Este es el cuarto cap de Bacanal
Recuerden que esta serie ni sus personajes me pertenecen y esto no lo hago con fines lucrativos tal vez sólo son ociosos los fines, pero nada más.
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Había concluido la sesión que tuvo con Omi, pero eso no significaba que allí hubiese terminado todo, por el contrario, ya que Ken Hidaka no había sido atendido por esa parte de Youji. Eso debía solucionarse al instante o así lo consideró el exfutbolista deshaciéndose de su vestimenta quedando al natural a los ojos de sus compañeros. Y con la excitación a tope decidió que ya era tiempo de tomar entre sus garritas al ojiverde, al cual urgió a abrir las piernas por segunda vez en la tarde, acto que no pudo negarse a hacer el Balines ya que estaba aún recuperándose de su éxtasis.
Sin más ceremonias tomó a Youji de las caderas y se acomodó para tomarlo, cuando sin previo aviso sintió un dedo lleno de crema intentando abrirse paso por su oculta cavidad. Ni que decir que eso le sorprendió y al buscar al dueño de aquél dedo se encontró con que Tsukiyono estaba detrás de él, con el miembro otra vez dispuesto y con una mirada entre lujuriosa y suplicante.
-¿Pero… qué?- preguntó Ken a la vez que sentía como el dedo de Tsukiyono por fin había entrado.
-Lo necesito Ken… si tu lo tomas yo te tomaré a ti- propuso de forma juguetona y sexi.
-¡¿Y quién te dijo que te dejaré hacer tal cosa Tsukiyono?!
-Vamos, te gustará- dijo el menor metiendo un segundo dedo.
¡Demonios!, pensó Ken ya que la excitación estaba creciendo con aquellas atenciones digitales, además de que esa misma excitación no le permitía pensar y actuar con lucidez.
-De acuerdo… pero si me lastimas será lo último que hagas en tu gatuna existencia- dijo volteando la cara hacía el atado.
Omi sonrió más que complacido ya que seria el segundo virgen de la tarde.
-Entra en él primero y después lo haré yo- sugirió Bombay al oído de Ken, dándole de paso un mordisquito en el lugar.
Por su parte Ken se limitó a acatar la sugerencia, sin decir nada. ¡¿Quién hubiera imaginado lo fogoso que era ese mocoso?! Tal vez se trataba de la edad, pero su capacidad de recuperación era interesante.
Youji sintió nuevamente a un visitante en aquella parte suya. Por lo que entreabrió los ojos para encontrarse con que ahora era Ken y no Omi quién estaba entre sus piernas, con un miembro quizá más grande que el que acaba de salir.
-Hidakaaaa- gimió el ojiverde una vez que tuvo a Ken por completo dentro de si.
El aludido sólo sonrió malicioso, eso era lo que había estado esperando… escuchar su nombre a modo de gemido en aquella deliciosa voz y saliendo de esos suculentos labios. Se quedó quieto esperando a que Omi se acomodase.
Bombay estaba encantado con lo que hacía Ken y una vez que lo sintió entrar en Youji pensó que ya estaba más que listo para recibirlo a él, sacó sus dedos y los sustituyó por su nuevamente despierto miembro. Entró en el Siberiano con sólo la punta.
-¡Aaaah… por dios… Omi… aaaah! – gimió de dolor el exfutbolista.
-¿Qué pasa Ken si apenas es la punta?
-Déjate de idioteces… métela de una buena vez- le riño Hidaka muy sonrojado.
-Como tú quieras- le dijo mientras hacía como le habían dicho.
Por su parte Ken reprimió un grito de dolor apretando los dientes hasta que le dolió la mandíbula.
Empezaron a mecerse al mismo tiempo lo que les proporcionó mayor placer a todos, el atado incluido.
¡Ah qué sensación! Dicen que es mejor dar que recibir, pero el Siberiano ya no estaba tan seguro, pues Omi se movía lentamente, deslizándose hasta el fondo, tocando su próstata, ocasionándole unos maravillosos cosquilleos que le recorría por todo el cuerpo; y se alejaba hasta casi sacársela. El placer sólo era comparable al que sentía al estar dentro del Balines, pues su entrada aunque estaba dilataba apretaba su virilidad de forma única.
-Más… rápido…onegai- pidió el ojiverde.
-Gato sucio…te… gusta tenerla dentro… ¿eh?- dijo mordaz el exfutbolista entre gemidos.
-Al… igual que…ah…tu- jadeó Youji ya sin vergüenza alguna. Resultaba tremendamente excitante ver a aquellos dos haciendo todo eso, pues en su vida se imaginó que terminaría así con esos dos chicos, o al menos no en esa posición.
-Eres…tan delicioso…Ken- Dijo el menor. Sin duda la estrechez de Ken era sumamente deliciosa.
Siguieron con sus juegos de palabras, cada vez con mayor dificultad ya que el placer era enorme y eso de gemir impide el hablar. Sus cuerpos sudorosos se movieron por unos minutos más y ya al borde del éxtasis el exfutbolista tomó con mayor fuerza la cadera de Youji con una mano, mientras su gemela se posesionó del miembro del atado, masturbándolo.
El ritmo del mete y saca se volvió furioso a la vez que sintieron que se correrían, cosa que hicieron casi al unísono, entre gritos e improperios.
Uf, había sido una excelente cogida la que se dieron o así lo pensaron los participantes de la misma.
-Par de pervertidos… ¿pueden soltarme ya?- preguntó Kudou sonriendo de forma seductora.
Iban a contestarle sus amantes, cuando una voz que no pertenecía a ninguno de los tres (el atado incluido) se dejó oír.
-No, aún no…¿Qué tenemos aquí?- preguntó nada más y nada menos que AYA FUJISHIMA.
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Hola soy Medora, espero que les guste este cap y si no les gusta díganmelo con toda confianza.
Gracias por sus comentarios... por cierto què creen que hará el pelirrojo?... eso es otro cap.
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