Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Painful pleasure por LadyHenry

[Reviews - 108]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo: A ver si esta vez se edita bien.
Mi cacharro anda medio dislocado así que me estoy retrasando, el próximo capítulo vendrá con lemon en Halloween...


 

Nada más descender del avión tomó un taxi sin llamar para que su hermano fuese a recogerla, sabía que era más efectivo presentarse por sorpresa, así no encontraría poses fingidas. Tardó media hora en llegar, el tráfico estaba imposible a esa hora, intentaba ser educada con el taxista, que se empeñaba en hacerle preguntas sobre el viaje, así que optó por bajarse un poco antes de su destino y arrastrar su equipaje, era preferible eso a seguir encerrada con un hombre que desconocía lo que era guardar silencio y usar un ambientador decente para el coche.

Había llovido y las calles estaban húmedas y resbaladizas, sus zapatos de tacón no ayudaban demasiado, procuraba mantener el paso firme pero el tener que esquivar a tanta gente no se lo estaba poniendo fácil y al doblar la esquina tratando de evitar un grupo de turistas, que iban en manada armados con cámaras fotográficas, resbaló, esperando darse de lleno con el frío cemento cayó en algo más blandito y templado, un sorprendido joven de cabello rubio y suaves facciones, que la ayudó a levantarse y recuperar su equipaje. Después de recobrar  sus pertenencias y cerciorarse de que no había pasado a mayores la desafortunada caída, le dio las gracias al joven. Le resultaba gratificante que aún quedaran chicos con sentido de la caballerosidad, dispuestos a comportarse con civismo y educación en momentos como ése.

-¿Seguro que se encuentra bien?-preguntaba el rubio con preocupación, aún estaba completamente sorprendido de que esa mujer que debía tener sus años se hubiera levantado como si nada con esos tacones de aguja que debían medir unos diez centímetros.

-Sí, gracias, afortunadamente no fui a parar al piso, me temo que ese lugar lo tomaste por la fuerza-agradeció Patrice, más conocida como Patty o la diablesa, entre sus alumnos y familiares.

-Descuide, pudo pasarle a cualquiera, los turistas van como locos sin pararse a mirar por dónde van. Simplemente se dedican a sacar fotos y comprar horteras souvenirs-se quejó Jess, desde su discusión con Arthur estaba irritable y se molestaba por detalles como la lluvia y los malditos turistas, como le gustaba llamarlos.

-No podría estar más de acuerdo, desde que salí del aeropuerto no me he encontrado otra cosa que turistas alborotados-se quejó Patty.

-Y la lluvia, que parece que va a volver en breve-señaló Jess mirando como el cielo plomizo se cubría de nubes cada vez más oscuras y henchidas, que amenazaban con reventar descargando agua y relámpagos.

-Lo que me faltaba, mojarme hasta llegar a la casa-se lamentó Patty.

-Sí me permite la sugerencia mejor espere a que pase el chaparrón, le aseguro que por cerca que esté acabará empapada, y con esos tacones y el equipaje mucho peor-opinó Jess.

-Cierto, menudo día para lucir modelito-rió Patty desganada.

-Bueno el mal tiempo no suele ser aliado del estilo-respondió Jess secundando su risa.

-Qué te parece si te invitó a un café para agradecerte, y así evitamos mojarnos-propuso Patty.

-Sería estupendo, así tomo un respiro antes de seguir lidiando con los turistas y la lluvia, a mí aún me queda media ciudad por recorrer.

-No se diga más ¿a dónde podemos ir?-preguntó Patty, después de tanto tiempo desconocía los locales actuales.

-No hace mucho abrieron una tetería, el servicio es muy eficiente y el ambiente es agradable-sugirió Jess.

-¿Y el té?

-Ohh eso es lo mejor de todo-respondió Jess con una sonrisa encantadora.

-Puede que al final la lluvia no esté tan mal-comentó Patty mientras seguía a Jess, que se había encargado de llevar el equipaje.

Una pequeña casualidad había juntado a Jess y a Patty, ninguno de los había imaginado que tendrían un encuentro tan relajado. Él la imaginaba como una solterona amargada, no como una mujer resuelta y elegante, ella creía que el novio de su sobrino era un mocoso aprovechado y arrivista, no un chico amable de impecables modales. Aunque en esos momentos ellos eran simplemente dos desconocidos que el azar había hecho tropezar un día lluvioso.

