Bleach no es mío, pertenece al brillante Tite Kubo - sama!!, alabado sea por crear algo tan magistral, pero regresando de los halagos, este fic es mi segundo desvarió de Bleach, espero les guste.
Advertencia: Mundo Alterno, no tiendo a usarlos pero esta vez me atreví un poco mas je je, Yaoi, claro está, y para rematar y aderezar la locura Mpreg XD, advertidos, no quiero quejas o cuentas para mí porque tuvieron que ir al psiquiatra!!. Por lo demás mucho humor y esperen lo inesperado.
Todo queda en Familia.
Capitulo 3
Cuenta con tu Enemigo.
Respiración acelerada, corazón a punto de salir del pecho, sudor frio, vacio en el estoma, calor dirigido al rostro, síntomas de que lo que paso en ese instante fue más que un simple accidente causado por una inoportuna mujer?, Ichigo seguía con la vista en blanco y parado a pocos pasos de la cama, la chica que entro a la habitación empezó a parlotear como loca pero él no lograba coordinar los labios con las frases que salían de la boca de ella, su cuerpo y su mente estaban en el instante del beso, por su parte Grimmjow estaba algo retraído mirando también a la joven y asintiendo de vez en vez a esa rara emoción con la que llego a la habitación.
- Que difícil fue dar contigo!!, eres malooo.... - apretó sin pena alguna una de las mejillas del peli azul. -
- Deja de hacer eso!!. - se soltó con molestia del agarre de ella. -
- Mal humorado como siempre, pero debo decirte que esta vez llegaste lejos con ese estúpido!!. - su alegre rostro paso a uno triste y melancólico. - no sé porque tuviste que enfrentarlo.
- Debía ponerle en claro algunas cosas... - gruño fastidiado -
- Hombres... - suspiro y se dio media vuelta para hablarle a Ichigo. - donde se metió el chico que estaba contigo?.
Mientras Nell estaba habla que habla Ichigo se salió de la habitación con mucho esfuerzo, tranco la puerta de la misma y se reclino de la pared más cercana, con dificulta estaba logrando regresar la cordura a su mente, ese incidente fue inesperado y especialmente extraño para él, no sabía si ese hombre sintió lo mismo en ese pequeño instante pero el pareció morir en segundos, suspiro hondo y al fin tomo fuerzas para seguir su ronda.
- Esa chica es su novia... - susurro para sí con algo de asombro. -
- Que chica?. - la voz de alguien que le hablaba casi que encima de él lo asusto. -
- URAHARA!! - palideció en segundos. -
- Nunca me oyes llegar, por eso me aprovecho je je je. - sonrió triunfante. -
- Qué demonios quieres?.
- Tu padre ya salió de quirófano. - el rubio volvió a tornarse serio y sereno. -
- Su humor?. - pregunto con sequedad. -
- ha de ser bueno porque salvo dos vidas hoy.
- Está en su oficina?.
- Aun no, si lo quieres encontrar mejor ve al quirófano 2. - sonrió para después emprender su camino por la clínica. -
Urahara era como una patada en el trasero, inoportuno, molesto y caprichoso, pero también era un buen hombre aquel loco que tanto apreciaba a su padre, Ichigo no vio mejor momento que ese para hablar sobre el aumento de su castigo y sobre sus amigas ya que cuando Isshin tenía un buen día, tendía a ponerse meloso y algo loco. Con esa meta en mente camino rumbo al quirófano 2, no tardo nada en encontrar a su padre trajeado aun con su bata verde y lavándose las manos para terminar de salir de allí, Ichigo se detuvo a unos pasos de él para analizar mejor en que humor se encontraba su loco viejo, parecía sereno, tranquilo y con una media sonrisa.
- Lotería... - se armo de valor y empezó a acercarse a su padre. -
- No podrás deshacerte de la guardia nocturna Ichigo. - le miro por el rabillo del ojo -
- Porque crees que voy a hablarte de ello?. - su rostro triunfante se deshizo en un segundo. -
- Porque te conozco. - termino de lavar sus manos. - pásame unas toallas de papel.
- Pues te equivocas viejo, yo vine a hablarte... mejor dicho vine a pedirte un favor para unas chicas.
