lindos que me dejan, me dan muchos ánimos para seguir y llegar al final de esta historia n_n
Perdonen el atraso esta semana, estuve enferma por culpa de la gastritis y la colitis que padezco desde hace un par de años, estuve en cama casi sin poder comer y sin energías como para escribir, por eso les compenso con otro capítulo un poco más largo de lo normal.
Dage: Hermano mayor. (Yuan es unos meses mayor que Xie Yun XD)
Di / Didi: Hermano menor.
Shimu: Tía.
Mei: Hermana Pequeña.
Seis Artes Chinas: Conjunto de disciplinas que formaban la base de la educación en la antigua China desde la Dinastía Zhou. Ritos, música, tiro con arco, equitación, caligrafía (Dibujo) y matemáticas.