A poca distancia de la tetería Mike, Terry y Shawn esperaban a que pasaran a por ellos. Will iba de camino, Chad le había pedido que los recogiese como muestra de buena voluntad en sus propósitos de acercarse a Shawn.

Cada uno iba sumido en sus cavilaciones. Terry estaba nervioso por la tormenta que se avecinaba, sólo pensar en escuchar como los relámpagos hacían eco por los corredores del caserón  centelleando en los ventanales se le erizaba la piel, para colmo ese día iba a estar solo, pues sus abuelos iban a cenar con una amiga que llegaba a la cuidad y Elisa, la empleada doméstica terminaba a las cuatro. Por ese motivo había intentado invitar a alguno de sus amigos, sin demasiado éxito, sospechosamente el único disponible era Mike.

Y la diva estaba exudante, daba gracias al mal tiempo, ahora podría hablarle de Patty a Terry, que estaría demasiado nervioso como para reaccionar. Y de paso aprovecharía que estaban solos para intentar avanzar.

Otro que estaba realmente contento era Shawn, Will iba a recogerlos, dejarían a los chicos en la casa de Terry y seguramente irían al apartamento de Chad, que casualmente estaría vacío, no tenía intenciones de llegar más allá de una charla amistosa donde aclararan las cosas, en la que Will se rindiera de manera oficial a sus encantos, puede que le robase algún beso... pero nada más.

Hablaban del ensayo, cuando escucharon una pita, Arthur los estaba llamando desde su coche, Michael tomó de la mano a Terry y le abrió la puerta trasera, mientras se despedía de Shawn guiñándole el ojo y deseándole suerte con Will, el chico se limitó a sonreír mientras negaba con la cabeza. Mike estaba en todo, como siempre, empezaba a notar que de verdad se interesaba por Terry, y cada vez le disgustaba menos la idea de que esos dos llegaran a algo.

Mientras tanto Scott estaba de turismo con Pete y Ari, que se habían ofrecido a enseñarle la cuidad,  en vistas de que Shawn pronto iba a tener una agenda bastante solicitada le pareció una estupenda idea ir haciendo nuevos amigos.

Se llevaba bien con casi todo el grupo, Nell, Jess y los que ahora le acompañaban le resultaban bastante simpáticos. En cuanto a Arthur y James, eran algo estirados, pero eran buena gente en el fondo, por muy cansino que pudiera ser James con los ensayos, y no con él, que afortunadamente cumplía con sus exigencias, sino con cualquiera que la cagara, se comportaba como una especie de director en funciones, y eso resultaba agotador, entendía la importancia del trabajo en equipo, pero más allá de su sección, la de cuerda, prefería no intervenir. Cuando le comentó a Mike la situación, se limitó a reír sin disimulo, propinándole algunas palmaditas "reconfortantes" en la espalda y diciéndole que tuviera paciencia si quería ganar. Se había quedado pensando sobre el posible significado de ganar, sin llegar a alguna conclusión convincente, tendría que esperar a hablar con Shawn para captarlo, de momento se estaba divirtiendo de lo lindo viendo como Ari le sacaba una foto a un grupo de turistas, o lo intentaba, ya que Pete se dedicaba a hacerlos cambiar de posición con la excusa de que no saldría bien el monumento. A Ari no le gustaba nada perder el tiempo, así que le dio una última advertencia a Pete para que se dejara de coñas porque sino se marcharía con Scott a cenar y le dejarían solo ante el peligro.

Scott se preguntaba si esos dos se traían algo entre manos o sólo eran amigos, según le habían contado Pete y Nell salieron juntos y después quedaron como amigos, a partir de ahí Ari y él fueron inseparables como zipi y zape.

Comenzó a serenar y el restaurante quedaba bastante lejos, era algo temprano para ir a cenar así que decidieron acercarse a la tetería.

Al entrar vieron a Jess sentado con una mujer elegante, charlando animadamente. Sin pensarlo dos veces Ari fue directo a saludarlos, seguido de unos curiosos Pete y Scott.

-Hola Jess, te veo muy bien acompañado-dijo Ari a modo de saludo.

-Hola Ari, chicos-saludó Jess-. Cierto no podría tener mejor compañía.

-¿No nos presentas?-preguntó Pete con una sonrisa indescifrable.

-No estoy seguro de que deba presentaros a una dama, vuestros modales dejan mucho que desear-respondió Jess sonriendo.

-Seguro que la dama está dispuesta a hacer una excepción con nosotros-añadió Ari.