- Muy tentadora tu oferta pero no salgo con jovencitas de tu edad. - sonrió descarado al tiempo que tomaba las toallas de papel que su hijo le ofreció. -
- Viejo... no juego, es en serio, quiero que pienses en ayudar a Rukia y a Orihime con sus estudios, ellas quieren estar en la clínica unos días para ver como es la labor de enfermeras.
- Sería mejor decir que TU las quieres aquí para que hagan TU labor de enfermero?. - mascullo algo enfadado. -
- Claro que no!!, ellas solo quieren aprender y listo. - se cruzo de brazos frente a su padre. - viejo pasaste un gran día hoy salvando vidas, sigue dando el ejemplo y ayuda a dos más?
- Salvar vidas no es tan fácil como dejar que dos amigas tuyas entren aquí. - la imagen mental de una mujer se le vino a la cabeza. - es muy diferente.
- Ya sabía que dirías que no. - sin seguir insistiendo se dio media vuelta para salir del lugar. -
- No he dicho que no - volvió a sonreír a medias. - te diré en la mañana mi respuesta, después de que evalué tu ronda nocturna.
- No hay problema. - el pelos de naranja sintió que podía hacer que fuera un si esa respuesta, que tan difícil podría ser pasar la noche allí?. -
- Tu carpeta de rondas?. - miro las manos vacías de Ichigo. -
- Mi... carpeta?. - trato de recordar donde la había dejado. - no...
- No qué?
- La deje en una de las habitaciones que visite. - suspiro derrotado. -
- Eso te quitara puntos a favor para mañana si no vas ahora mismo y recuperas esa carpeta!!, acaso no sabes que allí se actualizan todos los datos de los pacientes, esa es una de las labores más importantes de las enfermeras!!.
- No te pongas fastidioso viejo, la deje allí por razones mayores a mi voluntad!! - su rostro se tiño evidentemente de rojo al recordar el beso. -
- Acaso te enamoraste del paciente!! - miro de reojo el rostro de su hijo. - anda a buscar esa carpeta antes de que yo mismo vaya a ver qué clase de mujer te puso así!!.
- No señor... ninguna mujer... digo, que no tienes que meterte en mis asuntos, yo mismo voy por la carpeta!!. - trago grueso y salió disparado del quirófano. -
- Ichigo.... Primera vez que lo veo ponerse así de nervioso. - sin pensarlo mucho Isshin ya tenía un par de corazones por ojos y reía como vil idiota. - MI HIJO SE ENAMORO!!.
Mientras, en la habitación donde quedo la carpeta, Nell estaba sentada a orillas de la cama comiéndose la merienda del paciente, y mirando divertida los rayones que estaban en el yeso de Grimmjow.
- No sé cómo no te puede gustar lo que te pinte. - miro más de cerca el gatito que pinto al lado de la palabra pantera. -
- No vuelvas a rayar mi brazo sin permiso.... - desvió la mirada hacia la carpeta que estaba junto a él - el chico enfermera la dejo.
- Chico enfermera?. - levanto la carpeta curiosa. -
- Así le apode... pero... No deberías estar aquí, sabes que aun ese mal nacido debe estar buscándome para vengarse de lo que le hice.
- Lo sé, se que él es capaz de todo para terminar contigo... mira como te dejo por mi culpa. - Nell se abrazo a sí misma con tristeza. - no sé cómo pude ser su novia.
- No importa cuantas veces quiera volver contigo, yo estaré allí para darle una paliza hasta que entienda que tú ya no le perteneces. - sonrió pretencioso. -
- Grimmi!!, por eso te quiero tanto!. - se abrazo al peli azul con fuerza. -
Mientras la chica le abrazaba casi hasta estrujarle la vida, la puerta de la habitación sonó y con los toquidos un joven pelinaranja entro algo inseguro. Miro la escena donde la peli verde estaba encima de aquel hombre que le molestaba tanto, paso siguiente miro la carpeta en manos de esa misma chica, algo dentro del que no entendía le estaba causando rabia, una molestia incomoda que te hace apretar los dientes y aguantar la respiración.
