Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Ángelo por Komka Daisuke

[Reviews - 308]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

 

Bueno aqui les traemos la siguiente entrega de esta historia, esperamos que sea de su agrado. Gracias a todos los lectores que han dejado reviews, para todos ustedes les dedicamos con mucho cariño este capitulo.

Komka Daisuke

Capitulo 8. El viaje

 

Marcello estaba abrumado por la situación cuando de repente un fuerte mareo le hizo desmayarse en brazos de Vincenzo.

 

-Marcello –grito.

 

Al escuchar el grito los tres chicos corrieron a ver que pasaba.

 

Francesco abrió de golpe el estudio para ver a su padre en los brazos de un desconocido.

 

------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

 El consultorio 

Al entrar a la habitación, Francesco sintió un nudo en la garganta por ver a su padre desmayado, nunca se le había presentado una situación así, por lo que su rostro reflejaba una angustia enorme, por ello, ni siquiera le molestó que Vincenzo se encontrara ahí.

 

Tan absortos se encontraban tratando de reanimar a Marcello, que no se dieron cuenta de que en ese momento llego la camioneta que el padre de Carlo, les prestaba para el viaje.

 

-Francesco, ha llegado la camioneta, dijo Carlo, si quieres le puedo pedir al chofer que nos lleve al hospital para que revisen a tu padre.

 

Vincenzo pensando en que bajo ninguna circunstancia le dejarían llevarse a Marcello, se dirigió a Francesco. –Es una magnifica idea, dile a tu amigo que por favor nos lleve al hospital y uniendo la acción a la palabra todos salieron, Vincenzo cargando a Marcello que aún se encontraba aturdido, pero no inconsciente.

 

Al llegar al hospital, pasaron a la sala de urgencias donde fueron atendidos por un anciano y amable Doctor que solo permitió el paso de Marcello, el cual tardo más de una hora en revisarlo, debido a que pidió a su asistente que le practicara algunas pruebas y una vez analizando el resultado se dirigió a Marcello con gesto serio para informarle: -Usted esta en perfecto estado de salud, dijo el anciano y después mostrando una sonrisa de anuncio de pasta de dientes soltó. –Esta embarazado y debe cuidarse porque al parecer es primerizo y a su edad…

 -No soy primerizo y no soy tan viejo reclamó Marcello.  –¿Qué edad tiene su otro hijo? Pregunto el galeno.  –Dieciséis años, respondió lacónico Marcello.  –Pues después de ese tiempo haga de cuenta que es primerizo. 

Marcello, se sintió feliz por un momento, esa sensación de albergar una vida en su interior otra vez, pero los recuerdos de su primer embarazo, las circunstancias y la prematura muerte de su marido, le entristecieron.

 

Tenia muchas dudas pero decidió no guardar silencio, su hijo merecía saber la verdad, se había prometido ser honesto con el y lo cumpliría.

 

Al salir del consultorio, Marcello se veía feliz, sin embargo por la tardanza, todos se encontraban muy nerviosos.

 

-Habla ya Marcello ¿Qué te pasa?, ¿por que el desmayo?, ¿te sientes bien? –Contesta por favor. Era Vincenzo que se encontraba hecho un nudo de nervios.

 

Francesco que se encontraba recostado sobre Ángelo quien le acariciaba el pelo, con el rostro preocupado y las mejillas mojadas por las lágrimas, ni siquiera podía articular palabra, al ver salir a su padre del consultorio, solo corrió a abrazarlo y bajito le dijo

 –Te amo papá, ¿estás bien? 

-Un momento, todos tranquilos que aun hay Marcello para rato. Mi “enfermedad” es que Francesco, Ángelo van a tener un hermanito. Estas palabras aunque iban dirigidas a los chicos, la mirada de Marcello estaba clavada en Vincenzo, quien casi se puso a saltar de gozo.

 

-Gattino, gattino que feliz me haces.

 

-Francesco, creo que sobran las explicaciones, quiero a Vincenzo y vamos a casarnos, ahora no solo Ángelo va a ser tu fratello (hermano) sino que ahora tendrán un piccolo fratello (hermanito).

 

Pero, entonces ¿ese señor va a vivir con nosotros? Pregunto confundido Francesco.

