CAPITULO 5 ROMPIENDO LAZOS
-Hola Naru...
- Esa voz...
No era...
Su voz no era la de Sasuke
-Hoy jugaras conmigo
-I...ta...chi...
-¿Qué pasa Naru-chan, no quieres jugar conmigo? - Itachi se acerco más hacia el rubio
-No...¿Dónde esta Sasuke? - Naruto se hizo para atrás intentado alejarse lo más posible
-No lo se, pero no has respondido aun mi pregunta
- No... no - Naruto intento salir de aquella habitación pero los poderosos brazos de Itachi lo apresaron contra la pared
-No vas a ir a ningún lado, tienes que cumplir conforme al trato que hice con Sasuke - Lo aprisiono más contra la pared, repeándose al delgado cuerpo del ojiazul, quien al sentirlo tan cerca y la humedad en su mejilla cuando la lengua de Itachi lo lamió empezó a forcejear
-No, por favor suélteme, no quiero, déjeme!!!
-Deja de gritar- le grito Itachi mientras entre el forcejeo apretó con fuerzas las muñecas del rubio
-Sasuke!!- grito el pequeño solo un instante pues su grito fue ahogado por los feroces labios del mayor de sus amos.
Como pudo siguió forcejeando y al sentir que no lograba mover ni un centímetro el cuerpo delante suyo mordió con desesperación al pelinegro, el cual se separo del rubio pero de coraje le dio una bofetada que lo mando directamente al suelo
-Idiota!!! - Itachi se limpio la sangre de su labio con el dorso de la mano- esto lo vas a pagar muy caro, que no entiendes que él no vendrá; porque el mismo me dio autorización
-No, el amo Sasuke no permitiría esto ¿Dónde esta? - Naruto se sentó en el suelo mirando directamente a su amo, aun sin poderse levantar, el golpe lo había atontado un poco y un hilito de sangre salía también de sus labios
-Claro que lo permitiría, hicimos un trato justo ¿Por qué crees que estoy en su cuarto?, ¿Por qué crees que se que eres su juguete personal naru-chan?
-No.... No- Naruto comenzó a llorar mientras se llevaba las manos a su cabeza desesperadamente
-vamos Naru-chan obedece... o prefieres que te diga Gaa-chan Naruto abrió los ojos sorprendido, era cierto todo aquello, ¿Por qué Itachi sabia lo de Gaara?, ¿seria verdad que Sasuke había hecho un trato con Itachi?, fuera lo que fuera no se podía quedar a averiguarlo Itachi de nuevo se estaba acercando a él y tenia mucho miedo
-No... - Se levanto rápidamente - él no... - clavo los ojos en Itachi
-él esta en mi cuarto ¿Por qué tu mismo no se lo preguntas?
Naruto corrió directamente al cuarto de Itachi, por más que pudiera encontrarse con que todo aquello era verdad, tenia que saberlo, tenia que la esperanza que eso no fuese cierto, a pesar de que corría rápido sentía sus piernas tan pesadas como dos grandes lozas. Al abrir la puerta, era verdad el estaba ahí, mirándolo... friamente
- Sasuke!!! - el rubio sintió que corrió mas deprisa y se hecho a los pies del moreno, aferrándose de sus piernas pidiendo protección, pero este solo lo miro con indiferencia
-¿Tan rápido terminaste con él? - su voz seno diferente... más seca
-él no me cree que me diste permiso de jugar con él
Naruto levanto la mirada ¿había escuchado bien?, ¿Por qué sonaba como si fuera todo verdad?
-Yo le di permiso, vete con él
-No... - como si no fuera posible sintió como sus ojos se inundaban de más lagrimas y su cuerpo se paralizará con un miedo inmenso, mientras su corazón se detuvo de pronto
-¿Por qué?, no quiero ir con él
-No te lo estoy preguntando, te estoy ordenando que le hagas compañía. Y ya suéltame!- la voz del moreno se oyó tan lejana que él rubio pensó que estaba soñando; en medio de una pesadilla, pero cuando sintió como movía una de sus piernas intentando alejarlo, lo comprendió, todo aquello realmente estaba pasando.
- ¿Por qué?...¿porque me hace esto... - en lugar de separarse, se aferro más y entonces recordó, que ahora había algo más que los unía - yo necesito... yo quiero decirte que...
