Ay! cómo duele el amor!- se quejaba Soffie, mientras miraba por la ventana.
Sí, los fines de semana eran lo peor para aquella muchacha de extraña mirada. Bueno, en especial el día domingo que no tenía taller de teatro y no podía reunirse con Alejandra, el único día de la semana en que no la veía. Oh, puedex ver 6 días a la semana a la persona que te gusta y que es "según tu mente" un amor imposible, es una verdadera tortura, pero no para Soffie, ella se deleitaba sólo con la presencia de su Alejandra.
De un instante a otro, se rompió el silencio que inundaba la habitación de la ojiverde, su celular estaba sonando.
-Bueno - Contestó.
-Hey Cariño, ¿cómo estás? -
-ah.. bien? ¿con quién hablo? -
-Con un alien -
-oh, wow... dime algo... ¿qué hacen con los humanos que se llevan? ¿experimentos o les gusta traficar personas? -
-amh, sus órganos valen mucho -
-Jajaja no, vale, hablando en serio ¿quién eres?-
-Empieza con M y ermina con erry -
-Heeey! cómo estás? -
-Supongo que fingir ser un alien no está mal-
-Jajaja, ¿y a que se debe tu llamada? -
-Pues, quería saber si aún tienes ganas de ir a la fiesta de Alice -
-¿y por qué no querría? -
-Bueno, no lo sé, pero me aseguraba. Además, es en dos semanas-
-enserio? -
-No! estaba bromeando -
-Que simpático -
-Lo sé... -
-Te golpearía con una almohada si pudiera-
-Bien, entonces vas?-
- A menos que me rapte un o unos aliens-
-Eso suena tentador-
-Hey! jajajaja, bueno, nos vemos en la fiesta -
-de acuerdo, bye!-
-bye-
Soffie colgó el teléfono y sonrió. Esa chica era tan simpática y se preguntaba por qué no estaba en su Liceo, en su curso y podría ser amiga de.. oh, no. No compartiría a su Alejandra ni con Dios.
-Bueno... - dijo y miró su reloj - son las 3:00 pm, aún estoy con pijama y no tengo nada bueno que hacer... - Se quedó mirando la pared frente a su cama unos 10 segundos....
-Papá trajo 3 películas de terror ayer... podría... oh, no, mala idea - Pensó - Pero y si lo intento? Qué pierdo? -
Tomó el celular y digitó un número que sabía de memoria, el de su mejor amiga, el de su amada, el de su amor imposible, el de la chica sexy, el de Alejandra.
-Tuuuu... tuuuu.. tuuu -
-Vamos, contesta,contesta..-
-Tuuuu ... Aló?-
-Hola! ¿cómo estás?-
-Soffie???-
-sí..-
-¿Qué pasa? ¿te asaltaron y sólo te dejaron con tu celular y haz decidido llamarme en vez de a tu padre? ¿Estás con riesgo de muerte? ¿No puedes hablar de eso? ¿te están amenazando..-
-eeh..-
-Te apuntan con una pistola? te haz quedado sin bencina? te dije que no salieras en esa estúpida moto!-
-QUE NO! no es nada de eso!-
-oh, me alegro-
-Estás demente, Ale-
-Eso dicen... ¿pero me amas igual, cierto?-
Gracias por hacerme sonrojar Ale, era lo que me faltaba para tener un día completamente perfecto - Pensó fastiada
-I..IDIOTA, -
-y a qué se debe tu llamada, entonces?-
-Pues.. sabes ayer mi padre llegó de nuevo tarde a casa y pues para pedir disculpas compró un par de películas y pues me preguntaba si... -
-Ve al grano gatita-
-¿quieres venir a ver películas a mi casa?
- No era tan difícil, ves?-
-Lo sé, lo sé.. ¿qué dices?-
-Mh.. compraras pizza?-
-Sí -
-y una bebida sin hielo??-
-Sí-
-Ok, pero con una condición-
Soffie pensó en lo peligroso que era eso...
-Cuál?- con esta chiquilla nada se sabía, era completamente impredecible
-Dime que me amas! -
-ah?- preguntó, descolocada
-Tienes 10 segudos a parti de AHORA, 9, 8, 7-
-pero pero-
-6.. 5, 4, 3-
-Está bien, te amo! te amo!--
-mucho?-
-sí!-
-Lo sabía, llego en media hora- y colgó el teléfono.
