La multitud no tardó en reunirse de nuevo, entre una nube de polvo yacía el cuerpo del tipo que nos había perseguido.....
- Ven, vámonos.... -
- Pero....está...-
- Muerto? No, no te preocupes.... -
Huimos de la escena, y un par de calles más adelante el chico me dio las gracias por salvarle, me preguntó mi nombre, pero me negué a dárselo, me sentía asqueado de llevar el mismo apellido de aquellos que me habían vendido, se despidió de mí y nunca lo volví a ver....
- Ahá!!! Al fin te encuentro!! -
Unos brazos ahora tan familiares me rodearon por la espalda....
- Kaien-sama......? -
- Hice bien en seguir tu reiatsu, así que tu fuiste el causante de la conmoción de allá atrás verdad!!!??? -
- Ah...este...déjeme explicarle....lo que pasó es que......-
Estaba atónito! Había cumplido su promesa, a pesar de que nos habíamos conocido poco tiempo la había cumplido
- No hace falta que expliques, se lo tenía merecido, lo que me intriga es como lograste invocar un Hadou? -
- El chico que estaba conmigo me ayudo con el incoherente canto y el resto...pues simplemente fluyó, no se como explicarlo....-
- Ya habrá tiempo para eso después, vamos, sígueme -
Caminamos entre las calles del Rukongai, y noté por primera vez que en el centro se hallaba una ciudad independiente protegida por altos muros de un blanco inmaculado, entre más cerca estábamos del centro los distritos del Rukongai se veían distintos, mas limpios, mas tranquilos, la gente era educada y se saludaba....nada que ver con el lugar al que llegué......
Entramos a la ciudad blanca y caminamos hasta la casa de Kaien-sama, no era muy grande pero si acogedora, me invitó a pasar y a tomar asiento...
- Has pensado que vas a hacer hasta el día en que te toque renacer? -
- Ummm, no, supongo que....volver a donde llegué......-
Me aterraba la idea de volver a ese lugar, si ese tipo me hallaba no quería ni pensar en que me haría.....
- Por lo que vi hoy tienes mucho talento para las Artes demoníacas, y tu nivel de reiatsu, aun cuando no has tenido el entrenamiento adecuado es bastante avanzado, si tu lo deseas podrías entrar a la Academia y volverte Shinigami -
Acepté la propuesta de Kaien-sama de entrar a la Academia y de vivir con él, las clases empezaban dentro de un mes pero el tiempo pasaba volando, entrenábamos por las mañanas y en las tardes cuando el tenía cosas que hacer con Ukitake taichou yo me ocupaba de los quehaceres de la casa.
Con el paso de los días mejoré a pasos agigantados el manejos de mi reiatsu, el kidoh y las artes de la espada, todo ante la mirada atenta de Kaien-sama quien parecía satisfecho de mi progreso, sin embargo las cosas comenzaron a cambiar gradualmente, Kaien empezó a salir por largos espacios de tiempo y siempre regresaba de mal humor, no comía ni entrenábamos más, a duras penas me hablaba, me sentía solo....
- Ya estoy en casa -
- Bienvenido Kaien-sama -
Algo no andaba bien.....
- Empieza a empacar tus cosas chico, te mudas en tres días -
La noticia me dejó petrificado, mudarme? A dónde? Porqué?
- Pero...Kaien-sama, porqué? Hice algo mal? -
- No puedes simplemente seguir una orden!!!??? -
Se fue a su habitación sin decirme nada más, las horas pasaban y el no salía, lo había dicho en serio, quería que me fuera, esperé y esperé afuera de su habitación....
- Despierta.....por todos los dioses, que haces aquí afuera! Esta helando!!! -
- Kaien-sama! -
Me lancé a sus brazos esperando una respuesta afectuosa pero...
- Ven, entra -
No era la primera vez que estaba en su habitación, siempre que llovía o nevaba dormía ahí, pero esta vez la vi distinta, lúgubre y ajena.....
- Siéntate.....hablemos -
Se sentó en la cama y me indicó que me sentara a su lado....
- Como te has sentido? Eres feliz? -
- Mucho.... Kaien-sama! Porqué?! -
Pero no respondió, solo miraba por la ventana con el seño fruncido, parecía muy molesto desde que llegó....
- Extrañas algo del mundo mortal? -
- No, lo tengo todo aquí -
- Yo sí extraño algo -
- Qué es Kaien-sama? -
- Extraño los cerezos.....en toda la Sociedad de las Almas no hay uno solo.....-
Hubiera esperado cualquier cosa menos eso, un cerezo? Eran bonitos pero....no me pareció trascendente.....
- La noche que te hallamos siendo perseguido por el Hollow estaba admirando los cerezos, era un espectáculo hermoso...tanto como...-
Me miró, me miró con tal intensidad que me sonrojé, pero era demasiado ingenuo y torpe como para entender sus palabras....
Pensaba que hacer o que decir cuando desvió la vista de nuevo a la ventana....
- Dentro de tres días serás adoptado..... -
- Qué? Adoptado? Pero yo no quiero eso!!! Tu eres mi familia Kaien-sama, no quiero a nadie más! -
- Es lo mejor para ti, serás adoptado por la familia Kuchiki, una de las cuatro más poderosas del sereitei, a su lado no te faltará nada...-
- No quiero!! Quiero estar aquí! Contigo!!! Acaso te ofendí? Hice algo malo? -
- Claro que no, pero es lo mejor, entiéndelo -
- Pues no lo entiendo!!! -
Salí de la habitación no importándome las veces que Kaien me llamara, no importando como su voz se cortaba....eché a correr y me alejé tanto como pude, dejé atrás las paredes de la ciudad blanca y me adentré en el rukongai, corrí hasta quedarme sin aliento....
- Parece que encontré un cachorrito perdido -
- Ukitake-sama!
- Te pasa algo? Te ves fatal -
- No es nada, no se preocupe -
- Escuché la buena noticia, estás feliz de ser adoptado? De ser parte de la nobleza? -
- ....... -
- Peleaste con Kaien verdad? Tienes la misma cara que él cuando se enteró -
- Bah, que podría importarle a él -
- Piensas mal de él chico, se puso como un demonio cuando se enteró, habló con la familia Kuchiki alegando que él era tu familia pero ya no se pudo hacer nada, todo estaba decidido, te quiere muchacho, más de lo que tu crees, hizo hasta lo imposible porque no te apartaran de su lado -