-No tienes que decirme nada - lo interrumpió el moreno, sintió como su mentón era sujetado fuertemente por el - Tu no puedes pedir ninguna explicación porque no eres nadie, no me importas- le apretó más fuerte provocando que el ojiazul diera un pequeño quejido de dolor -tu aceptaste ser mi juguete ¿no es así?
-Sa... -Y si yo digo que vayas a hacerle compañía a mi hermano lo harás ¿me entendiste?- soltó bruscamente el mentón del rubio dejando unas marcas rojas por la fuerza que había aplicado
-Si... amo ... - solto lentamente el pedazo de tela del pantalón de Sasuke que tenia apretado con tantas fuerzas Itachi se acerco hasta donde Naruto estaba hincado y le tomo del brazo, mecánicamente se levanto el rubio, con el rostro clavado en el suelo y se dejo llevar por Itachi
¿Qué debía hacer? No quiero...
No quiero...
...mi bebe...
Sasuke
Antes de salir del cuarto de Itachi, Naruto volteo un momento y miro en dirección donde aun estaba Sasuke sin moverse ni un centímetro con su mirada fija en cualquier punto de la habitación, en ese momento el rubio sonrió
-Por más que te siga...- capto la atención del moreno e Itachi se detuvo- hasta el mismo infierno tu nunca voltearás a verme, pero.... también aunque tu sigas al joven Gaara hasta el mismo infierno el nunca regresará, él nunca te amara ¿verdad?
-Cállate!!! - El moreno grito y se abalanzo contra Naruto, pero Itachi se puso en medio intentándolo calmarlo- Tu no sabes nada ¡cállate! ¡cállate!
-el nunca te amará, ni yo tampoco... -Sasuke se enfureció más e intento llegar hasta Naruto pero Itachi lo sujeto fuerte, y aprovechando todo aquello Naruto salio corriendo de aquella habitación lo más rápido que pudo, le costaba trabajo respirar algo en el pecho le dolía, estaba como perdido tenia que salir de aquella casa.
-VUELVE!!
Oyó a lo lejos la voz de Itachi que le llamaba y en su paranoia sintió claramente como le venia siguiendo.Abrió como pudo el portón de la reja que daba a la calle y comenzó a correr por las aceras de la calle
Tenia mucho miedo que le alcanzará y que le obligará a volver a aquella casa, ya no le importaba nada, ahora tenia que proteger una vida que estaba en su interior, ahora no solo importaba el amor que sentía por su joven amo, ahora era algo más fuerte que le impedía seguir viviendo así, iba a ser difícil, pero justo para cruzar la calle de nuevo sintió un escalofrió al ser alcanzado por Itachi
-Deja de correr- lo sujeto fuertemente del brazo - no puedes escapar
-Déjeme- tenia que huir, si se dejaba llevar de nuevo todo habría terminado- No volveré, no quiero
-Idiota! te digo que...- sintió un golpe en su parte baja, el rubio le había golpeado y esto provoco que le soltará Naruto dio la media vuelta tratando de escapar lo más rápido posible y volvió a correr asustado, pero en el momento que cruzo corriendo la calle no se dio cuenta que el semáforo había cambiado hace algunos segundos a siga. Volteo cuando escucho un claxon sonar repetidamente, pero ya era demasiado tarde su cuerpo salio volando, sintiendo un enorme dolor en la caída, mientras el coche que le había lanzado, se había desviado hasta chocar con él poste de luz que se encontraba a unos metros de Itachi
En medio de su agonía abrió el único ojo que podía un instante, aunque todo lo veía rojo por la sangre que le escurría desde su frente había mucha gente a su alrededor, pero vio como Itachi se alejaba, solamente así, teniendo la seguridad de que no corría ningún peligro todo quedo en oscuridad, aunque con un inmenso dolor por todo su cuerpo Y a pesar de todo salio en un suspiro un nombre de sus labios
Sasuke...
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Dolía... todo su cuerpo, cada parte dolía, y el solo abrir los ojos era toda una agonía, había estado muchos días así, por ello no había despertado, pero ya era tiempo que lo hiciera.