- Vengo por eso. - señalo con su dedo la carpeta. -
- Nell devuélvele a la enfermera su carpeta. - sonrió descarado al tiempo que posaba sus ojos en aquella mirada notablemente molesta de Ichigo. -
Las miradas de ambos se cruzaron, la de Ichigo llena de pena ligada con celos inexplicables y la de Grimmjow solo parecía divertida, burlona y hasta desbordante de satisfacción, esos ojos no decían nada acerca de lo que paso unos momentos atrás, ese contacto sin querer que se efectuó gracias a la joven escandalosa que estaba abrazada a Grimmjow, Ichigo tomo la carpeta por acto mecánico y como entro salió de esa habitación.
- Estaba algo raro ese chico. - Nell se encogió de hombros impresionada. -
- Tengo ese efecto sobre mucha gente. - su sonrisa pretenciosa se hizo más grande que antes. -
Que sucedía con Ichigo, nunca antes se sintió intimidado, molesto o celoso de nadie, era muy seguro de sí mismo gracias a su color de cabello, debió estar en muchas peleas para darse un puesto y ser respetado, hasta contra su padre luchaba para hacerse valer pero esto, esto que sentía gracias a ese hombre no le sabia dar un nombre, que malo era tener que seguir toda la noche así, tener que rondar por allí nuevamente si a ese desgraciado o a su novia se le ocurría necesitar algo. Esa noche no sería corta y menos aun tranquila, de eso se aseguraría más de una persona.
La noche llegaba al fin, las rondas nocturnas empezaban apenas la mayoría del personal de día se retiraban a sus casas, Urahara quedaría esa noche a compartir las rondas junto a Ichigo y 3 enfermeras mas, por ser una clínica pequeña no necesitaban a mas nadie, las emergencias a esas altas horas de la noche eran escasas y solo los pacientes ingresados tenían la atención necesaria.
A esas horas, a unos kilómetros de allí, en otra parte, dos personas conversaban sobre el día vivido, la habitación donde se encontraban era pequeña pero cómoda, un gran ventanal frente a la cama le daba el aire necesario para mantener frescos a sus ocupantes, un mueble de caoba y sobre él un montón de papeles y libros le hacían ver desordenado el lugar, junto al mueble había una pequeña biblioteca llena de mas libros y papeles, al lado de la cama dos mesas de noche adornadas con pequeñas lámparas estilo japonés daban una media luz a los ocupantes de la cama. Bajo las sabanas color miel estaban dos cuerpos sudorosos y entregados a la pasión, las manos blancas y largas de uno de ellos terminaba su labor de acariciar aquel pequeño cuerpo que tenia bajo el, escuchando aquellos gemidos con placer, mirando a los grandes ojos de ese chico.
- No sé cómo no se nos ocurrió esto antes... - el mayor se lamio los dedos con lujuria. -
- Esta mal.... - la voz entrecortada de su amante sonó molesta. -
- Nadie lo sabrá, para tus abuelos tu estas estudiando en casa de un amigo. - inclino su cabeza para poder posar sus labios sobre los del joven. -
- Gin... alguien nos vio hoy en la universidad. - al fin pudo hablar después de todo lo que hicieron. -
- En serio?. - su rostro zorruno se lleno de curiosidad. -
- Fuera de los baños... pudo haber escuchado lo que hicimos. - Shiro - chan se sentó en la cama algo angustiado. -
- No lo creo... - paso una de sus manos por la espalda del peliblanco. -
- Podrías prestarme atención!!. - se alejo un poco de su profesor. -
- Te presto toda la atención que necesites... - se levanto para sentarse como su amante tras él. - cálmate, nada pasara.
- El me miro fijamente... como si supiera todo. - recordó claramente el rostro del pelinaranja. -
- Yo no recuerdo haber visto a nadie. - bajo su cabeza hasta el cuello del peliblanco. - es que estaba tan feliz... que no mire quien estaba fuera de los baños.
- Y si... dice algo al director?. - se cubrió el rostro con ambas manos. - qué vergüenza!!, ese hombre confió en mí y mi reputación!!.