-Muy bien, pero más os vale comportaros-advirtió Jess-. Patrice estos pequeños energúmenos son amigos de mi prima Nell y míos por extensión-dijo sin dejar de sonreír-. El más bajito es Pete, el rubio es Ari y el de la funda de la viola es Scott.

-Encantada chicos-saludó Patty.

-¿Y de qué se conocen?-interrogó Pete.

-Pues resbalamos por culpa de unos turistas y aquí estamos-explicó Jess con naturalidad.

-Vaya, eso me recuerda a tu flechazo con Arthur-comentó Ari mientras Pete y Scott pedían.

-¿Arthur?-preguntó Patty.

-Mi ex novio-aclaró Jess.

-¿Ex novio?-preguntaron los tres chicos a la vez sorprendidos.

-Sí.

-¿Pero no ibas a mudarte con él?-preguntó Pete confuso.

-Tú lo has dicho, iba. Y creo que sería mejor cambiar de tema, no creo que a Patrice le interesen mis problemas sentimentales, sólo quiere pasar un rato ameno mientras la lluvia amaina-puntualizó Jess.

-Oh querido, no te preocupes, es lógico que tus amigos se preocupen por ti, aunque entiendo que te resulte violento hablar de cosas tan personales ante alguien al que acabas de conocer-dijo Patty en tono conciliador.

-Cierto, comentó Scott, hablemos de otros que siempre es más divertido.

-Dime Scott, ¿tocas en el conservatorio?-indagó Patty intuyendo que algo se le escapaba.

-Sí, obtuve una beca y acabo de incorporarme-comentó Scott despreocupado.

-Entonces seguro que conoces a mi sobrino Michelle-dijo Patty con algo de entusiasmo.

-Pues no, no recuerdo a ningún Michelle-dijo Scott mientras intentaba hacer memoria.

-Es el pianista titular, tienes que conocerlo.

-No, el pianista titular es Michael-contestó Scott extrañado.

-Bueno, Michael, Michelle... viene a ser lo mismo-repuso Patty.

-Ahora que lo dice sí, es que soy muy despistado para estas cosas y no caí en la cuenta-se excusó Scott, empezando a pensar que esa mujer era un tanto peculiar, tirando para zorra.

-¡Coño no me diga que es usted la famosa Patty!-se carcajeó Pete.

-Así es como me llaman mis amigos y familiares-respondió en tono calmado.

-¿Es usted la tía de Arthur y Michelle entonces?-preguntó Jess intentando asegurarse de que algo tan surrealista estuviera ocurriendo.

-Sí, debo deducir que tú eras la pareja de de Arthur.

-Sí-respondió Jess con sequedad.

-¿Y podría saber cuál es el motivo de vuestra ruptura?-indagó Patty satisfecha de haber tenido la suerte de ir a topar precisamente con Jess.

-Pues su sobrino es un hombre muy discreto, y por lo visto yo llamo demasiado la atención, así que prefiere mantenerme en la sombra, y como yo le tengo miedo a la oscuridad decidí que no me compensaba estar a oscuras-se explicó Jess con una curiosa comparación.

-Entiendo-respondió Patty sonriendo socarronamente-. Y crees que podrías hacerme el pequeño favor de contarme qué es lo que mi adorado sobrino te ha contado sobre mí.

-La verdad es que preferiría no hacerlo, me cae usted bien y sería algo incómodo-replicó Jess.

-Es un detalle por tu parte intentar encubrir a ese pequeño desaprensivo, pero será mejor que aclaremos las cosas antes de que venga arrastrándose a pedirte disculpas y perjurarte que de ahora en adelante te pondrá iluminación tecnicolor en la casa.

-¿Está segura de que quiere oír eso?-hizo un último intento por evitarlo.

-Si no lo estuviera no lo pediría, adelante, no te cortes, no me va a sorprender nada-aseguró Patty.

-Pues según su sobrino vendría volando en su escoba y lo acosaría para que se comprometiera con una buena chica y volviera a retomar su carrera de músico-respondió Jess suspirando.

-Vaya podría jurar que lo has dulcificado bastante, pero ya capto la esencia-observó Patty-. Dime una cosa Jess ¿doy la impresión de ser esa especie de "bruja"?

-A mí no me parece que sea del tipo metiche porque sí, puede que carezca de paciencia para tratarlos eso sí-opinó Jess meditabundo.

-Chico listo, mi sobrino tiene suerte de haber dado contigo, esas chicas con las que salía eran mucho menos intuitivas, tuve que espantarlas por su bien, Arthur tiende a acomodarse fácilmente-explicó Patty-. Decidme chicos, os veo muy callados ¿qué opinan?