Lentamente abrió sus ojos azules y miro el techo blanco del lugar donde estaba. Levanto una de sus manos para mirarla y la encontró llena de vendajes como de seguro todo lo demás lo estaba. Miro a un lado y una señora se encontraba dormida con un gran yeso en su pierna, miro al otro lado y un joven pelinegro estaba leyendo el periódico con uno de sus brazos, el otro tenía un yeso.
Volvió a mirar el techo y comenzó a recordar todo lo que había pasado y sin que pudiera evitarlo sintió aquel miedo, e intento volver a cerrar los ojos para volver a dormir y no sentirlo, pero algo faltaba... ¿Qué?
-mi bebe... - se sentó con mucho dolor y llevo sus manos a su vientre tocándolo sin detenerse, pero algo faltaba - MI BEBE!!!!!! MI BEBE... ¿Dónde esta mi bebe? - comenzó a gritar y a llorar perdiendo el control de si mismo, aunque sentía dolor no le importaba
El chico a lado se levanto e intento calmarlo, pero Naruto estaba desesperado y le sujeto por la bata fuertemente
-MI BEBE AYUDAME!!... MI BEBE... NO ESTA... NO ESTA!!!!
En aquel momento llegaron algunas enfermeras, las cuales intentaron calmar al rubio y llamaron al doctor el cual llego inmediatamente
-Inyéctenle una dosis de lidocaina- ordeno a una de las enfermeras
Entonces Naruto paro de pronto, como si ya le hubieran inyectado la dosis mas fuerte del mundo, era lógico llegar a la conclusión que si le inyectaban un medicamento era porque ya estaba vació
- Doctor...
Todos quedaron sorprendidos ante aquel cambio en tan solo unos instantes
-Dígame -Ya no esta ¿verdad?... mi bebe murió ¿no es así?...
-Lo siento, su bebe no sobrevivió
Las manos de Naruto lentamente soltaron la bata de aquel muchacho que se había acercado
-Mi bebe... ¿sufrió? - de los ojos de Naruto cayeron algunas lagrimas, las cuales cayeron sobre la sabana
-Tenia muy poco de embarazo, todavía su bebe no estaba bien formado, así que puedo asegurarte que no... no sufrió - el doctor llevo su mano al hombro de Naruto para intentar confortarlo
-Gracias... - el rubio susurro con la amargura que le causaba saber que su único lazo con Sasuke estaba roto y que ya no había ninguna razón para seguir atado a el, que ya no tenia nada que le pudiera hacer de nuevo feliz Ya no... no merecía más sus lágrimas
Las enfermeras acostaron de nuevo al rubio, el cual no puso ninguna resistencia, esto causo la pena de ellas, pues ahora parecía como un muñeco sin vida
Que me parta un rayo...
Que me entierre el olvido mi amor
Pero no puedo más
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Habían pasado ya unos cuantos días en los que los vendajes de Naruto habían sido retirados, pero en ningún momento se le había escuchado hablar, llorar parecía que hasta respirar lo hacia de tal manera que no saliera ningún ruido de la cama 78 de aquel hospital
Lentamente abrió con pesadez sus ojos, realmente ese día tampoco tenia ganas de abrirlo, pero le molestaba que ese chico siguiera ahí, sentado en la silla justo a su lado, Día tras día y le inquietaba de sobre manera.
-vaya despertaste- le saludo el joven pelinegro con una media sonrisa
- mh...- el rubio desvió la mirada para el lado contrario
-Vamos tienes que levantarte para que te bañes, si lo deseas puedo ayudarte y...
-No paras de hablar - le interrumpió de pronto
- ¿Por qué no me dejas en paz?
- porque... no quiero- soltó sin más Naruto se sorprendió tanto que volvió a voltear en dirección a ese chico misterioso
-¿Qué?,,. ¿Por qué desde hace días a pesar de que ya te dieron de alta sigues aquí?... quiero que me dejes en paz
- Vaya entonces tan inconsciente no lo estabas je...-sonrio- Tal vez para ti no tenga sentido lo que hago, pero lo tiene... y solo te lo diré si te levantas y te bañas, a... además comas un poco
-Estas loco...- el rubio volvió desviar su mirada- ¿Por qué no entiendes que no quiero?... no quiero hacer nada... no quiero
- entonces me seguiré quedando aquí, justo en este lugar, ¿Qué...no tienes curiosidad por que te responda todas las preguntas que me has hecho?, si haces lo que te pido ya no te molestare más - aquel joven sonrió de nuevo y le extendió la mano
-¿lo prometes?