Ahora ¿qué rayos había sido eso?
Muchos dirán que con razón Soffie está confundida. Creo que confundida no es la palabra correcta, con razón Soffie siente cosas y se ha "pasado películas" con su mejor amiga. Pero bueno, Alejandra llegó a la hora, como siempre.
La puerta sonó bruscamente.
-Soffie-
-Ya voy-
-Soffie, Soffie, Soffie, Soffie-
-Qué!?- Gritó abriendo la puerta
-Menos mal que abriste! pude haber muerto de hipotermia allí afuera-
-oh por dios, sabes que eso es imposible!-
-Claro que es posible, de donde crees que saqué la enfermedad? de la saga del señor de los anillos??-
-Me refería a que no es posible que te diera hipotermia por esperar 10 segundos al lado de mi puerta! por dios! ni siquiera hay grados bajo cero-
-Quién sabe- Dijo Alejandra sentándose en el amplio sillón de la sala principal.
-Llegaste a tiempo, como siempre... -Habla Soffie mientras se sienta junto a la pelirroja
-Sí, sé que no puedes vivir sin mí así que prefiero no retrasarme ni un minuto-
-Claro, claro, pero el oxigeno sigue estando primero en mi lista de "lo que necesito para poder vivir" -
-No por mucho tiempo- dijo Alejandra mientras miraba fijamente las pupilas de su amiga.
Las mejillas de Soffie comenzaron a enrojecer lentamente, hasta que su blanquecina piel parecía un tomate maduro.
-bueno, bueno - Palabreó Ale, entre suspiros - Que comiense la diverción-
Vieron dos películas de terror, entre ellas Ale se dedicaba a asustar a Soffie y burlarse de ella y ella se limitaba a seguir siendo un simple tomate.
Soffie se torturaba mentalmente. Cómo le gustaría abrazarla, apretarla contra ella, sentir más de cerca su embelesante olor, decirle al oído cosas lindas, cursis y rosas, tomar sus suaves manos, acercarse a esos rojos, perfectos y seductores labios, oh cómo, cómo podía sentirse tan lejos de ella teniéndola al lado, ¡qué clase de paradoja era esa! y Deseaba ver su rostro al dormir, cada mañana! o mejor no dormir para observarla, sus gestos, sentir su respiración...
Pero no daría el paso que marcaría una diferencia entre amistad y algo más, por miedo.
Miedo. ¿existía alguna peor sensación que el miedo?
El miedo evita que hagamos cosas, nos hace dudar y si no puedes vencerlo no creces, no te superas, "no pasas la prueba". Repruébas!
y Ahí estaba ella, sentada a su lado! mirándola fijamente con esas pequeñas y negras pupilas y aquel hermoso iris que aún no podía saber si era celeste o azul
Ahí estaba ella, tranquila como siempre. y Ahí estaba Soffie, deseando algo más, a cada instante.
Eres una cobarde... una maldita cobarde, Soffie - Se decía a sí misma.
-Iré al baño - se paró - y CUIDADO Ale, no vayas a tomar mi Notebook- dijo señalando la mesa donde se encontraba el aparato.
-Muaaahahaha !- rió, para luego poner cara de angel y decir "No te preocupes"
-A ver a ver, pequeña Soffie, qué tienes por aquí... mh, msn...-
"to finally decide:
Hey cariño!
¿estás ahí?
aló?
Soffie?"
-¿Cariño?- Repitió Alejandra, sin entender. Sin querer entender. -¿Cómo que cariño?-
"Go to the hell:
Hola
To Finally Decide:
por fin contestas!
Go to the hell
Sí, lo siento, estaba un poco ocupada...
To Finally Decide:
a sí? qué hacías?
Quién diablos se cree... y por qué tiene tanta confianza para preguntar eso? -Pensó Alejandra, dibujando un gesto de ira en su armónico rostro.
-TE DIJE QUE NO TE ACERCARAS! - Alejandra sintió recorrer un ligero escalofrío por su espalda...
-No tienes para qué gritar! - Masculló molesta - además, sabías que husmearía aquí
-Sí, tienes razón, lo sabía - dijo mientras seguía caminando hacia su amiga.