 

-Ese señor como tú lo nombras, no es otro que tu tío Vincenzo y sí es lo mas cercano que tenemos a tu padre Massimo.

 

Francesco, corrió hacia Vincenzo y en un arranque inesperado, lo abrazo con fuerza y le dio un inocente beso en la boca.

 

-Si, definitivamente es tu hijo, dijo Vincenzo, dirigiéndose a Marcello, es igual a ti a los 16.

-----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

L’Amore rinascita (el amor renacerá)

-----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

 Preparativos Casa de los Podesta 

Al llegar a casa, después de dejar a Carlo en su mansión a fin de que recogiera algunas cosas que no le habían mandado quedaron de pasar por el en cuanto estuviera listo, Marcello reunió a Vincenzo, Francesco y Ángelo para informarles que el viaje que tenían planeado a Arezzo, lo harían con Vincenzo porque debido a su estado, no podría manejar mucho.

 

El viaje de Sicilia a Arezzo es un viaje muy largo que debe hacerse en dos partes, primero por mar para cruzar de la isla a la Italia continental y después continuar por el septentrión hasta la región de la Toscana.

 

-Marcello, pequeños, hay algo que debo informarles, dijo Vincenzo muy serio. Unos primos míos cuyos padres se han separado, los han dejado al cuidado de mi padre y mío, por el momento trabajan para mis primos pero pronto regresarán a la escuela y deben aprobar algunos exámenes de nivelación para poder acceder al colegio aquí en Sicilia.

 

-Y ¿quienes son esos primos con los que están los muchachos?, quiso saber Marcello.

 

-Bueno tal vez no los recuerdes pero son los primos Franco y Andrea de la familia de los Sacchetti. Respondió Vincenzo. Al escuchar esos nombres Ángelo y Francesco casi se orinan del susto e inmediatamente comenzaron a mover nerviosamente las manos, y a sudar copiosamente, detalle que no paso desapercibido tanto para Marcello como para Vincenzo.

 

-¿Me quieren decir que les pasa a ustedes dos?, les pregunto Marcello a lo que ambos adolescentes con la cara totalmente encendida solo negaron con un movimiento de cabeza.

 

-Solo voy a preguntar una vez mas, dirigiéndose nuevamente a los chavales, porque esos nombres los han incomodado tanto, ¿hay algo de lo que no quieren hablar? Preguntó de nuevo.

 

–Déjalos gattino yo te puedo decir porque se sienten así, dijo Vincenzo.

 

-¿Tuuuuuuu? Y porque tu sabes algo sobre mis hijos (ya consideraba a Ángelo como hijo suyo) y yo no. Francesco –dijo dirigiéndose a este-, yo he sido honesto contigo y esperaría que tú también lo fueras, así que empieza a hablar.

 

-Tienes razón padre, tarde o temprano te deberías enterar y mejor que sea por nosotros, dijo un apenado Francesco y posteriormente, junto con Ángelo comenzaron a relatar como todo empezó desde que por error tomo unos papeles de su escritorio, después la confusión en el hotel, casi todo lo que paso con Franco y Andrea y sus guardaespaldas, los gemelos exparejas de estos últimos y finalmente los borrachos del elevador y el encuentro desafortunado con sus compañeros de clase, Carlo incluido. Todo ello el mismo día que Vincenzo había tomado a Marcello en la reunión de los vinicultores.

 

Al terminar, Marcello tenia los ojos como platos, no podía creer que todo eso había pasado en solo una tarde y dirigiéndose a Vincenzo le pidió que cuanto antes trajera a sus primos para hablar “muy seriamente” con ellos, sin embargo, Vincenzo lo convenció de que era mejor esperar a que regresaran del viaje, para que no fuera a tener complicaciones con su embarazo. El gattino de mala gana acepto.

 

-El caso es, dijo Vincenzo que Enrico esta conmigo ahora por lo que tendrá que ir con nosotros ya que apenas se ha enterado de que es fértil y debo enseñarle un poco como debe comportarse ya que es un poco atrabancado.

 

-De acuerdo, le respondió Marcello pero de todas maneras, como estos niños son mi responsabilidad debo hablar con Franco y Andrea.