-Estoy de acuerdo con Jess-respondió Ari.

-Sí, aunque cabe destacar que es usted imponente-opinó Scott.

-Cierto, seguro que sí alza la voz y frunce el seño resulta aterradora-secundó Pete.

-Bueno, no por nada me llaman la diablesa en la escuela de danza-aclaró Patty-. Ya que estamos siendo sinceros os diré que tengo poca paciencia, el paso de los años me ha enseñado que no debo dejar que se aprovechen de ella, la gente no aprende tomándoselo con calma, es estadística pura. Así que suelo ser exigente con el tiempo y los resultados, me gusta que las cosas se hagan bien y con la mayor brevedad posible, y por su puesto pongo todo de mi parte para que así sea. Así que si no me queda más remedio que comportarme con una auténtica... bruja, lo hago, sin miramientos ni un ápice de duda. Admito réplicas y sugerencias pero no suelo equivocarme.

-Así que en eso reside su fama-dijo Scott más para sí mismo que para preguntar.

-Sí, no soy tan especial, sólo es algo sencillo, fácil de solucionar con cooperación.

-¿Conoce a James?-preguntó Scott.

-Oh sí, es un niño encantador, el mejor amigo de Michelle.

-Encantador... sí-murmuró Scott. Así que Patty era una exigente de mierda, bueno era la tía de Mike, no cabía esperar otra cosa, él también lo era, sólo que tenía a James para hacer el trabajo sucio, él era la diva no podía perder el tiempo en cosas tan mundanas.

-¿Y qué es lo que tiene planeado en su visita?-interrogó Jess receloso.

-¿Arthur te contó por qué dejó la música?-preguntó Patty segura de la respuesta que iba a recibir.

-Para dedicarse a la antropología-respondió Jess.

-Así de simple...

-Sí, no es que Arthur se caracterice por ahondar en sus sentimientos, esperaba a que algún día me lo dijera-aclaró Jess.

-Descuida, ese día está cerca muy cerca-dijo Patty con un tono un tanto misterioso.

-Sólo por insana curiosidad ¿usted aprueba que Jess y Arthur estén juntos?-preguntó Ari.

-Claro, me parece que por fin a buscado alguien a su altura, que pueda entenderle y no dejar de amarle por eso-rió Patty.

-Entonces su visita...-indagó Jess.

-Primero quería cerciorarme de que estuvieran con la persona adecuada y segundo quería que comenzaran a respetar de verdad el mundo de la música.

-¿Quiere que Arthur vuelva a tocar profesionalmente?-Jess empezaba a vislumbrar el verdadero motivo y presentía que su reconciliación no iba a ser el plato fuerte.

-Digamos que tiene que resolver algunos asuntos pendientes. Y no olvidemos a Michelle.

-¿Qué quiere hacerle a la diva?-preguntó Pete divertido.

-Así que la diva... interesante mote, esperaba algo más subido de tono para Michelle, es un chico muy apasionado...

-Un poco loba sí que es-replicó Pete.

-Pero lo disimula bien-intentó enmendar el comentario Ari.

-¿Y a qué presa le tiene echado el ojo la loba... digo la diva?-preguntó Patty.

-A un compañero del conservatorio, Terry-respondió Jess.

-¿Terry Seiler?-acertó Patty.

-Vaya, está muy bien informada-observó Jess.

-Siempre procuro estarlo, es clave para conseguir lo que uno se propone.

-Lo anotaré, puede que así mejore mi relación con su sobrino.

-Tenlo por seguro, pero no te preocupes, para eso estoy aquí, ofrecerte mi ayuda es lo menos que puedo hacer-sentenció Patty-. Además también necesitaré la vuestra para darle un empujoncito a Michelle.

-¿Qué clase de empujoncito?-cuestionó Scott, esa mujer le resultaba más peligrosa a cada segundo.

-Michelle es un chico reservado y Terry necesita más espontaneidad para poder confiar en él, eso de ir de diva por la vida no le confiere familiaridad, sólo se le quieren acercar los que quieren sacar provecho de su talento o simplemente valoran su atractivo. En resumen nadie que merezca la pena. Así que Michelle ha creado esa pose para espantarlos, pero ahora que quiere bajar las barreras para que Terry se acerque se le hace difícil, y Terry desconfía, cosa muy lógica. Pero el memo de mi sobrino se dedica a jugar al ratón y al gato, y así no van a parar a ningún lado.