-te doy mi palabra ¿aceptas?
Se levanto un poco Naruto hasta quedar sentado en la cama y tomo la mano de aquel chico. Y así este lo ayudo a bañarse y el rubio cumplió su promesa solo comió un pan con aquella cosa pegajosa que se supondría que seria mermelada de los hospitales, un poco de fruta y probo la leche.
-tienes un lindo cabello - el joven ayudo a peinarse al ojiazul mientras este comía
- ¿me dirás? - el joven soltó el cepillo que era de su propiedad poniéndolo en el buró a lado, y se paro de frente al rubio
-quiero disculparme contigo, lo siento... yo fui... yo...
-tu me atropellaste ¿verdad?- le volvió a interrumpir Naruto al ver como le costaba tanto trabajo y la culpa que se podía ver en los ojos negros de aquel chico
-Si, lo siento...pero si tú no quieres perdonarme lo entenderé - el joven miro con curiosidad a Naruto
-Ayer cuando vinieron algunos agentes para hablar conmigo, yo me hice el dormido realmente no quería hablar con ellos y escuche lo que te dijeron, escuche claramente que cuando cruzaba la calle el semáforo estaba en siga y que tu trataste de esquivarme lo más posible para no hacerme daño y por eso saliste herido
-eso no importa... no pude evitar que perdieras a tu bebe- el joven bajo la mirada
-Tú no eres responsable- llevo su mano a la de aquel joven y la apretó - En ese momento yo no puse la debida atención, además aquí el único culpable desde el principio soy yo, por querer ser alguien que no era, por estar ciego hasta hoy... pero ya no ¿sabes?... el despertar es horrible... mucho... mu... - la voz del ojiazul se empezó a quebrar
-Eres muy extraño, me confortas y tú eres el que estas sufriendo- de pronto aquel joven lo jalo de la mano que le tenia apretada y lo abrazo fuertemente - Debe ser duro con un metiche que no te ha dejado ni un instante llorar la muerte de tu bebe... hazlo yo estoy aquí
Naruto hundió el rostro en el pecho de aquel desconocido que en aquel momento le brindaba su apoyo a pesar de que no tenían un lazo que los uniera, era verdad de cierta forma de había robado algo importante, pero lo había hecho sin ninguna intención mala; en cambio había una persona que le había hecho más daño y que por el sentía la amargura mas grande que en toda su vida se imagino tener, en ese momento se juro así mismo que iba a cambiar todo, quizás se estaba creando castillos sobre arena y lloro más y más fuerte hasta que todo aquel dolor saliera entre aquellos brazos que no conocía pero que se sentían calidos. Todo se volvería pasado Sasuke ya no podía existir Su bebe también se volvía un recuerdo
Y Naruto una nueva persona
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Al día siguiente el doctor le había informado a Naruto que al medio día tenia que abandonar el hospital ya que había pasado mucho tiempo en el y otros enfermos necesitaban ese lugar. Pero en realidad no sabía que hacer ¿Dónde debería ir?, ni siquiera contaba con dinero para pagar algún lugar.
Y si regresaba a aquella casa no era una opción, tampoco lo era llamar a Haku, si lo hacia seria como regresar a aquello que intentaba borrar. Suspiro y se tiro de nuevo en la cama
- ¿Qué voy a hacer?
-Pues antes que nada cambiarte - una voz ya familiar lo saco de sus pensamientos
-¿tu?, ¿Qué haces aquí?- se sentó rápidamente para mirarlo con fastidio
-perdón... si te molesto tanto, Me llamo tu doctor y dijo que hoy saldrías, así que me imagine que no tendrías ropa y te traje de la mía - le mostró una bolsa de papel abultada
-Gracias...- le sonrió tomando la bolsa
Ambos después de algunas indicaciones por parte del doctor salieron de aquel hospital
-¿Dónde quieres que te lleve?
-a... A cualquier lugar, de todas formas no tengo un lugar donde ir - el rubio respondió mordiendo su labio inferior
- mmm... te llevaré a donde vivo, por algunos días ¿ok? Hasta que encontremos un lugar para ti Naruto le miro con ansias y de sus labios se formo una pequeña sonrisa
- ¿de verdad?