 

-Si claro, respondió Vincenzo mirando fijamente a los chicos, pues en ningún momento mencionaron que Franco y Andrea los habían tenido semi desnudos en su cuarto y que con besos los habían excitado, pero él conociendo la historia completa, piensa que es por pudor que no dijeron todo, por pudor o porque les gusto pensó, de todas formas, a sus ojos los hace unos chicos muy discretos, pero necesita ganarse más su confianza.

 

-Es hora de descansar, mañana será un día muy agitado y pesado, dijo Marcello, retirándose a su habitación.

 

Momento que aprovecho Vincenzo para hablar con los chicos.

 

–Yo sé lo que realmente sucedió en La Scala, pero tienen mi palabra de que no revelare nada por su propia seguridad, pero quiero que me digan algo ¿tienen miedo de casarse con mis primos?, ¿los lastimaron?

 

-No, -respondieron al unísono-

 

De hecho, dijo Francesco.

 

-Los extrañamos mucho y constantemente pensamos en ellos.

 

Ángelo estaba un poco mas receloso a hablar, pero al ver la sonrisa que se dibujo en la cara de Vincenzo al escuchar lo dicho por Francesco, se decidió a confesarse.

 

-Sr. ¿Es malo sentir esto por una persona mayor?, ¿Es malo querer estar con esa persona y sentir sus manos sobre la piel? -y sus besos ahhh sus besos, continuo abrazándose a si mismo.

 

-Y ¿es malo excitarse pensando en ellos?, preguntó Francesco.

 

En este punto ya no le cabía duda a Vincenzo, sus primos estaban locos por esos chiquillos y ellos a su vez estaban locos por Franco y Andrea, por lo que no dudo en decir:

 

-No, nada de eso es malo, solo que si Marcello se llega a enterar de lo que realmente paso, no les garantizo que los vuelvan a ver.

 

Los chiquillos se entristecieron, pero después, Vincenzo agregó,

 

-Por mi parte no voy a mencionar nada, y es mas, voy a ayudarles en lo que pueda, pero con la condición de que ustedes que son fértiles también, me ayuden a controlar a Enrico.

 

Es muy joven también y no quiero que salga lastimado, hasta que encuentre el verdadero amor.

 

Por toda respuesta ambos se aventaron a los brazos de Vincenzo y le dieron un beso de agradecimiento, para después retirarse a dormir y soñar con sus prometidos.

 

------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Preparativos La Scala cuarto 3456 

-Ring, ring –diga. –Llamada de Cagliari para el Sr. Enrico Bertoni Sacchetti.

 

-Si soy yo gracias.

 

-Luciano que gusto de saludarte, ¿como estas?

 

-Idiota.

 

-¿Qué te pasa? ¿Porque me dices así?

 

-¿Cuando pensabas informarme que te irías de paseo a Arezzo con Carlo?

 

- Non si arrabbi (no te pongas rabioso) en primer lugar no voy yo solo con Carlo y en segundo lugar apenas hemos llegado al hotel y pensaba hablarte mas tarde.

 

-¿En verdad? Pues Vincenzo ya les ha hablado a Franco y Andrea para informarles sobre el viaje.

 

–Chismoso.

 

–¿Que has dicho?

 

–No, si yo no he dicho nada.

 

-Bueno el punto es que te vas de paseo con los Podesta pero Carlo va con ustedes, -dijo Luciano –¿no es así?

 

-Si fratello (hermano) pero no es lo que piensas, yo voy con ellos porque Vincenzo quiere “educarme” en cuanto al comportamiento que un señorito fértil debe tener.

 

-Siendo así, yo paso, diviértete carota (zanahoria)

 

-Carota la tua mama (zanahoria tu mama) respondió Enrico.

 

-Cuidado que es la misma jajajajaja, pero ya en serio cuídate no quiero que una sarta de maiali (marranos), se quiera pasar de listo contigo.

 

-No te preocupes fratello (hermano), sé cuidarme bien. Arrivederchi.

----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

 El inicio del viaje 

Por la mañana ya estaba todo listo para el viaje, Vincenzo y Enrico llegaron en el auto de este ultimo el cual se quedaría en la mansión de los Podesta para solo utilizar un vehiculo, pasaron a recoger a Carlo a su casa y emprendieron el viaje.