-¿Y cómo piensa empujarlos?-siguió indagando Scott.

-Fácil, mostrándole a Terry que Michelle también es vulnerable y que tras toda esa suficiencia se esconde un chico sensible-respondió Patty como si estuviera diciendo una obviedad.

-Y para hacer eso va a ponerlo a caldo ¿verdad?-afirmó Scott en un tono que rozaba la resignación.

-Vaya, veo que lo has captado bien, se ve que eres un chico observador, dime ¿te estás adaptando bien al conservatorio?

-No me va mal-respondió Scott con suspicacia.

-¿Y qué tal te va con James? Si no recuerdo mal lo nombramos antes.

-Es un chaval muy perfeccionista-dijo como respuesta.

-¿Y eso es bueno o malo?

-Depende del momento.

-Como todo querido, me refería a en líneas generales.

-Por ahora es bueno, no sé si con el tiempo resultará más cargante o cansino que productivo.

-Entiendo-dijo Patty sonriendo-. Me alegra que mi sobrino tenga tan buenos compañeros en su sección.

-Gracias.

-¿Y qué os parece si vamos adelantando trabajo con Michelle y Terry?

-Por mi bien-respondió Jess.

-Por nosotros también-corearon Pete y Ari.

-Parece que son mayoría-sonrió Scott.

-Estupendo. Esta noche ceno con sus abuelos, así que es una buena ocasión para que se acerquen un poco. Jess tesoro, tú llama a Michelle y dile que venga, que estás conmigo. Y Scott tú llama a Terry y dile que necesitas unas partituras, espérale por fuera de la tetería y que nos vea.

-¿Y qué piensa hacer cuando Mike esté aquí y Terry esté por fuera?-cuestionó Scott.

-Pues mientras Terry nos observa yo le daré un sermón a Michelle sobre la responsabilidad de ser un buen músico, en cuanto vea la cara de Michelle y la vuestra vendrá a socorrerle y te aseguro que mi sobrino sabrá sacarle partido a la situación.

-Ok.

Mientras esperaban a que hicieran las llamadas Patty les pidió a Pete y Ari que le contaran los detalles del conservatorio, quiénes eran los amigos de Terry y qué tal se le daba el clásico. Ambos reconocieron que Terry era muy bueno, aunque no le gustaba demasiado tocar en la sinfónica, pero lo hacía según él "para que Shawn no enloqueciera". Indagó un poco sobre Shawn, quedando contenta con los resultados, tenía que hablar con Shawn para asegurarse de algunos detalles sobre Terry, debía ser eficiente en su actuación, y nada mejor que un compañero de faenas para señalarle los puntos débiles. Así que le pidió su teléfono a Pete para hablar con Shawn.

-Buenas tardes, soy Patty alias la diablesa, ¿tienes un momento Shawn?-respondió a la pregunta de "quién coño me llama ahora para joderme el momento" que había bramado Shawn al descolgar el teléfono.

-¿La tía de Mike y Arthur?-preguntó Shawn totalmente descolocado.

-Exacto.

-Hola...

-Hola Shawn quería pedirte tu ayuda para resolver unas pequeñas dudas que tengo, serías tan amable de atenderme, sólo serán unos minutos, no abusaría de tu tiempo si no fuera relevante-se excusó Patty.

-Oh... está bien, la escuchó-Shawn no sabía muy bien qué demonios estaba pasando, hubiera jurado que al mirar la pantalla del móvil había visto que era el número de Pete.

-Gracias, te agradecería que me contaras algunos detalles sobre Terry.

-¿Qué pasa con él?

-Nada, sólo quiero saber cómo debo mostrarle el lado vulnerable de Michelle.

-¿De quién?

-De mi sobrino.

-¿Mike?

-Sí, cuál si no. Como te veo algo indeciso voy a aclararte las idead Shawn. No te estoy pidiendo que me cuentes nada escabroso, sólo quiero algunos detalles significativos, saber qué mecanismos hacen que Terry pierda el control. Entiendo que seas reticente a hablar de cosas tan delicadas y personales con una desconocida sobre la que no tienes cómo llamarlo... buenas referencias. Pero si te niegas te aseguro que dejaré a un lado toda  mi buena voluntad y me plantaré en el conservatorio para sugerir algunos cambios que te tocarán de lleno, tendrás la agenda tan ocupada que no podrás ver a esa fulanilla con la que estás ahora  hasta que te gradúes, ¿capisci?