Alejandra miró el blanco rostro de su amiga, y comenzó a acercarse más una vez que ella hubo llegado a su lado...
10 cm, 7cm, 4cm separaban sus rostros
las mejillas de Soffie se encendieron. Sí, una vez más un tomate. Alejandra, como siempre, permanecía con ese rostro de tranquilidad. - Quién es "to fillany decide" ?- preguntó con suavidad
-Ah.. eh.. - La ojiverde no podía dejar de balbucear - b..ah, bue.. bueno, una a,aamiga! Se llama Merry e irá a la fiesta de Alice...-
-¿una amiga?- Alejandra rompió la distancia.
-Sí.- dijo soffie, volteando el rostro... -espera!- Volvio la vista a Ale - No tengo por qué explicarte eso! además ¿por qué te metiste ahí? ¿le escribiste algo? a ver- se acercó al notebook
-y si lo hice qué?-
-Alejandra! ¿Por qué haces eso?
-Curiosidad-
-Pues! sacia tu curiosidad en otro sitio!
-¿por qué te molestas tanto? ¿tan importante es esa muchacha?-
-Esa muchacha tiene nombre y para tu información Sí, es importante!-
Alejandra volteó a otro sitio, respiró. Algo no andaba bien con ella y Soffie lo sabía, ese no era su humor...
-qué te pasa ale? por qué te pusiste así?-
-por nada, sabes? Fue una linda tarde, nos vemos mañana - Caminó hasta la puerta, tomó su chaqueta que estaba sobre un mueble y se fue.
-Qué demonios fue eso?- Preguntó Soffie dejándose caer en el sofá.
Algo andaba mal. A caso podría ser que... no, era imposible. Alejandra no puede estar celosa... o sí?
Soffie no quizo pensar más en eso. Sólo se hacía ilusiones y lo sabía.
Intentó pensar en otras cosas, como en la fiesta, donde por fin conocería a su amiga. Halloween se acercaba.
-Bata Soffie.. esta será la última vez que piensas en ella - comenzó a murmurar entre la soledad de su cuarto. -Ha sido suficiente. Mírate, no puedes ser más babosa y arrastrada, además.. sólo estás sufriendo, por dios! tienes que sacarla de tu cabeza...-
No se sentía muy bien. Ordenó sus cosas para la escuela, mientras oía música, y lágrimas sinceras cayeron de su rostro... Lágrimas de despedida.
No se había sentido tan mal hace tiempo.
Sus padres nunca estaban en casa y los domingos no venían los encargados del aseo y la comida a casa, a esa casa que era más una mansión.
-De qué me sirve! - Le gritó a su padre - De qué me sirven esos anillos que traes! de qué me sirven! sí llegas a las 11:30 pm el día de mi cumpleaños? de qué me sirve vivir en esta mansión de cristal, si no puedo jugar con nada porque es muy caro y se puede romper! ¿de qué te sirve mi excelencia academica si tengo este enorme vacío afectivo? y SABES QUÉ MÁS, Métete esos anillos por donde mejor te quepan - Las lágrimas de nuevo. Subió corriendo las escaleras y cerró su cuarto con llave, pero nadie vino a tocar su puerta. Fue ese día que Juró no volver a esperar nada de sus padres. Su mamá seguía en el cumpleaños de otra amiga y probablemente ni siquiera recordó el de su hija...
Soffie miró el techo. Había pasado sólo un año y medio de aquellla ocasión.
Sintió como el dolor abrazaba su pecho, se aferraba a él y lo retorcía. Estrujaba su corazón, como una esponja...
Se acostó... e intentó mantener su mente en blanco. En ser fuerte, lo conseguiría, ya no se torturaría más.
estaba cayendo en los brazos de Morfeo, 2:30 am, cuando sonó su celular.
-what the hell?- gruñó
Su boca se formó en una perfecta "O" cuando vió un sms
"Ten buena noche, no sé por qué no me hablaste hoy.. disculpa si molesté, yo.. te quiero mucho. Merry"
Su corazón se estremesió. Pero algo le decía que ella... tampoco era el camino que necesitaba y también sabía que no era un simple te quiero, aunque quizás estubiera exagerando, algo andaba horriblemente mal.