 

La primera parada sería en Mesina.

 Ángelo muy orgulloso empezó a narrarles a Francesco, Carlo y Enrico sobre las partes que recorrerían y como su padre lo había hecho con él cuando lo llevo a Sicilia para inscribirlo en la escuela. 

Mesina (Messina en italiano) es un municipio de 260.000 habitantes, situado en el ángulo noreste de Sicilia a unos 90 km de Catania y unos 230 km de Palermo, situada enfrente de Reggio di Calabria, junto al mar y al homónimo Estrecho de Mesina, famoso por su aparición en La Odisea de Homero como el lugar donde se detenían las sirenas.

 

A lo largo del siglo XX hubo una gran polémica por el proyecto de un puente sobre el estrecho que de llevarse a cabo sería una de las obras de ingeniería más importantes jamás realizadas, sin embargo, siendo el transporte en barco un imán turístico los habitantes no vieron con buenos ojos la construcción del puente por lo que actualmente sigue la polémica y no se ha construido.

 

-De hecho –enfatizo Ángelo- de haberse hecho en vez de tomar el barco para cruzar solo hubiera manejado el señor Vincenzo la camioneta y en menos de la mitad del tiempo estaríamos del otra lado.

 

Por cierto no olviden que como la zona es altamente sísmica, pueden sentir pequeños movimientos de tierra regularmente, de hecho la ciudad fue arrasada varias veces en la antigüedad. Durante el último terremoto del 28 de diciembre de 1908 la ciudad fue prácticamente destruida; murieron 60.000 de los 150.000 habitantes con los que contaba en la época.

 

Después de la explicación se fueron a tomar el barco hacia Villa San Giovanni que es el punto donde llegan los barcos en la parte continental de Italia, trayecto de pocos kilómetros pero de aproximadamente 4 horas de duración, el vehiculo iba guardado en la parte reservada a la carga, trámite que por ser burocrático les tomo mas de 2 horas realizar.

 

Ya instalados en el barco, Marcello decidió quedarse en un camarote ya que debido a su estado, prefería no arriesgarse a sufrir mareos si se quedaba en cubierta, no era la primera vez que realizaba el viaje, pero sentía que podría sacar el desayuno en cualquier momento. Vincenzo se quedo con él haciéndole compañía.

 

Mientras tanto los chicos se habían ido a la piscina del barco, cuando de repente Vincenzo recordó que Enrico no traía bañador, porque según no lo iba a utilizar y le dio curiosidad saber como se había metido a la alberca.

 

-Gattino, discúlpame un minuto, debo ir a la alberca para verificar que los chicos estén bien, dijo Vincenzo, para no preocupar a Marcello y salió con rumbo a la alberca.

 

Al llegar a la piscina casi se le cae la mandíbula al piso, Enrico se encontraba corriendo alrededor de la piscina solo con una ajustada truza blanca que al mojarse había quedado casi completamente transparente, además de que en la parte baja de la espalda lucia ahora mas clara su marca de fertilidad, lo que parecía no importarle mucho a Enrico ya que saltaba feliz tratando de alcanzar a Francesco quien se encontraba vestido con un discreto bañador tan largo que casi le tapaba las rodillas y una playera gruesa que no dejaba ver su marca de fertilidad, casi por el estilo era la vestimenta de Ángelo y Carlo que no gustaba de las actividades acuáticas, lucia una ajustada bermuda de mezclilla que hacia resaltar su delicioso trasero de burbuja y su virilidad, con una playera a rayas que le ajustaba perfectamente. Previamente los chicos le habían advertido a Enrico sobre su vestimenta e incluso se ofrecieron a prestarle algo de ropa, pero todo eso le importó muy poco a Enrico que reía feliz con su escasa truza y para colmo con la brisa fría que soplaba del océano, tenia la piel erizada y una media erección que difícilmente podía disimular.

 

Varios turistas que se encontraban a la orilla de la alberca, estaban encantados con la vista del Piccolo pelirrojo, que en esas condiciones y siendo fértil, era centro de atención de los varones presentes.