-Creo que sí.

-Te prometo que lo hago con la mejor intención, sólo quiero que mi Michelle y Terry se acerquen, ¿no crees que harían una bonita pareja?

-Supongo que sí, pero eso a usted qué más le da.

-Mucho, mis sobrinos son muy importantes y quiero lo mejor para ellos.

-Puede que lo que usted cree mejor ellos no lo consideren así.

-Es una posibilidad, dime Shawn ¿crees que me equivoco con lo de Terry?

-No del todo.

-¿Y no crees que si Terry conociera una faceta más confiable de Michelle todo sería más fácil?

-Sí, eso es cierto.

-Pues dejémonos de cháchara y pasemos a lo interesante.

-Sea injusta.

-¿Injusta?

-Sí, acuse a Mike de algo que no sea del todo cierto, Terry detesta las críticas injustificadas, saldrá a defenderlo, lo verá como una víctima y dejara a un lado eso de "la diva".

-Gracias, eres realmente eficiente cuando te lo propones.

-¿Entonces nada de ensayos extras?

-Descuida, me mantendré al margen, eres un buen chico, simplemente tienes mal gusto para elegir pareja, no entiendo cómo has podido dejar a Scott para ir tras ese irresponsable mindundi que ni siquiera es capaz de afrontar una relación seria.

-Oiga ¿no le parece que se está excediendo? Además ¿cómo sabe que estoy por Will?

-Oh Jess me lo ha contado mientras tomábamos el té, conozco a ese chico, Arthur le dio clases, una vez hablé con él mientras esperábamos a que mi sobrino acabara sus tutorías.

-¿Y no le cayó bien?

-William es un chico con encanto, pero es bastante cobarde y puede llegar a ser exasperante, en cambio tú eres muy maduro y audaz, te mereces a alguien capaz de seguirte el ritmo Shawn, no desperdicies tu juventud con idotas.

-Tengo que colgar... suerte con lo de Mike, salude a Jess de mi parte, no olvide darle las gracias-se despidió Shawn.

-Ciao Shawn, saluda al mindundi de mi parte-colgó Patty, con una sonrisa de satisfacción asomando a sus labios.

Jess, Ari, Pete y Scott miraban a Patty expectantes, esperando una respuesta.

-Ha ido muy bien, en estos momentos William debe estar muy enfadado, mentando a toda mi parentela, y dando argumentos de por qué él es la persona perfecta para Shawn.

-Gracias-suspiró Scott-esos dos iban a volverme loco, Will no deja de mirarme mal y murmurar y Shawn me utiliza para ponerlo celoso. Si no se calan de una vez tendré que mudarme y la comida de Carol me encanta-se quejó.

-Asunto arreglado, ya nos contarás que tal-intervino Jess.

-¿Listo para el show?-preguntó Patty.

-Sí, ahora estoy mucho más motivado, daré lo mejor-afirmó Scott. Puede que después de todo aprender de alguien tan experimentado como Patty no estuviera mal, cualquier cosa antes de seguir en medio de su mejor amigo y su futuro novio.

No podía haber acertado más. En esos instantes Will se paseaba de un lado a otro de la habitación, increpando la falta de sensibilidad de Patty, y justificándose ante un maravillado Shawn.

-Lo digo en serio Shawn, reconozco que soy muy inseguro respecto a las relaciones de pareja, pero no lo hago adrede, me cuesta confiar en que las cosas funcionen, mira a tu alrededor la gente que se casa acaba detestándose la mayoría de las veces, y si fracasan se echan las culpas unos a otros y terminan peleados, odiándose, tirando de sus amigos para que se pongan de su parte y les den la razón, excluyendo al otro.

-¿Crees que si nosotros tuviéramos una relación y saliera mal las cosas acabarían así? ¿Crees que intentaría poner a los demás en tu contra y me valdría de que Chad es mi hermano?

-No he dicho eso, sólo generalizaba.

-Ven aquí Will-dijo Shawn señalando el sofá para que se sentase junto a él.

-Espera un momento, quiero terminar de decirlo todo. Yo no soy cobarde, sólo precavido, no quiero que ninguno sufra, y tú por muy maduro que seas sigues siendo un crío, ya sabes lo que dicen "más sabe el diablo por viejo que por diablo". Yo estoy a punto de terminar la universidad y tú estás en secundaria, eso supone muchos problemas, poco tiempo para vernos, distintos intereses... todo sería complicado, llegará un momento en que nos hartemos, acabaremos explotando y puede que nos digamos cosas desagradables y hagamos acusaciones injustas. Ninguno tendrá la culpa, pero no estaremos contentos y lo pagaremos distanciándonos...