- Byakuya es un puritano... primero que nada no creerá lo que cualquiera le diga, segundo... - quito con suavidad las manos de Toushiro de su rostro. - no estamos seguros de que nos vio, podríamos... averiguarlo.
- Quieres que busque a ese hombre y le pregunte de frente que si me escucho teniendo sexo contigo!!.
En un solo instante Toushiro se levanto de la cama enfadado, esta locura desenfrenada a la que le había arrastrado Ishimaru estaba pisando los límites, era cierto que nadie le obligo a aceptar los cortejos de su profesor y menos aun podría decir que él era inocente de todo lo que estaban haciendo desde hacía unos 3 meses atrás. Gin era su droga, era un ser tan misterioso para él, su sonrisa zorruna escondía a un hombre inteligente y capaz de hacer muchas cosas por él, de hacerle lo que nunca antes nadie le hizo, no solo en el actor carnal, sino como guía, como maestro era extraordinario, le daba lo que su gran inteligencia y viveza necesitaba.
- No te exaltes, no quise ponerlo de ese modo, digamos que puedes como que acercarte a él y ver cómo reacciona, solo eso. - sonrió tranquilamente. -
- Eres insoportable a veces. - suspiro pesadamente. - mejor me visto... regresare a mi casa.
- A las 3 de la mañana?. - Gin le mostro orgulloso su reloj despertador en forma de zorro. -
- No me importa, no pasare el resto de la noche aquí contigo y tus ideas locas de enfrentar a un desconocido!!.
- No te vayas... - en un segundo salto de la cama y aprisiono entre sus brazos al chico. - me sentiré solo si te vas.
- No... - mascullo enfadado al tiempo que trataba de liberarse del abrazo. -
- Vamos a seguir "estudiando".
Con suavidad levanto el cuerpo de su amante y lo deposito nuevamente en la cama, su boca empezó a deslizarse por aquel cuello tan tibio y delicado, bajo un poco más para llegar a su vientre dando pequeños beso, Toushiro estaba atontado ante todo, estaba decidido a irse pero aquel hombre le desordenaba los sentidos, era como querer algo y a la vez sentirse mal por ello, mientras más uno lo niega mas provocativo es continuar hasta que ya es bien sabido por uno que está mal pero igual lo hacemos. Sus besos, su boca llegando a su entrepierna para perderse allí con locura y excitación, sus dedos juguetones acariciando su pecho y marcando surcos placenteros por su piel blanca, no podía negarse más, ya estaba apretando las sabanas con sus manos para no gritar de placer al ser penetrado por Ishimaru, su cuerpo cálido sobre el suyo, sentir como ambos unidos se hacían uno entre embestidas y jadeos, susurros de te amos y ordenes de acelerar el paso, Gin le convencía siempre con pasión, con sus caricias y su voz, en mala hora se había vuelto adicto a las "lecciones de Ishimaru".
Clínica Kurosaki
Las horas más lentas jamás vividas, Ichigo estaba recostado en el área de descanso de las enfermeras, un pequeño sofá y unas cuantas sillas adornaban el lugar, a su lado en una mesa pequeña había tres tazas vacías de café, unos cuantos envoltorios de golosinas y un montón de libros de la universidad, aprovecho esas horas sin dormir para ponerse al día con lo que le costaba o repasar lo que ya sabía.
- Que ya amanezca... - suspiro quedamente para alzar la vista al reloj de pared que marcaban las 4:05 am. -
- Como vamos por aquí!!. - la puerta se abrió y un Urahara fresco como lechuga se sentaba de lleno junto al chico. -
- Como soportas las rondas nocturnas?. - miro de arriba abajo al rubio. -
- Es un secreto. - susurro al oído de Ichigo. -
- No me digas... te tomas como 20 tazas de café mientras coqueteas con las enfermeras. - miro con reproche al médico. -
- Mas o menos, pero mejor ve levantando tu trasero de ese sofá, vas a ir a ver a los pacientes!!. - le quito el libro de las manos al pelos de naranja. -
- Oye!!, estoy estudiando, porque no mandas alguna de tus enfermeras?.