 

Vincenzo tomó una toalla de los catres y prácticamente voló hacia él y tomándolo bruscamente lo cubrió con la toalla y tomándolo de la cintura, lo levantó para colocarlo sobre su hombro, grave error, ya que Enrico no se quedo quieto y al quererlo detener lo jalo de la truza quedándose con ella en la mano ya que al caer Enrico de cabeza la prenda se quedo en las manos de Vincenzo, quien molesto cargo como bebe al pelirrojo y lo llevó a su camarote para vestirlo, ante la mirada de toda la concurrencia. Francesco, Carlo y Ángelo corrieron tras ellos.

 

Ya en la habitación, un enfurecido Vincenzo reclamaba a Enrico su comportamiento.

 

-No debes comportarte como una vixen (zorra) ¿que no te dabas cuenta las miradas de lujuria que te lanzaban todos los turistas?

 

-Pero yo no…, trato de responder el chiquillo, un tanto avergonzado por el hecho de que lo tratara realmente como a una cualquiera.

 

–Nada, debes estar consciente de tu condición de hombre fértil y no mostrar tu cuerpo con tanta facilidad, ¿no te das cuenta que en cualquier momento cualquiera de esos tipos pudo no contenerse y darte un buen susto?

 

-Si, es verdad, a coro le dijeron los otros chicos, algunos de los varones estaban ya erectos y preparados para cuando pasaras cerca de ellos para darte por atrás.

 

-Hey ustedes, no sean vulgares, les dijo Vincenzo, no deberían haberle permitido salir así, en cierta forma son también responsables.

 

Al escucharlo, todos lanzaron miradas asesinas al pelirrojo, quien ya vestido, se encontraba sobre la cama, con las piernas encogidas abrazándolas y con la cabeza recargada en las rodillas para no darles la cara.

 

-Bueno ya es suficiente, ni una palabra de esto a Marcello y los quiero en 20 minutos en el comedor porque ya es casi la mitad del viaje y debemos comer, les dijo Vincenzo y acto seguido se retiro a la habitación que compartía con Marcello.

 

Al llegar a la habitación, encontró dormido a Marcello y con mucho cuidado se deslizo en la cama, Marcello estaba de lado con las piernas ligeramente encogidas por lo que su trasero quedaba descubierto y Vincenzo no pudo soportar la tentación de juntar su cuerpo y la gran erección que ya tenía contra el trasero de Marcello, suavemente le acaricio las firmes aún nalgas y deslizó sus manos hasta la cabeza del gattino, para acariciarle el pelo, Marcello solo respondió entre sueños con una suave suspiro y Vincenzo ya no hizo nada mas, se quedo dormido junto a su gattino, recordando como lo había deseado desde que lo conoció y recriminándose por no haberlo identificado inmediatamente cuando lo vio en la convención, algo le era familiar en él pero no sabia que y por ese miedo de no aclarar sus sentimientos es que había terminado haciendo la estupidez de golpearlo después de haberlo poseído. ¿Por qué había olvidado tus preciosos ojos, tus dulces labios, tu cuerpo delicioso, por qué te había olvidado gattino, porque?

------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

 

El silbato del barco anunciando su próximo arribo a puerto, les despertó. Vincenzo estaba aún abrazado a Marcello y se sobresaltó al darse cuenta de que habían pasado mas de 60 minutos adicionales a los 20 que les había dado a los chicos para verse en el comedor.

 

Rápidamente, se levantó y dándole un beso en la boca a su gattino, le comunico que deberían ir al comedor por los muchachos ya que tal vez no tendrían tiempo de comer antes de desembarcar.

 

Al llegar al comedor, la estampa les dejo en una pieza, en estricto orden Enrico, Carlo, Francesco y Ángelo, se encontraban sentados en la entrada del restaurante, sobre los pequeños escalones que conducían al comedor con cara de aburrimiento y de hambre, y si no fuera por sus elegantes trajes de marinero de pantalón corto, hubieran parecido niños de la calle, regañados y abandonados.

 

Marcello volteó hacia Vincenzo con cara de interrogación y una sonrisa en los labios.

 

–Descuida, solo tienen hambre, pero aún es tiempo de comprar una pizza y un buen vino con lo que se les quitara el mal humor.

 

Vincenzo tenia razón después de comer tenían un excelente humor y muy dispuestos a ayudar en preparar el equipaje para desabordar.