-Claro; pero... no te emociones - le miro serio e inmediatamente el rostro de Naruto volvió a entristecerse - primero tienes que decirme tu nombre, no puedo llevar a mi casa a alguien que no conozco
-yo...
-Bueno, creo que yo tampoco me he presentado - se rió - me llamo Sai, ahora es tu turno
-No... no lo se, ¿tengo que decirlo a fuerzas?
-No...- Sai comprendió en ese momento que no podía obligarlo, había sido un logro que se levantará, que comiera y que ahora hablará con él, no sabia cual era su pasado, pero debía ser horrible, por la manera en que sus ojos siempre parecían que querían llorar, por la forma en que clavaba su mirada al suelo y su manera de temblar al sentirse acorralado
- Sin nombre...Vamos entonces - le sonrió y lo tomo de la mano, mientras con su mano libre le hacia la parada a un taxi que justo pasaba enfrente de ellos.
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Lo había llevado a comer a un restauran de por ahí cerca y después fueron a conseguir las medicinas que el doctor le había recetado, eso les había llevado mucho tiempo. Después volvieron a tomar un taxi rumbo a la casa de Sai.
El viaje en taxi realmente estaba siendo muy largo, así que Naruto se hinco para ver por la ventana, le había llamado la atención todas aquellas cosas que pasaban por la ventana del taxi se veía mucha gente pasar, muchos edificios, algunos lugares tan extravagantes que le daban escalofríos al rubio, todo aquello era desconocido, desde muy pequeño su mundo habían sido las plantas y flores; así que no había tenido el interés de mirar hacia el exterior y esos colores le gustaban
-Pareces un niño pequeño pegado al vidrio - se rió
- Es que no conocía todo esto - Naruto se sentó de nuevo en su lugar
-Después de mucho tiempo de pasar por el mismo lugar, se le va quitando el encanto- cruzo los brazos con pose de intelectual
Naruto se le quedo viendo, Sai era un chico extraño, tenia tantos modales que lo desconcertaban y tenia una sonrisa que tranquilizaba a cualquiera, bueno a él lo tranquilizaba
-Llegamos Cuando bajaron Naruto se encontró frente a un edificio con una fachada algo vieja, hubiera jurado que Sai era rico por su forma de vestir y de actuar, pero aquello le sacaba de su error
-Pensé que nunca llegaríamos, ese hospital estaba muy lejos- Sai le pago al taxista y se estiro
- Muero de sueño, vamos Naruto - tomo la mano del rubio, pero la voz de una chica rubia los detuvo
-Sai ¿sabes a que hora son? - la chica realmente estaba muy molesta- La dueña esta como loca te esta buscando en una hora va a llegar el señor Mizuhara y tu no estas listo
-ya lo se Ino, ya llegue ¿no me ves?, tenia que ir por él al hospital - miro de reojo a Naruto
-a, es el muchacho
-si, pero entonces quedamos en...
-si, si no diré nada - le guiño un ojo al pelinegro
-¿Dónde esta la señora?
-Durmiendo tenia migraña
-ok
-Vamos apurare - volvió a entrar a aquel lugar la rubia
-Sin nombre - Sai se encamino hacia dentro del lugar sin soltar en ningún momento al rubio En cuanto entraron Naruto observo aquel lugar, estaba algo oscuro, en medio había una gran pista de baile y alrededor varias mesas con manteles verde olivo, a pesar de que casi no había gente tenia un olor peculiar ... a tabaco
Cuando pasaron aquella parte del salón, se encaminaron en un pasillo donde había muchas habitaciones, cada una tenia un nombre, caminaron demasiado hasta que encontraron una con el nombre SAI gravado en la madera, la cual abrió el chico pelinegro con su llave.
Entraron y Sai le indico a Naruto que se sentara en la cama -Sin nombre, aquí puedes descansar, tengo que trabajar pero te traeré comida más al rato ¿ok?
-Sai...¿Qué es este lugar?
-esto...- Sai se puso frente a Naruto y ambos se miraron fijamente a los ojos- aquí trabajo, esto es un burdel... una casa de citas ¿me entiendes?
- Tú... tú te
- Si... vendo mi cuerpo sin nombre...
CONTINUARA