- Porque están durmiendo plácidamente después de.... - sonrió con lujuria. -
- Ok ok... no quiero oír lo demás.... Me voy a hacer la ronda!!. - se puso de pie, tomo su carpeta y salió rápidamente de la habitación. -
- Que mal pensado salió el chico... yo solo quería decir que estuvimos jugando cartas. - se encogió de hombros divertido. -
El recorrido de Ichigo no era muy largo, a esas horas solo debía medio abrir las puertas de las habitaciones para confirmar que cada paciente estuviese durmiendo bien y no necesitara nada, todo el lugar estaba silencioso y en calma, hizo su recorrido rápidamente y solo le quedaba un paciente por visitar, si, ya sabrán que se trata de cierto peli azul con una supuesta novia, Ichigo miro desde el final de pasillo hacia la puerta, estaba tentado a no entrar si quiera, reportaría que el paciente estaba dormido y listo, Urahara no lo notaria ya que de seguro en ese instaste ya estaba en brazos de Morfeo soñando quien sabe que locuras.
- Estará dormido... y con ella. - esa última palabra la remarco con molestia. - qué demonios estoy diciendo!!.
Esa frase escapo de sus labios sin notarlo, como podía tenerle rabia a alguien que ni conocía?, miro otra vez hacia la puerta, estaba decidido, no entraría allí por lo que restara de guardia. Giro en sus pasos y se dio media vuelta para irse, no pasaron más de un minuto cuando escucho un grito de mujer retumbar por el pasillo que abandono segundos antes.
- Viene de la habitación!!. - Ichigo regreso en sus pasos sin pensar y abrió de golpe la puerta de la habitación. -
La escena que encontró le dejo helada la sangre, frente el estaba la chica que acompañaba al odioso paciente de cabellos azules, su rostro estaba pálido y bañado en lagrimas, su cuerpo temblaba descontrolado en brazos de un desconocido que le sujetaba por detrás aprisionándole los brazos con una de sus largas extremidades, en su otra mano sostenía un cuchillo realmente afilado tan cerca del cuello de ella que si se movía solo un poco seria degollada por completo, en la cama sentado estaba Grimmjow, su rostro denotaba impotencia, rabia y dolor, respiraba acelerado y sujetaba su estomago como tratando de calmar algún dolor.
- Mas invitados... TE DIJE QUE NO GRITARAS!!. - el desconocido acerco mas el cuchillo causando que un pequeño hilo de sangre empezara a descender del cuello de Nell. -
- Calma... - Ichigo intento moverse pero el hombre camino todavía con la chica sujeto a él y tranco la puerta dejando ahora a todos dentro. -
- El juego cambio maldito bastardo, deja ir a Nell!!, tu problema es conmigo!!. - Grimmjow intento ponerse de pie pero ver como la sangre no paraba de bajar de la garganta de la chica le hizo desistir. -
- Mi problema era con ella, y tú te metiste entre nosotros... - el hombre gruño enfadado y muy seguro de sus palabras. -
- Por.. favor.... Baja el cuchillo... - la peli verde intento subir una de sus manos hacia la empuñadura del arma. -
- Ahora si me pides de favor perra atrevida... - acerco su boca al oído de Nell. - hubieses pensado mejor antes de dejarme y no estaríamos pasando por esto.
- La salve de ti bastardo mal nacido!!. - gruño impotente el peli azul. -
Ichigo miraba realmente impactado la escena, no tenía ni idea como ese hombre alto, delgado, de cabellera negra y un ojo tapado logro colarse en la clínica a esas horas de la noche, no entendía muy bien de que discutían los tres, y mucho menos no sabía cómo saldrían de ese aprieto sin que la chica quedara degollada y los demás muertos a puñaladas.
- Esa paliza que te di ayer no te ayudo a recapacitar verdad?. - a pesar de lo delicada que era la situación Grimmjow aun se jactaba de su pelea. -
- Sabes algo... perdí mi ojo!! Por culpa tuya quede deforme!.
En un segundo el hombre grito con todas sus fuerzas el nombre de Grimmjow, lanzo a un lado a la pobre de Nell y se arrojo sobre el peli azul para clavarle el cuchillo en el pecho y terminar su venganza, el tiempo pareció detenerse a ojos de Ichigo, miro el cuchillo reluciente y ya manchado con sangre en manos de ese hombre, no fue más de un segundo cuando todo paso, el grito de Nell retumbo en toda la clínica, Ichigo se atravesó entre Grimmjow y el moreno por acto reflejo, y ambos hombres cayeron al suelo del otro lado de la cama.