------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

 En tierra Villa San Giovanni 

Michael, Ángelo padre al que cariñosamente llamaban Occhi (ojos) por lo expresivo de su mirada, Joseph (10 años) y Benjamin (8 años) hermanos menores de Ángelo esperaban impacientes el arribo del barco que traería a sus visitas.

 

Habían hecho el largo viaje desde Arezzo porque deseaban que Michael tuviera un descanso y ante sus pocas posibilidades económicas (Occhi era artesano y Michael se dedicaba de lleno al hogar) vieron la oportunidad de hacer el viaje sin tener que gastar mucho.

 

Sus ávidos ojos se llenaban con la figura del barco que dibujado en el horizonte se hacía cada vez mas grande y el característico silbato les anunciaba la llegada de la nave a puerto.

 

Joseph y Benjamín fieles a la costumbre de asombrar a su hermano, se escondieron tras el mar de gente y trabajadores del puerto para en el momento preciso hacer su triunfal aparición.

 

Una vez que el barco atracó y fueron colocadas las inmensas anclas, apareció la escalerilla que transportaría a tierra a los pasajeros.

 

Sonrientes Michael y Occhi vieron aparecer la silueta de su muchacho acompañado de otros chicos vestidos igual que el y se abrazaron emocionados. –Cuanto ha crecido Ángelo, exclamó Occhi, y casi se le saltaban las lágrimas.

 

Al llegar a tierra, Vincenzo traía tomado del brazo a Marcello y los cuatro muchachos venían al frente Enrico con Carlo y Francesco con Ángelo, este último al tocar tierra inmediatamente corrió a abrazar a sus padres quienes lo llenaron de abrazos y besos.

 

No muy lejos de ahí un par de rapaces, solo esperaban el momento adecuado para salir de su escondite y saltar sobre Ángelo. A una señal corrieron desde su escondite y ambos saltaron sobre Ángelo tirándolo al suelo y brincando a horcajadas sobre él. Francesco utilizando su instinto de conservación tomo a Benjamín del brazo y se lo quito de encima a Ángelo, pero cual sería su sorpresa de que en vez de sentirse agredido, Benjamin le salto a la espalda a Francesco y le comenzó a hacer cosquillas a lo que Francesco no se pudo resistir y Ángelo en el suelo montado por Joseph y Francesco cargando a Benjamín, reían sin parar ante la divertida mirada de todos.

 

Enrico no queriendo perderse de la diversión, comenzó a empujar a Carlo y a hacerle cosquillas en las corvas, (pero no le dice nada, ni lo detiene pues sabe que a su hermano Luciano le gusta y como le ha estado sacando información ya sabe del enojo de Luciano por no poder ir al viaje) Carlo solo empezó a saltar como rana debido a las cosquillas, causando la hilaridad de todos los presentes menos de Vincenzo.

 

-Enrico, le grito Vincenzo, hasta cuando vas a entender que eres el mayor y que además no debes demostrar ese comportamiento inaceptable para un señorito fértil.

 

Enrico se detuvo en seco y con la cara totalmente roja por la ira y la vergüenza de ser regañado frente a unos desconocidos, solo se arreglo la ropa e incorporándose se quedo quieto, observando a los demás chavales que continuaban riendo y jugando. Mientras hablaba entre dientes, más para sí que para los demás. –No es justo, ellos también son fértiles y no les dicen nada.

 

Como si hubiera adivinado sus pensamientos Vincenzo agrego, -Enrico, tu eres mayor y aunque no eres el único fértil aquí, si eres el mas vulnerable, por eso es mi obligación corregirte.

 

-Vamos, agrego Michael, -Es solo un niño y muy precioso por cierto, (Enrico le había caído bien desde el momento en que lo vio). –No debería ser tan duro con él.

 

-Usted es… pregunto Vincenzo.

 

-Michael, Michael de Mastroni, padre de Ángelo y este es mi esposo Ángelo, Occhi de cariño y esos pequeños son Joseph y Benjamín mis hijos pequeños, dijo orgullosamente.

 

Pasadas las presentaciones todos excepto Vincenzo que fue a recoger la camioneta, se dirigieron al Grand Hotel de La Ville que solo se encuentra a unos pasos del muelle.