-Es parte del proceso, podemos superarlo-opinó Shawn.

-Sí, podremos pero el precio no será bajo, puede que hagamos algo que nos afecte demasiado y reparar la confianza será un esfuerzo dantesco.

-¿Entonces no merece la pena intentarlo?

Will se sentó frente a Shawn y lo tomó de las manos, se miraban fijamente intentando calmarse, era un momento decisivo y difícil.

-Sí, para mí sí, sólo quiero asegurarme de que comprendes bien todos los riesgos, que sabes lo que significa y que estás dispuesto a asumirlo-respondió Will con expresión suplicante.

-Lo sé, y me asusta, aunque trate de disimularlo con todas mis fuerzas. Pero también sé que ésta es mi oportunidad y no pienso perderla, es aquí y ahora, lo único que me aterra más que fracasar contigo es mirar un día hacia atrás y arrepentirme por no luchar y dejar escapar una ocasión irrepetible. El riesgo que asumo va en función de la recompensa, y ni loco voy a renunciar, no sin antes haberlo dado todo.

-Genial, estamos completamente tarados-bufó Will.

-Eso no es ninguna novedad.

-Lo sé, ¿sabes lo que sí es una novedad?

-Dime...

-Que por fin vaya a ponerte las manos encima sin ningún tipo de remordimientos.

-Eso suena genial, pero Chad está al llegar y no creo que le haga ilusión enterarse de lo nuestro pillándonos in fraganti de nuevo.

-Entones tendremos que irnos a mi apartamento.

-Te recuerdo que quedamos con Chad para cenar.

-¿Se puede saber qué manía te ha entrado de pronto con Chad? Si me mandó a recogerte sería para que hablásemos...

-Sí, y hemos hablado, no creo que supiera que íbamos a ponernos de acuerdo tan rápido.

-Vale, pero después de cenar te vienes conmigo.

-Ésa es la actitud Will-dijo Shawn atrayéndolo hacia así para comenzar a besarlo.

Mientras disfrutaban de un dulce y lento primer beso como pareja el timbre les interrumpió. Will maldijo a su amigo por ser tan jodidamente inoportuno, y éste no pudo más que maravillarse cuando Shawn le explicó, antes de que consiguiera partirle la guitarra en la cabeza a Will, que estaban saliendo juntos y que la cosa iba en serio.

Chad parpadeó varias veces intentando asimilar que por fin las cosas hubieran salido bien, no se esperaba que Will se rindiera a la evidencia con una sola charla, se olía que le estaban ocultando algo. Pero no era momento para pensar en confabulaciones a sus espaldas, había que celebrarlo. La guerra del "sí pero no" acababa de terminar, darse un respiro antes de que otras comenzaran era lo mejor que podían hacer.

Terry se encontraba en el exterior de la tetería, Scott le estaba agradeciendo que se hubiera tomado las molestias de volver al centro, y le estaba proponiendo invitarle a un té en agradecimiento. Pero Terry no le escuchaba, sus ojos estaban clavados en Mike, grabando en su memoria una expresión que hasta ese instante nunca vislumbró en el semblante de la diva. Podría jurar que estaba abatido... sus ojos carecían de ese brillo desafiante tan característico, en su lugar había conmoción, la calma socarrona que predominaba en su expresión había sido sustituida por la inquietud. Parecía un niño desorientado que no alcanza a comprender qué cosa ha hecho mal para que lo traten así. Y es que esa bruja lo estaba sermoneando sin compasión. Decidió Entrar con Scott para escuchar qué estaba pasando. Necesitaba saber qué sucedía para entender esa repentina aflicción en Mike.

Scott se limitó a seguirlo al interior, asegurándose de que el plan seguía su curso. Se sentaron en una mesa paralela a la de Patty y Mike, ocultos por una celosía semi cubierta por una enredadera, que les permitía ver parcialmente los rostros de ambos.