- ABRAN!! ABRAN LA PUERTA!!. - Urahara empujaba con todas sus fuerzas para que esta cediera y les dejara entrar al lugar de donde se escucho aquel grito espantoso. -
- MALDITO NIÑO!!. - el hombre intento incorporarse para retomar su labor, pero no vio venir el puño de Grimmjow directo a su rostro. -
El cuerpo del moreno cayó pesadamente al suelo una segunda vez, a su lado estaba todavía Ichigo inmóvil y con la mirada clavada en el cuchillo que había caído junto a él, no podía mover un solo musculo de su cuerpo, la adrenalina le había hecho cometer una locura muy grande.
- Chico enfermera?. - el peli azul bajo como pudo de la cama, tomo el cuchillo y se agacho junto a Ichigo. -
- AYUDELOS!!. - Nell se puso de pie y logro entre los nervios quitar el seguro de la puerta para dejar que Urahara y un grupo de vigilantes entraran al fin al lugar. -
- Estas bien?. - Grimmjow poso su mano sobre la mejilla del chico. -
- Si... - noto impresión aquellos ojos azul profundo que le miraban preocupado. -
- Pensé que eras enfermera no héroe?. - se puso de pie con cuidado. -
- Están bien todos?. - Urahara llega donde Ichigo rápidamente. -
- Eso creo. - se incorporo del suelo apenas los vigilantes sujetaron al hombre medio inconsciente gracias al puñetazo de Grimmjow. -
- Nnoitra... cómo pudiste... - Nell mira con suma tristeza al ser que fue su novio siendo arrastrado fuera de la habitación. -
- Quien salvo a quien?. - Urahara mira a los dos jóvenes algo preocupado. -
- El nos salvo!!. - Nell se le abraza con fuerza a Ichigo y sin pena alguna empieza a sollozar desconsolada. -
- Le salvaste la vida a ella?. - el rubio observa nada disimulado el cuerpo de la chica. -
- No... a mí. - Grimmjow lo dice en son algo incrédulo. -
- A él?. - el rostro de Urahara paso de sonriente a impresionado. - te le atravesaste a un loco con un cuchillo para salvarlo a él en vez de a ella?.
- NO ES LO QUE PARECE!!. - grito incomodo el pelos de naranja. -
- Nos salvo a ambos. - asintió más calmada Nell. - salvaste la vida de mi primo y la mía. - una enorme sonrisa se coló entre aquel rostro todavía bañado en lagrimas. -
- Primo... - sin si quiera notarlo Ichigo sonrió enormemente, la explicación a ello no la tenía pero estaba de seguro unida a la explicación de salvar a ese hombre también. -
Continuara....
Que capitulo!!, perdón la demora pero creo que ya están acostumbrados a esta manera mía de subir las cosas, justo ahora tengo a mi hijo gritando mama y jalándome de la computadora, pobrecito U.U, quiero terminar estas líneas rápido para subirlo y empezar a pensar en el capítulo final de "Por culpa de Yaoi", bueno si tengo unas ideas pero debo ponerme manos a la obra para que salgan de mi cabeza a la pc, felices de que Nell solo sea una prima melosa?, y más felices de que Ichigo se esta enamorando de Grimmi?, será correspondido ese sentimiento, ( obvio que si ya que el fic trata de ellos dos XD), vaya pregunta tonta la mía. Bueno... También contentos porque hubo mas Gin x Shiro - chan!!, yo sí y verán algo mas ya que esa idea del zorrito de averiguar mas sobre el que los vio en el baño se le meterá de ceja en ceja y traerá lio, no se me angustien que nombro a lindo de Byakuya y no sale, ya saldrá y tendrá hasta su pareja je je je. Mejor no cuento mas y sigan leyendo que pronto también se sabrá de ese raro secreto de Isshin!!.
Próximo Capítulo:
El pasado no se olvida.