 

Este hotel es conocido por su lujo y por ser casi el único de la zona que cuenta con servicio de 5 estrellas.

 

Michael se preocupo mucho cuando entraron al hotel ya que sabía que su presupuesto no daba para esos lujos, comentándole a Occhi en voz baja esta situación, pero Marcello ya lo tenía previsto y las habitaciones estaban reservadas y listas, por lo que alargándoles la llave de la habitación les dijo sin orgullo ni vanidad, -Esta suite es para ustedes y los niños (Joseph y Benjamín) los chicos yo creo que desean estar solos para platicar, por lo que pondremos a los cuatro juntos y yo con Vincenzo en otra habitación, ya están pagadas por lo que no deben preocuparse, déjenme compensar en ustedes el bien que Ángelo le ha traído a Francesco con su amistad y a mi con el placer de tener un hijo más en casa.

 

-Gracias, señor Podesta, dijo Michael.

 

-Nada de señor, solo Marcello por favor, y es en verdad un placer.

 

Después de registrarse, y como los amigos deseaban descansar un rato antes de la cena, Enrico fue designado para acompañar a la piscina a Joseph y Benjamín quienes rara vez tenían oportunidad de nadar ya que no eran tan ricos como para tener piscina en casa y el mar está muy alejado de Arezzo. Por su parte, Michael y Occhi se fueron a su habitación a descansar y Marcello y Vincenzo se fueron de compras, para la siguiente fase del viaje.

 

Ni, Francesco, ni Carlo ni Ángelo se dieron cuenta que de nuevamente Enrico salía de la habitación solamente con una ajustada bermuda, colocada sin ropa interior, que adivinaba toda su anatomía, ya que si bien no era flaco tampoco era obeso, pero sus formas eran bastante sugerentes, en particular su redondeado trasero y su virilidad bastante grande para su edad.

 

Al llegar a la alberca, comenzó a jugar con Joseph y Benjamín que en turnos se montaban de caballito para que los paseara por la alberca y de vez en cuando salía de la piscina para tirarse de clavado.

 

Con la marca de fertilidad al aire, y su sugerente atuendo, era blanco de todas las miradas de los varones que ahí se encontraban, uno en particular, ya pasado de copas no le quitaba la vista del trasero.

 

En la habitación de Michael y Occhi, este ultimo de pronto pensó que ya había pasado mucho tiempo y de que era hora de ir por los pequeños para que se vistieran para ir a cenar, así se lo informo a Michael y bajó al área de la piscina para llevar a cabo su tarea.

 

Precisamente al momento de llegar, un sujeto alto, bien parecido, pero mas borracho que un martini, sujetaba por detrás de la cintura a Enrico, tratando de atraerlo hacia su virilidad, quería embarrarse en el trasero de Enrico y el chico luchaba por salir de ese dilema, Occhi, inmediatamente corrió hacia ellos y pateándole los testículos, mando al sujeto a la piscina, donde el personal de seguridad, que había visto toda la acción lo rescató.

 

Sin embargo, Enrico al sentirse salvado pensó que ese era el final del asunto, pero no, no todo acababa ahí. Occhi lo tomo de una oreja y le dijo.

 

-Muchachito, ya estas grande para hacer esas tonterías, ¿Qué no ves el riesgo al que te has expuesto?

 

-Joseph, Benjamín vamos a su habitación. Los pequeños ni lo pensaron, inmediatamente salieron de la piscina y tomando cada uno su toalla se taparon y caminaron detrás de Occhi que todavía tenia pegada la mano a la oreja de Enrico.

 

En la habitación Occhi, volvió a mencionar los peligros que corren los chicos fértiles y los cuidados que deben de tener para no mostrarse semi desnudos y menos enfrente de varones, en edad de procrear.

 

Enrico maldijo su mala suerte, el siempre había sido un chico “normal” y nunca había tenido que preocuparse por esas cosas, pero el colmo era que alguien extraño le reprendiera por su proceder, le resultaba vergonzoso e insultante, rápidamente se puso ropa seca y por primera vez en mucho tiempo, se tendió boca abajo en la cama y abrazando la almohada lloro desconsoladamente.