Terry no salía de su asombro al escuchar las recriminaciones de Patty, era curioso que muchas de las cosas que ella le estaba echando en cara a Mike también se las hubiera dicho él, pero ella no tenía derecho, no sabía cuáles eran las circunstancias, y además Mike no era el ogro que estaba definiendo en tono despectivo. Podía ser altanero y poco paciente, pero no trataba mal a sus compañeros, nunca tuvo un insulto o una palabra, y a veces daban ganas de llamarlos de todo por las torpezas que cometían. Mike no era ningún inconsciente, al contrario, sabía sus limitaciones y defectos y cuando no estaba seguro de controlarse se batía en retirada antes de provocar alguna situación violenta. Y desde luego no era un vago que no supiera aprovechar su talento, él se esforzaba y trabajaba tan duro o más que el resto, pero lo hacía a su manera, sin perjudicar a nadie.

Aquello era simple y llanamente intolerable. No podía seguir cruzado de brazos mientras esa mujer hundía a Mike. Miró a Scott, que se limitó a decirle que las discusiones de familia no eran de su incumbencia, entendía su postura, ya que él apenas conocía a Mike, pero era suficiente para saber que esa mujer estaba exagerando injustamente. Le daba igual que fuera su tía y lo hiciera por su bien, iba a intervenir en su defensa.

-Buenas noches-saludó Terry irrumpiendo en medio de la conversación.

-¿Terry?-se sorprendió Mike.

-Jovencito, si no le importa estamos en medio de una importante conversación-sentenció Patty.

-Sí me importa, y más que una conversación parece la acusación de un tribunal de la inquisición.

-¿Qué?-corearon al unísono Patty y Mike.

-En una conversación hablan ambas partes, y aquí la única que habla es usted y únicamente para criticar a Michael.

-Eso es algo privado que no le concierne-replicó Patty.

-Y una mierda. No tiene derecho a decir esas cosas, algunas son sólo calumnias sin fundamento.

-¿Cómo cuáles?-le picó Patty.

-Michael no trata mal a sus compañeros y se esfuerza por mejorar, usted no lo ha visto ayudándolos en las clases o  ensayando durante horas en vacaciones, mientras el resto ni siquiera aparece.

-¿Eres uno de sus incondicionales?

-No, sólo digo la verdad, no lo estoy encubriendo.

-Muy bien, te daré el beneficio de la duda Michelle, pero esto no ha acabado aquí.

-Jovencito, disculparé su falta de modales porque cree estar haciendo algo bueno, y apoyar a un compañero es digno de elogio, pero no toleraré de nuevo una salida de tono como esa. Y ahora debo irme, he quedado para cenar-se despidió Patty dejando a solas a Mike y Terry.

Ambos guardaron silencio durante unos minutos en los que simplemente se miraban. Mike intentando digerir algo que ni en sus mejores sueños hubiera imaginado, y Terry intentando calibrar el estado de ánimo de Mike, le resultaba chocante verlo así, estaba acostumbrado a su pose de diva. Tenía que reconocer que ese lado tan humano le gustaba, verlo como un simple mortal, que tenía sus bajones y debilidades lo hacía sentir más cercano, ya no se trataba del tira y afloja de siempre, ahora estaban conectando. Y eso le gustaba.

-¿Te apetece cenar conmigo?-rompió el cómodo silencio Terry.

-Estaría encantado... y gracias.

-No hay de qué, ya sabes que no soy uno de tus fans pero estaba pasándose demasiado. ¿Ésa era la bruja de tu tía?

-Sí.

-Os compadezco... ¿Qué te apetece cenar?

-Cualquier cosa estará bien.

-Lo digo porque hay que pedir la comida a domicilio, no tengo ni idea de cocinar.

-Yo sí, puedo preparar algo sencillo.

-Y dejar que esas manos se ensucien... ni hablar no quiero que me denuncie tu tía por agresión.

-Muy gracioso, no soy tan torpe.

-Lo sé, será mejor que nos demos prisa antes de que comience la tormenta.

-Cierto, ¿vamos a casa de tus abuelos?

-Sí, no estarán, fueron a cenar con una amiga.

-¿Estaremos solos?

-Sí, sólo espero que no se corte la luz.   

-Tranquilo seguro que no es para tanto-aseguró Mike intentando sonar convincente.

Tomaron un taxi, llegaron poco antes de que rompiera a llover con fuerza, de momento no había rayos deslumbrantes ni truenos que retumbaran, sólo un buen chaparrón. Mike cocinaba algo de pasta mientras Terry le contaba las piezas que habían seleccionado en Jazz para el festival de invierno. El ambiente era relajado, por primera vez desde que se conocían charlaban sin más, sin piques ni hostilidad, sólo dos chicos de la misma edad e inquietudes parecidas que se iban descubriendo, entendiendo que lo que sentían era algo más que una aparente intolerancia o mera atracción...

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).