 

Esto no enterneció para nada a Occhi, quien solo ordenó que estuvieran listos para la cena y se retiro del cuarto dejando a sus pequeños con Enrico.

 

Los pequeños se sorprendieron tanto de ver llorar a su recién llegado amigo que abrazándolo lo consolaron hasta que se tranquilizo.

 

El resto del tiempo se fue rápidamente ya que al poco tiempo los llamaron a cenar, acto que transcurrió sin mayores sobresaltos y se dispusieron a dormir para continuar muy temprano por la mañana la segunda parte del viaje.

 

------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

 6:00 a.m. 

-Creo que ya es todo, ahora a continuar el viaje, ya que aun es un trecho bastante largo, dijo Vincenzo cuando ya todos estaban instalados en la camioneta.

 

-Ángelo, tu que estas tan orgulloso de tu tierra platícales a tus amigos sobre Arezzo, dijo Michael quien había tomado bajo su custodia a Enrico y a fin de evitar que Vincenzo lo regañara le había pedido que se sentara junto a él en el último asiento de la camioneta.

 

Ángelo empezó a relatar:

 

-Arezzo es una ciudad, en la Toscana, capital de la provincia del mismo nombre. Su población era de 94.675 habitantes en 2004 y a la fecha no ha variado mucho debido a que también sufre el fenómeno migratorio a causa de que las principales escuelas de Italia se encuentran en otras poblaciones por ello, los jóvenes que desean estudiar, generalmente abandonan su tierra, como yo.

 

-Algunos lugares de interés, son la Iglesia de San Francisco con el ciclo de frescos Leyenda de la cruz, de Piero della Francesca y la remodelación de Vasari de la plaza mayor de Arezzo, aparte de otros monumentos medievales.

 

-¿Sabían que la película ganadora de tres oscars "La vida es bella" está rodada en esa ciudad?

 

-Arezzo a pesar de todo, es una de las ciudades más ricas de Italia, su industria principal reside en la elaboración de joyas de oro, como las que hace mi padre, lastima que él no sea el dueño del taller, sino solo un artesano. A causa de los destrozos que esa ciudad padeció durante la Segunda Guerra Mundial, hubo que sustituir las antiguas callejuelas por grandes avenidas. No obstante, su centro histórico sigue siendo grande y alberga una considerable cantidad de edificios medievales de especial interés.

 

-La Toscana, continuó, es un lugar donde, desde siglos, la industria del textil ha sido una de las mayores fuentes de riquezas para los productores y comerciantes de sus principales ciudades. Importantes personajes de la moda han nacido en Florencia o en Prato y algunos nombres mundialmente famosos empezaron sus actividades en estas tierras como por ejemplo Gucci, Salvatore Ferragamo, Roberto Cavalli y muchos otros.

 

-Actualmente, aparte de hacer compras en las bonitas boutiques de alta moda de Florencia es posible comprar directamente en las fábricas o en los Outlets. En Toscana hay varios como por ejemplo el de Prada, que se encuentra cerca del pueblo de Montevarchi o The mall que se encuentra cerca de Valdarno donde se puede encontrar vestidos de Gucci, Armani, Tods, y muchos otros famosos diseñadores cuyas pendas fuera de Italia son muy caras, pero ahí pueden comprarse a precios muy accesibles.

 

El viaje transcurrió en paz y solo pararon dos veces a cargar gasolina y a tirar lo que el cuerpo no necesita.

 

Cerca de las 10 de la noche llegaron a la finca de los Mastroni, una humilde pero bien aseada casa rustica de campo, rodeada de vid.

 

Se disponían a entrar cuando se dieron cuenta de que un flamante vehiculo deportivo les estorbaba la entrada.

 

Los tripulantes del vehiculo, al ver acercarse la camioneta se apearon, eran dos elegantes sujetos, forrados en finos trajes de seda, usaban sombrero que hacia juego con sus trajes y portaban vistosos arreglos florales combinados con distintas variedades de vid y ambos sonreían muy seductoramente.

-----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

L’Amore rinascita (el amor renacerá)

-----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

 

Continuará…

  
Notas finales:

 

Bueno esperamos que halla sido de su agrado, por favor dejen reviews. gracias y feliz año.

Komka Daisuke


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).